No hay tí­tulo para esta pesadilla

Recién recibí un mail con imágenes atroces, realmente degradantes, tan impresionantes que soñé con ellas, fue realmente feo. Al remitente de dicho mensaje amonesté y le pedí que ni intentara siquiera volverme a enviar un mail de esa naturaleza, hasta ahora no tengo esquemas para entender qué clase de mente puede reenviar una cosa tan sádica como esa.

Pero paso a contarles, para que notemos hasta qué punto puede degradarse el ser humano, una reseña de lo que en fotos es inaguantable.

En Taiwán, debido a la superpoblación de la isla y los conflictos políticos sostenidos con China, el estado a creado una ley que prohíbe tener una cantidad de hijos, realmente no sé cuantos hijos pueden tener los taiwaneses, pero según esta ley deben ser pocos, especulo que podrían ser dos como máximo, si alguien esta mejor informado que yo al respecto de este asunto le ruego me corrija; lo cierto es que si alguna pareja tiene un hijo sobrepasando el límite permitido, debe abortarlo, pero lo peor no es eso, sino que ese aborto, ya conformado completamente, no se pierde, ya que empresas, que considero personalmente como inescrupulosas, comercializan, para consumo alimenticio a estas personitas, obligadas a morir por intereses de un estado brutal y la complacencia idiota de sus padres, pero hasta aquí no llega la bestialidad de los taiwaneses, ya que ¡HAY GENTE QUE COMPRA PARA COMER A ESTOS BEBÉS PREMATUROS!, ¡Santo cielo!, es la única expresión que puedo usar para demostrar cuán indigno es ese acto, cuán deshumano.

Ahora, es evidente que algunos taiwaneses se han vuelto caníbales, incivilizados, violentos, asesinos, bestias, han perdido la razón, aunque hayan avanzado tecnológicamente y tengan una industria electrónica superior a la nuestra, y pregunto: ¿dónde están los notables que critican a Israel?, los sabios que juzgan de genocida a un pueblo que se defiende justamente del terrorismo y la mano oscura del imperio árabe-musulmán, ¿dónde está la ONU?, ¿qué opinan las organizaciones de derechos humanos?, ¿en qué mundo vivimos?, cuán hipócritas son aquellos que, aprovechándose de la ignorancia de muchos, opinan sin ton ni son sobre temas que favorecen un interés vacuo, en vez de combatir el cáncer que corroe la humanidad en donde está. Realmente hace falta un cambio en las organizaciones mundiales de paz y de derechos humanos, pero no que se cambien los roles políticos, que los intereses se volteen, que los verdes sean depuestos por los colorados; no, sino que la justicia y la búsqueda auténtica de la paz reine en las cabezas racionales, justas y equilibradas, de una organización colegiada que haga presión en estos hechos, tan inhumanos, que ocurren no sólo en Asia, sino en otros continentes, en mayor ó menor medida, con ó sin apoyo de los estados, bajo la mirada ausente y permisiva de muchos ó con el beneplácito de otros. Creo que es suficiente, cosas peores no se pueden ver, esto nos debería llamar a la conciencia, a la auto-evaluación como sociedad, no podemos seguir permitiendo que cosas así ocurran en Nuestro Mundo.  

5 comentarios sobre “No hay tí­tulo para esta pesadilla”

  1. El rumor surgió por primera vez en Malasia en marzo de 2001, cuando la revista sensacionalista «Warta Perdana» publicó una serie de fotografías en las que aparecía un hombre que «comía a un bebé muerto». El título de esas fotografías era «Taiwan»™s Hottest Food» e indicaba que en un restaurante taiwanés se vendían fetos humanos a los clientes.

    El gobierno de la República de China en Taiwán inmediatamente protestó ante tan denigrante publicación. La revista reconoció su error, emitió una disculpa formal e indicó que ella recibió un correo electrónico anónimo con esa información sin tener la delicadeza y profesionalismo de averiguar la veracidad de este hecho. Además, se confirmó que el hombre que aparece en las fotografías es un peculiar artista originario de China Continental llamado Zhu Yu, quien, con el propósito de llamar la atención, se dedica a presentar sus obras de una forma violenta y espantosa.

    Es lamentable que este artista, en un afán de protagonismo, haya decidido simular que comía un feto humano como una forma de protesta contra el gobierno de China Continental por la falta de apoyo a sus artistas, pero lo es más penoso aún que esas fotografías circulen por INTERNET denigrando al pueblo de Taiwán.

  2. pues ya antes sabia que ese mail es spam y las fotos un hoax (engaño) para escandalizar a todos las personas… yo no pude creer -la primera vez que lo vi- que ese señor estuviese de lo mas normal comiendose el muñequito… pero, eso es de espanto por un comentario que le escuche a mi hermano (mientras lo veia):

    «Lo peor, pasa en lo escondido…»

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