12 comentarios sobre “El consejo diario 265”

  1. este consejo me recuerda a los que no hacen si no chillar con tal de encontrar una excusa para estudiar la tora. y los calmados pasan su tiempo puliendo su heredad.

  2. es acertado el comentario del profesor ortiz.  por ejemplo more dos  personas con sintomas de chillidos pueden ocacionar algum desman , mientras que dos calmadas son sinonimo de sabiduria.

  3. En mi país antaño se utilizaban las carretas de madera para cargar productos agricolas, y éstas al tener las ruedas de madera producían un sonido muy particular, en cierta forma musical, sin embargo cuando la carreta estaba vacía lo que producía era un gran escandalo, por eso nuestros sabios campesinos decían que cuando una carreta (persona) estaba vacía era más escandalosa…

  4. La calma es buena compañera, habitualmente. Aunque en ocasiones, hay que  acelerar el ritmo, para rendir un trabajo a tiempo. Pero, ello se puede hacer con un leguaje moderado y palabras de tono bajo o normal; gritar suele imponer cierta agresividad y/o hace más difícil la conversación y el entendimiento, pues unos gritos quieren tapar los otros, son como armas arrojadizas, que surgen de las bocas.

    Paz y bendiciones, a todos los calmados y pacíficos, constructores de shalom.

  5. Un consejo constante… decir por favor, gracias y largar una sorisa, a veces hacen tanta falta… Pero no hay oido que aguante a los chillones y gritones…

    Gran anecdota la de Ronald.
    Gracias More..

Deja una respuesta