Vive de tal modo que tus máscaras representen la cara invisible
y que no la hagan caer en el olvido,
o travestirla.
Porque,
cuanto más tus caretas encarnen al rostro,
mayor la plenitud de tu existencia.
Cuanto menos armonía entre ellos,
padecerás el conflicto.
¿Conoces tu verdadera faz?
¿Sabes cómo hacerlo?
Que buenas preguntas las 2 ultimas¡¡
En total sinceridad uno no conocer su verdadero rostro. Creo que solo viviendo y respondiendo en la vida, uno llega a identificarse.