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Hacer el bien

En estos últimos días, voluntariamente realice un pequeño viaje hacia el interior de mi país (Corrientes – Argentina) para conocer a un pariente lejano. Cuán grato fue mi viaje cuando me encontré con una persona humilde, sabia y entendida, alguien que queria pero no esperaba encontrar.

Este pariente lejano, que no conoce el Noajismo, me recordó una muy linda enseñanza que yacía en mí encerrada, por ello es bueno el repaso de estudio y el constante y continuo apego a nuestras leyes divinas que nos permiten una mente brillante.

Entre charlas y mate*, como es común entre los argentinos y alrededores, si mal no recuerdo sus palabras fuerón las siguientes:

«Muchas personas priorizan el fachaje (aquello que nos hace facha) a las verdaderas prioridades de la vida. Por ej. Hay personas que priorizan el tener una moto a arreglar el techo que contiene agujeros por los cuales el agua de las lluvias mojan el interior del hogar. Prefieren lucirse con un vehiculo, eligen el ostentamiento de sus egos a la comodidad del hogar para la familia.

Mi pensamiento es que Dios nos instalo en el mundo no para actuar egoistamente de esa manera, sino para atender a las verdaderas prioridades de la vida, de la familia, de uno mismo. Vivir feliz con lo que se tiene o puede, hacer el bien a los demás sin por ello negarnos una comodidad según nuestras posibilidades.»

En otras palabras lo que el pariente lejano – cercano me decia es que las personas ponen sus metas en lo material, fijan objetivos vanos que terminan empeorando situaciones economicas y llevando a la miseria por no atender las verdaderas prioridades de la vida.

Y si prestamos atención a las palabras del pariente lejano – cercano, encontraremos una respuesta a la pregunta que suelen preguntarse muchos.

¿Cuales el fin del hombre, el objetivo, su misión?

Aqui, estoy seguro, no tengo la respuesta completa pero si una parte de ella:

– Hacer el bien a los demás sin por ello negarnos una comodidad según nuestras posibilidades. Es decir, mientras en la vida cumplimos con la Voluntad del Padre, con Sus mandamientos, con una parte de nuestra misión, también debemos esforzarnos en otra parte de la misma: Hacer el bien a los demás, sin por ello complicarnos nuestras vidas o realizar actividades o acciones que nos afecten mal a nosotros, es decir, a uno mismo.

Solo unas pocas horas del día pase con mi pariente, hasta ahora no lo conosco bien y no he tenido la oportunidad de pasar más tiempo con él, parece que no es idolatra y que transita sin saberlo el verdadero camino de Dios.

Solo unas pocas horas pero una gran enseñanza me brindó. Cuando estamos comodos en la vida o quizás no tanto, mientras cumplimos los preceptos de Dios, mientras nos perfeccionamos en mejorar, mientras trabajamos, mientras vivimos, hay una acción que acarrea mucha bendición: Hacer el bien a los demás.

Quizás ello no sea tu meta, quizás no este dentro del marco de tus prioridades, quizás no tenga tanta importancia en estos momentos de tu vida, quizás este pequeño y humilde esfuerzo que de mi parte te brindo quede solo en palabras, quizás no tengas ganas.

Pero una parte de nuestra misión es hacer el bien, más allá de lo que tu hagas o quieras. Hacer el bien, espero se encuentre dentro de tus prioridades de hoy en adelante y apartir de este día:

¿Tienes ya marcadas o fijadas en tu mente tus verdaderas prioridades?

Notas:

*Infusión preparada con yerba mate.

«Si aún no eres parte de la comunidad de fieles a Dios, eres la pieza del rompecabezas que falta.»

Divorcio o Separación y cuestiones familiares

Existen temas que por su naturaleza no es tan sencillo abordarlos, el divorcio es uno de ellos, y parece que en estos últimos tiempos se viene dando con más frecuencia y fuerza que antes, o al menos eso parece. El tema envuelve diversos factores que lo hacen algo complejo tanto de exponer como de tratar, este texto es para dar una sencilla opinión acerca de él, pues es un asunto que a todos los que alguna vez han tenido o tienen o tendrán pareja es de suma importancia conocer.

Dentro de la sociedad existe una forma de convivencia que se le denomina matrimonio sea este consumado ante las autoridades civiles o no, pero entendamos por matrimonio aquel acuerdo entre dos personas (de diferente sexo) para formar un hogar.

Esta forma de convivencia permite que tanto hombres como mujeres atiendan con integridad la instrucción del Creador del mundo con respecto a:

“El hombre dejara a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne”

(Bereshit/Génesis 2:24)

Y también

Entonces Elokim bendijo a Noaj [Noé] y a sus hijos, y les dijo: Sed fecundos, multiplicaos y llenad la tierra.

(Bereshit/Génesis 9:1)

De hecho creo que ninguna pareja se forma con la intención de separarse en un futuro, solo que en el transcurso de la travesía matrimonial suelen suceder cosas “inesperadas” que alteran el plan inicial de permanecer juntos toda la vida, las cosas dentro del matrimonio no suelen ser como se pensaban o no marchan como alguno de los cónyuges desea y entonces viene una ruptura.

Los factores que intervienen para propiciar una separación son diversos, pueden ser desde dificultades económicas hasta dificultades para relacionarse como pareja o incluso algunos más graves como engaños o infidelidades, pero los obstaculos que se le presentan a un matrimonio son muy diversos.

Suele suceder que al desgastarse continuamente una relación esta termina por fracturarse, el desgaste suele ocurrir cuando existe algún desequilibrio en alguno de los planos de la existencia, esto puede ser tanto en uno de sus miembros como en ambos, cuando existen desequilibrios en el plano físico, emocional, social, intelectual y espiritual en alguno de los miembros de la pareja, este desequilibrio suele ser un obstáculo para la pareja pueda convivir, acostumbrarse y formar la tan anhelada compañía vital.

Ahora debemos de tener en cuenta que tanto hombres como mujeres somos muy distintos, aunque claro esas diferencias son las permiten y posibilitan la convivencia “familiar”, pero también esas diferencias son las que en un determinado momento marcan el camino de la separación cuando ambos integrantes de la pareja desconocen sus funciones.

El hombre por su parte, necesita un poco más de formación en cuestión de su preparación para la vida (y por favor no se ofendan los amigos varones que nos leen pues reconocer las limitaciones sirve para ser mejores), la mujer fue dotada con más “inteligencia emocional” que el hombre por lo que su desempeño en ocasiones es mejor que el del hombre que suele ser muy racional(esto no quiere decir que la mujer no necesite conocer los Mandamientos y sus derivados), pero también esa marcada “inteligencia emocional” de la mujer suele ser una condicionante para que la mujer pueda llegar a equivocarse en un determinado momento, por lo que solo en compañía ambos hombre y mujer son la “unidad perfecta” que da continuidad a la raza humana.

Por ejemplo en el caso de un hogar:

Creo sin temor a equivocarme que la mujer suele desempeñar mucho mejor el papel de “encargada del hogar y crianza de los hijos” cosa que el hombre difícilmente podría llevar a cabo, recientemente escuche una frase que decía “la mujer no hace hogares FORMA SOCIEDADES” claro que con esto no estoy diciendo que solo la mujer debe de encargarse del hogar pues la asistencia del hombre es fundamental, pero la mujer fue dotada con superioridad en algunas cosas sobre el hombre, y estas suelen ser mejor aplicadas y con mayor plenitud dentro del matrimonio.

El hombre en su papel cuando este es conocedor y posee un espíritu limpio llega a ser un gran guía en el hogar además de ser proveedor y protector del núcleo familiar, pues dentro de su “frialdad” emocional sobresale una actitud racional que encamina todas las acciones del conjunto familiar hacia un destino más favorable para todos.

Pero nosotros los seres humanos venimos de diferentes núcleos familiares y en una sociedad plagada de idolatría y egocentrismo, difícilmente podemos encaminar un matrimonio hacia buen puerto, aunque claro existen matrimonios estables y con armonía (mis respetos para ellos y por favor sigan así) pero muchos matrimonios no gozan de esa estabilidad y al paso del tiempo terminan disolviéndose, como dijimos anteriormente esta situación obedece a diversos factores dependiendo de cada situación en particular, pero sin lugar a duda que la escasa formación “humana” es una constante en la mayoría de las separaciones.

El divorcio o la separación es una situación que perjudica a todos los integrantes de una familia, por lo que debiera tratar de evitarse en la mayor medida de lo posible, aunque habrá casos que es mejor dicha separación que seguir con una relación que más que beneficiar perjudica a sus miembros, sin embargo creo que entre más la sociedad avance en el cumplimiento de los 7 Mandamientos Universales menor será el porcentaje de dichos casos.

Y es precisamente ese el punto importante de este texto, pues no podríamos dar “una receta mágica” para evitar los divorcios y las separaciones, lo que si podríamos señalar es un consejo para facilitar y mejorar la convivencia entre cónyuges.

Los 7 Mandamientos Universales tienen implícitos grandes y fuertes valores que refuerzan y complementan los lazos y vínculos matrimoniales, dentro de los 7 Mandamientos Universales existen valores que tanto hombres como mujeres pueden y deben practicar para que mediante ello, la posibilidad de éxito en su matrimonio aumente día con día.

 Este texto está dedicado a todos aquellos (familiares y amigos) que hoy día sufren el difícil acontecimiento del divorcio o separación, quiera el Eterno otorgarles tranquilidad y paz ahí en donde quiera que se encuentren y sobre todo quiera el Bendito Creador mostrarles el sendero por el cual caminan los hogares de los Justos de las Naciones.

¡Hasta pronto!

Boletos para el simposium de Yehuda Ribco en México FEBRERO 2011

Buen día a todos.

El noajismo en México esta siendo un movimiento con difusión importante.Es por esto que hemos decidido organizar un Simposium en donde nuestro Moré Yehuda Ribco nos compartirá conferencias y platicas relacionadas a nuestra heredad espiritual. Seguramente será un gran evento y seguramente te preguntaras cuando, dónde y como conseguir boletos para asistir.

Los boletos ya están a la venta por un equipo de amigos noajidas comprometidos con acciones justas y de construcción.
Puedes contactar a nuestros representantes los cuales te atenderán y responderán tus dudas acerca del Simposium.
De igual forma podrás solicitarles que te proporcionen tus boletos para asistir a este evento.

Las personas que amablemente nos están ayudando a distribuir los boletos y con quienes te puedes contactar son:

Rocio Barreda Parra. Zona del Valle y alrededores, D.F. Teléfono 04455-35-70-47-10
Yoquebet Orozco. Zona Toluca y alrededores, e-mail: miss_simpatia_04@hotmail.com
Etni Birzayit Orozco Barbina. Zona Santiago Tianguistenco y alrededores e-mail: BIRZA_18@hotmail.com
Zuri Orozco Barbina. Zona Santiago Tianguistenco y alrededores e-mail:BIRZA_18@hotmail.com
Arturo Torres. Zona Toluca y alrededores, e-mail: hades_2207@hotmail.com

Coordinadores del Simposium:
Ing Ramon Ruiz Quezada. D.F. y alrededores: e-mail: noajidasmexico@hotmail.com tel: 04455-9166-7165
David Parra. Zona Naucalpan y alrededores: e-mail: davidparrag@hotmail.com

El Simposium es el próximo mes de FEBRERO de 2011.

¿Eres noajida? ESPERAMOS CONTAR CON TU PRESENCIA

Que sepamos construir Shalom.

Les recordamos que si estas en algún otro rincón del mundo y deseas apoyar con tu donativo. Lo dirijas directamente a Fulvida Uruguay haciendo click aqui: http://serjudio.com/apoyo

El teclado qwerty y las religiones

La mayoría de nuestros teclados de computadora, antaño de máquina de escribir, tienen una caprichosa distribución, en lo que se conoce como teclado tipo qwerty.
¿Nunca les ha intrigado tal disposición antojadiza de las letras?
Les confieso que a mí sí.
Siendo muy joven, hace muchos años me cuestionaba sobre el qwerty, y me ilusionaba con idear/encontrar un sistema más “natural” en el que estuvieran ubicadas las letras quizás por orden alfabético, o tal vez de forma que la mano derecha tuviera mejor acceso a las letras más frecuentes (digamos a,e, s) en lugar de la izquierda y así otras ideas y preguntas que me fueron surgiendo en esas horas de ocio juvenil.
Ahora, ya mis dedos están habituados a la locación de las teclas, pero igualmente a veces, en esos raros momentos de vagancia mental, suspiro por un teclado más racional, según mi buen parecer y entender.
Como por casualidad hace un tiempito me topé con un articulito en la web, de un sitio que ya ni recuerdo (lo siento, debiera explicitarlo, pero no lo tengo registrado en mi memoria), del cual copié y guardé en mi PC, y ahora pasteo lo siguiente:

¿Sabían que la distribución qwerty se creó a propósito para que la gente escribiera más lento?
Estamos hablando de máquinas de escribir, claro, de dónde creen que provienen los teclados de las computadoras.
Resulta que había una distribución de teclas para máquinas de escribir que les permitía a las dactilógrafas teclear tan rápido que las palancas que unían a cada tipo con la correspondiente letra no tenían tiempo de volver a su lugar al golpear el papel y se encontraban con la que ya venía subiendo, y entonces se trababan.
Era una configuración demasiado eficiente, y entonces a alguien se le ocurrió separar las letras que se utilizaban con más frecuencia (en el idioma inglés) y diseñó el qwerty.

Mira tú lo que nos venimos a enterar.
Creo que en otras webs leí que esta idea era un mito, no lo sé, tampoco me preocupa tanto como para hacer una investigación profunda y sistemática (te invito a que si tú tienes tiempo ocioso, y quieres hacerlo, que lo hagas, a no ser que encuentres algo más trascendental que esta tarea).

Si tal motivo fuera el cierto, si se diseñó el qwerty para entorpecer la velocidad de escritura, en épocas de palancas metálicas accionadas por el golpeteo de los dedos, ¿no hubiera sido más razonable, eficiente y hasta saludable cambiar por una distribución más moderna cuando se dejó de usar el sistema de martillos móviles?
Hace décadas que existen máquinas de escribir eléctricas, sin palanquitas, o hasta incluso tecnología como para hacer que los brazos metálicos no se entorpezcan en su funcionamiento.
Ni que hablar de esta era en la cual ya no precisamos mover ningún objeto físico para digitar letras, sino que tan solamente manipulamos puntos de energía en una pantalla luminosa (y ni siquiera estoy recordando aquí los teclados virtuales, los teclados de láser, entre otras maravillas modernas).
Pero, aunque tú y yo entendamos esta “fidelidad” a un sistema obsoleto (de acuerdo al motivo expresado más arriba) y pretendamos hacer un cambio en la realidad del mercado para obtener un teclado más ajustado a nuestra necesidad, a pesar de esto, el teclado qwerty sigue siendo el que lidera.
Vaya uno a saber la razón… (lee aquí si gustas y luego pensar en imperialismos, dominios económicos, pasión por el poder, religiones, sumisión al EGO, etc. Gracias.)

¿Qué podemos aprender de noajismo sobre esta breve historia?
Yo te propongo ahora algunas breves ideas, tú si quieres puedes aportar más en la zona de comentarios.

  1. El hombre es un animal de hábitos, para bien o para mal.
    Al principio nos cuesta aprender cosas nuevas. Tenemos que concentrarnos, poner voluntad, lentamente ir adquiriendo habilidad y destreza. Con el entrenamiento el hábito se va formando y deja de precisarse de fijar la atención, de rebuscar, de equivocarse para aprender, pues se automatiza, se convierte en hábito.
    Sea esto para lo bueno como para lo malo.
    Alguien que ha sido adoctrinado en alguna religión o superchería, ya no hace preguntas, no se cuestiona, no indaga, no descubre las falsedades (si es que le “dan permiso” para hacer esto sus “mayores”, sean padre, tutores, pastores, clérigos, etc.).
    La persona se somete a los dictados de la religión, de la ideología, de la creencia, del hábito mental, y no hace más que vivir en piloto automático, aceptando silenciosamente cualquier cosa que esté dentro de su estrechito marco de conceptos adquiridos y habituados.
    El sano ejercicio de interrogar, investigar, criticar positivamente, rechazar lo negativo no se obtiene, se aminora, se apaga, se enlentece, se bloquea, se niega para aquel que ha sido adoctrinado en cualquier religión o ideología obtusa.
    Hasta los que se hacen llamar “libre pensadores” y “progresistas” no escapan de tales esquemas mentales, de rutas trazadas por otros, de hábitos mentales que han adquirido y ni siquiera tienen en cuenta que pueden ser erróneos, pesados, removibles, mejorables, etc..
    Existe el qwerty aprendiste a escribir en él y por eso das por sentado que es el único sistema infalible, el mejor, lo más eficiente y beneficioso. Ni se te ocurre indagar el origen, alternativas, mejorías, etc..
    ¿Estás dispuesto a destruir el hábito que te tiene encarcelado a tu religión, a tu ideología, a tus dogmas?
    ¿Serás capaz de ayudarte a ser libre para entonces vivir según el camino del gentil justo?
    ¿Dejarás de temer a todas esas fantasías con que te han corrompido, ideas tales como Jesús que te salva, el demonio que te castiga y etc. varios?
  2. Los mitos.
    El invento del teclado es reciente, muy humano, aparentemente pasible de ser registrado y verificado, y sin embargo… ¡cuántos mitos y cuentos que parecen reales pero no podemos confirmarlos!
    Si esto acontece con temas tan cercano, tan banales, tan intrascendentes, ¿cómo no dudar de esas historias fantásticas que te presentan, repiten y machacan, acerca de súper hombres sagrados que son enviados en misión de rescate por su padre del cielo? (pareciera que estoy hablando del Superman, pero es una referencia directa al cuento del tal Jesús).
    Los mitos, las leyendas, las fantasías, las inventadas anécdotas, las supuestas confirmaciones, se van acumulando y acumulando, son repetidas hasta el cansancio por los clérigos de la religión, luego difundidas sin cesar por los que aceptan tales ilusiones como sistema de vida y creencia religiosa. Pero, no dejan de ser mentirijillas, a veces bien intencionadas, pero muchas veces planificadas para someter, para dominar, para manipular, para obtener el poder sobre las mentes y almas de las personas.
    ¿No te da deseo de romper con esos esquemas que te han inculcado?
    ¿No quisieras encontrar un camino sagrado y ético, que te aparte de la programación automatizada que recibiste y consideras santa?
    ¿No crees que sería muy bueno hacer una profunda revisión de tus creencias, aceptar que tienes que revisar eso que crees “por fe”, para encontrar más fundamentos que solamente “la fe”, lo que dice el pastor o falso rabino falso mesiánico, lo que dicen los medios de comunicación, etc.?
    Por supuesto que también debes tener una postura sanamente crítica cuando te ofrecen alimento noájico, o que quieren hacerte creer que es tal.
    Tampoco tienes que creerme a mí, porque yo te lo diga, o a lo que se dice por internet, o a lo que algún patán (o quizás alguna persona correcta) te barbota desde el YouTube o similar.
    Estás en tu derecho y es tu deber interrogar, preguntar, indagar, descubrir, llegar hasta el límite saludable y razonable para encontrar la chispa de verdad que te está esperando y alumbrando.
    No caigas en cuentos bien intencionados o bien tramados, no te sigas comportando como un ingenuo, no sigas los pasos de los “religiosos” que aceptan hasta lo más extravagante escudándose en “la fe”.
    Ten presente que si al respecto del diseño de un teclado, inventado hace pocas décadas, se elaboran tantas historias fantásticas, ¿no será mucho peor cuando se trata de cuestiones religiosas?
    Por supuesto que eres bienvenido a indagar acerca de noajismo, tratar de descubrir si hay “trampas”, si hay “cuentos”, si es como una religión más.
    Como el noajismo no tiene nada que ocultar, no teme las preguntas ni se deja devorar por las críticas saludables, aunque no debiera admitir que se difundan mensajes y supuestas dudas de los burlones, de los misioneros que traman trampas en las sombras pero se presentan como amigos deseosos de aprender, de los que buscan beneficios personales egoístas y no tienen consideración por aprender y enseñar, entre otros peligrosos pozos en el camino del que busca acercarse lo más que pueda a la Luz.
  3. El reducido espacio de tus decisiones.
    Como hemos dicho, tú puedes querer otra cosa para tu vida, quizás el teclado Dvorak, o algún otro que ya está inventado, o tal vez desarrollar tu propio diseño.
    Tú puedes estar seguro de que el qwerty debiera ser reemplazado, pero el mundo de los negocios no siguen tus ideas, sino que van detrás de sus propios intereses.
    Así pues, debes acomodarte a la realidad del mundo en el que vives.
    Pero, no eres una oveja, ni un tonto, ni un impotente que no sabe, no entiende, ni puede; sino que eres una persona completa, que tienes tu capacidad para tomar decisiones y llevarlas a cabo, en la medida de lo que te es posible.
    Tú puedes optar, y debes hacerlo.
    A cada rato estás en ocasión de tomar alguna decisión, más o menos importante, más o menos vinculante, pero siempre ante una toma de decisión.
    Quizás no seas tú quien cambie el mundo, o quizás cuando tú cambies promoverás que el mundo cambie contigo.
    No lo sé, pero tampoco tú lo sabes.
    Por eso, debes estar consciente de tu poder, de tu responsabilidad, de tu obligación de escoger a cada momento, y que tu decisión sea coherente con la meta de construir Shalom en el mundo, empezando por tu propio interior.
    Tú decides cambiar hacia un lado o hacia el otro, sin pausas, sin excusas. Cuando crees no decidir o no poder hacerlo, de hecho estás tomando igualmente un camino.
    Así pues, tal vez sigas escribiendo en el mismo teclado qwerty porque no fabrican otro tipo de teclados, o quizás encuentres que puedes ir contra la corriente para hacer lo que es mejor para ti, sin por ello causar un daño a nadie.
    Descubrirás, tal vez, que no tienes porqué seguir esclavizado de dogmas, de religiones, de iglesias, de pastores, de fantoches que se hacen llamar “líderes” espirituales, de tus propias creencias infantiles, que son teclados inventados por otros, que buscan beneficiar a otros y perjudicarte a ti. Puedes optar por quitarte la máscara de las religiones, dejar de cargar la pesada mochila del adoctrinamiento religioso, de usar las formas que no te corresponden por derecho de Dios, para empezar a escribir con tu propio teclado, el que Dios quiere que uses, el que no es el más difundido, pero que sin dudas es el mejor.
    Tú decides, si te sumas a los que son una masa anónima de seguidores de lobos disfrazados de ovejas, o te separas del rebaño y moras a la Luz del Eterno.
  4. El conocimiento ante ti, pero no te percatas.
    Desde el inicio, lo más probable, es que te hayan adoctrinado para que no pienses críticamente, para que no indagues, para que no desenmascares lo oculto (oculto por perverso o por velado).
    Es típico de padres/educadores prepotentes (en realidad, sumamente impotentes) dominar por la violencia, manipular, atemorizar, amenazar, castigar, violentar, silenciar las divergencias, etc.. Por lo que sé, es el procedimiento habitual que también esgrimen los clérigos de la idolatría cuando alguna persona bien intencionada cuestiona alguna cosa de sus doctrinas oscuras.
    Presionan a más no poder, niegan el acceso al conocimiento, prohíben la preguntas, castigan la voz que desentona, y así un sinnúmero de estrategias para someter y dominar a sus devotos.
    Los clérigos de la idolatría están bien entrenados para ejercer sus astutos planes de dominación, han sido ejercitados en ellos por sus maestros.
    Y tú, vaya uno a saber por qué, te sientes amordazado, maniatado, imposibilitado, ridículo, pecador, malvado, poseído, etc. si es que siquiera se te ocurre hacer alguna preguntilla que no mira con buen ojos el pastor.
    Te callas, te anulas, te cohíbes, te reprimes, te censuras, te ridiculizas, te insultas, te castigas si es que siquiera se te cruza alguna duda por entre tus ojos.
    No quieres saber de nada, te encierras, repites los lemas que te adoctrinaron, te escudas en “creo por fe”, aunque en el fondo (cada vez más apagada) resuena una vocecita que te habla de que puedes ser libre, que estás siendo sometido a un adoctrinamiento feroz, que tienes posibilidad de rescatarte… esa vocecita de tu conciencia espiritual se va apagando, hasta que ya ni la puedes oír y si la sigues oyendo, la mandas a callar. Es mayor tu miedo que tu compromiso con la verdad, con el bien, con la justicia.
    Prefieres el elogio fácil del pastor, el dinerillo dulce de la congregación, el puchero lleno antes que el ser leal para contigo, para con Dios.
    La Luz está ante ti, a veces dentro de ti, pero prefieres mirar para otro lado, prefieres no mirar, prefieres bajar la cabeza y levantar tu mano derecha para decir “amén hermano” a algo que sabemos que es mentira.
    Ante ti está el teclado qwerty, quizás alguna vez tuviste un rayo de curiosidad para preguntarte por qué es así, o quizás ni siquiera tuviste esa alma libre como para hacerlo.
    Pero la pregunta siempre estuvo ante ti, lo quieras o no.
  5. Gozas de lo permitido, cuando sabes y admites lo que está permitido.
    Aquí pudiera surgir una duda interesante: ¿acaso los devotos de religiones no son personas inteligentes, no hay gente con pensamiento crítico entre los religiosos, no son famosas algunas mentes brillantes (científicos, literatos, líderes políticos, etc.) que aparte eran fieles a sus falsos dioses?
    La respuesta es que sí, que por supuesto que sí.
    Pero, estamos apuntando a usar las capacidades de descubrimiento, de crítica positiva, de reflexión madura, de “método científico”, también a otras áreas. Es decir, no dejarnos dominar por emociones, no ser esclavos de pasiones carnales, no adular por pretensiones sociales, no cegarse ante “palabras reveladas”, no quedarse callado y sabiendo que se está en conflicto espiritual solamente porque un pastor o un librito “sagrado” lo diga.
    Es llevar el deseo de conocer la verdad, en la medida de nuestra capacidad, a todas las áreas, sin por ello contaminar cada plano con racionalizaciones e intelectualizaciones constantes. Te explico, si vas a gozar de tu encuentro con un riquísimo pastel, no es hora de que te pongas a analizar racionalmente al respecto, sino que simplemente disfruta de lo permitido. Pero, ANTES de sumergirte en aquello que tanto quieres, o aquello que tanto te adoctrinan para querer, mejor te tomas un rato para pensar acerca de si será correcto o no, si te está permitido o no, si no resultarás dañado (o alguna otra persona) por el acto que harás. Así, en el ejemplo del pastel, si eres celíaco, diabético, obeso, etc., por supuesto que sigues teniendo el deseo por paladear el sabroso pastel, y lo harías con todo gusto, pero si mides las consecuencias te detendrás, porque admitirás que no es un disfrute permitido, por lo cual, si aplicas tu inteligencia y rigor, no lo comerás e igualmente estarás contento, pues has hecho lo correcto.
    Cambia la palabra “pastel sabroso”, por religión que me han entrenado a creer, que te hace sentir bien estar rodeado de los otros feligreses, que te sientes protegido por el pastor, que te hace sentir superior el saberte hermano de un hijo colgado que te salva de pecados, que no te presionan pues eres una oveja más del montón, etc. Estarás disfrutando de muchos beneficiosos, sin dudas, algunos reales y otros imaginarios, pero es un pastel que tienes prohibido, que te enferma, que te llena de placer pero conduce directamente a la frustración eterna.
    Así pues, emplea cada plano en su justo lugar, para gozar de lo permitido y apartarte de lo prohibido.

Para concluir este encuentro de hoy, quiero agradecerte por haber compartido conmigo este momento de reflexión, espero que podamos seguir estudiando juntos acerca de cómo ser libres para llegar a serlo realmente.
Y, cuando lo seamos, sepamos hacer algo productivo con nuestras vidas y no solamente huir nuevamente hacia la esclavitud, por no saber qué hacer con nuestra libertad.

¿Saber o creer que Dios existe?

El Eterno en Su perfecta sabiduría y amor ha dado SIETE mandamientos universales, para todas las naciones.
Son siete, ni uno más, ni uno menos.
Siete, que están expresados con claridad y confirmados.

Por su carácter, por su esencia, esta “Torá noájica” (Torá = instrucción, enseñanza), de tan solo Siete Mandamientos, no fue tallada en roca por parte de Dios, tampoco declaró que fuera puesto en un rollo escrito y custodiado en algún templo, sino que exigió que se viviera a pleno en la vida de cada uno de los descendientes de Noaj/Noé.
Tal sería la manera de que esa Torá gentil estuviera viva, en el corazón de cada uno de los hijos del hombre.
Era la mejor y más pura manera de preservar el legado, de llevarlo a cabo.
No depender de objetos externos, ni de líderes o maestros, sino de la conciencia clara y firme en mantener la dorada cadena que vincula al hombre con los mandamientos de Dios.
Al estilo de lo profetizado para el futuro del pueblo judío:

"Pondré Mi Torá en su interior y la escribiré en su corazón. Yo seré su Elokim, y ellos serán Mi pueblo.
Ya nadie enseñará a su prójimo, ni nadie a su hermano, diciendo: ‘Conoce al Eterno.’ Pues todos ellos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice el Eterno. "
(Irmiá / Jeremías 31:32-33)

Tal era lo que debía hacer cada gentil, tener SU Torá en su interior, es decir, conocer y vivir los Siete Mandamientos Universales.
(Aclaro para los que gustan de confundir, digamos, mesiánicos y otros paletos, que la profecía mencionada recién trata del futuro del VERDADERO pueblo judío, que en la Era Mesiánica será leal al Eterno, con total dedicación sabrá y aplicará SU Torá; tal como en el comienzo de la humanidad debieran haber hecho todas las personas con su propia Torá, la gentil, la que contiene solamente Siete Mandamientos).

Si bien era parte de la tarea y responsabilidad de cada gentil ser fiel a su tradición y mantenerla, tristemente no pudieron cumplir tan sencilla e importante tarea, vivir de acuerdo a los Siete Mandamientos, y pronto se llenó el mundo de confusión, de oscurantismo, de religiones, de dogmas, doctrinas, ideologías, etc..
Las multitudes de personas del mundo no supieron ser leales a tan simple pero profundo deber ante Dios, ante sí mismos.
(Un aparte: es bastante frecuente que reciba emails de idólatras –seguidores del falso dios y falso mesías- que desde su odiosa perspectiva acusan a Israel de no ser fieles a Dios, de no cumplir con Sus mandamientos, tal como la Torá registró en varias ocasiones… ¿no es patético? Gente incapaz de ser fiel a SIETE mandamientos se atreven a señalar acusatoriamente a aquellos que tienen SEISCIENTOS TRECE mandamientos y que como pueden los llevan a cabo… ¿no es patético? ¿No es patético que entre esos idólatras ni siquiera recuerden SU pacto verdadero con Dios y que hace milenios perdieron la buena senda, pero pretendan dictar cátedra a quienes en penurias y diásporas igualmente siguen conscientes y fieles a su propia identidad espiritual?)

Dios, en Su infinita bondad preservó el pacto con las naciones, lo mantuvo con lealtad a pesar de no recibir respuesta de parte de la humanidad.
La gente aborrecía a Dios, a pesar de usar la palabra dios a cada rato, a pesar de hacer sacrificios “para dios”, etc., lo cierto es que estaban lejanos de Dios, pues no se vinculaban con los mandamientos que Él había encomendado, habían olvidado SU Torá, la noájica.
Solamente un puñadito de hombres y mujeres eran fieles, el más destacado en su momento fue Avraham, el primer patriarca de los judíos.

Por Su bondad, es que los Siete se han preservado con fidelidad en la tradición del pueblo judío, y que sirve como legítima “caja de caudales” para las naciones.
Por supuesto que esto no significa que los Siete sean responsabilidad de la nación judía, mucho menos un invento judaico, ni que los guardianes judíos sean los que tengan que hacer la parte que le toca a los hermanos gentiles. Significa que así como una persona deja en resguardo -en casa de un seguro guardián- un precioso objeto para luego recuperarlo, es menester que cada gentil vaya y recoja su legado precioso, el conocimiento y compromiso a cumplir con los Siete.
Esto NADA tiene que ver con pretender estudiar Torá, o convertirse al judaísmo, o inmiscuirse en asuntos judaicos, o aprender hebreo, o tener objetos de judaica, ni afiliarse a sinagogas, ni ser parte de la nación judía; sino recibir el objeto puesto a resguardo, los Siete Mandamientos para las naciones.

Es notorio que ninguno de esos mandamientos noájicos ordena “creer en Dios”, cuando aparentemente debiera ser el núcleo central del noajismo, lo que sostiene el edificio de los Siete Mandamientos.
Pues, si no creo en Dios, ¿por qué habría de cumplir con lo que Él manda?
Entonces, parece como necesario y fundamental sumar como “mandamiento” el “creer en Dios”, aunque eso no está declarado por Dios como mandamiento.
En verdad, suena muy convincente y coherente esta tesis… ¿no te parece?

Por supuesto que sobran argumentos, bien intencionados sin dudas, para aseverar que es un “deber” para el noájida creer en Dios.
Por supuesto que son pensamientos razonables, valiosos, a considerar como interesantes, en apariencia con carácter sagrado… pero no toma en cuenta un “pequeñito detallito”, y es que Dios mismo no lo ha comandado como mandamiento para las naciones.
Mira qué curioso, tampoco lo ha ordenado directamente como uno de los 613 mandamientos para los judíos; se ordena CONOCER que Dios existe, y no directamente que se CREA en Él.
De hecho, si relees la profecía de Jeremías que cité más arriba verás que se habla explícitamente de CONOCER a Dios, y para nada de creer en él.
Quizás nunca te había percatado de ello, quizás pensabas que era algo similar conocer que creer, pero ahora puedes darte cuenta de que es diferente.
 
Podríamos SUPONER que es bueno creer en Dios, que sería DESEABLE que todo gentil crea en Dios, que en nuestro pensamiento DEBIERA ser un mandamiento que el gentil crea en Dios, pero no podemos someter a Dios a nuestra voluntad, ni cambiar los mandamientos según nuestra buena intención.
Pero, creer en Dios no es obligatorio para el gentil, desde el momento en que Dios no lo ha ordenado como uno de los Siete Mandamientos.

Reitero, es bueno que el gentil crea (luego veremos un poco más esto), es elogioso, es meritorio, seguramente obtiene recompensa en la eternidad por ello, sin dudas es una base firme para apartarse de errores y esforzarse en construir un mundo de shalom; pero, sigue sin ser uno de los mandamientos que Dios decretó para los gentiles.

Ahora, ¿cuál podría ser el daño que surgiera de aseverar que es necesario y obligatorio creer en Dios por parte del gentil?
Aparentemente no hay ningún perjuicio.
¿Cómo perjudicaría afirmar que es obligatorio creer en Dios?
Sin embargo, veamos una posibilidad de error o daño a causa de añadir un mandamiento que no existe.
Alguien puede buenamente luego añadir otro mandamiento, también bien intencionado, que tampoco existe.
Y así, se iría conformando un sistema seudo espiritual, basado en numerosas buenas intenciones, pero apartado de la senda delimitada por el Eterno para el noájida.
Por supuesto que saber que Dios existe está en la base de la fidelidad a Él, en el apego a los Siete, es el núcleo del cual parten los mandamientos para las naciones, pero, no es un mandamiento para los gentiles el deber saber que Dios existe.
Si lo saben, si lo admiten, si viven con la Luz de esa Verdad, es excelente; es lo que debiera ser, sin necesidad de que nada ni nadie le obligara a hacer.

Comprendo que puede ser un concepto difícil de entender y/o o compartir para personas que han padecido el nacer y criarse en entornos religiosos, en los cuales se adoctrina para creer en dios (adrede con minúscula), en donde se agrede a quien no cree, en donde es pecado no creer, en donde la duda es silenciada y castigada, en donde se hace que la persona crea, que tenga fe, aunque luego no viva de acuerdo al ideal espiritual diseñado por Dios.
Comprendo que puede parecer “blasfemo”, arbitrario, extraño que te diga que no tienes obligación de creer, de acuerdo a los mandamientos que Dios te ha comandado.
Quizás hasta en cierta forma te puedas sentir como un huérfano, creyendo que para los judíos es un deber, que ellos tienen a su “Padre” y tú no; si es lo que sientes, te comprendo, pero no tiene un punto de contacto con la realidad de acuerdo a lo planteado por Dios.
Dios es Padre de todos, judíos o gentiles, creyentes en Él o no, fieles a Sus mandamientos o contrarios, Lo conozcan o lo rechacen, Él sigue siendo Padre de todos.
Dios es una realidad, o más LA realidad. Somos nosotros pasajeros, fugaces, sombras de pájaros que pasan, nubes llevadas por el viento, inconstantes, desleales, torpes, etc. Pero Él es firme, una roca, eterno, fiel, perfecto, real.
Dios existe y no precisa de nosotros en lo más mínimo. Tampoco Le afecta si tú crees en Él o no, no es menos o más Dios gracias a ti o a mi.
Ahora bien, ¿por qué no te ordena creer en Él?
La respuesta, una de ellas, es bastante simple: uno cree acerca de lo que no puede comprobar, pero no se cree en aquello que se comprueba, que se SABE que existe.
Te lo pongo más claro: tú no crees que estás leyendo estás líneas, tú lo sabes.
¿Y cómo lo sabes?
Eso, no me lo respondas a mí ahora.

Dios no te pide, ni a ti ni a mí, que creas en Él, porque no se puede demandar creer en lo que es evidente, está “a la vista”; tal como no te pudo pedir que creas que estás leyendo este texto, pues sería un pedido ridículo de mi parte. Dios no comete actos ridículos ni inútiles.
Por tanto, tú puedes llegar a saber que Dios existe; repito, A SABER, pero no a creer…
¿Cuál es el método que Dios dejó en manos de las naciones para que ese conocimiento de Él exista?
Pues, el cumplimiento de los Siete Mandamientos Universales.
Te explico.
Adam, el primero en recibir los mandamientos universales, no precisaba que le dijeran que creyera en Dios, él mismo había hablado con Dios.
Noaj, del cual salimos los humanos luego del Diluvio, no precisaba que le ordenaran creer en Dios, él mismo recibía instrucciones directamente de parte de Dios.
Así mismo los hijos de Noaj, Shem, Jam y Iafet, quienes fueron testigos de la devastación, de la salvación, del pacto eterno del arcoíris, etc..
Ellos no podían ni debían recibir la orden de “creer” en Dios, pues para ellos era natural SABER que Dios existe.
¿Qué era lo que debían hacer?
Vivir de acuerdo a los Siete Mandamientos, desarrollar reglas justas a partir de los mismos, comprometer a sus descendientes en el noajismo, en tanto relataban con fidelidad como ELLOS mismos habían recibido “su Torá” (los Siete Mandamientos) directamente de Palabra de Dios.
Los hijos de los hijos debían recibir este legado, este recuerdo, este testimonio, esta evidencia de la existencia de Dios por medio del testimonio fiel e inquebrantable, tal era la tarea de cada personas en lo sucesivo… pero… la gente se dejo someter por sus vanidades, adoraban al EGO en lugar de ser fieles a Dios, por lo cual, pronto fueron toqueteando los mandamientos, los acomodaban a su antojo, los eliminaban, iban elaborando religiones, adoctrinando en “la fe”, inventando dioses, cubriendo de oscuridad y olvido el CONOCIMIENTO de la existencia de Dios y el DEBER de cumplir con Sus mandamientos. Tal fue lo que aconteció.
Así pues, no era necesario ni razonable que Dios demandara de los gentiles creer en Él, pues hubiera sido una orden imperfeta, ridícula.
Hoy, sumergidos en tanto fango de ideas y religiones, puede parecer loable el creer en Dios, cuando en verdad lo que debiéramos hacer es SABER que Dios existe.
Por supuesto, mejor creer que nada, o negarlo, o inventar dioses, o vaya uno a saber que otras terribles alternativas.
Pero, no pidamos –movidos por buenas intenciones- que consideremos como mandamiento noájico el creer en Dios, pues no lo es, ni lo fue.
Sí hagamos el esfuerzo por conocer más acerca del legado espiritual que nos motiva, a los judíos el judaísmo y a los gentiles el noajismo, conozcamos de nuestro pasado sagrado, comprometamos nuestra existencia a cumplir con los mandamientos que nos competen, revelemos la historia tal cual fue, para reconocer que Dios existe, que lo sabemos, que no precisamos de fe ni de creer, sino que es un hecho que SABEMOS.

Recuerda que cuando se agrega un mandamiento, sea cual fuera, da pie para que se agregue cualquier otro.
El sistema ya está confeccionado, tiene sus partes en su lugar, tal cual el Diseñador decidió, ¿cómo pretender modificar el sistema diseñado por Dios?
Otro perjuicio posible sería el que la persona se sienta pecadora, fracasada, en falta, lejana a Dios por no creer en Él… y en la realidad no es pecadora, ni fracasada, ni está en falta, ni se alejó de Dios… pero, a causa de agregar un mandamiento a lo ordenado por Dios, la persona pasa a vivir en conflicto, en una vida falsa, en lejanía cuando no debiera estar así.
Podríamos seguir buscando y encontrando beneficios de no añadir a los mandamientos, pero la idea ya está propuesta.
De paso, para los judíos, que tienen 613 mandamientos en lugar de sólo 7, hay explícito un mandamiento de no añadir ni quitar mandamientos:

"No añadáis a las palabras que yo os mando, ni quitéis de ellas, de modo que guardéis los mandamientos del Eterno vuestro Elokim, que yo os mando."
(Devarim / Deuteronomio 4:2)

Éste no es un mandamiento para los noájidas, pero bien puede ser un reglamento a tener en cuenta.
Recuerda que los reglamentos, las normas, las leyes derivadas, los consejos de vida, tus decisiones espirituales NO son mandamientos, aunque algunos de ellos pueden tener carácter muy grave y necesario, igualmente NO son mandamientos y no deben ser considerados como tales.
Así pues, una buena norma es no agregar ni quitar de los Siete Mandamientos universales. Puedes desarrollarlos, aplicar las reglas derivadas con total dedicación, pero a sabiendas de que no son mandamientos.

Ya hemos visto varios importante temas en este texto, que amerita relectura, repaso, estudio profundo, crítica saludable; pero aún quiero mencionarte un par de datos más.
En el idioma de la Creación, el que conocemos ahora como hebreo, creencia es EMUNÁ.
Esta palabra se asocia con entrenamiento, con ejercicio.
Creer no es tener una idea de algo, sino entrenarse para confiar en algo.
En el caso de la creencia en Dios, es entrenarse, ejercitarse, para confiar en Él.
¿Cómo se entrena uno en esto?
Pues, al cumplir con los mandamientos que a cada uno le compete, los Siete para los gentiles, los 613 para los judíos.
Si vives los mandamientos, aunque no conozcas a Dios, aunque no creas en Él, si igualmente vives de acuerdo a los mandamientos, llegarás a tener una vida noble, buena, justa y eventualmente descubrirás que también crees en Dios, aunque nadie te haya dado clases de “doctrina teológica”.
Esa creencia basada en el ejercicio de una vida saludable espiritualmente, conduce al conocimiento de Su existencia.
Tal es como ha subsistido a lo largo de los milenios, a pesar de las penurias, a través de las diásporas, con altibajos, el pueblo judío, el pueblo que es cercano a Dios.
No por creer en absurdos porque la fe lo exige; no porque se tiene el dominio y el poder para acallar a los contrarios; no por ser ciegamente fieles y sin rebeldías… nada de esto es parte de la nación santa de Israel.
No se vive teniendo fe en disparates, ni se ha tenido el poder para dominar y someter a los demás, ni se ha sido un pueblo de dóciles ovejitas que no se sobresaltan y retoban a cada rato. Y sin embargo, el pueblo de Israel VIVE y EXISTE, sigue siendo leal a Dios, sigue preservando su tradición, sigue estudiando y preservando SU Torá, sigue teniendo identidad, sigue siendo siervo fiel, a pesar de los pesares.
Cosa que no se obtiene por fe, ni por aplastar a los “herejes” en “guerras santas”, ni por ser sumisos hasta el absurdo; sino que se obtiene por entrenarse a diario en lo que le corresponde, hacer los ejercicios que fortalecen los “músculos” espirituales por medio de cumplir con los mandamientos que le competen.
Tú, hermano gentil, también puedes entrenarte, por supuesto que NO con la Torá judía ni con los mandamientos judíos, sino reencontrando TUS mandamientos, llevando tu confianza hacia Dios con sinceridad y pureza.

Así pues, a conquistar tu mundo interior por medio de lo que te corresponde.
Siendo orgulloso de lo que te toca, leal a tu identidad, fiel a Dios, constructor de Shalom.
Sin pretender saber mejor que Dios lo que te corresponde, sin adjudicarte prerrogativas que no tienes.
Tal vez no te resulte fácil, al principio, pero si te entrenas conocerás a Dios y se hará realidad la profecía de los últimos tiempos, una profecía que atestigua la presencia del verdadero Mesías:

" Entonces el Eterno será rey sobre toda la tierra. En aquel día el Eterno será único, y Único será Su nombre."
(Zejariá / Zacarías 14:9)

Los 7 atributos de los Justos de las Naciones

cada uno de los 7 Mandamientos Universales tienen la característica de implantar y desarrollar determinados atributos en el ser humano, de acuerdo al grado de conocimiento que se tenga sobre los Mandamientos y de acuerdo a la intensidad en la práctica de los mismos, será el nivel de desarrollo de estos 7 atributos, los atributos que se desarrollan mediante la práctica de los Mandamientos, son la base de una existencia saludable, y de esos atributos emergerán otros, que darán un desarrollo aun mayor a la persona.

Primero veamos cada uno de los 7 Mandamientos Universales.

  1. 1.       No relaciones sexuales ilícitas
  2. 2.       No asesinar
  3. 3.       No robar
  4. 4.       No idolatría
  5. 5.       No blasfemar  
  6. 6.       No comer parte de animal con vida
  7. 7.       Establecer cortes y leyes de Justicia

El orden de los Mandamientos está establecido para poder explicar el efecto descendente, desde una acción originada desde un impulso primario que es el deseo sexual y hay que recalcar que este impulso es de gran fuerza y enorme utilidad en la vida del ser humano en su uso adecuado radica buena parte del éxito de la persona.

Ahora veamos cada uno de los atributos que se adquieren con la práctica de cada uno de los Mandamientos.

No relaciones sexuales ilícitas

El atributo que se adquiere y desarrolla mediante la práctica de este Mandamiento es: FIDELIDAD hacia nuestra pareja, Dios y todo lo demás.

La prohibición de actos sexuales ilícitos tales como las llamadas infidelidades, permiten al individuo en lugar de derrochar su energía sexual (en sexo ocasional) ejercer una actividad sexual licita y saludable (dentro del matrimonio) que fomentara y fortalecerá los vínculos internos y lazos afectivos dentro de la pareja, estas prácticas arraigaran el atributo de la fidelidad en la persona.

No asesinar

El atributo que se adquiere y desarrolla mediante la práctica de este Mandamiento es: RESPETO hacia la vida y todo lo relacionado con ella.

La fidelidad hacia nuestra pareja nos llevara hacia el respeto, pues al serle fieles respetaremos su integridad emocional como su integridad física, social, intelectual y espiritual, estas prácticas arraigaran el atributo del respeto en la persona.

No robar

El atributo que se adquiere y desarrolla mediante la práctica de este Mandamiento es: EMPATIA con nuestro cónyuge y todas las demás personas.

Mediante el respeto hacia nuestra pareja, nos sensibilizaremos acerca de su situación, y procuraremos buscar su bienestar de forma genuina y desinteresada, sin ningún interés egoísta de por medio, estas prácticas arraigaran el atributo de la empatía en la persona.

No idolatría

El atributo que se adquiere y desarrolla mediante la práctica de este Mandamiento es: CONFIANZA en Dios, los demás y nosotros mismos.                                           

Mediante la empatía al sensibilizarnos sobre la situación de nuestra pareja y todos los demás, adquiriremos confianza en ellos y nosotros mismos, pues para ayudar a alguien más se requiere de seguridad y confianza en sí mismo, así como seguridad y confianza sobre los demás, estas prácticas arraigaran el atributo de la confianza en la persona.

No blasfemia

El atributo que se adquiere y desarrolla mediante la práctica de este Mandamiento es: SINCERIDAD                                        

Cuando nos disponemos a contribuir para el bienestar de nuestra pareja y todos los demás de forma sincera y desinteresada, mediante la ayuda de algún tipo, necesariamente habremos reconocido el enorme valor que cada ser humano tiene, incluidos nosotros mismos, estas prácticas arraigaran el atributo de la confianza en la persona.

No comer parte de animal con vida

El atributo que se adquiere y desarrolla mediante la práctica de este Mandamiento es: MISERICORDIA

Al reconocer el precioso valor de cada ser humano, podremos sobreponernos al influjo animal que poseemos y elevarnos por encima de las actitudes animales que suelen caracterizarnos, emitiendo destellos de humanidad más intensos cada vez, estas prácticas arraigaran el atributo de la misericordia en la persona.

Establecer cortes y leyes de Justicia

El atributo que se adquiere y desarrolla mediante la práctica de este Mandamiento es: JUSTICIA

Una vez que hemos superado y dominado lo fundamental que existe dentro de nosotros, podemos constituirnos como seres humanos respetuosos del orden y ley que promueve el Eterno y las naciones mediante las leyes de convivencia pacífica estas prácticas arraigaran el atributo de la justicia en la persona.

Cada atributo es precioso y necesario para darnos una mejor calidad de vida, son nuestras acciones las que nos permitirán adquirirlos y fortalecerlos, para encaminarnos por el sendero de los Justos de las Naciones.

¡Hasta pronto!

Sesiones de “Grupo Noajico”

Hace aproximadamente 3 años, llegue al sendero original de las Naciones “el Noajismo” desde ese entonces y hasta hace poco, la mayor parte del tiempo he estudiado en forma individual, esto recién dio un giro pues llegue a topar con un grupo de Noajidas que estudian de forma regular varias veces por semana, me hicieron favor de invitarme a su grupo de estudio y he tenido oportunidad de asistir a algunas sesiones, su método de estudio es agradable, ameno, y me parece muy eficiente.  

Quiero compartir con ustedes acerca de este grupo, primero les platicare acerca del método sobre el cual se desarrollan las sesiones, posteriormente sobre su estructura de estudio, y  al final les compartiré una breve reflexión en base al último tema que se trató.

Existe un moderador que es el que da lectura al material que será estudiado, al ir avanzando en la lectura si se localiza un punto, donde no es clara la información para alguno de los participantes, se da una pausa en la lectura para establecer una mesa redonda donde cada uno de los participantes dará su opinión en base a vivencias personales y conocimientos propios para aclarar y entender mejor dicho punto, a través de los aportes que hace cada participante se enriquece el estudio y al final de cada sesión cada uno de nosotros nos llevamos algo a casa  de utilidad, muy similar al método que se utiliza aquí en Fulvida, pues alguien publica y los demás  aportan con comentarios que refuerzan y complementan la información, bueno hasta aquí para explicar el método bajo el cual se desarrollan las sesiones de estudio.

Ahora pasare a comentarles la estructura de estudio.

La estructura de estudio, está conformada de la siguiente manera:

  • Los 7 Mandamientos Universales
  • Identificación y utilización de las cualidades que posee el ser humano (por ejem. enojo, amor, alegría, modestia, compasión, etc.)
  • Cuidado del habla

El grupo cuenta con una biblioteca que tiene una cantidad óptima de libros para poder desarrollar estos temas.

En lo que concierne al aspecto social, emocional e intelectual veo que es bueno el alimento que se consume en las sesiones pues existe un ambiente de respeto y fraternidad entre los miembros, en respecto a lo físico de a poco se empiezan a incorporar algunas actividades físicas de ejercitación, pero no todos han tenido la oportunidad de participar, en el aspecto espiritual desarrollando todos los demás, este se nutrirá de forma adecuada, por cierto ahora que inicio el año 5771 del calendario universal se hizo un ameno convivio al que asistieron algunas personas estuvo agradable y amena la convivencia. 

Es necesario aclarar que los dos últimos puntos de la estructura de estudio que tiene el grupo, sirven para reforzar y perfeccionar el cumplimiento de los 7 Mandamientos Universales, por ejemplo si algún defecto emocional te hace caer en la inmoralidad sexual (No relaciones sexuales ilícitas) por ejemplo el enojo, mediante la práctica de ciertos conocimientos puede ser que logres alejarte de ello, claro que esto no aplica para todo ni para todos, pero aun así es correcto y de bendición ampliar los conocimientos que puedan servirnos para refinar nuestro comportamiento, y habrá quien necesite consultar un Psicólogo para poder destrabar correctamente el plano de las emociones, pues regularmente ese trabajo no es sencillo y diversos son los factores que intervienen para que esto sea fácil o difícil, pero como lo mencione recientemente en un texto, existen las sesiones de CTERAPIA a cargo del More Yehuda en su calidad de Psicólogo y Maestro, mediante esas sesiones es posible destrabar el plano de las emociones, que en determinado momento nos esclaviza y perjudica bastante.

Ya por último quiero compartir una reflexión con ustedes acerca del tema que expusieron en la última sesión del “grupo Noajico”

El tema fue “Dar a la gente el beneficio de la duda y Juzgar favorablemente”

Tenemos un Mandamiento que es “Establecer cortes y leyes de Justicia”

Se podría pensar que solo quien está sentado en la silla de un juez, tiene la capacidad de ejecutar este Mandamiento, pues en las cortes es donde normalmente se hacen valer las leyes (cuando estas no se respetan entre nosotros), y de hecho si efectivamente es así, en las cortes se hacen respetar las leyes, pero no debe de escaparse a la vista un detalle mínimo aunque no menos importante, de hecho todos a cada instante de la vida estamos emitiendo juicios o juzgando acciones más o menos de forma consiente y más o menos de forma constante, regularmente en la vida tomamos decisiones basadas en juicios o juicio personal, y de ese modo nos conducimos la mayor parte de la vida “tomando decisiones basadas en los hechos o circunstancias que nos presenta la vida cotidiana” todo esto de acuerdo a la individual perspectiva de cada uno de nosotros.

Pero a veces por la limitada visión de las cosas o por la falta de entendimiento y conocimiento, tomamos decisiones equivocadas, que causan malestar al que las toma y el que está relacionado con ello.

Por eso es que debemos de juzgar de forma favorable hasta que no podamos tener los elementos suficientes para tomar una decisión más acertada, por ejemplo me paso hace poco:

Conocí a una persona en una reunión de amigos, entre charla y charla me comento que su situación fiscal necesitaba ser regularizada, quede de visitarlo más adelante para platicar más calmadamente acerca del asunto, al poco tiempo lo visite en su negocio, cuando llegue lo vi atendiendo algunas personas, de lejos levante la mano para saludarle, pero me vio y solo asintió fríamente, de momento me desconcerté pues cuando charlamos me pareció que surgió cierta simpatía, lo desconocí totalmente pues había sido cortes y amable cuando lo conocí y de momento me pareció grosera su actitud, me acerque más para saludarle cuando recordé que me habían comentado que tenía un hermano gemelo y que en verdad eran muy parecidos, entonces pensé que podría haber una posibilidad de que fuera el gemelo, me acerque y le hice una pregunta,

-buenas tardes -dije-¿disculpa se encuentra Jose?

-respondió el- no se encuentra salió a la plaza, pero regresa más en la tarde 

Efectivamente ¡era el gemelo! Pero se parecían bastante y de lejos más aún.

De momento me pareció que esta persona estaba siendo descortés, cuando realmente se trataba de otra persona, si hubiera pensado en voz alta seguramente me habría avergonzado mucho.  

A veces parecería que una situación es irrefutable sin embargo podemos llevarnos grandes sorpresas.

Por eso debemos de tener presente que muchas veces debemos de dar el beneficio de la duda o juzgar la situación de forma favorable, para no llevarnos una gran sorpresa.

Este es un tema extenso y cada situación en particular requiere de un análisis específico, pero el juzgar de forma favorable nos evita caer presas del enojo y crear resentimientos injustificados, que dentro de nosotros mermaran energías preciosas para construir un mundo mejor.

Nosotros fuimos creados con dos tendencias una hacia el bien y otra hacia el mal y en general hacemos cosas buenas y cosas malas, pero pocas personas son malvadas en potencia por ejemplo Hitler, Torquemada etc., todos los demás solo hacemos cosas malas por el simple hecho de fallar o haber sido adoctrinados así o incluso por habernos adoctrinado nosotros mismos así, pero  en nuestro interior siempre late la fuerza de hacer el bien, ya por eso debe de haber un mérito al efectuar nuestros juicios personales cada día.    

Para finalizar, quiero comentarles que el hecho de que de existan grupos de estudio de las 7 leyes es un gran bálsamo para la humanidad, pues por cada pequeña acción en concordancia con el Bien que alguno de sus miembros ejecuta, una gran Bendición desciende desde lo Alto, pues con esas actitudes el mundo es un lugar mejor cada día para todos nosotros.

¡Hasta pronto!

imagen tomada de http://arqueologiamendoza.com/galeria/index.php?level=picture&id=196