La verdad es que se trata de una realidad el hecho de que en muchos casos de noajidas concientes de su identidad, tales como el mio, en los cuales nos acostumbramos tanto a leer la biblia cristiana que llegamos a utilizarlas como si en verdad su contenido fuese propio, la interpretamos a nuestro modo personal, hicimos filosofia, metodos particulares de estudio e interpretación, la enseñamos y todo lo demas. Ahora al encontrar una verdad de tamaño de un edificio, que todo ello es potestad unica del pueblo Judio, me quedo al principio como un vacio, es como estar comiendo un helado y de pronto nos lo arrebatan, claro que no era nuestro el helado. Pero esa sensacion de que nos falta algo debe durar poco tiempo, ese un espacio que debemos llenar con cultura noajica de la mejor calidad, como la que se da en Fulvida, todo depende de nosotros el dejar las adicciones. Es el mismo problema que tiene el fumador de llevarse a la boca el cigarrillo que le hace daño, sintiendo el agradable pero mortifero placer de fumar.
Archivo de la etiqueta: Opiniones e ideas
#Rezos /#
#serjudio.com /#
Dios hace su parte…
Querido socio, si aún estas con vida es porque Dios confía en que puedes mejorar y crecer. El cambio empieza en arrepentirse con sinceridad para que la Luz divina que yace en nuestro ser, la cual proviene del Padre, ilumine con todo su esplendor.
No temas a los errores, pues ellos son trampolines hacia el crecimiento personal. No los justifiques para cometer “errores voluntarios”, pues ello demuestra que algo anda mal dentro de uno mismo. Ante la duda en ciertas acciones debes abstenerte. Ello es lo mejor para no caer en errores des-conocidos.
La vida se disfruta cuando se la vive como el Padre dispuso que se viviera y, aunque solemos desviarnos, aún así El te da la oportunidad de que vuelvas y retomes las riendas de tu vida, tal como esta dicho: “Agradezcan a Dios pues El es Bueno, pues Su Bondad es Eterna.” – Salm. 136.
Mi querido lector, antes de conocer el Noajismo no eras más que una oveja perdida sin rumbo, sin dirección, guiada o no, por un pastor que te hacia repetir lemas. Recuerdas esos aleluyas que alegraban tu corazón, ese famoso dicho “¡Viva Fulano! que hacia enerverte la sangre de orgullo.
Pero ahora ya no es así, aunque hay personas que prefieren cerrar los ojos a la verdad y vivir el engaño, ya no es así. Ahora realmente eres conciente de tu identidad, sabes que la vida es simple, que la verdad es la verdad y la mentira la mentira. Pero hay un dato pasado por alto, que quiero compartirlo contigo, para que te recuperes y sientas el verdadero orgullo gentil por conocer el Noajismo, tal como esta dicho: “El secreto de Hashem es para quienes Le Temen y Su Pacto les hace conocer.” – Salm. 25:14.
Debes sentirte sumamente agradecido por conocer el Noajismo, el Pacto que el gentil tiene con Dios desde la creación del mundo hasta la eternidad. Dios sabe que Le Temes, que Lo respetas, que quieres serLe leal, que Lo Quieres, y por ello te ha enseñado o dado a conocer el Noajismo, Su Pacto con la humanidad. Deja de lado la dejadez, la pereza, la tristeza, y medita cuan importante es que conozcas El Noajismo, que lo vivas, que seas una pieza más del rompecabezas de constructores de shalom.
Mi querido socio, Dios hace Su parte, ahora depende de ti hacer la tuya.
Fulvida sin dudas es tu hogar, pero tambien esta alli el mundo, aguardando a que hagas la preciosa parte que puedes hacer.
El leal a Dios es Noajida.
Stephen Hawking: «Dios no existe»
El físico y cosmólogo británico Stephen Hawking, autor de clásicos como «Breve historia del Tiempo» y «Agujeros negros», declaró que Dios «no existe» y agregó que la idea del Cielo o de la vida después de la muerte «son cuentos de hadas» para aquellas personas que temen morir.
Hawking declaró en una entrevista con el periódico inglés The Guardian que no hay nada después del momento en que el cerebro humano deja de funcionar por última vez.
El cosmólogo británico, de 69 años y quien fue diagnosticado a los 21 con la enfermedad degenerativa de esclerosis lateral amiotrófica, dijo que sus problemas de salud lo ayudaron a dejar de creer en Dios y a disfrutar más de la vida.
«He vivido con la posibilidad de una muerte temprana desde hace 49 años. No le temo a la muerte, pero no tengo apuro de morir. Tengo tantas cosas que hacer antes», dijo el prestigioso científico, miembro de la Real Sociedad de Londres, de la Academia Pontificia de las Ciencias y de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.
Hawking fue además titular de la Cátedra Lucasiana de Matemáticas (Lucasian Chair of Mathematics) de la Universidad de Cambridge hasta su jubilación en 2009.
Entre las numerosas distinciones que le han sido concedidas, el cosmólogo fue honrado con 12 doctorados honoris causa y galardonado con la Orden del Imperio Británico (grado CBE) en 1982, con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 1989, con la Medalla Copley en 2006 y con la Medalla de la Libertad en 2009.
«Considero al cerebro como una computadora que deja de funcionar cuando fallan sus componentes. No hay Cielo o vida después de la muerte para computadoras que no funcionan, ese es un cuento de hadas para personas que tienen miedo de morir», agregó.
Según Hawking, el universo «está gobernado por la ciencia».
«Pero la ciencia nos dice que no podemos resolver las ecuaciones directamente desde la abstracción. Necesitamos utilizar la teoría efectiva de la selección natural de Darwin para aquellas sociedades que más posibilidades tienen de sobrevivir. La ciencia predice que muchos tipos diferentes de universos serán creados espontáneamente de la nada. Es una cuestión de suerte que estemos aquí», continuó. (ANSA).
————-
¿Qué piensan?, ¿resentimiento?, ¿se aprovecha de la fe que la gente le tiene a aquello de «la ciencia afirma que…»?, ¿confusión?, ¿pruebas irrebatibles?, ¿hizo de la ciencia su dios personal?
PARTE I: El nuevo peligro no son los misioneros cristianos si no…
Parte I: De las razones que motivaron a la modificación táctica y estratégica a la hora de rebelar al individuo contra la voluntad divina.
Conforme el noájida avanza a través de la senda liberatoria del flagelo religioso, se llega a un punto donde las creencias idolátricas pasadas ya no afectan al noájida consciente de su identidad y no importa cuántos misioneros cristianos, budistas o musulmanes se arrimen, lo cierto es que ellos se dan cuenta inmediatamente que no tienen oportunidad y no siguen atacando.
Es por eso que dentro de los planes estratégicos y tácticos de los malvados, el envío de mensajeros que traten de regresar a las personas al status ante quo ya no surte efecto alguno y es necesario entonces incrementar la presión a través de mecanismos más sutiles. Justamente ayer acudí a una conferencia de la Superintendencia General de Valores de nuestro país, donde se daba un curso introductorio al mercado bursátil y al corretaje de este tipo.
A pesar de que el curso era sumamente básico y a decir verdad, un poco tedioso y aburrido, puesto que los temas a tratar eran temas hartos conocidos para personas que ya se han desempeñado en el área comercial y bancaria, lo cierto es que me sirvió para aunarlo al tema que hemos venido tratando desde semanas atrás en relación con un tipo especial de personas que ante la negativa de los noájidas consolidados, se ven en la imperiosa necesidad de modificar las estrategias o acaso estratagemas y tácticas combativas para poder cercenar al noájida consolidado y regresarlo al estado anterior en que se encontraba previo a la liberación de las cadenas idolátricas o peor aún, el ensuciarle el espíritu aún más compelíendole a transgredir normas inherentes y exclusivas a los judíos.
Recurriré entonces a la analogía de los tipos de inversionistas bursátiles y de los noájidas para poder transmitir la idea en cuestión. De forma muy somera explicaré cómo funciona el mercado bursátil y cuántos tipos de inversionistas hay. La decisión de analogar al noájida con el inversionista obedece a criterios de simpleza ya que la palabra inversionista o inversor proviene del latín in vertere, es decir, en depositar. ¿Qué se deposita? Se deposita cualquier ente en el tiempo o en el espacio que tenga una relevancia para el depositante. En este caso la inversión que el noájida realiza la hace en dinero, tiempo o especie. Estos no son necesariamente excluyentes y pueden combinarse de manera que puedan depositarse los tres o solamente dos o uno de ellos.
En el caso del mercado de valores ocurre lo mismo, el inversionista es una persona que decide invertir en el mercado a través de vehículos denominados como títulos valores cuya finalidad es el agilizar la transa de la comercialización de bienes y servicios que esos títulos valores representan. El inversionista en su sano juicio buscará siempre el rédito, es decir, la obtención de una ganancia a cambio de la abstención de disponer de su patrimonio de forma distinta a la que supone la colocación de los bienes en el título valor.
Debido a la volatilidad y la alta riesgosidad que presenta la actividad bursátil, los inversionistas son clasificados en dos grandes grupos donde el primero corresponde al inversionista no sofisticado o aquél con un patrimonio menor a un millón de dólares mientras que el segundo es el inversionista sofisticado que posee un patrimonio mayor a esa cantidad. Se ha determinado que este patrimonio debe de ser líquido, o sea, que debe de se dinero o bienes lo suficientemente fungibles para ser convertidos en dinero lo más pronto posible. El inversionista sofisticado se encuentra consolidado económicamente por lo que puede asumir riesgos que el inversionista no sofisticado no podría asumir debido a su limitante monetaria. De hecho la vasta mayoría de las personas caemos bajo la clasificación de inversionistas no sofisticados.
De igual manera, existe en el noajismo el noájida no consolidado y el noájida que sí lo está. El noájida consolidado es aquél que posee la firmeza y la solidez de carácter y conoce a fondo su identidad por lo que no es fácil que vaya a involucionar hasta alcanzar el status ante quo o inclusive llegar a niveles más bajos a los que se encontraba cuando era un idólatra.
Debido a esto es que las estratagemas y tácticas guerrilleras de los misioneros han experimentado una ineficacia más pronunciada ya que el noájida consolidado es como el inversor sofisticado; al encontrarse ambos en una posición de solidez y seguridad, el primer en el ámbito espiritual y el segundo en el económico, los intentos de los estafadores para tratar de robarles su patrimonio son en la mayoría de los casos fútiles debido a que en la vasta mayoría de los casos, el inversor sofisticado es una persona que ha acaudalado su acervo material de manera gradual y por lo tanto ha desarrollado habilidades analíticas que sus contrapartes no poseen. En el caso del noájida consolidado ocurre una situación similar ya que el desarrollo y adquisición gradual de los conocimientos necesarios para llevar a cabo una vida por buenas lides han supuesto una interacción con un medio que se torna cada vez más hostil y por lo tanto deben de desarrollar ciertas habilidades para poderse mantener a flote.
Con base a lo anterior y debido a las bajas posibilidades que tienen los misioneros idólatras de revertir el status quo del noájida consolidado es que han tenido que repuntar sus estrategias y tácticas para que el efecto deseado se incremente. Ocurriendo a las tácticas análogas conocidas desde antaño y utilizadas contra el pueblo judío de crear insurrección fermentada desde el ámbito interno, los misioneros del mal han adoptado la misma mentalidad para poder estocar a los noájidas consolidados.
Para dar sustento a nuestra tesis recurriremos a ejemplos históricos. Recuérdese los traidores que estaban dentro de la nación judía y que fueron los que se hicieron pasar por judíos para crear conmoción y intentar hacer que los judíos se revelaran y adoraran al becerro de oro, al caso del colgado que buscó tergiversar la ley para que los judíos la transgredieran, etc. La razón para buscar la insurrección tiene que ver con factores legales y específicamente mencionados por Moshé en los que no es necesario ahondar salvo para mencionar que una de las menciones que se hacen es que siempre y cuando los judíos siguieran los mitzvot tendrían la protección divina y que de no hacerlo entonces el caos y el dolor recaería sobre la nación. De hecho es así como basados en esta premisa, los mensajeros del mal buscan atacar desde el fuero interno a la gran nación judía para dar la estocada final, puesto que ellos mismos saben que, siempre y cuando los judíos sigan los mitzvot a cabalidad, no existe la posibilidad de la victoria por parte de aquéllos que arremeten contra el pueblo escogido.
Este mismo principio de ataque es el que se ha adoptado para el ataque contra los noájidas entendiéndose que al no ser nosotros miembros del pueblo escogido, nos encontramos en un estado de mayor vulnerabilidad y por tanto el destino de recursos estratégicos y tácticos contra los gentiles justos no es tan cuantioso como el que se destina contra los embates dirigidos a la nación judía.
Para poder lograr esto los mensajeros del mal han debido de replantear sus planes de ataque y adecuarlos a las circunstancias de los atacados. Durante mucho tiempo la labia y la tergiversación de palabras por parte de los misioneros cristianos llevó a muchos judíos y noájidas fieles a involucionar y adherirse a las sectas de turno, sin embargo los esfuerzos de judíos piadosos y de noájidas fieles ha llevado a que las bases falsas con las que los misioneros atacaban hayan sufrido un menoscabo considerable que no les permiten alcanzar sus cometidos de la forma que ellos lo desean.
Debido a esto es que los misioneros del mal encontraron como mejor táctica el recurrir a lo que denominaremos como el fenómeno hebraico que supone la modificación y adopción de comportamientos y lenguaje hebreo e inclusive judío para poder engañar al noájida consolidado. Cuánto más consolidado se encuentre el noájida, mayor será el grado de sofisticación con que los mensajeros del mal actuarán.
El noájida consolidado es usualmente una persona docta en el tema noájida y por lo tanto las tácticas que se han de aplicar por parte de los malhechores deben de adecuarse a ese nivel de conocimiento y deben de adherirse lo más posible a lo que el noájida sofisticado esperaría. Para poder lograr esto es necesario el empleo de judíos o mejor dicho, de personas con descendencia judía pero que son traidores solapados, para que el noájida crea que existe legitimidad en lo expuesto.
El grado de sofisticación aumenta conforme al conocimiento del noájida y, dado que la misión del malvado es que la persona atacada se aparte del camino del bien, poco lo importa entonces al malhechor si el noájida involucionado adora a un colgado o si más bien le sigue repudiando pero comienza a transgredir preceptos y normas que son exclusivos para el judío porque la meta es que el noájida se revele contra la voluntad divina y el vehículo que utilice para tal rebelión es de secundaria importancia con respecto al fin principal.
Por el momento dejaremos este comentario hasta aquí debido a la complejidad del asunto, en una próxima ocasión abordaremos el tema de las tácticas utilizadas para lograr esos cometidos. Que El Eterno les bendiga a todos y que estén muy bien.
Es una gran diferencia!
La diferencia entre TERRORISTA y ANTI-TERRORISTA
No es lo mismo! protegerse para luchar que luchar para proteger.
No es lo mismo! protegerse mientras combates que combatir mientras proteges.
No es lo mismo! rezar para exterminar al contrario que rezar para no tener que hacerlo.
No es lo mismo! llevar contigo una bomba por si fuese necesario! a llevar contigo medicamento por si fuera necesario!.
No es lo mismo! combatir pera someter que combatir para liberar.
No es lo mismo! decir a tu familia, si D-s quiere moriré! a decirle, si D-s quiere volveré!.
No es lo mismo! ser socio del caos y la mentira de una religión que ser socio de la luz y la verdad en FULVIDA!.
SHALOM
por Jose colin
Mi perfil en Facebook, ante los demás
Soy uruguayo.
Tenemos nuestro símbolos patrios, nuestros emblemas de identidad.
Objetos, colores, uniformes, casacas deportivas, héroes, himnos, historias, relatos, anécdotas, cánticos, lemas, regiones, banderas, etc.
Uruguay es La Cumparsita, Gardel, Diego Forlán, la Celeste, la bandera bicolor, Artigas, Batlle, el mate y termo con bizcochos, la rambla de Montevideo, el asado el 1º de Mayo, habernos creído la Suiza de América, la carne vacuna criada a campo abierto y extensivamente, el alfajor, Punta del Este, Rocha, Colonia del Sacramento, la final de Maracaná, Nacional y Peñarol-Peñarol y Nacional, la rivalidad con los porteños (habitantes de Buenos Aires), el palacio Salvo, ser un país laico pero que tiene por feriados no laborables festividades cristianas, creernos los campeones de América y del Mundo, creernos los más cultos de las Américas, creernos libres de racismos y prejuicios, creernos el ombligo del mundo pero con más humildad que los argentinos, eso es Uruguay y algunas cosas más.
Si voy por el mundo, supongo que tengo a mano mi pasaporte “Oriental”, que es así como se llama a los uruguayos.
Mi cédula de identidad. Mi credencial cívica, aunque no la vaya a usar en el extranjero. Mis recuerdos, mis amores, mis afectos, mis apegos.
Mi idioma, con sus modismos, giros lingüísticos, entonaciones, deformaciones, porque hablamos “uruguayo”, que es un derivado del español, muy parecido al “argentino”, pero que no es lo mismo. Aquí decimos “tá”, “bó”, “botija”, “bichicome”, “el cante”, lo entiendas o no.
(Tal como tú tienes todo esto, tal cual, pero de tu propia identidad).
Si estoy en Madrid o Caracas y veo la bandera de franjas azul punzó sobre fondo blanco, con el sonriente sol dorado a su lado superior, me siento identificado y curioso por saber de qué se trata.
Si juega la Celeste, hinchamos por ella, aunque no tengamos mucha gloria verdadera en los últimos años, lustros o décadas.
Si me hablan de la rambla y estoy en Acapulco, la comparo y la extraño.
Soy uruguayo, y me resulta ingrato que me confundan por mi acento o modos de hablar con un porteño.
Es que somos un pequeño país, una nación que entra en un barrio de Sao Paulo o Ciudad de México, pero orgullosos de nosotros, aunque con conflictos de enano entre gigantes, un gran complejo de inferioridad poco trabajado en terapia.
Está claro hasta aquí mi breve retrato, aunque quizás no tienes mucha idea de qué se trata “rambla”, “mate”, “bó” o “Rocha”.
Te percatas de que tengo una identidad y cosas que la refieren.
¿Qué dirías de mí, o de cualquier uruguayo, que se presentara ante los demás con cosas tales como:
el obelisco de Buenos Aires, el Cristo Redentor carioca, la Torre Eiffel, la Casa Blanca gringa, la efigie de Nelson Mandela, el escudo de Gran Bretaña, la camiseta de la selección de Italia, el sauerkraut (chucrut) alemán, el shawarma mediterráneo, saludando como un sensei de artes marciales oriental, hablando con una mezcla de palabras inglesas-latinas-japonesas, y sin nada que me hiciera dar a conocer como perteneciente a la nación uruguaya?
Probablemente estarías de acuerdo con que no estoy muy orgulloso de mi uruguayismo o uruguayidad, o que soy un ignorante, o me repele mi identidad, o que me atrae lo ajeno más que mi propio tesoro.
Probablemente verías deplorable que tuviera tan poco afecto por mí mismo, por lo mío, por lo de mi acervo, por mi cultura, por mi pasado, por mi presente.
Quizás peor si ni siquiera fuera tan cosmopolita, sino que me concentrara en una sola presencia extranjera: presentara la bandera tana como propia, hablara en una mezcolanza italo-hispana, comiera pasta y pizza a diario, hablara de «la mia mamma», festejara los goles de la azzurra, soñara con el pasado imperial de los césares, coleccionara objetos de la cohortes imperiales, llamara a mi hija «Milanessa», y a mi hijo «Udinese», anhelara mis vacaciones pasarlas en la isla de Capri, bebiera vino de la Toscana, mencionara los códigos de la Famiglia, y diera la impresión poderosa de ser un italiano más… aunque con incongruencias, faltas de conocimiento y otros datos que para el ojo entendido demostraría mi falsa identidad itálica.
Entonces, ¿qué me dirías de los “noájidas” que se presentan en Facebook, por ejemplo, con imágenes de estrellas de David, con palabras en hebreo (a veces pésimamente escritas), con lemas judíos, con citas judaicas, con saludos hebreos, con permanentes referencias a asuntos internos de Israel, con aspiraciones judaicas, con sentimiento nacional sabra (israelí), pero escasamente si tienen algún modo de representar su verdadera identidad, su misión, su esencia noájica?
¿Qué me dices de todos esos buenos gentiles que se andan presentando aquí y allá de forma tal que uno no sabe si el otro es judío natural con algún padre de origen gentil, judío legal que se convertido formalmente al judaísmo, gentil que usurpa la identidad judía tales como los “mesiánicos”, gentil confundido espiritualmente, o un noajUda?
Veo a diario noájidas que no pronuncian ni una idea gentil, pero abundan en disparar palabras en supuesto hebreo, citar a rabinos, mencionar obras judías, resumir noticias de diarios de Israel, comentar acerca de la política israelí, rezar con “tejilim”, saludar con “chalon”, poner estrellas de David como perfil, entre otras cosas muy poco noájidas y muy “demasiado” judaicas»?
Si tienes orgullo de ser quien eres, si te amas, si re respetas, si te conoces, si te cuidas, si respetas el derecho y propiedad del otro, si respetas a Dios, entonces aprenderás acerca de tu propio tesoro, lo cuidarás, te presentarás como noájida, con tus propios símbolos, en tu idioma, con tus frases, con tus formas que te corresponden.
¿O no?
No…
Aprender a ver… de verdad.
Desde chico siempre me gustó dibujar, seguramente muchos de ustedes tambien tuvieron tal gusto o lo siguen teniendo. En mi caso siempre fui el hijo o el primo que le hacia los dibujitos a los demás, incluso llegué a ganar algun dinero haciéndole dibujos a otros.
Con el paso del tiempo fui mejorando, pasé de la simple c0pia y calco a dibujar objetos reales, paisajes, animales, intentos de retratos de personas, etc. Nunca hizo falta en algun cuaderno de la escuela un dibujo en la última hoja.
Recuerdo cuando chico haber insistido en estudiar en la escuela de Artes, pero por cosas de la vida no pude. Esto resultó en que ese potencial artistico fuese cayendo en el letargo. Pasé del dibujo frecuente al dibujo ocasional. Estoy hablando de un periodo de unos 20 años más o menos.
Meses atrás retomé el dibujo con otro enfoque. Esta vez queria captar las cosas como otros las ven, como yo mismo las veo. Durante 7 meses he estado dibujando todas las semanas, pasé del dibujo simple al retrato realista. Les confieso, en mi vida jamás pensé que seria capáz de dibujar realismo.
Para que esto fuese posible tuve que evaluar qué hacia falta para captar la esencia de las cosas. Antes de contárselos me gustaria mostrarles cómo es este proceso del dibujo y cómo se relaciona con el noajismo.
En primer lugar, como se ha dicho muchas veces aqui, tenemos prejuicios. Damos por sentado ciertas cosas, creémos que sabemos algo y que lo entendemos a pleno. Por ejemplo, si les pido que ahora mismo tomen un lápiz y una hoja y que RAPIDAMENTE dibujen un ojo seguramente harán algo más o menos así:
Seamos honestos, ¿Cómo es posible que una persona con varias décadas de edad haga un dibujo tan pobre?, ¿Cómo es posible que todos los dias nos vemos al espejo, vemos las caras y por ende los ojos de otras personas, y aun así no sepamos cómo se ve en realidad un ojo?
Algunos dirán: «dibujar es un don», «sólo pocos saben dibujar», «soy malo para el dibujo», «no sirvo para dibujar» y mil excusas más.
Veamos una imagen de un ojo real:
¿Puedes ver las diferencias? ¿Qué hace que tu dibujo no luzca como la imagen real? La respuesta es: La COSTUMBRE. Dar por sentado, creer que sabes algo, creer que conoces algo, pensar que lo sabes todo. Creer que sabes cómo luce un ojo pero al momento de manifestarlo darte cuenta que aquello que creias saber en realidad no lo sabias tambien como creias.
Entonces, ¿cómo hacer para captar la imagen real de algo? Fácil, aprender a VER. Entrenarse en los detalles, ver todo como un rompecabezas, ver formas, partes, secciones, luces, sombras, lineas, detalles, detalles, detalles.
Pasemos del dibujo al noajismo:
¿Crees que sabes noajismo? Quizás estés seguro que lo conoces a detalle, que serias capaz de ilustrarlo a otros, pero, seamos honestos, si tu percepción de un ojo es tan pero tan pobre a pesar que toda tu vida haz estado viendolos en ti o en otros, ¿qué crees que es tu percepción acerca del noajismo y sus implicaciones? Vayamos más allá, hablemos de judaismo «Yo sí sé judaismo», «Yo sé Torá», «Yo sé hebreo», «Yo sé cabala», «Yo sé misticismo», «Yo sé conversión», «yo sé… yo sé… yo sé…»
¿No es curioso que cuando nos ha dado por explicar algo de Torá inmediatamente el Moré debe hacer la corrección? ¿Por qué? ¿Porque es un maestro judio ortodoxo amargado que no quiere que otros le toquen su Torá? O más bien, porque como maestro el conoce a detalle el tema y sabe cuando alguien se equivoca y las implicaciones de tales errores. En este caso él es el maestro que sabe cómo luce un ojo, y nosotros hemos sido los que creemos saber cómo luce un ojo.
Y así podria seguir aplicándolo a cada plano de la vida.
Finalicemos diciendo que se hace necesario aprender a ver, no dar por sentado que sabemos cómo son las cosas, no olvidarnos cómo luce un bosque pero tampoco como luce un árbol. No demos las cosas por sentado, no pensamos que YA lo sabemos y que no hay nada más para aprender. Sigamos aprendiendo.
Cuando entendí que eso de «se nace sabiendo dibujar» no es más que un mito, y que lo primordial para aprender a dibujar es aprender a ver de verdad, entonces pude hacer esto:
Y esto:
Un poco de matemáticas: Infinito
Infinito no tiene final Infinito es la idea de que algo no termina.
En nuestro mundo no tenemos nada así… así que nos imaginamos que viajamos más y más, intetando llegar allá, pero no es realmente infinito, sólo es un intento de alcanzarlo.
Así que no lo pienses así… sólo estás esforzando el cerebro para nada. Piensa simplemente en “interminable”. Nunca llegarás, así que no lo intentes.
Ejemplos: La distancia al “final” de un círculo (¡no hay final!)
Infinito no aumenta
Infinito no “está creciendo”, ya está completamente formado. A veces la gente (incluído yo) dice “sigue y sigue” y suena como si estuviera creciendo o algo así. Pero infinito no hace nada, sólo es.
Infinito no es un número real
Infinito no es un número real, es una idea. Una idea de algo que no termina.
Infinito no se puede medir.
Incluso las galaxias lejanas no pueden competir con infinito.
Infinito es sencillo
¡Sí! En realidad es más sencillo que muchas cosas que sí tienen final. Porque si algo tiene final, tienes que definir dónde está ese final.
Ejemplo: una “línea” tiene longitud infinita, va en las dos direcciones sin final. Si tiene final es un rayo (uno) o un segmento (dos).
Hay números impresionantemente grandes.
Un Gúgol es un 1 seguido de cien ceros (10100) :
10,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,
000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000,000
Un gúgol ya es más grande que el número de partículas en el universo conocido, pero existe el Gúgolplex. Es un 1 seguido de un gúgol de ceros. Ni siquiera se puede escribir el número, porque no hay
suficiente materia en el universo para escribir los ceros
¡Y es fácil crear números mucho más grandes que estos!
Pero todos estos números son “finitos”. Lo que significa que hay un límite a lo grandes que son.
Pero ninguno de esos números se acerca un poco a infinito. Porque son finitos, e infinito… ¡no es finito!
Conclusion
Infinito es una idea simple: “interminable”. Casi todas las cosas que conocemos tienen fin, pero infinito no.
Estableciendo en la creacion, niveles entre las creaturas, pueden ser denominados, evolutivos o de inteligencia y colocando al hombre como cuspide actual de la misma, no podemos evitar decir que respecto a Infinito no tiene comparacion ni medida.
Con respecto a Infinito estamos en el mismo plano que la creación misma.
Esto llevado al plano de la religiosidad, es absurdo que cualquier ser humano que proponga y ofrezca liturgias y formas de culto que hagan pensar que el hombre puede elevarse o conectarse al Eterno.
Mas absurdo es seguirlo en sus mentiras.
Es absurdo el solo hecho de querer atribuir significado a lo Inifito mas alla de de lo que el infinito determinar como significativo.
Porque lo demás esta indicado desde lo finito, que no es Infinito
El consejo es hacer lo que D-os manda.
Ser simple, como Infinito.
Actitudes Deterministas
En el acervo popular existe un sin fin de frases que se usan o usamos para expresar que lo sucedido o por suceder ya está determinado. Lo grave de esto es que en mayor o menor medida las aceptamos como verdades inquebrantables, las usamos y las transmitimos a otros.
Ejemplos:
– El que nace chicharra muere cantando
– Aunque la mona se vista de seda, mona se queda
– De tal palo tal astilla
– Unos nacen con estrella, y otros nacen estrellados
– Genio y figura hasta la sepultura
– El que con monos se cría mono se queda
– Dios le da pan al que no tiene dientes
Existen otras expresiones que forman parte de nuestro lenguaje:
-Fulano ME hizo enojar
-Cómo ME molesta que no me paguen a tiempo
-ME pongo de mal humor si no tengo saldo en mi teléfono celular
-FUI engañado y por eso promoví la idolatria
-El judaismo es la solución a MIS males
-Espero que el dia de hoy SÍ sea bueno
En fin, esas frases se componen de un sujeto que expresa que su bienestar se encuentra en algo exterior. Falsamente se cree que si y sólo si otros hacen de su vida un guión para complacer la nuestra, entonces alcanzaremos la felicidad.
La solución a esto se encuentra en tomar conciencia que nada de lo que suceda alrededor nuestro deberá afectar nuestro estado de ánimo. Quizás no podamos elegir qué cartas nos toca en una mesa de poker, pero depende de nosotros cómo jugarlas.
Ejemplos sobran, uno que me gusta mucho es el paciente que padece de una enfermedad terminal pero cuya actitud hacia la vida termina siendo de ejemplos para muchos. Tristemente muchos descubren esta gran verdad en su lecho de muerte, otros ni siquiera eso.
En fin, procuremos no hacernos las victimas, nada más infantil que culpar a otros de cómo nos sentimos.
Como ha enseñado aqui nuestro Moré, «tu felicidad no depende de lo que otros hagan con su vida, depende de lo que tu hagas con la tuya».