Se mencionó en la parashá REE, “patoaj tiftaj et iadejá” – “abrir, abrirás tu mano” (Devarim/Deuteronomio 15:8) para darle tzedaká (caridad, justicia social) al hermano necesitado.
Pero, ¿por qué el uso del verbo repetido en conjugaciones diferentes? ¿Qué viene a enseñarnos el “patoaj tiftaj”?
כִּי פָתֹחַ תִּפְתַּח אֶת יָדְךָ לוֹ וְהַעֲבֵט תַּעֲבִיטֶנּוּ דֵּי מַחְסֹרוֹ אֲשֶׁר יֶחְסַר לוֹ:
Algunas ideas.
1- Es un modo lingüístico corriente en tiempos de la Torá que no tiene mayor trascendencia.
2- Abrirás tu mano tantas veces como sea necesario, no cumples con dar una vez, sino debes hacerlo de manera cotidiana.
3- Abrirás tu mano pero no como un avaro, sino que lo harás ampliamente.
4- Abrirás tu mano y ayudarás a tu hermano a para que él reciba con su mano abierta, mitigando su vergüenza por ser receptor en estado de indefensión.
5- Abrirás tu mano porque es tu deseo, pero también lo harás aunque no lo sea, porque es un mandamiento que debes cumplir.
6- Abrirás tu mano para proveer de acuerdo a la necesidad de tu hermano y no solamente de acuerdo a tus propios cálculos.
7- Abrirás tu mano para donarle dinero, pero también puedes entregarlo como un préstamo que lo responsabilice e incentive a tratar de devolvértelo.
8- Abrirás tu mano y déjala abierta, porque de Arriba Alguien está atento para proveerte a ti también. Pero… que no sea éste el motivo constante de tu “bondad”, por favor.
¿Se te ocurren otras ideas?
¿Tienes información de exégetas judíos que brinden otras perspectivas?
¿Cómo te sirve este post para tu vida cotidiana?
(Publicado originalmente para serjudio.com, contiene interesantes aportes para la espiritualidad noájica).