Dijo el ofuscado Labán a su pariente Iaacov: “¿por qué me has robado mis dioses?”(Bereshit / Génesis 31:30) ¡Qué triste la vida de aquel que pone su confianza y “fe” en los dioses! Porque todos, absolutamente todos, somos NESHAMÁ, es decir, chispa divina, parte del Creador, espíritu, esa es nuestra esencia trascendente que reposa en […]