«Pero el faraón respondió: –¿Quién es el Eterno para que yo escuche su voz y deje ir a Israel? Yo no conozco al Eterno, ni tampoco dejaré ir a Israel.»(Shemot/Éxodo 5:2) “¿Cómo se atreve a decirme/hacerme eso?”. Con esa frase el EGO te hizo tropezar para caer en su telaraña que cada vez se va […]