Bienaventurados los…

No se trata de saber,
sino de ser.
Ser uno. Unificado. En armonía.

No se trata de haber leído muchos libros, ni de repetir frases,
sino de hacer carne el conocimiento 
para que esto te lleve a la unidad del ser.

No se trata de ser sumiso a un líder y a una doctrina, sino de ser tu propio amo, en bondad, en justicia, en autenticidad.
Atiende a tus maestros, respeta a tus guías, encuentra la enseñanza que proviene de toda criatura.
Que tu conciencia se amplíe y siempre agradece.

No se trata de meditar sobre espiritualidad,
sino de hacer que lo material reluzca en su propia espiritualidad.
Ser uno. En armonía. Ser uno mismo.

No es en la religión que se encuentra Dios,
sino en vivir de acuerdo a Su Voluntad, tal como Él la manifestó para ti.

Se trata de amarte a ti mismo.
Sí de amarte, a ti, a quien eres en esencia, a quien estás siendo.

Así,
solamente así puedes amar al prójimo y amar a Dios.

El resultado será tu dicha, alegría sincera.

8 comentarios sobre “Bienaventurados los…”

  1. Gracias Moré

    totalemte de acuerdo, de que sirve ser religiosos si no podemos ni queremos ver las necesidades del que esta al lado?. O si vamos en contra de la voluntad de dios, haciendo cosas que nos degradan moral y espiritualmente?

    yo creo que la clave esta en estas sabias palabras:
    «Se trata de amarte a ti mismo.
    Sí de amarte, a ti, a quien eres en esencia, a quien estás siendo.»

    cuando nos amamos y respetamos a nosotros mismos, podemos extender ese amor y respeto a quienes nos rodean.

  2. Gracias moré, sabias palabras,

    «hacer que lo material reluzca en su propia espiritualidad»

    Que cierto, es aqui; no en en cuento que reboza de palabras sin sentido, cuyo «reino de los cielos», aleja a muchos de vivir aqui y encontrar oportunidades para reales para trascender.

    solo seremos capaces de amar, cuando nos amemos, cuando entendemos la belleza de nuestra esencia, cuando vivamos aqui,como si fuera lo que esperamos para el más alla,

    cuando al mirarnos nos veamos «tal y como somos» con lo bueno y lo perfectible, cuando trabajemos por ser mejores, mientras sin darnos cuenta mejoramos aquello que nos rodea… estonces; no cabe duda:

    «seremos inmensamente felices»

    Un abrazo

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