Te presento aquí unos pocos consejos que desde la sagrada Tradición nos llega para fortalecer los vínculos con tus hijos.
Síguelos, aprovéchalos y toda tu familia será la que vivirá con dicha y bendición.
- Habla, no precisas ladrar. ¿Acaso eres perro o lo son tu hijos?
- Mantén en un tono mesurado tu voz. ¿Crees que te escuchan mejor si gritas?
- Endulza tus palabras. ¿Te parece que beneficies a la autoestima de tu hijo si lo desprecias con tus dichos?
- No mientas. ¿Te sientes seguro cuando sabes que el que te habla de podría estar mintiendo?
- No exijas ni demandes. ¿Sabes que se conquistan imperios con ternura?
- Sé respetuoso. ¿A ti no te gusta que te respeten?
- Sé amable. ¿No te gusta cuando te tratan con amabilidad?
- Sé coherente. ¿Cómo te sentirías si a cada rato tu padre cambiara de opinión?
- Cumple con tu palabra. Si no estás seguro de poder hacer algo que has dicho, ¿no te parece más prudente si guardas silencio?
- Aprende a escuchar. ¿Acaso solamente tú tienes la voz en tu casa?
- Aprende a comprender. ¿Comunicarse es solamente emitir aire por la boca y que pase por los oídos?
- Manifiesta tu amor. ¿No te das cuenta de que tus hijos te saben más fuerte y recio cuando más tierno y justo eres con sinceridad?
- Sonríe. ¿No es contagioso el humor? Sea bueno o malo, siempre se contagia.
- No juzgues a tus hijos. ¿Acaso ellos son perfectos, o tú lo eres? Puedes juzgar sus acciones concretas, pero no sus intenciones ni su personalidad.
- Admite tus errores. ¿No sabes que creces como persona y a ojos de tus hijos cuando reconoces tus faltas y haces algo positivo para corregirlas?
- No compares a tus hijos. ¿Recuerdas cuando te comparaban con tu hermanito, primito o vecinito?
- Ten confianza en las capacidades de tus hijos. ¿Cómo crecerán si no les permites experimentar con seguridad el mundo?
- Sé generoso. ¿Todo tiene que tener un precio, todo está para comerciar?
- Sé justo. Ni demasiado estricto, ni demasiado permisivo. Tanto el látigo como la caricia perenne carcomen el alma de tu hijo.
- No presiones por demás. El camino del medio, severidad con bondad, ¿no es éste el modo de que las cosas funcionen?
Buenisimos los consejos, cuantos padres los llevarán a la práctica sin excusas?, cuantos hijos colaboraran sin excusas?… Gracias moré!!!
Un texto para mejorarme como padre siempre es bienvenido. Gracias Moré.
gracias a uds
gracias moré por sus consejos, son un tesoro!
a aplicarlos y luego compartir los resultados!!!
¡Trasmitimos más de lo que imaginamos a nuestros hijos!, siempre hay cosas mejores que ofrecer, y nunca es tarde para aprender.
muchas gracias Moré por estos valiosos concejos.
Para fortalecer la familia , muy bueno gracias.
a veces es dificil aplicar estos sanos consejos.
cuando el EGO irrumpe y manipula.
seamos conscientes y actuemos para q nuestros hijos sean lo mejor q pueden ser: ellos mismos!
Gracias Moré, excelentes consejos
Ahora que soy madre de dos, se siente el compromiso el doble de grande
Estoy muy de acuerdo con sus palabras en el comentario 8, lo mejor que pueden ser nuestros hijos es ser ellos mismos, y lo mejor que podemos hacer como padres es guiarlos y ayudarlos para que sea asi, no es facil, de hecho leyendo alguno de los consejos me encontre haciendo ops! pero bueno ahi vamos,con paciencia y mucho amor para no dejarnos llevar por el EGO. Me encanto, gracias nuevamente
;)
exelentes consejos more!, muchas gracias.