Hay gente con buenas intenciones, pero con escasa preparación, o quizás con poco apego a las limitaciones saludables que brinda la ley.
Entonces, llevados por sus deseos, por su «buena onda», quieren hacer cosas para mejor, pero terminan haciendo lo peor.
En el Tanaj encontramos varios ejemplos, de los cuales quiero compartirte uno:
«Cuando llegaron a la era de Nacón, Uza extendió su mano al arca de Elokim y la sujetó, porque los bueyes tropezaron.
Entonces el furor del Eterno se encendió contra Uza, y Elokim lo hirió allí por el atrevimiento. Y murió allí con el arca de Elokim.»
(2 Shemuel / II Samuel 6:6-7)
El Eterno había prohibido que cualquier tocara el Arca de la Alianza, había advertido que solamente los sacerdotes designados (y acondicionados perfectamente) realizaran la tarea de trasportar Su Arca.
En el relato que citamos, el rey David llevaba el Arca a Ierushalaim de un modo incorrecto.
En mitad del camino el Arca iba a caer, entonces el ágil y bien intencionado Uza quiso rescatar el Arca del estropicio.
Con sus manos desnudas, sin autorización, sin preparación, sin estar designado, sin permiso del Eterno, con toda la buena onda Uza se zambullió como arquero de fútbol para sujetar el Arca.
E inmediatamente, allí, rodeado de su buena intención, a causa de su buena intención, Uza murió como consecuencia de su acto irresponsable aunque noble, ajusticiado severamente por la furia del Eterno.
La conclusión: que tus buenas intenciones siempre estén dentro del marco protector de la legislación, porque si te sales, te perjudicas y quizás perjudiques a otros.
Si quieres sujetar la Torá, que es patrimonio y heredad de Israel, NO lo hagas; porque tus buenas intenciones no cuentan, si te apartas de la Senda que te dio el Eterno.
Si tocas el tesoro privado de Israel, aunque sea para algo que te parece bueno, recuerda a Uza y el furor del Eterno.
Tenlo presente, porque estás jugando con algo muy importante y sagrado.
Gran recordatorio. Eso va conmigo, ya que por lo impulsivo he hecho cosas, pretender ayudar sin habérmelo pedido, meterme en pleitos sin ser activo participante, opinar sin invitárseme a hacerlo , etc,.
Buen consejo así como el que me enseñaron diciéndome:
» No camines por veredas,
No cortes las praderas,
Y no te metas en lo que no te importa»
guau! nunca tuve mejor ejemplo de esto y que encima venga desde el Tanaj!
Muchas veces lo que cuenta no es la intencion, gracias Moré
querido sebas: la intencion cuenta, y mucho, pero siempre y cuando este dentro de la normativa.
y buen parrafo amigo jaime
claro, a eso me referia, siempre dentro de lo que se puede y debe hacer, gracias!
More.
Me quito el sombrero. Excelente texto.
Tratare de no volver a meter mi nariz , donde no me llaman. Y mucho menos con este gran tesoro. El TANAJ.
BUEN ARTICULO MORE GRCIAS POR SU SABIDURIA las buenas intenciones no debebn vilar las leyes y limites pautados como yo cometi el error de meterme con la TORA pensando que sabia como manejarla cuando no es asunto mio y debo hacerlo con alguien autorizado
del EGO se aprende