La Torá nos enseña que no sólo no podemos reducir al hombre a una imagen a nuestras dimensiones sino que nos recuerda que al ser el hombre a imagen y semejanza de Dios, es el propio hombre, a toda la humanidad a todas las naciones debe serle restituido su lugar verdadero, más allá de un conjunto de carne, más allá de un conjunto de pensamientos.
He aquí también la razón del profundo precepto de no matarás.
Creemos saber algo del hombre, pero recordemos que es imagen de Dios, por lo tanto un misterio que debemos desarrollar en nuestra vida diaria.
El verdadero noajita tiene gran respeto por la vida, por toda vida, más aún por la humana, incluida la propia pero en todas sus dimensiones no dejemos morir nuestra parte espiritual
Gracias More por está página de FULVIDA que nos permite aprender, estudiar, desarrollarnos como seres humanos completos…
Y Triste pero necesario es recordar el error de quienes olvidan y desprecian al ser humano en aras (dicen) de su dios robando la dignidad humana a hombre y/o mujeres…
Me pareció interesante el texto, pensé que seria más extenso.
Gracias por tu tiempo!
El verdadero noájida, respeta toda la creación la vida humana, la animal, la vegetal y hasta las cosas. El respeto, la paz, la amistad, el amor en si mismos y con LIBERTAD. No me vale lo de paz y amor, a golpe de IMPOSICIÓN Y VIOLENCIAS.
Muy bueno el texto Jpintos. Lo felicito por la aportacion muy satisfactoria que ha hecho!.
Con todo respeto aportare algo tambien:
Esta escrito: «E insuflo D-os el aliento de vida…» enseña que cada persona contiene en si misma una chispa espiritual, la cual nos hace a imagen y semajanza de D-os, por lo tanto «amaras a tu projimo como a ti mismo» indica que amemos a la otra persona por el solo hecho de que conparte algo de ti mismo, la chispa espiritual proveniente de nuestra fuente D-os.
Solo me queda decir, felicitaciones por este texto tan bello.