Tu parte de la bendición

El Eterno hizo saber a Rivcá que de los hijos que llevaba en su seno: "…el mayor servirá al menor" (Bereshit / Génesis 25:23).

Entonces, ¿por qué diseñó ella el plan de engaños y farsas para que su hijo preferido, el menor Iaacov, se hiciera con la bendición que correspondía al primogénito?
¿Acaso no había sido anunciado que el menor sería quien prevaleciera y obtendría el mando espiritual (derechos de primogénito) de la familia?

Podemos intentar dar dos respuestas en esta oportunidad.

Están los que mencionan que Rivcá se crió en una familia de engañadores, gente dedicada a la astucia y el engaño. Por si fuera poco, gente inmersa en la idolatría y serviles a sus EGOS.
Por supuesto que al pasar a morar junto a Itzjac fue aprendiendo un estilo de vida más justo y bueno, el correcto para el noájida (recordemos que ellos eran noájidas).
Sin embargo, aún no había logrado evolucionar completamente de su primera educación.
Quizás todavía la afectaba la idea del politeísmo, de que los dioses son poderosos pero no todopoderosos, que los dioses tiene falencias, que los dioses pueden ser manipulados con artes mágicas (entre las que se incluyen invocaciones, sacrificios, ofrendas, etc.), que los dioses a veces precisan de la ayuda de las personas para cumplir con sus misiones.
Quizás este veneno idolátrico aún devoraban alguna parte de su corazón, sumado a la conducta de bajeza que mamó desde la cuna, lo que la llevó al engaño con tal de alcanzar lo que el Dios había anunciado como una realidad futura.
Esta manera de interpretar el asunto nos da una imagen humana de la matriarca, quizás alejada de la imagen idealizada y plena de pureza que se nos hace común considerar; pero es una forma de interpretar las acciones de nuestros antepasados que nos sirven para encontrar que tal como ellos encontraron el camino para el crecimiento y la superación, así mismo podemos nosotros. No precisamos ser tzadikim guemurim –justos completos-, ni haber nacido en un hogar inmaculado, ni pretender llevar una vida de 100% perfección, sino hacer lo que está a nuestro alcance para llegar al mejor nivel que podamos.

Otra forma de verlo.
La matriarca confiaba plenamente en Dios, había logrado limpiar su alma de las impurezas adquiridas en su pasado, había desarrollado una vida de justicia y bondad acorde a su altura como matriarca de una nación santa.
En su confianza sabía que Dios hace su parte, pero que cada quien debe hacer la que le corresponde.
Dios no hará lo que tú puedes, tienes y debes hacer.
Entonces, ella supo que la bendición que le correspondía al más idóneo de los hijos debía ser adquirida y no solamente recibida.
Dios le anunció cómo debían ser las cosas, que el menor debería ser quien recibiera la bendición del primogénito, por lo cual, ella esperaba que Itzjac (su esposo) así procediera.
Pero, al no actuar de esa manera, ella reconoció que había que encaminar las cosas de acuerdo a como debía ser.
En realidad el tal engaño, hacerse pasar Iaacov por su hermano, era el último recurso para rectificar el error que estaba por cometer Itzjac.

Como ves, amigo lector, tienes dos opciones que parecen ser diametralmente opuestas, pero ambas comparten un núcleo en común: la persona no tiene que esperar que del Cielo le llueva su bendición, sino que es necesario que haga su parte, que cumpla la misión que le corresponde, que reme el trecho que le toca, para de esa manera usufructuar las bendiciones que están a su espera.
Tienes un ejemplo en la estada de los judíos en el desierto.
El Eterno hacia aparecer a diario el maná, pero era cada judío quien debía ir fuera del campamento para hacer su tarea de recogerlo.

En los Salmos leemos:

"Encomienda al Eterno tu camino; confía en Él, y Él hará.
Él exhibirá tu bondad como la luz, y tu juicio como el mediodía."
(Tehilim / Salmos 37:5-6)

Está muy bien rezar y esperar la ayuda del Eterno.
Esperar en Él.
Confiar, aunque no sabemos cual será la respuesta (quizás sea “no”, o “más tarde”).
Lo cierto es que Él es fiel y hace Su parte.
Y esa parte deja al descubierto lo que nosotros hemos hecho.
Nuestra bondad y justicia quedan alumbrados, como a la luz del mediodía.
Es decir, si hemos actuado como nos corresponde, siendo buenos y justos, entonces, obtendremos un beneficio, una bendición, una posteridad.
No esperemos sentados a que Él nos regale la vida, no nos humillemos más, no pretendamos hacer de Él un muñeco mágico que nos sirve como si fuéramos sus amos.
Dediquémonos a vivir con justicia y bondad en todo momento, siendo leales a Él; luego, confiemos en que Él siempre hace Su parte (aunque ésta no siempre nos agrade).

Tú tienes tu parte de la obra del Eterno, no esperes que Él haga lo que te corresponde a ti.
A construir shalom.

12 comentarios sobre “Tu parte de la bendición”

  1. Bendición del Eterno , Moré:
    Es maravilloso saber que hacemos Shalom como
    corresponde a cada uno, lo mejor es que si lo hacemos
    beneficiamos a la mayoria de los Noájidas, este era un tema
    que le preguntaria más adelante , pero ya me lo contesto, es
    respecto a la forma que pedimos al Creador, ÉL no es una varita
    magica y ya está, tenemos que hacer nuestro trabajo como Noájidas.
    Bendiciones y Hacer Shalom
    Excelente
     

  2. Muchisimas gracias Moré.

    Un gran llamado a la acción, a cumplir nuestra parte, a confiar en que: cuando hacemos las cosas correctamente bajo los parametros establecidos, el esfuerzo se traduce en esa ayuda que viene de aquel que TODO LO PUEDE, es un trabajo en equipo, que solo requiere voluntad, compromiso, lealtad  y la acción de nuestra parte.

    Un abrazo, y nuevamente gracias.

  3. Increible que con la guía adecuada, pueda ilustrarnos tanto tan solo un renglón de Bereshit.
    Hace unos dias mientras comía con mi madre, observé el gran trabajo que ella se había tomado en preparar la comida y en darnos una tarde agradable.
    Pensé entonces en regalarle algo y se me ocurrio darle un regalo diferente: le conté la historia de Rivcá y la explicación del Moré sobre como debemos tomar nuestra parte en la bendición.
    Ella me escucho con mucho interés y me respondió:
     
    -esa es una lección muy importante!
    es algo bueno, toma lo bueno que te den siempre
    si eso es lo que aprendes en las pagina esa que dices
    debes seguir estudiando lo que escribe ese Moré Yehudá.
     
    Y aunque mi madre sige siendo cristiana, tengo la esperanza de que poco a poco, con mucha paciencia y cuando vea los cambios positivos que en mi vida ha hecho el Noajismo, ella abandone la senda de la idolatria.
    Vale la pena intentarlo, despues de todo se trata de la mujer que me dio la vida.
    saludos y con esta historia le envió no solo la mia sino también la gratitud de mi madre
     
     
     
     

  4. Gracias por las enseñanzas tan ricas, son en verdad grandes lecciones de vida
    Siempre la persona debe hacer su parte y no esperar a que el Eterno haga todo por el.
    Es una característica de su pueblo que cuando se trata de enseñanzas de vida, siempre existen opiniones diferentes aunque encaminadas al mismo objetivo la superación de la persona.
    Ambas perspectivas son muy interesantes aunque creo que una de ellas predomina más.
     el Eterno le hace saber a la matriarca que Iaacov predominaría sobre esav, y menciona ud que la matriarca venia de un seno familiar de gente habituada al engaño y también a la idolatría.
    En algún post ud comento que a veces es necesario entender que quiere el Eterno de nosotros como en el caso de Noaj que solo ejecuto las instrucciones del Eterno, sin tal vez tratar de entender que era lo que el Creador le insinuaba con dichas instrucciones, tal vez cuando el Creador le ordeno a Noaj construir el arca también lo estaba sensibilizando acerca de la situación de su prójimo de la sociedad en general para que acudiera en su ayuda y no solo para que se salvara así mismo, ahora en este caso, es de llamar la atención que el Eterno precisamente le comunicara a rivcka su voluntad, podría ser que al comunicarle estas palabras estaba precisamente incitándola a que depositara su confianza en El pues uno de los efectos de la idolatría es la falta de confianza en Dios, finalmente las palabras del Eterno se cumplieron porque El es fiel a su palabra es Firme y no depende de nuestras acciones para cumplir lo que promete, aun cuando la actitud de la matriarca no fue la más adecuada el Eterno fue fiel a Su palabra y cumplió lo dicho, y no podríamos juzgar a la matriarca por haber actuado así pues finalmente estaba viendo por toda la descendencia de el mismo pueblo de Israel pudo ser que las emociones le ganaron al ver que se acercaba el momento de dar la bendición y no sería Iaacov el que la recibiera, al ver que su esposo no iba en rumbo de lo que dijo el Eterno tal vez dudo como cualquier ser humano puede hacerlo, pero el Eterno que no es hombre para cambiar de opinión cumplió lo prometido, esa es otra de las grandes enseñanzas que se aprenden de este post, que el Eterno es fiel y firme como una roca, hagamos lo que hagamos nosotros.
    Y efectivamente la suma de las dos grandes opiniones es lo ideal, como hace días lo enseño
    Ser tercos, pero con conocimiento y claridad de pensamiento.
    Ser flexibles, pero con cuidado de no traspasar los límites saludables.
    Ser duros, pero no violentos.
    Ser leales, pero no ciegos.
    Estar bien parados en la realidad, pero no dejar de soñar un mundo mejor, que comienza por construir shalom en el interior.

    Por aquello de que muchos dicen que “EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS”  y a través de ello argumentando que sus causas son “justas” engañan y estafan, pero lo cierto es que Dios nos pide hacer nuestra parte pero dentro de lo licito como ud lo menciona.

  5. es un anhelo grande ver al Maestro, si el Eterno es favorable nos veremos con inmensa alegria aqui en mexico.

    junto a todos los Justos de esta tierra.

    Abrazos!! 

  6. no se si a TODOS los justos, pero al menos aquellos q puedan y quieran compartir con nosotros este inolvidable evento.

    a trabajar desde ya, desde ayer en realidad, para hacer q todo salga para bien, con ayuda del Jefe…

Deja una respuesta