La honestidad forma parte de aquellas cualidades mas gratas que puede poseer una persona, ella garantiza confianza, seguridad, respaldo, confidencia, integridad. Si alguna vez debemos hacer un listado de las cualidades que nos gustaría encontrar en las personas o mejor aún, que nos gustaría poseer, seguramente enunciaremos la Honestidad.
En este sentido, la honestidad es una forma de vivir congruente entre lo que se piensa y la conducta que se observa hacia el prójimo, que junto a la justicia, exige en dar a cada quien lo que le es debido. En nuestra vida encontramos a diario actitudes deshonestas como la hipocresía, alguien que aparenta una personalidad que no tiene para ganarse la estimación de los demás; o la mentira; el simular trabajar o estudiar para no recibir una llamada de atención de los padres o del jefe inmediato; el no guardar en confidencia algún asunto del que hemos hecho la promesa de no revelarlo; no cumpliendo con la palabra dada, los compromisos hechos y la infidelidad.
Ser deshonestos nos lleva a romper los lazos de amistad establecidos, en el trabajo, la familia y en el ambiente social en el que nos desenvolvemos. Incluso, la convivencia bajo estos parámetros se torna imposible, pues ésta no se da, si las personas somos incapaces de confiar unos en otros.
Ser honestos significa ser sinceros en todo lo que decimos y hacemos: fieles a las promesas hechas en el matrimonio, en la empresa o negocio en el que trabajamos y con las personas que participan de la misma labor; actuando justamente en el comercio y en las opiniones que damos respecto a los demás. Los que nos rodean esperan que nos comportemos de forma seria, correcta, justa, desinteresada, con espíritu de servicio, pues saben que siempre damos un poco más de lo esperado.
La honestidad puede convertirse en un valor que se viva cotidianamente con los demás, tratando de no perjudicar o herir susceptibilidades, lo cual se puede dar cuando les atribuimos defectos que no tienen o juzgando con ligereza su actuar; incluso, evitando sacar provecho u obtener algún beneficio a costa de sus debilidades o de su ignorancia; procurar no apropiarnos de aquella información importante para la empresa en que trabajamos, o de aquel problema que nos ha confiado nuestro paciente o cliente que ha solicitado nuestra ayuda; tratar de no generar discordia y malos entendidos entre las personas que conocemos; señalando con firmeza el grave error que se comete al hacer calumnias y difamaciones de quienes que no están presentes; devolviendo con oportunidad las cosas que no nos pertenecen y restituyendo todo aquello que de manera involuntaria o por descuido hayamos dañado..
Si realmente pretendemos ser honestos, debemos empezar por enfrentar y asumir con valor nuestros defectos, buscando aquella manera que resulte más eficaz para superarlos, llevando a cabo acciones que mejoren todo aquello que afecta a nuestra persona y como consecuencia, a nuestros semejantes. Ello supone aprender a rectificarnos ante un error y cumplir con nuestras labores grandes y pequeñas sin hacer distinción.
Si podemos gestar un ambiente cálido y confiable, sostenido por relaciones basadas en la honestidad, nos llevará a crecer como personas, espiritualmente, constituyéndonos en verdaderos hombres de bien.
muchas gracias por este pan diario.
es muy rico, sano y nutritivo.
cada dia, un nuevo regalo de Dios y un nuevo texto de Laura.
excelente!
por otra parte, son valores fundamentales, basicos, indispensables.
uno puede saber mucho, pero sin la accion de poco vale.
y si la accion no esta encuadrada por buenos valores… se pierde todo.
excelente Laura!
Gracias Laura! Llevar a la acción los valores es todo un reto. Pero al leerlos me doy cuenta que he actuado muchas veces correctamente. Ser honesto me ha procurado muy buena clientela en mis negocios.
Que buen texto. Lo necesitaba, gracias Laura.
Gracias Laura,
La honestidad, que bello aporte, … ni mayor ni menos importante, a los muchos valores tan necesarios, indispensable y en ocsiones tan escasos.. pero invaluables cuando se precisa vivir nuestro día a día como noájidas
Un abrazo!
me pregunto, q pasa por los esclavos del EGO cuando leen estos temas tan importantes?
de hecho, los leeran?
igualmente, nuestra sagrada tarea es seguir despertando conciencia, despierta aquel que puede….
Gracias Maestro y colaboradores.
Laura, sinceramente muchas gracias. Sus textos me han ayudado bastante.
Si, realmente la honestidad es un hermoso valor que se debe fortalecer cada día. Se pueden formar preciosas relaciones. Desde tu matrimonio hasta la realción entre familiares, amigos, socios e inclusive con desconocidos.
Un abrazo.
Veo como en algunos vecindarios donde resido (no hay ninguna clase de vigilancia) la gente se dirige a sus trabajos y dejan la puerta de su casa sin ninguna seguridad , al regresar encuentran sus cosas como las habian dejado. En Colombia y muchos paises de Latinoamerica pasa todo lo contrario. No has salido de tu casa y ya te estan masacrando junto con tu familia por robar lo poco que tienes , ni un relog se puede lucir , mucho menos un celular.
Gracias!
el resperto ,la honestidad, la lealtad y todos aquellos temas de los que habla son la carta de presentacion de cada persona ante la sociedad,en un trabajo en tu familia con tus hijos tus padres y tus hermanos si tienes muy presentes estos valores estas actitudes te evitaras muchos problemas………
ay amigos, los valores son la base.
es q la etica es lo q esta detras de los mandamientos para las naciones.
no la religion,.
no los ritos.
la ETICA…
lastima q el mundo adora al EGO y no a DIOS…