En definitiva, todos los hombres somos iguales pero tan diferentes a la vez.
Nuestro pensamiento individual nos hace únicos e irrepetibles. No existirá otra persona en la historia de la humanidad que ocupe mi lugar ni el suyo. Cada visión de la vida es tan personal que dudo mucho que haya dos iguales, aunque se sigan principios idénticos.
Yo he sido de los que piensan que sin religiones los hombres seríamos más humanos y menos irracionales.
Me ha molestado tanto la idea religiosa, que he sido extremista; al punto de no gustarme mucho usar el vocablo “dios” (1).
He considerado que la “limpieza mental”, la “purga de ideas”, o el borro de memoria de las personas que de alguna manera renuncian a las religiones heredadas, debería de incluir incluso de lo que puede ser o significar el vocablo en mención; con el fin de reconstruir una personalidad sana y libre de cualquier prejuicio trasmitido generacionalmente.
Puede el lector tacharme de extremista, irrespetuoso, excomulgado del más allá, o sin porciones a tierras celestiales por mi falta de reverencia hacia lo sagrado y divino. Puede hacerlo si es que ese es su sentimiento.
Y no le culpo, porque la “seguridad de la creencia religiosa” hace nacer en el corazón del hombre esa separación hacia los que no piensan, creen, o sienten lo mismo que da seguridad a la mayoría.
Por otro lado, no me queda muy claro si mi forma de pensar traspasa en algún grado nuestro segundo mandato en el Código Noajida; mas sin embargo confieso que me alivia el hecho de que aun no existe un tribunal objetivo que juzgue mi pensamiento o mi sentimiento (aunque si existen tribunales que juzgan mi conducta).
Y aunque le parezca extraño mi preocupación si sobrelimito un mandamiento o no con mi forma de pensar, he de confesar que he considerado una forma de descubrir la humanidad y la libertad de pensar en la sencilla meditación del loable Código Gentil, leyes de Noe, Codigo Universal, o como se le quiera ver.
He considerado también que preocuparse si se tiene o no alguna conciencia sobre un Creador una vez que se haya abandonado alguna religión heredada, es una pérdida de tiempo muy lamentable; porque en honor a la verdad nadie que haya tenido una vocación religiosa familiar y que la haya abandonado puede saber lo equivocado que estaba o que esta, a pesar de que crea o suponga su total desarraigo.
Porque estar consciente de quien se es no es igual a “cambiar de concepto sobre dios” (2); sino es eso, saber quien se es y no quien le dijo que era.
Bueno sería (y según mi juicio) no fatigarse en descubrir en quien o en que se creé; sino en intentar reconstruir una personalidad bondadosa, libre, que de valor a la vida y que sobre todo vea lo valioso que es tanto el que piensa diferente como el que piensa igual.
(1)(2). La finalidad no es faltar al respeto para aquellos amigos lectores que tienen profundas convicciones; ni mucho menos a FULVIDA. Las opiniones escritas son personales y no necesariamente reflejan el punto de vista de la mayoría ni de este sitio. Se puso intencionalmente en minúscula con el fin de intentar quebrar el esquema mental que la religión ha hecho en la mayoría, e intentar hacer crecer el pensamiento critico.
Luis sabés que desde siempre hemos sabido tu punto de vista y siempre lo hemos respetado precisamente porque esto no es una inquisición.
Aquí venimos a aprender y a compartir ideas, esto no es una religión que se basa en la demagogia y en la dogmática mas no en el pragma, es decir, hablan mucho de lo diz que bueno pero hacen poco, poquísimo, en tanto que de lo malo abundan las malas acciones y la confabulación con la corrupción y demás.
Has hecho más vos por el noajismo como ateo que lo que muchos que dicen ser fieles a la causa hayan hecho.
Más que dogma axiológico, que sí es importante en cuando a la base de principios que conforman nuestra forma de vida, donde sí se incluye a Dios, más vale una persona que siga una vida plena, que promueva la paz y la armonía y que vele por cuidar u proteger nuestro legado que no alguien que es diestro con la palabra y que dice cosas bonitas pero que nunca llegan a concretarse en la práctica.
Saludos y gracias!
un valiente y valioso aporte. muchas gracias!
Interesante aporte amigo!
En lo personal trato de alejarme de cualquier cosa que venga a asemejarse a todo lo religioso que de uno u otro modo aprendimos desde pequeños, no se si sera un «miedo» de caer en las garras de la religion de nuevo pero creo que establecer un punto medio es saludable, sin ir a extremos vapuleando todo lo que tenga pinta de religioso ni asumiendo como cierto cualquier argumento venga de donde venga.
Me parece que todos tenemos un proceso personal y me alegro que sigas en el tuyo.
Un abrazo!!!
Hola, hola pienso que tienes razón a veces tenemos muchos pensamientos tan anclados como lo que nos han hecho creer o lo que nuestro pensar creemos como es o como creer en Dios, simplemente tenemos que dar paso de complejos y dejarlos atras; dejemos de hacer mesas de debate miremos que han hecho el pueblo judio – verdaderos judios-, es la acción no dijieron haremos y despues preguntaremos claro ese es mi punto de vista ; el hacer el Maestreo Yehuda Ribcco hace incapie en mantenernos simpre despiertos hagamos lo que tenemos que hacer, en lo correspondiente a lo que podamos hacer.
Me identifico mucho con la manera de pensar de Luis.
El Moré siempre ha hablado de desaprender para aprender, en lugar de querer entender el noajismo con todo lo que la mochila de la religión lleva dentro.
Bondad y Justicia tambien ha enfatizado el Moré, en lugar de religiosidad y falsa espiritualidad.
Me desagrada cuando se arropa al noajismo con cobijas de religión y se pretende mostrar una especie de espiritualidad con jergas y frasecitas y roles que algunos se autoimponen.
Y bueno, cada quien está en su etapa. No se es noajida de la noche a la mañana, un mes, un año o dos. Hace ocho años que ya ando en esto y recuerdo que el Moré decia que se precisaba por lo menos un mínimo de 3 años de noajismo puro para desaprender y desprenderse de la mala semilla de la religión, y para COMENZAR a aprender lo que es el noajismo.
Finalmente, Dios me libre de pretender tener un concepto de Él. Seria mejor comprarme una figurita y ponerle velas.
Gracias amigo
¿Creer o no creer?…
…¿Ser o no ser?
Cada cabeza es un mundo, bien lo has dicho querido amigo.
La única verdad es que ningún ser humano está por encima de otro, independientemente de lo que crea o de lo que sea.
¡Gracias por compartir tu punto de vista!
Comparto este pensamiento, quizás me hermane a él porque refleja mi pensamiento más profundo, también la idea de que hay un código inserto en nuestros genes que se parecen a un código universal o leyes de Noé (ya he posteado lo que pienso sobre el mítico personaje). Quizás si la religión hubiese permitido que la humanidad se hubiera desarrollado según su misma naturaleza, el escenario del hombre contemporáneo sería mejor, aún cuando esa idea no deja de ser una especulación más.