Alegría secreta

Las religiones por lo general se presentan como la respuesta a todas las angustias, las religiones supuestamente monoteístas además insisten en ser el camino único y excluyente hacia la verdadera felicidad.
Así andan promoviendo sus doctrinas y negocios los mercaderes de la fe.
”Cree en esto y odia aquello, y te irás al paraíso”.
”Sígueme a mí y dame de tu dinero, esa es la razón de tu vida”.
”Congrégate con los hermanos, repudia al diferente, pero di que eres tolerante, entonces serás bendito”.
”Solo a través de mí tienes la verdad, la felicidad y la vida… ahora, págame por todo lo que te prometo”.
Oh sí, la religión con sus vanas promesas de que cumplas con ella para ser feliz. Entonces se hacen pactitos con los dioses, se negocian acuerdos, se inventan astucias para engañar a los dioses, se pretende ser más poderoso que Dios. Porque, también entre los que se visten de santos hay muchos que no son más que adoradores del EGO. Pervierten lo espiritual para hacerlo religión. Hacen del cumplimiento de los verdaderos mandamientos simples monedas de intercambio con Dios, al que buscan obligar a que les satisfaga en sus deseos a cambio del cumplimiento de los mandamientos.
Negociantes de la fe. Tanto los que embaucan al prójimo con religiones inventadas, con doctrinas podridas; como aquellos otros que son muy fieles a libros y verdaderas doctrinas santas, pero que no son más que negociantes, lo hacen para obtener favores de Dios. Adoradores del EGO, al que presuntuosamente, idolátricamente, hacen pasar por Dios.

Sí, también las “religiones no religiosas” ofrecen cosas parecidas.
“Pon tu fe en la ciencia y serás feliz”.
”El hombre es la medida de todas las cosas, así que tú síguenos en nuestro marco humanistas y serás feliz”.
”Ten el último juguete electrónico carísimo de “La Manzanita” y serás feliz”.
”Actualiza tu sistema operativo y tu paquete ofimático, y serás feliz”.
”Grita los goles de tu equipo y festeja la derrota del tradicional adversario, y serás feliz”.
”Bebe tal cerveza, toma aquel whisky, disfruta de tal bebida cola, y serás feliz”.
”Usa aquella ropa, está a la moda, vacaciona allí, comenta esa película, escucha esta música, serás feliz”.
”Esa pasta de dientes, ese desodorante, ese perfume, ese color de labial, y serás feliz”.
”Maneja aquel auto y modelo, ten un cuerpo así y no asá, baila con aquellas personas, júntate con ellos y rechaza a esos otros, y serás feliz”.
”Cree en cualquier cosa de moda, respira como te ordenan, repite lemas sin sentido, adora lo que te presentan, y serás feliz”.
”Junta mucho dinero y derróchalo en lujos que no precisas, en placeres que son de apariencia, en comprar amistades, y serás feliz”.

Sí, queremos la felicidad… ¿o eso es lo que nos enseñan a creer?
¿Queremos realmente la felicidad?
¿Nos hace falta?
¿Nos falta?
¿Nos enseñan a creer que queremos la felicidad?
¿Nos enseñan a creer que somos infelices?
¿Nos enseñan a creer que tener más nos hará felices?
Cada una de estas preguntas merece que nos tomemos un tiempo para reflexionar, para evaluar, para responder con seriedad.
Ninguna de estas preguntas es sencilla ni merece ser pasada sin respuesta desde lo profundo.
Yo no te brindaré las respuestas ahora, suficiente con haber planteado estas interrogantes. Si quieres haces el esfuerzo de responderlas, si no, no lo hagas.

Nos enseñan que si conseguimos tal pareja, tal estilo de casa, tanto dinero, aquel auto, esas amistades, ese dios, etc., seremos felices.
Nos enseñan a seguir una receta mágica, una fórmula milagrosa, a presionar un maravilloso botón secreto que nos proveerá de satisfacción inmediata, o de promesas de redención y placer eternos.
Todo lo que queremos y más después de pasar ese umbral, de rezar tal salmo, de adorar esa imagen, de poseer esto y aquello, de creer en aquello otro, allí siempre habrá felicidad, es la promesa que nos hacen, la creencia que nos enseñan y que nosotros tercamente aceptamos y reclamamos.

Vivimos en una ilusión, en un completo delirio que es socialmente avalado y promovido. No es el delirio de los que son enviados al hospital siquiátrico, ni medicados para controlar sus mentes, sino el delirio que es aplaudido y sostenido por la sociedad.
Estamos dentro de una burbuja de irrealidad, en la cual nos hacen creer que la felicidad está al alcance con unos procedimientos fantásticos, de libro de cuento.
Se nos deja en un estado de confusión constante, de inmadurez, en una etapa mental/emocional en la cual se cree controlar por medio del pensamiento mágico, del deseo, de conexiones metafísicas que mueven al universo a conceder deseos.
Nosotros nos acurrucamos en ese estilo de vida infantil, lleno de temores, de deseos, de hechizos.
Creemos que la felicidad la encontraremos al final del arcoíris, a través de una oración mágica, chasqueando tres veces, silbando, etc.
Sí, también con buenas intenciones nos llevan a esa fantasía de poder, y nos dicen que los niños buenos son visitados por papá-noel, o rabí-noel, o nos vamos al paraíso, o se resolverán nuestros problemas.
Y no, no es así.

El dinero no compra la felicidad, ni la manda a hacer.
La salud no es sinónimo de estar feliz.
El amor no suele ser un estado permanente, ni de permanente felicidad.
Aquel que cumple con integridad los mandamientos que Dios le ha dado para que cumpla no vive sin sufrimientos, ni sin altibajos, ni en perfecta armonía.
Las tribulaciones están a la puerta, esperando para ingresar.
No, la felicidad no está misteriosamente guardada y lista para sorprendernos cuando queremos.

Parece que nos enseñan a buscar la felicidad allí en donde no se la encuentra.
No podemos saciar nuestra sed con el contenido de un pozo seco, ni el delirio de satisfacción satisface.
Parece que muy pocos pueden responder con facilidad a la sencilla pregunta: ¿para qué ser feliz?
Si pudiéramos, quizás sabríamos ser felices.

Miremos a los personajes del Tanaj, no hay uno que no haya pasado tormentas, conflictos, dolores, separaciones, enfermedades, guerras internas y externas.
Allí están, célebres personajes que recordamos luego de milenios, muchos de ellos ejemplos de virtud, de obediencia a Dios, de acatamiento a sus mandamientos, que tropiezan, que caen, que les cuesta reincorporarse, que sufren, que no están embotados en el delirio de vivir en un paraíso terrenal constantemente, sino que trabajan en la construcción de Shalom.
Ellos son nuestro espejo, son nuestra guía, y no encontramos que ninguno haya tenido una vida sedosa, sin traumas, sin pasiones encontradas.
Desde el abismo clamaba David, desde el destierro soñaba Iaacov, en el pozo lloraba Iosef, en la impotencia golpeaba rocas Moshé, ellos sufrían, no estaban inmersos en una burbuja de irreal felicidad.
Sin embargo, pudieron ser felices.

La felicidad no está en el tener, en cosechar trofeos, en darle alimento al EGO.
Porque es el EGO el que nos impulsa a hacer cosas para sentirnos con poder, con control, en dominio, al amparo de la debilidad.
Es el EGO el que nos asusta y nos hace correr como desesperados en busca de la clave secreta que nos convierta en todopoderosos.
Es el EGO que nos confunde y no nos permite identificar nuestro ser, conoceros, amarnos, respetarnos, unificarnos, ser uno, conectarnos con nosotros mismos, con el prójimo y con Dios.
Es el EGO el que promete todo tipo de felicidades, pero nos aleja de la felicidad.
Porque es el EGO el que nos hace creer que la felicidad es algo que se obtiene, cuando la felicidad es un resultado de lo que nos está sucediendo aquí y ahora.

La felicidad es el resultado de los que nos está sucediendo aquí y ahora.
¿Cómo?
Si nos falta esto y aquello, si nos duele lo de más allá, si nos corroe la duda, si sufrimos, si no tenemos, si deseamos, si realmente las cosas no pintan bien…
¿Cómo?

 

Cuando dejamos de buscar fuera lo que está dentro.
Cuando unificamos nuestras dimensiones y las ponemos en sincronía con la dimensión espiritual.
Cuando encontramos o elaboramos el sentido a lo que nos está sucediendo.
Cuando comprendemos intensamente que este momento, éste y no otro, es nuestra única vida, nuestra única oportunidad, y que no tenemos otro. Entonces dejamos de hurgar sin piedad en el pasado, no achacamos más culpas, nos dejamos de cargar la pesada mochila del sentimiento de culpa, hacemos oídos sordos a los miedos, eludimos la ilusión de pretender controlar aquello que está por fuera de nuestro control.
Admitimos nuestra existencia, admitimos nuestras circunstancias, vivimos el aquí y ahora sin luchar en vano contra aquello que es imposible derrotar. Por más que tratemos de espantar a las sombras con palos, éstas no se irán. Las sombras se corren en presencia de una luz, no cuando son apaleadas. Lo mismo ocurre con las fantasías de control, que deseamos imponer nuestro deseo, marcar el ritmo al mundo, dominar aquello que no está bajo nuestro imperio, y fracasamos, caemos en la angustia, nos sumergimos más en la insatisfacción y la infelicidad.

Pero, vivir el aquí y ahora como lo que es, nuestra única vida; dejar fluir aquello que no puede ser retenido; no luchar contra lo que es imposible pelear; no retener lo que tiene que partir; no querer controlar lo que no se puede controlar.
Así se llega de a poco a la armonía interna que produce la armonía con el entorno.
Armonía de nuestras dimensiones para alcanzar la armonía con los demás.
De a poco, cada cosa en su tiempo.

Para que la música penetre los sentidos, cobre vida, estremezca el alma, es necesario algo más que aprender una técnica de ejecución instrumental. Es necesaria la inspiración, la maestría, el arte, ese brillo que no se produce por magia, ni por aburrida repetición de una técnica. Es el espíritu puesto al mando, con las otras dimensiones en armonía. Entonces la música está viva y hacer estremecer.
Así también la felicidad, la verdadera. Es un producto que resulta de un estado del ser, de un entrenamiento para superar las limitaciones del EGO.
Resplandece cuando la persona vive a plenitud el aquí y ahora, especialmente en los actos de bondad generosa, en el dar sincero, sin esperar nada a cambio. Cuando se beneficia en verdad a otro, por su bien, sin esperar nada, absolutamente nada.

El secreto de la alegría secreta ya te ha sido revelado.

44 comentarios sobre “Alegría secreta”

  1. More Ribco, creo que respondió la pregunta que le hice.. es mas.. creo que le pregunte por que actúo como si fuera inmortal (pensando en el pasado y en el futuro, de una forma tan detallada y minuciosida criminal).. Esto es lo que se debería uno memorizar: «Cuando comprendemos intensamente que este momento, éste y no otro, es nuestra única vida, nuestra única oportunidad, y que no tenemos otro..», un punto de partida para practicar lo aprendido hasta hoy..

  2. Felcicidad requiere entrenamiento y;

    Resplandece cuando la persona vive a plenitud el aquí y ahora, especialmente en los actos de bondad generosa, en el dar sincero, sin esperar nada a cambio. Cuando se beneficia en verdad a otro, por su bien, sin esperar nada, absolutamente nada

  3. gracias amigos por sus tres comentarios.

    y jona, si este es uno de los posts q vos y yo pensamos q amerita ser tratado en mil comentarios, q se hable de el, q se comente, q se estudie,q se aplique… pero veras q no es asi.
    este no genera pasion, ni palabras, ni posturas, simplemnete pasa, se esconde,se olvida… ah el EGO… es inteligente cuando quiere…

  4. Aquel que cumple con integridad los mandamientos que Dios le ha dado para que cumpla no vive sin sufrimientos, ni sin altibajos, ni en perfecta armonía.

    La felicidad es un proceso, el que se necesitan dos, en perfecta unidad y no estoy escribiendo sobre la pareja. Siempre debe estar conmigo D*os, de lo contrario cualquier cosa puede traer la tristeza y depresión. Cuando se pone la felicidad en una persona, objeto, dinero, trabajo o cualquier elemento diferente al amor y respeto que se debe sentir sólo por D*os, lo más seguro es que a la primera caida, vendran otras y otras, y se empezará a descender en una espiral peligrosa.

  5. Hay varios conceptos en este ensayo que hay que verlos y analizarlos con lupa. Me llama la atención algunas ideas que valen la pena darles alguna atención detallada: «Admitir la propia existencia»: que se existe, que se es, que no hay otro igual, que la vida es propia e irrepetible, que solo hay una, que solo tengo ESTA oportunidad para vivir UNA vida; «Admitir nuestras circunstancias»: que lo que sucede es por que así ES, ya sea por que lo provoque o por que aconteció casualmente, pero que es lo que se esta viviendo; que se puede corregir lo que se puede, lo que no, pues NO. Que esta pasando el tiempo y se vive con los dilemas propios de cada minuto, hora y día; que en este momento mientras escribo disfruto escribir, por que en eso estoy ocupado YA. » No luchar en vano contra aquello que es imposible derrotar»: Por que la vida tiene su propio ritmo y las circuntancias en que se viven son las que deciden el rumbo a seguir en la vida.No se puede adelantar un minuto del tiempo para saber lo que acontecerá ni se puede retroceder un minuto para variar la consecuencia; simplemente el trascurre y estamos en su corriente ocupando un espacio en el tiempo, en la vida, con solo una oportunidad para vivir en La Vida. Ajustarse la propia vida, para seguir la Corriente de la Vida, no alrevés, ajustando la corriente de la vida a nuestra vida, que es imposible, como dice Ruben Blades «si del cielo te caen limones, aprende hacer limonada..»

  6. «..Así se llega de a poco a la armonía interna que produce la armonía con el entorno..» : Vivir ESTE instante, este minuto, disfrutar el escribir sin ocupar mi mente nada mas que en alanizar este sencillo parrafo: ARMONIA INTERNA = ARMONIA CON EL ENTORNO. ¿como alcanzo estar en armonia interna para ajustarme al entorno? Disfrute este minuto, este segundo, no se adelante en el tiempo ni se retroceda en él, concentrece el pensamiento en este preciso instante mientras lee…mientras saborea el significado de la palabra ARMONIA, paz, serenidad, quietud..

  7. Uy! este post esta muy interesante,habria que leerlo con calma y sin interrupciones. Como dice el dicho «la felicidad es un camino, no un destino»

  8. Como dice Jona este post merece cientos de comentarios, ( por que a los temas polemicos son los mas comentados y no los que nos da una verdadera enseñanza?
    Gracias More por este bello post.Muchas veces siempre estamos en busca de la felicidad y muchas veces somos nosotros quienes nos escondemos de ella

  9. El máximo obstaculo del hombre es el hombre mismo. Quizas por preconceptos, quizas por el entorno, quizas por extrañas teorías, etc., nos hacen ser derrotados antes de ir a la guerra. Todos venimos de la misma manera al mundo y tenemos las mismas posibilidades, va en cada uno darse cuenta que el futuro está en nuestras manos.

  10. Ufff… Gracias!

    La verdadera felicidad existe, y no precisamente cuando demando de ella, cuando repito frases «muy positivas», irreales, ambisiosas, pero que en últimas son producto de la subordinación total al Ego.

    Creo que los muchos libros de autoestima, han olvidado lo importante, a ese » ser » de carne y hueso, que vive en el mundo real… que se debate entre obedecer al ego, ó acatar su esencia… para vivir,

    Que sobrevive, cuando atiende al ego, mientras sepulta lo valioso de su ser…

    Si, es un texto que tiene tanto, tantísimo para etraer, para aprender, para compartir, y para vivir…

    Será un verdadero deleite, el abordar estos temas en vivo y en directo… Gracias moré!

  11. Moré, estuve releyendo el texto principalmente en el intro, y ud menciona que la religión se presenta como la respuesta, el camino, la solución, etc, y me acorde de lo que dijo el fulano del madero «yo soy el camino, la verdad, la vida…». Y han sido miles de miles quienes anhelando tal cosa van corriendo detrás de cualquiera que les ofrezca el secreto que cambiará sus vidas.

    Creo que la verdadera felicidad está en cumplir con lo que se nos encomendó, independientemente de cómo pueda uno sentirse al respecto. Ejemplo, a mi me gusta cómo me siento cuando practico caridad, pero me preocupa cuando doy demasiada atención al bienestar que me produce dar, ya que si me descuido voy a terminar dando solo para sentirme bien. Quiero dar solo por el hecho de dar y más ná.

  12. q des y te sientas bien, no esta mal.
    es algo bueno.
    pero no des para sentirte bien.
    da aunque no te sientas bien.
    lo importante es el acto generoso.
    y si te sientes bien, bienvenido sea el placer!
    goza de lo permitido, recuerdalo.

  13. La felicidad, cuando aprendemos a vivir un día a la vez, el ahora, en la obediencia y el disfrute de hacer lo que es permitido, eso nos va acercando a lo que es en realidad la felicidad. No se trata de estar siempre contento; habra momentos dificiles, regulares y buenos, pero todos pueden estar enmarcados en un contexto de satisfaccion de estar haciendo lo que es correcto y esforzarce en ello, No para alimentar el ego y decir «YO lo hice». Cuando la vida y todos los beneficios materiales y no materiales que nos presenta, se convierten en un fin y no en un medio para lograr traer el cielo a la tierra, estamos alejando la felicidad de nuestras vidas. La felicidad no es un estado permanente de bienestar o grata sensación, mas bien es un estado permanente de conciencia y claridad, donde no perdemos la perspectiva de quienes somos y por que existimos, de sentirse consientes de que nuestra comunión con El Creador y la obediencia a sus preceptos nos traen la bendición y la garantía de que nos mantendremos en paz a pesar de las circunstancias.

  14. Los que ofrecen la felicidad, esclavos de sus ciclopeos EGOS, grandes y con un solo ojo, el de la codicia, ¿son felices? Se hace camino al andar digo un poeta, tambien la felicidad se va viviendo mientras se camina en esta vida. Y digo alguien que ahora no recuerdo, no es feliz el que mas tiene, sino el que menos necesita.

  15. me gusto mucho, lo que puedo opinar es que no es cuestion de felicidad, mas bien es de libertad, porque uno atado a tantas cosas vanales se le olvida que puede elegir con plena libertad, libertad para preguntar, para negar, para aceptar, yo creo que no venimos a ser felices, mas bien para ser libres porque podemos elegir ser felices o no, cuando uno se pregunta sobre la libertad se topa con cosas que le fueron inculcadas y ahi viene la cuestion de la libertad, tomo lo que me fue inculcado o busco la verdad, el verdadero sentido de la pregunta esta ligado a cuanto puedes ser libre, pero hay limites fisicos, mentales y espirituales, ahora para actuar con libertad teniendo en cuenta los limites vemos que entramos en algo de cuestiones morales y eticas, y como debemos actuar, decia aristoteles que la inteligencia no consistia en el conocimiento solamente, si no en la aplicacion del conocimiento, ahi es donde se pregunta soy libre y mi projimo es libre hasta donde soy libre ante mi projimo es en el hecho de que haces de tu libertad y que tanto afectas con tu libertad a la libertad de tu projimo, para eso tenemos limites, los limites que DIOS nos entrego, mis limites como noajida me dictan que afecte la libertad de mi projimo pero tampoco el debe afectar mi libertad, asi que la cuestion de ser feliz como dice esa frase, la felicidad es el camino, no el destino, pero si no caminas por ese camino con la libertad de ver, de preguntar, de decidir si lo disfrutas o no, bueno esa es mi humilde opinion.

  16. veo que tiene razon amigo Yehuda y pensando en esto me di cuenta que la libertad es el comienzo no el fin y la felicidad tampoco es el fin ya que solo es la forma de vivir, tomando en cuenta la libertad como comienzo y las elecciones que se hagan podemos ver que si uno quiere ser feliz solo esta en darse cuenta que lo que uno puede hacer, de los limites que existen y tomar en cuenta otras libertades que nos rodean, ahora en cuestion de etica queda resaltar que como vivimos en un ambiente rodeado de gente tenemos que portarnos de una manera en la cual el que incumpla con la paz social o perjudique la libertad de uno o de un grupo debe de ser llevado a la justicia y tambien reabilitado de una forma humana sin trasgredir su libertad, que es dando cuenta de su error y ayudando para que ejercite su libertad, la felicidad es el cumplimiento de el ser humano en plenitud, pero para llegar a esa plenitud se tiene que fortalecer las cosas que lo sustentan para la paz social, individual, mental, fisica y espiritual y cada una tiene diferentes valores eticos y morales que generan una maduracion ante los problemas de la vida y las formas de reaccionar ante ello, bueno eso es lo que pense.

  17. la plenitud, que es el goce de como usted dice de lo permitido, de hacer lo justo, de aceptar nuestras limitaciones y hacer lo que tenemos que hacer el rol que corresponde, sabiendo nuestras responsabilidades y llevando acabo la plenitud.

      1. oh ya le entendí¡¡¡ no es solamente ocuparse de la felicidad en todo momento si no actuar conforme a las circunstancias de una forma positiva, ¿verdad?

      2. la idea general me parece acertadisima, pero la formulacion de la idea puede dar pie a confusiones. al menos asi me parece a mi.
        vamos joven amigo, reformule y veamos q sale.

      3. entonces al fin la felicidad termina siendo el fin y la libertad el medio para llegar a ella.

  18. me parece muy bien, ya que el EGO limita la libertad y solo para tener a raya al EGO hay que actuar con la voluntad de ser libres del EGO y todas sus mascaras.

      1. bueno leeré los textos y disculpe si me alargue tanto pero tengo tantas dudas y cosas que no entiendo y debí pensar en que tal vez usted tenga otras cosas que hacer y gracias por aclararme esta cuestión.

      2. no es ninguna molestia. es un placer para mi poder ayudar, y le digo de nuevo, haga el intento de resumir para comrepnder y ayudar a otros a comprender.
        adelante!

      3. muchas gracias, pero como siempre me dicen que apage mis pensamiento y que deje de analizar las cosas y se enojan conmigo ya lo veo así, que llego incomodar a la gente por querer llegar a descubrir algo.

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