El noajismo no es una religión, es una filosofía y un estilo de vida que antecede al judaísmo
El ateísmo está de moda, ¿o es que realmente la gente es atea? No me queda la duda de que muchos sí serán ateos y que no creen en un dios, sin embargo, hay muchos que arremeten contra un dios que dicen que no existe, pero parten de una hipótesis que “si existiera…, pero como no existe, entonces…”. La negación de algo muchas veces puede constituir la afirmación inconsciente de que uno sí cree en lo que afirma negar.
La mente es tan complicada, que muchas veces por medio del lenguaje no verbal se conoce mucho más a la personas que por lo que la persona exprese con palabras. Si bien es cierto que el noajismo fue preservado por los judíos, puesto que ninguna otra nación lo hizo, y que ahora son los judíos los que comenzaron a hablar del tema nuevamente desde hace un par de décadas atrás, por medio de la difusión masiva, lo cierto del caso es que las reglas noájicas como tales, llámeseles como se les quiera llamar, no son, ni han sido, religiosas en ningún momento.
Es cierto que hay muchas personas que asumen al noajismo al modo religioso aunque para sí mismos digan que no es una religión, empero, la forma en que abordan al noajismo es igual como si fuera una religión, lo único es que monoteísta, pero eso no le quita que se dé con resabios evidentemente religiosos.
El noajismo no precisa siquiera de creer en Dios, sino que lo que precisa es que la persona se comporte de manera que no se haga daño a sí misma y que pueda vivir en sociedad, no precisa de rezos, cánticos, alabanzas, celebraciones sabáticas, etc., cosas que son del judaísmo, que es distinto al noajismo, pero que parece que las personas que dicen haber adoptado un modo de vida con leyes noájicas, confuden muchas veces la sencillez del noajismo con la complejidad del judaísmo, y mezclan las dos filosofías para crear una especie de sucursal del judaísmo, con elementos judaicos, pero con la holgura del noajismo, cosa que no debería de ser así, pues, o se es judío, o se es nóajida, pero no se puede ser las dos cosas.
Al existir tanta amplitud dentro del noajismo, no se precisa de reglas estructuradas a la usanza de una religión sino que, por el contrario, la libertad y la autonomía del noájida, hace del noajismo una forma atractiva de vida, pues aunque los judíos enseñan desde la Torá muchos conceptos de vida que los noájidas utilizan, no es preciso ni obligatorio que un noájida estudie la Torá, es más, es recomendable que no lo haga, salvo que tenga la supervisión de un judío docto en Torá, pues de otra forma sería igual que ir a clases de ingeniería y que un abogado las imparta.
Así pues, hay noájidas que caen en el aspecto religioso y que no han comprendido que el noajismo no es religioso, no puede ser una religión porque no precisa de los elementos estructurales de una religión y, por lo tanto, no debe de ser visto como tal. Para los que nos adscribimos a la corriente más secular, el noajismo es atractivo precisamente porque no nos impone siquiera creer en un dios, simplemente que hagamos las cosas bien, contrario a las religiones que sin importar su denominación, son impositoras de preceptos y costumbres que se deben de seguir, so pena de quedar fuera de la comunidad religiosa.
No se necesita entonces ser prosélito con el noajismo, porque al no ser una religión sino un modo de vida, las personas son las que deciden si lo siguen o no. Evidentemente que las personas de mayor capacidad intelectual escogerán respetar las reglas acuñadas en el noajismo, por el simple hecho de que son sencillas y completas y satisfacen en gran medida, los principios básicos que deben de servir para estructurar un ordenamiento jurídico justo y equilibrado.