Las cosas más sencillas

Aquiles Nazoa, grande entre los grandes venezolanos, les regaló a una generación antes de mi, un hermoso programa de televisión, llamado: Las cosas más sencillas; éste era transmitido por el inigualable canal de televisión "TVN", siglas de Televisora Nacional. En dicho programa el ilustre humorista presentaba una visión del mundo donde cada cosa o cada quien puede ser visto con grandeza sin importar su procedencia o su humildad.

Hoy quiero compartir con ustedes, mis apreciados lectores, la fábula de la avispa ahogada, de la pluma del señor Aquiles Nazoa.

La avispa aquel día, desde la mañana,
como de costumbre, bravísima andaba.
El día era hermoso, la brisa liviana;
cubierta la tierra, de flores estaba
y mil pajaritos los aires cruzaban.

Pero a nuestra avispa -nuestra avispa brava-
nada le atraía, no veía nada
por ir como iba, comida de rabia.

"Adiós", le dijeron unas rosas blancas
y ella ni siquiera se volvió a mirarlas
por ir abstraída, torva, ensimismada,
con la furia sorda que la devoraba.

"Buen día" le dijo, la abeja, su hermana
y ella que de furia, casi reventaba,
por toda respuesta, le echo una roncada
que a la pobre abeja, dejo anonadada.

Ciega como iba, la avispa de rabia,
repentinamente, como en una trampa,
se encontró metida, dentro de una casa.

Echando mil pestes, al verse encerrada,
en vez de ponerse, serena y con calma
a buscar por donde, salir de la estancia,
¿sabéis lo que hizo? ¡Se puso más brava!

Se puso en los vidrios, a dar cabezadas,
al ver en su furia, que a corta distancia
ventanas y puertas, abiertas estaban;
y como en la ira, que la dominaba
casi no veía, por donde volaba,
en una embestida, que dió de la rabia
cayó nuestra avispa, en un vaso de agua.

¡Un vaso pequeño, menor que una cuarta
donde hasta un mosquito, nadando se salva!
Pero nuestra avispa, nuestra avispa brava,
más brava se puso, al verse mojada,
y en vez de ocuparse, la muy insensata,
de ganar la orilla, batiendo las alas
se puso a echar pestes y a tirar picadas
y a lanzar conjuros y a emitir mentadas.

Y así, poco a poco, fue quedando exhausta
hasta que furiosa, pero emparamada,
terminó la avispa por morir ahogada.

Tal como la avispa, que cuenta esta fábula,
el mundo está lleno, de personas bravas,
que infunden respeto, por su mala cara,
que se hacen famosas, debido a sus rabias
y al final se ahogan, en un vaso de agua.

Depende de nosotros

En un artículo reciente me referí a  la voz interior que nos habla siempre y  marca en buena medida nuestros reflejos. Somos responsables por el programa que, activo en nuestra cabeza, dirige esa voz. Podemos introducir software de optimización,  de justicia, de caridad, etc. y también podemos meter virus de rudeza, de idolatría, de blasfemia, etc. ¿Ha usado un computador comprado de paquete? ¿Qué es más fácil de instalar –  un software o un virus?

Para empezar un buen software usualmente requiere una inversión monetaria en tanto que los virus por lo regular son gratis. Por otro lado, para que uno pueda usar el software usualmente se requiere trabajo, se tiene que leer alguna ayuda o guía de usuario. Los virus, en cambio, trabajan solos.

¿Intuye por dónde viene el paralelo?

Para  que nuestra voz interior nos hable asiduamente de justicia o bondad tiene que haber una inversión vestida, por ejemplo, de instrucción de padres a hijos, motivación escolar de  valores o trabajo y estudio propios – esto es tenemos que hacer funcionar nuestro instinto hacia el bien. Por otro lado, para que nuestra voz interior se programe de  rudeza o altanería o pasiones incontroladas no más tenemos que ceder a nuestro instinto hacia el mal.

Ahora bien,  no es suficiente con tener intención si no hay conocimiento. Hoy en día mucha gente está sinceramente preocupada por los  niveles de pobreza y miseria que padece (por culpa propia) una buena porción de Latinoamérica y no dudaría en eliminar la propiedad privada con tal de "distribuir la riqueza".  Pero esto es robar… Pero cuando uno se instruye de un buen maestro, las cosas parecen aclararse: justicia no es lo mismo que igualdad. Si se aplicara el principio de igualdad a raja tabla, no deberían haber entradas preferenciales y apropiadas para discapacitados en los edificios y oficinas públicas. ¿Se entiende la idea?  

Es la Torá con las explicaciones rabínicas la fuente más preciosa de conocimiento práctico, valores morales y éticos diseñados por el Creador para mejorar nuestra vida y, via nuestro cumplimiento, para mejorar el mundo y hacerlo un lugar más acogedor: "Busca y Revisa en la Torá ya que absolutamente todo está en ella".

Volviendo a las computadoras…   Obviamente un computador no funciona nada bien si no tiene un buen sistema operativo instalado pues este guía el comportamiento de todo el PC. Para los gentiles o no-judíos el sistema operativo consiste en el Código Noájida – las Siete Leyes de los Hijos de Noé. Tenemos que aprender sobre su funcionamiento, aplicar tal conocimiento y buscar aprender más – para aplicar más… Luego, como es natural, buscaremos adicionar más software a nuestra observancia.

Uno escoge que software adicional instala o no en el computador y uno decide si vale o no la pena invertir en software antivirus, antipirata, etc.
Depende de nosotros el buscar mejorar constantemente nuestra felicidad.
 Depende de nosotros buscar acercarnos cada vez más a nuestro Hacedor.
Dios nos da la oportunidad y si nos esforzamos recibimos ayuda de la Providencia Dívina – que "trabaja tras bastidores"…
Depende de nosotros. 

 

 

 

00:00

Miro el reloj de mi teléfono celular y veo la hora: 00:00. A esa hora, sin valor matemático, toda la gente se ha vuelto en un sentimiento efímero de dar al otro "un feliz año"; seguramente dentro de un mes a esa persona no le hablarán, o hablaran demás de ella, pero, qué importa, siguen el convencionalismo, abrazan y besan, ríen y profieren la dichosa frase: ¡feliz año!.

Eso es lo que queda para una celebración vacía, sin sentido, con un trasfondo conocido sólo por aquellos que, se rebelaron en contra de la "autoridad eclesiástica" o forman parte de la misma.

D»s quiera que el año civil que comienza en la cuenta de occidente sea un año lleno de luz, lleno de bendición, que mucha gente se sume al staf de los fieles, y que los que sumamos tengamos la voluntad para seguir ahí, al pie del cañón, haciendo cada día, sin perder el entusiasmo, sin perder la perspectiva.