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Decálogo

El Decálogo, lo que común y erróneamente se denomina como “Diez Mandamientos” fue entregado y ordenado por Dios para los judíos.
Son muchísimas las enseñanzas que obtenemos y derivamos de estas diez frases, que corresponden en realidad a catorce mandamientos divinos para los judíos.
Algunas de las ideas y especialmente reglas son específicas para las personas judías, pero muchas de ellas tienen un valor universal, que es compartible y aplicable por cualquier persona que desee andar por la Senda del Eterno, a la Luz de su Palabra.
No es mi intención extenderme demasiado, sino tan solo concretarme a la introducción  de una fascinante enseñanza que se desprende de analizar los enunciados en un contexto “topográfico”.
Permíteme que te lo muestre.

Máximo EGO
El individuo está aislado, centrado en sí mismo, víctima de su impotencia y los delirios de poder. Es esclavo de su EGO.

Tableta B
Relación entre el hombre y el hombre

Idea central
Desarrollo de la personalidad

Tableta A
Relación entre el hombre y Dios

No asesinar

Aceptación de la existencia de Otro

Saber que Dios existe

No al adulterio

Aceptación de la relación con Otro

No adorar dioses ajenos

No secuestrar

Aceptación de la otredad del Otro

No usar el nombre de Dios en vano

No testimoniar en falso

Aceptación del poder del Otro

Recordar el Shabbat

No codiciar lo del prójimo

Coexistencia armoniosa con Otro

Honrar a los padres

Máxima CONEXIÓN
La persona está integrada como sujeto, como miembro de la sociedad, en su relación con Dios.
Es altruista, solidario, responsable, comprometido, bueno, justo y leal.

Ahora, un breve desarrollo para aumentar la comprensión.
Nacemos siendo impotentes, es condición básica de todo ser humano.
Contamos con una herramientas rudimentaria para sobrevivir, el EGO.
Sus métodos bruscos para llamar la atención suelen ser efectivos para que alguien se encargue del bebe, lo alimente, lo cambie, lo consuele, lo divierta, lo duerma, etc.
Si el llamado de atención no funciona, o el adulto no está disponible o dispuesto, el EGO “desconecta” al niño de la realidad dolorosa, lo lleva a un mundo de fantasías, el sueño.
Por supuesto que en esa etapa de vida el EGO es un gran amigo y así se va presentando a la naciente conciencia del ser.
El EGO se pone en lugar de un “salvador”, cosa que es cierta, de cierta forma.
El problema se avecina cuando el EGO se mantiene en el control del niño, siendo que éste va adquiriendo otros instrumentos y formas de conectarse con los demás y con la realidad, además de operar sobre ella.
El EGO en funcionamiento, cuando ya no es necesario, lleva a la persona a aislarse, a manipular a los demás, a situaciones de conflicto interno y externo, a multitud de desequilibrios, a una vida caótica y de desconexión con la realidad más o menos intensa.
Es necesario que el niño sea educado correctamente para que el EGO se vaya reduciendo, para que quede en su rol de herramienta útil en situaciones de extrema necesidad, cuando la impotencia gana nuevamente a la persona y no tiene prácticamente ninguna otra opción que recurrir a él.
Nuestro Creador, que es también es nuestro Maestro, nos brinda instrumentos de liberación del EGO, nos instala en nuestro lugar, nos fortalece en nuestra identidad, pero no de forma mágica o milagrosa, sino a través de un mapa de conductas que debemos conocer y aplicar, para que de esa forma podamos crecer integralmente, derrocar al EGO situado como dios al cual servimos en esclavitud.
El mapa de conductas se denomina “Torá”, que en hebreo quiere decir “instrucción”, “guía”, “ley”.
La Torá noájica es oral, se compone de siete mandamientos fundamentales, así como el relato de la entrega de los mismos por parte de Dios al patriarca Noaj.
La Torá judía es tanto oral como escrita, uno de cuyos componentes es el Decálogo, que estamos comentando en esta oportunidad. Los catorce mandamientos que componen el Decálogo están incluidos dentro del conjunto de 613 mandamientos que Dios ha dado para la nación judía, para ellos y no para el resto de las naciones. Así como la Torá que Él ha dado a los judíos es para ellos, y no para los gentiles.
Sin embargo, ambos tienen el mismo peso, similar valor, idénticas intenciones: conducir a la persona y a la sociedad hacia un mundo de Shalom, de plenitud, armonía, gozo consciente de la Presencia de Dios y Su bendición constante.
Si los gentiles conocen y viven sus siete mandamientos, así como el pueblo judío se hace cargo de sus 613 mandamientos, se estará en un mundo que no se encuentre bajo el dominio del EGO, y por consiguiente plagado de personas impotentes y caóticas, sino en un mundo solidario, espléndido, gozoso.
(Sin embargo, el cumplimiento por sí solo no basta para llevar una vida íntegra. Será necesario retomar este tema en otra oportunidad, o buscar lo que ya tenemos publicado al respecto).

El Decálogo, como hemos dicho al comienzo, es para el pueblo judío, pero algunas de sus enseñanzas son aplicables y saludables para el gentil también.
Esto que te enseño ahora es para compartir por ambos.

Estábamos en el relato del comienzo de la vida del individuo, que queda bajo el mando del EGO.
Un estado de caos, de desconexión, de soledad, de dolor, de falsedad, de fantasías, de delirios, de locura, de malicia, de robo, un mundo enfermo por dentro y por fuera.
El primer paso hacia el derrocamiento del EGO lo vemos en la tabla que presentamos más arriba: aceptar la existencia del Otro, sea Dios o el prójimo.
Si el Otro no es más que “algo” para satisfacernos, para ser manipulado, para estar a nuestro servicio, para llenar nuestras apetencias, no le estamos reconociendo una real existencia, sino una funcionalidad, que bien puede ser “usa y bota”. ¿No te ha pasado que alguna persona te haya hecho sentir así? ¿Qué eras “apreciado” mientras le servías de algo, pero luego fuiste borrado del mapa? ¿O quizás eres tú el que así ha hecho con alguien?
El Otro “no existe”, porque no le das lugar en tu corazón.
El bebe no está capacitado pues su sistema nervioso no se ha desarrollado, por tanto es normal que no sea consciente de la existencia de otros… pero tú, ¿qué excusas puedes dar?
Viene Dios y te enseña: “Yo existo, no preciso mandarte que lo creas, ni que tengas “fe”, sino solamente basta con decírtelo. Viste Mis obras, Yo soy quien te sacó de Egipto. Sin embargo, no me interesa que hagamos doctorados en teología, para Mí es más importante que sepas que el prójimo también existe. A Mí no me cambia en nada si tú Me sirves o no, pero a tu prójimo sí le puede afectar del modo en que te comportas con Él. no lo niegues. No lo asesines, ni siquiera simbólicamente. Admite que Yo existo, admite que el prójimo existe. No somos tus sirvientes, no somos tus títeres, Yo soy tu Dios, y él es tú prójimo.”

Cuando se avanza al siguiente escalón se descubre que admitir la existencia del Otro no basta, se debe admitir que existen las relaciones y que no siempre éstas tienen algo que ver conmigo.
El Otro tiene su vida independiente, aunque me cueste admitirlo. El otro tiene sus relaciones y no siempre soy bienvenido en ellas.
Ahora que sé que existe una mamá y un papá, debo aceptar que ellos mantienen una relación que me tiene por fuera y no debo entrar a ella.
Y eso irá pasando en lo sucesivo, con otras personas, con otras relaciones que establezca.
Esto que me limita, también me libera.
Yo también tengo mis relaciones, mis cuestiones privadas en donde yo establezco quien entra y quien no.
Dios también tiene ese “derecho”, el derecho a que no le seamos infieles, que no nos prostituyamos con falsos dioses, ni siquiera movidos por buenas excusas.
Tenemos una relación particular con Él y cuando metemos en medio a dioses, ángeles, mediadores, “salvadores”, ídolos, Jesúses, vírgenes, santos rabinos difuntos, seudo profetas, gurús, etc., estamos haciendo algo incorrecto. Estamos quebrando la fidelidad de la relación que tenemos con Él.
Así como existe el Otro y debemos tomar conciencia y aceptarlo, igualmente con las relaciones que el Otro mantiene, sea que estemos incluidos en ellas o no.

Está el Otro, las relaciones del Otro, estamos nosotros y nuestras relaciones. Está la conciencia de todo esto.
El siguiente paso en la escala del crecimiento es aceptar que el Otro es otro, que tiene derecho a su identidad, a sus decisiones, a ser él mismo, nos guste o no.
No está para darnos placer, no está para que lo manipulemos, tampoco para que nosotros seamos manipulados o nos arrastremos para satisfacerlos.
Él tiene su vida, me guste o no. Sea mi hijo o mi hija, mi alumno o mi empleado, él debe hacer su vida y yo debo respetarlo.
Por supuesto que el sirviente del EGO pretenderá tener bajo su control a todos y todo, no admite que le contradigan, no acepta que le marquen sus errores, no quiere voces disonantes. Él es el amo, aunque en realidad sea un pobrecito esclavo de su EGO.
Sin embargo, la persona que anda a la Luz del Eterno, que está en la escalera de la plenitud no buscará dominar a otros, no negará a los demás sus derechos, no impondrá su voluntad de forma injusta, reconocerá qué puede controlar y que no y no se angustiará por saberse impotente en ciertos aspectos, sino que más bien eso le dará libertad y serenidad.

El siguiente escalón ya incluye admitir que el otro no solamente existe, mantiene sus relaciones que no nos incluyen y otras que sí, es independiente de nuestra voluntad, sino además que el Otro es poderoso sin necesitarnos.
Debe ser duro despertar un día y darse cuenta de que ese mundo que habíamos imaginado en el cual somos el centro, del cual todo depende, que se caería si faltáramos, en realidad sigue tan firme y funcional cuando faltamos.
Más de uno habrá fantaseado con que el mundo nació el día que uno nació, que el mundo es mejor por estar uno aquí, etc., pero en los hechos el mundo gira estemos en él o no.
Somos importantes, sin dudas, pero una partícula de polvo cósmicos en un universo que aparece como infinito.
Somos valiosos, pero mejor es sí nos bajamos del pedestal y admitimos que el otro puede vivir perfectamente sin nuestra presencia.
Ni el divorcio, ni la muerte, ni el alejamiento son el fin para el otro, al menos no debiera serlo.
Dios sigue siendo Dios, con nuestros rezos o sin ellos.
El otro seguirá para adelante, contigo o sin ti.
Es duro, ¿no?
Algunos se niegan a reconocerlo, pobres prisioneros de sus EGOS y se andan imaginando que el mundo se caerá el día que ellos desaparezcan, que Dios tiembla de solo pensar que él no cree en Él… conocemos a varios sujetos así, cabalisteros, magos de las palabras que corrompen lo espiritual, gurús, falsos rabinos, entre otros. Incluso gente de renombre, que se desviven por tener a quien manipular, por ser el centro en la vida de alguien, por recibir el dinero como diezmos, etc.
Eso no es lo que Dios quiere del hombre.

Hasta el cuarto grado hemos llegado a reconocer al otro en su completitud, falta el quinto escalón, en el cual podamos llevar una vida de conexión con el prójimo y con Dios.
Entendemos que el otro es otro en TODOS los aspectos, aunque cueste, aunque duela.
Podemos apreciar lo que posee, en todos los aspectos, pero haremos el esfuerzo para no corrompernos anhelando lo que no es nuestro.
Podremos buscar nuestra propia forma de ser felices, nuestro camino para la plenitud, nuestro sentido de vida.
Claro que podremos hacerlo, cuando no estemos encerrados en las celditas mentales de nuestro EGO.
Al salir de esas paredes maltrechas podemos respetar al prójimo, amarlo, serle fiel, estar conectados.

Pero, mientras no avancemos estos cinco grados, seremos aún esclavos, de una u otra manera. Esclavos en fin.
Está en ti seguir tu camino, ese que Dios te ha marcado, o seguir el camino del EGO.

El poder del espíritu

Te invito a estudiar un poco acerca de la sección que esta semana corresponde ser leída públicamente por los judíos, se denomina parashá Shelaj Lejá.
Como siempre te brindo buen pan para nutrir tu vida, acorde a tu espiritualidad noájica.

Seleccionamos de la parashá

1. El judío debe amar la Tierra Prometida.

2. Construimos nuestra realidad a partir de nuestra percepción-decodificación de lo que sentimos.

3. La correcta autoestima es base de una vida armoniosa.

4. El miedo puede conducir a terribles acciones.

5. Dios no castiga las faltas sino que provoca que se rectifique el orden quebrado.

6. Existen señales sagradas del pacto entre Dios y el pueblo judío.

7. No dejarse llevar por las pasiones, ni las que nacen por deseos externos ni por internos.

8. Recordar cada día que Dios liberó a los judíos de la esclavitud de Egipto.

9. Tzitzit – vestimentas sagradas propias para los judíos-.

 

Dice el texto sagrado de los judíos:

"Mereshit -de lo primero- que amaséis daréis al Eterno una ofrenda alzada, a través de vuestras generaciones."

(Bemidbar / Números 15:21)

Mereshit, que hemos traducido como “de lo primero”, se puede entender también como “desde el principio”.

A la persona se la debe instruir en valores trascendentes y buenas acciones desde el primer momento de vida en este mundo.
Así es educada para que su proceder sea pleno de amor y de respeto hacia el Eterno y hacia el prójimo.

Mientras el niño aún está en su cuna, se lo debe “elevar hacia el Eterno”, tal como expresa el versículo que citamos, lo que en lenguaje figurado representa el prepararlo para que sea una persona íntegra, dedicada por completo a lo que es bueno y justo.
Que su deseo vaya hacia lo alto, para que no se quede hundido en la miseria que resulta de esclavizarse a las pasiones caóticas.

Cuando así se educa a través de todas las generaciones, se preserva la santidad de su nación y la calidad ética de sus integrantes.

 

Relato: El tigre y el zorro

Si se enfrentarán un tigre y un zorro, ¿quién crees que vencería?
Todos sabemos que el tigre es un animal robusto, ágil, sagaz, está preparado para cazar y obtener a sus presas.
En cambio el zorro, ¿qué puede hacer un zorro en contra de un tigre hambriento?

Parece evidente que el tigre lleva las de ganar, sin embargo, déjame que te cuente una vieja fábula:

‘En una ocasión un tigre atrapó a un zorro.
Cuando estaba por devorarlo éste le dijo: “A mí no puedes comerme.”
Respondió el felino: “¿Acaso tu carne es venenosa? Porque de no serlo, ¡no veo motivo para que no seas mi plato principal de mi almuerzo!
El zorro rápidamente añadió: “El Creador me ha designado primer ministro de todas las bestias. Para que lo entiendas, soy importante en el gobierno de Dios, por lo que si me comes o haces cualquier daño estarás desobedeciendo Sus Leyes… ¡no quisiera estar en tu lugar cuando Él te juzgue!”
El tigre, con cara pensativa, comentó: “Mira que eres mentiroso animal… ¿quién te va a creer que tú eres algo más que mi comida?”
El zorro, con toda calma, dijo: “Lo que tienes de fuerte, lo tienes de tonto… ven, acompáñame al bosque y comprobarás mis palabras.”

Dicho lo cual ambos se encaminaron hacia la espesura cercana.
Allí el tigre corroboró las palabras del zorro, pues cada animal que veían escapaba presuroso.
-¿Viste? – dijo el zorro- ¿No te había dicho yo que todos los animales me temen porque saben mi importante rango en el gobierno de Dios?

El tigre asintió con su cabeza y liberó al zorro rápidamente, no sin antes pedirle disculpas y hacerle prometer que no lo denunciaría ante el Rey.’

Como tú puedes comprender, no siempre el que tiene la fuerza se lleva la victoria.

 

Preguntas para repasar y reflexionar

1. ¿Por qué huían los animales al ver al zorro?

2. ¿Cuál era el poder que tenía el zorro sobre el tigre?

3. ¿Cómo relacionas este relato con el comentario que te brindamos más arriba?

4. ¿Te parece que esta enseñanza tiene alguna relevancia para la vida cotidiana?

5. ¿Conoces algún otro relato o anécdota que tenga similar contenido?

6. ¿Cuáles son las señales sagradas del Pacto eterno entre Dios y los judíos?

7. ¿Conoces alguna señal del sagrado Pacto eterno entre Dios y las naciones del mundo?

Tú que dices que eres judío…

El otro día vi unas fotos de un “amigo” en Facebook, en el cual unos gentiles (disfrazados de lo que ellos creen es un judío) celebraban una boda “judía”, con su “rabino” incluido.
Gente muy simpática de nuestra bella América, que conocieron la existencia del noajismo, que les fueron señalados los groseros errores del falso judaísmo mesiánico, que se les advirtió de no vivir una vida de payasos espirituales, pero que sin embargo siguen escogiendo ser quienes no son.

Esto puede generar en los que anhelamos la paz (y por tanto amamos la verdad) diferentes emociones: enojo, desprecio, despecho, vergüenza ajena, horror, entre otras posibilidades, pero esta vez me dio solamente mucha pena.

Gente que anda por la vida en completa oscuridad, encerrados en sus celditas mentales, que se creen mejores por aparentar ser judíos.
Pobres almas que se desesperan por adquirir a precios de oro objetos que ellos creen les darán pátina judaica, que les pagan horrores a supuestos rabinos y malos “doctores” en letras para que les confirmen su “judaísmo”, que se meten en cualquier foro judío para decir “chalom iom tov chaver”, que se cambian los nombres, que festejan cuestiones que no comprenden ni les pertenecen, que sinceramente hacen de payasos por la vida pero con toda unción y ceremonioso ritual.
Claro está, no faltan los que se aprovechan de ellos para obtener dinero, prestigio, dominio, poder, importancia. Aparecen como hongos entre el estiércol húmero aquellos que son falsos rabinos, rabis reformistas o similares, pastores que se hacen pasar por rabinos, rabinos titulados pero que son piratas de la fe, líderes de sectas, cabalisteros varios, entre otra multitud de desprolijos y amanerados sedientos de ser complacidos por estas pobres almas infelices.

Es  bien cierto el dicho popular: “No hay más sordo que aquel que no quiere oír”, y esta gente, las pobres almas que se aferran a sus delirios personales (y compartidos) de ser judíos, son gente que está sordo porque no quieren oír, porque desde pequeños les han inculcado el desprecio a ellos mismos, porque detestan sus vidas pero no se atreven a enfrentar los cambios que en verdad deben hacer, porque prefieren la mentira golosa a la verdad insípida.

Pobre gente, veo sus tristes caras sonriendo debajo de “kipás”, sus espaldas cargadas de mentiras tapadas por “talis”, veo sus falsos nombres, sus falsas identidades, sus falsas imposturas y solamente veo un dolor inmenso, la impotencia en su máxima expresión.

No dudo de que en su mayoría son buena gente, de que son tan desgraciados en su esclavitud que no tienen otro modo de sobrevivir, tal como un pobre esquizofrénico se refugia en su locura, estos otros enfermos espirituales/emocionales se escudan detrás de sus vidas inventadas.
No puedo enojarme con ellos, aunque lo que hacen es malo, malísimo para ellos y para los verdaderos judíos.
No puedo más que entristecerme por ver la degradación de la persona cuando no está en armonía, cuando se llena de supersticiones en vez de vida.

A los malvados que se aprovechan de ellos, a esos “judíos profesionales” que les venden historietas y falsas conversiones, habría que deportarlos a un país de eternas sombras; a los pastores negociantes que un día son rabinos y al otro gurús, habría que encerrarlos en donde no hicieran más daños; pero no será así… los malvados seguirán haciendo su negocio en tanto los que pueden hacer algo callan, miran para otro lado o peor aún… los festejan y les reconocen alguna entidad.

Para finalizar, unas palabras muy simples, bíblicas:

(Tomado de aquí)

El texto en hebreo es esencial para dejar claro por completo el sentido legal de lo expresado.
Dice que cada uno debía traer la documentación legal de su linaje y testimonios de su nacimiento de determinada mujer, para de esa manera estar vinculados a su correspondiente tribu.
No había cuestiones de sentimentalismos, me parece, siento, creo, el espíritu me dice, un rabino Cukier-algo me dijo, el haham Hernández profetiza, el gobierno de tal me asegura, la sangre de aquel me injerta al tronco, etc… nada de delirios, nada de negociados, únicamente documentos y testimonios que sean válidos y presentados ante las autoridades espirituales correspondientes.
El resto: circo.

Para ser judío es necesario haber nacido de madre judía, verdaderamente judía;
o,
convertirse ante un tribunal de personas judías que sean estudiosas de Torá y respetuosas de los mandamientos.
Eso es para SER judío.
Es decir, no vale de nada el apellido, ni si alguna vez en la casa alguien dijo que el tío aquel dijo que en una época éramos judíos, ni tener antiguos ascendientes de España en la época de la inquisición, ni tener un apellido con Z, ni sentirse judío, ni gustar mucho de las cosas judías, ni tener sueños “proféticos” en los cuales se confirma que uno es judío, ni haber leído cosas judías, ni saber hebreo, ni tener amigos judíos, ni haberse no-convertido con un falso rabino, ni por medio de “corrientes” judías que no son respetuosas de los mandamientos ni guardianes de la Torá, ni haber visitado el estado de Israel, ni creerse miembro de las tribus perdidas, ni que el pastor te diga que eres “efraimita”, ni creer en Jesús y por tanto eres judío espiritual, ni… tantas otras mentiras delirantes que algunos inventan o se inventan.
Judío ES quien ha nacido de madre judía, o quien se ha convertido leal y legalmente al judaísmo,
Y, para ser admitido dentro de la familia judía, es necesario que lo pueda demostrar en caso de serle solicitado.
Que tenga documentación que avale su linaje judío, documentación que para quien es judío es posible conseguir.
O la documentación que demuestre que uno se ha convertido leal y legalmente al judaísmo, judaísmo verdadero y no a “corrientes” o falsos judaísmos.

Tal es el requerimiento bíblico para demostrar la pertenencia de uno a la nación de Israel.

Así pues, la verdad es simple, es clara, es pura, es pacífica.
Pueden seguir dando tumbos por la vida, disfrazarse de lo que se les dé la gana, pero al final de cuentas es a Dios a quien se le debe rendir cuentas…

Es una pena por ustedes, por sus familias, pero mucha mayor dolor es por el nefasto daño que le están haciendo a los judíos y al judaísmo…
Sus obras demuestran el gran rechazo que sienten hacia ustedes mismos, hacia quienes son en verdad; y dejan a la vista de los que comprenden cuanto es el enorme odio y repudio que sienten en lo profundo hacia los judíos y el judaísmo.

En definitiva, sus desgraciadas vidas no pasan sin consecuencias, que serán muy oscuras para ustedes en el mundo por venir, pues ¿cómo existir en un mundo de plena verdad con recuerdos de una vida pasada en completa mentira?
Lo terrible es que perjudiquen a víctimas inocentes, a los que están siendo usurpados por ustedes y que terminan siendo condenados por vuestras malas acciones.

Quien quiera oír, oirá.
Quien quiera seguir siendo sordo, seguirá siendo un payaso espiritual y un asesino de almas.

Mis cariños para todos.

Ascender como la luz de la Menorá

Compartimos un comentario y un relato a partir de la sección Behaalotejá, que esta semana leen de manera oficiosa entre los hijos del pueblo judío.

Seleccionamos de la parashá

1. La importancia de mantener encendida la menorá en el Templo.

2. Los levitas reemplazan en el servicio del Templo a los primogénitos.

3. Alcanzar la paz para disfrutar de la bendición constante.

4. La maledicencia acarrea muchas maldiciones.

5. El Sanedrín –Senado judío- como central en la organización nacional en su carácter legislativo y judicial.

6. La humildad –conocer las propias limitaciones, los logros y potencialidades- es indispensable para vivir en armonía.

7. Moshé como el máximo profeta de todas las épocas y lugares.

 

Dice el sagrado texto del pueblo judío:

"…Cuando asciendas las lámparas…"

(Bemidbar / Números 8:2)

El fuego de la Menorá debía encenderse para que ascendiera hasta su máxima altura posible. Que su llama descubriera los límites de su plenitud y no que solamente ardiera hasta extinguirse.

Esto representa la meta personal de alcanzar la plenitud en cada plano de la vida.

¿Cómo se podría conseguir?

Preguntándose y respondiéndose:

1. ¿Quién soy, aquí y ahora?

2. ¿Cuál sentido de vida estoy construyendo con mi forma de ser?

3. ¿Estoy haciendo mi parte para alcanzar la plenitud?

4. ¿Cómo puedo ayudar al prójimo en lugar de concentrarme en mi egoísmo?

5. ¿Qué tengo que dejar de hacer y qué tengo que hacer?

 

Relato: El valor del billete de 50

Alfredo, con el rostro entristecido se reúne con su amiga Marisa a tomar un café. Angustiado le contó sus pesares: que el trabajo, que el dinero, que la relación con su pareja, que su vocación…todo parecía estar mal en su vida.

Marisa introdujo la mano en su cartera, sacó un billete de 50 dólares y le dijo:
– Alfredo, ¿quieres este billete?
Él, un poco confundido al principio, inmediatamente le dijo:
– Claro Marisa…son 50 dólares, ¿quién no los querría?
Entonces Marisa tomó el billete y lo arrugó hasta hacerlo una pequeña bolita. Luego se la mostró a su amigo y volvió a preguntarle:
– Y ahora, ¿lo quieres?
– Marisa, no sé qué pretendes con esto, pero siguen siendo 50 dólares, claro que los tomaré si me lo entregas.
Entonces Marisa desdobló el arrugado billete, lo tiró al piso y lo restregó con su pie en el suelo, levantándolo luego sucio y marcado.
– ¿Lo sigues queriendo?
– Mira Marisa, sigo sin entender que pretendes, pero ese es un billete de 50 dólares y mientras no lo rompas conserva su valor…
– Entonces Alfredo, debes saber que aunque a veces algo no salga como quieres, aunque la vida te arrugue o pisotee, sigues siendo tan valioso como siempre lo hayas sido. Lo que debes conocer es lo que vales en realidad y no lo golpeado que puedas estar en un momento determinado.
Alfredo se quedó mirando a Marisa sin decir palabra alguna mientras el impacto del mensaje penetraba profundamente en su cerebro.
Marisa puso el arrugado billete de su lado en la mesa y con una sonrisa cómplice agregó:
– Toma, guárdalo para que te recuerdes de esto cuando te sientas mal, pero me debes un billete nuevo de 50 dólares para poder usar con el próximo amigo que lo necesite.

 

Preguntas para repasar y reflexionar

1. ¿Cuál es la moraleja de este relato?

2. ¿Cómo lo relacionas con el comentario que ofrecimos más arriba?

3. ¿Te parece que tiene alguna relevancia para la vida cotidiana?

4. ¿Conoces algún otro relato o anécdota que tenga similar contenido?

Resp. 967 – ¿Cómo es la experiencia espiritual del feto?

Jonathan Ortiz nos consulta:

Buen dia Moré,
Primero agradecer por todo lo bueno que nos ha brindado durante este tiempo. Segundo, quisieramos preguntarle lo siguiente:
1. ¿Qué experiencia espiritual vive el feto durante la gestación?
2. ¿Cómo padres qué podemos hacer para que nuestro hijo tenga un buen comienzo espiritual?
3. ¿Cómo podemos maximizar la experiencia espiritual del embarazo?

Un gran abrazo,
Gracias
Jonathan Ortiz, Venezuela

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Resp. 965 – Reproducirse y poblar la tierra

ramon nos consulta:

Muy buen día More, Tenemos una duda importante:
1- ¿El Eterno establece (como obligatorio e imprescindible) que los noájidas deben de reproducirse?
2- ¿o los noájidas no tenemos ninguna ley o derivado CONCRETOS (podria ayudarme con las citas del Tanaj) que dicte que debemos hacerlo?
3-  Sabemos bien que no esta enlistado en los 7 (a ese respecto no tenemos dudas);
4- también revisamos una respuesta que ud. dio en serjudio.com al respecto, en donde contesta una pregunta similar, pero no se indica una referencia para que conozcamos de forma puntual si es obligatorio o no lo es y en dónde lo dice.
5- Asimismo, en El Camino del Gentil Justo aparece una diferencia de opiniones al respecto (pags. 41, 42 y 77 y 78 de la edición en Castellano) y no señala tampoco una conclusión final.
6- ¿O podrá ser, tal vez, que acaso aún no la hay??
Gracias, un abrazo.

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Bendición a todo nivel para ti

Como te tengo acostumbrado, te traigo ahora un rico pan espiritual apto para el noájida, que se prepara con el conocimiento milenario de la sagrada tradición de Israel.
Estamos en la semana en la cual el pueblo judío lee públicamente el texto de la porción llamada “Nasó”, así mismo la semana entrante la nación judía celebra la festividad de Shavuot ((Los noájidas tienen también un motivo para festejar esta celebración, averigua más en este hogar FULVIDA.)), he aquí una enseñanza sobre ambas que quiero compartir contigo.

Dice Dios en la porción de esta semana que la bendición de los sacerdotes al pueblo judío debe comenzar con la siguiente fórmula:

"el Eterno te bendiga y te guarde"
(Bemidbar / Números 6:24)

Se podría pensar que cuando se indica que el Eterno "bendiga", ya no haría falta agregar otra petición, pues, ¿no abarca la "bendición" una clave para el éxito en todos los planos?
Es una pregunta pertinente, puesto que el que es bendito, es bendito en todo.
Tal como aprendemos del patriarca judío Iaacov, cuando dijera a su hermano Esav:

"pues Dios me ha favorecido, porque tengo todo."
(Bereshit / Génesis 33:11)

Entonces, nuestra enseñanza principal estará en comprender el motivo por el cual se solicita del Eterno que no solamente “bendiga”, sino también que “proteja”.

Según explican los sabios de la tradición judía, la "bendición" aquí referida es la que atañe a los bienes materiales, en el nivel de lo palpable, tangible, concreto: salud, dinero, poder, objetos, etc.
Ocurre que muchos tienen un gran suceso en el plano material, pero a causa de esto fracasan estrepitosamente en otras áreas de la existencia, en lo emocional, social, intelectual y/o espiritual.
Por lo cual es imprescindible aprender a trasformar la bendición material en un utensilio para el crecimiento multidimensional, es decir, que a través de la riqueza, el poder, la potencia física, se crezca y se beneficie la persona de manera integral.

La “bendición” se convierte en “protección” cuando la persona toma conciencia de qué implica realmente ser bendita: es haber obtenido un favor inmenso de parte de Dios y por tanto no se enorgullece tontamente, ni se encierra en su egotismo, ni se afana por adquirir más posesiones; sino que aprende a ser humilde, a actuar con altruismo, a estar satisfecho con lo que tiene y disfrutar sanamente de la vida.
Una cosa es ser bendito y otro ser consciente de la bendición y vivir de tal modo que ésta se establezca como base para un mundo de Shalom –paz y plenitud-.

Es muy poco frecuente que esta porción se leída por la nación judía el sábado previo a Shavuot, por lo general se lee la porción anterior.
Sin embargo, hay una clara referencia al sentido espiritual de esta festividad también en la sección que nos incumbe.
Están aquellos judíos que festejan Pesaj, con su mensaje de libertad física, con su quiebre de cadenas, con su salida de la prisión rumbo a una mejor existencia.
Es muy bueno para el judío tener presente Pesaj y celebrarlo, así como reconocer la centralidad del ser libre.
Pero, ¿de qué sirve Pesaj con su libertad si no se completa y complementa con Shavuot?
Shavuot es el tiempo en el cual Dios entregó la Torá al pueblo judío. Por tanto es ocasión de compromiso, responsabilidad, maduración, trascendencia, darse cuenta de que la libertad física sin un sentido para vivir, es seguir esclavo, quizás ya no más de cadenas y cárceles, pero sí de las celditas mentales/emocionales que no permiten a la persona alcanzar la plenitud de sus potencialidades y capacidades.
Cuando uno rompe los esquemas de vida estereotipados, cuando uno se atreve a despojarse de máscaras, es cuando se está en posesión de la libertad completa, en disfrute de la bendición integral.

Dios no liberó a los noájidas en Pesaj, pero el mensaje de valorar la libertad es para toda persona.
Así como lo es el darle un objetivo espiritual a tal libertad.
Solamente eres libre cuando haces algo “útil” con tu vida.
Solamente eres espiritual cuando tus acciones están en concordancia con los mandamientos que Dios te ha dado para cumplir.

Por tanto, tienes en ti la capacidad para ser bendito y de bendición, siempre y cuando no te mientas al solitario.
Serás bendito a pleno cuando no te engañes desobedeciendo a Dios, sea porque Lo niegas, sea porque Le eres infiel con otros “dioses”, sea porque usurpas la herencia judía que en nada te corresponde.
La bendición ya reposa sobre ti, pero es cuestión de darte cuenta de ello y entonces vivir en concordancia.

Despójate de todo lo que te retiene preso injustamente.
Sé libre, sé tu mismo.

Relato: La gran estafa

Una vez llegó al pueblo un distinguido señor acompañado por su mayordomo. Ambos se instalaron en la mejor habitación del único hotel. El hombre publicó un aviso en el periódico local: “Se pagará al contado $10 por cada mono que se traiga a la habitación…”.
La gente del lugar salió apresurada a cazar simios al bosque vecino.
Tal cual lo prometido, el noble caballero compró cientos de monos pagando $10 por cada uno.
Al poco tiempo la población de monos escaseó, por lo cual se hacía difícil cazarlos, visto lo cual el rico hombre ofreció $20 por cada pieza, lo que provocó una nueva cacería masiva en el bosque cercano.
Como realmente era difícil capturarlos y ya casi no se conseguían, el señor ofreció $25, a lo cual los pueblerinos dieron vuelta el bosque para atrapar algún monito suelto.
Ya casi no había monos, por lo que la oferta subió a  $50 por ejemplar.
Sin embargo, el buen hombre debía ausentarse pues asuntos de suma importancia lo reclamaban en la capital, su ayudante quedaría a cargo de la compra de monos.
El pícaro empleado les propuso un singular negocio a los campesinos: “Miren, en las jaulas hay miles de monos que ustedes vendieron hace días al patrón. Yo les venderé los monitos a $35 cada uno. Cuando vuelva mi jefe, ustedes se los vuelven a vender y recibirán  $50 por cada uno. ¡Es un negocio redondo para ustedes!”.
Los ambiciosos pueblerinos se dieron cuenta de la tremenda ganancia que obtendrían de esta trampa: $15 por mono y había miles de monos, esto es igual a miles de pesos para ellos a cambio de engañar al ricachón coleccionista de monos. Juntaron su plata, pidieron prestado, sacaron todos sus ahorros y le dieron fajos gruesos de billetes al desleal empleado.
Éste les entregó las jaulas llenitas de monos y ellos muy contentos se las llevaron a sus casas a la espera de que volviera el ricachón a “regalarles” su dinero.
Al otro día, el empleado se había esfumado de la ciudad. Tampoco volvieron a saber nunca más de su patrón.

Preguntas para repasar y reflexionar

1. ¿Cómo se consigue disfrutar de la bendición completa?

2. ¿Es posible ser esclavo estando en libertad?

3. ¿Qué podrías hacer para que en tu entorno se viviera con mayor libertad, alegría y paz?

4. ¿Cómo se vincula el relato al contenido del comentario ofrecido más arriba?

Versión minimalista o simplificada

Buen día.

Para aquellos usuarios que nos visitan usando la tecnología anticuada y peligrosa del Inernet Explorer 6,
o los que tienen conexión lenta a internet,
o navegan desde un pequeño equipo celular,
o para quien desea una carga de las páginas más veloz y sin distracciones,

les anunciamos que ahora contamos también con una versión simplificada y con características mínimas (que iremos reduciendo aún más con la  ayuda de Dios).

De esta manera podemos ofrecer un mejor servicio de navegación, aunque sin aditamentos ni arreglos estéticos.
Confiamos en vuestro beneplácito y recibimos sugerencias.

Encuentran el link para cambiar al modo de Versión Simplificada a la derecha de su pantalla, encima del menú de opciones personal.

Que cada día tengamos un mejor disfrute de FULVIDA, para servir mejor al Eterno.

Prosperidad para ti

Está en nuestra naturaleza el anhelar bienestar material, incluso riquezas.
Desde el momento que somos cuerpo estamos necesitados de lo material para continuar con vida y para preservar la especia humana.
Además, y no es un aspecto menor, es necesario que aprendamos a edificar en la dimensión física de acuerdo a la ruta provista por el plano espiritual.
Al contrario de lo que predican ciertas doctrinas y religiones, no hay nada negativo en poseer y gozar de los bienes materiales, en tanto estos no sean el centro y la finalidad de la existencia.
Por supuesto que es indispensable que empleemos una parte generosa nuestro bienestar para proveer de bien al prójimo.
Remedio contra el poderío del EGO es el altruismo,  hacer el bien a otro sin esperar nada a cambio.
Cuando nos hacemos libres del EGO, estamos en disposición de recibir dicha, plenitud y gozar de la bendición que desde lo Alto nos otorgan pródigamente.

Si bien el gozo de este mundo es positivo, en tanto no se caiga en cuestiones prohibidas, no debemos olvidar en ningún momento que nuestra meta y caudal no está en Este Mundo, por tanto, que todo lo material sea empleado con sabiduría en procura de la trascendencia.
Es un gran principio que lo físico esté al servicio del Eterno por medio del cumplimiento de los preceptos que Él ordena a cada quien cumplir.

Ahora bien, ¿qué consejos nos dan nuestras Fuentes para obtener riquezas y gozar de ellas?
Brindaremos algunas ideas de modo general.

1- No espere a que su sustento o riqueza provengan de milagros, como llovido del cielo. Es su obligación dedicarse a actividades lícitas con la finalidad de obtener sus ingresos.

2- Si desea, puede comprar billetes de lotería o similares, pero no hacer de esto un modo de vida, ni haga depender su sustento de estos esporádicos beneficios.

3- Abra su mano con generosidad para con su prójimo necesitado (institución educativa de judaísmo tal como serjudio.com, motor de vida como FULVIDA, o persona pobre), pues Arriba le juzgan tal como usted juzga. Si usted actúa con benevolencia, de Arriba le dictan una sentencia benévola. Si usted es dadivoso con el prójimo, tiene asegurada la bendición.

4- Separe el diez por ciento de sus ingresos para darle a los pobres o a instituciones de bondad y justicia con lealtad a Dios.
No es su obligación, no es su deber, no es un mandamiento, no será maldito si no lo hace, pero es bueno hacerlo.

5- Que todos los preceptos que cumpla los haga con entereza, no por interés de obtener algún beneficio, sea en Este Mundo o el Venidero, sino porque eso es lo que el Eterno demanda de usted. Quien sirve al Eterno sin dobles intenciones es merecedor de las mayores bendiciones, tal cual expresa con claridad la Torá –judía- y los judíos mencionan a diario dos veces en nuestras plegarias.

6- Eleve sus pedidos por sustento y riqueza al Eterno. Con confianza en Él, con corazón puro e íntegro. No demande. No exija. No extorsione. No quiera negociar. No quiera manipular. Pida, como pide un siervo a su amo. Pida, como pide a su padre un amoroso y respetuoso hijo.

7- Done dinero u objetos para comunidades noájidas VERDADERAS (cuidado, que nada de lo suyo sirva para enriquecer a los viles enemigos de Dios que se disfrazan de santidad). En tiempos pasados, cuando el santo Templo estaba en pie, las personas ofrendaban ciertos elementos sabiendo que con esto eran beneficiados con prosperidad.

8- Comercie con justicia y misericordia. No busque la ganancia inmoral ni el beneficio de los miserables.

9- No sea mezquino a la hora de festejar. Invite hasta a aquellos familiares lejanos o con los cuales no tiene buenas relaciones. Sin derrochar innecesariamente, sepa gastar en abundancia para compartir las alegrías con bondad y honestidad.

10- Que sea un hábito el invitar personas a su hogar, para alimentarlos o darles hospedaje. Sean estas personas indigentes de la ciudad o visitantes.

11- En sus fiestas particulares no olvide convidar con manjares a los pobres. Que la fiesta no sea un motivo de exclusivo egoísmo, sino de crecimiento compartido.

12- Respete a su esposa más que a usted mismo. Embellézcala, cómprele regalos, hágala sentir la reina del hogar.
Si usted es mujer, respete a su marido, hágale creer que el está la mando, permítale que él tenga iniciativas.
Entre ambos que hagan emerger la paz hogareña.

13- No dude en asociarse con personas íntegras a la hora de establecer algún negocio.

14- Devuelva lo antes posible los préstamos. No se quede con nada que no le corresponde ni pertenece.

15- Pague a tiempo sus deudas.

16- Proponga y ejecute planes de desarrollo comercial, aunque no se crea capacitado y le dé miedo intentarlo. Consulte con expertos, nunca está demás.

17- No gaste el dinero que no le pertenece en vicios (alcohol, sexo infiel, cigarro, drogas ilegales, idolatría, religiones, adicción al juego, etc.).

18- Contribuya con maestros de VERDADERO noajismo de manera constante, asóciese a ellos para que puedan hacer su trabajo de santidad a través del dinero que usted aporta. Dé una mano a FULVIDA para que continuemos haciendo nuestra obra.

19- Haga sentir a su cónyuge como un rey/reina y a sus hijos como príncipes (pero sin malcriarlos).
Un hogar dichoso es una fuente de bienestar.

20- Agradezca, por todo.

Hasta aquí estos breves consejos.
Confío en que sabrá ponerlos en práctica y que pronto será prospero y de bendición para muchos.
Ten presente nuestra obra, que es TU obra, porque si no nos valoras, ¿cómo crees que eres valorado?