A algunas personas pareciera que se les presentaran circunstancias más adversas que a otros, ¿a qué se deberá?
A algunas personas pareciera que se les presentaran circunstancias más favorables que a otros, ¿a qué se deberá?
¿Será un oscuro destino sellado por fuerzas misteriosas?
¿Será ese otro misterio llamado “estrella”, “fortuna”, “suerte”?
¿Será por maldición o bendición de algún dios?
¿Será por ineptitud personal?
¿Será obra de la genética?
¿Será un conglomerado social predispuesto para actuar así?
¿Será por la educación recibida y adquirida?
¿Será por la diferente capacidad para armonizar los cinco planos de existencia personal?
¿Será por algún motivo místico, tal como el “karma”?
¿Será un problema de percepción?
¿Será por no valorar las cosas en su debido contexto?
¿A qué se deberá?
A similares circunstancias, algunos las denominan “oportunidades”, en tanto que los de al lado las llaman “desgracias”, ¿a que se deberá?
El consejo es: mira la realidad sin temor, para que puedas convertir las “desgracias” en “oportunidades”.
No te atormentes por comprender lo que está fuera de tu comprensión; ni te angusties por dominar aquello que no puedes controlar.
Sé simple, sé íntegro, sé creativo, sé agradecido, haz tu parte y deja que el universo se encargue de la suya.