Archivo de la categoría: Mandamientos Universales

¿Más importante una relación con Dios que una relación con los Preceptos? (Parte 2)

doble_cara

Hace algún tiempo, había improvisado un pequeño artículo, titulado exactamente igual a éste, con ocasión a un comentario que había recibido en una fotografía que tengo publicada en mi perfil del Facebook; y en el que me parecía que el comentario estaba incorrecto porque sostenía que ante todo era más importante “tener una relación con Dios”.

En su momento indique que dicho termino no solo es una escusa perfecta para inventarse cualquier religión o rito, o inventarse cualquier tipo de conducta moralista al buen estilo de la vieja usanza religiosa; sino que también era imposible tener una “una relación con Dios” si la persona desconoce su propia identidad y el Código Noájida.

En su momento indique que lo más importante para el gentil es reconocer, conocer, aceptar y aplicar los Principios Universales, pues de lo contrario, tendría cualquier cosa menos “una relación con Dios”, ya que si pone en primer orden de prioridades lo que él mismo cree que es tener una relación con lo divino, haría lo mismo que han hecho las religiones: inventar sus dioses, ritos, dogmas, libros, etc. Si por el contrario la persona logra concentrarse en sus propios deberes que nacen de las Leyes Fundamentales, encuentra su justa “posición” y ubicación en el Mundo, pues concluye que los siete principios no son difíciles de cumplir; y es en su sencillez libre de todo ritual, que la obediencia a su observancia da como resultado la contrucción del mundo terrenal en el paraíso divino. Esto porque El Código Noájida apunta a una Ética Objetiva y Universal de la conducta humana, superior a la que pueda surgir del intelecto humano (viciado por deseo Ególatra que conveniente a los propios intereses).

Así, no se puede hablar de tener una relación con Dios, si se omite o desconoce Las Siete Leyes, o si solamente se les conoce como referencia; de lo contrario se tendría una relación pero con el propio dios de la persona (su EGO). Para subrayar, tener una relación con Dios no es el fin, sino que lo importante es tener una relación con el Código Noájida, reconociéndolo y conociéndolo.

Sobre el hecho de conocer y reconocer las Leyes Noájidas por parte del no judío, el sabio judío Maimónides (esto es una opinión personal), parte del hecho de que la persona ya los conoce o sabe de su existencia o vigencia; pero puede dar un paso más allá; un paso de reconocer el origen celestial del Código Noájida, en tanto las conoce como primera acción, o se concentra en él, o bien se educa en el Código Noájida.

Noten:

“Halajá 11

Todo gentil que se compromete a cumplir con los Siete Preceptos Universales, se lo denomina un gentil piadoso y tiene su porción del Mundo Venidero [derivado de Sanhedrin 90a]; en tanto reconoce que estos mandamientos le fueron ordenados por el Eterno y reconfirmadas a través de Moisés en la entrega de la Torá, acerca de que los descendientes de Noé habían sido ordenados para cumplirlos desde tiempo antiguos…” (Lo resaltado en negro no es del original)

http://fulvida.com/varios/temas-frecuentes/noajismo-un-marco-legal-claro-y-preciso-para-los-judos-y-lo-judaico

“Todo gentil que se compromete a cumplir…”: Se comprende que la persona de antemano sabe de su existencia o de su vigencia antes de su compromiso. La persona sabe que las Leyes Universales existen y que son. Aunque  ignore quien fue su Legislador, su fuente o su origen, no puede dudar de que la Ética Universal Objetiva exista y sea.

“…en tanto reconoce que estos mandamientos le fueron ordenados por el Eterno y reconfirmadas a través de Moisés en la entrega de la Torá…”: Se entiende que la persona puede dar un paso más allá luego de su compromiso; puede llegar a convencerse y reconocer o aceptar el origen divino del Código Noájida. Pero primero debe de saber de ellos o estar consciente de su vigencia.

“…acerca de que los descendientes de Noé habían sido ordenados para cumplirlos desde tiempo antiguos…”: Se entiende que la persona desarrolla un estudio concienzudo de los antecedentes históricos del Código.

Hay otros subtemas que pueden salir de la cita trascrita (gentil piadoso, mundo venidero, autoridad de Moisés o sus representantes en asuntos de los no-judíos por esa reconfirmación del Código Noájida en la entrega de la Tora, entre los que se puede notar); sin embargo, me quiero enfocar en el verbo resaltado “reconocer” el origen divino.

¿Cómo puede una persona reconocer el origen divino del Código Noájida?

Como personas pensantes, Noájidas consientes, constructoras de shalom, estudiosos de Las Leyes Universales, NO damos como respuesta la “fe” en creer por creer, o aceptar por aceptar; ni tampoco tomamos decisiones personales por la presión que produce los antiguos prejuicios religiosos de recompensas, penas o castigos por creer o no creer, rechazar o aceptar.

Tampoco aceptamos NI NINGUNA VERDAD por “fe ciega”, porque cuando estamos en presencia de “la falta de respuesta”, la sensación de impotencia ante dicha falta hace que el EGO active el narcótico de la “fe”, o de creer por creer, sin usar un gramo de nuestras otras herramientas, tales como el análisis, el estudio o la comprensión.

Si aceptamos, por simple “Fe”, un hecho o una afirmación sin ni siquiera dedicarle unos minutos de análisis, le estamos rindiendo culto a la Fe del Ego, porque en lugar de pensar o racionalizar o buscar una explicación lógica, se decidió aceptar, por la simple creencia, lo que es desconocido, desconectándose de la realidad para entrar a vivir al mundo de lo irreal, del cuento mágico, es decir, de la fe de las religiones.

Así pues, dudo mucho que el Noájida consciente de su identidad y libre de los miedos y prejuicios que imponen las religiones sobre cielos e infiernos, tome a la ligera ese reconocimiento divino del Código Noájida. Dudo mucho que lo acepte “de un solo golpe”.

Es más, el mismo sabio en sus líneas describe un proceso paulatino de reconocimiento sobre la divinidad del Código en el tanto se le prioriza; pues de su analisis concienzudo se puede facilmente observar como el compendio legislativo del gentil no surgió de la necesidad de regular un supuesto de hecho; sino que de antes de que surgiera el presupuesto de hecho, de antemano ese hecho ya estaba regulado:

“…Todo gentil que se compromete a cumplir con los Siete Preceptos Universales…”: Da entender que la persona DEBE primeramente conocer los preceptos ANTES de comprometerse, sino ¿Cómo se va a comprometer a algo que desconoce? Obviamente no se refiere a una simple lectura superficial de los preceptos, o su conocimiento liviano de cuales son; sino a un estudio serio o analítico de sus alcances para que pueda tomar la decisión de comprometerse con ellas; de otro modo ¿Cómo se puede comprometer a algo que apenas conoce?

“…en tanto reconoce que estos mandamientos le fueron ordenados por el Eterno y reconfirmadas a través de Moisés en la entrega de la Torá…”: Da entender que en el tanto la persona analiza la Ética Universal Objetiva de los preceptos, no solo se compromete con ella, sino que también paulatinamente empieza a concluir que las Leyes Noajidas no son producto del ingenio humano por cuanto regulan supuestos de hecho que no sucedieron primero; y aunque competen a las acciones de los hombres, Los Preceptos Noájidas no nacieron del fuero intelectual humano como necesidad de regular acciones que sucedían y que necesitaban regularse; y que por ende, el hombre tiene una filiación con algo más que a simple materia y energía.

Así las cosas, parece aún mas ilógica e irracional la afirmación de lemas religiosos de algunas personas, tales como que es más importante “tener una relación con Dios”, cuando se deja en segundo plano el tema de las Leyes Noájidas. Resulta imposible adquirir un grado de conciencia de Dios tal, si se deja de lado, en segundo plano, o apartada de la identidad del gentil, su propio compendio legal.

Pero aún hay algo más sorprendente, y más escalofriante a la vez, para el declarante de lemas religiosos; o el que pone de primer orden en su vida cualquier cosa menos la Ética Universal Objetiva del Código Noájida. Me refiero a esa persona que rebusca “las cosas de Dios”, la religión, los ritos, el dogma, el que se hace pasar por quien no es, el que copia la identidad judía, el que exige (con actitudes o palabras) conocer los secretos de la Tora judía, que es motivado por su sentimiento barato de “amor a Dios”.

La persona que deja de lado, en segundo plano, o como tema secundario el Código Noájida, o la Ética Universal Objetiva que surge de las leyes, SIGUE siendo enemigo de Israel y de los judíos; aunque se identifique como gentil, o sepa algo sobre el funcionamiento de su EGO. Si la persona pone en primer orden su “amor subjetivo a Dios”  en lugar del amor objetivo hacia Las Leyes Noájidas, no puede evitar seguir siendo un envidioso al grado de odiar a Israel y a los judíos.

Ojo: puse el verbo “seguir” en modo indicativo presente, porque en distinta medida existe en nosotros los no judíos, cierto odio y envidia hacia los judíos; emociones aberrantes de las que nos libramos en la medida de que nos concentremos en nuestro patrimonio, en lo nuestro, en nuestro deber; y no en lo que hacen los judíos y sus obligaciones, costumbres, tradiciones, con la intención de copiarles, robarles, o de alguna forma igualarles.

( http://fulvida.com/fortalecimiento/pensamiento/el-no-vivo )

Los Sabios de Israel enseñaron que con la entrega de la Tora a los judíos, el odio y la envidia empezó en los no judíos hacia Israel. El Moré explica que esa envidia y ese odio sigue hoy en día, camuflado en ilógicos motivos.

Noten:

En el santo Talmud, recopilación sagrada de la Torá Oral, encontramos el siguiente pasaje que resulta a la vez misterioso y esclarecedor:

“¿Por qué se llama Sinaí al monte (en donde Dios entregó la Torá a los judíos)?
Respondieron los sabios: es el monte en que descendió la envidia/odio (siná) de los gentiles en contra de Israel”
Talmud Babli, Shabbat 89a

Los sabios ..Nos dicen algo sorprendente, una verdadera revelación, la palabra “sinaí” deriva de la misma raíz idiomática que “siná”, que significa odio al mismo tiempo que envidia.
El monte se llamaba de otra manera, pero cuando Israel recibió a perpetuidad la Torá en ese sitio, el monte fue llamado de otra manera, en alusión a algo trascendente que había ocurrido allí.
Pero, no se le denominó “monte de la luz”, ni “monte del encuentro con Dios”, ni “monte de la recepción de la Torá”… se le llamó y se le conoce luego de milenios como “monte donde descendió el odio/envidia de los gentiles en contra de Israel“.
Pero, ¿cómo es esto?
Si lo que descendió allí fue la Torá que Dios entregó a perpetuidad como herencia y patrimonio de Israel, ¿cómo nos dicen los sabios santos que lo que descendió fue el odio/envidia?

Debes reconocer que los sabios no se equivocan en asuntos de espiritualidad, si ellos dicen que descendió la “siná” de los gentiles en contra de los judíos, así mismo es.

Odian y envidian a Israel, porque fue el pueblo que se esmeró y se consagró al punto de ser meritorio para recibir la Torá.
Odian y envidian a Israel, porque a pesar de ser una nación débil y pequeña, con muchas desventajas materiales, igualmente pudo ser leal, con sus altibajos, pero nunca habiendo caído tan bajo como el resto de las naciones del mundo.
Odian y envidian a Israel, porque cuando los hebreos eran noájidas (en el tiempo antes de la entrega de la Torá) vivían de acuerdo a los Siete Mandamientos y por eso fueron escogidos para recibir la Torá.
Odian y envidian a los judíos, porque son ellos los dueños perpetuos de la Torá y no las naciones del mundo.
Odian y envidian a los judíos, porque ellos tienen de primera mano un texto sagrado que ellos anhelan para sí, que desean obtener, que quieren ser dueños, que desean leer y estudiar y de no poder hacerlo quemarán el texto y exterminarán a los judíos.

Así ha sido en el pasado y sigue siendo hoy en día…”

(http://serjudio.com/sitra-ajra/idolatria/%C2%BFque-descendio-para-los-gentiles-en-sinai-cuando-descendio-la-tora-para-los-judios Lo resaltado en negro es del original).

Así las cosas, y para concluir, desconocer nuestro propio Código, el del gentil, o restarle importancia dejándolo en segundos lugares, sustituyendo su lugar con la subjetiva “relación con Dios” no solo es un error, un imposible, un ilógico, o algo propio de la ridiculez de la religión y de sus ignorantes seguidores; además tal descuido o desatención conduce a ganarse el indigno título de “enemigo de Israel”, por cuanto la persona al poner en primer orden lo que ella misma considera como “relación con Dios”, su actitud oculta es pendenciera y envidiosa  con aquellos que desde un inicio obedecieron.

¿Sigue querido amigo (a) considerando más importante una relación con Dios que una relación con los Preceptos?

Portar Vida como obligación directa de la Prohibicion del Asesinato

El siguiente texto, es tomado por completo del Articulo publicado en SerJudio.com, bajo el tículo: «Parashat Itró 5760«, escrito en su totalidad por Yehuda Ribco.

 

Compartir las cargas

«Así aliviarás la carga que hay sobre ti, haciendo que otros la compartan contigo.» (She. 18:22)

«Rabi Bunem escuchó el elogio de un hombre que amaba la soledad y comentó:

_ A veces un hombre ama la soledad, y se dirige al bosque para estar solo, pero desde allí echa una mirada entre las ramas para ver si no hay alguien que lo mira desde lejos admirado».

A veces conocemos personas (amigos, familiares, conocidos, etc.) que sufren y se apartan de nosotros, y a veces dan el pretexto: «solo estoy mejor».

Puede ser que sus palabras sean sinceras (no como el personaje del relato).

Puede ser que sus sentimientos, su deseo de soledad, sea puro.

Pero, en general, muy íntimamente desde el bosque de la soledad están esperando la mirada de otro significativo, la palabra de otro; o mejor: el oído abierto de otro, el corazón sensible de otro.

Porque la Torá nos lo dice claramente hoy: las cargas personales se alivian si se comparten.

Así pues, si conocemos a alguien que sufre, acompañándolo, prestándole atención, expresando con nuestras palabras o actos o silencios que lo reconocemos como un ser importante para nosotros, entonces, su sufrimiento se aliviará.

Seguramente que no lograremos evitar padecimientos reales (heridas, enfermedades, muertes, pobreza, etc.), pero el pensamiento y el espíritu pueden alcanzar pequeños «milagros» dispuestos a nuestro alrededor para nosotros. Si sabemos cómo alcanzarlos, si sabemos cómo compartirlos…383402_577891805565351_446084109_n

(Fotografía tomada del perfil de Facebook «Amazing Photos in the World»)

Resp. 1132 – cain y abel tenian mandato del eterno de hacer sacrificios?

concoraje nos consulta:

saludos a todos mis queridos amigos.
ya e investigado en la web sobre mi pregunta. no e encontrado respuesta. aun asi pido disculpas si este tema ya fue contestado .mi pregunta es…
si los primeros hombres tenían las 6 leyes adamicas que son las mismas que noajidas mas 1 entre las cuales no se encuentra el mandamiento de hacer sacrificios ¿porque los ofrecían?. mi religión esta aun sin definir busco la verdad.quisiera darme a conocer un poco mas en esta web pero no se donde escribir sobre mi.g
manuel camacho 44 años comerciante cordoba españa

Seguir leyendo Resp. 1132 – cain y abel tenian mandato del eterno de hacer sacrificios?

¿Cómo sabemos quien fue nuestro Bisabuelo o Tatarabuelo?

Hace unos días, en un post recientemente publicado, se generó un tema interesante en el apartado para los comentarios.

(http://fulvida.com/id-noajica/identidad/usted-es-nojida)

El tema básicamente era si se podían diferenciar el Código Noájida y la identidad del No-Judío de los cuentos y mitos de las religiones conocidas. Digo esto porque, directamente, en los comentarios no se cuestionó si el código Noájida era un invento; sino que el planteamiento directo era sobre la existencia real de Noé, y esto, indirectamente apuntaba, a que si Noé no existió, podría pensarse que el pacto Noájida y la identidad Noájida tampoco.

De hecho, el comentario 5.1.2 hace una pregunta bien directa: “¿…como sabe que esto que le estoy explicando y usted ha comentado por fin es LA VERDAD y no otro cuento mas de alguna religión o secta?”

Como personas pensantes, Noájidas consientes, defensora de nuestra identidad, constructoras de shalom, estudiosos de Las Leyes Universales, no aceptamos NADA NI NINGUNA VERDAD por “fe ciega”. Nos cuidamos y vemos con lupa nuestras sensaciones de impotencia, porque son en ellas donde el EGO del ser humano entra como narcótico para aminorar nuestro dolor ante la falta de control, poder o de respuesta ante lo que desconocemos.

Ante la falta de poder o control de algo que desconocemos, NO damos como respuesta la “fe” en creer por creer, o aceptar por aceptar lo que otro dice como supuesto hecho verídico aunque sea irracionalmente ilógico; ya si lo hacemos, nos convertiríamos en “ególatras”, que es lo mismo que la idolatría, pues estaríamos adorando al placentero narcótico- EGO-, pero sin personalizarlo en ninguna imagen. Le estaríamos rindiendo culto a la Fe del Ego, porque en lugar de pensar o racionalizar o buscar una explicación lógica, se decidió aceptar, por la simple creencia, lo que es desconocido, desconectándose de la realidad para entrar a vivir al mundo de lo irreal, del cuento mágico, es decir, de la fe de las religiones.

Así pues, cuando tenemos alguna duda sobre la veracidad de algún hecho que se nos intente imponer como “verdad absoluta”, NO asumimos una posición pasiva de aceptación; todo lo contario: analizamos, cuestionamos, investigamos, estudiamos, pensamos, racionalizamos, preguntamos, pedimos ayuda a los que saben y entienden, todo con el fin de acercarnos lo más que se pueda, a la Verdad Real de los Hechos, cuya finalidad y objetivo siempre va a ser desaprender para aprender a ser mejores personas sin prejuicios de ningún tipo y gozando de la libertad que gratuitamente se nos regaló.

Así las cosas, como les comentaba, un buen socio de este sitio, en su libertad como Noájida consiente,  expuso un argumento personal muy valedero y fundamentado en que tanto el diluvio universal como el personaje “Noé” podrían perfectamente catalogarse como mitóticos debido al conocimiento científico que hoy día se maneja. Apuntaba que si bien es cierto se pudiera pensar en posibles inundaciones mesopotámicas, científicamente era imposible que fuera global. También, comparaba al personaje Noé con un mito como cualquier otro, ya que en otras culturas, ajenas a las judías, existía también la historia del diluvio; y todo esto para afirmar que no existe modo de saber si la condición Noájida (o bien, la identidad del gentil y a su vez, el Código Noájida) son la “verdad absoluta” (Comentario 8).

Sus puntos de vista, valederos como de cualquier persona consciente y valientemente desarraigada de la religión, me conquistaron una opinión personal también a mí; un juicio de valor en que argumentar alguna posición propia. Usted mi querido lector puede hacer lo mismo, porque no estamos para convencer a nadie, sino para desarrollar lo nuestro, lo propio, lo que por derecho nos pertenece: nuestra real identidad; y no la que impone el religioso de turno.

¿Cómo sabemos quien fue nuestro Bisabuelo?

Les voy a contar lo que se del mío por línea paterna, por ser la familia más cercana que tuve. El en vida se llamo Ricardo Pérez (que en paz descanse). Físicamente se que era un hombre muy fornido, que usaba un pequeño bigote bien recortado, y un pelo crespo con un peinado de línea a un lado. He llegado a saber también que le gustaba andar siempre de corbata, y bien presentado. Por la información que he obtenido de una fuente confiable (mi abuela y suegra del señor Pérez), que el señor era Maquinista de tren para la Compañía Bananera cuando estaba en Costa Rica. Le gustaba andar una “smitan hueso” siempre cargada, en la pretina de su pantalón por si alguien se quería pasar de listo en no pagar el pasaje.

Cuenta la abuela, que su carácter no era muy dulce. Era un hombre “bravo”, enojón, de carácter duro y violento, de mano dura y poco paciente lo que lo hizo meterse en problemas cuando había convulsión política en mi pais; y que todo contrastaba con su especial afición al beisbol, a la música de la orquesta nacional, al respeto que merecía la cena familiar, al sentido de responsabilidad, y a su tremendo orden que mantenía en casa.

También he llegado a saber que en sus años mozos, se convirtió en un habilidoso mecánico de la Compañía Bananera, lo que aprovecho para cuando emigró hacia San José, incursionar en su propio taller mecánico, resaltando su trabajo y siendo reconocido por su sus colegas.

Falleció en San José, alrededor de 40 años antes de mi nacimiento. No lo llegue a conocer personalmente. La información que sé de él ha sido suplica oralmente y EN SU TOTALIDAD por mi abuela y mi papa, quienes conocieron personalmente al señor Pérez.

El hecho de no haberlo conocido, no quiere decir que no haya existido por cuanto yo estoy acá y ustedes me están leyendo. Lo cierto es que provengo de él porque estoy aquí en este tiempo y espacio. Mi bisabuelo contribuyo con la vida mi abuelo; mi abuelo con la vida mi padre, y mi padre con mi vida y por eso estoy acá.

De no ser por el testimonio de ellos, no tendría información de mi descendiente. De mi bisabuelo no existe mayor información que no sea la trasmitida oral y tradicionalmente,  por la escasez de prueba que pudiera constar en las instituciones públicas civiles; pero sé que existió porque mi abuela y mi papa me contaron de él (que sí lo conocieron) y porque yo estoy acá escribiendo. Siguiendo esa línea, eso quiere decir que yo provengo de una persona (mi bisabuelo) de la cual no conocí y de la cual no hay mayor información que la recibida por los testimonios de mi papa y mi abuela. Pero sé que existió físicamente porque yo existo físicamente. Es decir, yo mismo soy el testimonio vivo de la existencia del señor Pérez.

Es casi imposible corroborar su existencia a través de otros medios, debido al precario control de la población que existía en mi país, lo que hacía que incluso en los actos jurídicos en los que involucraban personas con cosas, no fueran públicos, ni el Estado supiera de ellos. En ocasión pasada, algo les había comentado en este artículo:

http://fulvida.com/varios/de-usuarios/el-error-de-la-especulacion-mesianica-cristiana

Pero desmeritar por falta de prueba científica la existencia de mi bisabuelo, o subestimar el testimonio de los mayores y reducirlos al grado de mito, sería afirmar que yo no existo tampoco; cosa que no es cierta, porque me están leyendo.

En mi propio caso, desconfiar de la veracidad al grado de la mitología de un antepasado es muy aventurado, y hasta cierto grado poco científico o metodológico; cuando no se obtiene pruebas directas de su vida; pues a través de otros elementos perfectamente se puede reconstruir su existencia en su tiempo y espacio. Tal y como en algún momento indique en el artículo anterior, en los años 1.700 en mi país; la población era censada con altos márgenes de errores pues no existían registros oficiales. Solamente vía testimonial o por declaración de parte se confiaba en que X era hijo de Y. Sin embargo esas declaraciones o testimonios eran tomados en cuenta para filiar persona a persona.

Por otro lado, hasta algunos héroes nacionales se sabe de ellos por esa vía, pues quedaron pocos registros de ellos. Caso en particular fue el señor Juan Santamaría, del cual se sabe de él por un testimonio de un sobreviviente de la campaña nacional de 1856 y por una pensión de guerra que se le otorgó a su señora madre, del cual quedo registrada documentalmente. Pero de su niñez, adolescencia y vida en general se sabe poco (hasta donde yo conozco).

En fin, para el caso, la confianza de TODA la prueba indiciaria (testimonial o tradicional vía oral) ayuda al investigador a reconstruir una verdad.

¿Qué pasa entonces con la Identidad del Noájida o el Código Noájida?

Exactamente lo mismo. Sabemos que las Leyes Universales están presentes, existen, son. No dependen de nada más que de ellas mismas para saber que ellas son y que el hombre tiene que ajustar su comportamiento a ellas.

Cualquier suceso pasado, presente o futuro, es perfectamente analizable a través de las Leyes Universales, pues no son leyes arcaicas o desactualizadas; regulan la conducta humana cotidiana y en cualquier espacio y tiempo, en relación con un límite necesario, para hacer del Humano un ser más allá de un animal instintivo. Son como la Declaración de los Derechos Humanos, que no varía ni cambia ni se disminuyen, que se reconocen solo por tener la condición humana.

El hecho de que no hayamos conocido sobre la existencia de Noé por los medios científicos tradicionales o actuales, ni que se haya descubierto prueba física contundente respeto al Diluvio Universal, no quiere decir que las Leyes Universales sean mito o que la identidad del gentil no sea, porque se estaría contraviniendo con la condición humana misma, reduciendo al humano a un animal más del reino animal sin límites mas que los que dicta el instinto natural; cosa imposible porque en estos momentos están haciendo uso de la comprensión de lectura a través de la vista, lo que en estos momentos está generando pensamiento en cada lector.

Nuestra capacidad de pensamiento, de raciocinio, de análisis, de no aceptar por “fe” lo que dictan los religiosos de turno, es prueba suficiente para demostrar nuestra propia identidad; nuestros límites de lo bueno y malo, nuestros frenos inhibitorios hacia algunas conductas por considerarlas NO BUENAS apuntan por si mismos al Código Noájida. ¿Qué persona, tribu, nación, familia, estado, etc ve como bueno el robo, el asesinato, el maltrato animal, el adulterio, la blasfemia o el politeísmo? Hasta el más desentendido de su identidad ve como MALAS esas conductas, aunque dicha persona profese religión o sea parte de cualquier tribu; porque no son normas impuestas socialmente o culturalmente, sino concienzudamente.

Ahora, negar la Identidad Noájida basándose en la inexistencia de Noé o del Diluvio Universal por falta de prueba científica, es exactamente como negar al bisabuelo por no tener prueba científica de su existencia. Si supeditamos la falta de existencia de La identidad Noájida y el Código Noájida a la falta prueba científica de existencia real de Noé o del Diluvio Universal, estaríamos afirmando que el hombre es un animal instintivo sin moral ni ética; cosa que no es cierta pues somos “Homo sapiens” con conciencia de estar vivos, y no “Homo erectus” cuya finalidad en la vida era únicamente sobrevivir.

Ahora, respecto de Noé y el Diluvio, como Noájidas conscientes, tenemos la libertad de elegir si confiamos en lo dicho por los mayores (los sabios judíos) respecto a su existencia, tal y como confiamos en nuestros mayores respecto de nuestros antepasados que no conocimos. O bien, podemos no confiar en sus nuestros mayores (los sabios judíos) respeto a su “versión de los hechos” respeto de Noé y el Diluvio; pero lo cierto es que desacreditar la Identidad Noájida y el Código Noájida por falta de prueba científica es un error, pues la sola conciencia del hombre de lo que es bueno y lo que no lo es, su capacidad analítica y racional, su espíritu de aventura  por la descubrir el Mundo, es prueba suficiente de su identidad única, no prejuiciada por la dictada por la religión, sino esa identidad “divina” que lo une a algo más que a materia y energía.

 

Sin título  (Descansa en paz bisabuelito. Sin haberte conocido yo te amo)

¿La fe FUNCIONA?

En la practica la fe puede asociarse a la creencia, el depositar la confianza en algo, normalmente se dirige hacia objetos, personas o poderes, esta es su derivación hacia la idolatria.

Pero también, es un mecanismo del ego para sujetar a la persona y mantenerla bajo su dominio, esto no es algo demoniaco o con tendencia hacia lo místico, sino un mecanismo de supervivencia natural, un patrón de conducta arraigado en nuestro ser, adaptado con el paso el tiempo, modificado o perfeccionado, pero con la misma raíz, lo que es su base, la desconexión de la realidad, esta es una de sus herramientas primitivas (entre otras mas) y con la cual se hace presente en la vida de cada uno de nosotros. La persona para no sentirse impotente, para salvarse del terror que se sufre cuando no se puede en algo, huye, LITERALMENTE escapa de la realidad para no sufrir mas, o para encontrar un bálsamo que cure su dolor, es por eso que es muy común, encontrar gente de «mucha fe», desconectada de la realidad, pero con el consuelo aparente de esta misma, que da esperanzas ficticias e ilusorias, pero al fin y al cabo esperanzas……

No es raro observar, largas e interminables procesiones que efectúan duras y tortuosas caminatas en busca de algún favor por parte de las imágenes, es mas hasta es entendible (pero no saludable), puesto que es una manera de escapar del terrible sentimiento de impotencia que nos rodea, que nos hace sentir miserables, incompetentes, incapaces y carentes de real valor, no, no es extraño ver correr a las masas detrás de supuestos favores por parte de las diferentes deidades, puesto que por naturaleza damos por sentado que es la única manera de realizar determinadas cosas, «la fe» .

Lo cierto es que la fe, no arregla nada, desconecta a la persona, amortigua el dolor, pero el malestar continua ahí, las contiendas familiares, el malestar en lo económico, los problemas escolares, todo permanece igual, lo único que se modifica es nuestra manera de ver al mundo, lo observamos con los ojos del que espera un milagro y con eso se contenta.

Desde el punto de vista, de una persona equilibrada y con los pies sentados sobre la tierra, esto es algo insano, puesto que enajena a la persona, no la deja desarrollarse, ni hacerse cargo de sus propias responsabilidades.

Esta siendo sonado el caso de las chicas que imitando un caso del programa televisivo «la rosa de guadalupe» que promueve la idolatria y la fe ciega; decidieron ejecutar un autosecuestro que termino en la detención por parte de las autoridades de estas menores de edad, pero mucho mas lamentable fue el caso donde una pequeña imitando otro capitulo de dicho programa termino por quitarse la vida esperando el milagro de dicha imagen:

«El año pasado se dio a conocer el caso de Itzel Elvira Murillo Lobato, una niña de Piedras Negras, Coahuila, quien de acuerdo a sus amigas de la primaria, la pequeña era fan de la emisión vespertina, por lo que un día se le ocurrió imitar un capítulo en el que la protagonista era una niña que intentaba quitarse la vida, con el fin de unir a sus padres que se encontraban en proceso de divorcio (su familia estaba pasando por la misma situación).

Al final del episodio, la menor es salvada por la Virgen de Guadalupe y sus padres deciden darse una segunda oportunidad. Desafortunadamente, Itzel no corrió con la misma suerte ya que, ni sus padres volvieron a reunirse, ni ella fue salvada por la Virgen de Guadalupe. Itzel falleció ahorcada el día que cumplió 10 años.»

La desconexión de la realidad, en este caso a través de «la fe», condujo a las consecuencias mas terribles…..

«Sí, cuando soltamos las riendas y dejamos que las cosas sean llevadas por los vientos y las corrientes, sin control, también somos responsables de los desastres que se acumulen en nuestra existencia y de los que nos rodean. (Excusas que empequeñecen tu vida)»

No podemos culpar a la pequeña (en paz descanse), quien influenciada por el contenido del programa, actuó en su propio perjuicio, pero es una manera mas de ver como la desconexión de la realidad puede terminar incluso en las consecuencias mas fatídicas, si, en determinado momento este mecanismo nos sirvió de mucho, al momento de nacer y posteriormente, cuando por momentos el llanto, el grito y el pataleo no funcionan y precisamos desconectarnos de ese sufrimiento, pero ya en una etapa mas avanzada del crecimiento esta herramienta se vuelve totalmente inoperante, cuando menos para hacerse cargo de la propia vida, porque después de un tiempo ya somos totalmente responsables de nosotros mismos.

La fe es una practica de uso corriente sobre todo en las religiones, sin embargo es solo un método de genuflexión ante determinadas circunstancias de aparente o real impotencia, es decir que cuando el individuo no se basta así mismo ante cualquier situación, acude a la fe, para obtener el escape de la tan temida e insoportable impotencia, es un escape pero tambien al mismo tiempo se convierte en un sometimiento.

No es método de acercamiento espiritual (promueve pasividad no efectividad), sino un activo natural de supervivencia que sirve para amortiguar el doloroso impacto de sentirse impotente (de no poder hacer nada).

La religión le provee al ego de la persona un mecanismo perfecto, para que este siga subsistiendo entronizado sobre la existencia, a partir de esto no es de extrañarse el arrasador «éxito» que tienen las religiones alrededor del mundo, la fe es una desconexión de la realidad, el soporte ideal para que el mecanismo primitivo de supervivencia (ego) siga al mando de la persona.

«Queremos encontrar un ilusorio poder a través de la desconexión de la realidad, o atenuar el impacto que el sentimiento de impotencia nos genera.
Como fuera, al desconectarnos a causa del EGO, estamos limitando nuestra existencia, perjudicando las alternativas para recomponer las circunstancias, evitando reponer lo que hemos dañado.» (Excusas que empequeñecen tu vida)

La fe en salvadores crucificados, dioses sedientos de la sangre de sus propios hijos, vírgenes inmaculadas, pertenece mas a la mitología, que a la realidad, esa realidad que Dios nos muestra cada día en este mundo, para finalizar el consejo de un buen guía.

«Entonces, si en vez de involucrar a otros en nuestras equivocaciones,
si en lugar de esperar que vengan poderosos milagrosos a resolver los conflictos,
si no decimos que “el tiempo todo lo cura”,
si dejamos de pretender manipular a Dios con rezos y negociaciones,
si no nos hacemos más los desentendidos
y nos hacemos cargo de lo que nos corresponde, por lo cual emprendemos el camino de la restauración,
seguramente que haremos grandes avances y encontraremos más disfrute.»

Referencias Bibliográficas

Ribco, Y. (2013) Excusas que empequeñecen tu vida. Obtenido desde http://fulvida.com/ajenos/misioneros/excusas-que-empequeecen-tu-vida

http://mx.omg.yahoo.com/blogs/tv-or-not-tv/escandalo-rosa-de-guadalupe-212820269.html

021313_0131_Podereimpot1.png

Noajismo y Religion

¿Que diferencia puedes encontrar entre el Noajismo y la Religion?

La mas evidente podría ser que el primero se enfoca en acciones concretas y la segunda en la fe, la suspensión de la razón y su consiguiente justificación.

Atendamos al libro idolátrico:

El que crea y sea bautizado será salvo; pero el que no crea será condenado. (Marcos 16:16)

UN chapuzón y creer en el muchacho de la cruz basta para encontrar la salvación, cuando menos según estos personajes.

Dios (el Eterno) dirime en modo contrario, El a través de Sus mandamientos, nos instruye a establecer maneras de vivir saludables, edificantes y positivas.

No robar, No asesinar, No cometer adulterio…….

Modos de existir, mas cercanos a un humanismo, que a la cancelación del raciocinio, maneras mas civilizadas de vivir, que los modos brutos y torpes que propone el ego.

El Noajismo propone el respeto a las leyes naturales establecidas también por el mismo Dios, y la Religión por el contrario solo exige «fe» que la gente «crea» esto no es algo planeado al azar, sino que la gente que la diseño sabia perfectamente que si las personas dejan de creer en su cuento, todo el teatro se viene abajo, es por ello que la condición para «ser salvos» es creer, ¡no podía ser de otro modo!, la UNICA condición como  lo vimos mas arriba en el libro idolátrico es creer, en realidad es un gran engaño burdo y torpe, como si dijéramos que aquella persona que se la pasa mintiendo toda la vida la única condición que pide para dejarlo de hacer es que le creamos todo (una burla no te parece).

Si nos ponemos a razonar un poco, tan endebles son sus fundamentos, que si las personas dejaran de creer en ello, toda esa parafernalia vuelve del mismo lugar de donde provino, de la nada misma, la religión depende de la creencia de la gente y sin ella no es nada, sabiendo esto nos podemos dar cuenta el porque  de la doctrina absurda de la fe, DE AQUELLA FIDELIDAD CIEGA SOBREPUESTA ANTE CUALQUIER RAZONAMIENTO, y que si amenaza en lo mas mínimo a dicha doctrina ya es una herejía.

El Noajismo por el contrario es la coherencia, la consonancia con el cosmos, la armonía universal que emana de la responsabilidad de los propios actos y si también es acorde a la ciencia, ¡no podía ser de otro modo! porque cualquier finalidad que sea promovente de la vida emana también de la propia espiritualidad.

Como un ejemplo de coherencia demuestra mucho mas que unas palabras vacías.

Los Mandamientos son promotores de la paz, del desarrollo, de la plenitud.

No a las relaciones sexuales ilícitas, ¿Cómo este Mandamiento podría encajar dentro de la ciencia, las disciplinas que el ser humano a desarrollado para vivir mejor?

La Psicología moderna ha descubierto que determinados factores (mentales-emocionales) coartan el desempeño de una persona a partir de su huella dejada en el cerebro.

Entonces si traducimos el Mandamiento podemos decir: No engañes a tu esposa/o porque las huellas (traumas) que le inducirás serán difíciles de superar O No engañes a tu esposa/o porque te acarrearas serias dificultades desde familiares y hasta legales.

La espiritualidad autentica, se complementa con el avance también en el campo de lo científico, la coherencia, lo verdadero sale a relucir, se disipa el ego, se desvanece la mentira, y donde la religión con sus miedos y culpas ocupaba todo en tu vida, se asienta el Shalom, se deviene en armonía para todos tus planos, es una autentica llave al bienestar.

Entonces para responder a la primera pregunta, sobre cual es la diferencia entre Noajismo y Religión, nos damos cuenta en que el primero promueve la vida y la segunda….. No, claro que esta no es la única respuesta tu puedes formular otras mas (y creo yo mucho mejores).

wilson-simple

Jesús y nuestra sagrada relación con el Padre

Cualquier lector promedio de la Biblia, sea judío o gentil, puede decir con cierta facilidad qué pidió el Creador, Padre Celestial, el Eterno, Dios de la humanidad al comienzo de la misma.

Por supuesto la frase más evidente, aunque no del todo correcta, será algo así como: “no comas de ‘la manzana’ que tienes prohibida, porque si comes de ella morirás inmediatamente”.
No es del todo correcta porque ciertamente:

  • NO ERA una manzana, sino el fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal;
  • ni el que comiera del fruto prohibido moriría al instante, sino que se convertiría en mortal;
  • y no fue el primer pedido, o más bien orden, que Dios dio a la especie humana, ya que la primera fue:

"Tomó, pues, el Eterno Elokim al humano y lo puso en el jardín de Edén, para que lo trabajase y lo guardase."
(Bereshit / Génesis 2:15)

Sí, trabajar y cuidar la tierra, con todo lo que había en ella, puesto que la había dado para que el Hombre pudiera disfrutar a plenitud y con bendición de la misma.
El Padre ordenó esto al Hombre con “palabras dulces”, según es explicado en la Tradición, no al estilo del rigor de los reyes, ni con advertencias o severidad. Más bien, con la ternura del padre que encamina con firmeza pero dulzura a su amado hijo.
¿Cómo podría ser de otra manera, si recién había nacido la especie humana?
Éramos nuevos en el mundo, con la conciencia recién despierta, sin conocimientos, sin experiencias memorizadas, sin códigos ancestrales, como bebes que han abierto hace un ratito los ojos a este mundo.
Por ello el Padre nos ordenó esto, sin emplear la palabra dominante del Amo, sino la voz tierna del Padre.
Aunque fuera pronunciada con ternura esta frase no deja de ser un mandamiento de Dios, una orden que el Hombre debía de asumir con integridad.

Si el hombre cumplía como el Padre declaraba, por lo cual trabajaba y cuidaba la tierra, entonces:

"el Eterno Elokim mandó al humano diciendo: ‘Puedes comer de todos los árboles del jardín, pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque el día que comas de él, ciertamente morirás."
(Bereshit / Génesis 2:16, 17)

El “premio”, la consecuencia directa y lógica del cumplimiento del mandamiento de trabajar y cuidar de la tierra, sería que el Hombre estaría facultado para comer de todo lo que estuviera en el jardín, con la excepción del fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal.

Preguntemos entonces: ¿qué pidió el Padre del Hombre?

La respuesta es una y única: ¡Qué cumpla con Sus mandamientos!

En este caso en concreto, trabajar y cuidar de la tierra lo que le daría como consecuencia la bendición en forma de abundancia de todo.
Esa plenitud del bien estaría limitado por otro mandamiento de parte de Dios, del árbol que tenía prohibido no debería comer.
Era un camino simple, sencillo, sagrado, completo, espiritual.

Te cuento que nada ha cambiado desde entonces en la forma que tenemos para encontrarnos con el Padre.
¡Nada!
Siguen siendo los mandamientos el camino para hallarLo en nuestra vida.

Te podrás llevar una sorpresa si te digo que incluso tampoco los mandamientos han cambiado desde aquella primera formulación hasta el día de hoy, ya que para el 99,98% de la humanidad (que son los gentiles) sigue siendo el mismo código espiritual el que dirige la relación de los hombres con Dios.

Según enseñan los Sabios, en este punto, en la orden de cuidar de nuestro mundo y trabajarlo, así como en el cuidar de no traspasar Su palabra es que se encuentra el origen de los Siete Mandamiento Universales, esos que siguen siendo el camino sagrado para todo gentil.
Te lo explico muy brevemente (en otros posts de este sitio encontrarás más información al respecto).

Si bien el Eterno explicitó a Adam solamente seis de los siete mandamientos, ya que no le declaró como orden el de no comer parte de animal con vida, porque el hombre era vegetariano y no había sentido de tal mandamiento. Cuando en la época posterior al Diluvio el hombre comenzó a comer carne, el Eterno reveló y ordenó este séptimo mandamiento que corresponde a las naciones.
Entiéndase que no fue explicitado a Adam, pero estaba contenido en el código dado a él; un código que no está escrito en la Torá (judía y escrita), puesto que no todo está declarado en ella. Hay cosas que el Eterno dictó a Moshé/Moisés para que escribiera, otras que dijo para que sean transmitidas como sabiduría oral.
Los Siete Mandamientos no forman parte de la ordenanza judía, sino de la gentil. Por lo cual no están codificados explícitamente en la Torá (judía). Los sabios judíos han preservado el recuerdo de este código, pero no son los creadores del mismo ni los responsables de su cumplimiento. Es cada uno de los gentiles del mundo quien debe conocer SU propio pacto sagrado y eterno con Dios, que se manifiesta por medio del conocimiento y cumplimiento de lo Siete Mandamientos Universales.
Convido a estudiar el texto que se abre haciendo clic aquí, luego compartirlo, hacer que alcance cada rincón del mundo para que sea restablecida la Luz en el mundo.

Como podemos corroborar, lo que el Padre dijo que quería del Hombre no era fe, ni sangre de sacrificios, no seguir líderes religiosos, ni ritual alguno, ni doctrinas religiosas, ni venerar personas o seres, tampoco peregrinaciones a lugar determinados, ni bailes, ni conocer algún idioma, ni difundir enseñanzas sectarias, ni convencer a nadie de nada, ni irse a la soledad para meditar, ni clamar a los cielos, ni predicar “su palabra”, en fin, nada de todo eso que hoy día encontramos en las religiones.

¿Qué fue explícitamente y sin dudas lo que Él pidió del Hombre?

Lo vimos: que el hombre cumpla con los mandamientos que Él le ha dado para que cumpla.

Si Dios hubiera querido la fe del Hombre, ¿no te parece que el mandamiento sería: “ten fe en mí”, en lugar de algo tan prosaico (vulgar) como “trabaja y cuida de la tierra”?
¿No crees que si el Padre pretendía que el Hombre viviera con alguna religión, eso hubiera Él declarado desde el comienzo?
Él perfectamente está capacitado para decirle al Hombre: “mira, como mi criatura me debes todo, así que te debes pasar el día diciendoalelusha hermano”, y luego me repites lo que el rebe Najman dijo, más tarde te encierras a meditar y cantar oraciones que no entiendes adorando a mi hijo Jesús, para finalizar el día adoctrinando a otros con videos del rabino Jacobo o del doctor Michael o del cabalista Yehudah. No te olvides de congregarte con tus hermanos y estudiar libros mágicos que te darán súper poderes, porque eso es lo que a mí me agrada, quiero que haya mucha magia en tu vida, que hagas milagros, que vivas de la caridad (de hombres o celestial) y no te olvides de mantener con dinero y elogios a todos esos que dicen hablar en mi nombre y forman sus sectas. Eso es lo que quiero y te ordeno, porque soy tu Dios. Si te quedan dudas, pregunta a cualquier clérigo religioso, ellos tienen la palabra autorizada. Y si no, pues meditas y en un rayo te iluminaré con mis ideas geniales, que para algo soy Dios el que te digo cosas solo a ti. Ah, me olvidaba, acuérdate de bautizarte en agua y espíritu santo, de usar muchos amuletos y te repito, no te olvides de dar dinero a los que te venden cosas religiosas, te predican cosas que ellos llaman espirituales y espera sentado a que haga milagros para ti.”

Sin embargo, en la realidad nada dijo de rituales, ni de misticismo extraño, ni de clérigos predicando sus doctrinas y exigiendo sus diezmos y contribuciones, ni tampoco habló nada el Padre de rezar tales salmos, o implorar a cuales seres celestiales.
Por el contrario, Él fue muy claro cuando dijo que el Hombre disfrutara de todo aquello que había en la tierra para su deleite, pero se cuidara de lo que no le beneficiaba.
En otras palabras, que son las que acostumbro a repetir humildemente: “goza de lo permitido y apártate de lo prohibido”.
Si el Hombre viviera de esa manera, cumpliendo en verdad con los mandamientos y alejándose de lo que daña, entonces estaría en el Paraíso, consciente de su identidad espiritual que lo une constantemente al Eterno.
Sería alumbrado a cada instante por la sagrada Luz del Padre, estaría en paz, gozando de la bendición que llueve en abundancia sobre él.
Serías alumbrado por la Luz de la Presencia y gozarías de la bendición constante que llueve sobre ti.
Mira lo que dijo Dios a través de su profeta:

"¡Oh hombre, Él te ha declarado lo que es bueno!
¿Qué requiere de ti el Eterno?
Solamente hacer justicia,
amar misericordia y
caminar humildemente con tu Elokim."
(Mijá / Miqueas 6:8)

Porque, precisamente eso es lo que declaró el Eterno que el hombre hiciera: bondad, justicia y fidelidad.

Exactamente el mismo núcleo, idéntica esencia a la de de aquel primer mandato suavemente pronunciado por el Padre a Adam.
Él no habla en secretos, ni esconde lo que es necesario que el Hombre conozca para su vida aquí y en la eternidad.
No juega Dios a las escondidas con lo que es fundamental para que todo hombre conozca.
Según dice el Padre a través del profeta:

"Desde el principio no he hablado en secreto; desde que las cosas sucedieron, allí he estado Yo"
(Ieshaiá / Isaías 48:16)

Para que la bondad sea buena,
para que la justicia sea justa,
para que la fidelidad sea fiel,
es necesario que el Hombre cumpla con Sus mandamientos.
Porque de otro modo se puede desviar y llamar bueno a lo que es malo,
justo a lo que está corrompido
y fiel a lo que se aparta de Dios.
Sí, lo vemos a diario, en todos esos “religiosos” que actúan con malicia, desprecian la corrección y sirven al EGO en sus múltiples formas (Jesús, dioses, santos, tzadikim, rebes, maestros ascendidos, espíritus ancestrales, etc.).

A los judíos se lo dijo claramente en la Torá de la siguiente manera:

"Guarda Sus leyes y Sus mandamientos que yo te mando hoy, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, y para que prolongues los días sobre la tierra que el Eterno tu Elokim te da para siempre.’"
(Devarim / Deuteronomio 4:40)

Sí, para conocer al Padre, para unificarnos con Él, para sentir Su Presencia, para recibir Su salvación, para estar en gozo, para convertir al mundo en un Paraíso, el camino está en el cumplimiento de los mandamientos que nos corresponde cumplir.
No lo dice este modesto maestro, ni algún rabino, ni un grupo de “fariseos”, ni un profeta falso que clama en las aguas del Jordán, ni un líder sectario.
Para quien considera que la Torá tiene origen divino, esto es lo que Dios ha dicho y desea.
Cumple con los mandamientos que te corresponde, y entonces estarás en paz.
Lo dice Dios, presta atención que es Dios el que habla:

"Si andáis según Mis estatutos y guardáis Mis mandamientos, poniéndolos por obra… habitaréis seguros en vuestra tierra. Daré paz en la tierra; dormiréis, y no habrá quien os espante."
(Vaikrá / Levítico 26:3-6)

Tal es el camino para encontrar al Padre, la verdad, la vida, la salvación eterna, la respuesta a las dudas más terribles, la libertad y el gozo.
Recuerda, lo dice Dios, nadie más, Él es quien te lo enseña y te muestra el camino por el cual debes ir.

"Así ha dicho el Eterno, tu Redentor, el Santo de Israel: ‘Yo soy el Eterno tu Elokim que te enseña provechosamente, y que te conduce por el camino en que has de andar.
¡Oh, si hubieras estado atento a mis mandamientos! Tu paz habría sido como un río, y tu justicia como las ondas del mar.
Tu descendencia sería como la arena, y los que salen de tus entrañas como sus granos. Su nombre nunca sería eliminado ni borrado de mi presencia."
(Ieshaiá / Isaías 48:17-19)

Si eres gentil, tienes tus Siete Mandamientos, no otros, no otra cosa. Ni religión, ni judaísmo y mucho menos doctrinas religiosas de la idolatría. Tampoco bailecitos jasídicos, ni aprender hebreo, ni vestirte como te parece que se viste un judío, ni convertirte en judío, ni repetir sin sentido lo que algún “rabino” expresa en internet. Nada de eso es tu camino espiritual, porque nada de eso corresponde a tu neshamá ni es lo que Dios te pide y quiere de ti.
Recuerda, no es mi opinión, no es lo que me parece, es lo que explícitamente Dios ha dicho. Dios, no otro.

Si eres judío, tienes en el conjunto de los 613 mandamientos aquellos que está en ti cumplir. Al igual que el gentil, no precisas de vestidos europeos o asiáticos añejos, ni aprender de memoria citas célebres de líderes de sectas, ni peregrinar a tumbas, ni asfixiarte con rituales oscuros y sin sentido real, mucho menos precisas abandonar tu propia senda para sumarte a los pasos de los que vagan en la oscuridad. Tienes todo lo que precisas al alcance de tu mano, cerca de ti.

Entonces, un buen día, en el impero romano en decadencia a un grupo de astutos timadores a cargo del sostén del gobierno, se les ocurrió dictar estas ideas (libro de Juan, capítulo 14): “5 Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el camino? 6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. 7 Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto. 8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. 9 Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre? 10 ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras. 11 Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras. 12 De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. 13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. 14 Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.”.

Sabemos que Jesús no existió, pero hagamos de cuenta que sí.
¿No son estas palabras una clara rebelión en contra de lo que Dios declaró es el camino sagrado para toda persona?
¿No es esta una manifestación absoluta de idolatría, en forma de egolatría?
¿No es esto un poema a la blasfemia, insultar y maldecir a Dios?
¿No es este párrafo una terrible desviación que llevan al hombre hacia el abismo en lugar de hacia Dios?
¿Cómo alguien que pretende ser fiel a Dios, dice amarLe, quiere servirLe, anhela la “salvación” puede tomar estas palabras como brújula para su vida?
¿Acaso no es este Jesús una espantosa arena movediza que se nos interpone en el camino que Dios abre para nosotros hacia Él?

Está claro que adorar a Jesús, tomarlo como modelo de vida, sembrar sus doctrinas, seguir a sus difusores, presentarlo como una opción espiritual válida, no son más que engaños, atentados letales contra la vida, la verdad y la unidad con el Padre.

Ciertamente el Padre dijo:

"si tu corazón se aparta y no obedeces; si te dejas arrastrar a inclinarte ante dioses ajenos y les rindes culto, yo os declaro hoy que de cierto pereceréis. No prolongaréis vuestros días en la tierra "
(Devarim / Deuteronomio 30:17-18)

Dios quiere obediencia a Sus mandamientos, no fe en ridículas doctrinas imperiales que someten al hombre al ilusorio poder del EGO.
Es Dios quien declara que si ponemos a Jesús como socio de Dios, como Su hijo, como guía, nos estamos yendo a la muerte segura, al “infierno”.
Jesús es un dios ajeno, no el que mandó a Adam que trabajara y cuidara la tierra, no el que mandó a Noaj/Noé y sus descendientes el pacto noájico, no el que dicto el Decálogo ante todo Israel en Sinai; sí, Jesús es un dios ajeno. Nunca fue mesías, nunca profeta, nunca rabino, nunca emisario de mensajes de paz o verdad, ni un “rebelde” con sentido positivo.

Y dijo Dios:

"No tendrás dioses ajenos delante de Mí."
(Shemot / Éxodo 20:3)

Si pones a Jesús en medio del Padre y tú, estás perdiendo tu vida, aquí y en la eternidad.
Tal como si pones a cualquier otra falsa divinidad, emisario celestial, supuesto santo, “tzadik”, rabino, iluminado o lo que fuera.

Tienes la posibilidad de encontrar al Padre a cada instante, haciendo lo que Él manda de ti.
Eso es lo que Él dijo, no lo que te quieren convencer que creas.

"Ciertamente muy cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón, para que la cumplas"
(Devarim / Deuteronomio 30:14)

¿Más importante una relación con Dios que una relación con los Preceptos?

homo-sapiens-enfadado-culturas-prehistoria-pintado-por-amalia-9797341 Hace algunas horas, en una fotografía que tengo en mi muro del Facebook y que hace alusión a que para la persona Consiente no cabe el dogma religioso, un contacto llegó a comentarla con esta frase: “lo importante es una relación con Dios”

Luego de pensar unos minutos en la frase publicada, y a mi juicio, me parece un tanto desatinada por no ser del todo cierta, por ser un lema usado por el dogma religioso para argumentar “fe” en lugar de estudio y análisis, por ser la justificante perfecta para olvidar o desentenderse los preceptos universales que la persona que está consciente de su propia identidad asume como necesarios para su conservación y la del mundo, y por ser la misma frase que convertida en hechos es capaz de construir cualquier tipo de religión o rito dogmatico.

Lo más importante para el gentil es reconocer, conocer, aceptar y aplicar los Principios Universales; esos que le dan sentido a La Vida y a la propia vida de cada quien; esos que aplicados en lo individual y en lo colectivo hacen del mundo terrenal el paraíso divino.

Ese primer cuerpo normativo, universal e inmutable, es lo que eleva al ser humano de un animal instintivo a un “Homo Sapiens”; un ser humano único, inigualable y filiado a algo más que la materia o energía.

El Ego, materializado en las millares de religiones, ha hecho que las gentes busquen relacionarse con lo divino, de las formas más absurdas y ridículas posibles; justificando las masas la importancia suprema de ese contacto cueste lo que se cueste, y de la forma que sea, porque lo que importa es “una relación con Dios”, obviando el “declarante de lemas religiosos” si el mundo que le rodea es un paraíso, o si él mismo es un paraíso para el mundo.

¿Cómo se pretende tener una relación con Dios si no se tiene una relación con las Leyes Universales?

¿Se va a continuar intentando tener contacto con lo divino a fuerza del Ego Instintivo en lugar de Obediencia Racional a los principios básicos?

Lo más importante para el gentil es su Relación con los Principios Universales porque es lo natural; su obediencia conlleva orden y armonía, suya y de su entorno. Porque le permite ser analítico objetivo de las realidades y no un temeroso de sus “divinidades mentales”. Porque permitirá vivir en libertad plena tanto de pensamiento como de acción bajo los limites necesarios para su deleite de placeres debidos y racionalmente permisibles.

Lo más importante para el gentil NO es “una relación con Dios”; ES una relación con Los Principios, porque en su obediencia va a encontrar su divina filiación.

Buenas noches mis socios.

Preg. 1130 – esta bien apoyar las marchas?

dlopezallel nos consulta:

Conversábamos con un familiar respecto al ideal d los encapuchados q se suman a las protestas realizando daños a bancos u otras instituciones financieras. Que esto, ha sido parte importante en la historia y no solamente las marchas pacíficas logran buenos resultados sino que también el hacer saber la indignación «del pueblo» a través de este tipo de lucha. Aludiendo que también estar encapuchado sirve para q la policía no reconozca y haga represión aunque no se esté protestando violentamente.
Daniel López, 24, musico, Sasntiago, Chile.

Seguir leyendo Preg. 1130 – esta bien apoyar las marchas?

Resp. 1127 – Maltrato Infantil.

uriel nos consulta:

@More , Los padres que maltratan a su hijo estan incurriendo en algun precepto ?
Ej: Aquella madre que manda a su hijo a bañarse y espera a la salida del baño para flagelarlo con un cable hasta que brote sangre de su piel por haber incurrido en alguna falta? o lo sumerge en una alberca en agua como castigo por haberse orinado en el transcurso de la noche ? Años atras en algunos gobiernos no se prohibia. Me podria explicar el precepto o derivado en el cual se esta incurriendo. Gracias.
Uriel Chaves , Estados Unidos.

Seguir leyendo Resp. 1127 – Maltrato Infantil.