Shalom, Yehuda.!!!!! voy ha hablarle en confianza. yo nunca me he sentido víctima de ninguna religión, he tenido «mis cosas» con diversas órdenes pseudoesotéricas mas o menos claras u oscuras y he salido corriendo de todas ellas, más que por peligro espiritual por «salud mental», para ocuparme de mis cosas y mejorar mi vida y las de los que me rodean, vos lo sabeis y a vos os debo un gran avance. Personalemente ni creo ni dejo de creer en Jesús, mucho menos en las Iglesias, mi orientación interna es noájica. Pienso que es una cuestión de mitologia y de como cada uno perciba la tradición recibida. Sin Pablo de Tarso el cristianismo hubiese sido imposible, el fue el helenista que lo impulsó. El cristianismo es platonismo, mal leído y peor pensado. Su estructura eclesial la encuentro perversa, pero tengo mucho respeto por los creyentes de buena fe que que conozco que llevan una «santa vida» en nombre de Jesús, estén equivocados o no. Quiero decirle que aunque yo no lo sienta así no me siento autorizada a sacarles de su «error» porque sus obras son buenas. Sin saberlo cumplen los preceptos noájicos, salvo quizás ir a su Iglesia a tomar la cmunión. Son buena gente. He tenido en el ultimo año alumnos del Islam, absolutamente encantadores, buenos, que sólo pedían que yo … «respetase a su Alà» ( también terroristas y tipos y tipas de mala fe) Pero los «buenos» los que respetan a todo el mundo, cristianos o musulmanes ¿ quien soy yo para decirles que su creencia está equivocada? repito, porque sus obras son buenas. He visto familias cristianas muy unidas en el nombre de «Cristo». La pregunta que me hago es ¿ Tan importante es un culto cuando la obra de la vida es buena? No lo se, honestamente. Yo no me siento molesta porque unos u otros crean lo que crean, estoy cansada de posturas radicales. Aqui entre «ateos» , «esotéricos», «cristianos de mala fe», «tibios» y «creyentes de boquilla», no nay apenas espacio para las preguntas en profundidas. Quizás por esos yo personalmente me he acercado al noajismo, pero repeto. me siento desautorizada para emprender una «campaña» para convertir a aquel que no quiere ser convertido y ya le va bien así. De todas maneras colaboraré con Vds., créame, lo que si hace falta urgente es … crear cortes de Justciia según el mandamiento noájico. Shalom
Desde España
Buen día, gracias por su pregunta comentada.
Como sabemos, el ser humano está formado por cinco planos, cada uno de ellos nos compone y es ineludible tener a cada uno de ellos equilibrado, nutrido correctamente.
Cuando eso no se hace, cuando al menos uno de los cinco planos se desequilibra, la persona completa está falto de armonía.
Podemos encontrar más de esto en serjudio.com, y en el nuevo libro de CabalaTerapia que ya ha sido editado en España y está a la venta. (Próximamente también lo podrán adquirir aquí mismo, se los recomiendo).
Cuando la persona (gentil) deja de lado alguno de los Siete Mandamientos Fundamentales, necesariamente está dejando de lado a su propia esencia espiritual, y rehuyendo la armonización de al menos uno de los planos de existencia.
Todos y cada uno de los Siete es necesario, indispensable, vital.
Cuando, por la justificación que sea, el gentil hace a un lado el cumplimiento de alguno de los preceptos, está restando a su vida, a la de la comunidad, a la del Cosmos.
Podríamos considerar que no hay mandamientos más importantes que otros, todos ellos forman parte del sistema vital del noájida, y no aplicar uno de ellos es promover el desbalance personal, colectivo y cósmico.
Y si bien vivir éticamente es sumamente positivo, apropiado, también los dos mandamientos que refieren a la relación humana con el Padre han de ser considerados, cumplidos, pues de no hacerlo el bien generado por la acción ética no alcanza a nutrir a la persona y a la sociedad en todos sus planos.
(Si somos estrictos en nuestro estudio, podemos reconocer que precisamente los dos mandamientos relativos a la relación con el Padre son los principales, pues sostienen a los otro cinco. Pero no nos apartemos del tema.)
Espero que entienda que esto no es un enunciado «metafísico», no le hablo de cuestiones ajenas a la vida cotidiana.
La vida noájica es en este mundo, si bien sus alcances son para la posteridad.
La tarea dada por el Eterno es asociarnos a la conclusión de la creación, ni más ni menos, a través de cada acto que ejercemos en nuestra realidad.
Así pues, el gentil, cada uno, debe vivir en armonía con:
– No sevir dioses ajenos al Eterno.
– No blasfemar.
– No asesinar.
– No sexo ilícito.
– No robar.
– No comer parte de animal con vida.
– Procurar el establecimiento de la justicia.
Para construir Shalom, y no tan sólo vivir en paz, es necesario además llevar una vida que incluya el respeto y aplicación de los reglamentos derivados de los preceptos.
Por ejemplo, no solamente no adoro a dioses falsos, sino que además reconozco al Eterno.
No solamente no blasfemo (maldigo a Dios), sino que le oró, o hablo positivamente con mi prójimo.
No solo no asesino, sino que tengo hijos y los crío en salud y bienestar.
No solamente no tengo sexo ilícito, sino que construyo una familia y promuevo el respeto a los mayores.
No solamente no robo, sino que además soy solidario.
No solamente no como animal con su vida, sino que además procuro cuidar al mundo.
No solamente procuro el establecimiento de la justicia, sino que vivo con bondad y justicia, sin excusas, ni «viveza criolla».
Si entiende esto, cosa que no dudo hace, comprenderá que es cierto, que hay gente buena, A PESAR de que está involucrada en la idolatría, nunca dijimos otra cosa nosotros.
De hecho, hemos dicho muchas veces que la mayoría inmensa inmersa en idoaltría son como niños que fueron raptados por piratas y educados por ellos. Gente que no conoce, no fue educada en la Luz.
La inmensa mayoría son inocentes de sus creencias espirituales perversas; a pesar de lo cual, viven en engaño.
Son inocentes, pero eso no quita el que estén errados.
Por supuesto, hay un número nimio de verdaderos malvados, gente que sabe que está por el camino errado, pero a pesar de ellos se aferran a seguir en él. Esos, que no son «los cristianos», ni «los musulmanes», ni etc., sino solamente algunos pocos, clérigos, líderes, gente de afán dominante que sostienen la farsa y mantienen sumidos al resto en la oscuridad.
El resto, los ingenuos, son víctimas al mismo tiempo que cómplices involuntarios de sostener el sistema de caos y corrupción que emana de todas las religiones.
Ahora, su parte como noájida, como mujer que ha despertado a la realidad que nos circunda, como persona que ha conectado su vida al Eterno, como constructora de Shalom, ¿qué debe o puede hacer?
Sepa, no precisa hacer campaña para «convertir» a nadie a nada.
No somos misioneros, ni secta, ni anhelamos que todos seamos de la «misma fe» para sentirnos tranquilos en nuestra falsedad.
Como no vivimos en falsedad, no precisamos escondernos detrás de la masa, ni de la conversión forzada, o el desprecio a las otras personas, o las amenazas de infierno y maldición.
Tales prácticas nocivas son propias de los que viven en la falsedad, pero prefieren esconder la realidad con injurias, vejámenes, conversiones, masacres, terrorismo, despotismo, etc.
Por supuesto que sí es lícito compartir con los demás nuestras ideas, nuestro punto de vista, difundir el noajismo, a veces señalar la miseria que emana de las religiones, etc.
Pero, repito, no es una misión, cual evangelista con un (supuesto) mandato sagrado so pena de arder en el infierno.
La difusión del noajismo podría reconocerse como acción derivada de los Siete Mandamientos, pero mejor si lo consignamos como un movimiento de amor hacia el prójimo, de autoestima, de anhelo porque desaparezca el mal del mundo y los inocentes sean rescatados de la prisión de la oscuridad.
En cuanto a respetar las creencias ajenas idolátricas, mi respuesta es un rotundo no.
Es menester que se respeta a las personas, pero no al cáncer, a la adicción, a la maldición, a la corrupción, al error, a la falsedad, a la idolatría que ellas portan.
¿Entiende la diferencia entre respetar a la persona y respetar a sus acciones o ideas letales?
¿Entiende la diferencia entre criticar a las personas y criticar el contenido de sus acciones o palabras?
Entiéndase, yo puedo valorar inmensamente a un cristiano, a un musulmán, a un ateo, etc., pero al mismo tiempo despreciar sin ambagues aquello de sus creencias q los someten, los vejan o apartan de la luz espiritual.
Y esta postura en absoluto es de fanático, o de radical, sino de plena honestidad intelectual y espiritual con mi alma y especialmente con Dios.
¡Qué bueno que el mundo haya absorbido la mayoría de los mandamientos noájicos!
¡Qué bueno que la mayoría de las religiones están en armonía con la mayoría de los Siete Mandamientos!
¡Qué bueno que haya familias unidas, personas nobles, solidaridad, etc.!
Pero sépalo, ¡NO es gracias a Jesús, o cualquier otra deidad, sino A PESAR DE ELLO!
Si las religiones desaparecieran, si la fidelidada al Eterno primara, entonces veríamos un mundo realmente perfeccionado, sin matanzas, sin guerras, sin terrorismo, sin miseria, sin corrupción, de bondad, de estabilidad, de regocijo, de misericordia, etc.
¿Es un sueño, una utopia?
Pareciera serlo, pero como lo ordenó el Padre Celestial, y además prometió que llegaríamos a esa Era de vida plena, entonces no es un sueño, sino una meta que alcanzar, una meta que construir.
Alcanzaremos a ver un mundo mejor, cuando la gente no imponga religiones, ni siquiera las recuerde…
Ahora, un aspecto más.
Las buenas acciones son loables, vengan de quien vengan, pero ellas no son excusa para admitir como válido o respetable aquello que es nocivo de quien las realizó.
Si un cura salvó noblemente a judíos en el Holocausto, ¡qué bien por él! Pero no por esto el cristianismo es admisible. Si un miserable asesino de Hamás ayudó a cruzar a un ciego la calle, no por eso la maldad infernal del terrorismo es digno de aprecio.
¿Entiende esta gran diferencia?
Juzgar cada hecho en sí mismo, no a la persona, ni cuestiones ajenas.
No juzgo «al cristiano», sino a la mentira de la fe Jesús.
¿Se entiende?
No deseo el mal del cristiano, sino la desaparición de la falsedad, es decir, de la idolatría.
No por ello seré militante, terrorista, subversivo, quema-iglesias, haré fogatas con la biblia, etc.
La desaparción de la idolatría llegará, eso es indudable, pero a través de la construcción permanente de Shalom.
Irán naciendo noajidas, hijos de noajidas. El noajismo se difundirá, se conocerá, se reencontará como la única alternativa viable para el bien personal y colectivo.
La fidelidad al Eterno, la bondad y la justicia prevalecerán, y entonces habrá desparecido todo rastro de religiones, de ajenidad a Dios.
¿Queda algo sin responder a su misiva?
Cuénteme luego, o alguno de los lectores que deseen construir positivamente a la conversación.
Esperemos que pronto haya paz interna y externa.
Recuerde que este FULVIDA subsiste gracias al aporte generoso de dinero de parte de los lectores y asociados. Colabore, sea parte de nuestra tarea sagrada. Gracias
Shalom y bendición, que sepamos construir Shalom en todo momento.
Moré Yehuda Ribco
More! quedo claro como es que debe trabajar el Noajida, no es preciso convertir ni obligar a la gente q piense igual o parecido a nosotros… las acciones hablaran por si solas.. asi como nos comportemos y la gente conozca de nuestra integridad familiar, social etc.. ellos querran saber y se interesaran por lo que hacemos o por lo que creemos… de igual manera difundir noajismo es una tarea individual y tambien colectiva de cada uno…
Gracias por compartir esta respuesta con nosotros…
Me llama la atención que la emisora del mensaje repite constantemente la palabra «buena» (siete veces para ser exacto), a todas estas, seria bueno saber qué entiende por «bueno».
Bueno, correcto y permitido son términos que el ser humano usa a convenciencia, pero si somos honestos vemos que:
No todo lo bueno es correcto y permitido.
No todo lo correcto es bueno y permitido.
No todo lo permitido es bueno y correcto.
Qué es lo bueno?
Qué es lo correcto?
Qué es lo permitido?
Es bueno creer en el colgado?
Es correcto creer en el colgado?
Es permitido creer en el colgado?