El Evangelio es un mundo que muchos consideran como bueno, debido a las enseñanzas que sus lideres (Pastores, Evangelistas, Maestros) expresan.
Aparentemente sus enseñanzas son para el bien de las personas y por ende de la sociedad.
Pero, cuando una persona estudiosa de las Escrituras las analiza con profundidad se puede dar cuenta de que están en contra de los principios establecidos por El Eterno en la Torá.
Por ejemplo lo dicho en Deuteronomio 4:2 "No añadiréis a la palabra que yo os prescribo, ni quitaréis nada de ella; para que guardéis los mandamientos del Señor, vuestro Dios, que os ordeno", como se puede leer este mandato de Dios es muy violado por el mundo evangélico y cristiano, ya que ellos profundizan en una escritura (nuevo testamento) que nació mucho tiempo después del mandato de Dios lo cual es un error, ya que el mal llamado Viejo Testamento, nunca ha dejado de tener vigencia por lo tanto no se le debe llamar Viejo, sigue siendo hoy por hoy tan real y actualizado que no permite la incorporación de otro texto que no sea la propia Torá y el Talmud.
Igualmente este mundo aparentemente bueno lo que hace es llevar a las personas por el camino de la idolatría, ya que ellos adoran a seres que no son Dios y está escrito en Deuteronomio 5:7 y 32:39 "No tendras otros dioses personajes delante de mí", "Ved ahora que yo, Yo Soy, y conmigo no hay más dioses. Yo hago morir y hago vivir; Yo hiero y también sano; no hay quien pueda librar de Mi mano.".
En estos dos escritos se puede evidenciar que El Eterno no aprueba de ninguna manera que alguna persona tome su lugar o se haga pasar por Dios cuando Él establece que solo hay un solo y unico Dios. Esto es algo que no tiene discusión, pero en el mundo evangélico lo interpretan de otra forma o manera distinta lo cual es un grave error, razón por la cual sali de este mundo lamentablemente tan idolátrico como cualquier otro, en donde dejan de lado las palabras del Dios para creer en palabras de hombres.
José N. Linares G. (Chano)