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Resp. 1046 – cuando Dios volverá a nosotros?

juan lira nos consulta:

buenas noches, gracias por recibirme; saludos y mi deseo de paz.
1- respetado maestro; siento una nostalgia muy grande;
2- es como si ya nada me importara de este mundo,
3- comprendo que hemos faltado el respeto al creador de muchas maneras y el se ha alejado,
4-  tambien hemos faltado mucho el respeto a nuestro projimo.
5- ¿volvera pronto Dios a nosotros ?
6-  ¿terminaran nuestras desventuras?
7- ¿que hacemos mientras para sobrellevar esta nostalgia o tristeza que nos invade por dentro?
gracias por sus respuestas y s
juan lira navarrete, 42 años, conductor profesional, santiago de chile

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Pon en alto y sé exitoso

En el tratado Rosh HaShaná, capítulo 3 y mishná 6 nos encontramos con el siguiente pasaje:

ג,ו  [ח] "והיה, כאשר ירים משה ידו–וגבר ישראל . . ." (שמות יז,יא), וכי ידיו של משה עושות מלחמה או ידיו שוברות מלחמה:  אלא כל זמן שהיו ישראל מסתכלין כלפי מעלן, ומכוונין את ליבם לאביהם שבשמיים–היו מתגברין; ואם לאו, היו נופלים.  כיוצא בדבר אתה אומר "ויאמר ה’ אל משה, עשה לך שרף . . ." (במדבר כא,ח), וכי הנחש ממית ומחיה:  אלא כל זמן שישראל מסתכלין כלפי מעלן, ומשעבדין את ליבם לאביהם שבשמיים–היו מתרפאין; ואם לאו, היו נימוקים. 

Que traducido significa:

"Y fue, cuando Moisés  elevaba su mano, Israel se fortalecía…" (Éxodo 17:11), ¿Acaso las manos de Moisés hacen la guerra o son sus manos las que hacen fracasar la guerra? Realmente, cada vez que Israel miraban hacia lo alto, y dirigían su corazón a su Padre en el cielo, entonces ellos se fortalecían; si no lo hacían, fracasaban.
Similar es cuando dice "Y el Señor dijo a Moisés: Hazte una serpiente…" (Números 21:8), ¿Acaso la figura de la serpiente mata y da la vida? Realmente, cada vez que Israel miraban hacia lo alto, y dirigían su corazón a su Padre en el cielo, entonces ellos se curaban; si no lo hacían, eran dañados.

Quisiera que tomáramos este texto en cuenta para adecuarlo a un procedimiento que nos lleve a mejorar nuestra vida, sin supersticiones, sin falsedades, sin trucos, sin “magia”.
Primero, entendamos correctamente el pasaje.
Se nos habla de dos circunstancias diferentes.
Empecemos por la primera.
El pueblo recién había salido de la esclavitud de Egipto. Estaban en el denso desierto, sufrían de mucha sed, de ansiedad, de dudas, de ignorancia, de malos hábitos, de EGO.
Se quejaban por la falta de agua, murmuraban, eran molestos y toscos.
Moshé pide a Dios solución.
Dios le ordena que golpee la roca de la cual manará agua.
Entonces:

"(7) Y llamó el nombre de aquel lugar Masá [‘Tentación’] y Merivá [‘Altercado’], por el altercado de los Hijos de Israel y porque tentaron al Eterno, diciendo: ‘¿Está el Eterno entre nosotros, o no?’
(8) Entonces vino Amalec y combatió contra Israel en Refidim.
(9) Y Moshé [Moisés] dijo a Iehoshua [Josué]: -Escoge algunos de nuestros hombres y sal a combatir contra Amalec. Mañana yo estaré sobre la cima de la colina con la vara de Elokim en mi mano.
(10) Iehoshua [Josué] hizo como le dijo Moshé [Moisés] y combatió contra Amalec, mientras Moshé [Moisés], Aarón y Hur subieron a la cumbre de la colina.
(11) Sucedió que cuando Moshé [Moisés] alzaba su mano, Israel prevalecía; pero cuando bajaba su mano, prevalecía Amalec.
(12) Ya las manos de Moshé [Moisés] estaban cansadas; por tanto, tomaron una piedra y la pusieron debajo de él, y él se sentó sobre ella. Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro del otro lado. Así hubo firmeza en sus manos hasta que se puso el sol.
(13) Y así debilitó Iehoshua [Josué] a Amalec y a su pueblo, a filo de espada."
(Shemot / Éxodo 17:7-13)

Por supuesto que ambos incidentes están relacionados.
La falta de confianza de los recién liberados de la esclavitud, sus quejas, su pasividad, su violencia, etc.
La duda: ¿Está el Eterno entre nosotros, o no?.
Esa duda que carcomía el interior, cuando en verdad era evidente que Dios estaba con ellos. Pruebas tangibles no les faltaban. Precisamente a ellos esas pruebas no les faltaban. Ellos habían visto a Dios vencer al Faraón, aquel que presumía de ser un dios todopoderoso. Ellos estaban siendo conducidos milagrosamente. Ellos, precisamente ellos eran los menos indicados para hacerse esa pregunta.
Si la dejáramos para nosotros, que no tenemos el mérito de comprobar ostensiblemente la existencia y actividad de Dios, bueno… ¿pero ellos?
Es como irracional, demasiado tonto, irrespetuoso, egoísta.
Tenían al Rey de reyes haciendo todo tipo de maravillas para ellos, y todavía podían preguntarse: ¿Está el Eterno entre nosotros, o no?
Este cuestionamiento no pasó inadvertido para los sabios del Talmud, es bueno saberlo. Y es bueno saber que una de las respuestas a esta duda nuestra se resuelve al comprender mejor el texto sagrado.
Los recién liberados no estaban realmente dudando de la existencia de Dios, ni de si Dios está atento al mundo, sino de si Dios es solamente una entidad espiritual o si también tiene injerencia en las cosas del mundo.
Es decir, ¿Dios está ahí, en algún lugar del Cosmos, como si no existiera, o Dios participa activamente de las cuestiones del mundo?
¿Cómo sabemos que esto era lo que estaban planteando los recién liberados?
Pues, al conocer el idioma sagrado y comprender el sentido exacto de las palabras (los detalles, no vienen al caso).
Así pues, los hebreos no dudaban de Dios, sino de hasta donde Dios interviene en las cuestiones mundanas.
La respuesta dada por Dios no se limita a que de la roca manó milagrosamente agua, cosa que revela que Él participa del mundo, sino también con lo que ocurrió inmediatamente después, con el asunto de la victoria sobre Amalec.
Ellos fueron agredidos injustificadamente por Amalec. Apenas si lograron organizarse. Luego la lucha. Un general al comando. Un líder que alzaba las manos, y cuando el pueblo lo veía y alzaban sus ojos al cielo y sus corazones se ponían en sintonía con Dios, entonces obtenían más fuerzas. Y lucharon y lucharon, ellos, no Dios. Pero el estar en sintonía con Dios, el confiar en Él, en saber que Él actúa aunque no se Lo pueda ver, eso les daba el ánimo, la energía, la virtud para ser vencedores.
Podían haberse quejado, dejarse vencer, echar culpas, pedir ayuda, rogar por salvación milagrosa, pero no era así como iban a ser triunfadores. El éxito los esperaba si hacían su parte, si daban a pleno todo lo que podían dar. Si encontraban recursos internos que ni siquiera sabían que tenían.
Cuando ellos confiaron en ellos, porque confiaron en Dios; cuando dejaron las dudas que sirven como excusas del EGO, para concentrarse en trabajar con esfuerzo; cuando se sintonizaron con Dios, entonces obtuvieron el éxito verdadero.

Pasemos al segundo párrafo mencionado en la cita del Talmud que compartí hoy contigo.

"(4) Partieron del monte Hor con dirección al mar de las Cañas, para rodear la tierra de Edom. Pero el pueblo se impacientó por causa del camino,
(5) y habló el pueblo contra Elokim y contra Moshé [Moisés], diciendo: -¿Por qué nos has hecho subir de Egipto para morir en el desierto? Porque no hay pan, ni hay agua, y nuestra alma está hastiada de esta comida miserable.
(6) Entonces el Eterno envió entre el pueblo serpientes venenosas, las cuales mordían al pueblo, y murió mucha gente de Israel.
(7) Y el pueblo fue a Moshé [Moisés] diciendo: -Hemos pecado al haber hablado contra el Eterno y contra ti. Ruega al Eterno que quite de nosotros las serpientes. Y Moshé [Moisés] oró por el pueblo.
(8) Entonces el Eterno dijo a Moshé [Moisés]: -Hazte una serpiente venenosa y ponla sobre un asta. Y sucederá que cualquiera que sea mordido y la mire, vivirá.
(9) Moshé [Moisés] hizo una serpiente de bronce y la puso sobre un asta. Y sucedía que cuando alguna serpiente mordía a alguno, si éste miraba a la serpiente de bronce, vivía."
(Bemidbar / Números 21:4-9)

Es en buena medida un paralelo al pasaje anterior, al de la queja del agua, la misma que brota milagrosamente, luego el esfuerzo personal que cada uno debía hacer para ser triunfador.
El pueblo padece por falta de pan, por falta de agua, por estar cansados de comer el milagroso maná.
Lo desprecian, aunque es un alimento formidable.
Nuevamente se ponen agresivos, toscos, pesados.
La queja podría ser comprensible, pero no los modos, no la actitud, no el quejarse de llenos.
Así que aquí no hay otra respuesta directa que darles acorde a sus acciones.
Serpientes venenosas que mordían a los quejosos.
El pueblo parece reconocer el error, pero aún deben sintonizar sus corazones con el Eterno.
Entones, nuevamente deberán ver a lo alto, a algo que no salva, que no cura, como no lo hacían las manos de Moshé en la guerra contra Amalec. La serpiente no era más que una especie de placebo, un objeto, sustancia, idea que induce a la curación aunque objetivamente no tiene ninguna propiedad para tal efecto. Como las gotitas de agua que se le da a un niño que se queja de dolor de estómago, pero se le dice que es un remedio. Al poco rato la molestia desapareció, como si fuera un medicamento real. ¿Cómo sucede eso? No lo sé. Pero sucede. Y se usa a gran escala, incluso en situaciones bastante más complejas que un dolorcito de vientre.

La idea para poner en práctica es:

  • alzar la vista, literalmente, ver hacia lo alto.
  • Sugiero que al tiempo que miras hacia arriba en tu mente visualices una palabra, siempre la misma, que te haga sentir confiado, seguro, tranquilo, feliz. Por supuesto que debe ser una palabra positiva, apta, sin relación con idolatría ni otras inmoralidades. Por ejemplo, serían buenas de usar: shalom, paz, bien, bondad, justicia, amor, respeto, lealtad, bienestar, seguridad, confianza, puedo, placer, éxito, equilibrio, armonía. Son solamente ideas, no es obligación usarlas. Luego de definir la palabra, visualízala, dale forma, color, tamaño, etc. Mantén siempre el diseño, además de la palabra. Lo aconsejable es que uses colores mentales claros, brillantes, letras gruesas, bien definidas.
    Si te resulta más cómodo, puedes mirar hacia arriba con los ojos cerrados.
  • Al mismo tiempo, en tanto alzas tus ojos y visualizas la palabra positiva debes establecer sintonía con el Eterno, confiar en que Él actúa, que Él es bueno, Él es justo. Él no correrá a hacerte los mandados, no es tu sirviente, Él es el Rey, pero igualmente confía, porque todos Sus hechos son para bien. Confía en poder, en superarte, en ser mejor, en mejorar, en curarte, en vencer las dificultades, etc.
    Que tu deseo sea positivo, no para perjudicar a nadie. Que tu deseo sea altruista, no para satisfacer tu EGO. Que tu deseo sea acorde a los mandamientos, no para servir a tu EGO.
  • Después de unos minutos de ejercitarte de esta manera, ve y haz tu parte en la tarea que te corresponde hacer. No esperes el milagro, hazlo posible.

Luego de que hagas este ejercicio algunas veces, me gustaría que compartieras los efectos que observaste con nosotros.
Gracias por haber prestado atención hasta aquí.
Hasta luego

Querer, eso basta!…

Hola queridos compañeros, hace rato que no escribo un post. Y he decidido traer una reflexión que no es nueva, sino de antaño, pero en ocasiones olvidada y que es bueno refrescarla en la memoria.

Cada persona en el mundo es Noajida de nacimiento, es así porque es asi (a menos que haya nacido de madre judía), lo sepa o no, lo reconozca o no, lo quiera o no. Y cada uno de nosotros tiene diferentes potenciales, capacidades, para diferentes cosas, cada uno a pesar de tener una identidad igual a la de otra persona (excepto a la del judío) no deja de ser un mundo entero, una persona única, especial, con diversas características especiales y diferentes a los demás.

Ahora, siendo conscientes de que somos diferentes pero de igual identidad, cada uno tiene (sin saber, sin ser consciente de ello) tareas especiales, únicas, solas para quien tenga las capacidades para dicho trabajo. Esto no quiere decir que debemos dedicar tiempo en pensar para que servimos en el mundo, ni preocuparnos por no saberlo, sino, más bien, dedicarnos a ser devotos cumplidores de las Leyes Divinas que El Padre designó y que debemos cumplir para el beneficio de cada uno, del prójimo, de la sociedad, del mundo, del universo, etc.

Sin más palabras, para no quitar tiempo, para no extenderme solo en palabras con una sola idea, les dejo esto:

No todos saben, entienden o reconocen ser Noajidas o que es el Noajismo en sí… y esta bien, no todos lo saben. Pero tu querido socio, que tampoco sabías acerca del Noajismo, que te topaste con Fulvida por «x» razón, que fulano o sultano te comento de unas tales Siete leyes y tu curiosidad te trajo hasta aquí, que buscando la «verdad» la encontraste «sin querer» (aunque en el fondo fue queriendo), tu, querido socio, tienes el placer de conocer el Noajismo, fuere como fuere, halla sido como halla sido, conoces tu identidad espiritual. Dios te dio la oportunidad de que fueras parte de los pioneros en el nuevo despertar, porque tienes potencial, porque en el fondo eres sincero, porque puedes marcar la diferencia, porque puedes ser un constructor de shalom, porque puedes y tienes el potencial de compartir el Noajismo, porque te das la oportunidad de cada día poner un mínimo o máximo esfuerzo en cumplir aunque sea una Ley Divina, por amor, por respeto, por cariño, por confianza, porque das, mientras este dentro de tus posibilidades, porque buscas el crecimiento, porque con humildad edificas para ti, para el prójimo, para el mundo…

Porque Dios sabe desde un principio que TU puedes …

Ahora ¿tu sabes que puedes?… Dios cree que si, te dio a conocer el Noajismo y te ha dotado de capacidades únicas, solas para ti, pero que puedes compartir…

Puedes porque quieres, y con querer basta para poder…

Si tu conoces el Noajismo es porque tienes el potencial de ser Noajida, aunque allí afuera, en el mundo, se crea lo contrario…

Cariños!!!

Parashá Noaj 5772

En la nación judía esta semana se lee públicamente la sección –parashá- denominada “Noaj”.
Como es nuestra sana costumbre, compartimos algunas interesantes enseñanzas de la Torá judía que pueden ser de mucho provecho y bendición para los hijos de todas las naciones.

La parashá en titulares

1. Por orden de Dios, durante muchos años Noaj construye una nave que sirva para resguardo durante la catástrofe que se avecina.

2. El Diluvio es un desastre de dimensiones insospechadas.

3. Noaj intenta desembarcar, pero aún no es tiempo. Solo recién cuando la paloma trajo la rama de olivo en su pico fue momento de pisar tierra firme.

4. Es un nuevo comienzo para la vida en la tierra.

5. Dios sella un pacto perpetuo con toda la humanidad, el pacto noájico, que implica que las personas cumplan los Siete Mandamientos para las Naciones. La alianza queda simbolizada por el arcoíris con sus siete colores.

6. La población humana crece y eventualmente se extiende por toda la tierra.

7. El proyecto de la torre de Babel y su fracaso.

8. Nacimiento de Abram, quien posteriormente será conocido como Abraham.

 

Ideas que podemos trabajar a partir de la parashá

1. La dificultad de ser justo, comprometido y responsable en una sociedad que valora más la deshonestidad y el éxito fácil.

2. El egoísmo en la raíz de la corrupción personal y colectiva.

3. El cuidado del ambiente.

4. El pacto, actual y vigente, que existe entre Dios y todas las naciones del mundo.

5. Valorar la diversidad así como la individualidad.

6. ¿Hasta dónde somos capaces de llegar para tratar de no sentir miedo?

7. ¿Cuándo el trabajo en equipo es apropiado y favorable?

8. La bondad, la justicia y la fidelidad a Dios como conductas que llevan a construir Shalom primero en uno y luego en el mundo.

9. Salvar una vida es como salvar un mundo entero.

10. Una sola persona puede construir un mundo, o destruirlo.


Relato: Jueguitos de filósofos

El gran maestro se encontraba reflexionando sobre el misterio de la esencia de Dios, día y noche, casi sin parar. Consultaba libros, oráculos, palabras misteriosas de antiguos sabios, trataba de hallar en sueños alguna imagen o respuesta, pero nada parecía tener sentido.

Agotado de no alcanzar a comprender lo incomprensible, pidió a su amigo y vecino, un sencillo sastre judío, que lo acompañara a un paseo por la playa.
El pobre hombre judío estaba muy atareado, tenía varias prendas que coser y remendar, pero sabía que su vecino era muy solitario y se lo veía apabullado por sus pensamientos, por lo que el sastre tomó la tarde libre para hacer este acto de sencilla bondad con el prójimo.
Mientras paseaban el gentil hombre narró al simple sastre sus metafísicos problemas, su angustia existencial, sus ardores de la fe. En tanto el sastre caminaba a su lado, en silencio.
(A veces un silencio atento vale mucho más que mil palabras huecas).
Entre las arenas, cerca de la orilla, observaron a un niño que iba y venía con su baldecito lleno de agua del mar, la cual echaba en un pequeño pozo que había hecho en la arena.
Por curiosidad, o para distraerse, el filósofo le preguntó: – ¿Qué estás haciendo, pequeño?
El niño replicó: –Estoy metiendo toda el agua del mar en este pozo.
– ¿Pero no te das cuenta que eso es imposible? Toda el agua del mar no cabe en ese agujero.
El niño respondió: – Si yo digo que estoy metiendo toda el agua del mar en este pozo, estoy metiendo toda el agua del mar en este pozo. – Se dio vuelta y siguió en su tarea, ya sordo y mudo a los molestos adultos con sus pretenciosas convicciones.
El filósofo murmuró por lo bajo: – ¡Niñitos! Viven en sus mundos pequeñitos, llenos de fantasías y jueguitos. ¡Niñitos! ¿Qué saben ellos de la vida?
El gran sabio y el sastre continuaron la marcha, hasta que el judío rompió el silencio: – Amigo mío, ¿es usted tan diferente a ese joven aprendiz de filósofo que pretende llenar su pocito con todo el océano?

Preguntas para repasar y reflexionar

1. ¿Cuál es la moraleja?

2. ¿Qué quiso enseñarle el sastre al filósofo con su pregunta?

3. ¿Cuál te parece que era el mayor error del filósofo?

4. ¿Cómo relacionas este relato con el contenido de la parashá?

5. ¿Podrías aplicar esta enseñanza a la vida cotidiana?

Kinesiología,bioética y ser noájida

Hace algún tiempo, comenté un post en donde se aludía al RaMbaM y allí el moré me preguntaba sobre la relación que hay entre lo que estoy estudiando y los mandamientos noájidas. Ayer se me ocurrió publicar lo que había comentado, pero ampliando el contenido; las reflexiones al respecto. Ahora comparto con ustedes mis reflexiones:

«A cada profesional vinculado a las ciencias médicas, que se relaciona con pacientes, se le  ha  depositado la confianza de que por medio de su intervención, producirá cambios en el estado del cliente/paciente. Desde el técnico o auxiliar paramédico hasta el médico más  renombrado y périto, tienen el deber de velar por mantener la integridad del paciente, sin ponerlo en riesgo ni tampoco a ellos mismos.

En éste contexto, los kinesiólogos,como profesionales de la salud, también tenemos que los principios de la bioética, que son:
1. No maleficencia: debemos evitar realizar consciente y voluntariamente acciones que puedan causar daño o perjudicar a los demás; no poner en riesgo la integridad o vida del paciente.Esto implica que debemos tener una formación, tanto teórica como clínica estricta y actualizada permanentemente para prestar servicios a nuestros pacientes.Es una responsabilidad de cada uno de nosotros.Tanto estudiantes como profesionales.
2. Beneficencia: debemos buscar o procurar lo mejor dentro de nuestras herramientas para asegurar el bienestar del paciente con nuestra intervención.
3. Autonomía: Debemos respetar la voluntad del paciente y su familia.Informarle sobre lo que realizaremos y tener su autorización (con exclusión de cuando se dan situaciones en que las personas puedan ser no autónomas como en caso de demencia o coma,etc.) A veces es preciso contravenir esto en pos del bienestar del paciente y tenemos que fundamentar el porqué .
4. Justicia: el trato y servicios dados al paciente, deben ser ecuánimes , sin importar la clase social,económica,credo religioso, tendencia polítca,sexo,etc.

A nivel nacional, un kinesiólogo, puede desempeñarse tanto en la investigación como en la clínica . Respecto a ésta última, si, por ejemplo tenemos un paciente en UCI y no tomamos la decisión correcta a la hora de intervenirle,procurando no dañarle y buscar su bienestar, podemos generar secuelas o incluso la muerte (por yatrogenia).En el área traumatólogica, por ejemplo, podemos marcar la diferencia en ciertos casos entre rehabilitar y permitirle retomar sus actividades previas; a mejorar su calidad de vida o dejarlo con nuevas alteraciones o incluso invalidez.Estas situaciones permiten ilustrar lo siguiente:

  1. Cada uno tiene una responsabilidad social con la labor que realiza, que debe asumirse con compromiso. No debe ser nuestro interés el ganar dinero a costa del bienestar de un paciente y dejar de lado a aquellos más vulnerables por falta de recursos.
  2. .Segundo, estamos tratando con seres humanos, creados a imagen y semejanza de D-os (entiéndase esto no como algo físico,pues D-os es incorpóreo). Si  pudo evitarse alguna consecuencia, pero no se hizo,actuamos con negligencia y puede llegarse a transgredir la ley noájida de no matar.
  3. Finalmente, se debe actuar dando lo mejor de sí y entregando un trato justo a quienes requieren de nuestros servicios, sin importar asuntos personales y, como se mencionó más arriba,  la condición socioeconómica.No porque alguien sea pobre se le va a dar una atención de segunda categoría, porque no hay ser humanos de segunda clase.Todos somos iguales ante D-os y nadie ni peor es  mejor por tener más o menos dinero. Al no actuar de esta forma, se atenta contra el deber de velar por la justicia social, que debe cumplir todo ser humano, en dondequiera que viva, sea a nivel individual o por medio del establecimiento de cortes de justicia que velen por una sociedad mejor y más justa, sustentada en los 7 Mandamientos  Noájidas (Shevá Mitzvot Bnei Noaj)  entregados por el Eterno a la humanidad.

Yo vivido, triste pero cierto…

Triste, pero cierto…

Como seres humanos que somos, tenemos nuestro lado oscuro, por así decirlo, del cual constantemente huimos y luchamos hasta desfallecer, del cual nos distraemos con la rutina diaria y no queremos reconocer su existencia por miedo a no poder hacer absolutamente nada; y terminamos creando nuestras vidas alrededor de este tipo de sentimientos.

Construimos el Yo vivido.

Siempre hay una excusa supuestamente justificable, para hacer lo que se nos da la gana, sin saberlo cada uno se siente más sabio que el otro, nos sentimos tan libres en nuestras mentiras, tan seguros de nosotros mismos con nuestras patrañas, pero cuando la luz rompe con la oscuridad nos encontramos realmente llenos de miedo el pánico nos carcome y el único escape posible ante tal situación es el sufrimiento disfrazado de felicidad, entonces nos rodearnos de personas, de cosas, marchamos detrás de un líder sectario, lastimamos a quien nos ama, nos esclavizamos ante cualquier adicción,  para así encontrar la solución milagrosa e inmediata para desaparecer nuestro profundo sentimiento de impotencia.

Detestamos ser humanos, preferimos construir nuestras vidas con un actuar hueco dictado por otras personas que reglamentan nuestra vida, palabrería hueca que exhibimos con orgullo, como símbolo de nuestra precaria y superficial identidad.

… EGO como dios y salvador

 

 

Ahora quiero invitarlos a pensar, a mirarnos al espejo y a ser sinceros para responder la siguiente pregunta:

 

¿Cómo construyes tu Yo vivido? 

 

Ser humano

Existen días trascendentes para la humanidad en el correr del tiempo, así quiso el Eterno que fuera, tiempos y épocas, momentos en los cuales hay lo que aprender.

El mensaje que quiero compartir es simple y sencillo, a propósito de este día tan especial que esta por entrar, me refiero al Iom Kippur o día de la expiación.

Esta sagrada casa de estudio, tiene un aspecto muy destacado que de hecho he visto en poquísimos lugares.

Aquí se imparten clases, estudios, técnicas y conocimientos de cómo lidiar con nuestra tendencia hacia lo negativo modernamente  llamada “ego”, aquello que nos estanca como personas, nos obstaculiza para no dejarnos elevar como seres humanos y tener plenitud en este mundo, aquí en esta sagrada casa de estudios se proporcionan diferentes herramientas para crecer y refinarnos a través de estudios, investigaciones, clases que nuestro Maestro tiene a bien proporcionar a todo aquel que lo quiera aprovechar.

Finalmente ese es un mensaje poderoso del día de la expiación, retornar a la buena senda, hacer brillar la esencia del ser humano y reconocer a Hashem como Amo y Soberano del universo.

¿Pero como podemos dejar un camino equivocado sino podemos lidiar con nuestra tendencia hacia el mal?

Dejar un camino equivocado puede no resultar sencillo mucho menos sencillo si no puedes lidiar de forma constante con la tendencia hacia lo negativo y claro que esto es algo humano, no es algo demoniaco o de “gente mala”, así fuimos hechos con tendencia hacia lo bueno pero también hacia lo malo, sin embargo es necesario lidiar con dicha tendencia hacia el mal para que de forma efectiva podamos cambiar nuestra “forma de ser” retornar a nuestro origen, y mira amigo querido, apreciado lector en este sagrado lugar de estudios precisamente esa es la principal misión “conocer y ubicar en su lugar correcto a nuestro ego” mediante técnicas del pensamiento traducidas en actos reales.

Sin las herramientas adecuadas y verdaderamente efectivas para hacerlo, podrás arrepentirte mil veces y rogar perdón mil más, pero si no puedes ubicar al ego en su lugar respectivo, de nada servirá porque seguiremos haciendo lo mismo, andando por caminos oscuros, faltos de vida y de mucho pesar.

Un mensaje para este día tan especial es “estudiar, compartir y aprender junto a muchas otras personas, para hacer una verdadera expiación para toda la humanidad, a través del cumplimiento de nuestros mandamientos y un manejo correcto del ego con todas las herramientas que aquí se brindan”.

Comparte fulvida amigo mío, estudia y aprende a cómo lidiar con tu ego para que con eso puedas cumplir con los mandamientos que te fueron dados.

Mis mejores deseos para que sean inscriptos y sellados en el libro de la vida, y que haya muchas cosas buenas para toda la humanidad en los días que vienen.

¡Un abrazo y hasta pronto!

 

Isaías 29:13

¿A qué y a quién se refiere el profeta Ieshaiau/Isaías 29:13?

Es sabido que los pérfidos misioneros, (mesiánicos, netzaritas, ebionitas, falsos judíos, caraítas, falsos sefaradíes, supuestos descendientes de tribus perdidas, evangélicos, cualquier otra denominación cristiana similar), entre otros impostores de la fe, andan usando este versículo como un vehículo para promover sus mentiras, confundir, sembrar el caos, corromper, hacer propaganda de la religión rebelde, burlarse de los leales de Dios, entre otras maldades terribles.
Ya desde las páginas del profano “nuevo testamento”, en el evangelio atribuido al poco santo Mateo, se pretende hacer creer que este verso es un ataque profético en contra de los Sabios de la Torá Oral.
¿Será cierto que es una denuncia en contra de los verdaderos Sabios del Talmud, los conocidos como “fariseos”?
¿Será que el profeta de la Verdad, Isaías, realmente amonesta a los Sabios de la Torá y los declara ignorantes, perversos, herejes?

¡Por supuesto que NO!
Es evidente que el profeta Isaías NO está violentando a los Depositarios de la Torá, a los Maestros de la Luz, a los Líderes del Conocimiento Sagrado, a los Guardianes de la Tradición.
¡Nada más lejano a la voluntad del profeta, enviado por Dios, que perturbar el legado de Israel con ataques fantasiosos y poco santos!

Cuando usamos nuestro intelecto (y no la fe de los religiosos vacíos de espiritualidad),
y nos apoyamos en el conocimiento (y no en la vanidad de los idólatras),
y mantenemos nuestro corazón humilde ante la evidencia real (y no inventamos realidades alternativas, de acuerdo a nuestro deseo, como los traficantes de la fe),
y tenemos amor y respeto por Dios (y no hipocresía en todas las dimensiones, como misioneros),
rápidamente comprendemos el significado real y profundo de lo que el profeta quiere enseñarnos en este pasaje.

Ante todo, recordemos que el versículo debe ser entendido en su contexto, tanto literario, como histórico, cultural, temporal, etc.
Por tanto, no es bueno tomar un solo versículo, fuera de todo marco, y con ello pretender elaborar doctrinas, leyes o “teología”. Ese procedimiento aberrante, falto de honestidad, es el que acostumbran a emplear los misioneros, pero no podemos nosotros hacer como esos perversos. ¡Dios no permita!

En su contexto el profeta está hablando de falsos entendidos, de gente que no sabe leer, que no sabe comprender, que no cuenta con la clave para decodificar los mensajes, que son ajenos a la cadena de la sagrada Tradición.
Así pues, no es de los Sabios que el profeta está hablando, sino precisamente de los FALSOS sabios. Gente que son de la patota malquistada de los pastores de iglesia, supuestos rabinos mesiánicos, ilustrados necios que saben manipular los corazones pero carecen de entendimiento sagrado, gente hábil para el negocio de ser pedigüeños y obtener diezmos y otras prebendas pero son incapaces de servir con lealtad a Dios.
El profeta claramente está denunciando a esos religiosos, llenos de ritos, aleluyas, reclamos de diezmos y tributos, ejercitados en levantar la mano derecha y “clamar a Dios”, gente hueca pero astutamente preparada para el negocio de la religión. Gente que es esclava del EGO y por ello ausentes de lealtad a Dios y Sus mandamientos.
Esos que no tienen empacho en hacerse llamar “rabino”, “haham”, pastor, profeta, hombre del Señor, pero que no son más que pobres diablos, con sus almas opacas, sus espíritus encerrados detrás de los ardientes barrotes de las celditas creadas por sus EGOs.
Tal cual dice el profeta:

"Toda la visión será como las palabras de un libro sellado. Cuando lo dan al que sabe leer y le dicen: ‘Por favor, lee esto’, él dice: ‘No puedo, porque está sellado.’
Y cuando dan el libro al que no sabe leer y le dicen: ‘Por favor, lee esto’, él dice: ‘No sé leer.’"
(Ieshaiá / Isaías 29:11-12)

Tú que has pasado por iglesias, que aún estás en alguna de ellas, aunque la llames sinagoga, sabes de qué te estoy hablando.
Ese pastor tuyo, aunque le digas ahora rabino, es exactamente uno de los que está describiendo el profeta.
Es así, gente inculta, obtusa, ciega, carente de toda vitalidad espiritual, faltos de las claves sagradas para conectarse con el texto sagrado, miserables llenos de pecados y orgullo.
Y tú, sí tú, si eres misionero, si eres mesiánico, si eres oveja de esta gente, no eres mucho mejor en lo que a lealtad a Dios y respeto se refieren.
Me da pena decirlo, me molesta sonarte agresivo, pero prefiero parecerlo y no ser cómplice de la maldad, el odio, la rebelión, el caos.
Porque de gente así es de la que está hablando el profeta.
Sean judíos, que se llenan de “jumrot” innecesarias, claramente antagónicas con el espíritu y letra de la halajá.
O sean falsos judíos, esos mesiánicos o similares, que se inventan su propia religión.
O sean los seguidores de falsas deidades, pero que se hacen pasar por personas de Dios.
A todos ellos está señalando el profeta Isaías cuando está denunciando en estos versículos.
A los que no saben leer, porque son ignorantes… cosa que es mala, pero que se empeora al hacerse pasar por entendidos y revelados por Dios.
A los que saben leer, pero carecen de la capacidad de penetrar en el sentido real del texto, porque para ellos permanece cerrado, sellado… cosa que es mala, pero que se empeora cuando se hacen pasar por líderes espirituales, por personas dedicadas al crecimiento integral pero no son más que mezquinos holgazanes muy entrenados en el negocio de estafar con religión a los que les prestan atención.

Lee las palabras del profeta que te he citado. No creas en lo que te digo. No preciso que me creas, sino que leas, entiendas, analices, preguntes, indagues.
Está muy claro.
Es muy sencillo de ver, si es que no tienes tus ojos tapados y tu corazón cegado y tu cerebro entumecido.
Claramente el profeta NO está hablando de verdaderos Sabios, puesto que ellos saben leer, ellos saben penetrar en los sentidos de lo que está expresado.
¡Por algo son verdaderos Sabios!
No lo serían si fueran mediocres pedantes que se dedicaran a mandar a los demás bajo la excusa de que son “grandes”, “pontífices”, “predicadores” y por ello, solamente por sus “titulitos” deben ser admirados y aprobados.
¡Justamente es contra eso que se está levantando el profeta Isaías!
Contra los “doctores en teología” que te vienen a predicar “la palabra”, pero no son más que mentiras, engaños, falsedades, lemas podridos de religión que no tienen un gramo de espiritualidad.
Porque los verdaderos sabios no precisan esconderse detrás de “titulitos”, ni someter a la gente por miedo, ni presionar, ni amenazar, ni silenciar a los que están en divergencia, ni maldecir a los que piensan diferente, ni tratar de “hijos de serpiente” a los que no les dicen “amén” a todas sus estupideces.
Compara a los verdaderos Sabios con gente como el adorado falso dios de la cruz.
Éste maldijo, insultó, agredió, a los que cometieron el “pecado” de pensar diferente a sus payasescas fantasías. Condenó a muerte a los que no siguieran como borregos sus prédicas llenas de vicio y mentira.
Y de acuerdo a ese deplorable modelo han vivido durante dos mil años sus seguidores.
Demuéstrame que es mentira lo que te digo, o por el contrario pon argumentos que lo confirmen. Te invito a hacerlo. No me creas, estudia, analiza, sé leal contigo mismo y con Dios. ¿Eres capaz de dejar de repetir lemas y doctrinas y comenzar a pensar y hacer brillar tu luz espiritual?
¿Eres capaz?
Espero, realmente, que sí… pero el EGO es tan fuerte (en apariencia). Las doctrinas se te han implantado tan profundo. Te han sometido a tanta manipulación emocional y vejamen, que en el fondo dudo que puedas salir a la libertad, romper las cadenas con la religión, ser libre para ser obediente para con Dios.

Entonces, llega el profeta al verso que nos convoca y dice:

"Dice el Señor: ‘Por cuanto se aproximó este pueblo, con su boca y con sus labios Me honró, pero su corazón se alejó de Mí; y su reverencia a Mí es un precepto de personas, tal como han sido entrenados."
(Ieshaiá / Isaías 29:13)

¿No es exactamente lo que te describí líneas más arriba?
Gente que se llena la boca de aleluyas y amén.
Dicen la palabra “dios” cada dos palabras.
Repiten con fidelidad estéreo pasajes de la “biblia”.
Saben de memoria todas las respuestas prefabricadas que demuestran “la verdad” de su religión.
Cumplen con religiosa precisión los ritos de sus dogmas.
Son incapaces de dudar, puesto que si dudan se van al infierno.
Son paralíticos a la hora de caminar por un camino propio, sino que marchan lisiados por donde su pastor les marque… al ritmo del pastor.
Sí, sus bocas están llenas de clamores e invocaciones, de versículos y “tejilim”, pero en lo profundo están secos.
La religión mató al espíritu.
El EGO marchito la conexión con Dios.
Sus corazones no están con Dios, aunque hablen de Dios a cada rato.
Sus dogmas no son puras, aunque digan que son “bíblicas”.
Su fidelidad a sus líderes no es lealtad a Dios, sino a hombres.
Sus enseñanzas parecen muy bellas, muy beneficiosas, muy espirituales, pero solamente son apariencias.
Ellos no aman a Dios, no lo respetan, sino solamente viven tal y como les enseñaron.
Son entrenados y así viven.
Son amaestrados y amancebados y así continúan.
No analizan, no cuestionan, no critican, no piensan, no razonan, solo cumplen lo que sus pastores les dicen, lo que en sus casas les enseñaron.
Tienen fe, para ellos es suficiente.
Y eso es absolutamente lamentable.
Su fe es una ofensa.
Sus dogmas rebelión.
Su religión es la pornografía de los sacro.
Corrupción abunda en sus negociaciones.
Aunque hagan cosas buenas, no las hacen por bondad, sino porque eso les han inculcado, temen romper el molde, temen las consecuencias, se dejan llevar por temor.
Son cáscaras, máscaras de cara bondadosa, pero dentro es un oscuro hogar lo que impera (ver aquí).

Por supuesto que para aquellos que conocen a los Sabios les es evidente que es imposible que el profeta se refiriera a ellos con estos términos.
Nadie llegó al grado de Sabio de la Torá por ser hipócrita, por ser religioso, por ser de doble cara, por ser un holgazán astuto en comerciar y manipular.

Los verdaderos Sabios, los “fariseos”, eran maestros de Torá por mérito propio, adquirido y sostenido con estudio, esfuerzo, dedicación, lealtad total a Dios, cumplimiento dedicado de Sus mandamientos, honestidad, integridad, capacidad de interrogar y responder, entre otros atributos que hacen de una persona que sea admirable realmente.

Concluyamos con las palabras del excelente Malbin:

"Dice el Señor: ‘Por cuanto se aproximó este pueblo", ellos piensan que con tales afirmaciones se aproximan a Mí y se acercan a Dios, a causa de que magnifican y adoran la Palabra de Dios que está más allá del alcance de cualquier ser humano, pero en realidad "sólo su boca y sus labios me respetan", precisamente con esto es que ellos distancian su corazón de Mí.
Porque creen que haciendo esto están cumpliendo con el mandamiento de Dios y Sus enseñanzas, como si todo fueran actos externos sin pensamiento ni intención. En su opinión son cuestiones materiales sin nada más, no hay intelecto ni ciencia en ellos.
Así ocurre que "su reverencia a Mí” es meramente “un precepto de personas", que es resultado del "ser entrenados así" y están acostumbrados, esto es que se han acostumbrados desde su infancia y es su costumbre sin intención y sin pensamiento. Saben que son los mandamientos de Dios, pero no los hacen porque los ordenó Dios, sino porque así les inculcaron sus padres y sus antepasados, y hacen sin saber el sentido sino porque así fueron entrenados a practicar. Por medio de estas acusaciones el profeta pretende que el hombre no solamente cumpla con los mandamientos, sino que también estudie y comprenda el sentido de ellos, profundice intelectualmente en sus acciones.

Adoremos al hombre

Las religiones, todas ellas, son mecanismos para manipular a las personas al tiempo que conlleva pretensiones de dominar a la divinidad (sea al verdadero Dios o a los dioses imaginados por el hombre).
Las religiones no son el camino espiritual marcado por el Eterno, no fomentan la libertad, ni la responsabilidad, ni el disfrute, ni el crecimiento, sino que sirven para todo lo contrario.
Las religiones son exteriorizaciones del EGO en su búsqueda por someter a personas y colectivos.

Lo espiritual nada tiene que ver con religión.

Dicho esto, enfoquemos nuestra atención por un instante en Dios, el Uno y Único, y en ciertas actitudes de algunas (muchas) personas, que se creen fieles, espirituales, aplicados a las cosas de Dios.
Es sabido y tomado como cierto que:

           a) Dios está en completo control de todo, y

           b) Dios puede alterar o cambiar la realidad a causa de que la persona haga determinados actos o pronuncia palabras específicas (rece).

Es sabido y tomado como cierto, ¿pero es realmente así?

Los que afilian a esta creencia  tienen una gran ventaja: en apariencia no hay para demostrar que es falsa y errónea.
¿Por qué?

Si la persona opera o reza de tal o cual forma y se obtiene el resultado esperado, es “evidente” de que Dios ha actuado de acuerdo al deseo de la persona.
Pero, si el resultado no es el deseado, la persona se encoge de hombros y admite que no rezó lo suficiente, o que no practicó tantos mandamientos como debiera para alcanzar a ejercer control sobre Dios, o que Dios ha respondido que “no” y nosotros "no podemos entender los caminos de Dios."
Como sea, la persona queda a resguardo de confrontar sus creencias, porque sea porque resulta o porque no resulta, siempre tiene la razón (en apariencia).

Ahora, hay un detallito que no debe quedar desapercibido.
Quienes creen de esta manera y en consecuencia actúan, parecieran tener a Dios como todopoderoso, en control de todo, como amo y señor, tal como indica el ítem “a”.
Sin embargo, si somos atentos podemos descubrir que esta creencia (junto con patrañas tales como “El Secreto”, el pensamiento positivo que conjura al universo, las leyes metafísicas de la asociación y el éxito, entre otras), en realidad NO tiene a Dios como el Jefe, Aquel que está a cargo, sino como un esclavo personal, que está a la espera de recibir órdenes para actuar de acuerdo al deseo del “amo”, que sería el peticionante o el que cumple tal o cual mandamiento.
A ver, para que quede claro: Dios está en control, pero la persona es la que hace que Dios cambie la realidad de acuerdo a su deseo personal.
Se trata entonces de “pactar” con Dios, negociar con Él, proclamar “decretos”, obligarlo a actuar en consonancia con lo que la persona quiere, a cambio de unas moneditas en forma de rezo o de rituales o tal o cual práctica (que en sí misma pudiera ser muy loable y positiva).

Es tremendo.
Es desdibujar los roles, inventar una esquizofrénica realidad en donde la persona está realmente al mando en tanto Dios es un títere.
Un Dios desfigurado, capaz de morir para salvar al hombre, dispuesto al auto sacrificio con tal curar al dolido, impotente aunque se presuma de todopoderoso, incapaz de regir el mundo a no ser que reciba órdenes de parte de los que tienen fe en Él.

Entonces, no tiene nada de extraño que sepamos de religiones en las cuales dios manda a su hijo a morir para salvar al pecador, religiones en las cuales se da dinero para que dios envíe riqueza, religiones en la cuales uno se reza a sí mismo pues es un dios, religiones en las cuales el hombre es dios al igual que el resto de la naturaleza, religiones en las cuales dios se aplaca con rezos y sacrificios, religiones en las cuales dios está a la espera de que uno pida un deseo para que él lo realice, religiones…

Esto, mis amigos, es la religión.
Es el EGO.

A propósito de Rosh HaShaná… Aprender a recordar!

Nos encontramos a vísperas de una festividad sumamente importante, Rosh HaShaná! Para quienes aun no tengan muy claro de que se trata, me permito hacer una pequeña reseña y digo pequeña porque su valor y significado tanto para el pueblo judío como para nosotros los gentiles es bastante amplio.

Rosh HaShaná traduce literalmente “cabeza del año”, anuncia el comienzo del nuevo año Universal y con él un nuevo ciclo de la relación de Di-s con el hombre. Es una fecha donde recordamos el mes en que el Eterno creó el mundo y según la tradición, en este día fue creado Adán, el primer hombre. En esta celebración debemos tener claras tres acciones: Agradecer, que gracias a Él concluimos un año con metas alcanzadas y comenzamos otro llenos de salud, bienestar y bendiciones;  arrepentirse sinceramente por las ocasiones en que no cumplimos a cabalidad los preceptos designados y prometer crecer cada día más del nuevo año en nuestra identidad.

Pero el objeto de lo que escribo hoy no es precisamente sobre lo que significa el Rosh HaShaná, sino sobre una actitud que solemos tomar en estos últimos días del año (y bueno, puede decirse que siempre) y es la de olvidar. Es muy de humanos querer olvidar todo aquello que nos desagrada ya sean personas, objetos o situaciones, y es algo lógico pues no queremos recordar por siempre lo que alguna vez nos hizo tanto daño; pero creo que la clave no se encuentra en olvidar sino en aprender a recordar.

A medida que pasa el tiempo vamos construyendo nuestra historia con cada persona, cada situación, cada risa, cada lágrima, cada momento de soledad y también de felicidad; todo queda consignado en el libro de la vida de forma que es imposible intentar modificar algo. Partiendo de este hecho, de que estamos construidos de historias y experiencias, parece ilógico entonces el acto de olvidar porque significa casi negar nuestra propia existencia, lo que algún día fuimos o vivimos.

Es importante tener en cuenta que Dios es quien dirige nuestras vidas, que todas las personas (para bien o para mal) que llegan a nosotros no lo hacen por azar es porque en realidad tienen un papel que cumplir y todas las situaciones buenas o malas fueron también predestinadas por Él de modo que pudiéramos aprender de todo lo vivido para construirnos como personas continuamente, para que viviendo bajo sus designios alcanzáramos al final de la vida la perfección del espíritu.

Rosh HaShaná es una fecha perfecta para que nos habituemos en el ejercicio de aprender a recordar, hacer una mirada global a los momentos incómodos por los que un día pasamos y reconocer que inevitablemente algo debimos aprender; recordar no con rencores sino mas bien con agradecimiento y con la satisfacción de que gracias a esos momentos hoy somos lo que somos y que afortunadamente (si nos lo proponemos) crecimos espiritualmente. Con lo anterior viene también el perdón, pero un perdón sincero aceptando que si como humanos cometemos cientos de errores otras personas pueden también equivocarse con nosotros y es que al fin y al cabo vivir es una preparación para el momento en que nos reunamos otra vez con Hashém, como cuando los niños aun inexpertos agreden sin pensar a otros es deber de los padres corregirlos y de los propios niños aprender… así mismo Di-s nos corrige y nosotros en medio del desconocimiento del buen vivir, aprendemos.

Familia, les deseo a todos una muy feliz fiesta llena de bendiciones y buenos deseos, con un nuevo año lleno de experiencias para el propio crecimiento espiritual, un abrazo fraternal.