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Resp. 1101 – Sobre idolatría – hechicería

Luis Guzman nos consulta:

Saludos Moreh: Referente al libro "Camino del gentil justo" en el Capítulo 6 Idolatría en la Parte 6 numeral 4 Hechicería, hay una nota que menciona vudu, grupos de rock como representantes o discipulos de satan (con mayúscula), poderes oscuro y ritos satánicos. ¿como explicar esto a nuevas personas que escuchan sobre noajismo? En el material de Fulvida ya tenemos claro la acepción satan. Gracias por su respuesta.
Luis Guzman, 52 años, contador, El Salvador, noajida.

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Resp. 1099 – por que si un Noajida cumple con sus 7 mandamientos al pie de la letra no le va bien en la vida?

ricardo nos consulta:

por que si un Noajida cumple con sus 7 mandamientos al pie de la letra no le va bien en la vida?
ricardo rodriguez, colombia

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Poder e impotencia

«Casi todos podemos soportar la adversidad, pero si queréis probar el carácter de un hombre, dadle poder» decía Abraham Lincoln.

La adversidad es parte de la vida cotidiana. No existe la felicidad constante, ni el hartazgo sin hambre, ni la contrariedad que no se cruce en tu vida. Todos estamos capacitados para atravesar determinadas tormentas, a caer y recuperarnos, a tropezar sin por ello darnos por vencidos. Es lo que venimos haciendo, por lo general, desde el mismo instante del nacimiento.
Sin embargo, ¿qué pasa cuando tenemos la convicción de que somos «más que vencedores»? ¿Qué malestar profundo se está cebando cuando se nos convence de que el universo conspira para que nuestro objetivo sea alcanzado? ¿Qué surgirá a la luz de nuestro carácter al sentirnos poderosos?

Para tratar de entrever alguna respuesta, analicemos.

¿Qué es lo que pretende hacerte el EGO?
Someterte, dejarte postrado, hacerte sentir en impotencia (real o imaginaria), doblegarte para que no avances.
¿Cómo?
Pareciera que el método de que sientas el fracaso, la debilidad, la penuria sería el más efectivo, ¿cómo no sentirse impotencia en la impotencia en cualquiera de los planos de existencia, o en todos ellos?
Pero, lo cierto es que cuando te elevas, en el momento que te crees poderoso e invencible, cuando miras hacia abajo y notas lo mucho que has avanzado y temes la caída o te vanaglorias de tu conquista y fantaseas con tu perpetua superación, es entonces cuando el EGO ha preparado y sazonado el camino para tu tropiezo, cuando probablemente te darás de narices con las murallas del no poder y la impotencia te someterá.

Sí, ciertamente, cuando te regodeas en tu poder (real o imaginaria, mayor o menor), o trastabillas a causa del miedo que él te estimula, es entonces cuando se manifiesta tu carácter, tu verdadera capacidad para ser libre y feliz, o ser esclavo del EGO.
Si estás capacitado para ser poderoso, sin remordimiento, sin temor, sin dudas, sin jactancia, entonces eres libre y seguramente disfrutas de los ratos de felicidad que se cruzan en tu vida.

Pongamos el caso de la persona en su relación con el Eterno en la faceta de la oración.
Aquel que sucumbe a la idea de no merecer el encuentro con Él, por ser pecador, por haber errado, por no estar en determinado nivel o grupo, que se siente escaso en poder, y por tanto no se comunica con el Padre, y se aparta más, y se derrumba aún más profundamente, y se siente menos meritorio, y se esconde más… ¿es víctima de las vocecitas perversas de su EGO o está procediendo como debiera?
Por el otro lado, aquel que se cree súper poderoso, independiente de todo poder, por sobre las reglas del espíritu, en posesión de secretos místicos maravillosos, que no precisa del Padre ni considera que es menester alabarlo y agradecerle, y por tanto no reza, no se toma el tiempo para la profunda reflexión de autoconocimiento que debiera ser la plegaria, y se perturba más su imagen corroída por las máscaras del Yo Vivido… ¿está más liberado de su EGO, y es por tanto realmente libre, feliz, trascendente; o está ahogándose en falso poder, en impotencia, pero adormecido por sus ilusiones de superioridad?
Vamos, piénsalo, medítalo, toma conciencia de cómo haces tú, en donde te ubicas, que tan distante estás de la armonía de tu Yo Vivido en concordancia con tu Yo Esencial.

Y tal como con el ejemplo que describimos respecto a la falta de rezo, está cada área de tu vida, con el EGO detrás haciendo oír su voz corrompida, debilucha que aparenta fortaleza, que te insiste con que no puedes, con que eres inútil, con que eres pecador, con que nunca hiciste las cosas bien, con que no eres salvo, con que solo con el EGO (y cualquiera de sus representaciones externas: religión, secta, líder, dictador, dios, ángel, amuleto, costumbre, etc.) puedes tener un poco de sanidad y esperanza.

Puedes recordarte en tus situaciones pasadas, o tal vez verte en la actualidad. ¿Supiste ser un cortés ganador? ¿Admitiste tu triunfo sin por ello despreciar al que batiste? ¿Te angustias por perder tus adquisiciones o que éstas te lleven al sufrimiento? ¿Sabes disfrutar de tus posesiones y haberes, o encuentras excusas para no hacerlo? Ganes o pierdas, ¿te mantienes dentro del respeto y el agradecimiento hacia tu contrincante o rival?
Y ya que preguntamos acerca de la rivalidad, de le competitividad, ¿celebras con auténtico regocijo el éxito de tus amigos y familiares?
¿Eres capaz de animarlos a que desplieguen sus alas y alcancen sus mayores potenciales?
¿Qué sientes cuando es otro, alguien que es cercano pero no tú, el que está en su período de victorias y adquisiciones?
¿Puedes aplaudir sin resentimiento ni envidia la fama, dinero, logros de otra persona, una que te sea cercana y con la cual has estado en competencia?
¿Eres cooperativo cuando corresponde, o tu afán de vencer, o tu miedo a ser humillado no te lo permiten?

Mira el caso de los judíos que estaban esclavos del faraón (representante externo del EGO) en el momento de su liberación de Egipto.
Faraón podía liberarlos físicamente, pero los esclavos emocionales seguirían oprimidos por el tirano. El representante externo puede desparecer o cambiar, pero el EGO no deja de actuar si no hacemos el trabajo de fortalecernos y liberarnos, en la medida de lo posible, de él.
Como pasa con aquellos adictos, por ejemplo al alcohol (representante externo del EGO), que «milagrosamente» dejan su adicción pero se vuelven adictos a la religión (representante externo del EGO). Cantarán loas acerca de su secta, de su iglesia, de su líder, de su dios, de sus santos, de su salvador, de lo que fuera, pero no advierten, o no quieren hacerlo, que cambiaron una adicción y servidumbre por otra.
Y así pasó con los judíos a la salida de Egipto, ya no estaba el faraón, pero la esclavitud no los abandonó. Seguían siendo tan o más esclavos que antes. A pesar de que sus cuerpos eran libres, sus almas permanecían encerradas en las mazmorras del EGO, y como esclavos se comportaban.
Al respecto: «Cuando el faraón dejó ir al pueblo, Elokim no lo guió por el camino de la tierra de los filisteos, aunque era más corto, porque dijo el Eterno: ‘No sea que al enfrentarse con la guerra, el pueblo cambie de parecer y se vuelva a Egipto.’» (Shemot / Éxodo 13:17). Un pueblo libre quizás temería un enfrentamiento con el enemigo, pero lo encararía con el poder que contará. Pero el esclavo, se infravalora o se sobrevalora, no se reconoce en su justa y real medida. Entonces, o se lanza a una guerra alocada, sin tomar en cuenta que está condenado al fracaso; o huye despavorido, sin siquiera intentar levantar un arma en su propia defensa.
Por supuesto que eso estaba en la mente del Eterno, sabía de la pobreza interna del pueblo, incapaz en aquel momento de confrontar a sus enemigos.
Aunque, poco después se encuentra el caso de que un núcleo sano del pueblo, más sintonizado en su multidimensional, tuvo el valor de defenderse del ataque traidor de Amalec, y hasta de derrotarlo. Pero, contaban con ese núcleo sano que tuvo el poder para enfrenar a un rival bastante más débil que la máquina de guerra filistea.
Tómalo en cuenta, conocer tu poder real y apreciar en su realidad el obstáculo, es un paso relevante para ser exitoso y feliz.

Los que logran algún grado de libertad fortalecen ese estado por medio de los actos de bondad y justicia con el prójimo, acciones que ayudan o influencian al otro a alcanzar también algún grado de libertad.
Entonces, podemos ser más fuertes, más poderosos, más felices, más saludables, más benditos cuando trabajamos generosamente por el bienestar del prójimo, para que alcance un grado de mayor libertad, de bien, de justicia. Al respecto podemos comprender así el siguiente pasaje: «Cuando compres un esclavo hebreo, seis años te servirá; pero al séptimo saldrá libre, gratuitamente.» (Shemot / Éxodo 21:2). Se llegaba a la esclavitud, en tiempos «bíblicos», por lo general a causa de deudas que no podían ser pagadas de otra manera. El amo no era dueño del esclavo ni podía disponer a su antojo de su vida. De hecho, tenía el deber de cuidarlo y eventualmente liberarlo al poco tiempo. Al liberar a otro, se libera uno.
Actualmente, cuando la mayoría de nuestras sociedades no admite la esclavitud al viejo estilo, podemos liberarnos al esclarecer al otro, ayudarle a encontrar su propio poder, a hacer que en el mundo reine el shalom.
Construir shalom no es un ideal inocente, para ingenuos. Tampoco es un lema hueco, para lavar cerebros y formar una secta turbia. Construir shalom es la meta para alcanzar la propia libertad en tanto se ayuda al prójimo a alcanzar la suya propia. Con actos de bondad, de justicia, de lealtad.

Pero, ten presente. Que tus actos sean REALMENTE de bondad y justicia, motivados por el AMOR y no por el EGO disfrazado. Que no haya interés detrás, ninguno. Sin expectativas de recibir algún premio, elogio, salvación, recompensa, aplauso, retribución, pago, o lo que sea. Sino que sean motivados por el AMOR, con generosidad sin esperar nada a cambio.
Una cosa son los actos buenos y justos que forman parte de una transacción comercial, o de favores que se piden y reciben.
Otra cosa es la actitud benevolente, generosa, que no es parte de una negociación sino meramente de la construcción de shalom por sí misma.
Si haces de tus actos de bondad y justicia un método mágico, o extorsivo, para obtener ganancias (por ejemplo, los que dan diezmo porque les alientan a que recibirán por diez o cien lo que han dado), entonces están bajo la bota del EGO, esperando recompensas, actuando con falso poder, que finalmente los entorpece, los enceguece, los nubla, los deja en esclavitud. Por el contrario, quien hace por real generosidad solamente hace, sin esperar NADA a cambio, y nada es nada.

El EGO juega con el poder y la impotencia, que se ponen de manifiesto con acciones (o falta de ellas).
Para el AMOR las acciones también son fundamentales, pues es la concreción en la realidad de la bondad y la justicia, pero no se basa en obtener rédito alguno, ni en demostrar el poder, ni siquiera en auto satisfacerse con la sensación de haber hecho algo bueno. Simplemente ES, tal como el espíritu simplemente ES.

Puede ser que te resulte un poco complejo el comprender algunos de los pasajes, más aún si no tienes conocimiento de la multitud de información que hemos brindado al respecto de los manejos del EGO. Te sugiero que con calma y paciencia leas, estudies, analices, repases, pregunta, critica, encuentra ejemplos para esclarecer, y cuando tengas la idea llévala a la práctica por medio de actos de AMOR, construyendo Shalom.

Habrá equilibrio, paz, dicha, armonía, sensación clara de unidad interna y de unidad con el cosmos. El orden se impone sobre el caos, el bienestar sobre los sentimientos oscuros.
Cuesta fluir, conectarse, confiar, ser quien realmente eres… pero es posible, con altibajos, con vaivenes, pero es posible.

Te invito a que seas poderoso, realmente poderoso, tanto como estás capacitado.

Resp 1098 – comunicación con d-os?

omarsanson nos consulta:

hace tiempo he estado leyendo sus post y me parece muy interesante, pero recordando mi niñez recuerdo que cuando rezaba lo hacia como si hablara con mi papá, pero ahora ciento que ya no lo puedo hacer, crecí en una casa donde hay libertad de pensamiento pero católica, ahora me pregunto si en realidad tenia comunicación con d-os, ya que desde muy niño no creía en jesus, yo lo veía como un hombre como todos y nunca como hijo de d-os, era comunicación con d-os o me equivoco?
Omar, Sansón, 21 años, estudiante, distrito federal, México.

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LAS SIETE CAUSAS PARA LA FELICIDAD

El pasado 4 de febrero en México tuvimos la oportunidad de repasar lo estudiado durante el curso 2012-2013 de Fulvida México.

«La anatomía de la felicidad» fue el tema de estudio para los alumnos de BALANCE II y el resumen de este se muestra aquí.

Lo subo en forma de imágenes para que puedan imprimir las tarjetas y las porten, lo cual ayuda a tener en el bolsillo lo que se debe estudiar. Solo de click en la misma para verla en tamaño amplificado.

Queremos agradecer a:

Rabino Aaron Ribco

Rabino Yonatán D. Galed de la institución «Jut Shel Jésed» – «Hilo de Bondad» de Breslev en Israel.

Rabino Obed Avrej

Moré Yehuda Ribco Presidente de Fulvida Internacional.

Dov Zales y Brit Olam, de Noahide World Centre

Por su valiosa participación y por haber logrado hacer este un evento lleno de bendición y sabiduría. Esperemos que los años siguientes el evento sea nuevamente una luz en este mundo para la difusión de los siete principios universales.

Les dejo aquí un resumen sobre lo visto en el Simposio 2013. Espero les sea útil.

1A CAUSA DE LA FELICIDAD 2a CAUSA PARA LA FELICIDAD 3A CAUSA PARA LA FELICIDAD 4a causa para la felicidad 5a CAUSA PARA LA FELICIDAD 6a causa divida felicidad 7A CAUSA DE LA FELICIDAD

Ser Simple es Santo

Desde que recuerdo he buscado y trabajado por ser eficiente, es decir, alcanzar los resultados óptimos con el uso de la menor cantidad de recursos, lo que posibilita la eficacia con efectividad.
(Sugerencia: aprende las diferencias de estos tres conceptos, te brindé links respectivos como un auxiliar).

Limpiar la casa, escribir, viajar, cocinar, en el trabajo, donde sea, haciendo lo que fuera, me parece una buena filosofía de vida el intentar simplificar racionalmente.
Así se ahorra energía, recursos materiales, esfuerzo, trabajo, y bastante tiempo.
Por si fuera poco, al buscar la eficiencia por medio de la simplificación racional, también se evitan numerosos inconvenientes, errores, confusiones, malos entendidos; tal como enseñó el sabio: «En las muchas palabras no falta error; pero el que refrena sus labios es prudente.» (Mishlei/Proverbios 10:19).

Seamos claros, lejos está la simplicidad racional de la ramplonería, ordinariez, torpeza, tosquedad o desprolijidad. Más bien, ¡todo lo contario! Emerge un panorama bello y ordenado, claro y pulcro cuando los recursos son empleados de manera eficiente y racional.
De la misma manera, no debe confundirse con avaricia, parquedad, tacañería, sino deseo de lograr lo mejor al menor costo posible, sin por ello reducir el placer o la solidaridad pertinentes.
Tampoco con la «ley del mínimo esfuerzo» de los holgazanes y perezosos, pero sí como estilo de vivir sin luchar innecesariamente, sin esforzarse por controlar aquello que no se puede controlar, esto es, admitir lo que está pasando, lo que sentimos, lo que el otro hace, siente, piensa o dice y no enfrascarse en guerras y esfuerzos que no producen beneficios ni bienestar. Fluir con la corriente, cuando no podemos ni es favorable nadar contra ella; generar los cambios, o subirse a ellos, en vez de pelear contra lo que nos excede. Dialogar y hasta discutir con tal de encontrar la porción de verdad junto al otro, y no debatir para vencer, o tener la razón, ofender, superar o decir la última palabra. Recuerda las palabras del sabio: «El corazón alegre trae sanidad, pero un espíritu abatido seca los huesos.» (Mishlei / Proverbios 17:22).

Con esta simpleza racional también uno se afirma en el presente, que es el único tiempo y espacio del cual disponemos, sin por ello rechazar el pasado o malgastar el futuro. Por el contrario, el pasado se toma en su real dimensión y peso, sin sentimientos de culpas, sin esclavizar, sin mortificar, sin asfixiar; en tanto que el futuro también es asumido en su medida correspondiente, como un fantasma que aún no existe, por tanto no angustia, no amedrenta, no quita energía a nuestro vivir actual.
Vivir el presente, el aquí y ahora, con plenitud, disfrutando de lo permitido en tanto nos apartamos de lo prohibido. Fluyendo en lugar de luchar, dialogando en vez de vociferar, disfrutando sin remordimientos, agradeciendo al Eterno por cada oportunidad de construir shalom y sentido. Si desaprovechamos este tiempo, atormentados por el pasado que ya fue o atribulados por un futuro que es una sombra, entonces sin dudas tampoco estamos viviendo ahora, no estamos rescatando nuestra vida del sufrimiento, por tanto sumamos mayores dificultades para el mañana.
Aprender a usar los recursos de los que disponemos, sacar el jugo al momento, simplificar en vez de llenarnos de tribulaciones, es un camino sagrado, de bendición, de felicidad, de trascendencia.
Esto va en línea similar a como enseña el Rav Kook el pasaje: «Yo he confiado en ti, oh Eterno. He dicho: ‘Tú eres mi Elokim; en tus manos están mis tiempos.’ Líbrame de la mano de mis enemigos y de mis perseguidores.» (Tehilim / Salmos 31:15-16).

Así trato de vivir, de acuerdo a esta filosofía que está fundamentada también en antiguos modelos y tradiciones del judaísmo, que bien pueden ser compartidos y asumidos por toda persona que desea racionalizar su existencia para obtener mejores resultados de sus esfuerzos.
Me parece bueno que lo sepas, que lo evalúes, y si notas que esta ética te puede servir, úsala y compártela.
Es una buena práctica del criterio: «Serás íntegro para con el Eterno tu Elokim.» (Devarim / Deuteronomio 18:13). No complicarse con lo que es inútil, no agregar mandamientos, no llenarse de supersticiones, no rogar a santos, no adorar hombres, no hundirse en fetichismos, apartar al EGO para servir con sencillez, con integridad, con pureza de corazón, mente, palabra y acción al Eterno. Tal forma de vivir llena de regocijo, de plenitud, de bienestar al punto que incluso en los momentos amargos se resplandece con calma y serenidad.
En palabras mesiánicas y proféticas: «… habrá allí una calzada a la cual se llamará Camino de Santidad. No pasará por ella ningún impuro. Será para los que siguen el camino, y los simples no se desviarán. Allí no habrá leones; no subirán por ella fieras voraces, ni se encontrarán allí. Pero caminarán por allí los redimidos. Los rescatados del Eterno volverán y entrarán en Tzión [Sion] con cánticos. Y sobre sus cabezas habrá alegría perpetua. Alcanzarán gozo y alegría, y huirán la tristeza y el gemido.» (Ieshaiá / Isaías 35:8-10).
Está el camino del EGO, con sus complejidades y absurdidad, con falso poder repleto de impotencia; y esta el camino del AMOR, con su simpleza, con su entereza, con su poder que puede parecer mansedumbre. Está en el camino de la simpleza el gozo, la alegría, el consuelo, la confianza, la paz.

Tal modo de vivir (multidimensionalmente), lleva a escoger las respuestas más simples, teniendo en cuenta que a igualdad de condiciones, la solución más simple suele ser la acertada, según expresa la máxima de Ockham.

En la vida cotidiana podemos llevarlo a cabo, practicar, entrenarnos, actuar con simplicidad racional, con eficiente eficacia. Haciendo uso de los recursos que contamos, conociendo tanto nuestro poder como nuestras limitaciones, para de ese modo desplegar el máximo potencial con el menor costo. Quizás, a pesar de nuestra tarea simple y bella, no alcancemos la meta, entonces tampoco es tiempo de complicarse con lamentos y penurias, sino que recordar que solo podemos controlar aquello que realmente está en nuestro dominio. El paso que damos, el trayecto que podemos recorrer, pero no si completamos el camino. Y así somos juzgados por el Juez, quien toma en cuenta el acto pero también la intención. Si hemos tenido la intención pero no el poder para completar el acto, o si la acción no alcanzó la meta por cuestiones que nos exceden, igualmente somos merecedores del beneplácito divino.
Así pues, con confianza analiza tu situación, evalúa tu poder y tu flaqueza, resta autoridad al EGO (que poca y nada autoridad tiene) y lleva a cabo tu parte, con entereza, con convicción, con dedicación, con sentido, trasciende a través de tu entrega de AMOR.
Como expresa el famoso rezo de los Altos Días: «lebojen lebabot, beiom din» – «que evalúa corazones, en el día del juicio«, y articuló con claridad el profeta: «Yo, el Eterno, escudriño el corazón y examino la conciencia, para dar a cada hombre según su camino y según el fruto de sus obras.» (Irmiá / Jeremías 17:10). Las obras son lo que cuentan, pero también el camino.
Tenlo presente, para que el EGO no te invente excusas tales como: «si no vas a poder, ni siquiera lo intentes», o, «si lo haces, fracasarás, mejor quédate en donde estás»… así trabaja el EGO, en su manipulación que te bloquea para la acción y ni siquiera permite el esbozo de la intención.
Ponte a hacer tu parte, con razón, con sentimiento medido, con intención trascendente, movido por AMOR, entonces tus obras serán de bendición, sean exteriormente exitosas o no.
Recuerda: Dijo Rabi Ashi: «Quien pensó en cumplir con una Mitzvá y tuvo un percance por lo cual no pudo cumplirla, se considera como si la hubiera hecho.» (TB Berajot 6a).
Pero cuidado, el fin no justifica los medios, y si para llegar a una supuesta buena causa se daña al prójimo, entonces de poco y nada valen las intenciones, allí cuenta exclusivamente el acto (ver Rabbí Jaim Shmuelevitz,de la Ieshivá de Mir, en «Sijos Mussar», maamar 24).

Aprende la lección de la simpleza racional.
No te justifiques con los «no puedo», «no pude», «es más fuerte que yo», «qué dirán», «es imposible», «no sé», «nadie lo hace»,» todos lo hacen», «nunca lo hice», «así soy yo», «no tengo opción» y todo el resto de invenciones que provienen del EGO.
Conocer tu capacidad, poder y debilidad, admitir tus límites pero también el poder de superar los que pueden ser superados, darse cuenta de las trampas del EGO, todo ello te sirve para aflojar las resistencias, quebrar las cadenas y ponerte en la senda del vencedor.
David, el joven que luchó con mil problemas, entre ellos el gigante Goliat, con total convicción afirmó e hizo: «Entonces David dijo al filisteo: -Tú vienes contra mí con espada, lanza y jabalina. Pero yo voy contra ti en el nombre del Eterno de los Ejércitos, Elokim de los escuadrones de Israel, a quien tú has desafiado. El Eterno te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré. Te cortaré la cabeza y daré hoy los cadáveres del ejército filisteo a las aves del cielo y a los animales del campo. ¡Y toda la tierra sabrá que hay Elokim en Israel! También todos estos congregados sabrán que el Eterno no libra con espada ni con lanza. ¡Del Eterno es la batalla! ¡Y él os entregará en nuestra mano! Aconteció que cuando el filisteo se levantó y se fue acercando al encuentro de David, éste se dio prisa y corrió al combate contra el filisteo.» (1 Shemuel / I Samuel 17:45-48).
Un muchacho lleno de simple AMOR, convencido en su creencia, firme en su pensamiento, fuerte en su sentimiento que no esperaba el milagro sentado y llorando en la oscuridad, sino que salió al encuentro del mal para vencerlo en su propio terreno. Con armas simples, materiales, cotidianas, y con las armas de la integridad, de la pureza, del espíritu iluminando las acciones.
El milagro de David venciendo a Goliat es como el resto de los milagros, dependen del Uno pero también de uno.

Dejemos de gastar energía en parecer, en aparentar, en llevar máscaras, en actuar el papel de lo que deberíamos ser, en esconder al Yo Auténtico detrás de decenas de Yoes Vividos.
Encontremos aquellas facetas del Yo Vivido que expresan al Yo Auténtico, entremos en estado de armonía con nosotros mismos, lo que nos dará armonía con el prójimo, paz, seguridad, felicidad.
No busquemos el aplauso afuera, el elogio, la aceptación, la mueca divertida, que nos afianza en nuestra miseria, sino que encontremos el camino para desarrollar una vida de plenitud y autenticidad.
Seamos simples, seamos nosotros en nuestra multidimensionalidad.

No luches, admite. No te enojes, fluye. No niegues tus emociones, comprende. No te ates al rencor, perdona y deja actuar a la justicia. No te compliques, simplifica. No te apresures a juzgar, respira con calma, canaliza tu energía hacia la construcción de shalom. Y cuando debas enfrentar al enemigo en los hechos, que tus acciones sean fruto de tu simpleza racional, de tu poder intenso que emana de tu esencia divina. Tal como David lanzó una piedra, solo una, y con ella hizo caer al gigante al cual ningún héroe y guerrero antes había siquiera rozado con sus armas espantosas. Una piedra que cargaba con un poder infinito, contra las astucias y falso poder del EGO.

No es fácil, pero, ¿quién te dijo que vivir lo es?
Recuerda que tu espíritu quiere hacer lo correcto, quiere siempre lo que es bueno y justo. Siempre. No hay ocasión en que tu espíritu vaya en contra del Plan Divino.
Es nuestro EGO, con las máscaras del Yo Vivido, con las cáscaras que vamos asumiendo, el que inventa excusas y hace volteretas para llamar santo a lo ajeno, y puro a lo desconectado de la vida.
Si sigues la senda del AMOR, la espiritual, estarás en el cauce que fluye, sin asperezas, sin dolor, sin sufrimiento, en la buena onda de la dicha celestial.

No hay que esforzarse para ser, ya eres.
Eres hijo de Dios, no por lo que crees, ni por lo que rezas, ni por lo que adoras, ni por tu raza o etnia, eres hijo de Dios por ser humano.
Tú eres una esencia espiritual y otras dimensiones temporales.
Permite la sagrada conexión, de tus dimensiones entre sí, de tu esencia con tu existencia, de tú con el prójimo, de todo con el Eterno.
No te limites, no restes de tu poder, no te rebajes, no vaciles más. No precisas abrumarte con supersticiones, ni seguir líderes, ni repetir lemas, ni formar parte de sectas, ni llenarte de severidad que no tiene sentido, ni negarte a lo que Dios te permite, ni seguir atrapado por el EGO con sus fantasías y manipulaciones.
Mejor haz lo que Dios quiere de ti.
Vive a pleno, disfruta de lo permitido, goza del aquí y ahora incluso aunque no sea de dicha material.
Respira, siente tu respirar, fluye con la vida.
Eres poderoso, eres luminoso, estás conectado a lo más santo.
Deja de penar en sombras, vive.
«Sólo vosotros, que permanecéis adheridos al Eterno vuestro Elokim, todo de vosotros está vivo hoy.» (Devarim / Deuteronomio 4:4)
Nos adherimos a Él no meramente por cuestiones externas, por formalismos, por apariencias, sino por encontrar la conexión, el lazo de santidad, a través de nuestras acciones meritorias.
Todo lo tuyo está vivo hoy, vívelo.

El consejo diario 390

Siga investigando, siga estudiando,  siga preguntando, siga dudando, siga admitiendo, siga avanzando, siga repasando, siga buscando al máximo lo que puede alcanzar de verdad.
Que no le impidan encontrarse con usted mismo, con su Yo Esencial; porque, a fuerza o engaño, le obligan a usar y aceptar las caretas que le imponen (y se pone) a las que se entrenó a llamar “yo”.
Estudie, busque, siga, adelante, rompiendo ilusiones, demoliendo expectativas, rechazando la ceguera de la fe, destruyendo el imperio de la ignorancia, que es otra forma de impotencia.
Recuerde: espiritualidad es vida, religión es muerte.

La Estrella Roja

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Recientemente releía un artículo de Fulvida que hace énfasis en aceptar y respetar la identidad propia de cada quien; saber quien se es, de donde se viene y en donde se está; así como también respetar la identidad y tradición de los amigos de otros países – http://fulvida.com/id-noajica/identidad/t-que-dices-que-eres-judo -.

En los primeros párrafos, el querido maestro hace una relación directa entre “anhelar paz” con “amar la verdad”; esto en función de aquellas personas que reconocen quienes son culturalmente y escogen vivir tal y como son, sin copias de identidades ajenas a las suyas.

Yo como costarricense, tengo dichos, costumbres y tradiciones propias de mi querido país; sin embargo nuestras tradiciones no son milenarias como la de otras culturas, sino que se han venido construyendo en pocas decenas de años. Y, en honor a la verdad,  nuestra idiosincrasia fue formada por los aportes de otras culturas, tal es el caso de algunas comidas típicas, algunos dichos populares, algunos instrumentos musicales, algunos trajes típicos, etc, que fuimos asumiendo como propios, pero que en la realidad son parte de algunos países vecinos; es decir, somos mestizos por cualquier lado que se nos quiera ver.

Sin embargo, hay algo que me ha llamado la atención, y es que en materia de moral, nuestros primeros padres eran muy apáticos a los deberes religiosos o morales;  existía en los primeros pobladores mucha pobreza, que sumada al libertinaje, en una ocasión un obispo, el señor Garret y Arloví nos excomulgó en el año 1711. Esos hechos, y otros más, me hacen suponer que la influencia cristiana en este país no tiene más de unos 200 años; sea, que casi por puro interés en lo que ofrecía un Estado recién formado en 1821 y que daba cierto poder político a la iglesia católica, los habitantes paulatinamente se hacían cristianos.

Sobre esto, en algún momento tuve la oportunidad de compartirles un pequeño artículo que había escrito en respuesta de algunas interpretaciones de nuestra historia que hacen los “judíos” mesiánicos ticos, y espero que mis paisanos me ayuden a enriquecerlo:

http://fulvida.com/varios/de-usuarios/el-error-de-la-especulacion-mesianica-cristiana

He de contarles que en la provincia donde vivo, pululan los cristianos mesiánicos. Y esto es porque es aquí, en donde tiene residencia uno de sus principales líderes y propulsores de dicha religión; y fue desde aquí desde donde comenzó a diseminarse sus ideas a otros lugares del país.

El otro día, me encontré un artículo en la red, escrito por uno de esos líderes seguidores del cristoloco crucificado, en donde aparte de negar nuestro mestizaje, saca conclusiones tan disparatadas que no sabe uno si ponerse a llorar o reír, ya que no se sabe si lo escribe en serio o en broma.

Entre sus múltiples disparates, me llamó la atención que este seguidor de Cristoloco mencionara  una de las primeras banderas de Costa Rica, la de 1823, para justificar su insostenible tesis. Describe:

En el centro de San José (Capital de Costa Rica)… existe un monumento en su honor (Referencia al primer Jefe de Estado): Sobre la superficie anterior del pedestal de la estatua se halla un bajorrelieve de la primera bandera de Costa Rica, en la que lucía un Maguen David rojo sobre un fondo blanco, elocuente testimonio de que nuestra Nación fue la primera en el mundo que enarboló dicho Escudo en su Bandera, aún antes de que lo hiciera el Estado de Israel… Los grandes patriarcas de Costa Rica … tenían conciencia de su judaísmo y, por supuesto, del significado del Maguen David en la bandera de Costa Rica…” (lo encerrado en paréntesis en propio).

Lo que esta describiendo (¿equivocadamente?) este señor, NO es la primera bandera de Costa Rica, sino que es la TERCERA, que estuvo vigente del 6 de junio de 1823 hasta el 4 de Marzo de 1824; es decir, aproximadamente 2 años después de nuestra independencia.

La información que existe de esa bandera, información que es púbica y que puede conseguirse en algunas fuentes de la red, a mí en lo personal no me hace suponer ninguna “conciencia” del judaísmo del primer Jefe de Estado. A modo de ejemplo, en las Actas de la Asamblea Provincial y de la Junta Gubernativa de 1823-1824 que pueden conseguirse en Wikipedia,  y con respecto a la susodicha bandera y a la moneda temporal para esa fecha, se puede leer:

 «Sesión 13º- Sala de Sesiones – San José, mayo 10 de 1823. Presidida por el señor Presidente Peralta y señores supra indicados.

1º.- Habiéndose indicados varios puntos relativos al régimen político de administración de la Provincia se acordó, 1º. Que durante su actitud actual adopta provisionalmente por pabellón una bandera blanca con una estrella roja en el centro.

2º.- Que el gobierno adopte las medidas conducentes y prontas para el establecimiento de un cuño provisional de oro y plata, moneda redonda con la mayor exactitud y perfección que sea asequible igualando su peso y ley a la de Guatemala y México con el tipo o inscripción siguiente.

Por un lado, una estrella en el centro, orlada su circunferencia con esta inscripción circular Costa Rica Libre, la era vulgar y época de la libertad contada desde el año de 21; por el reverso una palma en el centro cruzada por una espada y un fusil con bayoneta y un cañón por debajo y en la orla la inscripción de su valor en pesos o reales que señalará el Gobierno.

3º.- Que el Gobierno adopte las medidas conducentes para la expulsión de personas que por su desafecto al sistema actual de Gobierno sean perjudiciales a la seguridad de las Provincias:- sobre definición de embargos por la renta de tabaco: sobre administración y distribución de la masa decimal conforme a las leyes vigentes.

4º.- Que se inserte en el Estatuto un artículo especial por el que queda el Gobierno autorizado para obrar conforme a los artículos 8, 9, 11, 12 y 14 de la acta de dos de septiembre del año próximo pasado de 22, y con respecto al estado actual y de absoluta libertad de la Provincia.

Se levantaron las sesiones. – Peralta, Pte. –Vidal, Srio.

(Actas de la Asamblea Provincial y de la Junta Gubernativa, Tomo III, 1823-1824)” El resaltado es propio.

¿Donde se menciona un Maguen David? ¿Será posible que por una sola referencia a una estrella roja en el centro de una bandera y de una moneda se pueda llegar a suponer conciencia judaica de los patriarcas ticos con el fin de autodenominarse ahora judíos? Es claro que escogieron una estrella roja en una bandera blanca para nuestra tercera bandera, lo que no es claro es el porqué lo hicieron. La sola bandera blanca con su estrella es motivo de suficiente suposición especulativa del mentiroso mesiánico; pero el que lee los 4 artículos que conforman el Acta también puede fácilmente concluir que escogieron esa bandera por que les dio la gana y punto, ya que no hacen ninguna motivación del porque la escogieron. El acta lleva este orden: en el punto primero la escogencia de una bandera, en el punto dos la necesidad de acuñar moneda y su forma, en el tercero sobra la expulsión de personas que no estén de acuerdo con el Gobierno en temas de embargo, en el punto cuatro sobre la absoluta libertad del país recién naciente. Noten que luego de escoger la bandera y su forma, le restan importancia a dicho punto para tratar otros. No motivan ni justifican la forma de la bandera, la que nos representaría en ese momento ante el resto de países recién independizados. No justifican lo que rebuscadamente si asegura el especulador líder de la secta mesiánica.

Para concluir, por más que rebusquen en la historia patria los mentirosos mesiánicos, por más que intenten torcer los hechos históricos para sostener sus fabulas, la verdad es evidente, salta a la luz para el que la anhele. Como dice el artículo transcrito: “la verdad es simple, es clara, es pura, es pacífica”

SIMPOSIO MÉXICO 2013

Hola a todos los amigos mexicanos y del mundo entero.

Con gusto les confirmamos la celebración del próximo Simposio en México el día 4 de febrero de 2013 en el Hotel Hampton Inn en calle 5 de febrero No 24, México Col. Centro Histórico.

El evento será de 9am a 7pm con un receso de una hora y media.

Con las participaciones de:

1. Rab Aaron Ribco

2. Moré Yehuda Ribco

3. Rab Oved Abrej

4. Rab Yonatán D. Galed

5.  Tres Tutores de Fulvida México.

 

Informes e Inscripciones en fulvidamexico@hotmail.com

Evento formal: Traje (hombres) Formal (mujeres)

Costo: $210 Pesos Mx  pagaderos el día del evento o previo a la cuenta banco azteca 225 613 506 069 92

Un abrazo y que sepamos construir Shalom.

SIMPOSIUM 2013 FULVIDA

 

Santidad noájida

Noájida no es ser miembro de una secta, ni de una religión, ni de una elite, ni de una clase social, ni de un grupo cerrado, ni de una moda, ni de una novedad, ni de un movimiento social, ni de… pon el título que desees o te parezca. 
Realmente, noájida es ser parte del 99.8% de la humanidad (el 0.2% restante son los judíos).
(Estimamos la población mundial actual en unos 7.000.000.000 –siete mil millones- de individuos, de los cuales solamente unos 15.000.000 –quince millones- son judíos).

Este es un hecho cierto, que no depende de creencias u opiniones.
Existen los noájidas y existen los judíos.
¿Qué los diferencia? ¿Acaso la raza, la creencia, la religión, alguna cuestión metafísica, qué?
En esencia, el pacto que los vincula con Dios.
Los noájidas están comprometidos al pacto de los Siete Mandamientos Universales, en tanto que el pueblo judío al pacto de los 613 mandamientos de la Torá.
Esa es la gran divergencia entre unos y otros.
Los noájidas, es decir la casi totalidad de la población humana, tiene asegurada la santidad, la “salvación”, la vida eterna, la bendición terrenal, simplemente por vivir éticamente, a través del cumplimiento de los siete mandamientos que les corresponde a cada uno de ellos: no adorar entidades que no son Dios, no maldecir a Dios, no asesinar al inocente, no tener relaciones sexuales prohibidas, no robar, no comer parte de un animal con vida y establecer cortes de justicia.
Por su parte, los judíos como nación tienen un yugo mucho más pesado y complejo, pues no se limita el requerimiento divino a estos preceptos básicos y esenciales, sino que el compromiso incluye numerosas acciones, infinidad de prohibiciones, muchas y difíciles pautas, que les han sido impuestas por Dios y libremente aceptadas por la nación judía hace ya más de 3300 años.

El pacto noájida es mucho más antiguo, mucho más abarcativo, en apariencia sencillo y básico, pero tan sagrado y valioso como el que Dios selló en su momento con el pueblo judío para siempre.
Así pues, el noájida que desea vivir la plenitud espiritual cuenta con su propia herencia, que son los Siete Mandamientos; tal como el judío tiene sus propios mandamientos que cumplir. Ambos sagrados, ambos de origen celestial, ambos que conducen a la vida de santidad, ambos que adquieren porción placentera en la vida venidera.

El noájida no es un hermano menor, no es el hijo pobre, no es el dejado de lado, no es el fracasado, por el contrario, SÍ ES el socio valioso de Dios en la tarea de construir shalom en el mundo, tal como lo son los judíos, pero al ejercer su propio rol, y no por querer usurpar el rol que corresponde a los judíos, o por tomar para sí acciones y/o prohibiciones que Dios dictó como mandamientos a los judíos y no a los gentiles.

Claro que el noájida que por algún motivo legalmente válido desea tomar para sí la pesada responsabilidad y compromiso de los judíos, tiene ante sí el camino de la conversión legal y formal al judaísmo. Por ser un paso de enorme significación, que es irreversible e implica un cambio profundo y rotundo en el estilo de vida, es que la conversión se realiza como paso final de un largo proceso, durante el cual el proponente estudia, experimenta, conoce, respeta, cambia, incorpora, decide y luego se presenta ante un tribunal apropiado que le tomará las pruebas necesarias y tras los procedimientos rituales la persona se convierte al judaísmo.
Por ser el pacto judío mucho más restrictivo y riguroso, la conversión solamente se da en una vía, de los menos mandamientos a los más, pero no a la inversa. Es decir, la persona que nace judía o se ha convertido legalmente, NO tiene ante sí la posibilidad legal y/o espiritual para ser noájida, porque no se admite la reducción de compromiso. Pero el gentil que desea aumentar su número de mandamientos, para pasar de los siete fundamentales a las decenas o centenas que deberá cumplir como judío, entonces eso sí es posible hacerlo.

Existe una gama de consciencia y acción entre los noájidas, porque no todos conocen su identidad espiritual, ni saben de los mandamientos noájicos, ni los cumplen. Básicamente tenemos a la gran mayoría de los noájidas, que no tienen consciencia de su identidad, ni conocen el pacto eterno que los vincula con el Eterno, ni cumplen con sus siete mandamientos con la consciencia de estar ejerciendo su rol en el mundo. Por supuesto que la gran mayoría de las personas, aunque ignorantes de los Siete, igualmente se comportan con la ética humana esencial, esa que radica en su Yo Esencial y no en los mandatos sociales. Por ello la enorme población que no asesina, no roba, respeta los lazos conyugales, respeta el dolor de los animales, llevan una vida acorde a las leyes, y sí, se tiende a no maldecir a las deidades. Pero la casi totalidad desconocen al Eterno y por ello cuando buscan en su interior y se dan cuenta de que precisan vincularse con Dios, se confunden y adoran dioses que no son Él, o se creen ateos, porque rechazan a esos falsos dioses que evidentemente no son divinidades existentes, pero incluyen allí al Eterno por error e ignorancia.
Luego están los noájidas que son conscientes de la identidad espiritual noájica, saben de los mandamientos, han tomado consciencia y hasta quizás vivieron un rato con el compromiso de armonizar su vida con la senda sagrada del noájida. Pero la consciencia espiritual volvió a embotarse, se perdió el brillo, ya se está otra vez confundido y perplejo. Quizás se regresó a la vida anterior, con idolatría, con muchas máscaras que se hacen pasar por el Yo pero son solo antifaces, o tal vez en la confusión se inmergen en un caos de noajudaísmo, una mezcolanza de algo parecido a noajismo con algo parecido a judaísmo. Error, oscuridad, mixturas enfermizas, perdida de la luz, abandono de la senda sagrada por ir detrás de cosas que llaman la atención, o parecen satisfacer el espíritu, pero son solo sensaciones del EGO. Entre estas personas suelen estar los que fantasean con la conversión al judaísmo, pero no por los motivos válidos ni por un compromiso real con la espiritualidad al estilo judío, sino más bien como efecto de su enfermedad emocional, sus problemáticas personales, que en el fondo suponen se solucionarán con una fraudulenta conversión al judaísmo. Es gente dolida, sufrida, no mala de por sí, aunque nos hemos topado personalmente con un puñado que son capaces de realizar cosas macabras, terribles, con tal de satisfacer su EGO pero escudarse en supuesta espiritualidad noájica o mística extraña. Pobre gente, esperemos que mejoren pronto y que no sigan engañando a los incautos que caen detrás de sus patrañas.
Luego están los noájidas conscientes pero que no cumplen cabalmente con sus Siete. Los motivos pueden ser variados para tal ”ortodoxia” en la creencia pero “agnosticismo” en la acción, el hecho es que existen noájidas conscientes pero no activos. Por supuesto que por lo general siguen siendo personas éticas, no incurren en crímenes ni en acciones decididamente antagónicas al noajismo, pero se abstienen de actuar como noájidas y por serlo.
Luego están los noájidas conscientes y activos, saben y cumplen. Son personas que en su vida cotidiana procuran construir Shalom, desde las cosas pequeñas hasta las grandes, desde lo diario a lo excepcional. Lo hacen porque saben que es su misión en la vida, tal como el Eterno les ha decretado y ellos aceptan con amor y respeto.

Como se aprecia, a diferencia de sectas y religiones, en el noajismo no hay necesidad de no pregonar guerras "santas", ni inquisiciones, ni castigos a los “herejes”, ni perseguir a los que piensan o hacen diferente, ni estigmatizar a los “ateos” o los que andan por su propia órbita espiritual, ni hacer pesar sentimientos de culpa para manipular, ni hacer campañas antagónicas en contra de otros noájidas o maestros judíos que acompañan al noajismo, ni… En resumen, el que anda por la senda de la Luz del noajismo no precisa manejarse con las herramientas del EGO, sino que trata en la medida de lo posible que sus palabras, acciones, presentaciones, todo lo que hacen sea desde la fuente sagrada del AMOR. Por ello en vez de guerras, antagonismos, declaraciones pomposas, rituales, ofensas, mentiras, gritos, violencia, en lugar de lo que produce el EGO se actúa y enseña acerca del perdón, comprensión, arrepentimiento, compromiso, responsabilidad, construcción de shalom, aceptación del diferente, paciencia con los ritmos y procesos del prójimo, ayuda al necesitado, aprender a conocerse y mejorarse, entre otras nociones que surgen desde la fuente del AMOR.
¡Cuán diferente es el comprometido con el noajismo (y judaísmo) verdadero a los miembros de las religiones!

Vale aquí un pequeño consejo, mucho cuidado con esos que se hacen llamar noájidas, o “maestros judíos de noajismo”, pero que son religiosos, viciosos por poder, adoctrinados por el EGO, encandilados por su vanidad, ambiciosos de llenarse con lo que te pertenece y no les corresponde. Cuidado, mucho cuidado con ellos. Pueden estar al lado tuyo, ser “amigos” en el Facebook, enviarte mensajitos muy simpáticos y en apariencia saludables a tu email, suelen llenarse la boca de frases pomposas de rabinos y citar libros judaicos, se regodean con sus conocimientos de tales y cuales, censuran a más no poder, esgrimen sonrisas y falsos afectos. Cuidado con ellos.

Mientras construimos shalom, cada uno como puede, recordemos que debemos apartarnos del mal para hacer el bien. 
Mucho más necesario es apartarnos del mal que se disfraza como bien.

También es bueno tomar tiempo para aprender, para darse cuenta de tantas cosas que rompen con los esquemas que uno ha ido aprendiendo y mamando desde la cuna.
Casi todo es nuevo, incluso aquello que parece similar a lo conocido suele ser bastante diferente y novedoso.
Entonces, ir con calma, no creerse sabio por haber leído un par de textos o haber aprendido uno o dos conceptos. Con calma pero sin pausa. Con paciencia, con respeto, con amor, con tolerancia, porque el camino del aprender realmente requiere de un poderoso e imprescindible des-aprender. Primero, primerísimo, hay que desaprender mucho de la ideología y practica previas, luego aprender mucho, hacer mucho, vivir mucho de noajismo. No se nace maestro de noajismo, aunque uno haya sido maestro en la iglesia o la universidad o la ieshivá. No se nace maestro de noajismo por ser inteligente o carismático, ni por haber sido líder religioso o tener conocimiento de hebreo o lecturas filosóficas. Por algo el Señor de señores hizo del noajismo una realidad completa y compleja pero en sencillos Siete Mandamientos, fundamentales, necesarios, básicos. Por algo Él decretó que no tuvieran una pesada y compleja Torá al estilo de los judíos, ni les puso la carga de innumerables preceptos y reglamentos derivados. Por algo el Creador no ordenó y determinó que hubieran ministros espirituales noájicos, ni rabinos que los comandaran, sino que en la vida cotidiana cada uno hiciera su parte para llevar a cabo el Plan divino. Sin amos, sin clérigos, sin opresivos rituales, sin ceremonias, sin religiosidad, sin depender de lo que decida un rabino o un concilio de rabinos, porque el noajismo se autosustenta sin depende de autoridad judías.
Claro, actualmente pareciera necesario el báculo del rabino o del maestro judío entendido, pareciera imposible el noajismo sin un libro de reglamentos procesado por alguna autoridad judía, pero es solamente por la situación del momento, por los siglos de oscuridad y apartamiento. No es parte del Plan divino, según podemos constatar, que el noájida sea una sucursal del judío, ni el noajismo una factoría judía. Por el momento, dado el fracaso de los antepasados de los noájidas actuales, es bueno tener la orientación adecuada desde el sabio maestro judío conocedor de la temática, pero es como el faro que alumbra al barco en mitad de la noche atormentada por la tempestad. Cuando el mar se calma y la claridad se establece, cuando los del barco tienen control y conocimiento, ya no dependen del faro, sino de sus propios medios para navegar con seguridad y éxito. Recuérdalo cuando pretendan encorsetarte en instituciones judías o que dependen de personas judías que no entienden o no saben del la independencia que corresponde a los noájidas y el noajismo. Independencia en la unidad, en la armonía, en el ejercicio conjunto del AMOR para establecer un mundo de shalom bajo el reino del Eterno.

Noajismo, al igual que el judaísmo, es conexión.
Con uno mismo, con el prójimo, con la sociedad, con el mundo, con Dios.
Si lo que vives de “noajismo” no te sirve para estar conectado, realmente, en paz, en armonía aún en la discusión, entonces no es noajismo.
Conectar… recuerda… conectar…

Si estás recién conociendo esto probablemente te sientas impulsado a querer reuniones, congregaciones, la vida social al estilo que conoces de tus iglesias. No tiene nada de malo reunirse para rezar, estudiar, compartir, colaborar, etc. Pero no hacerlo desde la religión, sino desde lo que corresponde al noájida y el noajismo. Recuerda que en su esencia noajismo no precisa de organización estilo iglesia o secta, noajismo es vida, constante vida, no en “reuniones” religiosas, sino en cada instante de nuestra vida. Tampoco tiene nada de malo congregarse, pero si de eso se hace todo el noajismo, entonces estamos en otro tipo de religión, en otro error, y no en el noajismo puro y sincero.

Te agradezco que hayas leído hasta aquí y quedo de ti para lo que pueda ayudarte.
Hasta luego, y que sepamos construir shalom a cada instante, y si no pudimos hace un rato, bueno… quizás ahora podamos…