periodista nos consulta:
¿Existe la reencarnacion, de personas que no \»cumplieron en este mundo\» su mision\».Esto no lo extraje de un portal hinduista sino de uno judio ***.com
Nerio Quiñones,58,periodista/traductor,Parana,Argentina
periodista nos consulta:
¿Existe la reencarnacion, de personas que no \»cumplieron en este mundo\» su mision\».Esto no lo extraje de un portal hinduista sino de uno judio ***.com
Nerio Quiñones,58,periodista/traductor,Parana,Argentina
En numerosas ocasiones hemos demostrado con citas de leyes perpetuas y de decretos de rabinos con autoridad que el estudio de Torá está vedado para el gentil, a no ser el estudio de aquellas porciones que le enseñan acerca de los Siete Mandamientos, y/o de aquellas porciones que le refuerzan en su unión con Dios.
Por supuesto que incluso el estudio de las secciones apropiadas debe hacerse bajo guianza estricta de maestro judío idóneo, que conozca tanto el texto santo, como las leyes al respecto del estudio así como el marco legal acorde para el gentil, de modo tal de preservar a la persona del error, ahuyentar el mal y proveer de buen pan espiritual a aquel que está buscando llenar su alma de contenido espiritual y no solamente de brindar manjares de vanidad o de cosas santas pero que no le brindan shalom sino dolor.
Con los asuntos del Eterno no se juega, pero igualmente, el EGO, o la ignorancia, o el afán, o la envidia, o el rechazo de la correccíón impulsan a la persona a negar la verdad, a repudiar las leyes santas, a inventar excusas para hacer lo prohibido pero hacerlo parecer como algo luminoso.
Esta actitud terca, de real rebelión en contra de lo dispuesto por Dios, recuerda el dicho del inspirado sabio:
«Aun cuando el insensato ande en el camino, le falta entendimiento, y a todos hace saber que es insensato.»
(Kohelet / Predicador 10:3)
Veamos bien el verso.
El insensato no anda por valle de muerte, no está transitando el inmundo camino de la idolatría, no ensalza a dioses/salvadores falsos; no, no hace eso el terco del verso; claramente dice que el insensato del verso anda por «el camino».
Se justifica diciendo que quiere estudiar Torá para cumplir lo que le corresponde, que no quiere hacer cosas erróneas, que detesta la perversión del camino del mal.
Así se justifica, con la máscara de las buenas intenciones.
Pero, las buenas intenciones sin el conocimiento, sin el equilibrio, sin la lealtad, suele terminar en tremendos fracasos, en caídas al abismo.
Y es exactamente lo que termina por decir el verso, aunque el necio pretenda andar por «el camino», no deja de hacer las cosas que hace habitualmente: acciones y palabras de insensato.
Para todo aquel que tiene ojos comprensivos es evidente que el insensato es eso… un insensato.
Alguien que pudiendo haber sido humilde, leal, fiel, de bendición, prefiere ser terco, cerrar sus ojos y oídos, buscarse algún pretextito para hacer lo que quiere y no lo que le corresponde hacer.
Entonces, al negarse a vivir como Dios le ha decretado, al usurpar lo que no le pertenece, al pretender andar de una manera que no es la propia, no alcanza la trascendencia, no se compra el paraíso, no adquiere cordura, no avanza en su misión sagrada, sino que se sumerge más profundo en su insensatez.
Dará mil excusas, criticará hasta un punto de más o de menos de aquel que le quiere corregir, inventará filosos argumentos para escudarse, hallará bajo alguna piedra alguna voz que apoye sus desatinos, pero no dejará de ser un insensato que anda como insensato por el camino.
Todos los entendidos lo verán y se apartarán de sus acciones, de sus prédicas, pues reconocen que no tienen verdadera base, sino solamente es EGO astutamente disfrazado de piedad, de anhelo de Dios, pero no deja de ser EGO.
El inspirado autor anuncia:
«Anda según los caminos de tu corazón y según la vista de tus ojos, pero ten presente que por todas estas cosas Elokim te traerá a juicio.»
(Kohelet / Predicador 11:9)
Sí, así es.
Van con alegría por donde quieren, hacia donde sus emociones los llevan.
Ven algo que anhelan, que codician, que pueden alcanzar -sin importar cómo- y hacia allí se dirigen.
Aunque en la senda luzcan carteles de «Pare», «No estacione», «Calle cerrada», etc., ellos rechazan verlos o dan muchos argumentos astutamente vacíos para dar a entender que no son para ellos, sino para otros, para gente de por ahí, pero no para ellos.
Sus ojos codician, sus corazones arden de pasión insana y con la excusa de querer beber de la Palabra de Dios, de llenar sus almas de «la Palabra», se precipitan hacia lo que no les pertence, pisotean la herencia de otros, usurpan lugares, llegan hasta la traición en caso de ser necesario, pues no se gobiernan en realidad, sino que son títeres de sus EGOS.
Insertan la palabra «dios» cada dos letras, citan frases supuestamente talmúdicas, pronuncian con reverencia nombres de rabinos, saben de memoria textos supuestamente cabalísticos, son máquinas de buscar y repetir cuestiones de judaísmo… pero siguen sin aceptar la verdad impuesta por Dios: el judaísmo es para judíos, en tanto que el noajismo es para noájidas.
En la base del judaísmo está la Torá, en la base del noajismo está el pacto de Dios con la humanidad representado por el arcoiris.
Son sus ojos avaros y sus corazones celosos los que les vuelven necios, desleales, eternos criticones de de otros pero faltos de un mínimo de sincera autocrítica.
Repudian a Dios aunque dicen «dios» cada dos letras.
Viven una vida de falsedad pues no admiten la verdad.
Hasta son capaces de pretender que sus antepasados eran parte del Tanaj o del pacto de Israel, con tal de seguir aferrados a su necedad de envidiar a Israel por la Torá que le pertenece al pueblo elegido y no a ellos.
Y aunque quizás lo sepan, no admiten que Dios finalmente los traerá a juicio por sus acciones, por sus disfraces y peor aún… por llevar a los ingenuos por caminos de falsedad que son bellamente adornados como santidad.
En resumen, querido hermano noájida, si tienes anhelo de Torá, cumple con tu parte, cumple con los Siete Mandamientos, pues ellos son TU Torá.
Si quieres contar historias bíblicas, lee las que corresponden a noájidas, pero no lo que corresponde a la identidad que te es ajena.
Estudia lo que te hará crecer de acuerdo a tu espiritualidad, y no lo que envidias de los judíos.
Por último, si no te gustas la reprensión de este texto, me da mucha pena, porque seguirás en terquedad actuando como insensato en lugar de dejar que la Luz del Eterno penetre en tu alma y de bendición a tu vida.
Dijo el profeta:
«La castigaré por los días dedicados a los Baales, a los cuales ha quemado incienso y para los cuales se ha adornado con sus aretes y sus joyas. Ella se ha ido tras sus amantes y se ha olvidado de Mí’, dice el Eterno.»
(Hoshea / Oseas 2:15)
Pronto te olvidaste de quien te rescató de la putrefacción del alma, rápidamente te fuiste con tus infidelidades detrás de tus lisonjeros amantes. Ofrendaste a aquellos que te ofrecieron falsas promesas de bendición, huiste con los que te susurraron lo que querías oír.
Pero del Eterno no te puedes escapar, por más disfraces y palabras rebuscadas que presentes.
Cuando llegue el momento del juicio, se te juzgará por tu fidelidad hacia tu identidad espiritual y no por cuanto has usurpado de la herencia que le corresponde a otro.
Llena tu alma del buen pan espiritual de FULVIDA, de noajismo sincero y estricto, entonces reencontrarás a tu hogar, a los tuyos, a tu estabilidad, a tu equilibrio y eternidad.
Sigue andando por el camino que no es tuyo y tu torpeza seguirá siendo tu rostro a ojos del entendido.
9. A pesar de que los Hijos de Noaj tienen como obligación sólo el cumplimiento de las Siete Leyes Universales, les está permitido observar cualquiera de los 613 Mandamientos de la Torá con el propósito de recibir recompensa divina. Las excepciones a esto son:
a. Observar el Shabat a la manera de los Judíos (descansando de las acciones que fueron necesarias para la construcción del Tabernáculo durante el Exodo de Egipto).
b. Observar las festividades Judías a la manera de los Judíos (descansando de forma similar al Shabat).
c. Estudiar aquellas partes de la Torá que no se aplican al servicio Noájida para con Dios.
d. Escribir un rollo de Torá (los Cinco Libros de Moisés) o recibir una aliyá a la Torá (i.e., leer una porción de la Torá en una reunión pública).
e. Hacer, escribir o vestir tefilín, las filacterías que se usan durante el rezo (judío) y que contienen porciones de la Torá.
f. Escribir una mezuzá, un pergamino particular que contiene porciones de la Torá, o instalarla en el marco de la puerta de acceso al hogar de uno.
10. Si un Noájida está, a la manera judía, esforzándose por aprender Torá o por guardar el Shabat, o si revela nuevos aspectos de la Torá, pudiera ser literalmente restringido e informado de que es merecedor de la pena capital, pero no se lo ejecutará.
Hace unos instantes recibí el mensaje que te transcribo a continuación:
Parece ser que sólo personas con un IQ superior a 120 consiguen resolverlo. Piensa:
Si:
2 + 3 = 10
6 + 5 = 66
8 + 4 = 96
7 + 2 = 63
Entonces:
9 + 7 = ???
Resulta que no me considero especialmente dotado para las matemáticas, para serte sincero no sé mucho del tema, pero resolví la cuestión en menos de dos minutos.
Qué bueno, qué suerte, qué lindo, soy inteligente… ¿y con eso qué?
Como ya sabes el ser humano está formado de cinco planos:
El Coeficiente Intelectual (IQ o CI) es una medición más o menos fiable de aspectos parciales de uno solo de estos planos.
Por tanto, ¡qué no se vanglorie el sabio en su sabiduría!
Ser inteligente es estupendo, es maravilloso, es una herramienta muy útil, una bendición sin dudas.
Pero, es imprescindible el cultivo y desarrollo de todos y cada uno de nuestros planos, nutrirlos, perfeccionarlos, mantenerlos en equilibrio dinámico saludable.
Aquel que se concentra solamente en uno de los planos, está haciendo un flaco favor a su vida y difícilmente puede construir shalom.
Por tanto, si no puedes encontrar la respuesta a este problemita matemático o de lógico, no te angusties, busca aquello en lo cual eres experto y dedícate a eso sin descuidar el resto de tus planos.
En el mundo no todos pueden ser brillantes mentalmente, ni es necesario que todos lo sean.
No por ello la persona es más o menos, sencillamente tiene aptitudes en otra sección de su existencia y no en la intelectualidad.
Recuerda que es preferible una persona amable, buena, generosa, empática, aunque no sea brillante intelectualmente; a una persona genial en su mente pero oscura en sus emociones.
Pues la persona buena estará en la senda del shalom, en tanto que la persona que rehuye del bien, no favorece la plenitud y la bendición en este mundo ni en la eternidad.
Por consiguiente, busca tu meta a superar, descríbela con claridad, descubre cuál es el precio a pagar para conseguirla, y trabaja por ella.
Siempre dentro del marco de los mandamientos, siempre procurando sostener tu vida en equilibrio en todos y cada uno de los planos de existencia.
Para finalizar, el numerito que responde a la interrogante tiene tres cifras, las dos últimas son iguales; pero, no es lo que importa que descubras ahora… dime, ¿qué es lo que debieras ponerte a descubrir ahora?
Winche nos consulta:
Estimado Moré, realmente noc como llegue a esta pagina si fue por casualidad o por medio del Todopoderoso, desde hace apenas 2 semanas que conosco la pagina, ahora tengo algunas preguntas.
1.- El Noajismo es una religion o solo una identidad?
2.- Hay alguna oración o rezo que podamos realizar nosotros?
3.- Las festividades judías, la debemos celebrar también?
Hasta el momento son mis preguntas, y otra cosa excelente pagina me ha hecho abrir los ojos en muchas cosas.
Un saludo estimado Moré
Alexander Reyes, 16, Estudiante, Caracas, Venezuela.
Esdras nos consulta:
Shalom Maestro (si es que me es permitido decirlo) lo que sucede es que en mi familia todos son muy religiosos y no mucho tiempo llegué aquí pero bueno mi pregunta va
1- ¿Cómo dejar de temerle al Infierno?
2- Es que cuando me digo a mi mismo \»Soy noajida\» una voz (por decir algo) me dice, \»No, estas mal, estás ofendiendo a Cristo\», \»Vas a ir al Infierno\»
3- y recaigo en un círculo de creencias errones,
muchas gracias y espero que Dios le bendiga (si es que me es permitido decirlo)
Esdras Juárez, 17 años, estudiante, México, D.F.
danib nos consulta:
Hola maestro,
1- soy noajida reciente,
2- acepto que Dios es uno solo y las demás seis leyes desde pequeña las cumplo.
3- Soy de caracter impulsiva, explosiva y me molesto de nada.
4- Si alguien me ofende lo ofendo, si me insultan lo insulto, si me odia lo odio, al que me critica le busco también el defecto,al que me maldice lo maldigo
5- y pienso que no estoy matando a nadie con eso.
6- Mis padres dicen que debo cambiar pero por mas que lo intento no puedo.
7- Deme su opinión, gracias por su consejo.
Daniela De Bravo, 26, estudiante, Sucre, Venezuela
Seguir leyendo Resp. 727 – ¿Los noajidas deben cambiar caracter ?
Esta semana el pueblo judío lee públicamente de la Torá las dos últimas porciones del segundo libro, denominado Shemot, conocido en español como «Éxodo».
Como siempre mencionamos, son numerosas las lecciones que se pueden aprender y derivar del sagrado texto -heredad y patrimonio eterno de la nación judía-, también aplicables y apropiadas para la bella espiritualidad noájica.
Prestemos atención a una de estas perlas del conocimiento y la ética.
Dice en el principio de la porción:
«Moshé [Moisés] hizo reunir a toda la congregación de los Hijos de Israel y les dijo: ‘Éstas son las cosas que el Eterno ha mandado que hagáis«
(Shemot / Éxodo 35:1)
Los mandamientos e instrucciones que vienen a continuación son adecuados exclusivamente para las personas judías, pues refieren al cumplimiento del Shabbat y la santidad que vincula a ese día con la nación judía; por tanto, no es un asunto de estudio o de particular interés práctico para los noájidas.
(Pudiera ser de interés teórico, para nutrir el intelecto o saciar la curiosidad, pero no es nuestro objetivo ahora hacer tales cosas; por otra parte, cuando el gentil se interesa tanto en lo ajeno, sea algo santo o perverso, igualmente ese interés pudiera llevarlo a confundir la preciosa identidad noájida y llevarle a pretender usurpar la propiedad exclusiva que Dios ha dado para los judíos o a andar por caminos oscuros y carentes de verdad.)
En la frase que citamos sí hay una impresionante lección de vida, una pauta ética y espiritual que todos debiéramos conocer, comprender y aplicar cabalmente en nuestro quehacer cotidiano.
Fíjate bien, no se dirige el mandato de Dios hacia pastores de congregación, ni líderes, ni profetas, ni personas reveladas, ni a santos, ni a consagrados, sino que Dios comunica Su Voluntad a TODOS los miembros de la comunidad.
Si bien hay mandamientos (de los 613 para la nación judía) que son para determinado sector del pueblo, o para tales o cuales circunstancias, en su fundamento el conjunto de los mandamientos que el Eterno dio a Israel son para TODA la nación judía.
Esto tiene una enorme similitud con el decreto de los Siete Mandamientos para las naciones, y al mismo tiempo una gran diferencia.
La diferencia está en que los 613 mandamientos de los judíos, son responsabilidad de la nación judía; no es el individuo judío particular quien está obligado al cumplimiento del conjunto de los 613, sino solamente de aquellos de los 613 que le corresponden legalmente.
Esto es, si una persona no es de la casta sacerdotal, no tiene ni debe de cumplir los mandamientos que incumben a los miembros de la casta sacerdotal. Si una persona no es agricultora, no debe cumplir aquellos preceptos que refieren a la actividad agrícola, ni sentirse en falta o pecado por no hacerlos… ¡no le corresponden!
Pero, de los 613 que sí le tocan, entonces sobre ese subconjunto es responsable de cumplirlos.
Los 613 mandamientos son para la nación judía y es ella, como una unidad, la que debe procurar su cumplimiento; de forma que cada individuo cumpla con aquellos que debe cumplir y no con lo que es de otro.
Esta es la gran diferencia con el decreto de los Siete Mandamientos para las naciones, pues no se dieron los Siete para que la responsabilidad del cumplimiento recaiga sobre una nación o un conjunto, sino que cada uno de los noájidas es el receptor y el responsable de vivir de acuerdo a los Siete.
Por ejemplo, No es admisible que el noájida se excuse diciendo que el roba pero hay otros en la sociedad que no roban, ya que el mandamiento le fue dado a cada gentil para que lo cumpla.
Así pues, el pueblo judío es el receptor y responsable de los 613 mandamientos; en tanto que cada individuo gentil es el receptor y responsable de cumplir cada uno de los Siete.
Ésta es la diferencia.
La gran similitud es que el llamado es para TODOS los que forman parte de la comunidad judía.
No solamente para sabios, lindos, ricos, inteligentes, religiosos, hombres, sino que estaban incluidos TODOS y TODAS. Grandes, chicos, los que sabían, los que sabían menos, los que cumplían más, los que cumplían menos, etc.
Los 613 mandamientos, el mensaje de la Torá para los judíos, es para TODOS.
Lo mismo con los Siete Mandamientos para las naciones. Todos y cada uno de los gentiles es quien ha recibido la orden de parte de Dios de cumplir con estos Siete. Todos y todas son los que precisan de los Siete para saciar su alma, nutrir su espiritualidad, equilibrar su vida, armonizar la existencia, construir Shalom, equipar su hogar en la vida venidera.
Todos los gentiles están obligados por un pacto eterno y sagrado con Dios para cumplir con los Siete Mandamientos, tal como es el propio Dios que se encarga de anunciar:
«Entonces Elokim habló a Noaj [Noé] y a sus hijos con él, diciendo:
‘He aquí que Yo establezco Mi pacto con vosotros, con vuestros descendientes después de vosotros«
(Bereshit / Génesis 9:8-9)
Así pues, debes estar feliz, eres noájida, lo sabes y vives como tal.
Tienes un sagrado pacto con Dios, por siempre, sin excusas, sin cambios.
Es el pacto de los Siete Mandamientos, que te provee de bienestar, te inunda con bendición, te premia con una buena vida en la eternidad.
Tú eres el receptor y el responsable de cumplir con ese pacto sagrado que tienes como gentil con Dios.
Si te buscas justificaciones, te inventas religiones, veneras redentores, te haces el distraído, te disfrazas de judío, repites frases judaicas sin ton ni son, adulas al nazareno, etc., si haces cualquiera de las cosas que Dios no te ha pedido que hagas para nutrir tu espiritualidad y dar sentido a tu vida, entonces estás en el camino del fracaso, en el caos, rodeado de sombras y abismo.
Tienes un pacto sagrado y eterno con Dios, el noajismo.
Para vivirlo como individuo, para formar comunidades unidas y trabajar todos y todas por la construcción de Shalom.
querido moreh quiero saber si es permitido al noajida concurrir a espectaculos publicos tales como cine, teatro, recitales, monologistas, y cosas por ese estilos.
muchas gracias mi moreh
Dios es Todopoderoso,
sin embargo,
Él en Su imponente poder sin límites se ha limitado para darte existencia, y no solamente eso, sino que además tengas libre albedrío (capacidad para elegir entre el bien y el mal y hacer lo que escojas).
Es tan inconcebible Su grandeza, que Él escoge limitarse
para que tú escojas la vida.
Como Él te ha dado existencia,
para que vivas y crezcas y te ganes con justicia tu porción de placer en la eternidad,
Él ha decretado que hay cosas que Él no hace ni hará por ti.
Te enumero algunas:
Aquí termina este breve pero sumamente profundo texto.
Estúdialo, mastícalo, apréndelo, compártelo, cuestiónalo, vívelo.