Resp. 599 – Una Nación de Sacerdotes? La visita de unos misioneros

Lel nos consulta:

Hola Moré.
1- Unos misioneros de la secta cristiana luz del mundo.
2- Vinieron a mi casa y les quise hablar sobre los 7 preceptos para las naciones y ni me escucharon,
3- me dijeron que como no había Templo, los judíos no pueden fungir como Sacerdotes.
4- También me dijeron que los judíos estaban tan separados que Dios no estaba con sus hijos.
5- ¿Cómo puedo responderles ante esto a esa gente extraviada?
6- Me trataron muy arrogantemente y de una forma grosera. ¡Y afuera de mi casa!
7- Eso me molestó mucho.
Lel, 26 años, estudiante, México, D.F.

Buen día.

1- ¡Qué desfachatada que es esta gente!
Portan el caos, la mentira, la oscuridad, la confusión, medias verdades, manipulaciones, maquinaciones y todavía tienen el descaro de asunir indignamente la identidad que Dios ha provisto para los judíos, pues, son los judíos los que Él ha llamado para ser «luz del mundo» o de las naciones.
De este concepto proviene el nombre de nuestra fundación, Fundación Luz de Vida (FULVIDA), que es la Luz del Eterno que a través de la solidaridad de la nación judía es canalizada hacia las naciones del mundo.

Así pues, desde el comienzo estos misioneros dan muestras de su mala fe, de su poco deseo por congraciarse con la verdad y el Eterno.
Son de esos que adrede difunden el mal en el mundo, que se asocian con la maldición, que se rebelan en contra del Eterno.
No son como las mansas ovejitas ingenuas quienes siguen ciegamente los dictados de pérfidos pastores.
A las ovejitas debemos tratar con dulzura, con amor, con respeto extremo, pues son como pequeñitos que han sido raptados por malandrines y educados en la bajeza.
Pero, pero, a los misioneros, a esos que conscientemente empuñan todo tipo de armas para desparramar ondas de maldad en el mundo, que se sublevan en contra del Eterno, quienes a propósito llevan el dolor por el mundo, no debemos tenerle lástima. Siempre actuando con justicia, nunca cayendo en brutalidades de extremista, pero tampoco con la compasión que se merecen las víctimas y los inocentes.

Duro, siempre dentro de la ley, a los misioneros, así como a todos los que a sabiendas provocan el caos en el mundo, pues contradicen la senda del Eterno.
Con amor y respeto a los inocentes, que aunque ciegos y necios no son activistas conscientes de sus actos y creencias extraviados.

2- Los misioneros no escuchan.
Tampoco dialogan.
Ni desean el bien del prójimo.
Son robots entrenados con una sola misión, exterminar la Luz del Eterno en el mundo.
¿Cómo?
Usando cualquier método que tengan a disposición, que va desde la adulación, el falso cariño, la manipulación artera, la generosidad aparente, hasta la inquisición, la hoguera y hacerse las víctimas cuando son los victimarios.

3- Como siempre ocurre, los no-argumentos de los misioneros son huecos, falsos, carentes de bases y lealtad.
Si somos atentos a la Palabra del Eterno, Él llama a la nación judía como un reino de sacerdotes muchos siglos ANTES de que hubiera un Templo en Jersualén, e incluso antes de que hubiera un Tabernáculo en el desierto.
De hecho, el llamar a los judíos como nación sacerdotal no tiene nada que ver con asuntos rituales o templarios, puesto que es una función de liderar a los que no son sacerdotes en las cuestiones de Dios.
En la «economía divina», el sacerdote no es un funcionario de un templo, sino un líder espiritual encargado de promover las cosas de Dios entre sus hermanos, tal como vemos a lo largo y ancho del Tanaj.

Por otra parte, cuando los judíos no tenían Templo, pues éste había sido destruido, uno de los profetas del Eterno, un hombre lleno de la Palabra de Verdad comunicó a los judíos la Voluntad inquebrantable del Padre:

«Según el pacto que hice con vosotros cuando salisteis de Egipto, Mi espíritu estará en medio de vosotros.«
(Jagai / Hageo 2:5)

Es claro y sin lugar a dudas.
La Presencia de Dios entre los judíos, el espíritu divino en la esencia del judío, no depende de templos, ni de rituales, sino de un pacto eterno que Dios estableció con los judíos.
Un pacto que servía en el desierto, mucho antes de cualquier templo, y que luego de destruido el Templo se mantenía vigente, tal como hasta ahora.

Así pues, la nación judía sigue siendo la nación santa, la nación escogida para tomar de la mano a sus hermanas naciones y llevarlos a la senda luminosa del Eterno.

4- Dios jamás abandona al pueblo judío, tal como está manifestado y es verdad eterna:

«Por un breve momento te dejé, pero con gran compasión te recogeré.«
(Ieshaiá / Isaías 54:7)

Si bien pudiera parecer que por un instante Israel se quedó sin su Esposo, ciertamente Él no desecha ni abandona a su hijo primogénito, al pueblo judío.

Por otra parte, ¿en qué se basan los corruptos y corruptores, los misioneros, para decir eso en relación al pacto eterno que existe entre Dios e Israel?
¿Desde cuando una persona sumergida en estiércol tiene la capacidad como para decidir lo que compete a Dios y a Sus hijos sagrados?
Sería bueno que aquellos que maliciosamente levantan un dedo acusador en contra de los hijos de la nación santa, o de los leales socios noájidas, primero comenzaran por sus propias vidas y casas. Que quitaran los dioses de madera y piedra de sus vidas, que se descontaminaran de tanto dogma corrupto, de la maloliente idolatría, de doctrinas perniciosas que solamente anhelan el dominio del mundo y la adquisición de bienes.
Cuando estos misoneros tengan a bien demostrar que su diosito es real y que su librito no es un compendio mal armado de mitos y mentiras, con un poco de historia chapurreada, entonces podremos dar crédito a sus paparruchas acusaciones.
¿No le parece?

Así pues, pregunte: ¿Dónde está escrito eso?
¿Acaso no vemos que el único pueblo que sobrevive a todas las épocas, a todas las destrucciones, a todos los imperios, a todas las modas, es precisamente el pueblo judío?
Un pequeño y débil entre gigantes que es llevado de un lado a otro, es sometido a todo tipo de torturas y maldades, es un siervo doliente que sirve para que los enfermos descarguen sus locuras sobre él (tal como hacen los misioneros) y sin embargo este siervo sigue adelante, vivo, pleno, poderoso en espiritualidad, lleno de luz y sabiduría.
Tras 2000 años de esclavitud y exilio retorna a su tierra patria, y forma un Estado productivo, de punta, netamente superior en muchos aspectos a otros Estados que tienen mejores condiciones materiales, sin trastornados terroristas que quieran despedazarlo, sin enfermos presidentes dictadores que vociferen en su contra estupidez y odio, sin guerras inmorales y mala prensa antisemita… y sin embargo el joven Estado de Israel sigue avanzado, desarrollando ciencia, arte, vida…
Si alguien quiere ver la Mano de Dios en el mundo actual, solamente basta con mirar el milagro del retorno del pueblo judío a su tierra patria y el desarrollo impresionante que se está dando allí, a pesar de los pesares.
Pero, ¿qué se puede decir del éxito de los seguidores del payaso de la cruz?
Vemos que hubo siglos de masacres en contra de otros, inquisiciones, manipulaciones, imperialismo, etc., y un asbsoluto y patético estancamiento en lo ético, moral y espiritual.
Vemos centenas de sectas, si no son miles, que compiten para ver cual tiene «el evangelio»… porque ni entre ellos se ponen de acuerdo, pues son portadores del virus del caos y la maldición, que corrompe y corroe, mata y extermina. Eso es lo que divulgan, lo que respiran, su droga con la que pretenden dominar al mundo pero que los termina asfixiando en un mar oscuro y terrible.

En definitiva, cualquier observador calificado y objetivo encontrará milagrosa la existencia y despliegue de la nación judía, y atroz lo que a lo largo de la historia viene ofreciendo el «cártel de la droga del madero».

5- Con el silencio.
Reitero, hablar a los misioneros es una tarea casi imposible.
Hablar a las ovejas es una tarea necesaria.

Allá, en el fondo, el misionero tiene la llama espiritual aún encendida, pero se precisa de muuuuccchhhaaa paciencia para ayudarlo a escapar de ese infierno que él mismo ayuda a construir y mantener.
No es tarea para todos.

Pero, no deje de dar su mano amiga a la oveja que anda perdida detrás de la mentira.

6- Ellos, los misioneros, no aman, no respetan, no son justos, no portan la llama de la verdad, así que se puede esperar de todo de parte de ellos.
Tampoco es necesario que prejuzguemos, pero nunca está demás ser precavidos y no jugar con fuego, porque quien juega con fuego se termina quemando.

7- Ánimos muchacho.
Es la impotencia lo que le disgustó, la impotencia de querer hacer comprender a una piedra algo.
Tómeselo con calma, edifique su vida, ayude al que sigue a esas religiones por ignorancia, por costumbre, por ceguera, dedique su tiempo a construir shalom y no a tratar de ser un rescatista de un mamut en medio de una tormenta.

Que sepamos construir Shalom.

More Yehuda Ribco

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10 comentarios sobre “Resp. 599 – Una Nación de Sacerdotes? La visita de unos misioneros”

  1. Como desearia que esta clase de misioneros se toparan mas a menudo con el More….

    Ademas los misioneros cuando se les sigue la corriente tratan a la persona con «amor». Pero cuando se topan con un Noajida que le desarticula todas sus mentiras empiezar a lanzar su odio y veneno hacia los fieles del Eterno. Que desequilibrio.

  2. Para mí, mejor que no se tope, pobrecito del misionero, jjajajaja son bromas.

    Por otro lado, ¿qué tal el nivel al que se encuentra Israel para ser un estado de nada más y nada menos de 60años?
    para mí, sin duda, hay prosperidad, hay abundancia, hay el favor de EL ETERNO para su pueblo, gracias sean dadas al CREADOR por ello. Aunque así parezca, NUNCA lo ha desamparado.

    SHALOM

  3. Saludos Maestro,
     
    Gracias por su profunda respuesta, también me inspira y tranquiliza mi espíritu herido por la prepotencia y arrogancia de los que llevan la palabra del Mal,  pero realmente me indigna cómo se expresan de la gente buena y sacra como lo son Sus hijos y lo peor es que se creen más sabios que los propios dueños de la Toráh. Yo sé muy bien quien es el Hijo de Dios. ¡Benditos sean tus hijos elegidos Dios! Espero algún día aspirar a ser el 10% de lo que es un judío en estado puro. Jamás dejaré la enseñanza de los maestros de Israel, jamás aceptaré otro dios que no sea el Eterno Dios Uno y Único Verdadero… ¡primero la muerte!

  4. el cancer de la sociedad es la idolatria.

    que consume vidas y recursos como un autentico parasito.

    gracias a las payasadas del colgado la sociedad ha dejado de avanzar verdaderamente.

    estas predicas no deben de ser aceptadas de ninguna forma.

    creo que lo mejor cuando un misionero toca la puerta es decirle «NO» con educacion y amabilidad un rotundo «No deseo escucharlo»

    la idolatria es una amenaza global debemos de combatirla con nuestras armas que son la verdad la Bondad y la Justicia.

  5. Todo Israel, es una nación santa y de sacerdotes; pues genérica y globalmente, son Luz de Las Naciones.

    Luego está el sacerdoció de los leviim (levitas) y el sacerdocio más específicos de los cohanim (levitas descendientes de Aarón). Según la sagrada Torá, son los levitas y «cohanitas» sacerdotes, del pueblo elegido y de toda la humanidad a perpetuidad.

    Los noájidas, no podemos en ningún caso pretender ser socerdotes, usurpando unas funciones ajenas y hacerlo es rebeldía a Hashem y horror y error.

    Y quiera el Eterno, que sigan haciendo sus funciones, en la actualidad, pues tienen algunas funciones, aun sin ser «restablecido el sacerdocio en el Santo Templo. Pero, pido todos los días porque se de la «restauración del santo templo» y «por que entonces puedan ejercer su sagrada labor en el Santo Templo». Del mismo modo, que también pido que pronto Hashem nos envie a Eliyahu y al Mashiaj, lo cual creo que está ligado, con la futura restauración del Tercer Santo Templo

    Paz y bendiciones, y esforcémonos cada uno, tanto como podamos y tal como nos corresponde cumpliendo nuestros mandamientos (tanto los judíos como los noájidas).

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