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Resp. 531 – Creemos en los mandamientos por fe?

metanoia nos consulta:

ENDONDE ESTAN LA TORA LOS 7 MANDAMIENTOS QUE LE DIO A NOAJ NO VIENEN AHI POR QUE DICES QUE LE ENTREGO 7 A NOE ESO NO LO DICE ENTONCES ES ORAL Y SI ES ORAL ESTAS IGUAL QUE YO POR FE CREES ? TE ESTAN MINTIENDO LOS JUDIOS ESO ME DIJO HELP
MI
ALAN VAZQUEZ

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Resp. 530 – Cuando usar el termino idolatria?

Romano nos consulta:

1- Llamar a cualquier religión no judia idolatría ¿de que manera ayuda a la paz?
2- Lo pergunto porque me llama la atención el uso reiterado en este sitio del término
3- y al mismo tiempo el querer establecer la paz en el mundo
De antemano les agradezco sus respuestas
Atentamente
Cesar Romano, 45 años Monterrey, México

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La causa del mal

Si con toda inocencia tu hijito te preguntara cuáles son los males humanos en este mundo, ¿qué le contestarías?
Te confieso que yo señalaría cosas tales como: idolatría, perversiones, corrupción, crímenes, mentiras, violencia, infidelidad, falta de responsabilidad y compromiso y quizás alguna cosa más.
¿Tú quitarías o añadirías algo a esto?

Si mi hijito con más profundidad insistiera y preguntara qué es lo que tienen en común a todos estos males, ¿qué le responderías?

La Tradición judía, con su sabiduría celestial, nos brinda con frescura y claridad la respuesta justa.
En la base de todos, absolutamente todos los males provocados por la persona, se encuentra el así llamado Ietzer HaRá, que significa la «tendencia hacia lo negativo«. Nosotros, en este sagrado HOGAR le damos el nombre de EGO.
Quizás sea más comprensible si piensas en egoísmo, aunque no sea exactamente lo mismo.

El EGO es la raíz y la finalidad de todas las acciones y actitudes negativas humanas.
Medítalo un instante, busca ejemplos en las cosas cotidianas así como en los grandes eventos de la historia, y terminarás por reconocer que allí está esa presencia oscura que llamamos «egoísmo».

Tengo que mencionarte que existen dos modalidades del egoísmo, una constructiva y la otra nociva.
El egoísmo constructivo es aquel que nos mueve a preservarnos, a buscar alimento, refugio, a procrear, etc. Este tipo de egoísmo, al que se le puede denominar «tendencia negativa canalizada hacia fines positivos», es en absolutamente necesario y bueno.
Pero, el egoísmo nocivo, el que apabulla al otro, el que succiona para sí atributos ajenos, el que rechaza o es indiferente a las necesidades justas de otra persona, ese egoísmo es un cáncer emocional y espiritual, que debilita y acaba con la vida del que lo padece y probablemente de quien esté a su alcance.

Piénsalo, encuentra ejemplos de conductas o actitudes negativas, mientras tienes presente que detrás de todo esto se encuentra el egoísmo, y de pronto podrás descubrir el «secreto» para tanto dolor y sufrimiento.

¿Cuál es la sana cura para este mal corrosivo?
La respuesta la brinda nuestra Tradición, la Torá, la instrucción sagrada, revelada por Dios a los hombres, es el antídoto para el mal del egoísmo.
La Torá judías para los judíos.
La Torá noájida, para los gentiles.

Ciertamente ésta es la única manera de combatir o de canalizar con bendición ese pesado flagelo que es el egoísmo.
Cuanto más instrucción sagrada apliquemos a nuestra vida (de aquello que nos está permitido), de acuerdo a cuanto vayamos aprendiendo y asumiendo, más Luz estaremos posibilitados de traer al mundo. Primero en nuestro interior, luego derramándola en nuestro entorno.
Con la Luz del Eterno el predominio del bien y la justicia se va estableciendo.
Es un trabajo indispensable, armonizar nuestras dimensiones, recobrar la identidad sagrada que se esconde detrás de las máscaras que vamos usando.
Ésta es nuestra parte en la labor del advenimiento de la Era Mesiánica, hacer lo que está a nuestro alcance, con entereza y pujanza, para quitar la pesada piedra que es el egoísmo de nuestro corazón y dar un nuevo corazón vital a nuestra existencia (individual y colectiva).

Al comienzo el romper la cadena de la esclavitud del Ego es dificultosa, muchas son las cosas para aprender y reparar, mucho lo que se debe evitar el continuar ciegamente detrás de hábitos que ya forman como una dura costra en nuestro ser.
Pero de a poco, con paciencia y sin ansiedad, con tenacidad, con integridad, de a poco, se va alcanzando nuevas escalas de libertad para alumbrar nuestra vida y la de nuestro mundo.

Gradualmente debemos ir reconociendo nuestras fallas y nuestras virtudes, nuestros apegos del Ego, para irlos modificando en procura de alcanzar una estatura espiritual inmensa, desde la cual la esclavitud del Ego ya no nos manipula.

Tienes mucho más para aprender, para disfrutar para obtener en los textos que encuentras aquí: EGO.

 

Resp. 511 – EL DINERO

omar.moreno nos consulta:

Buenas tardes y Shalom More
Tengo estas inquietudes
0- En la tora:
1.-Es una tragedia o un \»estado inconveniente\» el ser Pobre(de dinero).
2.-Es una Bendicion ser rico.
3.-El ser asalariado que significa segun la Tora?
4.-Siendo rico(de dinero) le puedo ser mas util a Dios.
5.-Que importancia tiene el dinero para Dios?
6.-A los Hebreos durante el exodo, Dios les dio Mana, Agua y Carne que enseñanza podemos adquirir de ese echo?.
Mil Gracias.
Omar Moreno 30 Programador, Tijuana Mexico

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Que se esconde detras de la visita del papa a israel

“La historia de las relaciones entre Israel y el Cristianismo está saturada de lágrimas y sangre” Cardenal Joseph Ratzinger, Jerusalén, 1995

La visita del Sumo Pontífice a Tierra Santa ha despertado numerosos interrogantes acerca de las relaciones entre dos de los estados más pequeños y, probablemente, más influyentes del mundo: El Vaticano e Israel. ¿Cuáles son los verdaderos y peregrinos objetivos de la Santa Sede?, ¿Qué representa este viaje del Papa para el Estado Judío?

La hostilidad de la Iglesia Católica hacia los hebreos, sustentada durante siglos por variadas doctrinas teológicas, influyó para que los conflictos entre Israel y el Vaticano comenzaran en 1948, cuando la Santa Sede condicionó el reconocimiento del Estado Judío a que éste «revisara el Juicio Final a Jesucristo».

La tradicional postura histórica tuvo un favorable punto de inflexión durante el papado de Juan XXIII, quien además de excluir la frase «pérfidos judíos» de los rezos ecuménicos, impulsó el Concilio Vaticano II, el cuál concluyera su sucesor Pablo VI (1965) con la declaración Nostra Aetate (En nuestros tiempos), atestiguando que los judíos son bien queridos por Dios y comparten el mismo patrimonio espiritual que los cristianos.

Pasarían veinticinco años, (30/12/1993), hasta que la Santa Sede e Israel formalizaran un acuerdo para regir las relaciones entre ambos estados y abrigar esperanzas concretas. Desde entonces, representantes de ambos Estados han negociado acerca de diferentes temas, en particular aquellos vinculados a la propiedad y administración de los lugares santos católicos en Israel.

Aunque las cordiales negociaciones no acabaron con la totalidad de arcaicos desencuentros y resentimientos entre el Vaticano e Israel, existe mayor conciencia sobre la necesidad, complejidad y alcance de cada nuevo acuerdo; el cuál trasciende los reducidos límites geográficos e influye directamente sobre la vida de cientos de millones de católicos y millones de judíos.

La visita oficial de la Iglesia Católica a Tierra Santa es siempre una oportunidad para que todos sus participantes comprendan el alcance histórico de las decisiones, profundicen compromisos y encuentren nuevos espacios de consenso.

Los intereses del Vaticano

Dos centros de interés dirigen la visita del Santo Padre: Mejorar su deteriorada imagen y promover un acuerdo definitivo sobre el status de los sitios católicos bajo soberanía Israelí.

El primer tema requerirá de un significativo esfuerzo por parte del Vaticano. En lo que va de su papado, Benedicto XVI ofendió en varias ocasiones al Pueblo Judío. Principalmente cuando defendió a Pio XII, conocido como ¨El Papa Nazi» y también, al levantar la excomunión a los cuatro obispos consagrados en 1988 por el prelado antisemita y cismático Marcel Lefebvre. Entre los clérigos absueltos estaba el británico Richard Williamson, tristemente famoso por declarar que en Alemania nazi «no existieron las cámaras de gas» y sólo 300.000 personas murieron en los campos de concentración.

Respecto al otro interés pontificio, el acuerdo fiscal sobre las propiedades de la Iglesia aún no ha sido firmado. La razón es sencilla. Aunque la ley israelí reconoce a los templos religiosos exención de los impuestos sobre bienes inmuebles, el Vaticano pretende dispensas semejantes sobre otras instalaciones de su propiedad, (hoteles, escuelas y residencias), de controvertido status fiscal pero considerable beneficio económico.

Valor estratégico para Israel

El gobierno israelí considera de vital importancia el respaldo del Papa para que los iraníes detengan su plan de desarrollo atómico y cese el financiamiento a los grupos armados que atentan contra la seguridad de Israel.

Aunque el Vaticano está comprometido en aportar una solución pacífica al conflicto árabe israelí, tanto su silencio frente al apoyo iraní a los grupos terroristas de Hezbollah y Hamas; cuanto la permanencia de la delegación oficial en la última Conferencia Mundial contra el Racismo, mientras el presidente Mahmoud Ahmadinejad, calificaba a Israel de ¨Estado totalmente racista»; plantea serios interrogantes sobre la confiabilidad del apoyo diplomático internacional que el Estado Pontificio ofrece a Israel.

Nada nuevo bajo el sol

Los ambiciosos intereses de la Nación Hebrea y la Santa Sede ponen a prueba a ambos Estados, y vale la pena señalarlo, liderados hoy por facciones políticas conservadoras e inflexibles a la hora de ceder en negociaciones.

Desde un punto de vista pragmático, Israel puede ofrecer a la Iglesia Católica los sitios sagrados y las concesiones fiscales que ésta persigue pero, cabe reconocer, el Sumo Pontífice no goza de la misma libertad para darle a Israel el apoyo diplomático que requiere. Se trata de una amenaza existencial: El fundamentalismo islámico también condiciona las acciones del Vaticano y representa un peligro inminente para todos los miembros de la comunidad católica que habitan la aldea global.

En este contexto, judíos y católicos vuelven a desencontrarse y se rigen una vez más por la seguridad que brinda el status quo. Sin embargo, con el pacto de 1993 como horizonte de referencia, esta visita aún se ubica al comienzo de un complejo proceso de normalización de relaciones.

Por Daniel Alaluf y Gabriel Bacalor
Copyright © Global Israel, 2009

La Paz Cristiana y su Genocidio

“No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no
he venido para traer paz, sino espada. Porque he venido para enfrentar al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra;” (Mateo 10:34)

Matanzas bajo dominio cristiano, datan ya de los primeros siglos. En Antioquía (ciudad que asumió en el Este la importancia de Alejandría) facciones enfrentadas (los azules y los verdes) terminaron por masacrar judíos e incendiar la sinagoga de Daphne junto con los huesos de las víctimas (circa 480). El emperador Zenón se limitó a comentar entonces que hubiera sido preferible quemar a los judíos vivos.

A modo de resumen, digamos que los principales genocidios de judíos en la primera mitad del milenio tuvieron lugar en el transcurso de cada una de las tres primeras Cruzadas, y de cuatro campanas judeofóbicas que las sucedieron. Anadiré a su enumeración, el ano y el nombre de los cabecillas, a saber: la Primera Cruzada (Godofredo de Bouillon, 1096); la Segunda Cruzada (el monje Radulph, 1144); la Tercera Cruzada (Ricardo Corazón de León, 1190); los Judenschachters (Rindfleisch, 1298); los Pastoureaux (el fray Pedro Olligen, 1320); los Armleder (John Zimberlin, 1337); y la Muerte Negra (Federico de Meissen, 1348).

Para encontrar en la historia de los judíos un ano más fatídico que 1096, habría que remontarse a mil anos antes hasta la caida de Jerusalem, o a casi nueve siglos después hasta el Holocausto. Todo comenzó el 27 de noviembre del 1095 en la ya mencionada ciudad de Clermont-Ferrand, cuando durante la clausura de un concilio, el Papa Urbano II convocó una campana «para liberar Tierra Santa del infiel musulmán». Hordas de caballeros, monjes, nobles y campesinos, se lanzaron sin organización a la aventura, pero eventualmente optaron por comenzar la purga de los «infieles locales», y acometieron ferozmente contra los judíos de Lorena y Alsacia, exterminando a todos los que se negaban a bautizarse. Corrió el rumor de que el líder Godofredo había jurado no poner en marcha la cruzada hasta tanto no se vengara la crucifixión con sangre judía, y que no toleraría más la existencia de judíos.

En efecto, un común denominador de las matanzas enumeradas fue el intento de barrer a la población judía íntegra, ninos incluidos. Los judíos franceses advirtieron del peligro a sus correligionarios alemanes, pero infructuosamente. A lo largo del valle del Rhin, las tropas, incentivadas por predicadores como Pedro el Hermitano, ofrecieron a cada una de las comunidades judías la opción de la muerte o el bautismo. En Speyer, mientras los crusados rodeaban la sinagoga, en donde se había refugiado la comunidad presa del pánico, una mujer reinició la tradición de Kidush Hashem, la aceptación voluntaria del martirio para gloria de Dios. Cientos de judíos se suicidaron y algunos aun sacrificaban primero a sus propios hijos. En Ratisbon, los cruzados sumergieron a la comunidad judía entera en el río Danubio a modo de bautismo colectivo. Las matanzas se sucedían en Treves y Neuss, en las aldeas a lo largo del Rhin y el Danubio, Worms, Mainz, Bohemia y Praga.

El fin del viaje era Jerusalem, en donde los crusados hallaron a los judíos agolpados en sus sinagogas y procedieron a incendiarlas (1099). Los pocos sobrevivientes fueron vendidos como esclavos, algunos de los cuales fueron eventualmente redimidos por comunidades judías de Italia. Pero la comunidad judía de Jerusalem quedó destruida por un siglo. En los primeros seis meses de la Primera Cruzada aproximadamente diez mil judíos fueron asesinados, que constituían en esa época un tercio de las poblaciones judías de Alemania y el norte de Francia.

En el ano 1144, los cruzados perdieron Edessa, y se temió por la suerte del Reino Latino de Jerusalem. El Papa Eugenio III convocó la Segunda Cruzada, y sus sucesores «judaizaron» la marcha. Se estipuló que no debía pagarse interés sobre el dinero que se tomara de de judíos para financiar la cruzada (nótese que desde el siglo XIII el término cruzada se aplicó a toda campana de la que la Iglesia se veía políticamente beneficiada).

En el 1146 el monje Radulph exhortó a los cruzados a vengarse en «los que crucificaron a Jesús». Centenares de judíos del Rhineland cayeron ante las hordas incitadas que los aplastaban al grito de Hep, Hep! (esta consigna, que probablemente era la abreviatura del latín Jerusalem se ha perdido, fue un lema judeofóbico muy popular en Alemania, y así se denominaron los tumultos contra judíos alemanes en 1819).

Brutalidades se perpetraron en Colonia y Wuezburg en Alemania, y en Carenton y Sully en Francia. El famoso maestro Rabenu Jacob Tam fue acuchillado cinco veces en recuerdo de las heridas sufridas por Jesús. Pedro de Cluny (llamado el Venerable) solicitó que el rey de Francia castigara a los judíos por «macular el cristianismo. No debería matárselos, sino hacerlos sufrir tormentos espantosos y prepararlos para una existencia peor que la muerte». Puede verse que el pretendido celo religioso de estos judeófobos no era sino una máscara para poder descargar sus instintos más sádicos, ideológicamente justificados.

La tregua que se dio a los judíos europeos después de de las dos primeras cruzadas, fue balanceada por las persecuciones a las que los sometieron los almohades en Espana y Noráfrica. Pero cuando Saladino puso fin al reino crusado en Jerusalem, una Tercera Cruzada fue lanzada, a la que se sumaron con entusiasmo el emperador de Alemania y el rey Felipe Augusto de Francia, quien ya había hecho quemar a cien judíos en Bray, como castigo por el ahorcamiento de uno de sus oficiales que había asesinado a un judío.

La novedad de la Tercera Cruzada fue que repercutió más en Inglaterra, que en las dos primeras había tenido un rol menor. Las comunidades judías de Lynn, Norwich y Stamford, fueron íntegramente destruidas. En York, los judíos se refugiaron en el castillo, al que se le puso sitio, y en el que se autoinmolaron a comienzo de la Pascua hebrea.

Para los judíos, las Cruzadas pasaron a simbolizar la inveterada hostilidad del cristianismo. Trescientos rabinos emigraron en el 1211 a Eretz Israel, en la certeza de que si permanecían en Europa Occidental pocas serían sus posibilidades de sobrevivir. Y como lo rubrica Flannery «los que decidieron quedarse terminaron lamentando su decisión». Al mismo tiempo, el recuerdo de los mártires fue para los judíos una fuente de inspiración para las generaciones posteriores: Dios los había puesto a prueba y demostraron ser héroes. Su martirio fue percibido como una victoria, símbolo del pueblo entero. La mayoría de los que se convirtieron por la fuerza pudieron ulteriormente regresar al judaísmo… y terminaron siendo víctimas de las matanzas que estallaron después. En la percepción del cristiano, el judío se había transformado en el implacable enemigo de su fe.

Las Cruzadas revelaron en toda su dimensión el peligro físico en el que se hallaban los judíos, lo que resultó en dos efectos. En principio, los judíos se mudaron mudarse a ciudades fortificadas en las que serían menos vulnerables (esto puede ser una explicación parcial del carácter urbano de los judíos que fue mencionado en la segunda lección). Segundamente, se instituyó el status de «siervos de la cámara real». Los judíos compraron la protección de emperadores y reyes a un elevado precio. Se consideraba que tendrían un privilegio si se los protegía del fanatismo de las masas y de la rapacidad de los barones. Pero en poco tiempo la supuesta protección se transformó en un artificio para enriquecer la Corona.

La teología ayudaba. El Papa Inocencio III proclamó la «servidumbre perpetua de los judíos» y el jurista Enrique de Bracton (m.1268) definió que «el judío no puede tener nada de su propiedad. Todo lo que adquiere lo adquiere para el rey». Para el siglo XIII era un buen negocio poseer algunos judíos, antes de que fueran eventualmente masacrados. Y las matanzas que sucedieron a las Cruzadas probaron ser las más sombrías.

En Rottingen en 1298 un noble llamado Rindfleisch incitó a las masas, que quemaron en la hoguera a la comunidad íntegra. Luego sus Judenschachters (asesinos de judíos) atravesaron Austria y Alemania saqueando, incendiando y asesinando judíos a su paso. Ciento cuarenta comunidades fueron diezmadas; cien mil judíos asesinados.

En el 1306 el rey de Francia hizo arrestar a todos los judíos en un mismo día y les ordenó abandonar el país en el plazo de un mes. Cien mil lo hicieron y se asentaron en comarcas vecinas; nueve anos después fueron readmitidos… para ser nuevamente masacrados.

Un monje benedictino lideró a los Pastoureaux (pastorcitos) en una especie de cruzada que destruyó ciento viente comunidades. En reacción a la matanza de los Pastoureaux en Castelsarrasin y otras localidades entre el 10 y el 12 de junio del 1320, el vizconde de Tolosa comandó una tropa para detener a los revoltosos, y cargó veinticuatro carros de Pastoureaux, a fin de encarcelarlos en el castillo de la ciudad. Sin embargo, el populacho vino en socorro de los saqueadores y los liberó. En efecto, otra característica común de los genocidios es el grado pasmoso de apoyo campesino con el que contaban. Y como es habitual en la judeofobia, lo peor estaba por venir.

En el 1336 John Zimberlin, un iluminado que había «recibido un llamado para vengar la muerte de Cristo matando judíos» lideró a cinco mil enardecidos armados, que usaban bandas de cuero en los brazos (los Armleder) y se lanzaron al asesinato de los judíos alsacianos. En Ribeauville fueron masacrados mil quinientos. Finalmente, el 28 de agosto del 1339 se concluyó un acuerdo entre el obispo de Estrasburgo y Zimberlin, que puso fin a los desmanes.

El séptimo genocidio mencionado en la lista fue el de la Muerte Negra. Una plaga mató a alrededor de un tercio de la población de Europa entre 1348 y 1350 (casi cien millones de personas). Las comunidades judías de Europa fueron exterminadas por el populacho enloquecido por tanta muerte. ?Quién podía ser culpable de la plaga sino el archiconspirador y envenenador, el judío?

Fuente: La Naturaleza de la Judeofobia- Gustavo D. Perednik.

Resp. 508 – ¿Que debo hacer con las ganancias de mi negocio?

hbotello nos consulta:

Estimado More: Primero gracias por la obra que usted lleva a cabo, estoy por iniciar un negocio, como noajida cuando reciba ganancias de este negocio, ¿Que debo hacer para agradar a Dios?.
Saludos.
Francisco Barrera, 28 años, Comerciante, Guatemala.

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Retorno, el antidoto

Investigadores cubanos estudian el uso del veneno de alacrán contra tumores cancerígenos en laboratorios de Venezuela y España, y próximamente lo harán también en Italia y Francia, informaron y fuentes oficiales.
El director del complejo cubano Labiofam, José Antonio Fraga, dijo al diario oficial Juventud Rebelde que siguen los estudios de la toxina del escorpión colorado (Rhopalurus junceus) porque tiene «proteínas de bajo peso molecular que tienen acción antitumoral».

Tomo este articulo como punto de partida ya que me resulta sorprendente saber que algo tan nocivo y perjudicial, puede ser cambiado de tal manera que pueda ser beneficioso.
Ocurre algo parecido en el plano espiritual, muchas personas estan consumiendo veneno, muchos concientemente, otros inconcientemente y otros no pueden escapar del mismo porque tienen miedo.

No importa cuanto hayan bebido del mismo, ni cuan bajo hayan caido, todos tenemos la capacidad del retorno, de beber el antidoto de la Fuente.

Leemos en El Camino del Gentil Justo:

No hay milagro más grande en la creación que retornar a Dios mediante
el arrepentimiento. El arrepentimiento es más grande que la sabiduría.
Por medio de la sabiduría, el hombre puede discriminar entre lo bueno y
lo malo, escogiendo lo bueno y rechazando lo malo; sin embargo, lo malo sigue siendo malo. Por otro lado, a través del arrepentimiento, el hombre tiene el poder de transformar, milagrosamente, lo malo en bueno; porque el remordimiento por los pecados cometidos puede constituirse en una fuente enorme de energía que lo acerque a Dios con gran amor.
Sucedió una ocasión que un Rebe Jasídico se acercó a un individuo que era conocido por ser pecador. El Rebe camino hacia él y le confesó que le tenía envidia. “Pero Rebe”, dijo sorprendido el hombre, “tu eres un santo y yo un pecador. ¿Por que debería usted tenerme envidia?”. “Porque”, respondió el Rebe, “tu puedes traer a este mundo una luz mucho más grande de lo que yo puedo. Yo puedo traer bondad a este mundo unicamente al resistirme ante el pecado y al hacer lo que se supone que debo hacer. Tu puedes transformar miles, quizá millones, de malas acciones en actos dignos de elogio al arrepentirte y retornar a Dios”.

Esto se logra asumiendo que el camino elegido era incorrecto, alejarse del mismo, comprometerse a cumplir las Siete Leyes Universales, entregadas por D-os.

Actualizandose 2009

Nos encontrábamos conectados por la Naturaleza dentro de una red (el alma – Adam), pero ella no pedía que implementáramos esta conexión voluntaria y conscientemente.

Allá por 1940, Baal HaSulam escribió en su periódico La Nación que el mundo es en realidad una familia, completamente interconectada. Sin embargo, esta conexión nos está siendo revelada hasta ahora. Y el día de hoy, todo depende de que cumplamos con esta condición que nos fijado la Naturaleza. La crisis actual y todo lo que nos sucederá en el futuro depende de la calidad de la conexión entre nosotros.

Por consiguiente, constantemente, debemos imaginar con toda claridad el sistema de conexión entre nosotros para poner al descubierto nuestra disparidad actual con el sistema. Esta disparidad es la causa de nuestros problemas y evidenciarla es el primer paso hacia su solución.

Si cada persona logra entender con claridad la causa de la crisis, eso es lo que la resolverá. Y a partir de eso, todas nuestras acciones gradualmente serán consistentes con la Naturaleza.
Fuente:
Michael Laitman

Resp. 504 – Actuar como noájida sin ser orgulloso

Buenas noches Lic. Ribco
Es bueno saludarlo de nuevo, no le he escrito desde que me recomendo que viera un rabio ortodoxo.
Lic despues de eso me han rechazado aunque no se si esa es la palabra pero si me han devuelto unas 3 veces pero me ha dado tiempo de estudiar, aprender.
Pero me pasa algo raro en realidad extraño.
Necesito su consejo, Lic. yo tengo bajo mo direccion a muchos obreros, y siempre antes me reunia con ellos y charlabamos mucho tiempo sobre mujeres, alcohol, chismorreo etc cosas que hoy en dia mi ser en lo mas hondo de el rechaza y aborrece ciento que mis oidos, ojos y boca estubieran contaminados no se como si se ensuciaran mis facultades, mi miedo es que no se que me pasa cada ves hablo muchisimo menos casi me siento ahora como una isla, me cuesta trabajo hablar algo mas de que no sea necesario, la gente me critica por no perder el tiempo hay como antes pero de verdad que yo ya no puedo estar en esto.
mi miedo es que me combierta en una persona orgullosa o que desprecia a los demas no se como llevar con esto pero yo quiero vigilar mis sentidos y ser un hombre buenos con los de mas.
Muchas gracias larga vida y todo lo mejor.
Roberto Martinez

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