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La perdida mirada de la señora águila

La anciana señora águila se despertó, como todas las mañanas, temprano pues tenía muchas cosas para hacer.
Navegar entre las nubes, aletear en las corrientes, ascender hasta donde el cielo parece la noche y especialmente, debía buscar su comida diaria. Algún conejo, un ave transeúnte, algo que cocinar.
Pero, está mañana fue diferente a las demás, pues no encontraba sus anteojos por ninguna parte.
¿Cómo prentenden que una abuela águila salga a cazar sin sus anteojos?
¡Moriría de hambre! Eso, si no chocaba con el pico de alguna montaña.
Desperada buscó y rebuscó.
Puso el nido patas pa’rriba pero sin éxito.
Al parecer algún pícaro le había sustraído sus lentes… ahora le quedaba la prisión de la oscuridad, la quietud y la muerte.
Desanimada y desesperanzada la triste abuela águila lloraba y lloraba, desconsolada y amargada porque apenas si distinguía sombras difusas sin sus anteojos de águila.
La pobre no se había dado cuenta de que sus lentes estaban encima de su mesa de luz, como todos los días.
Ella con el apuro y la distracción olvidó donde estaban y no sabemos si los volvió a encontrar…

¿Qué aprendemos de esta narración?

Una flor de siete petalos

Por: José Eduardo Oliveros Hernández

 
        Había una vez, hace
mucho tiempo, un mundo en donde Vivian los Colibríes y algunas otras aves, allí
habitaba un pequeño e inteligente Colibrí de hermoso plumaje color azul  llamado Joe, este era un joven e inexperto
pajarillo que nunca había libado o tomado el néctar de ninguna flor, su madre
una hermosa y sabia colibrí le dijo un dia: — Joe, tienes que salir al mundo a
tomar el néctar de las flores y cumplir con tu misión de colibrí que para eso
vinimos a este mundo. – pero busca una flor especial, que te de la vida–,
agrego la madre,– no busques cualquier flor—ve a los jardines mas allá de este
bosque y nunca dejes de buscar, pues algún dia podrías hallar la Flor que da la vida.–; Joe
había escuchado historias de los colibríes mas viejos acerca de una Flor que
daba la vida, pero sabia como todos que eran solo habladurías y fabulas de
pájaros viejos, — Puro cuento sin sentido–. Pensó.
 

        Pero un DIA como todos
los colibríes al fin a Joe le llego el momento de dejar su casa y salir a
buscar flores para libar y cumplir su misión de colibrí como decían todos los
viejos; — bah! Que gran fastidio, puros cuentos de pájaros viejos–, pensó
lleno de rabia y miedo ante un inmenso mundo que se abría ante él, — ¿quien
dice que tenemos la estupida misión de libar las estupidas flores?–; pero
igual se fue, se lanzo en vuelo hacia el mundo. Durante días, semanas y meses
recorrió bosques, libando flores aquí y allí y todas le parecían lo mismo y la
que hacia le parecía sin sentido, a medida que pasaba el tiempo fue creciendo
mas y madurando y vio que podía mover sus alas cada vez mas rápido. Un buen
dia, de “esos aburridos” que el llamaba, vio un enorme ave bien extraña y fea,
sin embargo no se asusto ni tuvo miedo, mas bien movido por su curiosidad se
acerco al enorme ave y le pregunto: — Oye, ¿Qué eres tú?–, –jamás había
visto nada igual de feo a ti—le dijo entre burlón y curioso; El enorme ave giro
su cabeza y mirándolo con unos enormes ojos le dijo: — Vaya, eres un colibrí
muy atrevido para ser un colibrí– –¿Cómo es que sabes que soy?—le pregunto
Joe sorprendido; — Yo se muchas cosas, he recorrido muchos sitios y lugares y
he aprendido mucho de todo– –Soy un Búho y algunos dicen que somos muy
sabios–; — Así que tu eres un Búho—Respondió el colibrí, –Había oído de
ustedes pero jamás había visto uno–, durante horas Joe y el Búho, que se
llamaba Beto, estuvieron hablando, luego su conversación se hizo habitual de
cada día, Beto le hablo al colibrí de los lugares y las cosas que había visto y
se convirtió en una especie de mentor o guía para Joe, un buen día el colibrí
le hablo sobre su misión en la vida como colibrí y sobre las flores, también le
menciono sobre la Flor
especial en la cual creían los viejos colibríes, su sorpresa no fue pequeña
cuando Beto le dijo: — No son cuentos mi pequeño amigo, esa flor existe, es la Flor que da la vida y la
sabiduría, el que la encuentra y descubre su secreto será sabio y feliz y jamás
estará triste porque será uno con el Gran Hacedor–; –¿Gran Hacedor?—pregunto
muy sorprendido Joe, –¿ Quien es ese Gran Hacedor?—Beto le explico que ese
“Gran Hacedor” era el que había puesto al bosque, a los ríos, a las flores y a
todos los demás animales; aves y no aves en donde estaban y que era el que daba
la vida, pero que no sabia mucho al respecto, que tendría que buscar el Jardín
en donde estaba esa Flor, Joe pensó por toda esa noche, muy asombrado y
extrañado por lo que había sabido, — Entonces todo es verdad,– Pensaba –
Entonces si existe–, pero también estaba consciente de que su amigo Beto no
podría ayudarle mucho ya que no sabia mucho al respecto, así que ese mismo día
decidió que partiría a buscar esa Maravillosa Flor que daba la Vida y la Sabiduría, así se lo
hizo saber al Búho y este trato de disuadirlo para que no se fuera pero en
vista de que no lo logro ya que Joe estaba totalmente decidido a irse pues el
Búho Beto le dio algunas recomendaciones para que no fuera a pasarle algo malo
en su viaje y triste se despidieron los dos amigos.

           Joe marcho en su
búsqueda, recorrió bosques y selvas, conoció a innumerables personajes y aves y
no aves, así pasaban mas días y semanas y meses y años colibriescos, pero Joe
no encontraba el jardín donde se encontraba la flor y mucho menos la flor, un
buen día ya cansado de buscar, cuando había recorrido muchos lugares, vio un
jardín muy hermoso, con muchas flores y árboles, se acerco hasta la puerta y
allí había un Cuervo, que le saludo y le dijo con voz chillona y altisonante:
— –Hola Bienvenido, este es mi jardín y todas las aves son bienvenidas, sobre
todo los colibríes–, — me llamo Idol el Cuervo y este es el jardín de Idol
aquí están las flores que dan la Vida Eterna,
pasa y prueba–; Joe estaba cansado de buscar y de las penurias que había
vivido, se sentía confundido y creyó que por fin su suerte le había sonreído
por eso le contó a Idol todas sus aventuras y el objetivo de su búsqueda, el
Cuervo Idol le dijo: — Aquí encontraras muchas Flores que te darán Vida y
Sabiduría y veras al gran “hacedisor”–, — Ven – Agrego el Cuervo – Come de
estas flores, se llaman flores de “jes crist” y estas otras se llaman flores de
“budi”, y estas otras de “krish” y estas se llaman flores de “esoteria” y
aquellas de “brujer” y todas te dan la vida y el conocimiento–, — ¡Pero ten
mucho cuidado!—le advirtió el pajarraco, — no hables con las aves que pasan
por el lado derecho fuera del jardín–, dijo, — esos son los colibríes
extraviados que sirven al Destructor que es el demonio del bosque y que puede
robarte la vida, te lo advierto nunca dejes que se te acerquen–. Joe acepto
como verdad lo que decía el avechucho y se quedo en el jardín, allí empezó a
libar de todas las flores que había, se dedicaba un tiempo a una especifica
pero en vista de que no le satisfacía pasaba a otra, pero siempre se sentía
hambriento y veía que los demás 
colibríes del jardín estaban hambrientas también, pero no solo eso sino
que todos se sentían cada vez mas tristes y temerosos además de débiles, sus
plumajes estaban opacos, sus alas ya no se movían tan rápido como antes apenas
se podían mantener en vuelo y sus ojos estaban 
apagados y nublados, pero Idol les decía que “Eso era normal que luego
pasaría” que libaran mucho mas néctar de esas flores que todo estaría bien. Pero
no era así, al contrario Joe y los otros estaban cada vez peor y hasta se les
dificultaba pensar.

            Un buen día Joe
estaba por el lado derecho del jardín y vio pasar por la parte de afuera a
muchos colibríes machos y hembras que volaban raudos y batían sus alas a una
velocidad fabulosa, sus plumajes eran de vivos colores y hermosos y sus ojos
brillaban, como ya casi él no podía volar estaba sobre una rama y se sorprendió
cuando se le acerco una hermosa colibrí, en realidad la mas hermosa que hubiera
visto y le preguntó:

–¿que te pasa?– — ¿a que te refieres?—respondió Joe, — a que eres
un colibrí y no estas volando, sino que estas parada en una rama y eso no se ve
nunca, además los colibríes no pueden pararse en una rama, deben ser colibríes–,
–¿estas enfermo?—

— No solo un poco cansado—dijo Joe y le pregunto: — ¿Por qué ustedes
no entran en este jardín, aquí están las flores que dan vida—a lo que la
avecilla hembra contesto: –¿Vida?, — no lo parece, nosotros vamos a unos
jardines donde están las Flores que alimentan y de verdad te dan la sabiduría y
la vida y te hacen conocer al Gran Hacedor—

— ¡¿ No son ustedes los que sirven al destructor?! ¿Al demonio del
bosque?—

La avecilla hembra se rió de todas las cosas absurdas que le contó Joe
y le dijo que todas esas cosas eran cuentos y habladurías sin sentido de Idol
que lo que quería era tener a muchos colibríes esclavizados y sirviéndole
entupidamente, la colibrí, que se llamaba Gracia, lo invito a venir con ella a
conocer los otros jardines, Joe venciendo su miedo y haciendo un esfuerzo para
superar su debilidad voló con ella y partieron.

          Durante horas que a
Joe le parecieron interminables volaron hasta que por fin llegaron a un lugar
en que habían dos jardines, uno tenia en la entrada un letrero que decía:
“Jardín de Noa” y el otro tenia en la entrada un letrero que decía: “Jardín de
Judai”. Gracia y Joe se detuvieron frente a ambas entradas y ella le pregunto a
Joe:

        ¿Dónde naciste tú?,–
–¿en el bosque de Cedros, o en el de Robles?, Joe le contesto: — En el de
Robles, ¿Por qué? –

— Porque si naciste en el de Cedros debes ir al Jardín de Judai y si
naciste en el de Robles debes ir al de Noa—Repuso ella.

–¿A que se debe eso?—inquirió Joe, a lo que ella respondió: –Esa es la Ley que hizo el Gran Hacedor,
si eres del bosque de Robles las Flores del Jardín de Noa son las que te
nutrirán mejor y te curaran y devolverán tu fuerza y vigor, si libas las del
jardín de Judai no te harán bien pues no es lo que corresponde a tu identidad
de nativo del bosque de Robles–, –pero yo no te puedo decir mucho es mejor
que entremos y el ave Jardinero nos lo diga–.

            Entraron al jardín
de Noa y allí Joe se emociono cuando vio a otro Búho quien era el ave
jardinero, este se llamaba Sabion y era mas pequeño y joven que Beto, su viejo
amigo, luego de presentarse a Sabion este les dio la bienvenida y les explico:

–Aquí encontraran la
Flor
de Siete Pétalos o Flor de Noa, deben saborear el néctar
de cada pétalo primero para poder llegar a saborear el néctar del centro de la Flor, el néctar del Centro es
la esencia que da Vida pues viene del Gran Hacedor que se Llama Eterno–. –Cada
pétalo te enseñara una Verdad Única. —

— El Primer pétalo te Enseñara que solo hay Un Gran Hacedor y solo
Uno, no podrás reconocer ni servir ni adorar a otro hacedor delante de EL.—

— El Segundo Pétalo te enseñara que nunca puedes tomar el Nombre del
Único Gran Hacedor falsamente, ni maldecirlo, ni deshonrarlo—

–El Tercer Pétalo te enseñara que no tomaras nada que no te halla
sido dado o que no hallas ganado por tu esfuerzo—

–El cuarto pétalo te enseñara que solo te relacionaras con otros
Dignamente y sin nada que valla en contra de la ley del Gran Hacedor—

–El quinto pétalo te enseñara a no quitar la vida a ningún ser
inocente o indefenso—

–El sexto pétalo te enseñara a seguir las leyes y hacer justicia de
acuerdo a la ley del Gran Hacedor llamado Eterno—

–El séptimo y ultimo pétalo te enseñara que no puedes ser cruel con
ningún ser inferior en evolución a ti ni a comer partes de el con vida ni con
su esencia de vida—

          Luego el Búho Sabion
les dijo que una vez que cada pétalo fuera parte de ellos podrían llegar al
centro de toda la Flor
y recibir la Esencia
de Sabiduría y Vida que venia del Único Gran Hacedor, llamado Eterno.

           Con el Tiempo
Joe  y Gracia se dedicaron a saborear
cada pétalo y a recibir su sabiduría, Joe recupero su Fuerza y Vitalidad, su
plumaje volvió a ser de un intenso color Azul y en la medida que saboreaba e internalizaba
la esencia del néctar de cada pétalo, sus alas se movían mas rápido y su
inteligencia crecía, un día en que vio hacia el Jardín de Judai, pues había
comunicación entre los dos jardines, le pregunto a Sabion: –¿Por qué los
Colibríes que nacimos en el Bosque de los Robles no podemos libar las Flores
del jardín Judai? — –¿ Por que tienen tantos Pétalos?–; Sabion le
contesto:– Las Flores del Jardín de Judai tienen 613 Pétalos y el Único Gran
Hacedor las Reservo solo para sus Colibríes del Jardín de los Cedros, pues
ellos tienen que realizar algo que El les Encargo a ellos, mas sin embargo los
colibríes del Jardín de Noa son socios y Hermanos de los Colibríes del Jardín
de Judai en el perfeccionamiento de todo el Bosque– –Pero— continuo Sabion—Lo
que le corresponde a cada colibrí es distinto, ellos deben saborear con mucho
sacrificio cada uno de los 613 pétalos para poder llegar a la esencia del
centro de la flor, pues lo que les encomendó a esos colibríes el Gran Hacedor
Único requiere que eso sea así.

        Joe entendió que así
eran las cosas y que el No era quien para inquirir en los designios del Único
Gran Hacedor llamado Eterno quien de paso le había dado la oportunidad de
llagar a su Jardín de Noa y conocer a sus hermanos de su Jardín de Judai,
además había conocido a Gracia y ese día le diría que quería que fuera su
pareja para siempre y trajeran mas colibríes al Jardín de Noa sobre todo a los
que estaban prisioneros del cuervo Idol, en fin después de todo su mamá y Beto
además de los Colibríes Viejos si tenían Razón, si Existía una Flor que daba la Vida a los Colibríes del
Bosque de Los Robles, esa Flor era la
Flor
de Noa, sonrió y zumbando se fue a buscar a Gracia,
sonriendo y alegre mientras caía la tarde…..

 

FIN

Noajismo y valores familiares

Pregunta. Apreciado Juan quisiera compartir esta duda con usted: ayer hablando con mi madre (quien es católica) ella me decia que por qué el noajismo no hablaba de la familia ni del amor familiar ni cosas por el estilo porque ella solo veía documentos que hablaban sobre el individuo. Obviamente yo le discrepe su comentario pero se hizo dificil explicarle ya que carecia de un documento que hablara al respecto…. me gustaría en la medida de lo posible que me guiara hacia un texto o video que hable del tema. De antemano le agradezco su atención Atte. Luis Zarate, Cartagena – Colombia Seguir leyendo Noajismo y valores familiares

¿El día de los vivos?

Hoy conmemoran en mi país, Uruguay, el día de los muertos.
Es un día feriado, muy sentido por muchas personas.
Por lo que tengo entendido esta costumbre está extendida en otras partes del continente, e incluso España (creo que también Portugal y Francia, pero no lo sé con certeza).

No tengo idea de los orígenes de esta fecha, pero supongo que debe tener raigambre pagana fortificada y amplificada por el cristianismo.

El día de los santos, Halloween, día de los difuntos… manifestaciones propias de dogmas extraños, poco arraigados en los Siete Mandamientos Universales, y por tanto que apartan de la fuente de Vida y Luz.

Yo me pregunto, ¿cuándo se celebra el día de la Vida?

Como sabes, el noajísmo NO es una religión.
Como sabes, está prohibido inventar religión o festividades religiosas.

Pero dime, ¿cuándo podríamos gozar de un día que celebre la vida, la Luz?

La Falacia del Yugo Desigual

Pregunta. Necesito me resuelva una duda, mi pareja es noajida y yo no y desde hace un tiempo tenemos muchos problemas. Evitamos hablar de lo que él es actualmente y lo que yo siento y pienso pues soy católica. Mi pregunta en sí es si él tiene que tener una pareja que sea noajida igual que él o no, si puede seguir a mi lado o nos debemos de separar, la verdad mi vida se ha vuelto un infierno pues ahora ya ni siquiera quiere tocarme y me evita a toda costa, me siento como un mueble en su casa, un objeto más digame que hacer pues yo lo único que quiero es que él sea realmente feliz. LM Seguir leyendo La Falacia del Yugo Desigual

Los hijos de Noaj

Está testimoniado:

«Los hijos de Noaj [Noé] que salieron del arca fueron: Shem [Sem], Cam y Jafet, Cam fue el padre de Canaán.«
(Bereshit / Génesis 9:18)

Cada uno de estos descendientes, hijos y nieto, representan una faceta del individuo y de la sociedad.

Shem representa la espiritualidad, la búsqueda del Eterno por medio de la Buena Senda. Es decir, el conocimiento de las porciones aptas de Torá y el adecuado cumplimiento de los mandamientos que el Eterno te ha impuesto.
Es el puente que une lo humano con lo trascendente.
Es la esencia pura e inalterable que nos da vida.
Es la Luz de nuestro ser, nuestra identidad y nuestra posteridad.

Iafet es símbolo de intelectualidad, de razonamiento, de belleza, de progreso científico, de una chispa de creatividad y una pizca de ingenio.
Es el pensador que indaga para encontrar sendas provechosas y productivas, que beneficien a la persona y al individuo; aunque ignora la Buena Senda (quizás porque no la percibe, o quizás porque no la toma en cuenta).
Pero también representa la frialdad, el pensamiento desprovisto de corazón, la severidad, el juzgamiento, el orgullo, la jactancia, el feroz apego a las reglas, la obsesión, los planes por sobre las personas, los fines que son justificados por los medios.

Jam es sinónimo de voluptuosidad, de deseos, de pasiones, de sentimientos, de desborde, de energía anímica, de actividad, de explosión.
Es el que anhela el encuentro con el Padre celestial sin mediación, sin reflexión, sin ceremonias, sino tan sólo con un dejarse fundir con la divinidad.
Pero también es la acción salvaje y sin sentido, la superstición, el egoísmo, la esclavitud a las adicciones, el aferrarse a las propias pasiones, el hambre de poder por sobre otros, la negación de los derechos ajenos, la rebelión alocada en contra del Eterno.

Canaan representa el materialismo, el afán por acopiar, por poseer.
Es el que no busca al Eterno en modo alguno.
Es el que se ríe del dolor ajeno, el que destruye por el placer de destruir, el que quebranta por el gozo de oír la rotura, el que ataca sin piedad ni motivo.
Es la furia desatada, vacía de cualquier objetivo, sino tan solo por expresar furia, romper, pisotear, demoler, arrasar, violentar, atemorizar.

Todos estos son hijos de Noaj, los primeros noájidas.
¡Cuántas cosas podemos aprender de estas figuras!

Por ejemplo, ¿cómo encauzan correcta y constructivamente los Siete Mandamientos Universales estos paradigmas?

Te propongo que dialoguemos al respecto…

Resp. 142 – Cuidado, cumple con los mandamientos

Shalom…
¿Por qué en el noajismo se habla tan radicalmente de la pena de muerte para el gentil que comete ciertas transgresiones? Tengo entendido que eso fue abolido por Rabí Akiva. ¿O no? ¿Cómo manejar esos conceptos hoy?
Gracias…

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Las reglas que sigues

Existen cinco tipos de reglas/leyes que te mencionaré un poco más adelante.

Es imprescindible que toda persona conozca estos cinco tipos de reglas y reconozca las diferencias básicas entre cada tipo.
Cuando aprendes esto, tienes la posibilidad de entender porqué actúas como lo haces y qué es aquello que pudieras hacer para perfeccionar tu vida y traer redención al mundo.

Cuando ignoras la existencia de estos cinco tipos de reglas, y actúas siguiendo ciegamente solamente alguno de los tipos, estás actuando basado en información parcial, lo que probablemente te aleja de la Buena Senda.

Reglas Espirituales.
Son aquellas que ha dictado Dios y que han sido preservadas en la Torá (Escrita y Oral), se las denomina mitzvot (mandamientos).
Las normas para la aplicación de las mitzvot (halajot) fueron recibidas por Moshé directamente del Eterno.
Aunque algunas de las halajot fueron desarrolladas por excelentes asambleas de autoridades rabínicas, que seguían estrictos patrones de legislación en perfecta sintonía con la Torá.
Los mandamientos son un conjunto completo y orgánico, un sistema vital, que favorece el crecimiento personal, el establecimiento de sociedades saludables y, por si fuera poco, la vida eterna del espíritu individual.
Su cumplimiento se siente como una necesidad del espíritu, una sed interior irrefrenable, ya que el espíritu puro de cada persona se nutre con el conocimiento de estos mandamientos y su correcta ejecución.
Para su cumplimiento no hace falta comprender los motivos o razones que las sostienen, ni las ventajas o beneficios, ni que estén de acuerdo con la opinión de la masa. Solamente hace falta entender que han sido dictadas por el Creador y Señor del universo, que es nuestro deber ante Él, y nuestra misión principal en la vida.

Reglas Intelectuales.
Son reglas éticas, del comportamiento que nace de la elección racional personal que es considerado como bueno.
La persona reflexiona y medita hasta encontrar las reglas que escoge seguir y que cree que reportan bien.
Dependen del sujeto que se pauta estas reglas, de acuerdo a su propio intelecto.
Pueden estar en sintonía con las Reglas Espirituales, o con Reglas Sociales, o con el propio deseo; pero el motivo fundamental para su aceptación depende de las razones que argumente la persona.
Como depende del propio sujeto, de aquello que razona y cree, probablemente elabore normas de conducta negativas, que lesionen a la persona o a otros, pero con la excusa y justificación de estar actuando de buena voluntad.

Reglas Sociales.
Son las que dictamina determinada sociedad (o comunidad de pertenencia / referencia), en cierta época y lugar.
Actualmente en la mayoría de las naciones se sigue la opinión de las masas, teniendo la idea de que la aceptación de una mayoría es suficiente como para aprobar reglas y sustentarlas.
Sin embargo, la mayoría no siempre es consciente de lo que escoge, ni tienen capacidad como para determinar lo que es el bien común, ni siquiera se aplican con fidelidad a la Senda de las Reglas Espirituales
Por lo cual, la mayoría puede tender hacia el mal, y hacer del mal una meta común de la sociedad.
En palabras de la Torá: «No seguirás a la mayoría para hacer el mal. No testificarás en un pleito, inclinándote a la mayoría, para pervertir la causa.» (Shemot / Éxodo 23:2)
Y recordemos las palabras de un antiguo político: “Aun suponiendo el ver triunfante la opinión de los insensatos mediante el número, no por eso podrán trastocar la naturaleza de las cosas” (Cicerón en “De Legibus” (tengamos presente que este autor no era precisamente amigo del Eterno, ni apoyaba a Sus fieles, sin embargo advertía que el consenso no siempre es el mejor patrón a seguir)).

Reglas del Deseo.
Estas son pautas imprevistas, súbitas, individuales, que siguen el dictado del propio deseo, el afán de encontrar gozo o evitar lo que se teme, sin más consideración.
De por sí estas normas no atienden dictados sociales, ni siguen líneas de razonamiento lógico, ni se alumbran por el faro esclarecedor de la verdadera espiritualidad.
Por cierto que estas reglas podrían coincidir con reglas de otros niveles, y hasta sumarse para alcanzar las similares finalidades, pero sin estar supeditadas a ellas.
Por supuesto que la búsqueda de satisfacción y la evasión pueden provocar heridas de todo tipo, a quien así actúa o a los otros, sea voluntariamente, por desidia o como resultado secundario de la acción y omisión.

Reglas Naturales.
Son las que dependen exclusivamente de patrones físico-químicos.

Para llevar una vida de integridad, de trascendencia, de tendencia verdadera al bien, de bondad, de justicia, de plenitud, necesariamente se deben acatar las Reglas Espirituales, sin dejar de lado aquellas reglas de los otros cuatro tipos que no contradigan ninguna de las Reglas Espirituales.

El noájida debe tener presente los Siete Mandamientos Universales, conocer las normas derivadas, tener presente los consejos de los sabios, para de esa manera desplegar una verdadera luminosa, de construcción de Shalom.
Su vida debiera girar en torno a la fidelidad del Eterno, del modo que Él marcó, que es siguiendo la Buena Senda de los Siete Mandamientos Universales.

Los noájidas no deben actuar como hacen los devotos de las religiones, que se encierran en sus comunidades, que revolotean en torno a sus pastores, que se creen santos por censurar a otros o por privarse de los bienes y placeres que el Eterno les ha hecho llegar.
Esas conductas de santurronería no son propias de los adherentes del Padre Celestial, sino de los seguidores de falsas deidades y de doctrinas de personas ajenas a Dios.

El noájida puede y debe desarrollar una vida de gozo y alegría, llena de sensaciones agradables, placeres permitidos y que no conducen a nada que esté prohibido por Dios o los Sabios.

El noájida debe buscar la superación personal en todos los planos, el material, el social, el académico, el económico, etc.; siempre y cuando no caiga en conductas nocivas, o en cosas que lo aparten de la Buena Senda de las Reglas Espirituales.

El noájida puede y debe participar de las actividades sociales de toda índole, política, arte, cultura, ocio, deportes, etc., siempre y cuando sus actuaciones no incurran en faltas a los Mandamientos Universales y sus derivados.

El noájida tiene la obligación de cultivar su intelecto, aprender a pensar, aprender a criticar, entrenarse en criticar con sabiduría y autocriticarse con justicia.
Debe aprender de cosas mundanas, porque nada del mundo le está vedado, en tanto no vaya en contra de los Siete Mandamientos Universales.

El noájida debe llenar su vida de verdadera espiritualidad, hacer obras de bien sin contrariar las Reglas Espirituales, estudiar las porciones de la Torá que tienen permitidas, y dedicar su vida con empeño a cumplir con sus mandamientos, sin negarse los bienes de este mundo.

Conoce los tipos de reglas, aprende qué tipo estás siguiendo tú.
Ten en cuenta constante los Siete Mandamientos Universales, que son tu herencia y tu porción de bendición en Este Mundo y de gozo eterno en el Mundo Venidero.

Sé un constructor de Shalom, porque avanzas por la Buena Senda.

LUZ PARA LA VIDA.

Este punto es de reflexión, ya que muchos andan desesperadamente buscado la luz del Eterno, pero supuestamente no la encuentran, y si la consiguen es por un camino equivocado en las diferentes religiones idolatritas que existen hoy día siguiendo una vida desordenada, que lo que les da es afanes, maltratos, estrés, fatiga, enfermedades y muchas otras cosas, que al final se convierte en muerte y destrucción.

Es por ello que les invito para que den un paso lento pero firme y seguro y así lograr conseguir la Luz del Eterno, por eso bien dice  el Salmo 27:1-3, “De Da-wi-d. El Señor es mi luz y mi salvación, ¿de quien temeré? El Señor es la fortaleza de mi vida, ¿de quien me espantare? Cuando se acercan contra mí los malhechores, mis adversarios y mis enemigos, para comer mi carne, ellos mismos tropiezan y caen. Aunque un ejercito asiente campamento contra mí, no temerá mí corazón; aunque levante guerra contra mí, también en este caso estoy confiado”.

Con este Salmo escrito por David se observa, la confianza que él tenía en el Eterno quien en ese momento fue su protección, considerando que hoy por hoy nosotros, los que queremos la protección y la Luz del Eterno igualmente seremos protegidos.

En las escrituras existen muchos textos, en donde El Eterno nos promete estar de nuestro lado, para protegernos y ayudarnos, pero no olvidando el andar por una camino de luz y conservar las siete leyes Noajidas:

1.- No hacer idolatría, ni servir a ninguna imagen. Sólo creer en un solo D´s.

2.- Está prohibido maldecir a D´s.

3.- No matar.

4.- No adulterar.

5.- No robar.

6.- Está prohibido comer un miembro de un animal vivo.

7.- Impartir justicia. Es una obligación establecer juzgados y aplicar justicia.

 

Shalom.

 

Atentamente.

Abg. José N. Linares G.

 

Para meditar…

Me acabo de encontrar un artículo en El Comercio (Ecuador, 21.10.2007) sobre Mario Capecchi, Premio Nobel de Medicina. Los filósofos griegos pensaban que después de crear el mundo Dios había dejado el universo a su suerte. En el Monoteísmo (Judaísmo o Noajismo) las cosas funcionan distito; sabemos que el Eterno está en control de todo al mismo tiempo que nos ha concedido libre albedrío para que dirijamos nuestras vidas. http://www.elcomercio.com/noticiaEC.asp?id_noticia=144570&id_seccion=14 Seguir leyendo Para meditar…