24 años
Cordero, Venezuela,
pregunta sobre las visiones son de Dios o no? y cual es el objeto de ellas?
1.¿Dios escogió el término gentil para todos los demás pueblos diferentes del judío?
2.¿Por qué no debo considerar peyorativo el término gentil?
3Yo, gentil de México, ¿Tengo el mismo "status" que un "gentil" de Oceanía?
4¿Ser judío es más que ser gentil ante los ojos de Dios? (no tiene doble sentido esta pregunta, ni guarda ninguna ironía.)
5¿A Dios le importa si soy Judío o Gentil?
6.Una compañera de la universidad llamada Elinor Maguen David afirma ser israelita pero no judía, a mí me pareció una incoherencia, pero si no la fuera ¿Cual es la diferencia entre ser israelita y ser judío?
7.¿Existe alguna diferencia entre los términos israelita, israelí, judío y hebreo?
UBALDO GERARDO ESPARZA DEL VILLAR
En la jornada anterior estuvimos hablando de los principios básicos que llevaron a David a derribar al gigante Goliat y a toda su comitiva. Mencionamos y desarrollamos tres principios: 1) No te dejes impresionar por lo complicado de la situación; 2) No te dejes influenciar negativamente por el ambiente de temor y espanto que se mueve en tu rededor; 3) No te dejes encarcelar por los sentimientos de inferioridad ni de indignidad.
En esta Lección proseguiremos adelante en el desarrollo de los otros principios. Así que, presta atención y toma las armas de la justicia y la sabiduría que te prepararán, sin duda alguna, para derribar a los gigantes que se han apostado en tu mente. Alístate para darle frente a todo aquello que tiende a ridiculizarte y empequeñecerte.
Si quieres vencer a tu gigante:
4. No te dejes intimidar por las maldiciones y ofensas que lancen contra ti aquellos que sólo se ocupan en detener el avance de los hombres comprometidos con la vida:
Injuriar, maldecir y difamar es el arma perversa de los antagonistas (1 Samuel 17: 43-44). Sin embargo, sus efectos dañinos y destructores sólo se logran manifestar cuando el agredido los acepta y les da lugar en su corazón. De otra forma, no tendrían ningún efecto negativo en el ofendido. Dependerá, entonces, de la actitud que asuma la persona que los recibe. Tus cinco sentidos deben ser educados para generar vida, no confusión y caos. Por lo tanto, esfuérzate por filtrar para bien todo aquello que oyes, ves, sientes y percibes. No alimentes tu mente con falsas concepciones de temor y espanto. Sé dueño de tus inclinaciones y ponlas al servicio del Eterno.
Si quieres vencer a tu gigante:
5. No lo enfrentes con “métodos” o “formas” que caen dentro de un marco puramente especulativo y que científicamente no han sido aceptados ni comprobados:
Involucrarse en movimientos y grupos seudos religiosos (con el fin de darle solución a un conflicto o problema), cuyas prácticas de sanación (del alma y del cuerpo) son incongruentes con la verdad de la Torá y la objetividad científica, resultará perjudicial, sin duda alguna, para el equilibrio anímico-sentimental del alma de la persona. En caso que tú requieras ayuda, verifica que sea profesional, objetiva y científicamente comprobada. No entregues tu vida ni tu porvenir a los atracadores de la “fe”, esos que negocian con el dolor ajeno y andan por la vida llevando más dolor, más enfermedad y más sufrimiento.
¿Qué uso David para derrotar al gigante? Un cayado, cinco piedras lisas extraídas del arroyo, un zurrón (saco pastoril) y una honda (tira de cuero). Como puedes observar, elementos sencillos, prácticos, confiables, experimentalmente comprobados. Recuerden que David ya había utilizado dichos elementos para matar osos, leones y fieras que querían devorar los rebaños que estaban bajo su cuidado (Véase 1 Samuel 17: 34-37). El joven David estaba ducho en el uso eficaz y eficiente de estas armas.
Mi consejo, como conocedor de primera mano de las operaciones de estos grupos, es que no te inmiscuyas en las mentiras que propagan los “milagreros” y “sanadores”, y esto, aunque aparenten ser “muy sabios”, “buena gentes”, o “sinceros”. No compliques las cosas, sé práctico y entendido. Usa tu sentido común, eso solucionará, por lo menos, el 50% del problema que te golpea.
Si quieres vencer a tu gigante:
6. Desarrolla, ante todo: confianza, seguridad y firmeza del carácter:
Mantener la calma, creer que todo saldrá bien y actuar con estrategias, orientadas por la razón y las ganas de vencer, hará posible el debilitamiento y posterior derrumbe de ese gigante que hoy te desafía. El mismo Creador vendrá a tu ayuda, y asumirá como suya tu batalla (Véase 1 Samuel 17: 47ª). Esto activará todo tu potencial que está dormido en tu interior. El temor y la amedrentación huirán de tu mente. Comenzarás a ver senderos (respuestas) donde sólo había oscuridad y caos. Inicialmente será como un rayo de luz que te indicará el camino que debes seguir, y luego se irá transformando en una llama viva, que iluminará tu camino para que no te pierdas ni extravías tus pasos.
Si quieres vencer a tu gigante:
7. Ven a la línea de batalla, no postergues más tu liberación:
Date prisa y no evadas tu compromiso con tu porvenir. No le des más vueltas al asunto. Tu lugar está en la línea de batalla, y no en el campamento de los incrédulos, llorando con ellos tu lástima y resignándote a morir en el conflicto (Véase 1 Samuel 17: 48). Correr a la línea de batalla implica hacerle frente al enemigo. Enfrenta ya esa realidad conflictiva que te tiene paralizado. Tarde o temprano deberás verte cara a cara con el Goliat de tu vida. ¿Seguirás llorando tu lástima en el valle de la derrota? Pero recuerda esto: Cada desafío del camino de la vida es una oportunidad para ser promovido y trascender. Antes de avanzar a un grado mayor en un Colegio, la regla básica es superar cada prueba, cada examen o evaluación que la cátedra impone, que siempre son vistos como “desafíos” para los alumnos. Así sucede con los desafíos propios de la vida. Deben ser vistos como exámenes, evaluaciones, prácticas que requieren ser superadas, para lograr, de esta manera, promoción, ascenso y trascendencia.
Lo que ayer te desafiaba, finalmente se transformará en tu más grande trofeo:
Así fue para David (Véase 1 Samuel 17: 54-57), así ha sido para los hombres y mujeres que han influido positivamente en la historia de la humanidad, y así será para ti. ¿Por qué piensas que puede ser diferente para ti? Tu más grande debilidad llegará a ser tu más grande fortaleza. Tu mayor angustia podrá ser cambiada en tu más grande motivo de alegría. ¿Cómo entró David a Jerusalén? Con la cabeza del Gigante en su mano. Todo el pueblo alabó a este valiente mancebo de Israel y le dio el debido reconocimiento. Lo que comenzó como una situación con perfil de “no solucionable”, terminó siendo una gran victoria, no sólo para un hombre, sino para todo el ejército de Israel.
Alfredo Zambrano García
Fulvida Táchira – Venezuela
Queridos hermanos noájidas, como ya hemos publicado el primer colegio noájida del mundo (del que tengamos conocimiento al menos) está en peligro de ser cerrado.
El mismo se encuentra en la ciudad de Viña del Mar, Chile, y cuenta con un gran número de estudiantes.
Es un hermoso trabajo y un gran proyecto para el futuro.
Pero, los enemigos del Eterno están trabando el desarrollo del colegio, ponen impedimentos, y encontraron la forma de que por motivos económicos el colegio cierre.
Así pues, precisamos unos 40.000 (cuarenta mil) dólares para mantenerlo abierto y que sea un motor de luz y bendición, no solo para los que concurren a él, sino para todos los noájidas de la región y el mundo.
Sabemos que es mucho dinero, pero confiamos en el Eterno y sabemos de la buena disposición de las personas de bien del mundo.
Entonces, les propongo que además de buscar en el plano material y social los fondos económicos, unámonos en plegaria ante el Eterno, para que desde Arriba surja la solución.
Recitemos los tres salmos que citaré a continuación, con todo fervor, desde el corazón, con la conciencia centrada en que el Eterno oiga nuestros ruegos y nos bendiga con una solución favorable.
Mientras tanto, sigamos haciendo lo posible no solamente para el colegio, sino para sostener a FULVIDA y para expandir el mensaje de vida y luz del noajísmo.
"[Al músico principal. Salmo de David] ¿Hasta cuándo, oh Eterno? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí?
¿Hasta cuándo tendré conflicto en mi alma, y todo el día angustia en mi corazón? ¿Hasta cuándo será enaltecido mi enemigo sobre mí?
¡Mira; respóndeme, oh Eterno, Elokim mío! Alumbra mis ojos para que no duerma de muerte.
No sea que mi enemigo diga: ‘¡Lo vencí!’ Mis enemigos se alegrarán, si yo resbalo.
Pero yo confío en Tu misericordia; mi corazón se alegra en Tu salvación.
Cantaré al Eterno, porque me ha colmado de bien."
(Tehilim / Salmos 13:1-6)" [Salmo. Cántico para el día de shabbat]
Bueno es alabar al Eterno, cantar salmos a Tu nombre, oh Altísimo.
Bueno es anunciar por la mañana Tu misericordia y Tu verdad en las noches, con el arpa de diez cuerdas y la lira, con el tono suave del arpa.
Ciertamente me has alegrado, oh Eterno, con Tus hechos, grito de gozo por las obras de Tus manos.
¡Cuán grandes son Tus obras, oh Eterno! Muy profundos son Tus pensamientos.
El hombre necio no sabe, y el insensato no entiende esto:
que los impíos brotan como la hierba, y que todos los que hacen engaños florecen para ser destruidos para siempre.
Pero tú, oh Eterno, para siempre eres el Altísimo.
Porque he aquí Tus enemigos, oh Eterno; porque he aquí, Tus enemigos perecerán. Serán dispersados todos los engañadores.
Pero Tú enaltecerás mi poder como el de un toro salvaje, y sobre mí verterás aceite fresco.
Mis ojos mirarán sobre mis enemigos; mis oídos oirán de los malhechores que se levantaron contra mí.
El justo florecerá como la palmera; crecerá alto como el cedro en el Líbano.
Plantados estarán en la casa del Eterno; florecerán en los atrios de nuestro Elokim.
Aun en la vejez fructificarán. Estarán llenos de savia y frondosos, para anunciar que el Eterno, Mi roca, es recto, y que en Él no hay injusticia."
(Tehilim / Salmos 92:1-16)"Amo al Eterno, pues ha escuchado mi voz y mis súplicas, porque ha inclinado a mí Su oído. Por tanto, Le invocaré todos mis días.
Me rodearon las ataduras de la muerte; me encontraron las angustias del Sheol. En angustia y en dolor me encontraba.
Entonces invoqué el nombre del Eterno, diciendo: ‘¡Libra, oh Eterno, mi vida!’
Clemente y justo es el Eterno; sí, misericordioso es nuestro Elokim.
El Eterno guarda a los ingenuos; estaba yo postrado, y Él me salvó.
Vuelve, oh alma mía, a tu reposo, porque el Eterno te ha favorecido.
Porque Tú has librado mi vida de la muerte, mis ojos de las lágrimas y mis pies de la caída.
Andaré delante del Eterno en la tierra de los vivientes.
Creí; por tanto, hablé, estando afligido en gran manera.
Y dije en mi apresuramiento: ‘Todo hombre es mentiroso.’
¿Qué daré al Eterno por todas sus bendiciones para conmigo?
Alzaré la copa de la salvación e invocaré el nombre del Eterno.
Cumpliré mis votos al Eterno delante de todo su pueblo.
Estimada es en los ojos del Eterno la muerte de sus fieles.
Escúchame, oh Eterno, porque yo soy Tu siervo; soy Tu siervo, hijo de Tu sierva. Tú rompiste mis cadenas.
Te ofreceré sacrificio de acción de gracias e invocaré el nombre del Eterno.
Cumpliré mis votos al Eterno delante de todo su pueblo, en los atrios de la casa del Eterno, en medio de ti, oh Ierushalaim [Jerusalén]. ¡Alaben al Eterno [Aleluia]!"
(Tehilim / Salmos 116:1-19)
Veo con mucha preocupación el destino de los pueblos del lejano oriente; es una constante ver noticias y saber de hechos que ocurren en los países del Asia Oriental que son graves y atentan contra la salud general de la humanidad.
En el plano físico dos de los grandes ríos de china están en peligro de morir, de secarse, de dejar de contribuir con toda esa agua dulce tan necesaria para la vida, inmensas extensiones sembradas han hecho perder enormes áreas de bosques, proveedores de oxígeno, grandes fábricas e industrias contaminantes se localizan en las márgenes de los ríos y en las costas del mar expidiendo gases tóxicos y vertiendo en las aguas innumerables desechos nocivos, poderosos complejos gasíferos y minas de carbón han destruido con vida silvestre y socavan la tierra, degenerando en una futura improductividad de esos terrenos.
En el plano social vemos como la sociedad china se ve sometida a una incontrolable superpoblación, a una incontenible ola de suicidios y a una inevitable trata y tráfico de personas con el fin de liberar la carga del estado. El gobierno chino es duro, dictatorial, represor, expansionista, el mercado chino es una amenaza para el resto del mundo, la mano de obra casi gratuita abarata los costos y el exceso de producción diversifica la economía china, haciendo cada vez más grande el mercado de exportaciones y presionando más a los países socios comerciales de esta potencia devastadora.
En el plano intelectual puede notarse que la sociedad china esta limitada; limitada a creer en el comunismo como forma de auto-gobernarse, limitada a trabajar y a no dedicarse a un estudio serio de las cosas. En china se aprecia mucho la ecuación en los primeros años de vida, pero ¿Cuál es la educación que les dan a los niños? ¿Deberíamos llamar educación a la ideologización? En fin…
En el plano espiritual no hace falta que mencione el vacío inmenso que hay en esa sociedad, profesando el ateísmo un 49 % y el resto dedicándose a deificar cualquier cosa que sea creación…
Si hablamos de Japón tenemos que están limitados de espacio, que sufren una ola de suicidios también, una creciente e indetenible violencia en muchos sentidos. Aunque el gobierno de Japón es democrático no deja de ser éste tan perjudicial como el chino, pues el gobierno nipón es excesivamente abierto, desinteresado en propugnar los valores, pero muy interesado en el expansionismo comercial y hasta territorial.
En conclusión, el continente asiático tiene países extremadamente pobres como Vietnam, Laos, Sri Lanka, India y China, aunque éstos sean exportadores de mucha manufactura, textiles y maquinaria, y tiene países ricos, en extremo como Corea del sur, Japón y Taiwán, aunque éstos vayan rumbo a una total y absoluta pérdida de sus valores.
¿Hacia dónde va este continente?
¿Qué destino les está deparado?
D’ quiera que estas naciones rectifiquen pronto y retornen a la senda de la justicia, la verdad y la paz.
No hay nada más peligroso que coartar la libertad de expresión; es un mal tan grande que sus consecuencias pueden ser mortales.
Es cierto que los excesos en los medios audiovisuales estos días son catastróficos también, vemos en la televisión sobretodo, una desmedida propaganda a la sexualidad desbocada, a la violencia, al consumismo, a la generación de necesidades innecesarias; observamos como la mediocridad en los medios audiovisuales, en especial la TV, hace alarde de un vacío sonso, falto de gracia, carente de todo sentido de trascendencia.
No se puede seguir permitiendo que los medios masivos de información y difusión continúen en esta espiral que cada vez más hunde a las sociedades en el más oscuro de los errores morales y éticos. Pero el daño no se soluciona eliminando al medio, que es tan imprescindible, sino siendo firmes, objetivos y seguros de lo que se quiere, de la televisión que beneficia, de los medios audiovisuales que producen esquemas de sentido trascendentes en las sociedades y las hacen crecer. La ley es el fundamento de un Estado sólido, y la justicia es su guardián; si los legisladores no saben qué es lo mejor y los magistrados no tienen la fuerza moral para hacer cumplir ley, el Estado se corrompe, los esquemas se pervierten y la anarquía impera.
No podemos esperar que toda la empresa privada sea consciente y difunda e informe a través de sus medios con discreción, ética y buenas intenciones; eso sería como esperar que un niño de tres años deje de pensar en si mismo y supere el egoísmo propio de esta edad antes del tiempo. Debe existir una autoridad que sea ejercida desde la cúpula gubernamental que tenga claro el camino y posea el suficiente criterio para desechar lo malo y elegir lo bueno; pero también es necesario un usuario consciente, participativo, beligerante (en el buen sentido de la palabra) que comprenda la ley, sobretodo su esencia, que aplique a la vida cotidiana los principios emanados de esta ley, que los sienta como suyos, como parte indispensable de su vida, de su desarrollo, que se sienta, en pocas palabras, no un individuo dentro de un pueblo, sino como un átomo que conforma la materia llamada sociedad.
Aún falta mucho tiempo para que logremos una prensa seria, unos medios de información y difusión respetuosos de los valores propios que les atañen; ya vemos como en el camino vamos cometiendo errores, y pareciera que vamos hundiéndonos, pero estoy seguro que pronto habrá luz que permita ver un horizonte próspero y abundante en valores.
Noájida
Confía solamente en el Eterno, que es el Padre celestial, que es el Creador del universo, que es el Dios Uno y Único, que es el Dios que liberó a los Hijos de Israel, que es el Dios que les entregó directamente a todo el Pueblo judío presente Su perfecta e inmutable Torá. No pone su fe en dioses humanos, ni en dioses ajenos, sino que solamente en Aquel que se manifestó a ciencia cierta delante de TODO el pueblo judío.
Se rige por un simple y estricto código que se basa en la justicia, la bondad, la verdad y la fidelidad. Acata las disposiciones de sus líderes, siempre y cuando no contradigan el código de conducta que proviene de la Torá, tal cual es iluminada por los Sabios verdaderos de Israel. No acepta como verdad espiritual ninguna palabra de otros libros que se hacen llamar «sagrados» y que son base de religiones del mundo.
Se concentra en la vida. Trabaja con libertad, ánimo, coraje, valentía, alegría en la construcción de Este Mundo, con la confianza de que está sembrando los buenos frutos que recogerá en el Mundo Venidero. La muerte es un hecho ineludible al final del camino, por el cual no hay que preocuparse, ya que el Padre celestial le ha dado la vida para que la desarrolle a plenitud. Por tanto, no teme a la muerte, no ronda en su mente todo el tiempo la idea de la muerte, no se dedica a «salvarse», no indaga con ansiedad y angustia al respecto de «cielos e infiernos», pues tiene certeza absoluta de que su cielo y su infierno dependen de sus obras en Este Mundo. Vive a plenitud, en la medida de sus posibilidades, pues confía en la Justicia y Amor del Padre celestial.
Escoge el camino por el cual andará de acuerdo a su libre albedrío, pues confía en que Dios le ha provisto de la capacidad para tomar buenas decisiones. Para actuar con corrección debe estudiar de buenas fuentes y analizar con madurez, para aprender cada vez mejor lo que es correcto. NO pasa su vida aterrorizado por el futuro. Sus líderes NO le amenazan constantemente con el infierno, castigos, tormentos, maldiciones, y otros sufrimientos inconsolables. NO achaca todos sus males a satanases y demonios, a enemigos materiales o etéreos. Sus maestros y líderes NO le exigen total sumisión ni obediencia ciega.
Por el contrario, el noájida puede y debe dialogar, preguntar, criticar con mesura, exponer sus puntos de vista, votar en las decisiones trascendentes de su comunidad, etc.
Colabora maduramente con sus hermanos judíos, pues entiende que cada uno tiene su lugar y su rol. El Eterno ha escogido a Israel para ser la nación santa, el reino de sacerdotes. Por tanto, no ataca a los judíos, no los aborrece, no los quiere suplantar, no quiere robarles su identidad única.
Con sus hermanos noájidas es solidario, colaborador, un amigo fiel, un compañero que no hace depender su ayuda o cariño de las creencias del otro.
Respeto y admisión del otro son sus patrones normales de conducta.
Predican con su acción acorde a los preceptos que Dios ha dado. NO predican con palabras altisonantes, incoherentes, carentes de fundamentos. NO envuelven con palabras complejas, que finalmente no quieren decir nada. JAMÁS amenazan, acusan, agreden, confunden, demandan furiosamente, ni apelan al sentimentalismo barato en procura de manipular a su audiencia. No dan dádivas o caridad como mecanismo para atraer adeptos, ni abusan del prójimo.
Su vida es simple, equilibrada, armoniosa. No rehuyen de los placeres, ni tampoco de sus deberes. Son responsables y comprometidos con la realidad. Carecen de rituales obsesivos, o de actos supersticiosos, o de objetos fetiches.
No tienen dogmas ni doctrinas irracionales. Están libres de doctrinas faltas de racionalidad o carentes de valor espiritual. NO repiten lemas huecos, ni consignas de los jefes, ni frases rebuscadas pero ridículas, ni versículos fuera de contexto. Sino que desarrollan su intelecto, canalizan sus emociones, cultivan su espíritu en todos los planos que Dios nos ha dado.
Sus líderes viven de su trabajo honrado. No parasitan a los miembros de su comunidad, no amenazan con el infierno para conseguir «diezmos» u otras dádivas.
En caso de recibir sueldo de su comunidad, es un ingreso justo, de acuerdo a la tarea que realiza y al contrato laboral que la comunidad acepta abonar, tal como se paga a un secretario, a un gerente, a limpiador, etc.
La familia es un pilar fundamental. El respeto y aprecio por el cónyuge, el esmero por criar correctamente a los hijos, la unidad familiar, etc. No se abandona a la familia para correr a la «iglesia», ya que el centro de la comunidad noájica es la familia.
No acepta la discriminación negativa, el sexismo, los abusos de poder, las teocracias, el totalitarismo, la corrupción, ni cualquier otra manifestación del extravío del individuo y/o la sociedad. Dentro de la legalidad lucha para establecer justicia.
Son ciudadanos respetuosos y leales de su patria, pues es su deber espiritual participar de la vida pública para que la justicia sea establecida y sostenida.
Te ruego que hagas un ejercicio interesante.
Con total honestidad elabora una lista paralela a la que te he presentado, pero que en lugar de reflejar a un típico noájida, defina a un típico seguidor de Jesús, en cualquiera de sus miles de vertientes (católico, evangélico, bautista, falso judío mesiánico, falso judío netzarita, trinitario, unitario, etc.).
Luego, si lo deseas coméntame lo que has descubierto.
¿Te parece?