Ah, los caminos del Eterno.
Algunos sufren,
los otros también – pero no se dan cuenta.
¿Quién está en mejor situación, los primeros o los segundos?
Ah, los caminos del Eterno.
Algunos sufren,
los otros también – pero no se dan cuenta.
¿Quién está en mejor situación, los primeros o los segundos?
Si tu motor es el miedo, estás yendo rumbo a lo que temes.
Piensa positivo, para que se realice positivo.
«El miedo que presentía me ha sobrevenido; lo que me daba terror me ha acontecido.»
(Iyov / Job 3:24)
azul0305 nos consulta:
1- Los milagros existen?
2- Se pueden pedir milagros?
3- Por qué D-S permite el sufrimiento físico?
4- Antes tenía respuestas, ahora me quedé sin ellas.
azul0305
César Oncoy Bustamante nos consulta:
Shalom, estimado moré.
Hace tiempo no encontraba mi poemario en el computador, y lo acabo de encontrar, pero he visto que hay poemas muy melancólicos y hasta \»existencialistas\».
Mi pregunta es concreta, es válido que un literato noájida escriba poemas melancólicos, ¿no es una especie de apología a deprimir al lector y en el peor de los casos una apología a la muerte?…
César, Oncoy Bustamante, 19, estudiante, Lima, Perú
Hola a todos mis amigos noagidas un saludo de hermandad, estoy en recuperación hoy el medico me indicó sentarme en la silla de ruedas lo cual considero un avance en mi recuperación y por ello les estoy escribiendo, ruego al Eterno por todos ustedes y por mi salud, saludos mi querido Yehuda ya que su solidaridad ha sido muy importante para mi familia y para mi. Shalom para todos y gracias por sus plegarias.
Apreciados señores.
Solicito amablemente su guía en cuanto al problema que desde hace algún tiempo he tratado de enfrentar solo, pero que leyendo su artículos me doy cuenta que lo enfrente mal.
Soy casado hace varios años, la sexualidad con mi esposa es casi inexistente, sin embargo la amo y no quiero separarme de ella, porque eso significa perder a mi hija y echar a la basura nuestros sueños y lo que hemos construido juntos.
En sus artículos dicen que la masturbación es pecado y que por ende se debe evitar y lo entiendo, aún así he preferido hacerlo en lugar de ir a buscar otras mujeres o tener que discutir con mi esposa sobre el tema (como cientos de veces ha sucedido).
He orado, pidiendo al Eterno me ayude con esto, pero tal vez en mi desesperación no he podido ver Su respuesta.
Agradezco su amable orientación.
Roger C., Colombia.
Hace unos días me invitaron a brindar con vino en una boda.
Yo no tomo alcohol, a lo sumo una pequeña cantidad de vino para bendecir el shabbat cada viernes.
Al poco rato de tomar esa copa de brindis, sentía una extraña sensación. Me pesaba la cabeza, los pensamientos se me atoraban, la vista divagaba, la lengua se trababa, me sentía mal, como perdido dentro de mí mismo.
Pocos minutos más tarde, el mundo pareció detenerse de sus mareadas volteretas, retomar su curso, aquietarse, aunque la cabeza me giraba todavía un poco.
Los que tienen «cultura» alcohólica se reirán de mí, supongo, y no me pesa en lo más mínimo.
Prefiero ser abstemio a depender de una sustancia.
Pero, el mareo etílico me dio para pensar una analogía.
Cuando actuamos maliciosamente, de forma egoísta, injusta, excediendo los límites del bien y la justicia; cuando atropellamos los derechos del otro, cuando nos importa un bledo el recto camino de los mandamientos, es como si estuviéramos atragantados con alcohol.
Por supuesto que no es «satanás», o alguna mitológica fuerza la que nos lleva a cometer desmanes.
Sino que nos sometemos, nos dejamos mandar por nuestro EGO, alias el Ietzer haRa, alias la inclinación a lo negativo.
El tóxico manantial del EGO nos atrofia el pensamiento, nos abotarga el corazón, nos hace decir lo infausto, nos muestra fantasías, nos alela de nuestra esencia, embota nuestros sentidos, cancela nuestra inteligencia, nos enajena (hace ajenos a nosotros mismos).
La solución sería detener el beberaje de EGO, reemplazarlo con estudio de las partes permitidas de Torá, con buenas acciones, con nobleza, con generosidad, con perdón y arrepentimiento.
Así pues, la idea es que si te empiezas a sentir invadido por ese extraño desasosiego de las emociones viles, silencia tus palabras, para no caer en error. Detén tu marcha, pues probablemente te diriges a un puerto cochambroso.
Respira, toma un descanso, apártate de lo que te seduce para el mal, busca el bien que puedas realizar.
No dejes que el EGO te mande, pues es un pésimo amo, y peor esclavo.
Recién un amigo me mostro este video, que me pareció genial y lo quiero compartir, puesto que tiene pequeñas grandes enseñanzas, muchas de ellas coinciden con lo que nos manifiesta siempre el Moré.
Para que aprendamos todos.Shalom.
Probablemente ustedes no lo sepan, pero en la última semana hemos salvado al menos una vida.
Una persona no quería seguir con vida, pero le dimos ánimo para fortalecerla.
Al día de hoy, la persona está más estable, con proyectos, ganas de vivir, sabiendo que la vida tiene dificultades pero pueden ser superadas.
No sabemos a cuántos hemos salvado, ni a cuántos seguiremos salvando.
Salvación en Este Mundo y por supuesto que para la Eternidad.
Por eso, cada día hagamos nuestra pequeña parte, que tal vez estamos haciendo un cambio inmenso en el balance positivo del mundo.
A seguir construyendo Shalom.
En numerosas ocasiones y a lo largo de nuestra vida estamos expuestos a situaciones que nos tienden a enfadar, nos produce enojo e ira, nos hace discutir, pelear y hasta (Di-s libre) hacer cosas peores.
Pero tales cosas pueden ser controladas por nosotros; por ejemplo, el serenarse, tomar con calma las situaciones más adversas, no responder con agresión a una agresión, etc.
Pero podemos aprenderlo de varias formas, yo encontré una pensando en las plantas en general:
Al realizarse el proceso de fotosíntesis, la hoja toma del entorno lo necesario para obtener el alimento para crecimiento y desarrollo. Toma la luz del sol, también el dióxido de carbono (nocivo para nosotros), y el agua y sales minerales que la raíz toma de la tierra al ser regada, y la conduce por el tallo a la hoja.
En la hoja se realiza el proceso transformando estos agentes externos en materia orgánica necesaria para crecimiento y desarrollo de toda la planta. Además de esto, la hoja libera oxígeno, que es lo que necesitamos para respirar, purificando así el ambiente que la rodea. Vemos de paso, la importancia de las plantas, y de la Creación toda.
Nosotros también podemos hacer algo parecido, cuando nos llegan los elementos »nocivos» como el dióxido de carbono (las discusiones, situaciones de enfado, agresiones, etc.), tomarlos como las plantas lo hacen, pero también tomando alimento de nuestras raíces espirituales de noajismo, y tomando la luz que nos provee el Eterno con su amor y sabiduría infinitos; para luego emanar »oxígeno» o »aire puro», responder al mal de la manera más sabia y serena, para evitar caer en el enojo o ensuciar nuestra alma respondiendo agresión con agresión, y vivir tranquilos.
Hagamos pues como las plantas. Shalom.
Sebastián.