Archivo de la categoría: fiesta

Resp. 63 – ¿Januca para noájidas?

Shalom, moré Ribco:
aprovechando este correo: Yo soy noájida y estoy empapándome de este camino de vida y quisiera saber si los noájidas podemos celebrar la janucá; si es así, de qué forma, pues supongo que no podríamos hacerlo de la misma forma que ustedes.
Y bueno, yo sé que dije que eran dos preguntas pero me gustaría saber qué celebraciones o conmemoraciones podemos llevar a cabo al igual que nuestros hermanos judíos (y de qué forma ¿verdad)
Le agradezco enormemente su apoyo a todos los que, con el corazón en la mano, le piden su consejo
SALUDOS
Abraham Muñoz

Seguir leyendo Resp. 63 – ¿Januca para noájidas?

¿Fiesta de Luces Noajida?

Januca es el tiempo en el cual nuestros hermanos judíos recuerdan como hombres judíos valerosos, seguidos de una parte del pueblo, fiel a D»s, derrotó al imperio del mal, recuerdan como la luz que irradiaron los macabeos y sus seguidores venció a la oscuridad imperante.

Recuerdan, cada vez que sus niños juegan con el sevivón, que un "Gran Milagro ocurrió allá" (En Israel), recuerdan cada vez que cantan "Maoz Tzur" que Su D»s los salva, que está con ellos, que los proteje, que los defiende; recuerdan al encender cada luz durante ocho días que el valor y el coraje de los que siguen la Justicia y la Rectitud valen la pena, porque obran milagros.

En estas fechas los noajidas podemos aprender de los judíos que la Luz que irradia la persona es la que realmente ilumina las largas y oscuras noches del invierno boreal y no las que se colocan rebeldemente en arbolitos ó simbolos idolátricos, podemos aprender que el tiempo no es para perderlo en vanidades, sino para invertirlo en el crecimiento constante de nuestra personalidad; la fiesta de las luminarias debe ser para los noajidas referencia de lo que fue la resistencia de aquellos que, viendo la decadencia de parte de sus coterráneos, no desmayaron, y lucharon hasta conseguir expandir la Verdad, la Luz.

Este tiempo debe servirnos para alumbrar con verdadera luz a quienes aún permanecen inmersos en la terrible oscuridad que produce la idolatría, llevando, con nuestra actitud, el mensaje que D»s ha plasmado en Su Torah, para todas las naciones. 

Resp. 61 – ¿Regalos navideños?

Hola Yehuda,
Paz. Quisiera saber qué hago si una persona me da un regalo de «navidad».
¿Debo rechazarlo, aún si el regalo fue comprado con la mejor intención y además lo necesito?
Andrés Mendoza
Venezuela

Seguir leyendo Resp. 61 – ¿Regalos navideños?

Resp. 60 – Saludos en estas fechas

Shalom, amigo Yehuda gracias por su interes en saber de este su servidor…
Aprobechando una pregunta: que have o que dice usted cuando alguien lo be en la calle en estas fechas y le dicen «»feliz navidad o feliz ano nuevo»» (sin saber que usted no selebra esos dias) ?les contesta lo mismo o se les ignora y se cambia de tema? Se lo pregunto ya que se que todo mundo me lo ba a decear ahora que este en Mexico y aunque no soy Judio pues yo no celebro esas fechas tampoco.
Gracias por su tiempo y hasta pronto
feliz Januca.
Salvador Castillo
EUA

Seguir leyendo Resp. 60 – Saludos en estas fechas

Fábula de la liebre y la tortuga (versión actualizada)

 

Interpretación (Marcelo-Norma)

Cuando dejamos de competir contra un rival y comenzamos a competir contra
una situación, complementamos capacidades, compensamos defectos, potenciamos
nuestros recursos y obtenemos mejores resultados

*¿Recuerda la fábula? *

Una tortuga y una liebre siempre discutían sobre quién era más rápida. Para
dirimir el argumento, decidieron correr una carrera. Eligieron una ruta y
comenzaron la competencia. La liebre arrancó a toda velocidad y corrió
enérgicamente durante algún tiempo. Luego, al ver que llevaba mucha ventaja,
decidió sentarse bajo un árbol para descansar un rato, recuperar fuerzas y
luego continuar su marcha. Pero pronto se durmió. La tortuga, que andaba con
paso lento, la alcanzó, la superó y terminó primera, declarándose vencedora
indiscutible.

Moraleja:   *Nunca se debe dar algo por hecho antes de realizarlo

Proverbios (Mishle) XXVIII – 26. El que confía en su propio corazón es un
insensato; pero el que procede sabiamente será librado.

Pero la historia no termina aquí: Seguir leyendo Fábula de la liebre y la tortuga (versión actualizada)

Los pocos, vencedores

En el calendario de la Santidad, en estos dí­­as estamos celebrando la festividad de Januca.
No les contaré aquí­­ toda la historia, sino solamente un aspecto central, que apunta al valor del noájida en este mundo de sombras.

Debes saber que hace como 2200 años los helenistas habí­­an ocupado la tierra de Santidad, y su emperador habí­­a ordenado que la nación santa no estudiara Torá, que no practicará la circuncisión a sus hijos, que no respetara los tiempos sagrados. Muchas y muy pesadas cadenas y prohibiciones el emperador impuso sobre los judí­­os y el judaí­­smo.
Y para nuestro dolor, muchos de nuestros hermanos prefirieron seguir detrás de la corriente, no oponerse, ser uno más de la masa, una oveja detrás de ese pastor atontado.
Así­­ pues, la noche estaba tragándose la Luz de la Vida, de la Santidad.
Las ideas extrañas, los dogmas ajenos, las prácticas religiosas foráneas, todo lo que era oscuridad estaba de moda, apagando con su poderosa y voraz fuerza la luminosidad de la Vida.

Pero, un pequeñí­­simo grupo de fieles, una débil y reducida comunidad de personas comprometidas con la Verdad no se desanimaron. Ellos no dejaron caer sus brazos. No se convencieron de que su causa estaba perdida. ¡No comparaban números, ni fuerzas, sino a Quién estaban sirviendo!
Ellos sacaban un poder inmenso de su confianza pura en el Padre celestial.
Ellos se pusieron a trabajar, a pesar de los riesgos y peligros, sin dar excusas.
Ellos lucharon con integridad, sin justificarse detrás de su debilidad, de su poco número, de los inconvenientes, de la fea cara que le poní­­an los demás.
Ellos eran fuertes, a pesar de su escaso poder fí­­sico, puesto que el Eterno estaba con ellos.
Ellos lucharon, sufrieron, combatieron, cayeron pero se levantaron y al final triunfaron.

Ellos fueron los que trajeron una pequeña lamparita, de la cual se encendió otra y otra y otra, y pronto el mundo estaba poblado por su Luz, por sus ideales por su creencia.

Ellos son héroes, más que vencedores.
Ellos son recordados hoy en dí­­a, mientras los que eran inmensos enemigos yacen en el más horrendo olvido.
Ellos, nuestros héroes que no se escudaron en su debilidad, aún permanecen con vida, en anto la Luz que ellos ayudaron a encender sigue prendida.

Esta es la moraleja, mi querido hermano noájida.
Quizás te sientes solo. Quizás conoces a pocos noájidas que trabajen junto a ti. Quizás sientes la humillación o la persecución de los enemigos, de los misioneros de la oscuridad. Quizás creas que eres un incomprendido. Quizás piensas que no vale la pena levantarte y luchar para difundir el mensaje de Vida y Luz del noají­­smo. Quizás te sientes desanimado. Quizás das mil excusas para eludir tu responsabilidad. Pero debes despertar, porque la Luz que has recibido está en tu interior, y con ella tienes el poder de despertar a otros y hacer que la Luz ilumine hasta el último rincón del mundo.

El imperio del mal es grande, pero está empezando a caer.
Se resquebraja lentamente, porque somos pocos los luchadores de la Luz. Pero no nos detenemos y confiamos en el Todopoderoso, que combate nuestras luchas, que son Sus luchas.
Levántate, despierta, ayuda a tu prójimo a incorporarse a las filas de la Luz.
No temas y sé valiente.
Ven, participa.
Fórmate a nuestro lado, aquí­­ en FULVIDA, o en cualquier otro centro noájida verdadero, para que podamos ir encendiendo más y más antorchas de liberación.

La salvación está en tu interior, déjala manifestarse.
Confí­­a en Dios y siembra.

Feliz fiesta de la Luces.

Fábula de la Liebre y la Tortuga (versión actualizada)

Fábula de la liebre y la tortuga (versión actualizada)

 
Fuente Newsletter Eduardo Press Consultores
Interpretación (Marcelo-Norma)
 
Cuando dejamos de competir contra un rival y comenzamos a competir contra una situación, complementamos capacidades, compensamos defectos, potenciamos nuestros recursos y obtenemos mejores resultados
 
¿Recuerda la fábula?
 
Una tortuga y una liebre siempre discutían sobre quién era más rápida. Para dirimir el argumento, decidieron correr una carrera. Eligieron una ruta y comenzaron la competencia. La liebre arrancó a toda velocidad y corrió enérgicamente durante algún tiempo. Luego, al ver que llevaba mucha ventaja, decidió sentarse bajo un árbol para descansar un rato, recuperar fuerzas y luego continuar su marcha. Pero pronto se durmió. La tortuga, que andaba con paso lento, la alcanzó, la superó y terminó primera, declarándose vencedora indiscutible.
Moraleja:  Nunca se debe dar algo por hecho antes de realizarlo  
 
Proverbios (Mishle) XXVIII – 26. El que confía en su propio corazón es un insensato; pero el que procede sabiamente será librado.
 

Guer ve-toshav

Según una antigua tradición, Sara no soportó la emoción que le produjo el drama del sacrificio de Isaac. A pesar de que su hijo no fue ofrendado por una contraorden divina de último momento, la intensa y dramática alteración  que le produjo el episodio, le arrebató la vida.

 

Su esposo, el patriarca Abrahám, tuvo que encontrar un lugar digno para su sepultura. Hizo contacto con los Hititas que vivían en la región y ofreció negociar para adquirir una propiedad. El pago consistió en cuatrocientas monedas de plata. Aunque este hecho se remonta a más de tres milenios, de cierta manera, el actual Estado de Israel, en su afán por la paz, tuvo que ceder estos terrenos y, según algunos, conmocionó la historia del pueblo judío. Los terrenos adquiridos por Abrahám están situados en Hebrón, ciudad que fue traspasada a los palestinos, siguiendo lo pautado en el acuerdo de Oslo.

 

La Biblia relata que durante la transacción con los Hititas, Abrahám afirma: guer ve-toshav, "soy un extraño y un residente entre ustedes", frase que merece un análisis. A primera vista, Abrahán manifiesta su deseo de asentarse en el lugar, al adquirir una propiedad que demuestra su afecto por la tierra. Su esposa reposará en este lugar, al igual que él después de su muerte. "Soy un extraño", dice Abrahám, pero su deseo es convertirse en un toshav, incorporarse a la sociedad, integrarse. Inmigró para residenciarse. 

 

Es posible que Abrahám estaba proponiendo una alternativa diferente. Desea introducirse a la sociedad, quiere ser un toshav, pero no está dispuesto a renunciar a su condición de guer. Desea absorber las virtudes de la gente del sitio, admira su tenacidad y productividad, pero al mismo tiempo, tiene recuerdos de su lugar de origen, la para aquel entonces era la moderna ciudad de Ur, cuna de una de las más notables civilizaciones de la Antigüedad. Tiene un banco de memoria de su juventud que no está dispuesto a borrar.

 

Ese es el dilema de los inmigrantes de todos los tiempos. El país anfitrión ofrece promesa y futuro, trabajo y desarrollo, oportunidad de crecimiento.

Pero, al mismo tiempo, la persona está afectada por la nostalgia por la patria ancestral, por sus tradiciones y folclore, bailes y cantos, costumbres y comidas. En algunas ocasiones, su lealtad es cuestionada, especialmente cuando la sociedad anfitriona enfrenta dificultades e incertidumbre y no encuentra salida para el dilema y busca un chivo expiatorio, algo o alguien a quien satanizar, para culparlo de los males que la azotan. Hitler lo hizo con los judíos y los gitanos. Stalin identificó a un grupo de médicos y a la burguesía en general. El constante enfrentamiento entre las partes beligerantes en Yugoslavia constituye un ejemplo actual y palpable del mismo síndrome.

 

Se exige a la persona, o al grupo, que escoja entre dos amores que no tienen por qué ser conflictivos, y, en algunos casos, no se admite alternativa alguna, el guer es el culpable. Aunque jure amor por la patria y lo demuestre con un comportamiento cívico ejemplar y hechos concretos que se encarrilan en el desarrollo de la sociedad, la presencia del extraño se vuelve inaceptable, indeseable.

 

¿Cuándo se convierte un guer en un toshav? Existe alguna medida de tiempo, ¿cuántas generaciones tienen que vivir en el entorno para que el extraño sea incorporado a las filas de quienes "pertenecen" ? Los judíos estuvieron residenciados en Polonia durante un milenio consecutivo, sin embargo, muchos continuaban considerándolos bajo el rubro de guer.

 

Tal vez la razón de la actitud que niega "ciudadanía" al extraño se debe a que éste, en muchos casos, no se integra cabalmente a la sociedad circundante. El inmigrante tiene que hacer un mayor esfuerzo para igualar los logros de otros. Compite con mayor intensidad. En muchos casos, el guer insiste en hablar en su hogar el idioma de su lugar de origen. Celebra de otra manera, su religión es generalmente diferente al de la mayoría y toda diferencia produce la sospecha.

 

Esta actitud tiene antecedentes históricos que se remontan a la Antigüedad. El Faraón alegó que los hebreos constituían una amenaza en caso de guerra. ¿Cuál sería su actitud, cuestionó? ¿Acaso los hebreos se convertirían en los aliados del enemigo, constituyendo una quinta columna dentro de Egipto?

 

El mundo ha evolucionado de manera vertiginosa en las últimas décadas. Las amenazas y los peligros anteriores, de carácter local, están cediendo. En nuestro hemisferio, por ejemplo, Perú y Ecuador llegaron a un acuerdo después de muchos años de conflicto de carácter limítrofe. No obstante la persistencia de incógnitas puntuales, los grandes problemas y dilemas son de un orden global. La polución y el calentamiento del globo terrestre afectan a toda la humanidad. El fenómeno del Niño produjo grandes estragos que no tomaron en cuenta la geografía política creada por el hombre.

 

En lugar de insistir en la homogeneidad, se debe destacar que la variedad de conceptos e ideas, la diversidad de opinión, es la que enriquece al hombre. Las soluciones para los problemas globales requieren el aporte de diferentes puntos de vista, con propuestas de soluciones novedosas e ideas originales.

 

La democracia que es auténtica permite que cada individuo se exprese a su manera, se vista y coma, estudie y divierta a su gusto. Propicia y estimula que cada grupo atesore y valore sus propias tradiciones y costumbres. La riqueza humana también está en la variedad. La libertad no es un gobierno agobiante y oprimente, incluso el de la mayoría, el concepto de libertad exige velar por los derechos "naturales" de cada persona para que pueda expresar su concepción, diferente y única, de la sociedad y del universo.

 

En última instancia, Abrahám nos está sugiriendo que toda persona, en su fuero más íntimo, es un guer y un toshav, simultáneamente. Después de cincuenta años de matrimonio, el cónyuge sigue siendo "otra" persona, con angustias y aspiraciones que le son propias, individuales.

 

Formamos parte de una sociedad que nos agrupa y, sin embargo, en muchas oportunidades nos sentimos ajenos al conjunto. Muchos observan el deterioro espiritual que produce la insistencia actual sobre el materialismo, no comparten el obsesivo interés por la adquisición constante de bienes, no se sienten cómodos, perciben que son una especie de guer en esta sociedad de consumo. La música suena con compases extraños.

 

La sociedad puede desarrollarse y crecer espiritualmente cuando sus integrantes pueden compartir y distanciarse, al mismo tiempo. Cuando se celebra y colabora con otros, sin perder el ojo crítico y objetivo que evalúa y emite un juicio.

Reflexión

¿Debería la opinión de los demás afectar negativamente nuestras determinaciones?
Mas de uno alguna vez en la vida ha tenido que vivir una experiencia como esta. Sabemos que no ha sido agradable, especialmente cuando los resultados no han sido los mejores, lo importante es haber aprendido la lección, para que ya no haya una segunda vez. Paso a compartir con ustedes una fábula que nos grafica claramente esta situación, y tres interpretaciones que hicieron sobre la misma.

Fábula del abuelo, el nieto y el burro
Cuento oriental recogido en Castilla

Seguir leyendo Reflexión

Esther Piscore, ¡Son geniales!

MM: La siguiente pieza de este recital es un ritmo latinoamericano, muy festivo, muy animado, que se canta y se baila sobre todo… difundido en países tropicales como: Colombia, Venezuela, República Dominicana; en fin, estamos hablando, ni más ni menos, que del famoso merengue. El merengue…

DR: ¿Cómo le va?

MM: Bienvenido, doctor, me alegro que esté aquí, así podremos compartir esta breve disertación, y esto digo, deja de ser un simple monólogo, para convertirse en un… biólogo. Estamos hablando del merengue…

DR: El merengue es un delicioso postre, un pequeño pastel o pastelito, de forma ovada o avuhevada, que se hace batiendo las claras de huevo a punto de nieve, se lo mezcla con el almíbar, se lo hornea veinte minutos… una vez que está con…

MM: Me temo que ha habido un pequeño malentendido… yo me refería al merengue en tanto danza.

DR: Se baten las claras de huevo a punto de nieve, se lo mezcla con el almíbar y se lo hornea veinte minutos

MM: Danza, danza

DR: Bueno, se puede danzar mientras se hace el batimento, no hay problema…

MM: Por lo tanto déjeme a mí, por lo tanto, le propongo que partamos de un principio…

DR: No se lo puede partir, se desmigaja todo, es un postre seco.

MM: No, que partamos de la Historia. Usted sabe que en la mitología griega, están las musas que propician las Artes; por ejemplo la musa del teatro, Talía; la musa de la música, Euterpe… bueno, y hay otras más… la musa de los escarabajos… la "escaramusa"… pero bueno, dada la índole de la disertación que nos congrega en este recinto, digamos que la musa de la danza es Terpsícore.

DR: ¿Quién?

MM: Doctor, no me diga que no conoce a Terpsícore

DR: De nombre no, a lo mejor si la veo… Esther Píscore, ¿quién es?… no, no la conozco yo… nono, me acordaría, porque yo tengo buena memoria para la gente… Esther Píscore, ¿qué tal es?… ¿es simpática?.. bueno, bah, no me importa, ¿está buena?… Esther Píscore, con ese nombre no debe pasar inadvertida… Esther Píscore, jaja… “acá está Esther Píscore”.

MM: No, no, doctor. No dije Esther.

DR: ¿Ester Píscore?

MM: No dije Esther. Dije: es Terpsícore

DR: Ah… Ésther Píscore. Esa es la pronunciación griega; nosotros a las "Ésther" de ustedes las llamamos "Esthér". Si viene caminando una por la calle y usted le dice "Ésther", sigue caminando y no se entera; en cambio si usted le dice "Esthér", se da vuelta y le pregunta "¿me llamabas?" – "sí, yo soy Daniel…", y se entabla un… “mucho gusto” y se entabla un… se entabla lo que puede llegar a ser, digamos… no siempre se da… siempre y cuando se llamen Esther… si se llama Alicia, sigue viaje, tampoco se entera… por más que uno le diga Esther… Una vez venía caminando una y le dije "¿Esther?", se dio vuelta y me dijo "yo me llamo José Luis", jajaja… y no se entabló nada, porque a mí no me va ese tipo de… ese tipo de… ese tipo ni ningún otro tipo, quiero decir… no es lo mío… me educaron mis padres de una manera y yo he sabido responder a esa educación honrándola… me educaron en la libertad de poder pensar lo que me dé la gana, pero las cosas se hacían de una forma… también había que respetar a los demás porque cada cual podía hacer de su vida lo que se le diera la gana, no?… pero no había tutía… o sea, no había tú tía, mi tía si que había, y ella era la que nos daba cuando nos portábamos… pero siempre había un motivo para tolerar, había que respetar a los demás por lo que los demás quisieran ser, no había que ser sectario… el plularismo, la otredad y la libertad de expresión eran las bases de la… en mi familia, por lo menos; no sé en la suya, pero… si José Luis quiere, allá él, yo no me voy a interponer… ¡seguro que no me voy a interponer! Eso seguro, pero que él haga de su… ¡que él haga lo que quiera, quiero decir!… y si usted quiere ir con José Luis, vaya eh? También eh?… yo no se lo voy a presentar, porque a mí qué… ¿Píscore es un apellido griego? Píscore… Esther Píscore… ¡ah!, que se casó con García, que era el griego… Esther Píscore de García el griego… Esther Píscore… y la maestra la llamaba por su nombre de pila, o batería: “Esthercita, ven para acá”, pero ella no iba porque era díscola… era “discóbola”, se dice en griego… Esther, la discóbola de García… y había hecho la la… servicio militar, cumplió bajo bandera… “Esther Píscore de García” “Presente” “Cuerpo a tierra Píscore, venga… para… acá…”

MM: Cálmese Doctor… ha estado usted… reflexionando, digamos… por caminos sinuosos… ha estado usted razonando fuera del recipiente. Es mucho más simple; fíjese con qué natural casi displicencia lo enuncio yo: la musa de la danza es Terpsícore; como si no me importara nada.

DR: Esther Píscore, a mi tampoco me importa… Esther Píscore, es correcto…

MM: ¡TERPSÍCORE!

DR: ¡ESTHER PÍSCORE!

MM: ¡TERPSÍCORE!

DR: ESTHER PISCIS… ES DE PISCIS

MM: ¿Qué piscis?

DR: No, no sé si es de piscis, no sé cuando nació… es tisis… es de cistitis, tiene cistitis, si es de piscis puede tener cistitis… es, pisis tisis, esther pisis tis es tesis pis tipis disipis is dis is is tisis i sis pis is tisis tisis… ¡tisis!… ¡¡tisis!! This is the pencil… this is the pencil of Esther Píscore… this is not the pencil of Louis Jefferson… is this pencil of Louise Jefferson? No… you know why? Because this pencil is of Esther Píscore… ¡¡this pencil is of Esther Píscore!! ¡This pencil! Is this pencil of Esther Píscore? NO! This is the pencil of Esther Píscore! (La gente aplaude) Wait a moment, wait a moment… where is Esther Píscore just now? Is she cleaning the blackboard? Is she clapping hands at the publico? Is she looking for a bus at the avenue? Look at the… look at the feet… avenue? No! She went to the bathroom!

MM: My dear friend… you are… arrre…equivocated. Y yo creo saber la razón de su error; lo que pasa es que la palabra Terpsícore tiene una pe y a continuación una ese, lo que podríamos denominar un "diptongo de consonantes", o, "diptongonante", según algunos autores… si, algunos ya le dicen "consonantongo"… allá ellos… pero, digamos, es una simple yuxtaposición de consonantes, y creo que ahí radica la dificultad. Usted, ¿normalmente tiene problemas con la yuxtaposición?

DR: No he recibido queja alguna hasta ahora

MM: Fíjese como lo pronuncio yo: Terp-sícore: el labio superior arriba, el labio inferior abajo

DR: La posición tradicional

MM: Doctor le propongo que practiquemos…

DR: ¿Aquí?

MM: Haga ¡PS!

DR: ¿Aquí? ¡ah! ¡el consonantongo! ¡ps! ¡ps! ¡ps!

CNC: ¿Llamaban los señores?

MM: Eh… sí… ¿qué tenemos para comer hoy?

CNC: Bien, para hoy tenemos, si los caballeros gustan, podríamos comenzar… bueno, de primero tenemos… el chef recomienda… eh… en un restaurante de esta categoría, naturalmente, todo es muy fresco… de primero… y de segundo, también. Tenemos…

DR: ¿Qué le pasa?

CNC: Lo tengo en la punta de la lengua…

(Intentan ver lo que tiene en la punta de la lengua)

MM: Hombre, por qué no trata de recordar… lea la carta

CNC: (saca una carta) "Querido sobrino, aquí estamos todos muy bien y te echamos de menos; techamos de menos, porque se nos acabaron las tejas, el mes próximo terminaremos de techar. Tuya, tu tía Carolina" Bueno, eso es todo lo que tengo…

DR: Muchísimas gracias, retirese, tiene un ocho. Yo no podía comprenderlo de ninguna manera, querido colega, porque usted lo pronuncia de manera incorrecta; la musa de la danza es TerpsícoreS…

MM: ¿Cómo puede ser "TerpsícoreS", si es una sola? ¿O sus amigos le dicen “hola, ¿cómo te va AlbertoS”? Es una: Terpsícore

DR: Mis amigos me dicen Luis. También es uno AristóteleS, ArquímedeS; PlatónS; albóndigaS; platóns de albóndigas…

MM: Perdóneme doctor, pero noto en usted una incontenible e irrefrenable tendencia y/o compulsión a referirlo todo a temas de la ingesta, y/o/u… ae ae… gastronómicos. De sus palabras, surge a las claras…

DR: No, se baten las claras de huevo a punto de nieve y se lo mezcla con el almíbar…

MM: La danza, la danza, querido amigo, una de las expresiones más genuinas del ser humano, que se manifiesta con saltos, giros, contorsiones, se baten palmas…

DR: No, se baten las claras de huevo a punto de nieve, y se lo mezcla con…

MM: ¡No! Se baten palmas, ¿no vio que los bailarines se marcan el ritmo batiendo las palmas? Fíjese… (Comienzan a dar palmas)

CNC: ¿Llamaban los señores?

MM: Eh, sí, ¿qué tenemos para comer hoy?

CNC: Bien, para hoy tenemos lengua a la vinagreta, ajíes rellenos, pulpo a la gallega, y merluza.

MM: Caramba, caramba…

CNC: No, caramba no nos queda

DR: ¿Cómo puede ser la merluza?

CNC: La merluza puede ser a la plancha, o bien arrugada

MM: Después de la lengua, y los pimientos rellenos, ¿qué viene?

CNC: Un poquito de acidez

DR: Está bastante mejor, eh

MM: Hoy está bien, así que hoy no le hacemos el electroshock. De todos modos siga con las pastillitas, los psicofármacos, y nos ve el lunes.

(DR y MM hablan a la vez y dicen lo siguiente…).

DR: Se baten las claras de huevo a punto de nieve, se lo mezcla con el almíbar y se lo hornea unos veinte minutos aproximadamente hasta tener terminado este pequeño pastel de forma ovada llamado merengue que lo vamos a dividir en dos mitades: la mitad inferior, o “emi merengue inferior” la podemos cubrir con un poco de mermelada de fruta o crema chantilli, y la mitad superior o “emi merengue superior” o “insupra” del merengue la podemos decorar con una pequeña fruta, por ejemplo una sandía…

MM: Las danzas tropicales han tenido su auge en los salones del occidente desde tiempo inmemorables, que provoca, por ejemplo, la temprana irrupción del Chachachá, que en realidad tiene leves deformaciones del mambo. Pero teníamos dos orígenes para las danzas tropicales: las de origen afro americano y también las de origen más cercano, como el tango, la rumba, y también tenemos el merengue, la cumbia inclusive, que parte de una…

(Dejan de hablar juntos).

MM: ¿Una sandía?

DR: Una pequeña, de ocho kilos.

MM: Fiuuuuuuuu… y, ¿no le aplasta el merengue? Discúlpeme que se lo pregunte de esta manera, pero…

CNC: ¿Llamaban los señores?

MM: Sí. ¿Qué tenemos de postre para hoy?

CNC: De postre tenemos merengue

Todos: ¿De postre tenemos merengue? (cantan con ritmo tropical) ¡de postre tenemos merengue! ¡De postre tenemos merengue!

http://www.youtube.com/watch?v=2QqGTKtYXgk