Archivo de la categoría: mandamiento

El consejo diario 16

El religioso gira en torno a sus emociones, a sus deseos
y mucho alrededor de la opinión de "los demás".
Para el religioso,
Dios es una palabra, una excusa, algo lejano y carente de real presencia.

La persona espiritual, hace su vida en torno a los mandamientos que Dios le ha dictado,
construye su personalidad y de esa manera edifica a su comunidad.
Para el espiritual,
Dios es Padre y Rey, nunca está ausente, nunca se aleja realmente.

Resp. 111 – Textos nocivos

Estimado Yehuda Ribco
Que el unico y verdadero Dios lo bendiga.

Quisiera hacerles una pregunta: Usted cree en el libro de apocalipsis?
Ya que este libro fue escrito supuestamente antes de «Cristo».
Este libro se encuentra en el nuevo testamento.
Soy de Puerto Rico, mi nombre es Mari O
Gracias anticipadamente!

Seguir leyendo Resp. 111 – Textos nocivos

Resp. 110 – Compromiso y crecimiento

Moré Yehuda, tenga usted buen tarde,

Se que anda muy ocupado, asi que tratre de ser conciso.

En un mail pasado le comente acerca de una relacion que tengo con una amiga, ella es separada hace ya casi dos años (no se ha concretado el divorcio legal), vive con su hijo, y somos muy amigos, muy cercanos, alguna vez tuvimos un encuentro sexual breve, pero yo me aparte para alejarme del error (fue solo una ocasion).

Yo la considero una buena mujer, buena madre, y me atrae bastante (tiene
39 años, y yo 30).

Leyendo los siete colores del arcoiris, habla que la normatividad para los
no-judios, es que no se requiere de ningun documento para que ella este
divorciada. Ademas de que no tiene contacto sexual con su marido hace
tiempo, y que ella fue la que decidio divorciar al marido. Lo que la hace
una mujer libre.

Y , por mi parte, encuentro que quiero un hijo, (varios), y pensando en que
ella seria la madre de uno de ellos, estaria escogiendo una buena madre y
mujer. Ademas de que la relacion entre nosotros dos es de respeto y de
entendimiento.

De yo tener un contacto con ella, no usaria un metodo anticonceptivo de
barrera, y estaria dispuesto a asumir la responsabilidad de un hijo.

Pero tambien, creo que quiero mas hijos, y que quiza ella no los pueda tener
conmigo, asi que en algun momento pensaria en tener otra esposa para tener mas, todo dentro de la confianza y sin acudir al engaño

Y la edad es para mi algo de tabu, pero no por verguenza, sino por el tiempo
de fertilidad, de ella que no esta muy lejos de terminar.

More, por favor, digame, ¿estoy en un error, al querer estar con ella
intimamente, contando con todo lo anterior?

A ella le encanta la idea de tener un hijo conmigo. Y yo estoy dispuesto a
tenerlo, ser el padre, con todo lo que implica.

More, gracias una vez mas por la luz.

Un Abrazo,

Pablo M.
Guatemala

Seguir leyendo Resp. 110 – Compromiso y crecimiento

Resp. 109 – El rezo espiritual

Hola

Muchas gracias, Yehuda

Ser noájida es no pertenecer a ninguna religión pero estar sometido a D. y sus mandamientos.
Pero al noájida le puede apetecer rezar, entonces si no vuelvo a confundirme, esta realizando un hecho religioso. La gente al rezar le llama hecho religioso.

Entiendo que el sernoájida es un fin en si mismo, no una parte del camino. Me siento dando vueltas alrededor del judaísmo pero sin ser judío, como si fuera un buen árbol, el que a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija, dice el refranero.
Un saludo
Pipe

Seguir leyendo Resp. 109 – El rezo espiritual

Resp. 108 – Los patriarcas hebreos y la instrucción celestial

En el punto 1 "A tu encuentro con la Tora" Dicen que el mensaje de la Tora no reposa su mensaje en la fe,sino en la Verdad. Estoy de acuerdo. Pero quisiera preguntar que pasa con los Patriarcas, no habia Tora en su epoca, pero en Genesis dice que Abraham creyo a D-os. La vida de Abraham fue sobre la base de su fe en D-os, y se dice que fue llamado amigo de D-os. Solamente esta observacion. Gracias y shalom.

Seguir leyendo Resp. 108 – Los patriarcas hebreos y la instrucción celestial

Resp. 107 – ¿Rito de conversión al noajísmo?

Quiero saber que rito o ceremonia tengo que hacer para ser noájida. Gracias.
Luis Camber
España

Seguir leyendo Resp. 107 – ¿Rito de conversión al noajísmo?

El consejo diario 3

Cuando te pregunten de qué religión eres,
tú bien puedes responder:

No adhiero a ninguna religión.
Pero soy fiel al Dios que ha creado el universo y ha dictado Sus mandamientos para que los cumplamos.

Recuerda que el noajísmo no es una religión,
sino que es una identidad espiritual.

La emotividad, como prisión o como liberación

La prisión
Las religiones del mundo se disfrazan de espiritualidad, pero sus fundamentos se encuentran exclusivamente en el plano de lo emocional.

Carecen en absoluto de cualquier partícula potable de espiritualidad, ya que la espiritualidad ES seguir las enseñanzas de la Torá (en lo que a cada uno compete) y cumplir con los mandamientos que el Eterno ha encomendado a la persona. Siete mandamientos fundamentales para las naciones y 613 para los judíos, tal el Camino a la espiritualidad de acuerdo a como el Creador y Sostenedor del Mundo ha decretado.

Por tanto, las personas que están en religiones, que son «religiosas», están padeciendo una enorme hambre de espiritualidad, que ilusamente intentan tapar con más y más actos irracionales basados en la emotividad.

Contempla a los seguidores de Jesús (alias Ieshu, Yeshua, Iehoshua, Yahoushua, etc.), date cuenta de lo que te estoy explicando ahora en todas sus palabras y todos actos.
Si haces un análisis objetivo, desprovisto de preconceptos, descubrirás que las manipulaciones emocionales son las que florecen por doquier en sus sectas y doctrinas.
Desde que se levantan hasta que se acuestan están encarcelados por adoctrinamiento y manipulación emocional.
Carentes de profundidad espiritual, faltos de sensibilidad, paralizados en su razonamiento (en lo que a creencias se refiere, y luego en otras áreas de la vida). Todo esto como consecuencia de la inmensa carencia que tienen de nutrición espiritual y por la saturación de mala alimentación espiritual.

Están en profundo desequilibrio en dos de sus cinco planos de existencia: espiritual y emocional.
Lo que seguramente representará un agudo padecimiento también en los otros tres planos: físico, social e intelectual.

Es triste, pero me remito a las evidencias que tú cotidianamente puedes recoger al ver con ojos respetuosos e impasibles.
¿O no es así?

Estos hermanos humanos están esclavos de la idolatría, presos en prisiones de emotividad.
Torturados por sulfurosas cadenas de mentiras y tramas emocionales.
Estos hermanos humanos necesitan ser liberados, aunque ellos mismos se resistan por miedo a ser libres.

La liberación
Te plantearé algo que puede sonar bastante tonto, pero que guarda una importante enseñanza: Al que está preso del plano emocional, solamente se lo puede redimir abriendo la jaula que lo encierra en el plano emocional.

Esto quiere decir que no ayudas a tu hermano preso emocionalmente a ser libre si le alimentas sus otros cuatro planos de humanidad.

Puedes darle 1001 datos racionales que demuestran la falsedad de su religión, la negrura para el alma de sus doctrinas; pero el esclavo emocional no te entenderá, tiene bloqueado el entendimiento a causa de su esclavitud emocional.
Puedes instruirle con 1001 mandamientos y buenas prácticas de bondad y justicia, y probablemente haga alguna de ellas y obtenga beneficios espirituales; pero seguirá atribuyendo santidad a la perversión de la idolatría, mantendrá su confianza depositada en un falso redentor (Jesús, con cualquiera de sus alias).

Es que mientras sus cadenas sigan estando en el plano emocional, difícilmente podrá avanzar, desarrollarse, liberarse, alcanzar su plenitud como hijo de Dios.

Por tanto, tu primer tarea debe ser dedicada a liberarlo emocionalmente.
Luego tendrás tiempo para razonar y para instruirle en los caminos de gozo y bendición.

El problema radica en que justamente es el plano emocional el más difícil a la hora de trabajar para liberarse o ayudar a liberar a otro.

En este plano nadie puede ser sacado de su prisión, sino que cada uno es el que debe caminar hacia fuera de la cárcel del alma.

Ante esta perspectiva, déjame darte algunos sencillos consejos, que han sido probados y resultan efectivos.
Estoy atento a que me hagas llegar tus comentarios así como ideas y sugerencias.

Consejos prácticos:

1- No intentes actuar como misionero, no quieras convencer de nada. Nadie es liberado de las cárceles emocionales, recuérdalo.

Si no estás aún bien afirmado en el camino noájico, si todavía estás al borde del abismal pozo, no están aún en condiciones como para ayudar a otros. No sea que por apresurarte a rescatar a otro, te hundas nuevamente en el fango mortal junto con él.

2- Convida al prisionero emocional a comer contigo. Aprovecha el encuentro para conversar. Especialmente pregúntale por su vida, su familia, sus cosas.
Si el prisionero emocional quiere actuar como misionero, detenlo, dile que tú no quieres hablar de «religión» sino solamente compartir con él ese momento de encuentro. Probablemente el esclavo no te comprenderá y seguirá con su disco rayado, tratando de vender su mala mercancía a precio de oro. Dile que agradeces su interés por tu alma, pero que ahora no quieres hablar de esos temas.

3- Mantén la conversación en un nivel personal, interésate realmente por el bienestar de tu interlocutor. Préstale atención, sé honesto y sincero a la hora de oír y escuchar.

4- Déjalo hablar, a la gente le suele gustar mucho oír su voz y que otros le oigan.
Solamente detenlo si habla de… tú sabes qué…

5- Sé sencillo en tus planteos. Recuerda que el esclavo emocional probablemente tiene obstáculos en su plano intelectual.
Tú tampoco hables de «religión».

6- Como tú has invitado la comida, paga tú.

7- Al finalizar de comer, agradece al Eterno por lo que has comido.
Hazlo en voz audible pero baja, que el otro te oiga pero que no sienta que le estás imponiendo nada.
Si el a su vez quiere agradecer a su falsa deidad, déjalo hacer, en tanto no te obligue a participar. No admitas que él rece a su falsa deidad en voz alta, si se quiere perjudicar que no te dañe a ti. Por supuesto que NO debes contestar «amén», ni mostrar consentimiento a su acción negativa. Pero en este momento tampoco debes amonestarlo, ya que las amonestaciones se realizan solamente a aquel que es capaz de recibirlas.

8- Si el otro insiste, porque es así como generalmente están programados, en venderte su sucia mercancía religiosa, NO le retruques ni intentes razonar con él. Por el contrario insiste tú también en aquello que ya le dijiste: no quieres hablar ni oír hablar de religión.
Mantente amable pero firme, no te corras de esa posición de abstinencia de «religiosidad».
Si el otro no entiende y de lo único que sabe hablar es de religiosidad, entonces discúlpate, y retírate. Menciónale que para un próximo encuentro quieres conversar de corazón corazón, con el otro realmente, sin el disfraz de religiosidad que entorpece en el medio.
Si el otro ama su esclavitud, no tienes tú lo que buscar. Para otra vez será. Esto es: se paciente, constante, no te dejes desanimar por el primer fracaso, pero tampoco te obsesiones y reniegues de ver la realidad.

9- Vuelve a encontrarte con el esclavo emocional varias veces más. En cada ocasión repite el patrón de cero tolerancia a las charlas de religión. Nada de nada.
Pero demuestra sincera y franca apertura a interesarte por sus cuestiones personales, emocionales. Sin caer en ánimo chismoso, ni en entrometerte allí en donde no es prudente o digno meterse.
Haz que el otro se sienta a gusto a tu lado, a pesar de que no pueda dispararte su andanada de frases memorizadas de religiosidad idolátrica.
Por supuesto que si te consulta acerca del noajísmo con sinceridad y respeto, sin ánimos de entablar debates o como excusa para comenzar con su consabido discurso, debes de aprovechar esta oportunidad para darle pequeñas dosis de Luz. Sin irte a cosas complicadas, sin rebuscar, sin gozar de tu victoria. Simplemente muéstrale con mansedumbre y alegría pequeños aspectos de la vida noájica, para que vaya limpiando de a poco su vida de la perversión de la idolatría.

10- Cuando el esclavo encuentra un bálsamo para sus heridas emocionales en tu compañía, le has hecho un inmenso favor. Le has mostrado el camino hacia la Luz.
Ya ha dado algún paso en la dirección correcta.

Comprobarás que llegado el momento oportuno él te preguntará con interés real acerca del noajísmo, de la fidelidad al Eterno, de las cosas puras que hacen a la vida equilibrada de un siervo del Eterno.

Habrás vencido y él no habrá sido derrotado, sino que también es un vencedor.

Por último.
Toma estos consejos para ser aplicados con relatividad, no como un manual o receta de cocina.
Sé creativo e ingenioso, pero siempre mantente amable, sincero, honesto y justo.

Algunos esclavos emocionales rompen más fácilmente cuando son provistos de llaves intelectuales. Otros cuando se les favorece un contexto social que los cobije, una comunidad noájica.

Así pues, si estás realmente atento a tu prójimo que está esclavo de la idolatría, verás cómo ayudarlo con lo que precisa para liberarse.

Quedo a tus órdenes y a la espera de tus comentarios y aportes.

(Lecturas recomendadas:
http://fulvida.com/temas-frecuentes/cuando-noe-aprende-de-abraham
http://fulvida.com/misioneros/lo-que-te-mueve-y-lo-que-te-detiene
http://fulvida.com/salud/los-miedos-y-el-noajismo-2

Un destello en la oscuridad

Como sabemos, la doctrina del "pecado original" es aberrante y errónea.
Contradice completamente los fundamentos de la Torá, lo que ha sido revelado por parte del Eterno.
Si bien la primer pareja humana pecó al comer del fruto del árbol prohibido, nosotros no cargamos en absoluto con su culpa ni con su responsabilidad.
Aún sufrimos a causa de su equivocación, porque las condiciones del mundo variaron como consecuencia de la misma; pero no tenemos mancha espiritual que cargamos cual pesado fardo desde aquellos primeros humanos hasta nuestros días.
Cada uno es responsable de sus propios actos, culpable de sus culpas, responsable ante el Eterno por los propios hechos y por no haber realizado teshuvá (proceso de sincero arrepentimiento) para enmendar nuestras faltas personales.
Ya lo indica con claridad la Torá, y no deja lugar a dudas:

"Si alguien peca transgrediendo alguno de los mandamientos del Eterno respecto a cosas que no deben hacerse, aun cuando no llegue a saberlo, será culpable y cargará con su culpa."
(Vaikrá / Levítico 5:17)

Es explícito, cada cual carga con su propia culpa, aunque sea por actos cometidos por ignorancia, uno deberá dar cuentas ante el Supremo Juez.

Y en esta línea recalca el profeta:

"La persona que peca, ésa penará. El hijo no cargará con el pecado del padre, ni el padre cargará con el pecado del hijo. La justicia del justo será sobre él, y la injusticia del impío será sobre él."
(Iejezkel / Ezequiel 18:20)

No hay remisión de culpas de uno por otro.
Nadie puede hacer teshuvá por el vecino, ni siquiera un hijo por su padre, o un padre por su hijo.
No hay un "cordero de dios que quite el pecado del mundo".
Ninguna sangre de un falso dios y falso mesías te salvará de los pecados que has cometido.
Ningún Cristo o mesías te redimirá del mal que cometiste.
Cada cual carga con su propia mochila de pesadas oscuridades y molestos errores, cada cual ha de hacerse cargo de limpiar esa mochila espiritual para ahuyentar las sombras y traer Luz.

Mientras la persona no realiza su proceso personal de teshuvá, se encuentra espiritualmente enferma, en cierta medida su espíritu se ve ensombrecido, la Luz de plenitud del Eterno no puebla con vigor todas sus instancias.
En palabras del profeta:

"Vuestras iniquidades son las que hacen separación entre vosotros y vuestro Elokim. Vuestros pecados han hecho que Su rostro se oculte de vosotros para no escuchar."
(Ieshaiá / Isaías 59:2)

Por tanto, es imperioso que la persona tome en cuenta este hecho, se haga cargo de sus propias acciones, asuma con responsabilidad el timón de su vida, corrija aquello que es posible que corrija y enmiende su mundo.
Porque mientras siga en la comodidad, o en la ignorancia o en la rebeldía, continuará ausente de la plenitud que desde Arriba le tienen reservada.
Se estará causando daños cada vez mayores, estará sembrando una posteridad de miseria y arduo crecimiento; en lugar de escoger el camino del desarrollo integral y equilibrado, que se obtiene mediante el estudio de Torá desinteresadamente (de las partes aptas para ti como noájida) y por el cabal cumplimiento de los preceptos universales con sus derivados.

Gracias al Eterno, Él tiene abierto los portales celestiales para el que desea retornar a la buena senda.
No es difícil el camino del retorno.
No es menester sacrificios, ni sangre derramada, ni fe, ni complicados rituales.
Solamente se precisa lo que indica el profeta:

"Si el impío se aparta de todos sus pecados que cometió, guarda todos Mis estatutos y practica la justicia y la misericordia, ciertamente vivirá; no morirá.
No le serán recordadas todas sus transgresiones que cometió; por la justicia/misericordia que hizo vivirá.
¿Acaso quiero Yo la muerte del impío?, dice el Señor Elokim. ¿No vivirá él, si se aparta de sus caminos?
"
(Iejezkel / Ezequiel 18:21-23)

Es simple, es concreto, es posible.
Dejar el camino del error.
Desandar el trecho mal trazado.
Descargar la mochila de las cargas siniestras.
Vivir de acuerdo a la pauta espiritual que marcan los Siete Mandamientos Universales.
Actuar con misericordia y justicia.
Construir el Shalom con acciones cotidianas, aunque parezcan simples y sin envoltorio de espiritualidad.

Tal es la senda que conduce a la adhesión al Eterno, que significa vida en Este Mundo y gozo eterno en la Posteridad. Porque solamente el que se adhiere al Eterno, por medio del cumplimiento de los preceptos es llamado vivo, y siembra vida para su Posteridad. Tal como está escrito:

"Sólo vosotros, que permanecéis adheridos al Eterno vuestro Elokim, todo de vosotros está vivo hoy."
(Devarim / Deuteronomio 4:4)

Un "hoy" eterno, sin pausas, sin muerte, sin olvido.
Un "hoy" en el cual "todo de uno mismo" se mantiene con vida, en unión con la Fuente de la vida.

Para retornar, para ser uno que vuelve en Teshuvá no es necesario hacer todo de inmediato, pero sí comprometerse a alcanzar la meta trascendente.
De a poco, día a día, jornada tras jornada, una montaña después de otra, con constancia, con paciencia, con respeto y autoestima. Con la convicción de que se está haciendo por fin lo correcto, aunque se avance con lentitud.
Despojándose de esos disfraces que fuimos adquiriendo y confundidos llamamos "identidades personales".
Dejando de lado esos personajes que fuimos actuando en el teatro de la vida, para tomar con primor nuestro verdadera identidad. En equilibrio, en gozo, en sintonía armónica con el Eterno.

No hay misterios, no hay abracadabras, no hay danzas cabalísticas, ni esotéricas señales… mucho menos colgados en maderos que te salvan.
Solamente un corazón sincero, una mano honesta, un pensamiento íntegro.
En palabras del Eterno por intermedio de Su profeta:

"Yo no he hablado en secreto, en un lugar de tierra tenebrosa. No he dicho a la generación de Iaacov [Jacob]: ‘Buscadme en vano.’ Yo soy el Eterno, que hablo lo que es justo y que declaro lo que es recto."
(Ieshaiá / Isaías 45:19)

Él ya ha declarado lo que es recto, nos ha marcado lo que es justo y misericordioso.
Está en nosotros no confundirnos, no apelar a recursos que solamente sirven para hundirnos más en esa miseria emocional/espiritual que tanto tememos reconocer y mucho más confesarnos.

Seamos valientes, no es difícil el cambio hacia lo positivo, aunque al principio cueste.

Espero tus comentarios, pero más espero que estas palabras te hayan dado un destello para indicarte el camino hacia el buen puerto.