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4 de Julio

Feliz día de la Independencia a los amigos de EUA y residentes allí.
Festejen noájidas norteamericanos, festejen.
Más allá de quién está en el gobierno,
hoy es un día de celebración para millones de hermanos noájidas del Norte.

(Me pueden ir avisando en las respectivas fechas patrias de cada nación en la que habitan, por favor.
Gracias.)

Invitación

Invitación:

Saludos a todos los noájidas (gentiles fieles al Eterno) que nos leen en las diferentes partes del mundo. Con mi más alto sentido de respeto, me permito invitar a todos nuestros asiduos lectores y líderes internacionales a estudiar el Tema “LA NATURALEZA DE LA JUDEOFOBIA”, de Gustavo Perednik, y trascrito amablemente por el profesor Juan Mayorca en esta página web.  En FULVIDA Táchira, Venezuela, Llevamos seis (06) martes instruyendo a nuestra Comunidad en dicho tema, por supuesto, con el respectivo permiso escrito del autor y del profesor Juan Mayorca. Hemos aprendido cosas interesantes e incisivas, las cuales han estado “ocultas” a los ojos del mundo entero: el fenómeno de la Judeofobia, sus orígenes y propagación, con las lamentables y nefastas consecuencias genocidas en el pueblo judío.

Es necesario e imprescindible conocer la información que allí se presenta (datos, fechas, protagonistas, documentación), pues nos dará una mayor claridad acerca de este grotesco “fenómeno” de carácter mundial que le ha costado la vida a millones de judíos a lo largo de estos últimos 23 siglos, y nos capacitará con sólidos argumentos para revertir cualquier intento político-religioso-social que pretenda hacer resurgir este odio contra la nación hebrea. Además, nos brindará herramientas para ayudar a salir de la oscuridad a tantos seres valiosos y hermosos que hoy “viven” sumidos en escenarios de oscuridad, ignorancia y caos (lo que los convierte en presas fáciles de la judeofobia).

El Curso está desarrollado en 12 Unidades y es de fresca lectura y de limpia comprensión.

Ánimo para todos y que el Eterno nos haga sobreabundar en bendiciones integrales, a nosotros y a Su pueblo Israel. ¡Amén!

 

Estocolmo

Es extremadamente común oír de cómo rehenes demuestran apego y hasta afecto por aquellos que los mantuvieran cautivos. Este estado psicológico se conoce como Síndrome de Estocolmo y tiene que ver con víctimas que se hacen cómplices en cierta medida, de sus secuestradores. Y hasta cierto punto, es entendible que eso suceda.

 Cuando aparece el equipo SWAT, el rehén  está un poco agradecido y otro poco confundido. “Después de todo, a esto ya me había acostumbrado”, piensa mientras retoma, un poco a regañadientes, el control de su vida.  Y comienzan a aparecer las cosas que le hacen extrañar el encierro.

 Aunque al principio sea complicado acostumbrarse a la tragedia del cautiverio, poco a poco el secuestrado había comenzado a familiarizarse con los rituales y rutinas que se les imponían, hasta el punto de sentir su ausencia una vez liberados. Les molesta la luz, les encandila, les duele. Les desconcierta el sonido, si es que estaban en un lugar silencioso, o el silencio, si estaban acostumbrados a oír determinados sonidos en momentos determinados. Y sobre todo, los atormenta la incertidumbre.

 Y es que existen algunas ventajas relativas de ser rehén. Para empezar, las decisiones no dependen de uno. Ser víctima, es, de alguna manera, liberador. Uno ya no es responsable del camino que le toque ni de lo que le suceda. Ya no tenemos el peso de medir y calcular cada paso que damos, ya no somos culpables de nada y para cualquier reproche podemos decir que “no podíamos elegir”. Manejaba otro. Y siempre es más “fácil” que maneje otro.

 
Claro está que no es la intención en este artículo describir ni analizar las consecuencias de ningún acto terrorista ni criminal, sino sencillamente trazar una comparación entre los efectos del secuestro y otro tipo de cautiverio, igualmente dañino, al que llamaré “religiones”.

 Y ni siquiera estoy refiriéndome exclusivamente a sectas evangélico-mesiánica-pentecostal- misioneras. Pueden ser otras nuestras religiones; otros nuestros secuestradores: el trabajo excesivo u obsesivo, el dinero y su búsqueda, las relaciones enfermas, el cuidado desmedido por el cuerpo; en fin, la deificación de cualquier cosa que no sea Dios; cualquier objeto, práctica, persona o lo que sea,  frente a la que nos postremos y a la que hagamos centro de nuestra vida.

 Pero, por esta vez, y hecha esa salvedad, sí voy a referirme a las religiones. En general, los individuos que las integran, o bien han nacido en el seno de una familia que ya estaba “secuestrada”, o bien fueron a dar allí por sí mismos, atraídos por infinidad de causas, circunstancias o motivos particulares, que no vienen al caso, porque son muy diferentes. Pero la característica que todos comparten es que, al momento de “salir”, tienden a experimentar el mencionado “Síndrome de Estocolmo”.

 Era más cómodo tener un “pastor”, alguien como referencia. Era más seguro tener un interlocutor que intercediera por nosotros ante el Padre.  Era más práctico contar con fechas, horarios, canciones, himnos, reuniones, líderes para todo y una organización que nos sustentara. Aunque toda esa estructura nos mantuviera cautivos, suena muy organizada, muy ordenada.

 Y se explica que sea así. Porque esas organizaciones mantienen un orden que necesita de esa compleja estructura para sobrevivir, manteniendo ese estado anti-natural de cosas. Sin ese complicadísimo aparataje, no se puede mantener a miles de personas, durante cientos de años, convencidas de que si no fuera por ella, estarían perdidos. A miles de secuestrados convencidos de que lo mejor que les podría pasar, sería permanecer allí toda su vida.

Pero resulta que es al revés. Lo mejor que les podría pasar es salir de allí. Y muchos lo han hecho, y muchos más, lo harán, gracias a Dios. Porque no es rutina ni comodidad lo que necesitamos. Porque no obtendremos la paz y seguridad que buscamos cumpliendo con exigencias falsas, adorando oscuros personajes ni siguiendo a equivocados secuestradores.

 Y porque debemos admitir que esa aparente soledad que experimentamos cuando llega el equipo SWAT y nos dice que ya pasó todo y que al fin somos libres, no es mala.  Es por fin, un poco de silencio, un desierto en el que nada nos distrae y por fin podemos pensar por nosotros mismos mientras retomamos el rumbo hacia nuestra vida. Un desierto que termina siendo un oasis donde podemos, en silencio, recordar lo que en alguna parte de nosotros, siempre supimos.

 Que sí había un Dios. Que no nos pedía ser Miss Universo, Licenciados en Física Cuántica, y la Madre Teresa para aceptarnos como hijos. Que no era papá noel y que nos traía regalos aunque no nos hubiéramos portado del todo bien. Y que no, no podía ser todo tan complicado. Que no hacía falta ser ni contar con un gurú  iluminado que nos hiciera de msn y nos mandara mensajitos de Dios para nosotros y viceversa. 

 Que no había ningún motivo para preferir estar preso. Que la luz encandila pero no enceguece, sino todo lo contrario. Y que es preferible caminar a ser arreado. Siempre.

¡Aman y Faraón, más semejantes hoy que nunca

¡Aman y Faraón, más semejantes hoy que nunca!

Mientras escribo este artículo, la luna esta completamente obscura, y entonces viene a mi mente aquella frase, fresca aún en mi memoria, cuando mi bisabuela veía algún fenómeno espacial y decía exclamativamente: “¡Señales en el cielo, ruinas en la tierra!”.

Este mes de Adar ha visto ya el primer eclipse, uno total de luna, aún falta para el último día uno parcial de sol.

Quizás muchos no relacionemos muy bien que mensaje podría querer transmitirnos nuestro Creador por medio de estos eclipses; pero me atreveré a sugerir algunas posibles muestras de lo que el futuro les depara a los Amanes del mundo y sus semejantes Faraones.

Tanto Purim como Pesaj son festividades de alegría y libertad; en Pesaj, D’’s mismo, con portentos, señales y milagros más que evidentes salvó a Israel de la esclavitud física, los llevó a Sinaí y los adoptó como pueblo Suyo; en Purim, D’’s, por medio de los maduros líderes de este pueblo, reafirmó su decisión, mostró que no hay debajo del cielo otra Nación como Israel, los salvó ahora de la muerte física, y los condujo nuevamente a su regazo, ahora en tierra prometida.

Pesaj simboliza el nacimiento de un pueblo, Purim simboliza la madurez; sin embargo, aunque estas dos fiestas son alegres y su símbolo nos induce a la alegría del espíritu, para cierto grupo no es así, para algunos estas dos fiestas son símbolo de amarga soledad y vacío, de fracaso. En Pesaj, el duro corazón de Faraón vio como sus huestes eran esclavas de la fuerza del mar, después de que los hijos de Israel hubieron cruzado en seco, en Purim, Aman sintió en carne propia lo que su corazón tramó para los hijos de Israel.

A mi parecer hoy la luna da un claro mensaje a los actuales Amanes… muestra la sangre de los justos, se enrojece al punto de ennegrecerse para enseñarles a los asesinos y terroristas sus crímenes… más tarde, cuando falte un escaso día para iniciarse el mes de Nisán, cuando apenas falten horas para iniciarse un nuevo año en Israel, estará dando un mensaje el sol, a los Faraones actuales del mundo… les mostrará el juicio que sobre ellos vendrá.

Amanes y Faraones de este siglo, los que aún viven, los que aún hacen maldad, los que aún perseveran en su injusticia y se sienten rebeldemente cómodos puestos contra el Rey de Reyes… recuerden estas fechas, 14 y 29 de Adar, recuerden que en estas fechas les ha sido mostrada por Providencia Divina, su sentencia. Se que ustedes no rectificarán, que su corazón se endurecerá, que sus macabros planes trazados tratarán de seguirlos, pero no verán sus objetivos cumplidos, se frustrará ahora por completo y para siempre la esclavitud y la muerte, sus imperios caerán, sus cimientos serán estremecidos por el implacable juicio de Hashem.

Ahora bien, para los justos y Santos de Este Mundo estas señales representan alegría y esperanza. Alegrémonos y tengamos esperanzas de que actuando como lo hicieron los hijos de Israel, con valentía, actitud y compromiso llegaremos a librarnos totalmente de la esclavitud y evitaremos la muerte espiritual.

Purim para noájidas

Como sabes, Purim es una festividad de la nación judí­­a.
Hace miles de años un perveso lí­­der polí­­tico del imperio Persa (¡oh coincidencia, en parte la actual Irán!) quiso exterminar a la nación judí­­a, del primero al último. Su único motivo era el odio que tení­­a hacia Dios, y por ende a los que Él escogió como nación especial para servirLo como sacerdotes.
Su implacable orden serí­­a ejecutada sin falta, llevándose a cabo la «solución final» del pueblo judí­­o.

El valor, el arrojo y la confianza puesta en Dios de algunos principales de la nación judí­­a (Mordejai y su prima Ester) canalizaron el milagro oculto que se envió desde Arriba, lo que revirtió el horror que finalmente cayó sobre los enemigos de Dios y de los judí­­os.
El malvado perseguidor de fieles del Eterno murió en su propia trampa, también fracasaron y todos sus socios y allegados cómplices en sus macábros designios.

Como ves, es una fiesta netamente judí­­a, ya que celebra la salvación que tuvo esta nación.

Pero, los noájidas tienen también posibilidad de celebrar en este dí­­a, de una manera que sea noájica, sin copiar ni tomar prestada una identidad que no les corresponde.

  • En Purim los noájidas pueden reunirse para comer y beber en un festejo mesurado pero lleno de regocijo.
  • En tal reunión vespertina es aconsejable que se converse acerca de la historia de Purim, no es necesario leer la «Carta de Ester» que se encuentra en el Tanaj, pero si quieren lo pueden hacer.
  • Es apropiado que tengan textos escritos por maestros judí­­os sobre el tema, pero especialmente sobre las enseñanzas éticas que se desprenden de la historia de la festividad.
  • Deben convidar a gente pobre y menesterosa a participar de este evento. Por pobre y menesteroso se puede entender personas con carencias materiales, y/o solitarias, y/o desprovistas de comunidad y/o que andan por caminos de idolatrí­­a.
  • Si el que ha sido convidado no quiere o no puede concurrir a la celebración, es oportuno que se le entreguen algunos alimentos festivos (lo que sea tí­­pico en la región en que el noájida vive), así­­ como algún folleto o texto resumido y claro acerca de Purim y su valor para la identidad noájica.
  • Si lo desean, pueden realizar una fiesta de disfraces para los más pequeños de la comunidad, como manera de divertirlos en tanto se educan y además darles la oportunidad de vivir aspectos del carnaval (que suele caer en estas fechas) pero sin el contenido tóxico de esta fiesta pagana.
  • En caso de no poder preparar un festí­­n o no poder compartir uno, es correcto que se enví­­en golosinas a las personas allegadas. Si el allegado no conoce la festividad, incluya el folleto que mencionamos más arriba.
  • Debe hacerse un momento en esta jornada para reflexionar, individual o colectivamente, en la necesidad de la participación de cada uno, que todos y cada uno es indispensable, pues el milagro se canaliza por medio de la actividad personal.
  • También debe darse el tiempo para reflexionar en qué puede hacer para ayudar a que en el mundo termine la discriminación negativa, el odio hacia los judí­­os, la rebelión en contra del Padre celestial.

Hasta aquí­­ algunas sugerencias, que espero sea bien tomadas y aplicadas por los miembros de FULVIDA y por todos los noájidas que desean andar por el camino del bien y la justicia.

Quedo a las órdenes para responder a tus preguntas y espero que me comentes como pasaron esta festividad viviéndola al modo noájico.

Shalom y bendiciones

Resp. 63 – ¿Januca para noájidas?

Shalom, moré Ribco:
aprovechando este correo: Yo soy noájida y estoy empapándome de este camino de vida y quisiera saber si los noájidas podemos celebrar la janucá; si es así, de qué forma, pues supongo que no podríamos hacerlo de la misma forma que ustedes.
Y bueno, yo sé que dije que eran dos preguntas pero me gustaría saber qué celebraciones o conmemoraciones podemos llevar a cabo al igual que nuestros hermanos judíos (y de qué forma ¿verdad)
Le agradezco enormemente su apoyo a todos los que, con el corazón en la mano, le piden su consejo
SALUDOS
Abraham Muñoz

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¿Fiesta de Luces Noajida?

Januca es el tiempo en el cual nuestros hermanos judíos recuerdan como hombres judíos valerosos, seguidos de una parte del pueblo, fiel a D»s, derrotó al imperio del mal, recuerdan como la luz que irradiaron los macabeos y sus seguidores venció a la oscuridad imperante.

Recuerdan, cada vez que sus niños juegan con el sevivón, que un "Gran Milagro ocurrió allá" (En Israel), recuerdan cada vez que cantan "Maoz Tzur" que Su D»s los salva, que está con ellos, que los proteje, que los defiende; recuerdan al encender cada luz durante ocho días que el valor y el coraje de los que siguen la Justicia y la Rectitud valen la pena, porque obran milagros.

En estas fechas los noajidas podemos aprender de los judíos que la Luz que irradia la persona es la que realmente ilumina las largas y oscuras noches del invierno boreal y no las que se colocan rebeldemente en arbolitos ó simbolos idolátricos, podemos aprender que el tiempo no es para perderlo en vanidades, sino para invertirlo en el crecimiento constante de nuestra personalidad; la fiesta de las luminarias debe ser para los noajidas referencia de lo que fue la resistencia de aquellos que, viendo la decadencia de parte de sus coterráneos, no desmayaron, y lucharon hasta conseguir expandir la Verdad, la Luz.

Este tiempo debe servirnos para alumbrar con verdadera luz a quienes aún permanecen inmersos en la terrible oscuridad que produce la idolatría, llevando, con nuestra actitud, el mensaje que D»s ha plasmado en Su Torah, para todas las naciones. 

Resp. 60 – Saludos en estas fechas

Shalom, amigo Yehuda gracias por su interes en saber de este su servidor…
Aprobechando una pregunta: que have o que dice usted cuando alguien lo be en la calle en estas fechas y le dicen «»feliz navidad o feliz ano nuevo»» (sin saber que usted no selebra esos dias) ?les contesta lo mismo o se les ignora y se cambia de tema? Se lo pregunto ya que se que todo mundo me lo ba a decear ahora que este en Mexico y aunque no soy Judio pues yo no celebro esas fechas tampoco.
Gracias por su tiempo y hasta pronto
feliz Januca.
Salvador Castillo
EUA

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Resp. 46 – Bendiciendo el matrimonio

Shalom moré.
Lidero un grupo de noajidas quienes me han pedido que les bendiga su matrimonio. El enlace lo celebra el Juez de Paz, pero igualmente ellos me han pedido algun aspecto espiritual. Le agradezco si puede hacerme llegar alguna idea.
Venezuela 

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Feliz séptimo – Festividad de Shminí­ Atzeret

Los judíos celebramos en pocos instantes más la festividad que el Eterno nos ha dado para culminar los siete días de Sucot, festejaremos Shminí Atzeret.
Es una festividad muy peculiar, puesto que no se asocia con ningún hecho histórico en particular, ni evento nacional del pueblo judío.
Es sencillamente un regalo que el Padre celestial nos ha dado para que continuemos por un poquito más el deleite de las fechas sagradas que en seguidilla hemos conmemorado, y que ahora están llegando a su término por este año.
Es un regalo para disfrutar, pues el Padre celestial desea para nosotros lo bueno y lo mejor, jamás prepara lo negativo.
Es un regalo para que el número siete que representa el mundo material, de los días de Sucot, se completen con la perfección que representa el número ocho, el del mundo espiritual.
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