Consagrado a Dios.
La estirpe sacerdotal fue consagrada al Eterno, los sumos sacerdotes debian vestir prendas muy llamativas e importantes que les recalcaban su rol en el pueblo de Israel. El Sumo sacerdote llevaba un turbante en la cabeza y sobre el un grabado en relieve de oro puro que decia: «Consagrado a Hashem.»
Pueden surgir muchas preguntas al respecto, pero quiero simplemente dejar una breve enseñanza sobre el tema que podemos aprender los noajidas, una enseñanza para beber y llevar a la práctica con más fervor el Deseo y Voluntad de Dios.
El orgullo.
Uno de nuestros peores enemigos es el orgullo, aquel orgullo que se funda en la baja autoestima, en lo vanidoso, en querer ser más que el otro o no ser diferente. Es el orgullo que se nos sube a la cabeza y el que señala la placa con dichas palabras sobre el turbante para recordarnos que debemos luchar contra el, reducirlo o transformarlo en un orgullo bueno.
El orgullo bueno es lo que se nos debe subir a la cabeza y…¿que es orgullo bueno? Estar orgullosos por ser siervos de Dios, fieles al Padre, por cumplir nuestros preceptos, por estudiar lo que nos corresponde, por ocuparnos de lo nuestro, por ser noajidas concientes y activos, por mejorar el mundo, por despertar conciencias, por atraer mas divinidad y luz al mundo, por crecer como portadores de luz y canales de bendicion, por atender al Deseo de Dios, por respetarLo en cuanto a lo que El espera del ser humano, por no romper Sus limites, por ayudar al prójimo, por dar caridad, por mejorar, por crecer, por desarrollar todo nuestro potencial para la causa divina, por ser constructores de Shalom, por ser agradecidos, por aceptar nuestra identidad y trascender en niveles espirituales.
Es parte de un constructor de shalom tener orgullo bueno, por simplemente aquello que es tuyo y que debes trabajar para tu propio beneficio.
No olvides que eres consagrado al Eterno por trabajar para Su causa y Su Voluntad. No olvides que eres consagrado al Eterno por ser un construtor de Shalom.
El Hijo de Noaj comparado al Sumo sacerdote.
Tal como señalaron los Sabios diciendo: «Aquel hijo de Noé que se dedique a cumplir con sus siete leyes y a estudiar aquello que le corresponde como su porcion es comparable al Sumo sacerdote.»
Asi como el Sumo sacerdote lleva de corona en su cabeza las hermosas palabras «Consagrado a Hashem» asi cada uno de los hijos de Noaj, como tu querido lector, es considerado un «consagrado» más a la causa divina.
¿Sientes orgullo por ello?
“”¡Si aún no eres parte de la comunidad de Fieles a Dios, eres la pieza del rompecabezas que falta!””