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Resp. 79 – De errores se aprende…

Yehuda, Que pena incomodarte tanto Esta es una duda muy personal, y me gustaria que fuera privada …
ahora leyendo sobre los metodos anticonceptivos, me surge una gran duda Yo ya tengo 2 hijos, que han sido un regalo muy hermoso por parte del creador Y dado que con mi esposa decidimos que no queriamos tener mas hijos, me realice la vasectomia Esto lo realice por iniciativa propia, y de comun acuerdo con mi esposa Lo hice por que a conciencia, no crei que hubiera algo malo con esto, ya que nos permitiria tener una sexualidad tranquila, y ademas por que mi esposa tiene prohibido el usar pastillas Como debo proceder como noajida para enmendar mi error ?
Muchas gracias mi gran amigio por tus sabios consejos
Identidad en reserva.

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Fiesta en el Táchira

El próximo sábado 24 de marzo, con la ayuda del Eterno, cuatro (04) preciosos jóvenes estarán asumiendo un nuevo reto en sus vidas: vivir como noájidas, esto es, como justos de entre las naciones, según el Pacto que el Eterno estableció con Noé y su descendencia. Estos hijos de la responsabilidad son: Seguir leyendo Fiesta en el Táchira

Resp. 78 – Pureza de creencia, de pensamiento, de sentir y de acción

Shalom estimado More:
Aprovechandome su tolerancia y sabiduria, le suplico me aclare las siguientes dudas:
1–hubo algo realmente original en el mensaje de j–s, en su epoca, porque tengo la impresion de que lo que dijo, ya todo estaba el Tanaj.
2–en el Tanaj, como interpretar o asimilar los pasajes donde Hashem aparece como vengativo o sanguinario, se que debe haber una forma correcta y edificante de entenderlo.
3–hay o podria haber una forma de verificar o certificar, que el nivel de conocimientos y preparacion de un noajida, son los adecuados como para dirigir una comunidad de manera correcta.
Todas estas dudas son no solo mias, sino tambien de algunos de los hermanos con los que me reuno a platicar.
le agradezco su paciencia y sabiduria.
Que Hashem lo colme de bendiciones… Shalom
Ramon Sanchez M
orelos- Mexico

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Resp. 77 – Vive, sin drogas

SHALOM ¡¡¡
POR FAVOR NECESITO SABER QUE OPINAN SOBRE EL CONSUMO DE MARIGUANA, QUE ORIENTACIÓN PODRÍAN DAR A LOS JÓVENES NOAJIDAS;
LES QUEDO MUY AGRADECIDO.
ATT. RICARDO RAMIREZ
ECUADOR.
ES LO MEJOR QUE HE ENCONTRADO, APRENDER A SER NOAJIDA ME ESTA TRAYENDO SHALOM Y LIBERTAD. !
GRACIAS Y SIGAN ADELANTE¡

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Aquellos pequeños milagros diarios que demuestran la existencia de Dios

Cuantas veces no hemos oido a muchos ateos decir que Dios no existe
Pero al revisar cada dia que paso en este mundo, me reafirma mas y mas que Dios existe

Voy a narrar algo que me lleno de mucha alegria, y que demuestra como Dios actua en nuestra vida Seguir leyendo Aquellos pequeños milagros diarios que demuestran la existencia de Dios

El número 100

Este es mi artículo número 100… ha sido un largo y pesado camino el que hemos transitado mi teclado y yo (en los actuales momentos es indebido decir: “mi pluma y yo”, ya que, a menos de que se trate de una palm, la única manera de escribir electrónicamente es a través de un teclado).

Bien, sigamos… En este, mi artículo número 100, oficialmente contabilizado, de mi propia autoría, quisiera compartir con ustedes esta historia. La historia del artículo número 100.

Eran apenas las doce de la nueve de la noche cuando mi escritor entró en la sala, encendió su computador, abrió el programa y ahí aparecí yo, apenas una línea me habia dado ya vida, aunque no conocía que iba a ser de mi, si por capricho de mi escritor iba a tratar de un tema religioso, o social, o quizás político… ahí estaban esas seis palabras escritas, esos tres puntos supensivos me tenían demasiado preocupado; ¿y si me dejaba inconcluso?, sabia de algunos artículos que jamás se publican, debe ser duro eso, decía yo; pero también sabia que algunos jamás llegaban a ser totalmente escritos, nunca veían más que diez palabras, el escritor salía con apuro y lo dejaba hasta ahí, y eso era lo último que sabía de aquel artículo… dicen que los artículos que nunca se terminan, cuando mueren, de soledad, no hayan reposo, pues no saben nada acerca de sí mismos.

Yo era un artículo especial, mis primeras letras decían: “Este es mi artículo número 100″, eso me dio alguna esperanza, si yo era su artículo número 100, mi escritor no se iba a olvidar de mi tan fácilmente, aunque yo creo que el artículo 100 de alguien no debe ser tan especial, hay más de 100 cosas que una persona puede decir, más de 100 temas que se pueden tratar; creo que mi escritor exagera un poco… bueno, un poco de exageración le da un tinte especial al artículo 100, lo hace más llamativo, la gente gusta de este tipo de atención, la verdad yo, como artículo, me siento halagado de ser tan llamativo, ¿de qué iré a tratar?, ¿cuál irá a ser el motivo por el cual pasaré a formar parte de la memoria de mi escritor, y de la de aquellos que me lean?, wow!, que grande, que rico se siente cuando a uno lo leen, cada vez que recorren las lineas se siente como fluyen las palabras, dejan de ser algo escrito y empiezan a formar parte de un mundo individual.

Mi escritor empezó a escribir, yo estaba tranquilo, veia en sus ojos un brillo que denotaba interés, muchas ideas pasaban por sus manos y quedaban plasmadas en mi, en realidad empezaba a saber cuál era mi propósito, mi escritor tiene a veces muy buen humor, escribe con ánimo, se le ve una sonrisa en la cara, lástima que un artículo no pueda sonreirle a su escritor, tanto que hay que agradecerle. Una vez mi escritor se rio de lo que él plasmó en mi, cuanta emoción, no será igual que sonreirle, pero si provocas risa en tu escritor debe sentirse igual.

Hay muchos temas de los que pude haber tratado, pero mi escritor procuró darme especial fuerza, y entonces me dio la oportunidad de contarles qué se siente ser artículo, qué se siente ser el número 100, por esto es que quiero a mi escritor, el piensa siempre en mi, me da connotada relevancia, es un buen tipo, aunque a veces deje a otros artículos por la mitad y nunca más los recuerde, no fue así conmigo.

Muchas gracias por escuchar mi historia, la historia del artículo número 100, fue un placer inmenso poder expresarme gracias a mi escritor. Espero que ahora ustedes dejen que sus artículos también puedan disfrutar lo que yo he disfrutado.

LAS BASES DE LA TRANSFORMACIÓN INTEGRAL Parte I

          Introducción:

Tres nefastos sentimientos invaden hoy la mente de muchas personas en nuestra queridísima América Latina y en el resto del mundo; sentimientos que tienen su fundamento en tres poderosas excusas:

*       Sentimiento fatalista: “Este es mi trágico destino, por lo tanto, nada podré hacer para mejorarlo”.

*       Sentimiento de culpabilidad: “Muy graves han sido mis errores, por lo tanto, no hay forma de rectificarlos y cambiarlos para mi propio bien y el de mi familia y generación”.

*       Sentimiento de insignificancia: “Jamás podré salir de esta pésima vida que llevo”. “No soy nada ni nadie”.

Esta clase de pensamientos ha hecho que muchos hombres y mujeres de nuestra modernísima sociedad se encuentren hoy paralizados y petrificados emocionalmente, llevando un estilo de “vida” tormentoso y cruel. Piensan, y hasta creen, que no existe salida para sus muchos conflictos y que no hay forma de escapar airosos de esa pesadilla que sufren en silencio y, lo que es peor aún, se aferran a falsos dioses y a seudos movimientos religiosos buscando en ellos apagar la angustia de sus adoloridos corazones.

     El mal manejo de esta insoportable situación ha hecho que muchos hombres y mujeres tomen alocadas decisiones que tienden a agravar más sus escenarios, generando más caos y destrucción, no sólo de sus mentes, sino hasta de sus propias familias.

Este estudio ha sido diseñado para mostrarle a aquél que llora en su soledad que sí existe una solución real para su crisis personal y/o familiar, que los errores sí pueden ser rectificados y transformados para bien y que sí es posible superar una pésima condición particular en escenarios de excelencia y bienestar. Todo es cuestión de creerle a Dios, vincularse a Sus Preceptos, prepararse mentalmente para el cambio, romper el paradigma del “no puedo” y asumir una actitud valiente ante lo que lo acobarda.

Cambias tú, cambiará tu entorno:

Rompe con el paradigma que te hace ver que la culpa de tus desgracias la tienen las demás personas, o la sociedad, o Dios, o un mitológico “diablo” que te acecha continuamente y busca devorarte. Ese es un pernicioso y distorsionado enfoque espiritual que terminará hundiéndote más y más en las arenas movedizas de la desilusión y la miseria. Echarle la culpa a terceros es una actitud muy humana, pero del todo corrompida, la cual hemos heredado de nuestros ancestros Adán y Eva. Recuerda que Eva, cuando fue confrontada por el Eterno, le echó la culpa a la serpiente (“La serpiente me sedujo y comí”, exclamó), y Adán, por otro lado, le echó indirectamente la culpa a Dios cuando argumentó “la mujer que pusiste conmigo”. (Véase Génesis 3: 11-13). Ninguno fue capaz de admitir su propia responsabilidad en el recién hecho de desobediencia. Transfirieron la responsabilidad de sus actos a terceros. ¿Qué resolvieron con esto? ¡Nada! Antes bien, empeoraron todo el escenario, y finalmente fueron echados del Jardín del Edén.

 El entorno fue dañado, corrompido y trastocado por la imprudente decisión de un hombre y su mujer. ¿Quién se corrompió primero? El hombre, claro está. ¿Qué se corrompió después? Su entorno. ¿Cuál debe ser, entonces, la perspectiva de reparo que debemos emprender en nuestro escenario? Primero el hombre y luego el mundo. Pero, ¿qué es lo que está haciendo el hombre de hoy y de siempre? Intentando cambiar a su mundo, pero sin querer cambiar él como corona de la creación que es. ¿Te parece familiar este hecho? ¿Estoy contando, acaso, tu realidad personal? Vamos, admítelo. Tú y yo somos como Adán y Eva. Toda la culpa de nuestros fracasos se lo endosamos a otros, menos a nosotros mismos. Somos los “buenotes” de la película que nos hemos inventado. ¿En qué nos ha beneficiado mantener este comportamiento? En nada, ¿verdad? Por el contrario, más rencores nacen, crecen y se fortalecen en nuestro ser interior. Más complejos negativos, más divorcios, más enemistades, más deudas, más y más dolor le añadimos a nuestra golpeada vida. Pero, ¡basta ya! Asume tu lugar en tu mundo y en tu generación. ¿Quieres ver mejorar las cosas? ¡Sé que sí! Por lo tanto, lo primero que debes asumir es tu propia responsabilidad en la fracasada vida que llevas. Sólo tú eres el responsable de todo lo que te está aconteciendo. Eres el constructor o destructor de tu propia existencia. Y esto no debe desilusionarte, ni mucho menos llevarte al fango de la miseria. Antes bien, debe despertar en ti todo ese cúmulo de energías positivas que hoy duermen dentro de ti y utilizarlas en tu viaje al cambio integral. Las cosas pueden cambiar, mejorar y enderezarse. Depende de ti.

 

Comenzar el proceso hacia el cambio es la clave de la transformación integral:

         Huir del problema, endosárselo a terceros, echarse a morir o resignarse a una vida vacía y sin fruto, son actitudes mediocres que no resuelven nada, sino que tienden a empeorar las cosas y a hacer infelices a sus víctimas. Esperar acomodado en el sillón de la indiferencia que “un milagrito” resuelva todo tu mundo de problemas, como es costumbre entre los idólatras, encaja bien en un marco puramente fantasioso y absurdo.

    Mi amigo, las clave es DECISIÓN. Hay que decidirse por un cambio efectivo, real, total y completo. Decidirse, decidirse y decidirse; no hay otro camino a seguir. Sin embargo, debo confesarte que el viaje hacia la libertad integral no es un asunto fácil. Se requiere mucha fortaleza, disciplina y perseverancia. Recuerda, es UN PROCESO. Se necesita tiempo, paciencia y tenacidad. Tendrás que vencer el desgano, la impaciencia, el temor, la culpabilidad, el temor al qué dirán y hasta el rechazo de otros. No obstante, debes atreverte a dar el primer paso. Es el más difícil, pero el definitivo para emprender tu viaje.


         Nunca se te olvide que el Mar Rojo se partió, ante todo un pueblo que lloraba su crisis, cuando un hombre, Moisés, dio el primer paso: Golpear las aguas y adentrarse en ellas. Incluso, se necesitó mucha firmeza para ver el portento divino, pues las aguas ya alcanzaban el cuello de los Israelitas. Pero finalmente las aguas cedieron ante la tenacidad de Moisés quien decidió avanzar hacia su liberación, creyendo firmemente en la promesa del Eterno (Véase Éxodo 14). ¿Por qué fue derribado el gigante Goliat? Porque un jovencito decidió luchar contra él y vencerlo. ¿Existían peligros? ¡Por supuesto! ¿Había posibilidades que David cayera destrozado en las bestiales manos de Goliat? ¡Claro que sí!, y muchas. Pero David no se arredró ante el desafío. Dio el primer paso, planificó su estrategia y fue luego a cumplir su tarea: salvar a Israel de la ignominia (Véase 1 Samuel 17).


         Has sido llamado a la libertad integral; por lo tanto, salta hoy del valle de la mediocridad y la vergüenza. Vístete de valor y confianza. Da el primer paso hacia tu libertad. No dejes que los temores y los sobresaltos te paralicen. Empieza ya, hoy, ahora mismo. Tienes todo de tu parte. El cielo suele respaldar, fortalecer y ayudar a aquellos que deciden cambiar, rectificar y comenzar de nuevo. Deja que los ignorantes, envidiosos y torpes de visión ladren su fanfarronería. Tú, avanza. Prosigue hacia la meta: tu entera liberación. No esperes “señales celestiales” ni “experiencias extra sensoriales” para arrancar tu marcha. Inicia tu jornada ahora mismo. Eleva al cielo una plegaria que encienda la moribunda llama de tu corazón, y el Eterno, que es benigno y misericordioso, te abrirá todas las posibilidades para que faciliten tu viaje hacia tan anhelada libertad.

Alfredo Zambrano García

 

El Nimrod del Siglo 21

"> La idolatría provoca dolor y odio. Puede ponerse máscara de Batman, de pseudo-mesías, de progresista, etc. pero no puede dejar de expandir su veneno.

La idolatría tiene la capacidad de destruir naciones. Esto es especialmente peligroso cuando un porcentaje elevado de la población está fielmente aferrada a su ídolo y es peor aún cuando el objeto de veneración es un tiranuelo.

Como en el caso de Nimrod (que en la época de Abraham se declaró a si mismo objeto de veneración), el hombre-dios decreta que quien hable de manera distinta – quien busque el camino de Dios, la moderación – deberá ser tildado de traidor (en el mejor de los casos) y (en el caso más oscuro) será aplastado

Aplastado si ante toda esa barbaridad no hace lo correcto (como lo hizo Abraham a su tiempo) y confronta con valentía y madurez las consecuencias que pudieran sobrevenir.

Voy a decirlo sin tapujos: el Chavismo es un culto idolátrico y Latinoamérica está siendo absorvida por esa cloaca; pues, entre otras razones, quienes ejercen la oposición política en los diferentes países donde el Coronel Nimrod ya ha puesto su bota, están en su mayoría bañados de corrupción y de una falta total de autojuicio.

¿No se convence usted de que el Chavismo es un culto idolátrico? Lo invito a leer el siguiente artículo del fotoperiodista Pablo Corral Vega, publicado en el periódico El Comercio de Ecuador y juzgue por sí mismo:

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La Caracas de Chávez

 Por Pablo Corral Vega

El fotoperiodista Pablo Corral Vega viajó a Venezuela para constatar lo que estaba pasando en el país que había visitado en los años 90. ¿El resultado? Encontró una nación polarizada, en la cual todos deben pertenecer a un bando: escuálidos o rojos rojitos. Los que apoyan a Chávez lo hacen con fervor religioso, y los que están en contra se sienten aplastados.

Caracas está dividida, marcada, ya no es la misma que conocí en los años 90. Mis viejos amigos se han distanciado entre sí por razones políticas, hay municipios chavistas y municipios anti-chavistas.

Los que apoyan a Hugo Chávez lo hacen con fervor religioso, y los que están en contra se sienten aplastados, cansados, hablan de emigrar, de dejar el país que aman.

Venezuela vive un  momento de efervescencia. Los ‘rojos rojitos’ ven en Chávez al salvador, lo cuidan, lo idolatran, hablan de él con pasión y ternura. Cuando le pregunto a una mujer que reparte posters del presidente en la Plaza Bolívar  qué significa Chavez para ella, me abre su billetera.

Ahí guarda una estampa de la Virgen, una foto de su madre fallecida y otra del Comandante. “Yo le rezo al Comandante y le pido que nunca nos abandone, que siga cuidando de los pobres”, me  dice emocionada.

“El chavismo se  apropió de los símbolos  venezolanos”, me dice un fotoperiodista amigo. “Se ha apropiado de Dios, de la Virgen de Coromoto, de Simón Bolívar, de los próceres, de la bandera”.

Los alrededores de la Plaza Bolívar y el Palacio de Miraflores están cercados por ‘rojos rojitos’. Se acerca uno y otro a preguntarme qué hago, para qué son las fotografías. Solo cuando muestro el permiso de trabajo del Ministerio de Educación de Venezuela se alejan unos metros, pero me vigilan desde lejos.

La relación con los periódicos es pésima. Y los fotógrafos son el brazo visible de esos medios que, de acuerdo a los ‘rojos rojitos’ han sido injustos. “Son los medios los que han polarizado las cosas”, me repiten una y otra vez. “Esos escuálidos (opositores)  siempre le buscan errores a la Revolución, pero esta es una revolución eterna”, me dice un hombre que alimenta  palomas en la plaza.

Ahí cerca está Anita Urdaneta,  la dueña de la peluquería bolivariana. Sus precios son bajos, esa es su manera de ser solidaria. A todos sus clientes les habla del Comandante como si fuera un viejo amigo. Ella dice que haría cualquier cosa por defenderlo; “cualquier cosa”, me repite mirándome a los ojos. “¿Seguro  que  no eres un escuálido?”.

Los dominios de Chávez

Llegué a Venezuela con gran curiosidad, quería ver directamente qué estaba sucediendo. La política es el único tema de conversación, y todos quieren que uno se identifique, que diga a quién apoya. Los matices han  haparecido.

Hay comederos chavistas y comederos anti-chavistas, incluso los lugares de baile que eran tan democráticos en Caracas -se veía gente de toda clase social- ahora son extremadamente selectivos.

“Es para evitar las peleas”, me dice un buen amigo que me lleva a recorrer la Caracas nocturna. Terminamos en  “El Maní es así”, uno de los pocos sitios en que se juntan gobiernistas y opositores.

Baile, risas y la orquesta que no se detiene.  A la madrugada hay una pelea. “Es siempre por política”, me dicen. “Se ha cultivado el odio entre los que no tienen nada y los que tienen algo, y el que tiene un carro viejo ya es un oligarca”.

Al otro lado de Caracas, en La Vega, vive Félix Caraballo. Uno de los millones de seguidores incondicionales de Chávez. Su barrio no tiene alcantarillado y ese día los vecinos van a limpiar una acequia que lleva los desperdicios cuesta abajo.  Millones de personas viven en esas condiciones en Caracas. En La Vega, los vecinos agarran picos y palas, todos visten de rojo; en cada casa  hay una bandera roja o una foto de Chávez.

Gerónimo González, resalta por su camisa verde, es el único que habla en contra. “¿No se dan cuenta de que es la misma mentira? Este gobierno tampoco nos va a sacar de este lugar?  ¿Qué nos ha dado este gobierno? Solamente caraotas más baratas”, dice.  Félix me mira e insinúa que Gerónimo está loco.

Aunque de otra manera, la oposición también acusa al Presidente. Dicen que usa los  recursos petroleros del Estado para financiar programas de subsidio, que no  solucionan nada, porque no impulsan la productividad.

En todo caso, las misiones (programas de salud, educación, tenencia de tierra, cedulación…) han servido para fortalecer la imagen del Presidente entre los más pobres. Son la estrategia de campaña más poderosa del Gobierno.

“La democracia no nos da de comer, el Gobierno sí”, me dice un vecino de La Vega. Los productos subsidiados, que se venden en los Mercales (tiendas del Estado), llevan propaganda del Gobierno y son considerablemente más baratos.

En la oposición está Teodoro Petkoff, uno de los líderes más respetados, incluso por Chávez. Fue guerrillero y activista de Izquierda. Hoy, dirige el periódico Tal Cual. Durante la media hora que estoy con él ofrece audiencias de cinco minutos a una cantidad de personas.

Habla con mesura, pero mueve las manos, gesticula, se le nota una cierta angustia en el rostro. Es el único candidato que podía hacerle frente a Chávez porque es un izquierdista y no va a desmantelar lo  positivo de la Revolución. Pero él no está de acuerdo con el autoritarismo y el militarismo latentes.

En medio de todas las prevenciones, consigo asistir a una reunión de un comité de tierras, en la que se habla de manera apasionada de los títulos de propiedad que el gobierno dará a los que hayan ocupado tierras. Con mucha dificultad, también obtengo la autorización para visitar una escuela bolivariana en el barrio 23 de Enero, uno de los más pobres y conflictivos de Caracas.

Llego a tiempo para el desayuno subsidiado por el Estado y preparado por voluntarias. Los niños rezan antes de desayunar;  dan las gracias a Dios y le piden que siempre proteja al Presidente.

Cerca de la escuela está uno de los consultorios atendidos por médicos cubanos.  Es imposible fotografiar a los médicos, se necesitaría un permiso expreso del Ministro de Salud, me dice una secretaria muy displiscente.

Un vecino me cuenta que las mañanas los médicos atienden en los consultorios y las tardes salen a hacer visitas, hablan de medicina preventiva y de las bondades de la Revolución. Es un trabajo de hormigas en respaldo de la causa socialista, casa por casa, enfermo por enfermo.

Pero la influencia cubana se ve ante todo en una organización celular, barrial, que en Cuba se llama Comité de Defensa de la Revolución y en Venezuela se  llaman Círculos Bolivarianos.

Devotos de la Revolución

Los Círculos son uno de los temas más controversiales. Se los acusa de ser el brazo armado de la Revolución, la fuerza de choque del Presidente. Están conformados por partidarios radicales de Chávez,  dispuestos a defender  con su vida el proceso político. Son organizaciones culturales o deportivas, pero su misión principal es defender la Revolución.

Los Círculos están listos para acudir al llamado del Presidente. Los periodistas les temen porque ha habido varios ataques y amenazas en su contra.

Este tema me interesó especialmente y quise conocer a Lina Ron, una de las principales dirigentes de los Círculos Bolivarianos y líder del Partido Unidos por Venezuela. Lina es el personaje más odiado por los anti chavistas. Ella tiene un programa incendiario en la radio, en el que se burla de los escuálidos y de quienes hablan inglés.

Lina defiende la revolución socialista a ultranza, y asegura que si las mafias que han gobernado Venezuela durante décadas -es decir todos los que no están con Chávez- no aceptan la voluntad del pueblo, la Revolución los aplastará. Para ella, el mundo está dividido entre buenos y malos, ciudadanos y oligarcas, progresistas y retrógrados, bolivarianistas e infiltrados, humanistas e imperialistas.

Después del programa de radio Lina baja la guardia. Es una mujer inteligente, con un gran sentido del humor, fogueada en política. Me paso con ella una tarde entera tomando cerveza y hablando del proceso venezolano.

Ahí me dice que la Revolución Bolivariana es el sueño que muchos han abrazado por décadas y que nadie va a detener el proceso.  Le pregunto qué piensa del autoritarismo del Presidente. Para ella, no existe un Presidente más comprometido con la democracia, extraordinariamente tolerante con los escuálidos. 

Además, me dice que la democracia de antes no era democracia, era el instrumento de la oligarquía para oprimir al pueblo. Afirma que ahora vendrá una nueva etapa en la que lo más importante será la Revolución.

El tiempo dirá si Lina tenía razón. Por ahora, salgo de Venezuela con una  certeza: es un país totalmente polarizado, dividido, donde no caben los matices…

 

¡Por Dios, gracias a Dios, que los judí­os creen en Dios!

Durante dos décadas fui ateo. Muy militante por cierto. Incluso me vanagloriaba de que cuando llegaban los misioneros a vender sus revistas, panfletos, etc. yo terminaba "convirtiéndolos". No les tenía miedo alguno.

Me eduqué en un ambiente donde no había imposiciones religiosas: mi padre era ateo y mi madre era un tipo de católica no-observante – iba a misa una única vez al año, cuando hacían un recordatorio por mi abuelo, que descanse en paz. Por otro lado, disfruté de una de las pocas ventajas comparativas que presenta la educación pública de Ecuador, el laicismo – en Ecuador no se puede enseñar religión en las escuelas públicas.

Me parecía que salvo unos cuántos evangélicos – menos que los dedos de mis manos – todos los religiosos en mi entorno eran nada más que hipócritas que no se decidían a ser mejores personas por sus propios medios sin depender de su miedo al infierno. Además, sin equivocarme casi, yo pronosticaba que la señorita X que dictaba catecismo en una determinada parroquia eventualmente aparecería en "apuros" y que tendría que casarse "a toda velocidad, no sea que se le note"… 

Sin embargo, siempre hubo un grupo humano que despertaba toda mi admiración – los judíos. De hecho, yo pensaba que, en la práctica, judío era sinónimo de genio. Y jamás me puse a pensar en que ellos tenían una religión propia…

Mi admiración provenía del hecho de que siempre me sentí atraido por la Ciencia y porque era ajedrecista. Por el ámbito de la Ciencia basta mencionar al físico Einstein o a los matemáticos Jacobi para entenderlo. En cuanto al ajedrez: siempre decíamos, en la jerga de los escaques, que hay cuatro tipos de ajedrecistas de élite: 1. judíos rusos, 2. judíos no-rusos, 3. rusos no-judíos y 4. no-rusos no judíos… En aquel tiempo, Kasparov (un azerbayano de padre judío con nacionalidad rusa) reinaba sin dejar lugar a dudas de que era un deslotado…

Admiraba más todavía a los judíos por su valentía para sobreponerse a las adversidades.  Nada de autoindulgencia. Resistencia pura. Firmeza. ¡Y que les importa si no los quieren! Yo me decía que Israel debe ser un país donde para encontrar inteligencia pura uno tenía que simplemente salir a la calle y hablar con la primera persona que pasara… Yo tenía unos 9 años….

En un momento de mi vida me encontré, como muchos de mis lectores posiblemente experimentaron, un vacío proveniente del hecho de que estaba viviendo una "vida recta pero sin un sentido profundo". Y, como Jesús era judío, y una persona muy cercana me hablaba de Jesús y los judíos – siempre en buenos términos, terminé creándome una crisis existencial: ¿existe Dios? Todos creen que existe y, ¡hasta los judíos lo creen!

¿Conclusión? Un evangélico militante más apareció en la escena…

Y, para mi suerte, en aquella iglesia siempre ponían como ejemplo a los judíos…  

Y llegaron los aires del (pseudo) Judaísmo Mesiánico. Y la onda de lo "hebreo"… Por fin, puesto que admiraba más a los judíos que a cualquier mal ejemplo que daba la familia del caballero pastor, surgió una pregunta casi de manera natural: ¿por qué no creen los judíos en Jesús= Ieshu= Yeshuah= Yehoshua= cualquier cosa?

Comencé a buscar en páginas de internet judías – ¡pero de verdad judías! Y lo que hallé es una Fe Racional. Uno podía no estar de acuerdo con sus premisas, pero tenía que reconocer que no era un sistema que lógicamente presentara contradicciones… como contraparte cada palabra del Cristianismo reclamaba la palabra misterio o fe ciega para sustentarse… Se avecinaba otra crisis existencial: ¿Cristianismo – una fé sustentada en el corazón y las emociones – o Judaísmo – una fe racional?

Me enteré de las Siete Leyes y abandoné el Cristianismo mientras me encontraba lejos de mi hogar pues viajé al viejo continente a hacer mi PhD. Pero abandoné el Cristianismo emocionado con convertirme al Judaísmo. No quería saber nada de aquellas Siete Leyes. Para mi eso estaba bien para el resto, ¡yo debía ser judío!

Yehuda Ribco atendió a mis preguntas muy a su estilo: directo, sin anestesia. Me dijo que para pensar en ser judio primero uno debía vivir al máximo potencial las Siete Leyes y entonces, después de algunos años, analizar si efectivamente uno quiere tomar el yugo de la Torá… Y (¿cómo no?) como el consejo era de un judío judío, le di mucho valor. Seguí su consejo…

Ahora está clara la película: no necesito hacer ninguna conversión. Sé que uno puede elevarse como noájida. Pero también sé, gracias a mis años como noájida observante, cuál camino quiero. Trabajamos con mi esposa en ese propósito común y, Dios mediante, será lo mejor. 

 

 

 

Resp. 76 – No serlo ni parecerlo

shalom le felicito por sus concejos ha sido maravillosa la informacion contenido en los articulos que ha publicado.mi pregunta es esta.desde hace 10 años mi esposo y yo estudiamos la TORA,nos esforzamos cada dia para ser mejores como esposos,.como personas y tener una vida integra ante EL ETERNO BENDITO SEA.
hemos vivido como gentiles practicando cada dia los preceptos como benei noaj.
sin embargo nuestro mayor ahnelo es alcanzar la conversion,hemos entendido lo que usted ha enseñado con respecto que no hay necesidad de ser judio para ser admitido por D-S BENDITO SEA,sin embargo es una necesidad espiritual de ambos ser nutridos por los miztvot y necesitamos la instruccion de un rabino,pero aqui en la ciudad de cali colombia ha sido casi imposible.en repetidas ocasiones no nos han permitido ni siquiera una entrevista con el rabino,nos desprecian sin embargo seguimos adelante con nuestros propositos porque es el ahnelo de nuestro corazon estamos seguros por el camino que hemos decicdo tomar,nuestra conviccion es muy profunda,
hemos comprado algunos libros para orientarnos ,guardamos siempre el SHABAT,consumimos alimentos KOSHER,COMPRAMOS UN SIDUR EL CUAL USAMOS PARA REALIZAR NUESTAS ORACIONES,estamos estudiando hebreo.
sin embargo necesitamos la orientacion de un rabino,por esta razon le escribo para que usted me oriente.gracias por su respuesta.
CESAR Y MARIELLA DESDE CALI COLOMBIA.

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