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Shobabim Tat

Las semanas en las cuales se lee desde la parashá Shemot hasta la de Tetzavé, reciben el nombre de: «Shobabim Tat».
Nombre que se forma con la iniciales de cada una de las parashot: Shemot, Vaerá, Bó, Beshalaj, Itró, Mishpatim, Terumá, Tetzavé.

Desde un punto de visto más profunda, el nombre «Shobabim» insinúa las palabras del Eterno a través del profeta:

«Shubu banim – ¡Volveos, oh hijos rebeldes, y os sanaré de vuestras rebeliones! -Henos aquí; nosotros venimos a Ti, porque Tú eres el Eterno nuestro Elokim.»
(Irmiá / Jeremías 3:22)

Y «Tat», son las parashot que se añaden cuando estamos en un año embolismal, con un segundo Adar.
Este nombre, formado por dos letras tet, insinúa las nobles conductas de: Teshuvá y Tefilá, Retorno/Arrepentimiento y Rezo/Plegaria.

Algunas personas muy piadosas durante estas semanas: ayunan los lunes y jueves, incrementan sus plegarias, actos de contrición y la caridad.
Es un tiempo especial para incentivar o comenzar los cambios trascendentes en nuestras vidas, para decidirse a hacerse responsable de la propia vida de una manera más intensa y comprometida con la Torá y los preceptos.

Veamos ahora una pequeña enseñanza de cada parashá de estas semanas:

Shemot: Tefilá

«Los Hijos de Israel gemían a causa de la esclavitud y clamaron a Elokim, y el clamor de ellos a causa de su esclavitud subió a Elokim.Elokim oyó el gemido de ellos y se acordó de Su pacto con Avraham [Abraham], con Itzjac [Isaac] y con Iaacov [Jacob].
Elokim miró a los Hijos de Israel y Elokim comprendió»
(Shemot / Éxodo 2:23-25)

Dirija al Eterno sus plegarias, abra su corazón ante Él y espere con confianza la respuesta que siempre es buena.
Vaerá: Reconocimiento del pecado y error

«Entonces el faraón mandó llamar a Moshé [Moisés] y a Aarón y les dijo: -He pecado esta vez. El Eterno es el justo; yo y mi pueblo somos los culpables.»
(Shemot / Éxodo 9:27)

Aquel que no se percata de que está yendo por mal camino, no podrá jamás llegar a buen puerto. El primer paso del arrepentimiento, del retorno a la propia esencia espiritual y a Dios, es cuando uno dice: «estoy mal».

Bó: Aprender y educar

«Y cuando mañana te pregunte tu hijo diciendo: ‘¿Qué es esto?’, le dirás: ‘Con mano poderosa el Eterno nos sacó de Egipto, de la casa de esclavitud.»
(Shemot / Éxodo 13:14)

No se puede andar por los caminos del Eterno si no se estudia lo que tiene permitido de Torá, pues en ella está el sentido de nuestras vidas.
Y cuando hemos estudiado, también tenemos que enseñar a quien sabe menos que nosotros.
Especialmente a nuestros hijos, pues la fidelidad de la Torá se ha mantenido gracias a la transmisión de padres a hijos, generación tras generación del pueblo judío. Que también puede recibir al apoyo de los gentiles justos, los noájidas.
Beshalaj: Agradecimiento y gozo

«El Eterno es mi fortaleza y mi canción; Él ha sido mi salvación. ¡Éste es mi Elokim! Yo le alabaré. ¡El Elokim de mi padre! A Él ensalzaré.»
(Shemot / Éxodo 15:2)

Es un deber estar agradecido por todo lo que el Eterno nos ha brindado, pues el espíritu agradecido es uno que reboza de gozo.
Para el que es sinceramente agradecido, no hay dolor por la ambición no colmada.
Itró: Atraer al prójimo a la Luz

«Moshé [Moisés] contó a su suegro todas las cosas que el Eterno había hecho al faraón y a los egipcios a favor de Israel, los contratiempos que habían pasado en el camino, y cómo los había librado el Eterno.»
(Shemot / Éxodo 18:8)

Agradecer y alabar al Eterno por nuestras bondades es muy bueno, pero es necesario hacer partícipe a nuestro prójimo de las bondades que el Eterno constantemente nos otorga.
Demos cabida a nuestro hermano en la Luz de la Torá, contémosle acerca de la justicia y la misericordia del Eterno, extendamos una mano al que nos necesita.
Porque el egoísta no es considera como una persona viva, sino solamente como alguien que pasa por la vida con gran vacío existencial.

Mishpatim: Cumplir con los mandamientos

«Asimismo, tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: -Todas las cosas que el Eterno ha dicho, haremos y comprenderemos.»
(Shemot / Éxodo 24:7)

El rezo es importante, así mismo lo es el reconocimiento del error.
Lo es estudiar y también agradecer.
Pero la base de la plenitud espiritual se encuentra en el esfuerzo por cuidar y cumplir con los preceptos que Él nos ha dado. Con TODOS aquellos preceptos que podemos cumplir, y que nos corresponde que cumplamos.
Terumá: Generosidad y santidad

«Di a los Hijos de Israel que tomen para Mí una ofrenda; de todo hombre cuyo corazón le mueva a hacerlo tomaréis Mi ofrenda… Que Me hagan un santuario, y Yo habitaré dentro de ellos.»
(Shemot / Éxodo 25:2-8)

Es nuestro deber abrir nuestra mano, y nuestro corazón, tanto para dedicar de nuestro dinero y esfuerzo para las obras del Eterno, como para ayudar a nuestro prójimo que está necesitado.
Cuando somos auténticamente generosos, cuando damos de lo nuestro sin hacer negociados camuflados, entonces estamos construyendo un verdadero santuario para el Eterno en nuestras vidas.
A través de nuestra generosidad el Eterno «habita en nuestro ser».
Tetzavé: Iluminar a nosotros y al mundo

«Tú mandarás a los Hijos de Israel que te traigan aceite de olivas claro y puro para la iluminación, a fin de hacer arder continuamente las lámparas.»
(Shemot / Éxodo 27:20)

Debemos hacer que el Eterno sea alabado a través de nuestra conducta.
Que todas nuestras acciones, por medio incluso de las cosas más banales y corrientes, se santifique Su Nombre entre las personas.
Está en nosotros la capacidad de hacer alumbrar la divina llama, es cuestión de quererlo y trabajar por ello.

Estos ocho consejos, si se aplican en las semanas Shobabim Tat, o todo el año, sin dudas que llevan a la persona a un estado de salud espiritual que equilibra también la salud mental, social, emocional y física.
Empecemos ahora, es tiempo propicio para hacerlo…

Solamente un poquito diferentes…

Tú tienes presente que el Padre Celestial ha sellado un pacto eterno contigo, así como con el resto de la humanidad.
Un pacto que los noájidas (los gentiles, personas no judías) deben cumplir rigurosamente, por amor y fidelidad al Eterno.
Es un pacto muy simple, completamente cercano al corazón de la persona, pero al mismo tiempo de profunda riqueza y contenido.

De tu parte, lo cumples a través de la adhesión a los Siete Mandamientos Fundamentales, con sus derivados legales:

1- No servir ni venerar dioses que no son el Eterno.
2- No blasfemar, no maldecir al Eterno.
3- No asesinar.
4- No robar.
5- No mantener relaciones sexuales que han sido prohibidas (infidelidad conyugal, bestialismo, homosexualidad e incesto).
6- No comer parte de animal con vida.
7- Procurar que hayan institutos de Legislación y Justicia en la sociedad.

Como puedes observar, son preceptos accesibles a cualquier persona.
De hecho, en la mayor parte del mundo se siguen casi todos estos Siete Preceptos.
Se establecen modos y formas de legislación y justicia.
Es delito robar y asesinar.
En gran medida existen leyes y normas en contra de la infidelidad matrimonial, existen leyes en contra del incesto y del bestialismo (actualmente, y a causa de un lobby que presiona de mil maneras distintas, se está mitigando la censura social a la práctica de la homosexualidad; pero este libertinaje no coincide con el desarrollo de la humanidad, sino con su alejamiento de la corrección).
Es costumbre en gran cantidad de sociedades que no se coman partes de animal con vida, si bien siguen manteniéndose algunas costumbres adversas.
Las personas suelen abstenerse de maldecir a las deidades, aunque sin saberlo muchísimas personas incurren en pecado en este punto, pues ofenden al Eterno, al Padre Celestial. Pero, son muy pocos los que lo hacen con ánimo de rebeldía, por oposición voluntaria en contra de Él. Por lo cual, el pecado (que existe y es grave), es menos severo.

Así pues, hasta aquí podemos considerar que en buena medida la humanidad se adhiere inconscientemente a su legado espiritual, esto es, los Siete Mandamientos Fundamentales. (Por no reconocer el origen en el pacto con Noaj, y su confirmación en Sinaí, el valor del cumplimiento es menor; pero allí está).
Nosotros, que vivimos en sociedades de mayoría cristiana, o con un pasado reciente de tal mayoría, podemos advertir que el cristianismo se afilia con bastante claridad a estos mandamientos.
PERO, fallan groseramente en el cumplimiento de al menos uno de estos mandamientos: el de no adorar o servir dioses falsos.
Pues, toda su doctrina religiosa reposa en cimientos de corrupción, de idolatría, de desprecio al Dios que es Uno y Único.
Por supuesto que el pecado de la idolatría es gravísimo, pues cuando uno deja de lado al Eterno, con facilidad desecha el resto de los mandamientos.
Es el fundamento de los fundamentos, el centro de la existencia, el reconocer al Eterno, y solamente a Él.
Claro, la mayoría de los cristianos son ignorantes de las verdaderas cosas de Dios, de los asuntos realmente espirituales.
Son como niños que han sido criados en el error y no tienen comprensión.
Así pues, a la hora de considerar a tus vecinos y allegados cristianos, debieras verlos con amor y respeto, con consideración y ternura.
Ellos, en su mayoría, son personas de bien, que actúan con bondad, que buscan lo mismo que los fieles al Eterno: construir un mundo de Shalom.
Solamente que están errados, profundamente errados, en sus doctrinas religiosas, pues adoran a un falso dios y un mentiroso redentor. Son ovejitas extraviadas detrás de un falso mesías, un farsante pastor.
Pero, ellos no lo hacen con espíritu de rebelión o maldad, al menos no la mayoría de ellos.
Sino que están confundidos, perdidos en la oscuridad y creen que las palabras altisonantes de sus líderes y libros «sagrados» tienen la «verdad».
Sin embargo, hay algunos grupetes de taimados, estafadores de la fe, maliciosos y rebeldes, que se enmascaran como si fueran santos y portadores de luz, cuando son proxenetas de la maldad, promotores de la maldición. Estos agentes del mal no son personas inocentes, sino rebeldes en contra del Eterno. Gente que no debemos admitir en nuestro seno, pues corrompen sin piedad. Aman la corrupción y se apasionan por destruir lo bello y bueno. Pero, son los menos, un puñado venenoso, el cual debes distinguir de la enorme masa de gente buena y sencilla, que está atrapada en la fe como si fuera una telaraña.

Tú, como noájida activo, debes reconocer la bondad que hay en la gran mayoría de los que se hacen llamar cristianos, a la vez que distingues ese punto oscuro y sumamente tóxico, que es la infidelidad al Eterno, y en ciertos casos la blasfemia.

Por esto, en vez de oponerte y censurarlos amargamente, puedes aproximarte con autenticidad y sinceridad, para expresar tu aprobación al 99% de sus conductas y actitudes.
Puedes compartir los mismos ideales de paz, bienestar, armonía, etc.
Sin embargo, hay un aspecto el cual tú no puedes admitir, que es la idolatría, que es la fe enfermiza en Jesús, con el consiguiente desprecio por el Uno y Único.

Ahora que sabes esto, ¿cómo puedes administrar tus energías para acercar más gente a la Buena Senda?
¿Qué puedes hacer para que más personas sean constructores completos de Shalom?

«Juego» mortal. Cuando no hay Luz…

Tomamos esta información de Peru21.

«»Niños, escolares y adolescentes no solo lo conocen bien; también lo practican dejándose llevar por la promesa de diversión pasajera a cambio de, literalmente, jugarse la vida. El ‘choking game’ (su nombre en inglés) o ‘juego de asfixia’ es una peligrosa práctica que, tras difundirse con gran rapidez entre los menores de Estados Unidos y de Europa, ha llegado al Perú, donde ya se han reportado varios casos.

Como su nombre lo indica, el mal llamado “juego” consiste en ahorcar a una persona para cortarle la circulación de la sangre que le debe llegar al cerebro. Después del estrangulamiento -que puede conllevar a la pérdida de conciencia-, el oxígeno retorna a la masa encefálica produciendo una pasajera sensación de euforia.

Freddy Vásquez, jefe del Programa de Suicidio del Instituto de Salud Mental Honorio Delgado-Hideyo Noguchi, informó que, en los dos últimos años, dicho centro ha tratado al menos cinco casos de adolescentes (entre los 14 y los 17 años) que incurrían en estos peligrosos hábitos. Incluso, uno de ellos lo hacía sólo por buscar placer.

Según el psiquiatra, este paciente se inició en el peligroso hábito tras enterarse por Internet, visitando páginas que lo incitaban a asfixiarse o dejar que otra persona lo estrangulara.

Vásquez explicó que los jóvenes propensos a esta actividad tienen una inteligencia elevada, rasgos de personalidad inestable, buscan experiencias excitantes, pasan muchas horas en Internet, se reúnen con amigos -especialmente varones-, provienen de hogares rotos y hasta consumen sustancias ilegales.

PRÁCTICA MORTAL. En lo que va del año, solo en Estados Unidos se han producido 37 muertes de menores por accidentes jugando el ‘choking game’, mientras que en Francia se reportan un promedio de 10 víctimas anuales por esta cuestionable práctica.

En tanto, la Policía sigue investigando la extraña muerte del niño Luis Sánchez Fuentes (10), a quien encontraron colgado de una viga en su casa, en San Juan de Lurigancho. Ayer, los familiares del menor revelaron a los detectives que la víctima -el día de su muerte- estuvo acompañada de dos compañeros del colegio Benito Juárez.

El vigilante de la cuadra y una vecina los vieron salir presurosos de la vivienda poco antes de que lo hallaran colgado de una viga. “Solo sabemos que eran mayores que Luis y que llevaban el uniforme del colegio”, aseguró Janet Tafur, tía del pequeño.

El director de la Dirincri, general Walter Rivera, señaló que también se investiga, como un probable caso de muerte por ‘choking game’, el deceso de un compañero de Sánchez, Jerson Vega Ramírez, quien falleció un mes antes.

EMOCIONES FUERTES. En diálogo con Perú.21, el psicólogo Roberto Lerner expresó su preocupación por el hecho de que algunos niños imiten el ‘juego de asfixia’ tras haber sido difundido en televisión y en otros medios. Además, reveló que él ha tenido la oportunidad de tratar incontables casos de menores que practican la asfixia por placer.

Aunque el especialista dijo que no en todos los niños que buscan emociones fuertes se presentan estos casos, recomendó que los padres estén atentos si ven que sus hijos tienden a tomar riesgos con el fin de vivir experiencias excitantes.

Fuente: Peru 21″»

Cada día es más urgente que afiancemos la fidelidad al Eterno.
Sigamos trabajando para ser constructores de Shalom.

El enano que es gigante

El inspirado salmista pareciera contradecirse:

«Cuando contemplo Tus cielos, obra de Tus dedos, la luna y las estrellas que Tú has formado, digo: ¿Qué es el hombre, para que de él Te acuerdes; y la persona, para que lo visites?»
(Tehilim / Salmos 8:4-5)

El hombre es pequeño ante la magnanimidad de la naturaleza.
Es un granito de polvo distante, en medio de una orquesta inmensa y bella.
El hombre es cual nada, una ínfima presencia ignota e ignorada.
Tal como profundiza en el pasaje que menciona:

«Oh Eterno, ¿qué es el hombre para que pienses en él? ¿Qué es el hijo del hombre para que lo estimes?
El hombre es semejante a un soplo; sus días son como la sombra que pasa.»
(Tehilim / Salmos 144:3-4)

Pero, el mismo salmista dice que somos como ángeles:

«Lo has hecho un poco menor que los ángeles y le has coronado de gloria y de honra.
Le has hecho señorear sobre las obras de Tus manos; todo lo has puesto debajo de sus pies»
(Tehilim / Salmos 8:6-7)

¿Acaso es una contradicción?

En realidad, el salmista hace dos movimientos complementarios, que en nada se contradicen.
Por un lado reconoce la pequeñez humana, pero inmediatamente testimonia la grandeza que radica en el humano.
Una grandeza que no está en su magnitud física,
ni en su potencia material,
sino en eso inasible q es el espíritu…

La belleza de la persona,
más allá de la máscara y las cáscaras,
está en saberse hijo del Eterno y actuar como tal.

Porque cuando se introduce en Torá y vive con el cumplimiento de los preceptos,
entonces está desplegando la hermosura y grandiosidad que está en nuestra esencia.

Cuando se aparta de esta Buena Senda, se encuentra reflejado en estas palabras:

«Pues yo era ignorante y no entendía; yo era como un animal delante de Ti.»
(Tehilim / Salmos 73:22)

¿No es un pensamiento arrobador?

¿Dónde estás tú? – Para educar en la Verdad

Estimados Noájidas:
 

Ha sido tan difícil llevar un proyecto de una nuevo Colegio que tiene
por finalidad el «Educar a nuestros alumnos en la VERDAD del UNO y
UNICO DIOS e ir formándolos en los preceptos y vida noájica.
Una y otra
situación ha hecho imposible nuestro cometido.

Al final estamos a las
puertas del remate
del Colegio Jerusalen de Viña del Mar Chile por
falta de recursos y otras asuntos legales que nos han salido en el
camino totalmente imprevistos y sujetos a derecho.
Se anticipó el
cierre antes de nuestro año escolar con las implicancias que esto amerita
pero logramos pasar todos los contenidos mínimos exigidos por programa
Ministerial.

Llegamos al día de la «Ceremonia Final», la despedida parecía un
funeral; tanto apoderados, alumnos, docentes, administrativos y
auxiliares llorábamos por nuestro cierre.

El jueves 29 de Noviembre se
remataba el Colegio; pero algo imprevisto sucedió, todo sujeto a ley «no se pudo rematar», perjudicando con mayor fuerzas a toda la Comunidad
Escolar.

Son momentos tan amargos y tan eternamente largos que ya no
nos quedan fuerzas.

Incluso he puesto en riesgo lo único que tengo que
es mío y que entra en la DEUDA DEL BANCO: mi casa.
Mi casa, que también se la
llevarían como parte de pago.
Ellos nunca  pierden……..

Culpables hay
muchos… incluyéndome por no haber sabido administrar con más acierto
todo, pero así son las caídas….y duele el alma….y el espíritu….
Es
una edificación de tres pisos donde formamos a los alumnos desde
Pre-Básica hasta 8º Año, ya que también se cerró este año la Enseñanza
Media por un sin fin de problemas que entre otros también la parte
financiera nos dio pésimos resultados……los apoderados no cancelan.

      Hago un llamado a todos los noájidas para que nos unamos en
oración el 14 de Diciembre a las 22 hrs con el fin de clamar al Eterno
por una solución del Cielo, porque aquí en la tierra hemos hecho todo lo
que debíamos hacer y no hay respuesta positiva en ningún ámbito.
También
pidamos que Hashem toque los corazones de quienes puedan ayudarnos para
cancelar la deuda de $72.000.000.- (pesos chilenos) que cubriría de algún modo algo de lo
mas apurado en deudas para parar el remate, que además de peligroso es
altamente significativo en el mundo espiritual, ya que quedaríamos sin
Colegio y sin la realización de nuestro proyecto 
           
                                                  Con gran estima unidos en la oración a Hashem
                                                    Marice (nombre de mi identificación en esta página)

Mandamientos de raíz espiritual

Tres hijos tuvo Noaj.
Shem, Jam y Iafet son las semillas de las que brotan los diferentes ramales que son las naciones de la tierra.
En la unidad de estos tres se encuentra la humanidad integrada.

De acuerdo a lo que la Tradición nos indica, cada uno de estos hijos es como una matriz que modela la esencia de sus descendientes.

De Shem descienden personas con predominio en el plano espiritual y en la zona creativa/imaginativa del plano intelectual.
Pensemos en las eminencias rabínicas, en el semillero «religioso» que surgió del Medio Oriente, en las fábulas y relatos fantásticos asiáticos, etc.

De Iafet descienden personas con predominio en el plano intelectual, particularmente en lo referido a la lógica y razonamiento, pero también con amplia inserción en la zona de las artes y relaciones sociales.
Tomemos como ejemplo a los filósofos griegos, los pintores y escultores europeos de todas las épocas, los arquitectos y políticos descollantes en Europa.

De Jam descienden personas con predominio en el plano emocional y en el desarrollo del plano físico.
Comprobemos la sensualidad y poderío físico de los originarios de África, su comprobada genialidad en la música emotiva y las danzas.

Por supuesto que estas son tendencias que subyacen a la esencia de cada persona, pero NO son factores determinantes ni condiciones exclusivas.
Es decir, no debe ser tomado como una clasificación racista, que encajona y delimita con generalizaciones la riqueza y variedad de cada individuo.
Así, puede haber descendientes de Shem que sean excelentes estetas, Jamitas notables en matemáticas, Iafitas ricamente imaginativos.
Todos estamos formados por cinco planos: espiritual, intelectual, social, emocional, físico/material; pero, esta matriz esencial, este predominio de alguna de las facetas, es real y está operativa.

Esta introducción es especialmente interesante para los noájidas en nuestras tierras.
En su mayoría son descendientes de europeos, o han sido adoctrinados dentro de los parámetros iafitas de pensamiento.
Tienen la tendencia a descubrir con razonamiento y lógica incluso aquellos aspectos que se hunden profundamente en otros planos de existencia, y que quedan realmente inaccesibles al poder del análisis mental.

Esto es notable en lo que refiere a los mandamientos.
Para los que descienden de Iafet, o para los que están sometidos a una educación de tendencia iafita, resulta sumamente difícil entender que el origen de los mandamientos no radica en la mentalidad humana, sino que provienen del Eterno.
De este modo, lo que parece razonable -en términos humanos-, igualmente no aplica en lo que respecta a los mandamientos.
Tomemos como ejemplo el anhelo de muchos noájidas por cumplir con el mandamiento del Shabbat.
Piensa, argumentan y creen que si es bueno para los judíos, debiera serlo también para cualquier otra persona.
Desde un punto de vista iafita, es decir lógico y racional, es un postulado impecable e implacable.
Pero, desde el punto de vista shemita, que se enraiza en lo espiritual, que se adentra en lo supra-racional, carece de cualquier valor.
En los asuntos espirituales uno no se debe manejar por lo que mejor le parece, por lo que razona, por lo que deduce, y mucho menos por lo que cree,
sino por lo que el Eterno ha establecido.
Los mandamientos radican en el plano espiritual, no en el intelectual.

Es cierto que la mayoría de los mandamientos pueden ser comprendidos, o se les puede encontrar alguna razón accesible por el pensamiento humano.
Es cierto que en el cumplimiento de los mandamientos se suelen atravesar los cinco planos de la existencia humana.
Pero, esto no quita el hecho cierto, los mandamientos brotan en el plano espiritual, tienen su raíz allí, su origen y su destino son espirituales, aunque se involucren completamente con el resto de los planos (intelectual, social, emocional y físico/material).

Por tanto, las deducciones y asunciones racionales no tienen verdadero fundamento en lo que respecta a los mandamientos.
Si el Eterno ha decretado que determinado conjunto de los mismos pertenezcan exclusivamente a los judíos, así debe ser admitido y acatado, sin buscar excusas ni hacer malabares mentales para rechazar el dictamen celestial.
Si el Eterno ha decretado la pertenencia de la Torá a Israel, nadie puede argumentar otra cosa, aunque sean plausibles muchas justificaciones que procuren demostrarlo.

El patrimonio espiritual del noájida son los Siete Mandamientos Fundamentales, con todos sus derivados.
Esa es su vida y posteridad, es su edificación en Este Mundo y su gozo en el Mundo Venidero.
Aunque cueste entenderlo con la mente, aunque pueda resultar escaso o deslucido.

El noájida que desciende de Iafet, o que ha sido adoctrinado en los parámetros iafitas, debe esforzarse por romper esas cárceles mentales, que quieren esclavizar el mundo a sus pensamientos, para permitirse confiar en lo que proviene del plano superior, que es el espiritual.
Como dijimos más arriba, todas las personas estamos formados por los cinco planos. Por tanto, si naturalmente nuestra tendencia no se expresa espiritualmente, igualmente estamos capacitados para entrenarnos en vivir bajo la Luz del Espíritu.
El comienzo puede resultar arduo, pero es sencillo: cumplir con los mandamientos que le corresponde cumplir, sin pretender vivir de acuerdo a una identidad que le es ajena.
Si se actúa así, en sintonía con la fibra íntima espiritual propia, más pronto o más tarde la persona obviara sus patrones de conducta que lo apartan de la Buena Senda, y se introducirá con vigor en su tarea de actuar como constructor de Shalom.

Un caballo, cuyo jinete ya es visible

http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/5/50/Venezuela_coat_of_arms.png
Recien un hermano venezolano me hizo una pregunta con motivo de mi artículo: «Mi caballo y su jinete intangible».
«El caballo blanco indómito representa un pueblo libre, lleno de valores,
que corre hacia la superación, y su cabeza volteada a mirar atrás
representa el que nunca olvidara su pasado, su origen, su historia. El
caballo no tiene un jinete visible puesto que la república es gobernada con
pluralidad y respeto, y no vitaliciamente, sino que impera el cambio
constante y prudente de aquellos dirigentes de la nación.

¿Eso es una reflexion propia o usted consiguio que esa era la intención de
los diseñadores del escudo?, me refiero al hecho de que el caballo mira
hacia atras para no olvidar su pasado.
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Esencia y mandamientos

Como muchas veces anteriores, un noájida pretendía bucear en Torá, apropiarse de los mandamientos que el Eterno ordenó a Israel, con la sempiterna excusa de tener la sensación de que siete mandamientos son poca cosa. Como si el noájida se quedara en el jardín de infantes mientras que los que cumplen los mandamientos de la Torá están a nivel universitario.
Y, por supuesto, a esta queja amarga se sumaba el ya conocido estribillo de «los malos judíos que no permiten que la Torá sea para todos por igual».

La respuesta a este planteo repetido también fue reiterativa.
No son los judíos los que determinaron que fueran siete los mandamientos fundamentales y que estos fueran patrimonio espiritual de los gentiles.
Como tampoco fueron los judíos los que vetaron el estudio irrestricto de Torá para los gentiles.
Fue el Eterno.
Él y nadie más.
Por tanto, no es una cuestión de discriminación, sino de adecuación al patrimonio y legado espiritual que el Eterno dispuso para cada cual.

No hay que dejarse llevar por fatuos sentimientos de minusvalía, sino que la persona debe adherirse fuertemente al Padre Celestial por medio de la conducta de lealtad hacia Él. Y esto se logra cumpliendo con los mandamientos que Él ha dado para cada cual, de acuerdo a su propia esencia espiritual.

Ya que tanto quiere profundizar en Torá, ya que tanto demanda mayor carga en mandamientos… al menos podría empezar siendo humilde y prudente y no criticar al Creador por Sus pautas que con Amor y Sabiduría ha dispuesto.

En líneas generales, el noájida que siente sabor a poco con los siete mandamientos universales, es aquel que no se ha tomado con responsabilidad y rigor su conocimiento cabal y su cumplimiento cotidiano.
Habitualmente es el que está en huida de su identidad, o la rechaza por ignorar el enorme valor que ésta tiene.
Pretende descubrir en «ismos» (incluido el judaísmo) aquello que el Eterno le ha conferido, pero teme reconocer en su interior.
Así, por ejemplo, se sumerge en cualquier religión, doctrina o superstición, y la encuentra estupenda, siendo que similar, pero limpio de idolatría, tiene en el noajísmo.
Así, por ejemplo, se erige en férreo avasallador del legado de la Torá que es exclusivo de los judíos, con la excusa de no sentirse excluido, cuando en los hechos el Eterno le ha provisto de su propio «maná» espiritual, que le da vida y eternidad, sin necesidad de arrebatar lo que es peculiar de los judíos.

Numerosísimos son los reglamentos derivados de estos siete mandamientos fundamentales.
Éstos son idénticos a mandamientos que están establecidos como imperativo en la Torá para los judíos.
La única diferencia es que para los judíos tienen carácter de obligatoriedad, en tanto que para los noájidas son opcionales, aunque sumamente recomendables.
Así por ejemplo, «no mentir» no es uno de los siete mandamientos universales, pero es un reglamento que se deriva de uno de ellos, en total paralelismo con el mandamiento para los judíos al respecto.
Que no haya sido dictado como mandamiento para los noájidas no quiere decir que éstos puedan licenciosamente mentir, sino que han de procurar que sus sociedades lo establezcan como parte de su cultura y normativa.

De hecho, para el estudioso no es novedad, que cientos de mandamientos de la Torá tienen precedentes en épocas anteriores.
La famosa «Ieshivá de Shem y Ever», no era otra cosa que una Facultad de Derecho, fundada y fundamentada en los mandamientos noájicos.
En esta Facultad se desarrolló el código legal noájico, en estricta consonancia con el mandamiento fundamental de establecer cortes de justicia.
Este código en buena medida posteriormente sería refrendado en la Torá por el Eterno, como mandamientos para los judíos.
Por ejemplo, la ley del levirato ya era conocida y aplicada por los patriarcas (Bereshit/Génesis 39), pero no constituía un mandamiento para los noájidas, aunque siglos más tarde quedará fijada como mandamiento para los judíos.
Algo similar podemos decir del diezmo, costumbre extendida por Shem (también conocido por su título monárquico como Melkitzedek), pero que sería mandamiento más tarde, para los judíos.
Similar con el respeto a los padres, con el entierro de los difuntos, amparar a los necesitados, dar cobijo a los extranjeros, etc.

En parte por esta razón es que los noájidas tienen a su disposición decenas de los mandamientos de la Torá (para cumplirlos sin carácter de obligatoriedad), ya que eran practicados por los noájidas previamente a la entrega de la Torá a Israel.

En parte por esto mismo, hay ciertos mandamientos absolutamente vedados para los noájidas, que son privativos de los judíos, ya que no tienen un origen en los sabios noájidas (de la Ieshivá de Shem y Ever), sino que fueron entregados explícitamente por el Eterno a Israel en exclusividad.
Mandamientos tales como Shabbat, tefilín, circuncisión, talit, mezuzá, entre otros.

Resumiendo, el noájida tiene un capital inmenso para invertir en su perfeccionamiento, sin necesidad de indagar en tradiciones ajenas. Aprender y aplicar lo que corresponde a su propia esencia espiritual es lo que habilita al noájida a crecer y ser socio en la construcción del Shalom.

¿Lineal o no-lineal? Parte 1


Existe una diferencia sustancial entre bravura y fuerza. Mientras la fuerza es expresión de poder físico, la bravura es el producto de una capacidad espiritual determinada.
Por lo tanto, la fuerza puede ser medida cuantitativamente, y ser patrimonio de muchos; en tanto la bravura, el heroísmo, constituye el privilegio de una minoría selecta… La rebelión de los Macabeos que dio origen a la festividad de Jánuca fue una lucha entre la fuerza y la bravura, o lo que es lo mismo, entre el poder y el espíritu.
Seguir leyendo ¿Lineal o no-lineal? Parte 1

¡Prendan las luces!

Hace dos mil años y un poco más un grupo de valerosos héroes judíos execraron del Santo Lugar la tiranía y la opresión ejercidas por el pseudo-intelecto helénico, execraron de la Tierra de Promisión al invasor, al intruso que viene a corromper, hicieron la voluntad del Eterno con sus propias manos y demostraron que el destino de las naciones no lo construye sólamente la plegaria y el fervor religioso, que la mano de D’ no siempre es visible, y que muchas más son las veces en las que ésta está detrás del valor y el compromiso de los hombres; muchas veces es imprescindible el coraje y arrojo por las virtudes, la actuación consciente y no maquinal.

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