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El lado sumergido del Iceberg

Un mal no surge de la noche a la mañana, eso lo sabemos bien. Pienso contarles detalladamente cuales son los antecedentes del “proceso revolucionario bolivariano” y cuáles, según consideración propia, las posibles salidas de “esto”.

Venezuela, como la mayoría de los países de América latina, desde la cosiata hacia acá ha experimentado, en su primer fase republicana, la época conservadora donde los caudillos que participaron de la independencia gobernaron con dura mano, apropiándose de las tierras y pactando algunas otras; luego, en su segunda fase republicana pudo experimentar alrededor de diez guerras intestinas, todas devenidas a causa de divergencias entre liberales y conservadores, y luego liberales y restauradores, solo siete años en medio de aquel barullo de desolación y muerte fueron de tensa calma, mientras gobernaba el Presidente Guzmán Blanco (su primer periodo), luego de aquellas penurias sufridas en donde surgen míticos personajes tales como “Maisanta” vienen treinta años (principios de siglo XX) de dictadura oficial, ya dejados de caudillismo, un militar serio, con las botas puestas, arma su ejército, y se pone a mandar, le quita la presidencia a su compadre y lo sentencia a no volver más a Venezuela.

Esta es una etapa bien interesante de analizar, pues en esta etapa mucha infraestructura fue montada, así como también este fue el periodo en que el petróleo empezó a ser nuestro pan diario. Si quieren saber más de esta etapa vayan a Wikipedia, ahí es muy seguro que encuentren información al respecto, ahora es que nos falta para llegar a donde quiero llegar. Terminados los treinta años de dictadura gomecista se yergue el más grande hito en la historia republicana, diez años de absoluto gobierno demócrata, parlamentarista, ecuánime, aliado a las potencias en contra de Hittler, se abren los puertos a inmigrantes, la economía repunta, se emiten las primeras cédulas de identificación, se censa por primera vez al pueblo venezolano, se ejecutan obras modernas, tanto a nivel arquitectónico como a nivel de Estado, la sociedad crece, se abren nuevamente las universidades, se expiden cartas de legalidad a los partidos políticos; esta etapa en la historia de mi país ha sido la única en la cual hemos vivido tal y como debe ser una sociedad occidental respetable. Pero las libertades eran nuevas en el país y un grupito autodenominado “generación del 28”, toma por asalto, en alianza con los militares, el poder ejecutivo y declaran que ahora si había llegado la democracia; ¿por qué ellos creían que lo otro no era democracia?, simplemente porque no elegía el pueblo, sino que el congreso lo hacía… algo más que aceptable, considerando que los niveles de analfabetismo eran altísimos y la cultura democrática era algo nuevo que aún no se conocía con precisión en la población. Lo cierto es que aquí es donde empieza a correr una cinta de problemas y desaciertos que hasta el sol de hoy aqueja a mi país, pues luego de haber proclamado elecciones populares, donde incluso las mujeres votaban (algo que hubiera ocurrido con el tiempo si el sistema maduraba según estaba previsto), el candidato electo presidente solo gobernó por nueve meses; tomando los militares el poder e instaurando una dictadura militar por diez años (diez años de atraso, donde se perdió mucho de lo que se había construido). Pero este no fue el único mal, sino que un grupo de izquierdistas aprovechó este momento histórico (apoyados por un Fidel joven y con muchas apetencias de crear un imperio al estilo soviético en América Latina) para sembrar lo que hoy ha germinado.

Si, en las filas del ejército venezolano se enquistó un grupo de infiltrados, que acabado el régimen totalitario de Pérez Jiménez, empezó a adoctrinar a algunos jóvenes, y generación tras generación, este grupo fue creciendo, mientras mareaba al gobierno civil con guerrillas en el monte y en las ciudades. Allí, de esos grupos salió aquel nefasto movimiento MBR-200 (Movimiento Bolivariano Revolucionario-200), encabezado por Chávez, y seguido él de algunos que hoy gobiernan desde puestos muy pesados, pero que en ideología estaba dirigido por las cabezas militares que en su ánimo de inculcar Bolivarianismo con Socialismo terminaron por crear una especie de “Fascismo Comunista”, este es el fósforo que enciende la chispa que un 4 de febrero da el primer zarpazo.

El MBR-200, cuenta Herma Marxmann, una ayudante de Chávez hasta que cae preso por lo del golpe del ’92, estaba seguido desde Cuba desde hacía tiempo, y los líderes acá en Venezuela del movimiento adoctrinador, llamaron al director del nuevo movimiento a capítulo, de esa reunión surgió el juramento en el Samán de Güere, y tiempo después la organización sectorial del movimiento (que para el entonces era un movimiento clandestino subversivo), cuando Chávez y los suyos consiguen suficientes militares para entrar en escena, no estaban buscando tomar seriamente el poder, esto lo cuenta un Coronel que estuvo apoyando a Chávez durante su militancia en el MBR-200, sino debilitar más al gobierno, porque los miembros del grupo adoctrinador sabían bien que la democracia conseguida por los políticos del ´28 no iba a ser duradera, y ellos se encargaron, poniendo infiltrados en partidos políticos, de sabotear de manera sutil la acción (desacertada) de gobierno de por lo menos tres políticos. En los años 70 surgió el MAS, que estaba constituido por Teodoro Petkoff (el que apoyó a Rosales recién) y por José Vicente Rancel (hasta hace poco vicepresidente del gobierno chavista), estos dos personajes fueron entrenados para sabotear políticamente el juego democrático, ambos en diferentes flancos, y así obtener un desgaste más acelerado de la “democracia”… para así acelerar el ascenso del fascismo comunista.

Lo lograron, mediante la mayor metida de pata que ha habido en la historia, poniendo como títere candidato a un líder sindical en el año ’93, “los notables del 28”, pensando como siempre cabeza fría y no viendo más allá de sus narices (pensado que tenían a dios agarrado por la chiva), compraron al sindicalista y pusieron como presidente al desgastado político del 28, Rafael Caldera. Craso error, pues éste, subió al poder con un conjunto de fuerzas políticas autodenominadas Chiripero, puesto que Convergencia (partido de caldera) y MAS, así como otros pequeños partidos, estuvieron al cargo de los ministerios… Petkoff fue entonces ministro de cordiplan (una institución económica, donde estaban unidos la central sindical, la federación de gremios empresariales y el estado) y fue este y algunos otros masistas los que convencieron al presidente de darle indulto presidencial al Teniente coronel Chávez, lo que permitió que entrara en escena un importante alfil del movimiento adoctrinador; viejo ya, Luis Miquilena recibe fuera de la cárcel a Chávez y le propone refundar el MBR-200, ahora llamándolo MVR (Movimiento 5ta República), ya que éste estaba sirviendo de promotor del nuevo orden gubernamental en Vzla. Chávez acepta y empieza el juego democrático. Las cosas empiezan a dárseles a estos muy bien, hasta que finalmente en el ’98 asciende al poder el nuevo orden gubernamental, sembrado hacía casi 40 años atrás, y regado de continuo por todo ese tiempo.

Ahorita, ni Fidel, ni los que él mandó a que hicieran el trabajo sucio en Vzla disfrutan tanto como lo hubieran hecho veinte años antes, pero saben que su movimiento es casi indestructible, pues el gobierno chavista ya pone el tablero de ajedrez listo para fomentar la nueva fase, que consiste en consolidar la 5ta república, su ideología y su cultura sobre la sociedad absorta y con la mente en blanco que poseen.

Es por ello que la cobertura mediática es inimaginable, y es por esto mismo que el proceso debe exportarse, para que nunca pueda acabarse la semilla, para que siempre este latente, así como el nazismo, siempre en la cabecita de muchos trasnochados…

Luchar contra algo tan fríamente calculado no es muy fácil.

Yo creo que existen varias posibles salidas de esto:

1-Así como el nazismo se vio obligado a replegarse y nunca más volver al poder debido a la guerra mundial que desató, es una probabilidad que el fascismo comunista de Chávez termine en una guerra (no me atrevo a pensar en qué proporciones), y pierda poder político.

2- Es muy probable que pueda estallar un conflicto civil debido a las presiones a que se esta viendo sometida la sociedad, aunque esta hipótesis no es tan fuerte como la primera, no deja de ser una probabilidad.

3- Así como el comunismo soviético se vio desgastado casi 90 años más tarde de que Lenin ascendiera al poder, es muy probable que las futuras generaciones de chavistas sean menos fuertes que las primeras, pero esto tardaría quién sabe cuánto tiempo.

Hay una 4ta, esta no depende directamente del chavismo, sino de la oposición, pero también llevaría años consolidarla; pues se trata de hacer lo mismo que ellos, ir sembrando en universidades, en la sociedad, de manera supraclandestina, un pensamiento nuevo, acorde con valores idóneos a la democracia. Esto podría tener como enemigo principal la falta de motivación, o la ambición de poder. Si se va a trabajar esta salida debe estarse claro en que no se disfrutarán las mieles del poder nunca, más bien se dedicará la vida entera a una tarea de hormiguitas. Es probable que mientras se viva no se vean resultados.

Si alguno de ustedes puede adicionar una quinta, teniendo en cuenta el contexto real del asunto, se los agradezco.

La voz del pueblo, ¿la voz de Dios?

(Publicado originalmente en Opinión Noájida)

 Latinoamérica sufre.
Está resentida, muy resentida.
Como niño malcriado, se duele de su propia impotencia.
Con suerte elige a moderados… que con suerte, a veces terminan su periodo de gobierno.
Porque son de aquellos que hicieron pagar caro a sus pueblos sus tiempos de dureza y extremismo.
Latinoamérica  no quiere ver que  ella misma preparó  el camino para  tiranos.

Los Chávez, Kirchner y  Morales tienen su caldo de cultivo…
Y las voces de moderación o bien ya fueron al exilio, o ya fueron callados.

¿Será que sólo a nosotros nos pasa estas cosas?
¿Por qué la globalización nos cuesta tanto?

Nuestra derecha es de izquierda.
Nuestra iquierda moderada ya no existe.

Nuestra izquierda es antisemita y se encandila con líderes de cara carizma;
de aquellos que valiéndose de tanto despilfarro
y robo y corrupción de los gobernantes que les antecedieron,
proclaman refundarlo todo,
para que todo quede a su gusto.
Y, ¿qué importa la democracia si puede serles un estorbo?

El populista grita a las masas: "la voz del pueblo es la voz de Dios".
Y la gente se cree Dios…

Latinoamérica no se hace cargo de su parte.
¡Ella eligió a "los mismos de siempre"!
Nosotros los pusimos ahí…
Pero preferimos el discurso de los que claman que "otro mundo es posible":
"la culpa es de los políticos,
o del Imperio,
o de la encarnación de Satanás en un líder mundial,
o del modelo,
o de los colonizadores,
o de los judíos
". 
"La culpa es de cualquiera, menos nuestra", proclaman.

Y los populistas emiten decretos dignos de un Ayatollah:
 "si no están conmigo, están contra mi". 
Y, "si yo voy al cielo, esos no".
Y no es casualidad. ..
Su caballero aventajado, un señor de rango coronel, guía a sus lacayos: "el enemigo de mi enemigo es mi amigo". Y disfruta (por tanto) enredándose con terroristas – que con beneplácito llenan su ego petrolero declarándolo su principal líder.

Y mi país está embobado – buena parte de mi pueblo proclama:
"Démosles con la correa a los que no le quieren a nuestro Correa".
Y, como "el enemigo del amigo de mi enemiogo es mi amigo", crece a raudales el antisemitismo en Ecuador.
Como creció y sigue creciendo en Argentina.
Y en Bolivia.
Pero el veneno sale de la boca de la serpiente…
Y la serpiente tiene cabeza.
Y la cabeza de la serpiente mal usa cualquier buena intensión que pudiera haber tenido Bolívar.

Proclama soberanía esta serpiente…
Pero busca por todos los medios meter sus dientes en Colombia, en Ecuador, en Perú.
Claro, si ya los metió en Argentina.
Y su principal lacayo le sirvió a su patria en bandeja de plata, adornada con hojas de coca…

¿Hasta cuando esperamos para reaccionar?
¿Vamos a permitir los errores y atrocidades de los europeos para darnos cuenta – tarde- de que los autoritarismos (sean de izquierda como Stalin, o de derecha como Hitler) ensucian las calles y plazas con sangre de inocentes?

¿Vas Latinoamérica a callar y someterte como los Chamberlain?
Pon a líderes valientes que combatan a los tiranos.
Que no les cedan terreno.
Que busquen la paz por el único medio que corresponde: sostenida en justicia y verdad.

Observación.- En la fecha en que fue escrito este artículo todavía no era elegido como presidente de Ecuador Rafael Correa. Hoy, 8 de marzo de 2007, a través de violaciones a la constitución este señor que se autodeclara cristiano, que es un comuno-anarquista y simpatizante de terroristas,  se ha constituido en dictador. En tanto que Chávez es un dictador constitucional, Correa  es un dictador sin asidero legal alguno. ¡Y sólo los ecuatorianos somos responsables de esto! Siento una gran impotencia al no poder hacer algo "en terreno", en mi país…  

 

Aquellos pequeños milagros diarios que demuestran la existencia de Dios

Cuantas veces no hemos oido a muchos ateos decir que Dios no existe
Pero al revisar cada dia que paso en este mundo, me reafirma mas y mas que Dios existe

Voy a narrar algo que me lleno de mucha alegria, y que demuestra como Dios actua en nuestra vida Seguir leyendo Aquellos pequeños milagros diarios que demuestran la existencia de Dios

Cumples del Gabo

No soy colombiano, o deberíamos decir, neogranadino, simplemente porque la Divina Fortuna escogió para mí el terruño de Bolívar. Sin embargo la empatía que existe entre colombianos y venezolanos, aunque este un poco asperoza, debido a las incontables metidas de pata que algunos ineficientes políticos venezolanos, es de larga data.

Sin embargo, hace 80 años y unos días, la misma Fortuna que eligió para mí el terruño del Libertador del norte de Suramérica, eligió para el grande Gabriel García Márquez la pequeña aldea de Aracataca, en el norte franco de la bella República que acogió en su lecho de muerte al padre de nuestras naciones.

El Gabo, como se le llama cariñosamente, nació en el mismo pueblo donde años más tarde él daría vida a la familia Buendía y a todos los personajes de su célebre obra, “Cien años de Soledad”. Solo un grande puede hacer algo como “Cien años de Soledad”, solamente un Gabo puede retratar con tanta exactitud las costumbres, la idiosincrasia, el modo de ser de nosotros (no me atreveré a decir que todos los latinoamericanos), de los caribeños, de los colombianos allende las fronteras, de los que están unidos más que por lazos diplomáticos y comerciales, por una preciosa cultura que indivisiblemente nos hace un solo pueblo…

Les contaré una historia familiar y verán que el Gabo, allá, más allá de las fronteras occidentales de mi país, en la ciénaga colombiana, atravesando la Sierra, pasando por la árida Guajira, allá, en aquellos marjales lejanos del Oriente de mi país, supo plasmar en su obra algo tan real como la vida misma.

Mi abuelo materno tuvo un medio hermano, éste estaba un día compartiendo con los demás hombres del pueblo en algún sitio del pueblo, supongo que una pulpería, o algo así, cuando uno de los hombres le levantó la voz y le insultó públicamente; acto seguido mi tío abuelo fue a su casa, le contó a su padre, y éste le dio un arma de fuego para que hiciera respetar “su honor”, tan pronto hubo tenido en sus manos el arma, un hombre que jamás en su vida había matado a alguien, salvo a criaturas salvajes en la caza, fue directamente al lugar de los hechos, y de frente, después de decirle tres cosas, le disparó.

Por esta razón mi tío abuelo estuvo preso, no crean que el crimen, con atenuante en la dignidad, no pagó el error que cometió. Este es uno de cientos de cuentos que puedo contarles sucedidos en mi familia materna, y cada vez que yo he escuchado uno, alguno, por muy simple que sea, siempre viene a mi memoria “Cien Años de Soledad”, un libro que plasma lo más nuestro, sin dejar nada para otros, simplemente allí es Macondo el escenario para contar las millares de proezas y rarezas de todos los caribeños.

Pero no es solamente “Cien Años de Soledad” la que lleva la fortuna de haber sido escrita por el Gabo, y que por cierto también esta de cumpleaños, son decenas de obras las que el escritor de la sonrisa tímida ha dado al acerbo literario de nuestro continente, muchos cuentos, novelas, ensayos, artículos periodísticos.

Todos con el sello de Aracataca, de Riohacha, de la Sierra, de Cartagena, todos con el sello más que de Colombia, de aquel mar que se expande desde las costas norteñas del país que soñó alguna vez Bolívar, y que da vida, una vida impresionante a quienes en sus aguas ven crecer generaciones y generaciones.

LAS BASES DE LA TRANSFORMACIÓN INTEGRAL Parte I

          Introducción:

Tres nefastos sentimientos invaden hoy la mente de muchas personas en nuestra queridísima América Latina y en el resto del mundo; sentimientos que tienen su fundamento en tres poderosas excusas:

*       Sentimiento fatalista: “Este es mi trágico destino, por lo tanto, nada podré hacer para mejorarlo”.

*       Sentimiento de culpabilidad: “Muy graves han sido mis errores, por lo tanto, no hay forma de rectificarlos y cambiarlos para mi propio bien y el de mi familia y generación”.

*       Sentimiento de insignificancia: “Jamás podré salir de esta pésima vida que llevo”. “No soy nada ni nadie”.

Esta clase de pensamientos ha hecho que muchos hombres y mujeres de nuestra modernísima sociedad se encuentren hoy paralizados y petrificados emocionalmente, llevando un estilo de “vida” tormentoso y cruel. Piensan, y hasta creen, que no existe salida para sus muchos conflictos y que no hay forma de escapar airosos de esa pesadilla que sufren en silencio y, lo que es peor aún, se aferran a falsos dioses y a seudos movimientos religiosos buscando en ellos apagar la angustia de sus adoloridos corazones.

     El mal manejo de esta insoportable situación ha hecho que muchos hombres y mujeres tomen alocadas decisiones que tienden a agravar más sus escenarios, generando más caos y destrucción, no sólo de sus mentes, sino hasta de sus propias familias.

Este estudio ha sido diseñado para mostrarle a aquél que llora en su soledad que sí existe una solución real para su crisis personal y/o familiar, que los errores sí pueden ser rectificados y transformados para bien y que sí es posible superar una pésima condición particular en escenarios de excelencia y bienestar. Todo es cuestión de creerle a Dios, vincularse a Sus Preceptos, prepararse mentalmente para el cambio, romper el paradigma del “no puedo” y asumir una actitud valiente ante lo que lo acobarda.

Cambias tú, cambiará tu entorno:

Rompe con el paradigma que te hace ver que la culpa de tus desgracias la tienen las demás personas, o la sociedad, o Dios, o un mitológico “diablo” que te acecha continuamente y busca devorarte. Ese es un pernicioso y distorsionado enfoque espiritual que terminará hundiéndote más y más en las arenas movedizas de la desilusión y la miseria. Echarle la culpa a terceros es una actitud muy humana, pero del todo corrompida, la cual hemos heredado de nuestros ancestros Adán y Eva. Recuerda que Eva, cuando fue confrontada por el Eterno, le echó la culpa a la serpiente (“La serpiente me sedujo y comí”, exclamó), y Adán, por otro lado, le echó indirectamente la culpa a Dios cuando argumentó “la mujer que pusiste conmigo”. (Véase Génesis 3: 11-13). Ninguno fue capaz de admitir su propia responsabilidad en el recién hecho de desobediencia. Transfirieron la responsabilidad de sus actos a terceros. ¿Qué resolvieron con esto? ¡Nada! Antes bien, empeoraron todo el escenario, y finalmente fueron echados del Jardín del Edén.

 El entorno fue dañado, corrompido y trastocado por la imprudente decisión de un hombre y su mujer. ¿Quién se corrompió primero? El hombre, claro está. ¿Qué se corrompió después? Su entorno. ¿Cuál debe ser, entonces, la perspectiva de reparo que debemos emprender en nuestro escenario? Primero el hombre y luego el mundo. Pero, ¿qué es lo que está haciendo el hombre de hoy y de siempre? Intentando cambiar a su mundo, pero sin querer cambiar él como corona de la creación que es. ¿Te parece familiar este hecho? ¿Estoy contando, acaso, tu realidad personal? Vamos, admítelo. Tú y yo somos como Adán y Eva. Toda la culpa de nuestros fracasos se lo endosamos a otros, menos a nosotros mismos. Somos los “buenotes” de la película que nos hemos inventado. ¿En qué nos ha beneficiado mantener este comportamiento? En nada, ¿verdad? Por el contrario, más rencores nacen, crecen y se fortalecen en nuestro ser interior. Más complejos negativos, más divorcios, más enemistades, más deudas, más y más dolor le añadimos a nuestra golpeada vida. Pero, ¡basta ya! Asume tu lugar en tu mundo y en tu generación. ¿Quieres ver mejorar las cosas? ¡Sé que sí! Por lo tanto, lo primero que debes asumir es tu propia responsabilidad en la fracasada vida que llevas. Sólo tú eres el responsable de todo lo que te está aconteciendo. Eres el constructor o destructor de tu propia existencia. Y esto no debe desilusionarte, ni mucho menos llevarte al fango de la miseria. Antes bien, debe despertar en ti todo ese cúmulo de energías positivas que hoy duermen dentro de ti y utilizarlas en tu viaje al cambio integral. Las cosas pueden cambiar, mejorar y enderezarse. Depende de ti.

 

Comenzar el proceso hacia el cambio es la clave de la transformación integral:

         Huir del problema, endosárselo a terceros, echarse a morir o resignarse a una vida vacía y sin fruto, son actitudes mediocres que no resuelven nada, sino que tienden a empeorar las cosas y a hacer infelices a sus víctimas. Esperar acomodado en el sillón de la indiferencia que “un milagrito” resuelva todo tu mundo de problemas, como es costumbre entre los idólatras, encaja bien en un marco puramente fantasioso y absurdo.

    Mi amigo, las clave es DECISIÓN. Hay que decidirse por un cambio efectivo, real, total y completo. Decidirse, decidirse y decidirse; no hay otro camino a seguir. Sin embargo, debo confesarte que el viaje hacia la libertad integral no es un asunto fácil. Se requiere mucha fortaleza, disciplina y perseverancia. Recuerda, es UN PROCESO. Se necesita tiempo, paciencia y tenacidad. Tendrás que vencer el desgano, la impaciencia, el temor, la culpabilidad, el temor al qué dirán y hasta el rechazo de otros. No obstante, debes atreverte a dar el primer paso. Es el más difícil, pero el definitivo para emprender tu viaje.


         Nunca se te olvide que el Mar Rojo se partió, ante todo un pueblo que lloraba su crisis, cuando un hombre, Moisés, dio el primer paso: Golpear las aguas y adentrarse en ellas. Incluso, se necesitó mucha firmeza para ver el portento divino, pues las aguas ya alcanzaban el cuello de los Israelitas. Pero finalmente las aguas cedieron ante la tenacidad de Moisés quien decidió avanzar hacia su liberación, creyendo firmemente en la promesa del Eterno (Véase Éxodo 14). ¿Por qué fue derribado el gigante Goliat? Porque un jovencito decidió luchar contra él y vencerlo. ¿Existían peligros? ¡Por supuesto! ¿Había posibilidades que David cayera destrozado en las bestiales manos de Goliat? ¡Claro que sí!, y muchas. Pero David no se arredró ante el desafío. Dio el primer paso, planificó su estrategia y fue luego a cumplir su tarea: salvar a Israel de la ignominia (Véase 1 Samuel 17).


         Has sido llamado a la libertad integral; por lo tanto, salta hoy del valle de la mediocridad y la vergüenza. Vístete de valor y confianza. Da el primer paso hacia tu libertad. No dejes que los temores y los sobresaltos te paralicen. Empieza ya, hoy, ahora mismo. Tienes todo de tu parte. El cielo suele respaldar, fortalecer y ayudar a aquellos que deciden cambiar, rectificar y comenzar de nuevo. Deja que los ignorantes, envidiosos y torpes de visión ladren su fanfarronería. Tú, avanza. Prosigue hacia la meta: tu entera liberación. No esperes “señales celestiales” ni “experiencias extra sensoriales” para arrancar tu marcha. Inicia tu jornada ahora mismo. Eleva al cielo una plegaria que encienda la moribunda llama de tu corazón, y el Eterno, que es benigno y misericordioso, te abrirá todas las posibilidades para que faciliten tu viaje hacia tan anhelada libertad.

Alfredo Zambrano García

 

El Nimrod del Siglo 21

"> La idolatría provoca dolor y odio. Puede ponerse máscara de Batman, de pseudo-mesías, de progresista, etc. pero no puede dejar de expandir su veneno.

La idolatría tiene la capacidad de destruir naciones. Esto es especialmente peligroso cuando un porcentaje elevado de la población está fielmente aferrada a su ídolo y es peor aún cuando el objeto de veneración es un tiranuelo.

Como en el caso de Nimrod (que en la época de Abraham se declaró a si mismo objeto de veneración), el hombre-dios decreta que quien hable de manera distinta – quien busque el camino de Dios, la moderación – deberá ser tildado de traidor (en el mejor de los casos) y (en el caso más oscuro) será aplastado

Aplastado si ante toda esa barbaridad no hace lo correcto (como lo hizo Abraham a su tiempo) y confronta con valentía y madurez las consecuencias que pudieran sobrevenir.

Voy a decirlo sin tapujos: el Chavismo es un culto idolátrico y Latinoamérica está siendo absorvida por esa cloaca; pues, entre otras razones, quienes ejercen la oposición política en los diferentes países donde el Coronel Nimrod ya ha puesto su bota, están en su mayoría bañados de corrupción y de una falta total de autojuicio.

¿No se convence usted de que el Chavismo es un culto idolátrico? Lo invito a leer el siguiente artículo del fotoperiodista Pablo Corral Vega, publicado en el periódico El Comercio de Ecuador y juzgue por sí mismo:

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La Caracas de Chávez

 Por Pablo Corral Vega

El fotoperiodista Pablo Corral Vega viajó a Venezuela para constatar lo que estaba pasando en el país que había visitado en los años 90. ¿El resultado? Encontró una nación polarizada, en la cual todos deben pertenecer a un bando: escuálidos o rojos rojitos. Los que apoyan a Chávez lo hacen con fervor religioso, y los que están en contra se sienten aplastados.

Caracas está dividida, marcada, ya no es la misma que conocí en los años 90. Mis viejos amigos se han distanciado entre sí por razones políticas, hay municipios chavistas y municipios anti-chavistas.

Los que apoyan a Hugo Chávez lo hacen con fervor religioso, y los que están en contra se sienten aplastados, cansados, hablan de emigrar, de dejar el país que aman.

Venezuela vive un  momento de efervescencia. Los ‘rojos rojitos’ ven en Chávez al salvador, lo cuidan, lo idolatran, hablan de él con pasión y ternura. Cuando le pregunto a una mujer que reparte posters del presidente en la Plaza Bolívar  qué significa Chavez para ella, me abre su billetera.

Ahí guarda una estampa de la Virgen, una foto de su madre fallecida y otra del Comandante. “Yo le rezo al Comandante y le pido que nunca nos abandone, que siga cuidando de los pobres”, me  dice emocionada.

“El chavismo se  apropió de los símbolos  venezolanos”, me dice un fotoperiodista amigo. “Se ha apropiado de Dios, de la Virgen de Coromoto, de Simón Bolívar, de los próceres, de la bandera”.

Los alrededores de la Plaza Bolívar y el Palacio de Miraflores están cercados por ‘rojos rojitos’. Se acerca uno y otro a preguntarme qué hago, para qué son las fotografías. Solo cuando muestro el permiso de trabajo del Ministerio de Educación de Venezuela se alejan unos metros, pero me vigilan desde lejos.

La relación con los periódicos es pésima. Y los fotógrafos son el brazo visible de esos medios que, de acuerdo a los ‘rojos rojitos’ han sido injustos. “Son los medios los que han polarizado las cosas”, me repiten una y otra vez. “Esos escuálidos (opositores)  siempre le buscan errores a la Revolución, pero esta es una revolución eterna”, me dice un hombre que alimenta  palomas en la plaza.

Ahí cerca está Anita Urdaneta,  la dueña de la peluquería bolivariana. Sus precios son bajos, esa es su manera de ser solidaria. A todos sus clientes les habla del Comandante como si fuera un viejo amigo. Ella dice que haría cualquier cosa por defenderlo; “cualquier cosa”, me repite mirándome a los ojos. “¿Seguro  que  no eres un escuálido?”.

Los dominios de Chávez

Llegué a Venezuela con gran curiosidad, quería ver directamente qué estaba sucediendo. La política es el único tema de conversación, y todos quieren que uno se identifique, que diga a quién apoya. Los matices han  haparecido.

Hay comederos chavistas y comederos anti-chavistas, incluso los lugares de baile que eran tan democráticos en Caracas -se veía gente de toda clase social- ahora son extremadamente selectivos.

“Es para evitar las peleas”, me dice un buen amigo que me lleva a recorrer la Caracas nocturna. Terminamos en  “El Maní es así”, uno de los pocos sitios en que se juntan gobiernistas y opositores.

Baile, risas y la orquesta que no se detiene.  A la madrugada hay una pelea. “Es siempre por política”, me dicen. “Se ha cultivado el odio entre los que no tienen nada y los que tienen algo, y el que tiene un carro viejo ya es un oligarca”.

Al otro lado de Caracas, en La Vega, vive Félix Caraballo. Uno de los millones de seguidores incondicionales de Chávez. Su barrio no tiene alcantarillado y ese día los vecinos van a limpiar una acequia que lleva los desperdicios cuesta abajo.  Millones de personas viven en esas condiciones en Caracas. En La Vega, los vecinos agarran picos y palas, todos visten de rojo; en cada casa  hay una bandera roja o una foto de Chávez.

Gerónimo González, resalta por su camisa verde, es el único que habla en contra. “¿No se dan cuenta de que es la misma mentira? Este gobierno tampoco nos va a sacar de este lugar?  ¿Qué nos ha dado este gobierno? Solamente caraotas más baratas”, dice.  Félix me mira e insinúa que Gerónimo está loco.

Aunque de otra manera, la oposición también acusa al Presidente. Dicen que usa los  recursos petroleros del Estado para financiar programas de subsidio, que no  solucionan nada, porque no impulsan la productividad.

En todo caso, las misiones (programas de salud, educación, tenencia de tierra, cedulación…) han servido para fortalecer la imagen del Presidente entre los más pobres. Son la estrategia de campaña más poderosa del Gobierno.

“La democracia no nos da de comer, el Gobierno sí”, me dice un vecino de La Vega. Los productos subsidiados, que se venden en los Mercales (tiendas del Estado), llevan propaganda del Gobierno y son considerablemente más baratos.

En la oposición está Teodoro Petkoff, uno de los líderes más respetados, incluso por Chávez. Fue guerrillero y activista de Izquierda. Hoy, dirige el periódico Tal Cual. Durante la media hora que estoy con él ofrece audiencias de cinco minutos a una cantidad de personas.

Habla con mesura, pero mueve las manos, gesticula, se le nota una cierta angustia en el rostro. Es el único candidato que podía hacerle frente a Chávez porque es un izquierdista y no va a desmantelar lo  positivo de la Revolución. Pero él no está de acuerdo con el autoritarismo y el militarismo latentes.

En medio de todas las prevenciones, consigo asistir a una reunión de un comité de tierras, en la que se habla de manera apasionada de los títulos de propiedad que el gobierno dará a los que hayan ocupado tierras. Con mucha dificultad, también obtengo la autorización para visitar una escuela bolivariana en el barrio 23 de Enero, uno de los más pobres y conflictivos de Caracas.

Llego a tiempo para el desayuno subsidiado por el Estado y preparado por voluntarias. Los niños rezan antes de desayunar;  dan las gracias a Dios y le piden que siempre proteja al Presidente.

Cerca de la escuela está uno de los consultorios atendidos por médicos cubanos.  Es imposible fotografiar a los médicos, se necesitaría un permiso expreso del Ministro de Salud, me dice una secretaria muy displiscente.

Un vecino me cuenta que las mañanas los médicos atienden en los consultorios y las tardes salen a hacer visitas, hablan de medicina preventiva y de las bondades de la Revolución. Es un trabajo de hormigas en respaldo de la causa socialista, casa por casa, enfermo por enfermo.

Pero la influencia cubana se ve ante todo en una organización celular, barrial, que en Cuba se llama Comité de Defensa de la Revolución y en Venezuela se  llaman Círculos Bolivarianos.

Devotos de la Revolución

Los Círculos son uno de los temas más controversiales. Se los acusa de ser el brazo armado de la Revolución, la fuerza de choque del Presidente. Están conformados por partidarios radicales de Chávez,  dispuestos a defender  con su vida el proceso político. Son organizaciones culturales o deportivas, pero su misión principal es defender la Revolución.

Los Círculos están listos para acudir al llamado del Presidente. Los periodistas les temen porque ha habido varios ataques y amenazas en su contra.

Este tema me interesó especialmente y quise conocer a Lina Ron, una de las principales dirigentes de los Círculos Bolivarianos y líder del Partido Unidos por Venezuela. Lina es el personaje más odiado por los anti chavistas. Ella tiene un programa incendiario en la radio, en el que se burla de los escuálidos y de quienes hablan inglés.

Lina defiende la revolución socialista a ultranza, y asegura que si las mafias que han gobernado Venezuela durante décadas -es decir todos los que no están con Chávez- no aceptan la voluntad del pueblo, la Revolución los aplastará. Para ella, el mundo está dividido entre buenos y malos, ciudadanos y oligarcas, progresistas y retrógrados, bolivarianistas e infiltrados, humanistas e imperialistas.

Después del programa de radio Lina baja la guardia. Es una mujer inteligente, con un gran sentido del humor, fogueada en política. Me paso con ella una tarde entera tomando cerveza y hablando del proceso venezolano.

Ahí me dice que la Revolución Bolivariana es el sueño que muchos han abrazado por décadas y que nadie va a detener el proceso.  Le pregunto qué piensa del autoritarismo del Presidente. Para ella, no existe un Presidente más comprometido con la democracia, extraordinariamente tolerante con los escuálidos. 

Además, me dice que la democracia de antes no era democracia, era el instrumento de la oligarquía para oprimir al pueblo. Afirma que ahora vendrá una nueva etapa en la que lo más importante será la Revolución.

El tiempo dirá si Lina tenía razón. Por ahora, salgo de Venezuela con una  certeza: es un país totalmente polarizado, dividido, donde no caben los matices…

 

¡Aman y Faraón, más semejantes hoy que nunca

¡Aman y Faraón, más semejantes hoy que nunca!

Mientras escribo este artículo, la luna esta completamente obscura, y entonces viene a mi mente aquella frase, fresca aún en mi memoria, cuando mi bisabuela veía algún fenómeno espacial y decía exclamativamente: “¡Señales en el cielo, ruinas en la tierra!”.

Este mes de Adar ha visto ya el primer eclipse, uno total de luna, aún falta para el último día uno parcial de sol.

Quizás muchos no relacionemos muy bien que mensaje podría querer transmitirnos nuestro Creador por medio de estos eclipses; pero me atreveré a sugerir algunas posibles muestras de lo que el futuro les depara a los Amanes del mundo y sus semejantes Faraones.

Tanto Purim como Pesaj son festividades de alegría y libertad; en Pesaj, D’’s mismo, con portentos, señales y milagros más que evidentes salvó a Israel de la esclavitud física, los llevó a Sinaí y los adoptó como pueblo Suyo; en Purim, D’’s, por medio de los maduros líderes de este pueblo, reafirmó su decisión, mostró que no hay debajo del cielo otra Nación como Israel, los salvó ahora de la muerte física, y los condujo nuevamente a su regazo, ahora en tierra prometida.

Pesaj simboliza el nacimiento de un pueblo, Purim simboliza la madurez; sin embargo, aunque estas dos fiestas son alegres y su símbolo nos induce a la alegría del espíritu, para cierto grupo no es así, para algunos estas dos fiestas son símbolo de amarga soledad y vacío, de fracaso. En Pesaj, el duro corazón de Faraón vio como sus huestes eran esclavas de la fuerza del mar, después de que los hijos de Israel hubieron cruzado en seco, en Purim, Aman sintió en carne propia lo que su corazón tramó para los hijos de Israel.

A mi parecer hoy la luna da un claro mensaje a los actuales Amanes… muestra la sangre de los justos, se enrojece al punto de ennegrecerse para enseñarles a los asesinos y terroristas sus crímenes… más tarde, cuando falte un escaso día para iniciarse el mes de Nisán, cuando apenas falten horas para iniciarse un nuevo año en Israel, estará dando un mensaje el sol, a los Faraones actuales del mundo… les mostrará el juicio que sobre ellos vendrá.

Amanes y Faraones de este siglo, los que aún viven, los que aún hacen maldad, los que aún perseveran en su injusticia y se sienten rebeldemente cómodos puestos contra el Rey de Reyes… recuerden estas fechas, 14 y 29 de Adar, recuerden que en estas fechas les ha sido mostrada por Providencia Divina, su sentencia. Se que ustedes no rectificarán, que su corazón se endurecerá, que sus macabros planes trazados tratarán de seguirlos, pero no verán sus objetivos cumplidos, se frustrará ahora por completo y para siempre la esclavitud y la muerte, sus imperios caerán, sus cimientos serán estremecidos por el implacable juicio de Hashem.

Ahora bien, para los justos y Santos de Este Mundo estas señales representan alegría y esperanza. Alegrémonos y tengamos esperanzas de que actuando como lo hicieron los hijos de Israel, con valentía, actitud y compromiso llegaremos a librarnos totalmente de la esclavitud y evitaremos la muerte espiritual.

¡Por Dios, gracias a Dios, que los judí­os creen en Dios!

Durante dos décadas fui ateo. Muy militante por cierto. Incluso me vanagloriaba de que cuando llegaban los misioneros a vender sus revistas, panfletos, etc. yo terminaba "convirtiéndolos". No les tenía miedo alguno.

Me eduqué en un ambiente donde no había imposiciones religiosas: mi padre era ateo y mi madre era un tipo de católica no-observante – iba a misa una única vez al año, cuando hacían un recordatorio por mi abuelo, que descanse en paz. Por otro lado, disfruté de una de las pocas ventajas comparativas que presenta la educación pública de Ecuador, el laicismo – en Ecuador no se puede enseñar religión en las escuelas públicas.

Me parecía que salvo unos cuántos evangélicos – menos que los dedos de mis manos – todos los religiosos en mi entorno eran nada más que hipócritas que no se decidían a ser mejores personas por sus propios medios sin depender de su miedo al infierno. Además, sin equivocarme casi, yo pronosticaba que la señorita X que dictaba catecismo en una determinada parroquia eventualmente aparecería en "apuros" y que tendría que casarse "a toda velocidad, no sea que se le note"… 

Sin embargo, siempre hubo un grupo humano que despertaba toda mi admiración – los judíos. De hecho, yo pensaba que, en la práctica, judío era sinónimo de genio. Y jamás me puse a pensar en que ellos tenían una religión propia…

Mi admiración provenía del hecho de que siempre me sentí atraido por la Ciencia y porque era ajedrecista. Por el ámbito de la Ciencia basta mencionar al físico Einstein o a los matemáticos Jacobi para entenderlo. En cuanto al ajedrez: siempre decíamos, en la jerga de los escaques, que hay cuatro tipos de ajedrecistas de élite: 1. judíos rusos, 2. judíos no-rusos, 3. rusos no-judíos y 4. no-rusos no judíos… En aquel tiempo, Kasparov (un azerbayano de padre judío con nacionalidad rusa) reinaba sin dejar lugar a dudas de que era un deslotado…

Admiraba más todavía a los judíos por su valentía para sobreponerse a las adversidades.  Nada de autoindulgencia. Resistencia pura. Firmeza. ¡Y que les importa si no los quieren! Yo me decía que Israel debe ser un país donde para encontrar inteligencia pura uno tenía que simplemente salir a la calle y hablar con la primera persona que pasara… Yo tenía unos 9 años….

En un momento de mi vida me encontré, como muchos de mis lectores posiblemente experimentaron, un vacío proveniente del hecho de que estaba viviendo una "vida recta pero sin un sentido profundo". Y, como Jesús era judío, y una persona muy cercana me hablaba de Jesús y los judíos – siempre en buenos términos, terminé creándome una crisis existencial: ¿existe Dios? Todos creen que existe y, ¡hasta los judíos lo creen!

¿Conclusión? Un evangélico militante más apareció en la escena…

Y, para mi suerte, en aquella iglesia siempre ponían como ejemplo a los judíos…  

Y llegaron los aires del (pseudo) Judaísmo Mesiánico. Y la onda de lo "hebreo"… Por fin, puesto que admiraba más a los judíos que a cualquier mal ejemplo que daba la familia del caballero pastor, surgió una pregunta casi de manera natural: ¿por qué no creen los judíos en Jesús= Ieshu= Yeshuah= Yehoshua= cualquier cosa?

Comencé a buscar en páginas de internet judías – ¡pero de verdad judías! Y lo que hallé es una Fe Racional. Uno podía no estar de acuerdo con sus premisas, pero tenía que reconocer que no era un sistema que lógicamente presentara contradicciones… como contraparte cada palabra del Cristianismo reclamaba la palabra misterio o fe ciega para sustentarse… Se avecinaba otra crisis existencial: ¿Cristianismo – una fé sustentada en el corazón y las emociones – o Judaísmo – una fe racional?

Me enteré de las Siete Leyes y abandoné el Cristianismo mientras me encontraba lejos de mi hogar pues viajé al viejo continente a hacer mi PhD. Pero abandoné el Cristianismo emocionado con convertirme al Judaísmo. No quería saber nada de aquellas Siete Leyes. Para mi eso estaba bien para el resto, ¡yo debía ser judío!

Yehuda Ribco atendió a mis preguntas muy a su estilo: directo, sin anestesia. Me dijo que para pensar en ser judio primero uno debía vivir al máximo potencial las Siete Leyes y entonces, después de algunos años, analizar si efectivamente uno quiere tomar el yugo de la Torá… Y (¿cómo no?) como el consejo era de un judío judío, le di mucho valor. Seguí su consejo…

Ahora está clara la película: no necesito hacer ninguna conversión. Sé que uno puede elevarse como noájida. Pero también sé, gracias a mis años como noájida observante, cuál camino quiero. Trabajamos con mi esposa en ese propósito común y, Dios mediante, será lo mejor. 

 

 

 

No es cuestión de teologías o complejas pruebas…

Para los hijos de Israel resulta ciertamente sencillo saber qué cosa es idolatrí­­a y que cosa es fidelidad al Eterno.
Brindemos atención al texto, claro, simple, excplí­­cito que el mismí­­smo Padre celestial nos ha encomendado:

«[Haz de saber que] Yo soy, el Eterno tu Elokim que te saqué de la tierra de Egipto, de la casa de esclavitud»
(Shemot / Éxodo 20:2)

Dios, el Uno y Único es aquel que sacó a nuestros padres de la angustia de Egipto.
Todas las otras cosas, (objetos, personas, entidades incopóreas, entes, etc.) que no son aquel Dios que rescató a nuestros padres, sencillamente no son Dios.
Así­­ pues, Jesús, Krishna, Apolo, Alá, Mithra, el Buda deificado, Brahma, Iemanjá, Sai Baba, Baal, Vishnú, Ra, Amón, Gaia, el dios de la Metafí­­sica, el Verbo gnóstico entre tantas decenas de otros «dioses ajenos» no son Dios, pues ninguno de estos personajes mitológicos son el Ser supremo que salvó a nuestros antepasados, los condujo, sustentó y les reveló Su Palabra eterna (la Torá).
Dios, el Uno y Único no necesitaba otra «cédula de identidad» que el presentarse como el Ser que sacó a nuestros padres de Egipto.

«Al Eterno tu Elokim temerás, y a Él servirás. A Él te adherirás y por su nombre jurarás.
Él es tu alabanza; Él es tu Elokim que ha hecho por ti estas cosas grandes e imponentes que tus ojos han visto.»
(Devarim / Deuteronomio 10:20-21)

Ese mismo Dios, Uno y Único liberador de las opresiones de Egipto, es el que mantuvo a los israelitas en el desierto durante cuarenta años.
Dí­­a tras dí­­a manifestaba Su presencia con milagros, inmensos hechos supranaturales, por lo que TODO el pueblo de Israel podí­­a dar testimonio de la veracidad de estos sucesos y por tanto de la presencia e intervención de Dios en sus vidas.
No eran hechos aislados, milagritos, tramoyas fabricadas por un grupo de estafadores, producto de la histeria de algunas personas impresionales, sino que eran portentos impresionantes que eran experimentados por TODO un pueblo, entre los que se contaban también personas no muy dispuestas a someterse a Dios, pero que no podí­­an de dejar de reconocer Su presencia.
Ese Ser, y solamente ese, es Dios.
Ningún otro puede ser reconocido como Dios, o representarLo, o adjudicarse Sus hechos, puesto que a Dios exclusivamente debemos venerar, a Él servir, en Él confiar, por Su nombre bendecir y jurar.
Ese Dios, Uno y Único, que te repito no se Lo conoce por medio de teologí­­a o prédicas complejas de taimados pastores, o por la manipulación artera de oscuros pasajes bí­­blicos,
sino que se Lo conoce a través del testimonio fidedigno que se fue trasmitiendo por TODO un pueblo, de padres a hijos, de maestros a discí­­pulos, que se aferraron al testimonio con plena fidelidad y mantuvieron en vigencia y con vida el contrato de la Alianza eterna que habí­­an sellado con el Padre celestial.

Entonces… ¿Jesús, o la mí­­tica trinidad, o cualquier otro dios ajenos, son los que se manifestaron ante Israel?
¿Son el Dios, Uno y Único que fue testimoniado por generaciones de testigos presenciales?
La respuesta la sabemos… NO, no lo son…

Pero hay más.
Atiende por favor, te citaré un bellí­­simo pasaje de la santa Palabra eterna, y luego no te daré ninguna explicación. Dejaré que la claridad explí­­cita del pasaje sea la que te haga comprender que a Dios no se llega a través de teologí­­a, discursos tediosos, manipulaciones literarias, supuestas profecí­­as en libros faltos de valor. A Dios se llega a través de la confianza, no de la fe tonta. Atiende mi querido:

«Solamente cuí­­date y cuida mucho tu vida, no sea que te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni que se aparten de tu corazón durante todos los dí­­as de tu vida.
Las enseñarás a tus hijos y a los hijos de tus hijos.

El dí­­a que estuviste delante del Eterno tu Elokim en Horeb, el Eterno me dijo: ‘Reúneme al pueblo para que Yo les haga oí­­r mis palabras, las cuales aprenderán para temerMe todos los dí­­as que vivan en la tierra, y para enseñarlas a sus hijos.’

Y os acercasteis y os reunisteis al pie del monte. El monte ardí­­a con fuego hasta el corazón de los cielos, con densas nubes y oscuridad.

Entonces el Eterno os habló de en medio del fuego. Vosotros oí­­steis el sonido de sus palabras, pero aparte de oí­­r Su voz, no visteis ninguna imagen.

Él os declaró su pacto, el cual os mandó poner por obra: las diez locuciones [aseret hadevarim]. Y los escribió en dos tablas de piedra.

En aquel tiempo el Eterno también me mandó a mí­­ que os enseñara las leyes y los decretos, para que los pusieseis por obra en la tierra a la cual pasáis para tomar posesión de ella.

Por tanto, tened mucho cuidado de vosotros mismos, pues ninguna imagen visteis el dí­­a que el Eterno os habló en Horeb de en medio del fuego.
No sea que os corrompáis y os hagáis imágenes, o semejanza de cualquier figura, sea en forma de hombre o de mujer, ni en forma de cualquier animal que esté en la tierra, ni en forma de cualquier ave alada que vuele en los cielos, ni en forma de cualquier animal que se desplace sobre la tierra, ni en forma de cualquier pez que haya en las aguas debajo de la tierra. 
No sea que al alzar tus ojos al cielo y al ver el sol, la luna y las estrellas, es decir, todo el ejército del cielo, seas desviado a postrarte ante ellos y a rendir culto a cosas que el Eterno tu Elokim ha asignado a todos los pueblos de debajo del cielo.

Pero a vosotros el Eterno os ha tomado y os ha sacado del horno de hierro, de Egipto, para que seáis pueblo de Su heredad como en el dí­­a de hoy.»
(Devarim / Deuteronomio 4:9-20)

Atiende, no podemos jamás aceptar que un usurpador se ponga en medio de Dios y nosotros.
No es válido admitir un mediador espiritual que nos conecte con el Padre celestial.
Es ilí­­cito olvidar lo que Dios nos ha manifestado y ordenado, para ir en pos de nuevas ideas, «nuevos testamentos», que desví­­an de la fidelidad amorosa y reverente.
Pues esto se nos ha dicho:

«Ten cuidado; no sea que te olvides del Eterno que te sacó de la tierra de Egipto, de la casa de esclavitud.
Al Eterno tu Elokim temerás y a Él servirás, y por Su nombre jurarás.
No iréis tras dioses ajenos, tras los dioses de los pueblos que están a vuestro alrededor»
(Devarim / Deuteronomio 6:12-14)

No vimos imagen de Dios, no es cuerpo, no es hombre, ni otro ser de los creados.
No vimos otra cosa que Sus actos, pero oí­­mos Su silenciosa pero penetrante voz, que llena con Su gloria cada milí­­metro de nuestro ser.
Esa voz que nos ordenó serLe fiel, negar toda adoración o reverencia a otro ser, despojarnos del mí­­nimo rastro de idolatrí­­a, es decir quitarnos todo lo que es infidelidad y mentira.
Esa voz que anunció con perfecta claridad:

«Escucha, Israel: el Eterno nuestro Elokim, el Eterno uno Es.»
(Devarim / Deuteronomio 6:4)

Uno, sin dos, ni tres.
Uno sin par, que nada se le iguala.
Uno que no tiene un cuerpo, pues entonces serí­­a más de uno.
Uno que es eterno y que ha sellado una Alianza eterna con nosotros.
Uno que hemos conocido personalmente, que hemos aceptado con confianza, que hemos ido trasmitiendo con fidelidad a lo largo de las generaciones y lo ancho de nuestros exilios.
Uno que no cambia, ni miente, ni cambia Sus promesas.
Uno que no es Jesús, ni cualquiera otro de los dioses ajenos, que no son más que monigotes, fantasí­­as, ilusiones en la febril mente de los que depositan su fe en ellos.
Uno que es nuestro Padre celestial, Padre de todo ser, y que ha escogido a Su primogénito, el pueblo judí­­o, para que sea Luz de las naciones.
Uno que es justo y misericordioso.
Uno que nos ha hablado, nos ha liberado y lo continúa haciendo constantemente.

En resumen, no podemos definir a Dios, ni encerrarlo en palabras o pensamientos.
Pero sí­­ podemos saber quién es Dios y que cosa es falsedad.

Lo sabemos, lo heredamos, lo vivimos y lo preservamos para nuestra posteridad.

Como hacer lo que no se puede hacer

Como hacer lo que no se puede hacer
Por Jack Riemer
El 18 de noviembre de 1994, Itzhak Perlman, el violinista, entró al  escenario para dar un concierto en el «Avery Fisher Hall», del Lincoln Center de la ciudad de Nueva York.
Si alguna vez ustedes estuvieron en un concierto de Perlman, ustedes sabrán que llegar al escenario no es un pequeño logro para él. El tuvo polio cuando fue niño, tiene ambas piernas sujetas con bragueros y camina con la ayuda de dos muletas. Verlo cruzar por el escenario dando un paso por vez, costosa y lentamente es una visión asombrosa. Seguir leyendo Como hacer lo que no se puede hacer