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Noájida, como Noaj

«Y Noaj [Noé] hizo conforme a todo lo que Elokim le mandó; así lo hizo.«
(Bereshit / Génesis 6:22)

En un mundo de corrupción; rodeado de maldad y malicia; atacado por numerosos enemigos; obstaculizado por familiares y amigos; sin nadie que lo conduzca ni guíe; con todo esto en contra, a pesar de todo, Noaj hacía todo  conforme a la palabra del Eterno.
Logró ser una persona justa y recta, alguien deslumbrante que perdura a través de las generaciones y las épocas.

Algunas cosas han cambiado, otras siguen casi idénticas (tristemente son las negativas las que parecen ser constantes).
Pero lo que más ha evolucionado es la facilidad para encontrar la Buena Senda del Eterno.
Ahora tenemos a disposición la Torá que es el mapa espiritual para comprender y desarrollar el mundo; existe el pueblo guía (el judío), para encaminar a los hermanos noájidas; se cuenta con la historia y el conocimiento de las acciones del pasado; abunda la comunicación y es accesible para las masas.
Actualmente son menos los que tienen la excusa de no saber ni conocer la verdad con respecto a las cosas del Eterno.

El mundo podría estar lleno de Noaj, de gente buena, noble, justa, recta, fiel al Eterno.
Los benei Noaj (noájidas) están despertando, luego de milenios de pereza y modorra.
Están redescubriendo su propia esencia, su legado, su parcela, su tesoro, su misión y responsabilidad.
Están quitándose de encima la mugre de la idolatría, corriendo las mentiras de la inmoralidad, desechando las falsas doctrinas.

Hermano noájida tú también tienes la capacidad y oportunidad para ser alguien que vive conforme a lo que el Eterno demanda de ti.
Indaga aquí, en FULVIDA, para seguir obteniendo conocimiento y contactos para crecer y construir Shalom.

Te espero, pero especialmente te espera el Eterno.

CINCO NIVELES DE LIBERTAD

Breve Comentario autorizado por el More Yehuda Ribco de la Parashá – Vaerá:
Cinco niveles de libertad
Lic. Prof. Yehuda Ribco // Tevet 25, 5764 – 19/1/04
El Eterno prometió (y Él no es hombre para arrepentirse, ver Bemidbar / Números 23:19):
«Di a los Hijos de Israel: ‘Yo soy el Eterno. Yo os libraré de las cargas de Egipto y
os libertaré de su esclavitud. Os redimiré con brazo extendido y con grandes actos justicieros. Os tomaré como pueblo Mío, y Yo seré vuestro Elokim. Vosotros sabréis que Yo soy el Eterno vuestro Elokim, que os libra de las cargas de Egipto.» (Shemot / Éxodo 6:6-7)
Cuatro son los verbos empleados por el Rey de reyes para describir el proceso que lleva a una certera e integral liberación. Cada uno de estos cuatro verbos apuntan a un aspecto diferente que es preciso que esté funcionando correctamente y en armonía, para que la persona realmente lleve una vida sin asfixiantes cadenas ni anclas enfermizas.
Y hay un quinto verbo (1), que manifiesta el resultado positivo de haber transitado con éxito dicho proceso de liberación.

Veamos brevemente qué podemos aprender de cada uno de estos verbos de libertad:
1. Libraré – La esclavitud más evidente, que no está sujeta a la subjetividad, es la física. Pues es aquella que implica acciones o inacciones concretas, materiales. Cuando el cuerpo recibe golpes, heridas, cargas insoportables, privación de movimiento, exigencias anormales, limitaciones de todo tipo, escasez de alimento, sustancias adictivas dañinas, y cualquier otra circunstancia que perjudique el cuerpo de la persona.
La primera etapa para una verdadera libertad empieza por descargar de su opresión a lo corporal, por liberar al cuerpo de sus cadenas concretas. (Ejemplo: para los hebreos no pasaba un día sin recibir azotes, obligaciones de trabajar forzadamente, reducidos alimentos, etc.).
2. Libertaré – La segunda etapa ya deja de ser objetiva, aunque permanece dentro de la dimensión física. Apunta a redimir a la persona de sus ligaduras y tendencias emocionales nocivas o perjudiciales. Cuando los afectos no encuentran una canalización saludable, sino que son sometidos a confinamientos anormales, o a restricciones abusivas (no coherentes con la espiritual naturaleza humana), o por el contrario están fugados de limites benéficos; o cuando se depositan dentro de sí más y más sentimientos sin posibilidad de expresarlos correctamente; estamos ante una persona esclava de (o a causa de) sus pasiones e instintos.
La segunda etapa en una carrera de liberación se halla en reconocer los afectos, en canalizar positivamente los sentimientos y en no doblegarse ante los mandatos de los instintos. (Ejemplo: para los hebreos no pasaba un día sin recibir insultos que no podían responder, matanzas de seres queridos que no podían llorar, quejas dolorosas que debían ser tragadas sin hacerse oír, etc.).
3. Redimiré – La persona está capacitada naturalmente para desear. El desear, en un contexto tradicional, significa la posición en la cual la persona se pone respecto al dar y al recibir. La dimensión desiderativa humana está penosamente esclavizada en dos circunstancias:
a. Cuando solamente se busca recibir para sí, egoístamente, sin permitir dar a los demás nada.
b. Cuando se cancela totalmente el apetito de recibir para sí.
La persona también se encuentra esclavizada en este plano, si no va construyendo una vida de sentido trascendente (2). Es aún mayor su esclavitud si ni siquiera tiene capacidad consciente para desear, o teme aproximarse sinceramente a su deseo.

Es libre en este plano la persona que busca recibir, para beneficiarse y beneficiar altruistamente al prójimo. Y que a lo largo de su existencia va formándose por medio de su búsqueda por alcanzar una meta acorde con su esencia espiritual. (Ejemplo: los hebreos pasaron más de dos siglos imposibilitados de acceder a su deseo, ya que si deseaban, recibirían ellos y sus allegados castigos brutales. No tenían esperanzas, ni a la vista caminos alternos al de continuar su pesada vida de esclavos de Egipto, y morir sin posteridad).
4. Tomaré – Está intelectualmente esclavizada la persona cuyos pensamientos son para racionalizar aspectos negativos de su vida, y hallarles excusas para que se perpetúen.
Esto ocurre mientras la mente no se entrene para escoger con libertad la senda que seguirá, y por tanto se divague sin hallar completitud para la vida. También acontece cuando los pensamientos son empleados al servicio de lo que espiritualmente (en la moralidad supra-objetiva) está signado como negativo, como sustracción a lo que es bueno.
Así pues, son esclavos tanto el ignorante, como el que se ciega al uso de la razón,
como el que es sabio en asuntos vanos, como el intelectual que emplea su capacidad para dedicarla a lo malo. La libertad en este plano se encuentra en cultivar el intelecto y dirigirlo a lo que es bueno. (Ejemplo: los hechiceros de Faraón eran sabios aplicados al conocimiento de las ciencias físicas de su época (llamadas magia y brujería), pero no por ellos eran libres intelectualmente, ya que sus pensamientos estaban dedicados a la tenebrosa empresa de someter a las personas al autoritarismo de su patrón).
5. Sabréis – Libre en este quinto plano es aquel que está en armonía con el Eterno (3), y por tanto vive una vida equilibrada en los cuatro niveles antecedentes.
Ahora que conocemos someramente estas cinco dimensiones para nuestra libertad, es cuestión de tener coraje y capacidad como para cuestionarnos y respondernos con sinceridad: ¿Estoy viviendo con libertad? ¿Soy libre en todos y cada uno de estos planos de mi vida?
Por estudios y experiencia profesional, sabemos que buena parte de la gente no está desplegando todo su potencial para ser libres, y así viven existencias opacadas y muchas veces sentidas como vacías. Es decir, son esclavos de sus Faraones, en algún u otro punto, y no encuentran al Eterno que los libere, ni al Moisés que los ayude en el camino.
Algunos creen que solos pueden quitarse las cargas que los oprimen, pero realmente no pueden.
Otros ponen su fe en ídolos que para nada bueno sirven. Y otros prueban con promesas de soluciones que son parciales, y por tanto, nada solucionan. Y así mantienen las cadenas y dolores de Egipto en sus vidas, y en la de sus allegados.
Gracias al Eterno hay maneras de andar por el sendero de la Luz, y así desatarse de los Faraones y sus capataces sanguinarios.
Notas:
1- Algunos ven el quinto verbo en Shemot / Éxodo 6:8, en relación a la venida y toma en posesión de la Tierra Prometida. No contradice el uso de este verbo, en lugar del que nosotros empleamos, las enseñanzas que se extraen en el presente estudio. Por el contrario, las refuerzan.
2- Realmente, la construcción del sentido trascendente es dificultoso si el deseo de la persona no es coherente con su esencia espiritual. Pongamos un ejemplo para clarificar el concepto. Si una persona es ambiciosa, y su vista e interés están puestos en someter a los demás, enriquecerse y obtener poder, ¿puede compatibilizar este deseo y metas en la vida, con un sentido trascendente?
3- Solamente podemos estar en armonía con nosotros mismos, si prestamos atención a la Palabra del Eterno, estudiando profundamente Torá, y cumpliendo con cabalidad con sus preceptos.
Ya que la Torá es heredad eterna de la nación judía, patrimonio exclusivo y no compartible,
los gentiles pueden aprender acerca de la Voluntad del Eterno NO por medio de indagar ilegalmente en la Torá, sino sorbiendo con diligencia las enseñanzas que les imparten los maestros judíos de la Verdad.

Recordando y teniendo presente esto ultimo que como gentiles podemos aprender acerca de la Voluntad del Eterno en su Tora, NO por medio de indagar ilegalmente en la Torá, sino sorbiendo con diligencia las enseñanzas que les imparten los maestros judíos de la verdad.

Uno hace la diferencia- Lic. Yehuda Ribco

Tema publicado con la autorización del More Yehuda Ribco
UNO HACE LA DIFERENCIA
Lic. Prof. Yehuda Ribco // Tammuz 22, 5763 – 22/7/2003
Tomado de la Parasha Bemidbar Matot (“Tribus”)
Este corresponde leer la parashá llamada Matot («Tribus») junto a Masei («Etapas»), que son la novena y la última del cuarto tomo de la Torá, el sefer Bemidbar, conocido en español como «Números».
El mundo es tan diverso, son tantas las actividades humanas, variadas líneas de conocimiento nos cruzan, innumerables son los campos de estudio y acción, que difícilmente podemos tener una perspectiva general de lo que está aconteciendo. Seguir leyendo Uno hace la diferencia- Lic. Yehuda Ribco

El origen de los cuatro dioses

En la famosa visión del profeta Ezequiel de la carroza celestial, presenció cuatro ángeles con cuatro diferentes rostros: de persona, de león, de águila, de toro.
Éstos seres celestiales son emisarios del Eterno, siervos fieles del Uno y Único.
Desgraciadamente fueron usados a lo largo y ancho de la historia y las culturas como focos para la idolatría.

Muchas generaciones antes, Adam, conocía a estos seres, sabía de su encumbrada posición en las huestes celestiales, y de cierta manera le trasmitió a sus descendientes su existencia.

Por supuesto que Adam no se apartó de la conciencia y adhesión al Uno y Único, no cayó en la sucia senda de la idolatría.

Pero, sus descendientes empezaron a desviarse, lentamente, paulatinamente, pero de manera pronunciada.
De a poco fueron adorando a estos seres celestiales, con la intención de alcanzar al Eterno, pero de la manera errónea.

Luego incluyeron a los astros en su intento por sintonizar con el Padre Celestial, cuando de hecho lo único que precisaban era un corazón sincero y puro, el ánimo dispuesto para comunicarse con Él (Rambam, Hiljot Avodat Cojavim 1).

Entiende esto, su sed espiritual, su afán de contacto con el Eterno, lo querían saciar con cosas que Él prohibió. Ellos consideraban que con estos atajos se acercaban, cuando en los hechos se perdían cada vez más.
Su intención fue buena, pero por seguir lo que el Eterno no aprobó, se perdieron.
Es un interesante punto a tener en cuenta a la hora de actuar nosotros: ¿hacemos lo que nos corresponde por decisión de Dios, o seguimos las pautas de personas?

La idolatría que incluye a estos seres es abundante, profusa, está desperdigada por todo el mundo, con más o menos claridad de la imagen.

Sorpréndete al comprender el origen de esta aberración, que seguramente está a tu lado y no te habías dado cuenta.  ((Los famosos cuatro elementos básicos (agua, aire, fuego, tierra) surgieron como representación simbólica de los cuatro seres de la carroza celestial: persona-agua, águila-aire, león-fuego, toro-tierra.
Cuando estos elementos fueron empleados como conceptos de las ciencias primitivas, sin adoración ni fe en ellos, ni como recursos de superstición, no son de idolatría. Pero, lamentablemente no ha faltado la idolatría que deifica o glorifica estos elementos de la naturaleza. Dioses de la tormenta, dioses de océanos y mares, dioses ígneos o solares, dioses de la tierra o fertilidad… ¿hubo civilización que esquivó esta idolatría?))

Persona: son infinidad los dioses humanos, o con rasgos humanos. En casi cada cultura y sociedad se encuentran personas que son adoradas como dioses. El primero que recordamos es el rebelde Nimrod, pero tienes a los faraones, y otros reyes del pasado, así como la prolífica mitología griega e hindú. Hasta el Buda, que supuestamente no predicaba su divinidad, ni proponía una religión, actualmente es adorado como deidad por sus seguidores.
La lista es larguísima, pero sin dudas que actualmente el más famoso y perverso es, por supuesto, el mítico y fantasioso colgado (alias Jesús, alias Yeshua, y muchos alias más). Su malicia profunda y espantosa radica en pretender usurpar directamente al Uno y Único.

Águila: se ha adorado a lo largo de las generaciones a las águilas u otras aves rapaces.
Solamente recuerda los estandartes romanos y nazis. El dios Horus egipcio. Piensa en los dragones chinos, en las serpientes aladas de los antiguos habitantes de América o en la Polinesia. Si no me equivoco es muy fuerte la presencia del dios águila en México.
En cierta etapa el águila se asoció con serpientes, que eran voladoras, o emplumadas, o aladas. Lentamente quedaron como serpientes o imágenes familiares.

León: el rey de la jungla ha sido empleado como divinidad en diversas culturas, pero su representación simbólica ha penetrado profundamente en casi toda la humanidad. El sol, el aro solar, son representaciones derivadas del león. En muchas banderas, estandartes, escudos nacionales hallamos al león, o al sol. ¿Tienes presente la iconografía idolátrica cristiana con el halo alrededor de sus santos? Ese halo es también un aro solar, otra muestra de idolatría. O la adoración del fuego, y del rayo, ¿qué es? Busca y encontrarás.

Toro: ¿recuerdas que una fracción de los israelitas adoraron el becerro de oro? Esto lo aprendieron de sus ex amos egipcios, quienes adoraban a Apis, el dios toro, que era una de las cuatro divinidades centrales de su religión. Serapis entre los helenistas. La vaca sagrada de la India.
Derivados de esta deidad son todas las cuestiones materialistas, que se empecinan en centrar su vida en lo que es físico, terrenal.

(Notemos como la cuatrinidad -alias trinidad- cristiana (y también de falsos judíos falsamente mesiánicos, que son cristianos que se avergüenzan de decirlo) se basa en estas deidades: el padre es el sol, el hijo es el hombre, el espíritu santo es el águila (que representan como paloma), satanás (la cuarta deidad de la mitología de Jesús) es el dios terreno, es decir, el toro.
Como sabemos, Mitra es el dios anitguo que fue usado como modelo para inventar al personaje de Jesús y mucha de su mitología. No en vano Mitra, una persona, se decía descendiente del sol/fuego, y venció al toro. Tal como la mitología fantasioso e idolátrica de Jesús que lo pone en lucha constante con el Toro/Satanás/Lo Terrenal. Y así viven los que siguen esta fe, sumergidos en la devastación de la idolatría más profunda.
Ay, que dolor por todos aquellos que siguen presos en esta prisión del espíritu).

Los que somos fieles al Padre Celestial no tenemos imágenes, ni estatuas, ni personas, ni animales, ni seres, ni intermediarios…
solamente tenemos nuestro abrazo profundo con Él, y con nada ni nadie más.
Es nuestra tarea servirLo, a Él, a nada ni nadie más.
Es nuestra obligación limpiar corazones y mentes, quitar esas perversiones que nacieron de un buen deseo, de buenas intenciones, pero que se apartaron de la senda de los mandamientos para convertirse en el origen de un infierno terrenal.

Busca a tu alrededor los vestigios de toda idolatría y purifícate.

Cuenta conmigo, cuenta con FULVIDA…

Personalidades noájicas

A Noaj/Noé el Padre Celestial le confirmó las seis leyes fundamentales que le había ordenado a Adam y sus descendientes:

  1. No adorar, servir, reverenciar, depositar la fe en otra cosas que no sean el Padre Celestial.
  2. No maldecir al Eterno.
  3. No asesinar.
  4. No robar.
  5. No cometer actos de inmoralidad sexual.
  6. Constituir institutos de Derecho y Justicia, para preservar las leyes dadas por el Creador, y desarrollarlas debidamente, de modo de establecer un mundo de plenitud, bondad y justicia.

Noaj y sus descendientes recibieron una ley fundamental extra:

  1. No comer partes de animal con vida.

Esta ley no tenía sentido en el mundo pre-noájico, puesto que la alimentación se hacía exclusivamente de vegetales y minerales.

Noaj fue fiel a las Siete Leyes Universales.
Por esto fue designado por el Eterno como un hombre «justo e íntegro», alguien que seguía con devoción firme al Eterno.

En el camino de la fidelidad, caminando por la Buena Senda, le continuó su hijo Shem/Sem, quien fuera más tarde conocido por el seudónimo de Malki-Tzedek (que quiere decir el Rey de la Justicia).

El resto de la gente más pronto o más tarde fueron olvidando la Buena Senda, creando sus propias creencias, siguiendo sus ideas y pretensiones.
Pero, Ever de la descendencia de Shem se afirmó con rectitud al camino de los noájidas, se mantuvo firme y fuerte en la Buena Senda marcada por el Padre Celestial para las gentes.

Un nieto de Ever se transformó en el modelo estupendo de persona espiritual, de ejemplo de vida, en piedra angular de la vida noájica.
Este descendiente de Noaj-Shem-Ever fue Avraham, el primer patriarca del pueblo judío.

Sin embargo, Avraham no era judío, ni siquiera israelita; Avraham era noájico; tal como tú, hermano noájico querido debes serlo.
Era amigo del Eterno, no por fe, ni por tontas ideologías, sino porque caminaba por la Buena Senda, la del cumplimiento de los Siete Mandamientos Universales.

Por su conducta excelente, por sus cualidades, Avraham fue elegido por el Eterno para ser la raíz de la nación de Israel, aquella que debería ser el faro para las otras naciones.
Pero, Avraham continuó siendo noájico, aunque a él y su familia tras él se le exigió el cumplimiento de otros mandamientos, que eran privativos de la familia judía y no del resto de las naciones (como por ejemplo la circuncisión).

Tú, apreciado hermano noájida, eres descendiente de Noaj, pero no de Avraham.
Tienes tu propio precioso legado, que debes conocer, valorar y cumplir.
¿Lo sabías?

¿Qué conoces de Noaj?
¿Qué mandamientos noájicos estás cumpliendo?
¿Qué tan desviado estás de la Buena Senda, de los Siete Mandamientos Fundamentales?

Ven, acércate a FULVIDA para seguir creciendo en la identidad espiritual que el Padre Celestial te ha dado.
Tienes un mundo completo que desarrollar, mucho Shalom para construir.
Esa es tu misión, es tu herencia, es tu perfección.

Te espero, para que sigamos compartiendo juntos el andar por la Buena Senda.

La palabra que revela

El habla de una persona suele revelar lo que ésta guarda en su corazón.

Cuando la persona difama, murmura, va con habladurías, está mostrando (a quien sabe ver) que su corazón está corroído por la envidia, la mala pasión, el ánimo perverso.

Cuando de su boca constantemente salen insultos, maldiciones, palabras provocativas, está manifestando que se quiere muy poco a sí misma, y por tanto no alcanza a amar o siquiera respetar al prójimo.

Si su voz menciona a Satanás, infierno, castigo y otras cosas por el estilo, ciertamente que está demostrando lo que está en el centro de su vida. Aquello a lo que presta atención. Lo que motiva su conducta y sus palabras.

Si su aliento se llena de «no puedo», «soy un fracasado», «me siento mal», y en esa onda derrotista-pesimista, ¿acaso está señalando que se siente con las fuerzas como para ser un verdadero triunfador, un bendecido por el éxito?

En ocasiones la persona tiene una necesidad profunda e inconsciente de escuchar el eco de lo que su corazón guarda, pero que no se atreve a pronunciar.
Entonces se congrega en lugares en donde los «pastores» de cada 100 palabras que vomita 98 son en sintonía con: pecado, maldición, infierno, hoguera, castigo, hijo de Satanás, hereje, etc.
Se reúne con burladores y maledicentes.
Es espectador y cómplice de programas de chismes en la tele.
Le encanta insultar, pero se escuda en la palabra soez escupida por otro.

Medita, querido hermano noájida, ¿cómo hablas?
¿Qué dices?
¿Qué voces llenan tu boca y sacuden tu entorno?
¿Qué haces oír a los demás y oyes tú mismo?
¿Qué revelan de tu intimidad las palabras que emites?

¿Llenas tus días con voces luminosas?
¿Cuántas veces por día dices: gracias, por favor, permiso, bendito, alegría, puedo, alabado sea el Eterno, si Dios quiere, bondad, justicia, verdad, solidaridad, ánimo, construir, perdonar, disculparse, comprometerse, responsabilidad, amor, respeto, edificar, crecer, confiar?
¿Cuántas de las palabras anteriores las dices por compromiso, o como una muletilla inconsciente?

¿Qué revelan de ti las palabras que te rodean cual océano?

Haz un simple y educativo ejercicio.
Cada hora lleva la cuenta de las palabras que dices y que oyes.
Para esto toma una hoja de papel y un lápiz, o ten una libretita contigo, escribe las palabras significativas que has dicho en la última hora, o aquellas que has escuchado.
Al final de la jornada evalúa el contenido de tu corazón, la sinceridad de tu vida, la luminosidad de tu alma.

Te doy ánimo para que lo intentes, si quieres me comentas luego cómo te ha ido.

Quiera el Eterno darte orientación para que puedas ser un verdadero constructor de Shalom.

Resp. 139 – Palabra rota

Shalom!
Hola, de ante mano quisiera felicitarlo por la pagina que tiene, la verdad me ha sacado de muchas dudas importantes que han cambiado radicalmente mi manera de pensar y actuar en la vida.

Hace como un año hice un juramento a Di-s, fue un juramento que hice sin pensar en ese momento y pues ahora me he dado cuenta que se me dificulta un poco y la verdad ya lo he violado varias veces; quisiera saber, como liberarme de el?.
Por su tiempo, gracias.

Que Di-s lo bendiga con larga vida llena de alegria!
Yessica Miguel Chavez

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Res. 138 – Material de espiritualidad

shalom
saludos reciban de mi parte les envio este mail con el fin de que me saquen de la sigute duda un noajico puede leer la biblia a falta de el talmud o la tora con el fundamento de poder tener mas guia espiritual

me refiero a utilizar el viejo testamento como guia espiritual (de cierto modo )¿sera posible?

de antemano agradezco su atencion

atte
luis zarate
cartagena colombia

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Resp. 137 – El poder del arrepentimiento

Estimado Sr

¿Qué debemos hacer los noájidas tras una transgresión de uno de los preceptos? Es decir, para volver a estar en paz con Dios, dado que no tenemos un sacramento tipo confesión católica.

Atentamente,

J.barcenas,
profesión: auxiliar administrativo
España

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Resp. 136 – Las cosas en su sitio

Hola

…¿ Tenemos los noájidas algún sello en el carácter? ¿ Somos suaves en el trato con el otro? ¿ Nos vestimos con la envoltura de las personas corrientes? Naturalmente, los noájidas hemos visto una realidad más allá de la muerte y hemos notado la profundidad de la vida, sin embargo después de ese conocimiento hemos regresado a la vida cotidiana.
¿ Cuáles son las lecturas que han transformado el alma del noájida? ¿ el libro de Genesis?
Perdone los errores que haya cometido en este mensaje
Un saludo
Pipe Sadariano
Sefarad

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