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«Rectificando el Pasado»

Como muy bien he dicho en el texto anterior poco a poco hemos y he ido desenmascarando la mentira, el engaño con el único propósito de rectificar el pasado, cada paso mal dado, cada daño espiritual y moral que vivimos y viví.

 

¿Cómo comenzó la Rectificación?

 

En el año 2005 el Señor Alfredo Zambrano (líder de la comunidad) un día me llama y me dice: necesito reunirme con tu familia y hablar con Uds. En tu casa, yo claro con gusto, les dije a todos y ese día nos reunimos alrededor de la mesa a escuchar lo que nos vendría a decir. Ese día recuerdo que trajo en su mano el famoso nuevo testamento “arreglado” por Daniel Hernández, (cosas que decían lo mismo ejemplo: en vez de decir Maria decía Miriam, en vez de decir Pedro decía Kefas pero con el mismo mensaje que tendría otras versiones como la Reina Valera de 1960) y así comenzó explicándonos con paciencia pero seguro de si mismo lo que creía y la barbaridades dichas y escritas en ese libro y como debíamos tener cuidado con lo que leyéramos y estudiáramos de allí. Cabe resaltar que la cara de todos fue “NEGO AL MESÍAS”. Cara de susto, miedo, no sabíamos si era una prueba para seguir siendo “fieles” o tomar el riesgo de estudiar e indagar lo que él nos decía.

 

Luego de haber hablado con el señor Alfredo él se fue y cada quien se dispuso a dormir pero con la duda y lo que llamamos “espinita” de lo que nos había dicho, porque lo más sabio de sus palabras que recuerdo ahora fue que nos dijo, LOS INVITO A ESTUDIAR A QUE UDS MISMOS SE DEN CUENTA Y NO POR MI. Es como cuando uno se encuentra un billete falso y llega alguien y te dice ese billete es falso por eso, esto y aquello. Ya uno queda con la duda que si agarra otro billete no lo vayan a robar o estafar y aprende a como reconocer el billete falso del verdadero por ciertas características. Así paso con lo que nos dijo el señor Alfredo, tomamos la decisión de sentarnos, estudiar, hacernos preguntas, hacer comparaciones y era cada vez mas obvio lo que uno leía y aprendía, ver tanta falsedad que por tantos años habíamos vivido. Esto tuvo su tiempo alrededor de 3 o 4 meses en que uno era ¿si es verdad o no es verdad? ¿Será que si o que no? Hasta que tuvimos el placer de tener en nuestra ciudad al Profesor Yehuda y aclaró muchas dudas, el cual llego sin mucho orgullo ni prepotencia (como lo eran otros), me acuerdo que me puse de pie cuando Yehuda entro al lugar y Jonathan me dice NO! siéntate no hay porque pararse ante él (hasta en ese sentido le rendíamos pleitesía a los falsos lideres) fue de gran ayuda y de mucha enseñanza ver su personalidad, su sencillez, me daba miedo hasta darle la mano (por eso de que un hombre no le daba la mano a una mujer) mucho menos un abrazo o una foto etc. Hasta eso hicimos cuando vino Yehuda, uno sentía la gran diferencia de cómo eran esos lideres que tal vez lo miraban a uno por encima del hombro y ver como lo mas mínimo y sin mucha importancia fue cambiando en nuestras vidas, de dar la mano, compartir un chiste, Yehuda grabando y tomando fotos en su cámara con su cara sonriente (los demás lideres querían que todos estuvieran con una cámara grabándolos) simplemente se vio que todos éramos iguales sin ser más unos que otros.

 

Y así han pasado 3 años estudiando, teniendo una vida de felicidad. Gracias a alguien que puso la semilla y ayudo que muchas personas dieran fruto y conocieran lo que hoy es el ser Noajida.

 

Tal vez hoy Yehuda en Fulvida este colocando una semilla en ti, tal vez yo este colocando una semilla en ti, pero solo la persona individualmente debe tomar la decisión de cambiar, yo te invito a que te unas a este grupo, que tu mismo estudies, hay ya mucha información al respecto para salir de la idolatría, el testimonio de muchas personas, tu puedes ser alguien más que ayude salir a otros de la mentira!

 

Shira!!

«El pasado como trampolín y no como sofá»

La siguiente historia primeramente la hago para que todos aquellos que se creen judíos, netzaritas, mesiánicos y todo lo derivado a ellos, puedan algún día ver la luz, acercarse, indagar, estudiar y estar netamente convencidos para lo que Dios nos llamo y lo que somos realmente, sin mascaras ni mentiras… y de segundo me animó mucho la historia de Jonathan Ortiz. Poder escribir de mí y de lo que viví ya que los dos y muchas personas más vivimos experiencias parecidas en distintas áreas.

 

Todo comenzó cuando en el año 2000 después de un “grandioso” congreso evangélico el líder o pastor de la iglesia nos reunió a todos los ministerios (danza, teatro, cantores y músicos, ujieres o servidores y muchas más áreas) y nos hizo saber que había tenido un sueño, una visión o casi Ieshu-a mismo se le había aparecido y nació el nuevo “proyecto” de que ahora todos éramos mesiánicos o que retornaríamos al camino antiguo, injertados en el olivo natural, todos cambiarían sus nombres (los que teníamos no servían porque eran y son de origen griego), los hombres usarían kipa, las mujeres su velo o cobertura, las canciones ya no dirían cristo ni Jesús sino Mashiaj y Ieshu-a, las mujeres con su falda, celebrando Shabat y todas las fiestas judías, ahora se saludaba con shalom, nos despedíamos con shalom, los hombres se dejaron crecer los peyots (patillas) y muchas cosas más para parecernos mas a los judíos y supuestamente provocar envidia en la comunidad judía ya que ellos no tenían algo que teníamos nosotros al espíritu santo y a Ieshu-a. (La verdad que eso no provoca ni provocó la más mínima envidia, ni el 0.001% de envidia siquiera).

 

Todo fue avanzando, los años fueron pasando cuando en el año 2002 publicaron y anunciaron que todos los que querían ser “hijos del mandamiento” “bar/bat mitzva” harían un curso y tenían que pasar por varios exámenes o reglas (que fueron inventadas por Daniel Hernández o muchas de esas por el líder de la comunidad o profesor de dicha clase) para poder ser elegido. Unas de esas fueron: aprender el Shema completo en hebreo (por lo menos los 3 primeros párrafos), las mujeres ir en falda, con cobertura, los hombres con su kipa, llevar Biblia, ofrenda (nunca supe para que se utilizo ese dinero), pagar cada guía, llenar las guías de cuestionario, no puede faltar la debida circuncisión en los varones, las mujeres a aprender a hacer Jala (pan de Shabat) los hombres a comprar su Talit, Tzitzi, Sidur (libro de oraciones), utilizar Tefilim (filacterias). Estas cosas entre otras más debían ser cumplidas con “veracidad” ya que si no, no se clasificaba para poder graduarse.

 

Llego el día de la graduación (1 de Septiembre de 2002) donde cada uno de los que estábamos preparo su discurso (enseñanza que tratara sobre la parashat o lectura de la Torah que se leyó el día del nacimiento de la persona) y serian cambiados nuestros nombres, debajo de un Talit pasábamos y el Señor Daniel Hernández nos declaraba hijos del mandamiento, el brindis, diplomas (que por cierto por la parte de atrás fue rayado por todo el mundo dando la felicitaciones, con calcomanías de amistad) la comida final y listo. Todos habíamos sido declarados Benei Yehuda (conocido como judíos o los que se aferraban más a la Torah que el resto que no había hecho nada).

 

Pasó el día de la celebración y no había pasado ni las 5 horas cuando todas las mujeres en pantalón, sin cobertura, felices porque habíamos salido de esa tortura, además que el que nos dio la última semana de clase, el señor Binyamin Linarez ya no estaba así que prácticamente éramos libres. Ya quedaba de responsabilidad de cada quien si se seguía comportando de la misma manera o no. Igual todos fingíamos lo que no éramos.

Cada vez que me subía al “altar” (tarima, pulpito) a tocar el teclado, era una orden del líder de la comunidad colocarse falda las mujeres, kipa los hombres y cobertura o velo las mujeres, cosa que siempre odie lo digo con sinceridad ya que la cobertura me partía el cabello y no era de mi agrado y la falda era incomodo cuando uno andaba en buseta o transporte público y que me obligaran a eso me incomodaba mucho, pero como había que ser sumisos, agachar la cabeza y hacer caso por amor al ministerio, por amor a lo que habíamos hecho antes (el Bat Mitzva) teníamos que dar ejemplo.

 

Y así fue pasando el tiempo haciendo varias yeshivot, cursos de hebreo, de conocer las enseñanzas de Ieshu-a y todo el judaísmo pero revestido de Jesús y muchísimas cosas más, cosas que realmente no nos correspondía estudiar pero estudiamos, cabe resaltar que cada Yeshiva era costosa pero obligatoria para todos. Papel que ahora se utiliza para anotar teléfonos, tal vez alguna actividad de la universidad y muchas de esas para ser más claros como dos cajas de guías que fueron votadas aquí en mi casa ya que prácticamente traían era cucarachas o mugre, algunos las guardan de recuerdo y lloran, todavía no se sabe si por nostalgia o por todo el dinero invertido para nada.

 

En sí…Cual es el propósito de decir todas estas cosas? Que la gente vea, analice, saque sus propias conclusiones de lo que a vivido y si realmente es lo que dice ser. Hay muchos que dicen ser Judíos pero realmente no viven como Judíos (además no les corresponde) tal vez por eso será que para muchos es una carga y nunca son felices, se llenan la boca diciendo y vistiéndose como tales pero por dentro son personas común y corrientes como ciudadanos cualquiera pero llamando la atención de todos, éstos como una vez yo también sentía miedo a que los vieran tomarse una cerveza, miedo a que los vieran bailar, miedo a que los vieran escuchando un vallenato, una salsa, merengue, porque todo eso es del diablo y es pecado!

 

En mi experiencia personal y después del cambio que di, puedo decir que no hay nada mas sabroso que bailar junto a mi papá, junto a mis amigos, que si me dio sed me tomo una cerveza, que si me gusta Juan Luís Guerra, Celia Cruz, Mark Anthony los puedo escuchar y hasta dedicarle una canción de amor a mi novio sin que nadie me juzgue y me tilde de pecadora o hija del diablo. Soy feliz, amo ser noajida, me siento libre, amo la banda en la que toco porque puedo ejecutar mi instrumento y poner en práctica mi talento, y muchas cosas mas que no hacia por miedo a que digan los demás o simplemente a que Dios me fuese a castigar o el pastor de la iglesia me votara y me colocara en disciplina. (Igual uno lo hacia a escondidas) y si me equivoco me avisan.

 

Atrévete a cambiar, a conocer, acércate a Dios de una manera individual sin mediadores, el es tu amigo, te dio la oportunidad de ser noajida, aprovecha, gózate y disfruta de los placeres de esta vida que Dios te regalo, cumpliendo los 7 preceptos, llamando BUENO  a lo que Dios llamó y llama BUENO, no a lo que el hombre dice que es “bueno”.

 

Pronto hablare más…

 

Shirá!!!

 

  

 

 

Cuatro hijos y un padre

Vale la pena su relectura:

Cuatro hijos y un padre

La semana pasada explicamos brevemente
acerca de los cinco niveles de existencia humana, en los cuales hay que
trabajar para crecer y ser libres, y así no caer víctimas de los Faraones
que intentan someternos y esclavizarnos.
Como
recordarán
, los cinco estratos en un orden descendente son:

Espiritual,
Intelectual,
Desiderativo o Social,
Emocional,
Acción,
(E-IDEA por sus siglas).

Esta semana podemos ampliar un poco más la
perspectiva sobre este asunto, a partir de tres secciones de nuestra
parashá, y una de otro sitio.
Estas frases son popularmente conocidas gracias a la Hagadá de Pesaj, pues
son empleadas en el apartado que lleva por título «Los cuatro hijos«
(la idea original usada por ésta se halla en TI Pesajim 10:4)
.
Cada una de estas frases se corresponde con uno de los cuatro hijos
mencionados por la Hagadá (cada hijo simboliza un tipo básico
de personalidad)
.
En su orden son:

  1. Para el Sabio:
    «En el futuro, cuando tu hijo te pregunte diciendo: ‘¿Qué significan los
    testimonios, las leyes y los decretos que el Eterno nuestro Elokim os
    mandó?’.
    Entonces responderás a tu hijo: ‘Nosotros éramos esclavos del faraón en
    Egipto, pero el Eterno nos sacó de Egipto con mano poderosa.
    El Eterno hizo en Egipto señales y grandes prodigios contra el faraón y
    contra toda su familia, ante nuestros propios ojos.
    Él nos sacó de allá para traernos y darnos la tierra que juró a nuestros
    padres.
    Y el Eterno nos mandó que pusiéramos por obra todas estas leyes y que
    temiésemos al Eterno nuestro Elokim, para que nos fuera bien todos los días
    y para conservarnos la vida, como en el día de hoy.
    «
    (Devarim / Deuteronomio 6:20-24)

  2. Para el Perverso:
    «Y cuando os digan vuestros hijos: ‘¿Qué significa este rito para
    vosotros?’
    Vosotros les responderéis: ‘Éste es el sacrificio de Pesaj del Eterno…’
    «
    (Shemot / Éxodo 12:26, 27)

  3. Para el Ingenuo o torpe:
    «Y cuando mañana te pregunte tu hijo diciendo: ‘¿Qué es esto?’.
    Le dirás: ‘Con mano poderosa el Eterno nos sacó de Egipto, de la casa de
    esclavitud…’
    «
    (Shemot / Éxodo 13:14)

  4. Para el Perplejo, o el que no sabe preguntar:
    «Aquel día se lo contarás a tu hijo diciendo: ‘Esto se hace con motivo de
    lo que el Eterno hizo conmigo cuando salí de Egipto…’
    «
    (Shemot / Éxodo 13:8)

Es fácil reconocer que cada uno de estos tipos
de personalidad, con sus frases correspondientes, apunta a un nivel E-IDEA.
En su orden:

  1. Intelectual <=> Sabio;

  2. Desiderativo <=> Perverso;

  3. Emocional <=> Torpe;

  4. Acción <=> Perplejo.

Los cuatro hijos, en su condición de tales,
están representando a la persona inmadura espiritualmente, que aún no se ha
desarrollado, que aún está sometida a las influencias atrapantes de uno u
otro nivel.

El hijo menos desarrollado
(pero no por eso en peor estado espiritual, ya que este dudoso mérito
recae sobre el Perverso)
es el Perplejo, que está tan sumido en las
cosas materiales (concretas y/o instintivas), en los
actos por sí mismos, que ni siquiera sabe (o tiene
ganas/tiempo/ocasión/motivo/etc. para)
preguntar.
Su vida es un pasar indiferente en búsqueda constante de goce.
Lo valioso para él es aquello que le llama la atención en ese momento, y así
pierde de vista lo que es realmente importante y trascendente.
Para liberarlo, es preciso hablar en su idioma: el del hacer, sin mucha
teoría, pero con una clara conducción que lo lleve hacia metas no egoístas.
Cuando está liberado, sus actos son edificantes.

El que le sigue en la cadena evolutiva
de los sometidos es el Torpe.
Este hijo tiene enorme miedo a sus afectos, a las sensaciones, a las
opiniones, a las impresiones, por lo que queda aprisionado de una
estructurada red de complejas reglas y mandamientos que lo mantienen en un
ambiente de seguridad.
Su vida es un vaivén de atracciones y repulsiones que están petrificadas
detrás de mandatos que ha interiorizado y lo convierten en una especie de
autómata, de seguidor férreo de la voluntad ajena.
Para liberarlo, hay que conducirlo con firmeza, y proveerlo de acciones y
alicientes afectivos que lo mantengan en el buen sendero y le den fuerza
para aceptar que él tiene capacidad de decisión y es libre de optar y de
errar o triunfar.
Cuando logra zafar, es una persona de afectividad centrada y constructiva.

El habitante esclavizado en el siguiente plano
es el Perverso.
Esta persona puede estar completamente desquiciada, viviendo en su propio
mundo de informes ideas, emociones y bajezas muy humanas.
Pero es más habitual encontrar que este tipo de persona suele gobernar con
crudeza sus sentimientos y no cae fácilmente presa de los instintos
pasajeros. Esto lo convierte en un personaje capaz de cualquier atrocidad
sin el menor dejo de conmiseración.
Sin embargo, es inepto para dominar su deseo, y por tanto preso de él.
Y ya sabemos (Bereshit / Génesis 8:21) que por
naturaleza, el inculto deseo de la persona tiende hacia lo negativo. Es
solamente mediante Torá y preceptos que el deseo se cultiva para que
sintonice y colabore en armonía con su esencia espiritual.
La vida de un esclavo de este plano es un llamado de atención permanente, un
reclamo perpetuo para recibir más y más para sí, una exigencia para que lo
adulen y alaben, un intento por atraer a otros a su centro de gravedad sin
beneficiarlos directamente en nada. (Los dos exponentes más
famosos de esclavitud en el plano desiderativo son Jesús el pecador, y Pablo
el rebelde. Tal como el árbol sus frutos, y así vemos como es habitual entre
los misioneros encontrar personas corrompidas en este plano, y por lo tanto,
esclavizadas a él.)
.
Para liberarlo, primero hay que callarlo.
Negarle cualquier oportunidad a su deseo negativo para expresarse.
Esto en lugar de ser una falta de consideración hacia la persona, es el
mecanismo para limpiarlo de la adicción a creerse el centro del universo.
Cuanto más charla se le dé, cuanto más espacio para emitir sus opiniones,
menos resultado dará el intento por libertarlo.
Luego, o al mismo tiempo que se le impone el mutismo, hay que ponerlo a
trabajar en lo que es realmente trascendente y generoso… lo desee o no.
Cuando se quita las cadenas, es una persona que desea beneficiar al prójimo.

Por último, el que queda sumergido en el nivel
intelectivo, está empantanado en pensamientos inútiles, en dudas
asfixiantes, en ignorancia militante, en erigir excusas en lugar de
enfrentar los hechos desnudos.
Sus reflexiones (absurdas muchas veces, aunque teñidas de una
pátina de alta filosofía)
no están en principio movidas por un deseo
negativo, a diferencia de los motivos que dirigen al Perverso en sus
argumentos (el perverso afirma, nunca indaga… aunque use
signos de pregunta en sus frases)
.
Su vida es un pensar, sin hacer lo máximo que está a su alcance.
Para liberarlo, hay que brindarle argumentos claros y concisos. Razones
perfectamente delimitadas, explicaciones que sean razonables.
Y hay que acicatearlo con fineza y constancia para que demuestre su valía a
través de las acciones nobles y necesarias.
Al romper el yugo de la hiper-reflexión estéril, emplea su potencia
intelectual para promover el bienestar.

Hasta aquí un resumido bosquejo de los cuatro
hijos y los cuatro modos de la esclavitud.

El lector atento ya habrá advertido que nos
hemos quedado sin mencionar al quinto hijo.
Es que, este hijo no existe.
La Torá nos habló de cuatro hijos, no de tres ni de cinco.
Esto significa que no hay un quinto hijo.
Es decir, no hay inmadurez para el que llega a habitar en el plano
Espiritual (del cumplimiento cabal de los preceptos).
No es hijo, sino padre.
Un padre que ha trabajado, y lo continúa haciendo cada día de su vida, para
no ser aprisionado en alguno de los otro cuatro planos de su existencia.
Es un padre que educa con paciente esmero a los cuatro hijos que lleva
dentro.
Es el padre que responde, y se responde.
Es el padre libre y que libera.
(Un ejemplo muy simple y cotidiano:
Moishe es una persona que ha madurado con tal calidad que ha llegado a ser
morador del plano Espiritual. Pero Moishe vive en Este Mundo, con sus
conflictos, anhelos, tentaciones, desencantos, etc. Un día, en un agasajo de
ciertos conocidos, le presentan a Moishe un plato de comida no kosher.
¿Qué es lo que puede ser que acontezca en una fracción de segundo dentro de
Moishe?
Su plano corporal lo pincha: ‘Tengo hambre y no puedo esperar más, ¡come
ya!’.
Su plano afectivo le implora: ‘¿Qué pensará de ti esta gente que le rechazas
su gentil ofrecimiento de comida? Come ahora para no avergonzarlos y
avergonzarte.’
Su plano desiderativo le exige: ‘¡No me vengas con tus tonteras de judío!
¿Qué te va a hacer un platito de esto? ¡Come ahora que la vida es corta!’.
Su plano intelectual razona: ‘Ciertamente yo sé que no debo, pero es un
mandamiento tan antiguo… quizás no tiene ya fundamentos en la actualidad.
Los estudios de los médicos señalan que… blablablablablablablabla… por
lo tanto, estaría en condiciones de comer de este plato y después en todo
caso me arrepiento y blablablabla…’.
Pero, el padre, plano Espiritual recuerda: ‘El Eterno me ha ordenado que no
lo coma, y eso es lo que debo hacer’)
.

Todos llevamos dentro nuestro estos cinco
planos, y todos tenemos la capacidad de ser hijos o padre. Es cuestión de
querer liberarse y trabajar por ser libre.
Las herramientas nos han sido dadas, así como la fuerza para lograrlo.

Nunca es tarde para comenzar a ser libre…
¿por qué no prueba con

Cabalaterapia online
?
Con la Cabalaterapia se procura educar a nuestros hijos internos, para dar
dicha y tranquilidad a nuestra vida, y especialmente un sentido por el cual
vivir realmente con fidelidad a la Verdad.


Moré Yehuda Ribco

http://serjudio.com/shemot/bo64.htm

Resp. 302 – Casamiento con sobrina y con prima

consulta:

Hola
don Yehuda Ribco Dios le bendiga
gracias por responder mis preguntas
me han servido mucho
aqui va mi pregunta
1- un hombre puede casarse con su sobrina , hija de su hermano
2- un hombre puede casarse con su prima hermana , hija de
tio y tia por parte del padre y tio y tia por parte de la madre
espero comprenda mi pregunta
se despide
Andres Aguirre Tapia,,edad 30 años,Huasco, Chile

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Descubriendo la luz…

Es un testimonio que quiero compartir. Saben? Mi vida la comparo a un sótano, lleno de trastos viejos, que uno nunca deja de sacar, y acumula y acumula. Pero cada cosa va tampando otra. Un día nos damos cuenta que ya no hay espacios para cosas, y menos cosas nuevas. Qué hacemos? Buscamos otro lugar para guardar o empezamos a sacar para abrir espacios. Hay quienes deciden descupar otros a dejar guardado. Qué bueno es cuando desocupamos, y al sacar, una otro, y otra cosa, vemos cuanto acumulamos cosas que ya no tienen valor, que no sirven. De pronto todo queda vacío y nos encontramos que allí ´había una ventana, entraba luz, muchas luz que fuimos tampando. Que alegría al ver que había un espacio hermoso para llenar de cosas buenas, que había una luz que nos quería iluminar, pero no lo notamos porque fuimos tampando con nuestro errores cada vez más esa luz. Qué hermos cuando vemos que podemos volver a empezar y a darnos cuenta que hay algo mejor que poner, cosas que hacen a nuestra vida, arreglar con sentimientos bellísimo, donde todo el mundo pueda entrar y decir, que luz tan hermosa hay aquí, que paz que se siente aquí. Qué bueno vacianor de nosotros y llenarnos de la luz de D-S, El es el único que puede llenar esos espacios y transformarlos en luz. No volvamos a tapar de trastos que no sirven, no nos quedemos estancados guardando cosas que no sirven. Que podamos mostrar la luz de D-S, que brille el sol en nuestras vidas. Gloria a D-S, por darnos siempre la oportunidad de vaciarnos para que El entre y haga en nosotros su obra magistral. Cuando dejemos entrar algo que arruina el lugar, que la luz lo ilumine he inemediatamente lo barramos. Shalom.

Comprendiendo lo que siente un adolecente

Cada adolescente es un individuo, con una personalidad única y con intereses propios, sus propios gustos y disgustos. Sin embargo, hay numerosos factores comunes en el desarrollo que todos confrontan durante los años de la adolescencia. Las emociones y el comportamiento normales del adolescente en los últimos años de la primaria y de los primeros de la secundaria se describen como el crecer hacia la independencia que incluye la lucha con su sentido de identidad, se siente extraño consigo mismo o con su cuerpo, lo influencian los amigos en su modo de vestir e intereses, su humor es cambiante, tiene menos demostraciones de afecto hacia los padres; ocasionalmente el adolescente se pone grosero, se queja de que los padres interfieren con su independencia, y tienen la tendencia a regresar al comportamiento infantil, especialmente cuando está pasando por mucho estrés. También se pueden describir como la moralidad, valores y dirección propia que pone a prueba las reglas y los límites, aumenta la capacidad para pensar en manera abstracta, se desarrollan los ideales y se seleccionan modelos de comportamiento, mayor evidencia consistente de tener conciencia, y se experimenta con el sexo y las drogas.
Los adolescentes puede variar con relación a lo anteriormente descrito, y esas emociones y comportamiento son, en general, considerados normales para cada fase de la adolescencia.

Sara

Resp. 266 – El origen del mal

azul0305 nos consulta:

Genésis3:22-24.habla Dios que el hombre conoce ahora el bien y el mal…existe el mal, entonces. y los echó del Edén…los echó porque hicieron lo malo,quiere decir que siempre hubo mal, sino no existiría el bien, me explico.? Si pueden aclarame, se los agradecería.
azul0305

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La caridad (tzedaká)

El concepto de tzedaká es uno de los pilares fundamentales del judaísmo. Su significado es literalmente justicia, pero se la utiliza generalmente para definir la caridad. Se encuentra en la Torá como una obligación para los judíos y cuentan con ciertas reglas para aquello; generalmente se destina los fondos del dinero de la tzedaká a centros de difusión de Torá, a los pobres y necesitados, centros de difusión de noajismo, etc.

Pero para los noájidas no es una obligación, no se encuentra como mandamiento del Creador dado a Noaj; pero el noájida de todas maneras lo puede realizar voluntariamente, y no necesariamente debe ser dinero de manera exclusiva, sino también donaciones de ropa, alimentos, frazadas; cosas que ayudan al necesitado, sin tener NUNCA en mente que está cumpliendo con una obligación dada por el Creador, pero sin duda alguna que este desinteresado acto de generosidad  es bien vista a los ojos del Eterno. Es muy probable que este acto de bondad sea recompensado en éste o en el otro mundo.

(Es muy importante que de decidir donar dinero o caridad, no sea recibido por pastores, líderes mesiánicos, falsos rabinos, o promotores de falsas doctrinas idólatras que tengan como bandera la rebeldía contra el Eterno; ya que de actuar uno así, se convierte, a pesar de su buena intención, en cómplice de la rebeldía idolátrica…es duro, pero mejor ser cuidadosos)

Ahora, estudiando un poco sobre el tema, hace en realidad bastante tiempo, antes de participar en Fulvida, me encontré con que esta acción en sí es retribuída, y que lo que se dona en algún momento de la vida retorna. Una de sus explicaciones está basada en las letras hebreas que conforman la palabra tzedaká. Cada una de sus letras son: tzadik; dalet; kof; he, recordemos que en hebreo se lee de derecha a izquierda.

No es mi intención entrar en muchos detalles, así que sólo comentaré que existe un sistema llamado At-Bash, que es una tabla en donde se cambia la primer letra por la última (alef por tav), la segunda por la penúltima (bet por shin), la tercera por la antepenúltima (guimel por resh), y así sucesivamente; y como el alfabeto hebreo consta en total con 22 letras, las once primeras se corresponden con las últimas once.

Aplicando este concepto a la palabra tzedaká resulta:

tzadik = he

dalet  = kof

kof    = dalet

he    = tzadik

Obtenemos como resultado la misma palabra tzedaká, pero al revés. Aludiendo que todo lo que se da como tzedaká o caridad, vuelve de la misma manera; es decir, se es retribuído. Si quieren ver con mejores detalles lo anterior pueden hacerlo en este link, donde encontrarán otras cosas interesantes.

Bueno hasta ahora esta teoría es muy linda e interesante, pero, ¿funciona?. La verdad es que no pretendo de esto hacer LA fórmula milagrera, ni fomentar el recurrir a misticismos ni nada por el estilo, sino compartir un concepto que al menos para mí tiene mucho valor. Brindar apoyo a los demás, sea monetario o caritativo en cualquiera de sus formas. Es por eso que les quiero compartir en resumen dos testimonios personales que me brindaron mucha satisfacción personal, por lo que acarrea en cuanto a iluminación espiritual; la primera fué antes de ser miembro de Fulvida, y aún con rastros de idolatría, y la segunda fue hace menos de una semana, en plena identidad noájica.

1) Me iba de viaje para Mar del Plata en marzo de este año, llevaba conmigo un dinero juntado de meses que lo iba a destinar a la Sociedad Unión Israelita Marplatense (SUIM), donde funciona un pre-escolar, además de difusión de Torá y ayuda a necesitados. Aún antes de irme tenía en el cajero del banco $700 (pesos argentinos) que en realidad en ese momento no necesitaba, pero pensé en retirarlos con el propósito de sumar $70 (el %10) a lo que llevaba como caridad. El día antes de irme fuimos de compras y aproveché para retirar el dinero del cual luego en casa sacaría lo correpondiente, al volver lo hice y lo guardé todo en un sobre. Al día siguiente al desayunar, mi vieja se acerca con un paquete, un juego de sábanas que había comprado el día anterior que yo ni ví y me dice: »esto es para vos», »!uh buenísimo,gracias!» le dije, y sólo por curioso y sin el tema de la caridad en mente le pregunté cuánto le había costado, sólo para saber el precio; y me dijo: »$70…bueno, en realidad $69.90 pero es $70 al fin.»

Casi que me río solo, pero contuve la emoción aunque por dentro reía de alegría. Sobre todo porque recordaba esa tabla de At-Bash, y sobre el retorno, la retribución; a pesar de que todavía no había llegado a real destino.

2) Hace casi más de un mes empezaba a sacar ropas del placard, remeras (polos o camisetas les suelen decir en otros países), abrigos, pantalones,etc., que yo ya no iba a usar más y pensaba en entregarlas porque se venía el frío y seguramente había quienes iban a necesitarlo. Saqué todo lo que tenía y los puse todo junto en un lugar hasta decidir en cuál institución de ayuda al pobre lo iba a dejar, debido a que no quería darlo a iglesias o instituciones donde tuvieran algún estandarte idólatra, por más que el destino fuera el pobre. Más que nada porque no quería que se entregara al pobre en nombre de Jesús o de la virgen por ejemplo, y así el pobre al aceptar la donación aceptara el nombre en quién se hacía la entrega. ¿Complicado yo? tal vez…

Luego de días al conocer a los chicos de Fulvida Argentina, David me mencionó una fundación que justamente se llama Tzedaká e hizo un post al respecto, y me pareció buena opción, aunque ya iba encontrando otros adecuados.

El día 25 de mayo fué domingo y fuimos a comer a casa de una tía (hizo un locro espectacular), y volvimos a la tarde-noche, y tiempo después me fui a dormir. Al día siguiente ya habiendo decidido el destino de la ropa, voy a buscarla a donde la había dejado, y solo estaban un par de pantalones y pocas ropas…le pregunte a mi vieja »¿y la ropa?», »se la dí a tu tía, para que la done». Me vino alguna sensación de amargura (tal vez injustificada), porque mi tía es evangélica, y pensaba que de seguro lo iba a llevar a alguna iglesia o algo afín, aunque me decía mi madre que tal vez lo haría en algún comedor o parecido. En fin, sabía que mi tía actuaría de muy buen corazón, por lo que confiaba en que lleguen a buenas manos de la mejor vía posible; pero principalmente que el destinatario sea el necesitado, sea cristiano, hincha de boca o river, o la abuela de alguna vecina. Con este pensamiento me consolé.

Este sábado 28/06 invitamos a mi sobrino a comer a casa (un rico asado), y cuando llegó me saludó y me dijo: »esto te manda mi papá para vos», y me dió una pila de remeras que ya él no usaba, se los acepté con gusto sin recordar aún lo de hace más de un mes, y los dejé sobre mi cama. Cuando llegó la noche me fuí a dormir y estaban las remeras sobre la cama, las guardé en el placard y ahí recordé todo: »hacía un tiempo doné ropa…y ahora vuelve a mí,ropa».Y esta vez estaba solo así que me salió una sonrisa que solo sabe Di-s cómo era.

Entonces:¿casualidad?,¿causalidad?; realmente pueden pensar o reflexionar como gusten amigos, pero yo prefiero estar plenamente seguro (no sólo creer en) de que todo había sido resultado de la tzedaká/caridad.Estos dos casos no tienen tanto significado en lo material para mí como sí lo tiene y en abundante en lo espiritual y emocional. La ropa en sí no es algo que realmente necesite aunque sí le estoy muy agradecido al Eterno, pero lo que me colmó de alegría no fué en sí el hecho de haber sido retribuído, sino en confirmar Sus maravillas, y que en verdad la tzedaká es un mérito profundo; y si en todo el mundo se practicara esto, ayudando los más adinerados, famosos, ricos, a los menesterosos, los enfermos, los hambrientos de África por ejemplo, seguramente se haría justicia social o tzedaká como su sentido literal sugiere, porque todos estarían en condiciones parejas de dignidad en cuanto a la manera de vivir y convivir; y la era mesiánica estaría más cerca. Tan importante es la tzedaká/caridad.

Hasta acá un par de humildes testimonios que espero haya gustado. Shalom.

Sebastián.