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Autoestima (capitulo 3)

CAPÍTULO 3

Por el RAV. AZRIEL TAUBER

PENSAR Y SER

Era el último minuto de decisión para Dany. Cada vez que se encontraba a sí mismo decidiéndose por ir al seminario, las mismas palabras se repetían en su cabeza, ¿para qué lo necesito? Entonces se sentía aliviado pues decidía no ir, hasta que las palabras de su amigo retumbaban en su mente: ‘todos ustedes los israelíes tienen la misma expresión. ¿Acaso todo gira alrededor de ti mismo y de tus necesidades?’ Y entonces se encontraba a sí mismo considerando la idea de asistir. ‘¿Pero qué voy yo a sacar de todo esto? pensaba. ‘Ahí vas nuevamente, yo, yo, yo; ¿acaso todo tiene que girar alrededor de mi yo?’

Llegó justo antes de la puesta del sol, pero no se sentía bien. Más bien, se sentía obligado a estar ahí, a pesar que no era nada más que su propia conciencia la que lo obligaba. ‘Olvídalo’, se decía haciendo caso omiso de sus pensamientos negativos. ‘Ya estoy acá. De todas formas puedo pasar un buen rato’. Pero realmente todavía no estaba ahí.

Dany durmió en el cuarto del hotel durante la primera clase antes de bajar al lobby, donde la clase estaba justamente terminando. De repente oyó a alguien llamarlo por su nombre con emoción, —¿Dany? ¿Eres tú?

Moshé, —respondió Dany con alegría. Moshé era uno de los contactos de negocios más frecuentes de Dany.

Dany, ¿qué es lo que estás haciendo aquí?

Lo mismo que tú.

Sí, pero estoy sorprendido. Pensé que serías la última persona en venir acá.

Yo también soy judío. Además, ahora que tú estás acá, sé que tomé la decisión correcta. Estoy tan contento que estés acá, Moshé, —Dany repitió—. Quiero comentar contigo una idea de negocios.

Después de Shabat.

¿Después de Shabat? Desde que te volviste religioso, no se puede platicar contigo.

Eso no es verdad.

Sólo estoy bromeando, —dijo Dany.

Escucha Dany, la primera conferencia ha terminado. ¿Cómo es que no te vi ahí?

Estaba en mi cuarto, descansando.

Te perdiste una buena conferencia.

¿De que se trató?

Autoestima.

En ese caso, no me siento tan mal. Yo sé que los israelíes no somos perfectos, pero si hay algo de lo que no carecemos, es autoestima.

En ese momento, Moshé vio al rabino salir de la sala de conferencias hacia el vestíbulo.

Rabino—, lo llamó.

¡Ah!, Moshé —dijo el rabino mientras caminaba hacia ellos—. Me dio mucho gusto verte entre el público.

Y yo estuve feliz de estar ahí.

¿Tú esposa está acá?

Sí. Fue a ver al bebé. Pronto bajará para encontrarse conmigo, aquí en el vestíbulo.

Y ¿quién es tu amigo?

Él es Dany. También viene por el fin de semana.

Gusto en conocerte Dany. ¿Te vi entre el público? —preguntó el rabino.

No pude llegar a la primera clase, —admitió Dany—. Pero escuché que trató sobre la autoestima y, créame rabino, eso es algo que no necesito.

El rabino hizo una pausa. —Creo que podrías tener una impresión equivocada, —le dijo el rabino—. Un judío puede tener alta autoestima en determinada área, tal como en los negocios, en los deportes o alguna otra, sin embargo, eso no significa que tenga una autoestima judía.

Tiene usted un punto interesante rabino. La verdad es, no obstante, que yo conozco lo que quiere decir ser judío. Yo combatí en la guerra por el pueblo judío.

Y ¿aún estás peleando por el pueblo judío?

Combatí en una guerra. Espero nunca tener que pelear otra vez.

No estoy hablando acerca de arriesgar tu vida en el campo de batalla. Los Sabios relatan la historia de un hombre que exclamaba en las calles a los soldados que regresaban de la guerra: ‘Han regresado de una batalla, para combatir en otra mucho más difícil. La batalla contra ustedes mismos, en contra de sus pasiones’.5 En otras palabras, un judío tiene que luchar cada día por sí mismo y su pueblo. La batalla que tiene lugar en la intimidad de tu corazón es de muchas maneras, más significativa que la batalla con tanques y armas en el campo. Nuestros enemigos físicos son tan solo manifestaciones de nuestros enemigos verdaderos, los espirituales. Si no los conquistamos, nos volvemos nuestros peores enemigos. Y solamente nosotros podemos vencernos a nosotros mismos.

Hay mucho de verdad en lo que usted dice, rabino. Sin embargo, usted no se debe preocupar por mí. He visto milagros con mis propios ojos. Yo creo en Hashem completamente; quizá no en la forma en que ustedes los religiosos lo hacen, pero yo creo en Él.

Y ¿cómo creen los religiosos en Hashem a diferencia de ti?

Ellos cuidan todas las mitzvot.

¿Y tú no?

En realidad no. Y créame rabino, mis amigos han tratado de convencerme, pero no es para mí,

No es para ti porque tú no crees que Hashem le dio al pueblo judío 613 mitzvot.

No. Ésa no es la razón. Yo no cuido las mitzvot porque no quiero renunciar a las cosas buenas de la vida.

El rabino hizo una pausa. —Dany, ¿te importaría si te hago una pregunta?

No. Adelante por favor.

Cuando tienes hambre, ¿qué es lo que haces?

Me alimento.

¿Te alimentas a ti o a tu estómago?

¿A qué se refiere?

¿Es tu cuerpo tu yo, o tu yo es algo más?

Por ‘algo más’, ¿se refiere a un alma?

Sí.

Rabino, yo podré ser un alma, pero también soy un cuerpo. Y no quiero negar que soy un cuerpo.

Yo tampoco quiero que lo niegues, pero quiero asegurarme de que estamos de acuerdo en algo. Tu yo real es tu alma. Tu cuerpo te ha sido prestado por Hashem. Es como un automóvil rentado. Si tú vas de vacaciones por un mes y rentas un automóvil, después del mes no lloras cuando tienes que regresarlo. Hiciste buen uso del automóvil mientras lo necesitaste y luego lo regresas a Avis o a Hertz.

Nosotros hemos tomado un viaje a la tierra y hemos rentado un vehículo por 70 u 80 años. Cuando llega el tiempo de regresarlo, lo regresamos. Sólo tenemos que asegurarnos de que no lo hemos dañado. No hay pólizas de seguro. Somos responsables por cualquier daño.

Hashem nos prometió que si hacíamos buen uso del cuerpo, Él nos lo daría de regreso en el mundo eterno. En ese mundo, nuestros cuerpos físicos serán reconstituidos de tal manera, que aun ellos serán espirituales. Entonces seremos capaces de hablar de ellos, como hablamos de nosotros mismos. Sin embargo, ahora sólo estamos ‘rentándolos’. No deberíamos crecer tan apegados a ellos al extremo de que nuestra identificación esencial sea con ellos. Por lo tanto, Dany, te pregunto otra vez: ¿realmente eres tu estómago o tu alma?

Si lo pone de esa manera, rabino, por supuesto que soy ante todo, un alma.

Entonces, no puedo entender por qué tú piensas que cuidando mitzvot renunciarás a las cosas buenas de la vida. En todo caso, es lo contrario. Si tú no cuidas la Torá y las mitzvot, no sabes cómo disfrutar realmente de la vida.

¿Cómo puede decir eso?

Porque en la vida hay más que llenar tu estómago. No existe nada más satisfactorio que llenar tu alma. Si pasas el día colmando tu estómago o sumergiéndote exclusivamente en la búsqueda de objetos materiales, estás descuidando tu alma. Se está desnutriendo. Y si, como tú admitiste, una persona es primariamente su alma, ¿cómo puedes estar feliz si no alimentas tu alma con el alimento espiritual que ansía?

Admito que no soy una persona espiritual.

Si no es así, ¿cómo puedes incluso disfrutar lo físico? Si tu alma no está experimentando el deleite de comer, entonces ¿quién? ¿Tu estómago? El estómago de un animal también da cierta medida de satisfacción cuando está lleno. Pero tú eres un ser humano. Y un judío además de eso. No puedes estar experimentando plenamente los placeres de este mundo sin un alma sana, bien alimentada.

Soy feliz como soy, —dijo Dany—. Si fuera fácil desarrollarse en una persona espiritual, yo podría hacerlo. Pero no tengo herramientas para ser una persona espiritual.

¿Puedes pensar?

Por supuesto.

Entonces tienes todas las herramientas que necesitas. El pensamiento es la ventana del alma.

Mi problema, rabino, es que yo ya pienso mucho. Usted sabe lo que los rabinos dicen: yosif daat, yosif majov, ‘a más conocimiento, más dolor’.6 De algo sirve ser tonto. La gente superficial siempre está feliz. La gente exageradamente intelectual es infeliz. Es por esto que yo digo que pienso demasiado.

No fue cualquier rabino el que dijo esto, —respondió el rabino—, sino Shlomó Hamélej, el más sabio de todos los hombres. Y, Dany, si el más sabio de todos los hombres dijo esto, puedes suponer que hay algo más en sus palabras, porque la adquisición e incremento del conocimiento es la esencia del enfoque de la Torá.

Entonces ¿qué quería decir?

Se estaba refiriendo a un tipo específico de persona; una persona que se enorgullece exclusivamente de su intelecto, o una persona que no hace otra cosa más que intelectualizar todo el día. Una persona no es su intelecto. El intelecto tiene la intención de servir a la persona. Es un instrumento. Una persona tiene que vivir, lo que significa, que tiene que ser feliz en su vida física y usar su intelecto para producir cambios en su vida física. Ésa es la persona completa. La persona que hace de su intelecto el objetivo, experimenta dolor en el grado en que incremente su intelecto.

Una persona equilibrada, por otro lado, que participa de lo físico, así como de lo intelectual, no experimenta dolor a medida que incrementa su conocimiento. Totalmente, al contrario, incrementa su habilidad para tomar placer en la vida. Y es por esto que Hashem nos dio un estilo de vida de Torá y mitzvot, que balancea perfectamente la parte intelectual de la persona con la parte física. Sin Torá y sin mitzvot, ¿cómo puede uno derivar la máxima felicidad aun en su vida física?

Pero, rabino, usted no puede negar que la Torá le prohibe a la persona los placeres de este mundo. Te dice todas esas cosas que no puedes hacer.

Por cada placer que la Torá te ordena abstenerte, existe un placer equivalente que nos permite y alienta a participar de él. Y nos orienta en cómo participar en ese placer equivalente para que lleguemos a poseerlo, y no que él nos posea a nosotros.

Pero yo conozco gente judía que dice que cuanto más infeliz e insatisfecha sea la vida de uno, más grandeza tiene la persona. Un rabino me dijo esto. Incluso citó la siguiente afirmación: ‘No digas que no comes jamón porque es repulsivo. Más bien, no es repulsivo y si fuera posible te lo comerías, pero qué puedes hacer, si el Creador del cielo y la tierra te dijo que no te lo comas’.7 En otras palabras, este rabino me dijo que la Torá lo priva a uno de los placeres de este mundo, para que uno pueda servir a Hashem con motivaciones puramente espirituales.

Eso no es verdad. La persona que te dijo eso pudo haber entendido mal la idea. Esta cita sólo tiene la intención de enfatizar la importancia de la pureza de los motivos. No nos exhorta a hacer nuestra vida desdichada. Por el contrario, la Torá nos advierte: ‘Las malas noticias (predichas y enumeradas en los versículos previos), vendrán sobre ti porque no serviste a Hashem con alegría y buen corazón’.8 La Torá nos obliga una y otra vez a servir a Hashem con nuestro cuerpo y tomar placer de ello. Tenemos el mandamiento de estar satisfechos y regocijarnos en cada paso del camino en que servimos a Hashem con nuestra existencia física, con nuestro corazón y con nuestras emociones.

Es por esto, que a diferencia de muchas religiones orientales en donde el objetivo es desarrollar el lado espiritual, en tanto que se mata el lado físico, la Torá equipara la realización espiritual con la total participación del mundo físico. Debes casarte, establecer una familia, volverte parte de una comunidad según el modo de la Torá y, sólo entonces te has convertido en un verdadero servidor de Hashem. La Torá no nos permite evadirnos de los placeres físicos,

Si necesitas una prueba más, —agregó el rabino— toma Shabat. Shabat se santifica sobre una copa de vino; la mitzvá verdadera se hace sobre vino y no sólo con jugo de uva (no obstante que es aceptable). Un vino fuerte y embriagante se sobrepone al intelecto y debilita la razón. Ésta es la forma en que empezamos a santificar nuestro día más sagrado. Y después comemos, cantamos e interactuamos con nuestra familia durante las próximas 24 horas. Todo es muy físico. Si ésta es la forma en la que actuamos en el sagrado Shabat, entonces debería estar claro que la santidad es dependiente de las necesidades del cuerpo, y no se contrapone a ellas. El judío ideal es aquél cuyo cuerpo participa completamente con su intelecto, con su yo espiritual.

Por lo tanto, Dany, si tú me dices que no cuidas las mitzvot debido a que no puedes renunciar a las cosas buenas de la vida, yo te pregunto: ¿cómo puedes experimentar las cosas buenas de la vida si no tienes la Torá y las mitzvot como tu guía?

Pero rabino, uno no necesita la Torá para disfrutar la vida.

Quizá uno no necesita la Torá para tener una experiencia satisfactoria temporal. Sin embargo, la Torá le enseña a uno cómo hacer esta experiencia duradera y significativa. Ninguna de las cosas materiales de este mundo trae placer duradero a menos de que estén filtradas por la Torá.

Pero ¿qué hay cuando compras ese automóvil para el que estabas ahorrando?

¿Cuánto dura este tipo de felicidad? La respuesta es: hasta que descubres otra cosa que ansíes. Rápidamente, el instinto adquisitivo se vuelve una adicción y te vuelves más infeliz que nunca. Como dije, la Torá te enseña cómo poseer el mundo físico, no ser poseído por él. Es por esto que no puedo entender cómo dices que eres capaz de ser feliz sin la Torá.

Rabino, yo conozco gente rica, no religiosa que es feliz.

Parecen ser felices en el exterior, pero no sabes qué pasa en su interior. Además, aun si exhiben cierta felicidad externa, quién dice que son ricos como seres humanos. Una vaca también es feliz cuando es conducida al pasto. Así también, algunas personas son apenas algo más que vacas conducidas al pasto con toda su riqueza. Su felicidad no es ni profunda ni duradera. Admitiendo que aun la felicidad externa tiene sus ventajas, es la felicidad espiritual interna no dependiente de circunstancias externas la que finalmente es importante. Y no puedes tener la satisfacción interna sin los objetivos de la Torá.9

Yo no sé, —dijo Dany—. Todo lo que sé es que si D–os me hiciera millonario, sería feliz aun sin Torá.

¿Cómo puedes estar tan seguro? Conozco gente rica que es infeliz. Y conozco gente pobre que es feliz. La comodidad material es finalmente independiente de la capacidad de la persona para experimentar felicidad.

Pero ayuda.

Algunas veces. Y algunas veces daña. Tú sabes, los países escandinavos tienen una de las tasas de suicidios más altas del mundo. La ironía es que para mucha gente, ellos representan la sociedad en la cumbre del progreso humano: rubios, de ojos azules, nórdicos conocidos por su naturaleza no agresiva y sistema político progresivo, donde la riqueza se distribuye equitativamente. Y la verdad es que la riqueza está distribuida en esos países en forma relativamente uniforme. Nadie es muy rico ni muy pobre. Sin embargo, tienen una tasa de suicidios inusualmente alta,

¿Por qué habría de ser?

En mi opinión, el problema en Escandinavia es que no existen las apariencias externas de status y logro material, que frecuentemente funcionan para hacer que la gente sin ninguna otra fuente de autoestima se sienta bien acerca de sí misma. Mientras que en los países más occidentalizados, el materialismo sirve como un tipo de opio que nubla el miedo que uno siente por la falta de valor interno; los escandinavos con frecuencia tienen que enfrentarse a la desnuda, cruda, y sobria verdad. Ya que no conocen cómo generar un verdadero sentido del yo, muchos de ellos, por lo general intelectuales, llegan a sentir que la vida no tiene valor y cometen suicidio. La conclusión, Dany, es que no es la comodidad material la que trae la felicidad duradera.

Entonces, ¿qué la trae? ¿la Torá? ¿Me va usted a decir que no hay personas ultraortodoxas que son infelices?

Puede haber personas ortodoxas que son infelices pero eso es porque no poseen la Torá tan profundamente como debieran. Verás, no basta con observar la Torá superficialmente o creer en sus principios por hábito. La verdadera felicidad depende de una mente sana, activa y pensante, una mente que se esfuerza por entender lo más posible el significado profundo de la Torá y las mitzvot. Las personas que están infelices, son infelices porque no piensan; no saben cómo pensar, cómo utilizar su capacidad de pensar. Déjame explicarte a qué me refiero.

Podemos decir que una flor está viva porque despide un aroma agradable. Si se marchita o huele mal, está muerta o está muriendo. ¿Cómo sabemos que un ser humano está vivo?

¿A qué se refiere? Come, respira.

Un animal también come y respira. Mi pregunta es mucho más profunda. ¿Cómo sabemos que lo que hace único a un ser humano es vida y bienestar?

Dany pensó por un momento y se aventuró, —¿Un ser humano usa herramientas?

Muchos animales también usan ramas y objetos como herramientas.

¿Un ser humano puede sonreír?

Un simio también se sonríe.

Entonces me rindo.

Un ser humano puede pensar.

Pero rabino, —dijo Dany—, un simio también puede pensar.

No como un ser humano. De hecho, hay algo tan único acerca del pensamiento humano que, en comparación a él, es como si los animales no pensaran en lo absoluto.

¿Qué es?

La capacidad de sobreponerse al instinto debido al proceso de pensamiento. La verdad Dany, es que la mayoría de las personas no piensan. Piensan por los mismos objetivos que un animal piensa, sobrevivir, adquirir mejores cosas materiales, pero no piensan en la manera única en que el ser humano piensa para sobreponerse a sus instintos. Y si un ser humano no está pensando en la manera única que un ser humano piensa, ese ser humano no puede ser feliz. ¿Acaso puede un pez ser feliz si no puede nadar? ¿Puede un pájaro ser feliz si no puede volar? ¿Puede una vaca ser feliz si no puede comer? Así también, un ser humano no puede ser feliz si no puede, o no hace uso de la habilidad que lo hace único: su capacidad de pensar realmente.

El rabino hizo una pausa y decidió elaborar más aún. —Si yo tuviera que clasificar a los seres humanos —dijo—, diría que hay tres tipos: aquéllos que no piensan. Aquéllos que piensan que piensan. Y aquéllos que realmente piensan. La mayoría de la gente no piensa. Muchos creen que piensan. Y solamente unos pocos realmente piensan.

Imagínate un fumador asiduo, que su doctor le dice que si no deja de fumar pronto, va a morir. ¿Cómo reaccionarían los tres diferentes tipos de seres humanos? El primero, se muere antes que pensar. Se dice a sí mismo, ‘Sólo vives una vez, así que debes experimentar tanto placer como sea posible. Si fumar es uno de mis placeres, ¿qué tiene la vida de bueno si yo no puedo fumar?’ Por lo tanto no va a dejar de fumar. Y conocemos gente como ésa, que continúa fumando a pesar del conocimiento que fumar los va a matar. Estas personas preferirían morir antes de pensar qué se están haciendo a sí mismas.

Después hay una persona más seria. Si su doctor le dice que tiene que dejar de fumar, llegará a su casa y dirá: ‘Ya está. Tiro mis cigarros. Voy a dejar de fumar’.

Sin embargo, se levanta al otro día y lo primero que siente es un fuerte deseo de un buen cigarro. Inicia un diálogo interno consigo mismo. ‘Estoy totalmente comprometido a dejar de fumar. Mi vida es más importante que el cigarro. Sin embargo’, él agrega, ‘¿un pequeño cigarrillo realmente me matará?’ Sin una pausa él responde: ‘No’, y fuma el cigarro, jurando que es el último.

Unas horas más tarde, tiene el mismo deseo y el mismo diálogo cruza por su mente. Al final del día se fumó tres cigarrillos. No obstante, no le molesta porque razona que realmente combatió su hábito. Y lo hizo. Estaba pensando en lo que él estaba haciendo o así parecía, y eso le dio la fuerza para fumar solamente tres cigarrillos.

El problema es que al día siguiente se fumará seis cigarros. Y al tercer día se fumará doce. Y así seguirá antes que se dé cuenta que está encadenado al cigarro otra vez. ‘¿Qué puedo hacer?’, dice derrotado. ‘Lo que vaya a pasar, que pase. Yo no puedo hacer nada’.

Esta segunda persona es una que cree que piensa. Por un momento pareció como si realmente estuviese pensando. La verdad es, no obstante, que realmente no lo estaba haciendo. Él sólo creía que estaba pensando. Cuando se preguntó a sí mismo, ‘¿Acaso un pequeño cigarrito va a ser la diferencia?’ Su yo habitual estaba manipulando su mente pensante. Se hizo preguntas cuyas respuestas ya sabía. No se atrevió a preguntar: ‘Si me fumo aunque sea sólo un cigarro, ¿seré capaz de romper realmente mi hábito?’ Si se hubiera preguntado así, su mente racional le hubiera dicho que no fumara ni un solo cigarro.

Una persona que solamente cree que piensa, manipula su mente. Limita su pensamiento a parámetros que se acomoden a sus hábitos de vida. El pensador real es uno que quiere ser honesto al extremo donde duele. ‘No me importa lo que quiero, lo que pienso que necesito, lo que estoy deseando’, dice. ‘Yo sólo quiero saber la verdad absoluta’. Éste es un pensador real. No tiene miedo de enfrentarse a sí mismo. Quiere conocer la verdad aun cuando él está equivocado.

Pensar realmente significa no dejar que nuestros deseos interpreten la realidad por nosotros. Más bien queremos saber la verdad, la verdad objetiva, y queremos cambiarnos a nosotros mismos para alinearnos con esa verdad objetiva no importando cuánto nos duela.

Es por esto, Dany, que la verdadera razón por la que la gente es infeliz, es porque no utilizan su don humano único: la capacidad de pensar, de pensar realmente hasta el punto de poder sobreponerse a sus hábitos, a pesar de la dificultad y el dolor. No importa cuánta gente trate de traer felicidad a su vida, mientras su verdadero yo esté perdido, van a ser infelices. ¿Quién eres tú? Eres un pensador. Si no piensas, no puedes ser feliz.

El rabino se detuvo por un momento y luego continuó. —Si tú no quieres pensar, estás huyendo de ti mismo. Y si huyes de ti, no existes ‘tú’. Tu ser puede experimentar placer o satisfacción temporal, pero no existe un ‘tú’ para hacer la experiencia significativa y duradera. Ya sea que tengas cualquier otra cosa, una carrera, dinero, matrimonio, hijos, etc., te sientes infeliz porque esas cosas no son tú.

A medida que uno piensa menos, menor es su autoestima genuina. Uno que huye de sí mismo día tras día, realmente no es nada. Ésa es la causa de baja autoestima. La verdad, yo diría, es que no hay tal cosa como baja autoestima. Si no existe un yo, no existe estima. Y la triste realidad es, Dany, que la mayoría de nosotros no queremos conocernos honestamente. No queremos enfrentarnos con el dolor de perseverar en el pensamiento que sabemos es verdad. Si te evades a ti mismo, al final no puedes ser feliz.

Pero rabino, deben existir muchas psicologías y filosofías, aparte de la Torá, que destacan la importancia de pensar.

Comparadas con la Torá no son nada.

¿Cómo puede usted decir eso?

Estoy consciente de que el mundo moderno se enorgullece por su conocimiento, el cual, nos han hecho creer, está continuamente evolucionando, avanzando y progresando. Y parece ser así porque, por ejemplo, hay muchos doctores y profesionales que elaboran teorías y escriben artículos cada día. El conocimiento se está apilando. Sin embargo, sin importar cuán magnánimos hagan creer que son, todas sus teorías están fundamentadas en ciertas suposiciones producidas dentro del encuadre de su mente racional humana. Las teorías se están produciendo regularmente, pero son un reciclaje de las mismas suposiciones publicadas en la última revista mensual. Todas esas horas de pensamiento-hombre tienen valor limitado pues existen dentro de un sistema cerrado que contiene numerosas verdades parciales y limitaciones hechas por el hombre.

Sin embargo, aquél que crea nuevos mundos de pensamiento sobre los axiomas de la Torá, está empezando con una verdad 100 por ciento no adulterada, porque la Torá se originó en el Sinaí, de una fuente superior al ser humano. Aun si una teoría hecha por el hombre empieza con un 99 por ciento de verdad, hay una mayor distancia entre esa teoría y la Torá, que entre esa teoría y una teoría hecha por el hombre basada en un 1 por ciento de verdad. La Torá del Sinaí es la única fuente objetiva de verdad absoluta en este mundo. Cualquier verdad puede ser rastreada finalmente hasta el Sinaí. Cualquier cosa fuera de la Torá está casi seguramente ligada con impurezas que ensucian la mezcla completa y la invalidan como una fuente confiable de verdad.

Eso es lo que usted dice rabino. Pero otras personas dicen lo contrario. ¿Cómo lo podemos probar?

El tiempo es la verdadera prueba. Un cohete que apunta hacia la luna y está un grado fuera de objetivo, en los primeros segundos después del despegue se desviará de la luna por diez mil millas si no se toma una acción correctiva. Así también, la diferencia entre la verdad de la Torá y la mejor verdad hecha por el hombre, no se ve automáticamente justo al principio. Sólo puede ser observada mejor a través del tiempo.

Tan sólo hace menos de un siglo, muchos judíos creyeron tan fuertemente que el comunismo era una forma superior de vida que rápidamente abandonaron la observancia de la Torá. Y estaban tan seguros de sí mismos, que algunos incluso entregaron a sus padres a las autoridades por observar secretamente la Torá. No obstante, el comunismo duró poco más de 70 años.

En la actualidad, existen otras filosofías y sistemas que reemplazan al comunismo. Y muchos judíos son engañados a pensar que tienen valor real. Sin embargo, sólo la Torá ha permanecido como una fuente sólida de valores a lo largo de 3,300 años, incluyendo los últimos 2,000 años de exilio en muchos países extraños, bajo diferentes civilizaciones. Se ha expuesto a la tormenta del empobrecimiento externo y la persecución, y ha sobrevivido a las acusaciones de los ‘progresistas’ cuyos valores se han ido con el viento en menos de una generación. Y continuará siendo así. Ha resistido la prueba del tiempo. Sólo un ignorante o un tonto la descartaría por el último ‘ismo’.

Dar y Recibir

Cuando el rabino terminó la frase, la esposa de Moshé, una pareja de amigos suyos y algunos otros se unieron a ellos. Mientras se juntaba la gente, Dany, que estaba perdido en sus pensamientos, dijo bruscamente: —Rabino, no voy a discutir con usted sobre el último punto. Usted probablemente esté en lo correcto. No hay nada como la Torá. Pero si usted me preguntara, le diría que el problema con el mundo no es que la gente no piense lo suficiente, sino que son egoístas y egocéntricos. Si la gente aprendiera a no ser sólo para sí misma, el mundo sería un lugar mejor.

Estoy de acuerdo contigo, Dany, pero aun el darle a otros, es totalmente dependiente de los pensamientos de la persona. Si uno no se pregunta a sí mismo cuando se enfrenta a la elección: ¿estoy escogiendo basado en mi necesidad de recibir o en mi necesidad de dar?, es casi seguro que no está dando.

¿Por qué?

Porque las apariencias son engañosas. Muchas veces, desde el exterior, un acto parece ser de recibir, cuando en realidad es un acto de dar. Inversamente, muchas otras veces, el acto de una persona parece de dar, cuando el acto realmente es de recibir. Dar y recibir son dependientes en definitiva de la motivación subyacente.

Imagínate por ejemplo, una persona viviendo en una comunidad acosada por ladrones y asaltantes. Un día esta persona se levanta a la medianoche y vigila las calles hasta el amanecer, manteniendo segura a la comunidad. Hace lo mismo la siguiente noche y la siguiente. Continúa haciéndolo noche tras noche por los siguientes 30 años, llueva o nieve, fin de semana o Shabat. Y la comunidad no lo descubre hasta que muere. Qué tremenda generosidad de esta persona. Podemos imaginarnos cómo la comunidad lo va a elogiar. No van a tener suficientes palabras para alabarlo.

Poco tiempo después, sin embargo, se difunden noticias que este hombre realmente estaba contratado para andar por las calles y se le pagaba una compensación del rey por hacerlo. De repente, toda su abnegación se arruina. Todos los elogios y apelativos prodigados sobre él en su funeral se ven bajo una luz diferente.

¿Es eso justo, rabino? —preguntó Dany—. Piense cuánto hizo por la comunidad. ¿A quién le interesa si tenía motivos ulteriores? Vea cuánto le dio a la comunidad.

Tienes razón. No obstante, la verdad es que este acto de dar se perdió una vez que se supo que lo hizo por dinero. Quizá no lo estaba haciendo para darle a otros, sino para recibir para sí mismo. Sin embargo, si no hubiera tomado dinero, su naturaleza de dar hubiera sido clara para todos. Una vez que lo hizo por dinero, no importa qué tan grande es el acto, su posición como un dador se cuestiona.

Ahora, lo contrario también es verdad. Recibir, puede ser un acto de dar, si el propósito final de recibir es poder dar más y mejor. Piensa, por ejemplo, acerca de un doctor. Las personas se vuelven doctores por una de dos razones: ayudar a otros o hacer dinero. Estos últimos usan la enfermedad para hacer dinero. Los primeros, curan a los enfermos a fin de ayudarlos y solamente reciben dinero a fin de mantenerse a sí mismos y a sus familias para que puedan seguir ayudando a otros. Toman solamente para poder dar.

¿Cómo puede uno evaluar la verdadera motivación? —preguntó el rabino retóricamente—. No es fácil. Generalmente las consecuencias se incrementan a través del tiempo de acuerdo a la motivación. En otras palabras, cuando uno está motivado a hacer algo por una razón y lo hace, desarrollará su motivación subyacente aún con más ímpetu. Por ejemplo, si uno quiere ser doctor por la razón de ayudar a otros, pero para poder ser doctor uno tiene que pagar sus gastos, incluyendo los préstamos de la Escuela de Medicina, gastos fijos, seguro por actos de negligencia, etc., entonces, mientras más practique uno la medicina, se convertirá en mayor dador. Cada vez que trabaje con una persona enferma, ejercitará su músculo de dar.

En cambio, si uno se vuelve doctor porque realmente quiere hacer mucho dinero o ganar una posición, entonces mientras más practica curando a otros, menos paciencia y cuidado va a tener con sus pacientes. Es por esto que muchas veces encuentras doctores que pueden hacer toda la diferencia del mundo con unas palabras amables, un afectuoso ‘Hola, ¿cómo está usted hoy?’, pero nunca las dirán. En lugar de eso, el doctor actúa como si te estuviera haciendo un gran favor al permitir que estés en su presencia por un minuto. Él no se hizo doctor para ayudar a otros, sino para ayudarse a sí mismo.

¿Cómo debería una persona decidir su línea de trabajo? El objetivo del trabajo no es hacer dinero. El objetivo del trabajo es beneficiar a otros.10 Bajo las mismas condiciones, si uno tiene la elección entre un trabajo ganando $1,000 a la semana sentado frente a una computadora y especulando en la bolsa de valores contra un trabajo ganando $1,000 a la semana manteniendo las calles seguras contra el crimen mientras otros duermen, el último trabajo es preferible. El resultado es que, en este caso, si la persona con la elección de volverse un especulador por computadora en la bolsa de valores o un vigilante nocturno, elige ser un vigilante nocturno, su trabajo de toda la vida será realmente uno de dar a otros.

Así, —preguntó Moshé—, aunque esté recibiendo un salario, él merece todos esos elogios.

Sí. Si él elige este trabajo porque su motivación profunda es ayudar a la gente, él es un dador. Ganar dinero de ningún modo lo descalifica a uno automáticamente de ser un dador. La razón original por la que nos hemos adentrado en esta conversación, sin embargo, —añadió el rabino—, es que quería explicarte cómo el que uno sea un pensador o no, hace toda la diferencia en el mundo, aun en lo referente a actos de caridad. Las apariencias son engañosas. Los dadores pueden ser receptores. Los receptores pueden ser dadores. La diferencia son los motivos subyacentes que uno justifica para uno mismo en la mente. Y si uno no analiza sus motivaciones y las pone en orden, obstaculiza seriamente su capacidad de ser un dador.

¿Para qué estoy viviendo? ¿Qué es lo que realmente quiero lograr? El minuto que te detengas a pensar, te arriesgas a distanciarte de la motivación de dar, la motivación que determina el verdadero valor de todo lo que hagas. Y eso Dany, es por lo que en mi opinión el problema real del mundo es que la gente no piensa. Muchos creen que piensan, pero no utilizan su poder de pensamiento para sobreponerse a sus instintos materialistas los cuales los disponen a ser receptores. Usan su intelecto para hacer dinero o recibir honor, para convertirse en receptores más eficientes, pero no lo usan para refinar su yo interior, para sobreponerse a su instinto de recibir.

Aún estando de acuerdo con lo que usted está diciendo, ¿qué tiene que ver la Torá con eso? Yo puedo pensar sin la Torá.

Tú puedes creer que piensas, y tal vez una que otra vez realmente pienses, pero solamente la Torá tiene el poder de hacer a una persona un pensador cada momento de su vida. En tanto que la Torá nos exige que comamos, nos casemos, interactuemos con otros y que en general tomemos parte en la vida física, nos obliga cada día, cada momento a pensar en nuestro interés en el mundo material. Quiero comer lo que yo quiera, pero la Torá me dice que sólo coma kosher. Quiero acumular dinero y posesiones, pero la Torá me ordena dar y dar y dar a otros. Cincuenta… cien… doscientas y más veces cada día, nos vemos obligados a renunciar a una parte de nuestro interés en el mundo material. Cuando se combina con una mente inteligente y activa, nada como la Torá tiene el poder de desarraigar completamente del corazón humano el deseo natural de recibir, de ser egocéntrico y egoísta.

Ego Contra Autoestima

Ahora creo que realmente estoy confundido, rabino, —dijo Dany—. Antes usted me dijo que el ego es bueno, que debo tener autoestima. Ahora me dice que el ego no es bueno. ¿Cuál es la respuesta?

Cuando yo digo ego, —explicó el rabino—, me refiero a algo enteramente diferente a la autoestima. La autoestima y el egocentrismo no están separados por una línea delgada. Son dos categorías del todo diferentes. El egocentrismo gira en torno a ‘obtener lo que yo quiero’. Debo poseer cualquier cosa de valor que alguien tiene. Todos deben ceder ante mi voluntad porque yo sé todo mejor que los demás. Eso es egocentrismo.

La autoestima, en contraste, no depende de obtener lo que uno desea. Autoestima es el reconocer el lugar de uno en el universo; es la apreciación de saber lo que uno ya tiene, de lo que uno ya es. Uno es una creación en las manos de Hashem. ¿Qué más necesita uno? En cambio, la persona egocéntrica es infeliz a menos de que obtenga lo que quiere. La persona con autoestima se acepta a sí misma como es y está siempre activa en el proceso de desdoblar capas más profundas de su yo.

El problema real con la persona egocéntrica es que no puede pensar como se pretende que un ser humano lo haga; no se puede sobreponer a sus deseos instintivos. Aun si él domina sus deseos físicos, si piensa que su mente es el centro del universo, no va a ser capaz de pensar objetivamente. Pensará que todo lo que él hace está bien y nadie más puede decirle algo diferente.

La Torá te entrena a pensar independientemente de tus deseos físicos así como de tus necesidades egocéntricas. No sofoca nada que necesite ser expresado; sólo le enseña a uno cómo enfocar sus deseos para bien. Y lo mismo es cierto para el ego. La Torá no aplasta tu ego, tu verdadero yo, sino que te ordena a verte continuamente en relación a Hashem. Si lo haces, te sientes bien acerca de ti mismo y aún así permaneces humilde sobre tus logros.

Al limitar la lujuria y el ego, la Torá encauza estos potenciales para el bien último. Te da la oportunidad de independizarte de los impulsos egoístas de tu ser para que tu mente pueda reflexionar libre y lúcidamente acerca de las cosas importantes en la vida. Recuerda, pensar equivale a vivir. No es suficiente estar pensando que piensas. Debes pensar hasta que duela. Debes enfrentarte a ti mismo y cambiar.

Viviendo Fuera de la Realidad

Alguien de entre la gente levantó la voz:—¿Está uno permitido a dejar de pensar alguna vez?

Realmente no. Somos responsables de pensar cada acto en cada momento. Eso es lo que significa estar pensando continuamente en la Torá día y noche. Y es tan cierto para mujeres judías como para hombres judíos.11 En cualquier momento, la persona está obligada a estar pensando de acuerdo a la Torá, es decir, uno debe estar constantemente apartando las poderosas contracorrientes de los deseos personales, presión de los compañeros e influencias sociales para obtener la verdad.

¿Qué hay acerca de nada más relajarse, leer una novela o algo así?

Cualquier momento que entregamos nuestra personalidad a pasatiempos tales como novelas, revistas, periódicos, videos, cines, etc., estamos cometiendo una especie de suicidio. Por supuesto, eso no quiere decir que uno no tiene permitido tomarse unas vacaciones de uno mismo de vez en cuando para recargar baterías. Si tú sabes que tienes exceso de tensión, tómate las vacaciones. No es diferente a una persona que sabe que está cansada y necesita una siesta. Sin embargo, cuando leer fantasías ligeras y sin sentido se convierte en un escape habitual de la realidad, entonces uno está cometiendo un suicidio espiritual lento, largo e indoloro.

¿Dónde dice que uno no debe hacerse el hábito de involucrarse en tales cosas?

La Mishná nos enseña: ‘Uno que lee sefarim jitzonim, literalmente libros externos, no tiene porción en el mundo venidero’.12 Algunos interpretan sefarim jitzonim como libros de herejía. Sin embargo, el Maharal explica que sefarim jitzonim no son libros que están prohibidos por la Halajá (como son libros de herejía o pornográficos), sino que, él explica, se refiere a libros cuyo propósito entero no es otro que matar el tiempo. Sefarim jitzonim, libros externos, son libros que lo ‘sacan’ de la realidad. Dan una excusa para no pensar. Las personas que los leen religiosamente están entre aquéllos que no tienen porción en el mundo venidero.

Parece un castigo cruel.

No tiene nada que ver con el castigo. El versículo dice: ‘Puesto que (la Torá) es nuestra vida y la longitud de nuestros días’ y los rabinos explican: es ‘nuestra vida’ en este mundo y nuestra ‘longitud de los días’ en el mundo venidero.13 Tú tienes que vivir aquí: ‘puesto que la Torá es nuestra vida’ aquí. Pero la Torá que convertimos en nuestra vida ahora, se convierte en ‘la longitud de nuestros días’ en la vida eterna. En otras palabras, esta vida es la base de la otra vida. Los 80 o 90 años que abarcan esta vida no son nada comparados con la eternidad. Sin embargo, Hashem creó el mundo de tal manera que son un factor determinante en cuanto a cómo vivimos nuestra vida en el mundo venidero. Lo que haces contigo en esta vida es lo que serás en la vida venidera.

Por lo tanto, las personas que acostumbran escaparse siempre fuera de la realidad, pierden su porción en el mundo venidero, no porque son castigados por desperdicio de tiempo, sino porque si ellos pierden todo su tiempo en esta vida, no existe materia sobre la cual subsistir en la otra vida. No es un castigo, sino un resultado natural de no pensar, de no usar la esencia de nuestro ser para vivir esta vida. Pensar es vida. Si no aprovechamos cada pequeña oportunidad para afectar esta corta vida, estamos afectando negativamente nuestra vida eterna.

Cada Momento de Vida, un Gozo Permanente en Avodat Hashem

Rabino, este último punto que comentó es interesante para mí, —dijo Dany—. Usted dijo que no hay vida eterna si uno no tiene vida presente. ¿Puede explicarlo con más detalle?

Sí. Cometemos el error de pensar que existen dos mundos: olam hazé, este mundo, y olam habá, el mundo venidero. Y pensamos que aquellas personas que son afortunadas, serán capaces de dejar este mundo e ir al otro como una persona que deja un apartamento para irse a otro. Ése es el error.

Cuando Shabat llega, ¿te mudas a otra morada? No, tú recibes Shabat en la misma casa o apartamento que habitaste durante la semana. No obstante, si es una casa judía que funciona propiamente, la misma morada se transforma. Ha tomado el aura de Shabat. La basura física y espiritual se arroja fuera. (Ambos tipos de basura se deben sacar también durante la semana). Se pone el mejor mantel. Los mejores utensilios se sacan. Todo es blanco. No te mudaste. No cambiaste de aire. Más bien tomaste el dominio de donde vives toda la semana y lo transformaste en Shabat.

Este mundo es como un día entre semana que desemboca en el eterno Shabat. Un día se va a volver el mundo venidero, olam habá. Así, no hay otro mundo. Nosotros sólo sabemos de un mundo: este mundo. Sin embargo, este mundo está en el proceso de convertirse en el mundo venidero. Por lo tanto, lo que hagas con tu vida en este mundo, es exactamente en lo que se convertirá en el mundo venidero.

En Tehilim está escrito: az yimale s’jok pinú ‘entonces (cuando el Meshíaj llegue) nuestras bocas se llenarán con risa’. Reiremos, y reiremos y reiremos y nunca dejaremos de reír. El Gaón de Vilna pregunta: ¿Qué es tan bueno acerca de reír continuamente por siempre? Generalmente reímos cuando nos sorprenden con buenas noticias. Por ejemplo, si te enteras que ganaste la lotería, lo primero que vas hacer es saltar de alegría y dejar que todos sepan lo feliz que estás. Sin embargo, si sigues saltando así durante todo el siguiente mes la gente pensará que eres anormal. Y estarán en lo correcto. No quieres continuar riendo. Lo vas a seguir disfrutando un mes después, pero seguramente con más calma, con otra perspectiva. Seguir riendo no es normal.

¿Qué pasa, no obstante, si un momento después que recibiste la noticia que ganaste la lotería, te sorprenden con una noticia que no es menos fantástica que la previa? Esto requiere una nueva risa. Y digamos que un minuto más tarde hay de nuevo una sorpresa para ti. Nuevamente te vuelves a reír. Y después de ésta, otra. Y así sucesivamente. El placer que sentiste con el primer golpe de la noticia original se renueva una y otra vez como ola tras ola a la orilla del mar. No es anormal mantenerse riendo si recibes continuamente buenas noticias.

El Gaón de Vilna explica que ésta es la diferencia entre esta vida y la siguiente. Alcanzar el objetivo que uno se propone es la fuente de felicidad.14 Sin embargo, después de la exuberancia inicial, el entusiasmo se desvanece; la sorpresa se ha ido. Quizá disfrutes con el recuerdo, pero no lo revives una y otra vez. Él explica, sin embargo, que en el mundo venidero vas a descubrir una sorpresa nueva cada segundo. No va haber un solo segundo que no contenga una sorpresa para ti. Y esto te va a mantener riendo y riendo por siempre, mientras permaneces normal.

La pregunta es: ¿cuáles pueden ser las noticias que te mantienen tan entusiasmado? La respuesta es: cada momento de tu vida en este mundo. Los Sabios enseñan: Olameja tiré b’jayeja, ‘tu mundo, lo vas a ver en tu vida’.15 Este mundo no es realmente el mundo. Olameja, tu mundo, es olam habá, el mundo venidero. Sin embargo, ¿en qué consiste el olam habá? Jayeja, tu vida en este mundo, olam hazé. Olameja tiré b’jayeja: aquellas cosas que logres aquí, en tu vida pre-olam habá (jayeja) son las mismísimas cosas con las que vas a subsistir en tu vida futura (olameja).

Si vivimos nuestra vida como debe ser vivida, nuestra conducta de hoy afectará directamente nuestra vida en el mundo venidero y lo va a ser en tal grado que habrá felicidad infinita. Esos momentos valiosos y placenteros que experimentamos en esta vida son los placeres que experimentaremos en la vida del mundo venidero, excepto que vamos a descubrir sorpresas más profundas y enteramente nuevas acerca de cada buen momento por siempre. Y es por esto que tienes que disfrutar la vida ahora. No importa por lo que estás atravesando, debes darte cuenta que, debajo de la superficie, por lo menos, estás ganando enormemente con cada segundo de tu vida ahora.

A veces las personas renuncian a la vida. Dicen: ‘no puedo ser feliz en esta vida, espero que en el otro mundo tenga mejor vida’. Están cometiendo un gran error. Están evadiendo la responsabilidad de vivir, de disfrutar la vida, ahora. Racionalizan que mientras estén sufriendo van a obtener el olam habá, el mundo venidero. Éste es un pensamiento incorrecto. No puedes desarrollar realmente olam habá si no tienes olam hazé. Conocer lo que estás ganando en olam habá en esta vida, debería electrizar tu capacidad de disfrutar y experimentar esta vida, aun si estás sufriendo. El sufrimiento no debe resultar en estancamiento y desesperación. Si no haces nada en el olam hazé no vas a tener nada en el olam habá. Y eso es el infierno. Por lo tanto, una persona debe encontrar fuerza para hacer cualquier cosa que pueda, incluso en medio de la adversidad.

Pero ¿cómo puede una persona estar feliz en medio del sufrimiento?

Al darse cuenta que cada segundo de su vida aquí, contiene dentro de él, la semilla del olam habá. La verdad es que un pequeño logro en medio de la adversidad vale generalmente más que un gran logro durante tiempos fáciles. Si entiendes que cada objeto y experiencia en esta vida es la fuente de tu placer en la vida venidera, entonces irradiarás tranquilidad y satisfacción aun en tiempos difíciles. El problema es que no tomamos nuestras vidas con suficiente seriedad. No apreciamos cómo esta vida se va a transformar en vida eterna. Mira tus manos. Estas mismas manos son las mismas manos que vas a tener en la eternidad.

Rabino, ¿se está usted refiriendo a tejiat hametim? —preguntó alguien.

Sí.

¿Qué es eso? —inquirió otra persona.

Tejiat hametim es la época de eternidad que va empezar después que la historia, como la conocemos, llegue a un clímax seguido por la llegada del Meshíaj. Para aquéllos que lo merezcan, el cuerpo será reconstituido del polvo, y el alma va a reingresar a él. El Rambam incluyó el axioma de la Resurrección de los Muertos en sus 13 principios de fe del judaísmo. La pregunta es: ¿por qué es tan importante que si uno no cree en ese axioma, no cree en el judaísmo? Después de todo, uno puede entender por qué creer en D–os, Providencia Divina, recompensa y castigo y otros principios similares son preceptos inalterables de la fe. Sin embargo, ¿qué diferencia hace si uno cree o deja de creer que eventualmente después de la muerte el cuerpo de uno será reconstituido y el alma le será devuelta?

Esto es especialmente difícil de entender cuando consideramos el hecho que una persona no es su cuerpo. Un cuerpo es como un traje. Una vez que tu traje se desgasta, ¿te importa qué pase con él? Te sirvió bien mientras duró, pero no eres tú. Una vez que el alma deja el cuerpo y va a donde sea que vaya, ¿a quién le importa lo que pasa con el cuerpo? Más aún, ¿quién dice que todos quieren que se les regrese el mismo cuerpo?

Sin embargo, la respuesta es que nos enseña cuán importante es cada parte de nuestra vida, incluso nuestra vida física. Tenemos que decir: ‘Hashem, Tú me diste este cuerpo y este conjunto de circunstancias físicas. Un día todo esto va a ser parte de la eternidad. Ahora sucede que es material, pero un día llegará a ser espiritual, una parte permanente de olam habá’. Cuando puedas decir esto con convicción, llegas a tener un nuevo respeto por ti mismo, por cada aspecto de tus circunstancias presentes de vida, incluyendo las físicas.

¿Todas las cosas físicas?

Sí.

¿Qué hay acerca de las posesiones?

También

¿Aun el dinero?

Ciertamente. Hashem pone una gran cantidad de responsabilidad en nuestras manos cuando nos otorga dinero. Es una cosa potencialmente sagrada que puede ser usada para tzedaká (caridad) y otras mitzvot. Consecuentemente, tienes que pensar mucho acerca del dinero que gastas. Y es, nuevamente, donde pensar es tan importante. Debes saber cuándo donarlo y cuál es la causa correcta para donarlo. Si Hashem te da dinero, debes vigilar cada centavo, no por ser tacaño, sino porque cada centavo tiene un uso específico para el que te fue dado.

¿Cada centavo?

Sí. Cada centavo es del cielo. Si lo usas adecuadamente te vas a beneficiar de tu dinero, no solamente en este mundo, sino en el mundo eterno. Tu dinero se convertirá por sí mismo en parte de la eternidad. Y este conocimiento te debería dar el placer que necesitas para sentir aquí. Déjame ilustrarte a qué me refiero con un incidente personal.

Una vez necesitaba viajar a las afueras del estado para dar una conferencia. Mi tanque de gasolina estaba a la mitad, pero para asegurarme quise llenarlo. En ese entonces la gasolina costaba 95 centavos por galón en la carretera y aproximadamente $1.15 en cualquier otra parte. Entré a una gasolinera en la ciudad y estaba a punto de llenar el tanque cuando recordé que podía conseguir la gasolina más barata en la carretera. Argumenté conmigo mismo que no valía la pena ahorrarme 20 centavos por galón y no llenar el tanque inmediatamente. No obstante, cuando leí el letrero que decía $1.15 por galón no me atreví hacerlo, y conduje hasta la siguiente gasolinera y vi que el precio era $1.12, pero aún no podía gastar el dinero.

Me dije, ‘¿Acaso no eres un tonto perdiendo diez minutos entrando y saliendo de estas gasolineras para ahorrarte $2.00 por medio tanque de gasolina?’ Al mismo tiempo me dije: ‘$2.00 son $2.00. Tienes una responsabilidad con el dinero que Hashem te da’.

Decidí entrar a la carretera sin llenar el tanque. Después de un par de salidas, para mi sorpresa, vi una gasolinera vendiendo el galón a 83 centavos. ‘Mira’, le dije a mi hija que estaba viajando conmigo, ‘Hashem me recompensó. Está incluso más barato de lo que generalmente pago en la carretera’.

Llené el tanque por $12.46, saqué un billete de $20.00 y entré a la pequeña tienda a pagar. Al entrar, recibí una mirada muy fría, antisemita, de un gentil detrás de la caja registradora. Un par de amigos suyos estaban ahí también y no era muy difícil leer su mente. Tratando de no sentirme intimidado, le pasé los $20.00. Me dio el cambio, el cual no conté y me salí.

Cuando regresé al automóvil, conté el cambio y me di cuenta que me había regresado $7.00 más de lo que me debía haber regresado. En lugar de cobrarme $12.46, me cobro $5.46. En una fracción de segundo, la siguiente conversación pasó por mi cerebro.

Estrictamente, de acuerdo a la Halajá, el dinero es mío. Además no me debo preocupar por causar profanación del nombre de Hashem. Más tarde, cuando descubran el error, no van a pensar que yo me marché deliberadamente con el dinero, porque las personas con frecuencia meten el cambio en sus bolsas sin contarlo. Y además, yo no le debo nada a esos antisemitas. Podía verlos burlarse de mí a través de sus apariencias. ¡Qué bueno!, pensé, se lo merecen. El dinero es mío. Quería ahorrarme $2.00 y no sólo me los ahorré sino que obtuve $7.00 más. Fui recompensado inmediatamente por actuar responsablemente con mi dinero.

Después, también en una fracción de segundo, me recordé a mí mismo las palabras de Moshé Jaim Luzzatto en su Mesilat Yesharim: A pesar de que el error monetario (en este caso) sería permitido conservarlo, te corrompes a ti mismo si te quedas con el dinero. Te acostumbras a recibir dinero por el que no trabajaste. Por lo tanto, midat hajasidut, el atributo de ir más allá de lo que la Halajá dictamina directamente, indica que no es apropiado quedarse con el dinero. Así como las palabras del Mesilat Yesharim llegaron a mi mente, inmediatamente un tercer pensamiento cruzó por mi mente. Quizá podría hacer un kidush Hashem, una santificación del nombre de D–os.

Entré nuevamente a la tienda y recibí otra vez la misma mirada hostil que parecía decir: ‘este judío está de regreso. ¿qué quiere ahora?’ Me acerqué a la caja registradora y dije: ‘Me dio cambio de más. Yo le dije que fueron $12.46, y me dio $7.00 de más’.

Su cara se puso roja. Probablemente había estado pensando, ‘si le das la mano a un judío, tienes que contar tus dedos para estar seguro que no te robó uno’. Y ahora, ahí estaba yo regresando el dinero. Podía notar que estaba turbado.

Lo siento’, dijo mientras tomaba torpemente el dinero que yo le había regresado. Nerviosamente, pero con gratitud genuina, me agradeció no una, sino dos veces.

Regresé al automóvil y le conté la historia a mi hija. ‘Imagínate lo que pasó acá’, le dije. ‘Fui capaz de realizar la gran mitzvá de kidush Hashem sin que me costara un centavo. ¿Qué hice para merecer esta mitzvá? Hace una hora y media, salí de mi camino para ahorrarme $2.00. Mitzvá goreret mitzvá, una buena acción trae otra buena acción. Si hubiera tomado el camino fácil y gastado los $2.00 antes de llegar a la carretera, nunca me hubiera detenido en esta gasolinera.

El dinero no es algo con lo que se debe ser frívolo. Es una herramienta que te ayuda a funcionar adecuadamente en el mundo de Hashem. Y cada centavo tiene su propósito. La ‘pequeña’ oportunidad de ahorrar $2.00 puede llevar a obtener recompensa en este mundo y en el mundo venidero. Y lo mismo es verdad para cualquier otra cosa de naturaleza física. Nuestras manos, nuestros cuerpos, nuestro dinero, nuestra casa, nuestra pareja, nuestros hijos e incluso nuestro tiempo. Todo lo físico es un regalo con potencial para ser convertido en eternidad.

¿Qué es vivir? —continuó el rabino—. ¿Cuándo se nos considera vivos? Cuando utilizamos el presente y lo aprovechamos en una experiencia que va a contener la vida del mundo venidero. Y cada momento puede hacerse efectivo. Pero tenemos que vivir este momento presente. Si son las 9:32, tenemos que vivir a las 9:32. Si perdemos la oportunidad de las 9:32, no estamos viviendo, estamos meramente existiendo en el planeta.

Déjame ampliar esto con una historia. Un muchacho de 18 años que estudiaba en una yeshivá en Inglaterra se enfermó de cáncer. Se puso tan grave que los doctores le dijeron que ni la quimioterapia lo iba a ayudar; aconsejaron a la familia que lo llevaran del hospital a la casa a fin de vivir sus últimos días con sus seres queridos.

Sin embargo, la familia no se rindió. Lo trajeron a Estados Unidos y encontraron un centro médico no muy lejos de mi casa. De hecho, terminaron por quedarse en casa de mi yerno. Los doctores les dijeron que tenían una terapia experimental que, a pesar de ser muy dolorosa, podría extender su vida por un par de meses. Los doctores insistieron, no obstante, que sólo aplicarían la terapia si el paciente firmaba un papel liberándolos de toda responsabilidad por el procedimiento.

Los padres consultaron a una autoridad grande en Torá, si a su hijo le estaba permitido, o más aún, si estaba obligado a tomar esa terapia. El rabino concluyó que, en su caso particular, el único que podía tomar la decisión final era el hijo.

Al poco tiempo, el padre me llamó por teléfono y me dijo que su hijo quería hablar conmigo. El muchacho les pidió a sus padres que salieran un momento a fin de poder hablar a solas conmigo.

Sé que voy a morir pronto’, él me dijo, ‘y no tengo quejas en contra de Hashem, aunque no entiendo el porqué esta situación me llegó a mí. No tengo miedo. Lo que más me molesta es que mi familia va a sufrir. Sin embargo, si esto es lo que Hashem quiere, yo estoy deseoso de aceptarlo de todo corazón’.

No obstante’, él continuó, ‘me han dicho acerca de una terapia que puede extender mi vida un mes, más o menos, y que la decisión de tomarla o no depende completamente de mí. Yo no sé qué finalidad tiene tomarla. ¿Qué estoy logrando al vivir un mes más? Ya estoy imposibilitado, acostado acá conectado a todos estos tubos; no me puedo concentrar por más de cinco minutos. Mi familia va a perder un hijo, y ¿no sería imponerles más agonía que estén viendo mi estado un mes más? ¿Qué debo hacer?

Primero le dije que no esperara que yo tomara la decisión por él. Estuvo de acuerdo. Luego le dije que lo único que podía hacer era enseñarle qué tan valioso era vivir un mes más. Si él entendía qué tan valioso era, entonces podía tomar una mejor y más informada decisión.

De acuerdo’, me dijo.

De toda la Torá’, le pregunté, ‘¿cuál de los mandamientos dirías que es el más importante?’ Intentó adivinar algunos, pero yo le dije: ‘El mandamiento más importante es el mandamiento de estar vivo, como dice la Torá: vivirán por ellos,16 es decir, vivir por los mandamientos, no morir por causa de ellos. La vida es el mandamiento más importante, porque el mandamiento vivirán por ellos nos dice que debemos transgredir la Torá si surge una situación en la que cuidar los mandamientos ponga nuestra vida en peligro. Si estás en una isla desierta y solamente puedes sobrevivir comiendo puerco, no sólo se te permite comer sino que estás obligado a hacerlo’.

Continué y le relaté una discusión sobre la ley de la Torá la cual, aunque hipotética, arroja luz en el tema.17 ‘Imagina una persona anciana en estado vegetativo en su lecho de muerte, y los doctores garantizan a la familia que pueden extender su vida un momento extra, pero el procedimiento requiere que todo judío en todo el mundo transgreda todos los mandamientos, con excepción de asesinato, adulterio e idolatría, que son las tres excepciones a los mandamientos de vivirán por ellos. Sé que es completamente hipotético’, le dije, ‘pero imagina un caso así, y obtenemos la confirmación de que la afirmación de los doctores es legítima; en lugar de morir a los 100 años de edad, gracias a todos los judíos transgrediendo 610 mandamientos, la persona anciana en estado vegetativo morirá a los 100 años más un momento. ¿Qué es lo que la ley de la Torá dictamina en tal circunstancia?

La respuesta es que no sólo está permitido transgredir en este caso, sino que uno debe transgredir para agregar este momento extra. Debes comer puerco en Yom Kipur que cae en Shabat si eso puede salvar una vida judía, de cualquier judío, hasta de uno que se encuentra en estado vegetativo cuya vida entera se ha encontrado en ese estado’.

Esta ley de la Torá’, le dije, ‘nos revela cuánto vale un momento de vida. D–os nos está diciendo que a pesar de que Él creó el mundo para que podemos observar todos los mandamientos de la Torá, un momento de vida, aun en estado vegetativo, es más importante. Es difícil de entender porque no nos damos cuenta lo que es la vida. No nos damos cuenta cuánto ha invertido Hashem en que nosotros estemos vivos. Pero así debe de ser si Hashem exige que transgredamos Sus mitzvot a fin de estar vivos.

Respira profundamente’, le dije a este joven. ‘David escribió: Cada alma (neshamá) agradece a Hashem. Al vocalizar la segunda palabra en forma diferente, el versículo puede ser leído: Cada respiro (neshimá) agradece a Hashem. Cada respiro de aire es un segundo extra de vida, y un segundo de nuestra vida le da a Hashem cosas incalculables’.

Piensa acerca de esto. Un segundo de nuestra vida le da a Hashem cosas inimaginables. No tenemos que comprender necesariamente qué obtiene Hashem con nuestra vida, pero sabemos que Él debe obtener algo grande si Él está deseoso de que se transgreda virtualmente toda Su Torá para ganar un momento de vida. Un solo respiro con esta conciencia es un canto de vida, aun si en esta vida se están experimentando dolores insoportables o si se vive en estado vegetativo’.

Tú me preguntas’, le dije, ‘¿qué puedes lograr extendiendo tu vida un mes más? Yo te pregunto: ¿te das cuenta cuánto Hashem está dispuesto a sacrificar para que tú vivas un momento más? No te estoy diciendo qué hacer’, concluí, ‘pero decidir tomar la terapia es una declaración al mundo que la vida, en cualquier forma, es el regalo más preciado. Nos vas a estar demostrando, cómo una persona a punto de perder la vida está deseosa de pagar el precio más alto posible por más vida. Después de todo, no lo estarías haciendo por ti mismo, porque no tienes miedo de morir; y no lo estarías haciendo por tu familia, porque ellos sólo sufren más al verte en este estado. Lo estarías haciendo solamente porque Hashem te dijo, a través de la Torá, lo que un momento de vida vale para Él. Es una declaración hacia Él que unos pocos respiros más con el fin de agradecerle es tu propósito real para vivir.

Finalmente le dije al muchacho: ‘muchos de nosotros, desafortunadamente, estamos simplemente existiendo; nos quejamos acerca de todas las cosas malas en nuestra vida. Somos insensibles. No sabemos realmente lo que es la vida. No apreciamos el valor de un momento. Sin embargo, ya que tú no tienes otra alternativa más que la de enfrentar la realidad y luchar por cada momento de vida, tú nos puedes enseñar acerca de la vida. Y si tú haces esto, yo te envidio, tú eres nuestro maestro’.

Al final él tomó la decisión de tomar la terapia. Algunos días después, su padre vino a mí con emoción y me preguntó: ‘¿Qué le dijo?, ¿qué le dijo? Todo el tiempo está sonriendo. Los doctores no pueden entender qué bien está tomando la terapia. Me preguntan si sé por qué. Les dije que él está así desde que habló con usted. Rabino, ¿qué le dijo? ¿Lo hipnotizó o algo así? Le aseguré al padre que no hice otra cosa más que enseñarle el punto de vista de la Torá sobre el valor de un momento de vida.

Ahora este muchacho está muy enfermo, como ya dije, pero para sorpresa de los doctores, durante este mes extra, se puso lo suficientemente bien para dejar el hospital por un par de semanas. Terminó quedándose en casa de mi yerno. Lo visité ahí, y me explicó que a veces cuando tiene dolores muy severos, no se puede concentrar lo suficiente para recordar lo que yo le dije. Sacó una grabadora y me pidió que le repita todo. También quería incluir en la cinta, algunas preguntas nuevas que desde entonces surgieron en su mente.

Una pregunta fue que el más malvado de los malvados no sufre más que el equivalente a doce meses en el Guehinom, el concepto judío de infierno. Sin embargo, él ya estaba en el decimotercer mes de su enfermedad. Mi respuesta fue que en el Guehinom tú limpias tu alma; aquí en esta vida, estás expandiendo tu alma, estás haciendo tu alma más de lo que es. Esta vida es un tiempo para producir; en la vida venidera, tú cosechas, pero no siembras nuevas semillas. Es por eso que decimos que un momento de vida aquí es más valioso que una existencia entera en la vida venidera. Cuando él escuchó esto, una enorme sonrisa cruzó por su cara.

Después de un par de semanas, tuvo que regresar al hospital. Escuchaba la grabación constantemente. Los doctores y enfermeras no podían entender cómo es que estaba siempre tan contento. Ellos no se daban cuenta, pero su secreto era que él estaba viviendo verdaderamente cada momento. Vivió tres meses y medio más y el Shabat antes de Pésaj dejó este mundo, pero aun entonces tenía una sonrisa en su cara.

La verdadera felicidad resulta de la conciencia de convertir cada momento en la realización del propósito último. Este joven convirtió respiro tras respiro de esta vida en vida eterna. Y éste es realmente el objetivo de la Torá, enseñarnos cómo traer eternidad a nuestra vida de otro modo, temporal.

Sin embargo, aun las personas observantes de la Torá pueden perder de vista el objetivo. Cuando nos analizamos y nos preguntamos a nosotros mismos: ¿estamos viviendo en el presente? Probablemente responderemos: no. El presente existe, pero en el momento, probablemente estemos en algún lugar muy lejos. Tendemos a reciclar el pasado una y otra vez. Ésta es una de las cosas que deprime a las personas. Por supuesto, otros rechazan la necesidad de obsesionarse acerca del pasado, pero en su lugar, generan escenarios imaginarios acerca de las buenas cosas que les esperan en el futuro. Su expectativa de que tales cosas serán muy buenas, los hace felices en el presente. No obstante, no es el presente el que los hace felices.

¿Está usted diciendo que nunca debemos pensar acerca del pasado o planear para el futuro?

Por supuesto que no. Con frecuencia uno debe recordar el pasado o calcular el futuro a fin de saber qué hacer en el momento presente. El punto es no preocuparse con el pasado o con el futuro como un medio para escapar del presente. Cada momento de vida es totalmente una nueva creación. Ese momento te va a dar el placer de la eternidad por siempre, con la condición de que realmente vivas ese momento.

Cada uno de nosotros debe preguntarse constantemente: ¿qué es lo que el AHORA me está dando a mí? Si Hashem nos da 80 años, más de dos mil millones de segundos, cada segundo puede ser un momento para experimentar el placer del logro. Si yo estoy poniendo algo de substancia a este momento dado, si estoy viviendo, este momento estará conmigo por siempre. Nunca estará perdido. Desde el minuto que yo muera, voy a experimentar este momento de placer por siempre. Sin embargo, si en ese momento estoy viviendo en el pasado o fantaseando acerca del futuro, este momento está vacío. Rabí Israel Salanter señaló que es posible haber estado vivo 80 años y difícilmente haber vivido un año. Cuando una persona muere, incluso una persona envejecida, es probable que no haya tenido más que un par de años de experiencia real de vida.

Pero rabino, una persona debe hacer cosas como dormir. ¿Cómo se puede esperar que uno tenga logros cuando está dormido?

Hasta eso puede ser transformado en eternidad, dependiendo de tus pensamientos. Si eres irreflexivo acerca de las cosas que haces, como ir a dormir, entonces, cada noche estás desperdiciando dormido ocho horas de tu vida potencial. Sin embargo, si te das cuenta que la vida es la oportunidad para servir a Hashem de una forma nueva cada momento y, a fin de poder servir bien a Hashem tu cuerpo necesita descansar, si tienes pensamientos como ésos cuando te vas a dormir, entonces tu sueño es una gran mitzvá. Si tú no sabes por qué estás vivo, entonces, no sabes por qué duermes. Consecuentemente, tu descanso es un desperdicio. La Torá tiene leyes relacionadas con el dormir, que estimulan a la persona a recordar que el dormir tiene un propósito. Y una persona necesita este estímulo debido a que la mayoría no saben cómo ir a dormir. Suena gracioso, pero es verdad. La mayoría de la gente no sabe ni siquiera cómo ir a dormir.

Ninguna actividad está desprovista de la opción de obtener eternidad. Sin embargo, si tú no piensas o no sabes qué es lo que estás escogiendo o, no sabes ni siquiera que tienes una elección, entonces estás permitiendo que la vida se te escape. Por lo tanto, piensa. Nada es más importante que pensar acerca del momento presente ante ti. Nada. Piensa y repítete a ti mismo una y otra y otra vez la importancia absoluta de vivir cada momento.

Uno de los tzadikim acostumbraba levantarse cada mañana y decirse a sí mismo, ‘Shalom aléjem veintiuno de Iyar (o cualquier fecha que fuese). ¡Qué grandioso día! Hemos esperado miles de años por ti. Tú estabas en el plan original de la creación de Hashem. Hemos esperado tanto por ti, y no obstante, el tiempo es corto. Solamente voy a estar contigo por las siguientes 24 horas. Después de eso, nunca te volveré a ver. Por lo tanto, déjame empezar. Prometo que viviré contigo cada segundo’.

Imagina que tienes el honor de recibir a Eliyahú HaNavi y él te va a contestar todas las grandes dudas que tengas. No podrías tener mayor entusiasmo de anticipación, esperando el día en que lo puedas hospedar. Cuando el día llegue, ¿te vas a dormir hasta tarde?, ¿te vas a excusar para tomar un café?, ¿vas a leer historietas o ver la televisión? La verdad es que cada día que vivimos y respiramos en esta tierra es mayor que experimentar la revelación de Eliyahú HaNavi. Eliyahú viene con el fin de enseñarnos cómo utilizar la vida. Pero uno tiene que utilizar la vida. Uno tiene que invertir su capacidad de pensamiento en cada momento presente.

Rabino, ¿cuál es el castigo para alguien que no invierte apropiadamente su capacidad de pensamiento en el momento presente? —alguien preguntó.

El momento que invierto en mí en este momento, permanecerá conmigo por siempre. Todo lo que logre ahora será mi porción en el mundo venidero. Inversamente, cualquier cosa que omita ahora, faltará allá. Los fuegos del Guehinom incluyen los dolores ardientes del desengaño por no haber utilizado apropiadamente la oportunidad que tuviste de vivir la vida.

Por supuesto, el placer del mundo venidero está más allá de lo que cualquier ser humano puede imaginar. ‘Un segundo de placer en el mundo venidero es mejor que la vida entera en este mundo’. Si pudiéramos reunir todos los placeres que toda la humanidad experimentó alguna vez desde el día de la creación hasta el día de hoy y combinarlos en un solo placer, no sería todavía comparable a un segundo de placer en el mundo venidero. Sin embargo, para producir este segundo de placer, tienes que utilizar este segundo del presente en este mundo.

La Joya

¿Existe alguna enseñanza de la Torá que resuma lo que usted ha estado diciendo?

Hay muchas. Probablemente la mejor conocida de ellas es aquélla acreditada a Hilel, que dice: ‘Si yo no voy a actuar por mí, ¿quién lo hará? Y ser sólo para mí mismo ¿qué me hace? Si no ahora ¿cuándo?’18 Déjame explicarte más claramente.

Cada momento es una gema. Y la vida de cada uno ha sido dispuesta especialmente desde el tiempo de la creación de manera que mil millones de momentos, cada uno con su respuesta única, han sido dispuestos para cada quien. No obstante, depende del individuo el descubrir cada momento. Por lo tanto, la primera pregunta que uno debe hacerse es: ¿Si yo no voy a ser yo, quién será? Nadie más puede ser yo. Nadie más puede hacerme.

Cada judío tiene una joya en sí mismo, y la razón absoluta por la que bajó a este mundo fue para descubrir esa joya. Y esa joya solamente puede ser descubierta por ese judío. Si Moshé pudiera bajar del cielo, no podría tomar tu lugar y pulir tu joya.

Hilel continúa: ‘Y cuando soy para mí mismo’, es decir, solamente para mí mismo; cuando me he desarrollado y he pulido mi gema, pero no la utilizo para el progreso de otros, ‘qué soy yo’, es decir, ¿qué valor tiene mi gema? Si una persona no tiene un yo a fin de poder compartirlo con otros y relacionarse con ellos, ¿qué bien es ese yo?

De acuerdo a Hilel, el primer paso es conocer quién eres.19 Tienes que conocer tu propio valor y saber que eres una porción de D os; que estás hecho a imagen de D os. Entonces, después de que desarrolles tu yo único, lo tienes que usar para que otros hagan lo mismo. Una vez que te das cuenta quién eres, te das cuenta que todo prójimo judío es igual porque su alma y la tuya son del mismo D os. Eso se llama ‘Amar a tu prójimo como a ti mismo’. Tienes que amar tu yo real, tu alma. Después puedes amar a tu prójimo.

Hilel concluye: ‘Y si no ahora, ¿cuándo?’ Él trata de decir: que no sólo cada judío es una joya, sino cada momento de la vida de un judío es una joya, como ya dijimos. Por lo tanto, si tú no cumples tu misión en este momento, ¿cuándo lo harás? Es decir, éste es el momento de realizar, porque si no utilizas el AHORA, ¿cuándo tendrás este momento otra vez? Nunca va a regresar. Si ahora no es el momento de ganar tu yo, tu yo del olam habá, ¿entonces cuándo?

Teshuvá

Rabino, —dijo Dany—, sé que está tratando de hacernos sentir bien, pero me ha hecho sentir muy mal. Si lo que usted está diciendo es verdad, entonces he perdido tantos momentos en mi vida, que me estoy empezando a sentir muy deprimido de sólo pensar en ello.

No hay razón para deprimirse. Cada momento de una vida pasada, incluso de una vida de fracaso, fracaso espiritual, puede cambiarse para bien gracias al principio de teshuvá, que quiere decir regreso; regreso al status original de uno como criatura hecha a imagen de D os.

Una de las cosas maravillosas acerca de escribir en una computadora con un procesador de texto, es que no debes tener miedo a equivocarte. Antes de las computadoras, si cometías un error, tenías que usar corrector y muchas veces incluso mecanografiar nuevamente la hoja entera. En la actualidad, simplemente regresas al lugar del error, lo corriges, y el procesador de palabra reorganiza la página entera para ti.

Esto es teshuvá. En un momento, yo puedo regresar a mi status original como una criatura hecha a imagen de Hashem. Y cuando lo hago, puedo corregir todas mis fallas del pasado hasta el presente. Un momento de teshuvá puede mandar ondas de cambio a través de todos los momentos que ya pasaron.

Pero es muy difícil.

No estoy diciendo que es fácil, ¿Pero cuál es la alternativa? ¿Permanecer inmerso en lo físico con una perspectiva materialista? Esto es más difícil a largo plazo porque tu yo real es tu alma y esta alma tiene hambre por la verdad. La gente se deprime porque no se identifica con su alma. No existe nada grandioso o especial acerca del yo físico. Hasta los animales tienen un yo físico. Tarde o temprano tienes que regresar a tu yo real o nunca serás verdaderamente feliz.

Teshuvá significa ‘regresar’ a tu yo real; al alma que está hambrienta de verdad, la que solamente puede tolerar tanto letargo y autoengaño. Cuando pecas, no fuiste tú. Fue la parte física la que pecó, no tú. Cuando haces teshuvá, empiezas a ver tu yo físico como una persona externa y le gritas, ‘¿cómo pudiste hacer eso? ¿cómo pudiste hacerlo? Teshuvá significa que descubres, que revelas tu yo real, y te enamoras de ese yo.

Pero rabino, ¿cómo puede una persona enfrentarse a sí misma si tiene mucha culpa?

La culpa es un medio de instrucción, no de destrucción. Cuando no vives la verdad, te sientes culpable. La culpa te alerta al hecho de que debes buscar activamente un cambio en ti mismo. No es un instrumento de destrucción. La culpa debería guiarte a la teshuvá, a sincronizarte con tu yo real y experimentar el proceso de volver a él. Por lo tanto, no dejes que la culpa te destruya. Úsala para reconstruir tu yo.

Se está haciendo tarde, —agregó el rabino—. Para concluir, es vital que cada uno de nosotros aprenda cómo pensar. Únicamente al hacerlo así podremos ganar autoestima y volvernos quienes realmente somos. No te dejes tranquilizar con comodidades materiales o cegar por las posesiones de otros. La única posesión verdadera es tu yo y el momento que tienes ante ti esperando para ser transformado en eternidad. No obstante, con el fin de obtener esto, debes pensar. Por lo tanto, piensa. Piensa acerca de lo que realmente importa. Y sé consecuente con tu pensamiento. Buenas noches.

Consejo Práctico

Sin embargo, antes que el rabino se pudiera ir, una de las personas que estaba escuchando la conversación dijo: —Una última pregunta, rabino; hablando en forma práctica, ¿qué podemos hacer para adquirir los ideales de los que usted habla?

Como ya dije, repitiendo las ideas una y otra vez. La clave del éxito es la claridad. Claridad de pensamiento es en lo que debemos trabajar, porque hay muchas cosas que opacan nuestra perspectiva. Por lo tanto, debes entender las ideas verdaderas y enseñártelas a ti mismo una y otra vez. Algunas veces, la mejor manera de enseñarlas a ti mismo, es por medio de enseñárselas a otros. Es por eso que yo doy estos seminarios. Realmente me estoy enseñando a mí mismo, repitiendo estas verdades una y otra vez. Ustedes también deberían encontrar formas de repetírselas a ustedes mismos y a otros. Mientras más lo hagan, más éxito tendrán. No obstante, cualquier cosa que hagan, que no sea fuera de la realidad, de la realidad de ustedes.

Dejen que hable más concretamente. El fin de semana se terminó, y estás sentado en tu casa, preguntándote qué vas hacer. No tomes una revista y te pierdas en alguna fantasía. Saca un libro de Torá, pon una cinta de Torá; confróntate a ti mismo. O cuando vayas en el automóvil, no prendas el radio y escuches las noticias acerca de otro asesinato o de algún invitado de un programa que te enseña lo que él piensa es importante. Pon la cinta de Torá que te inspire y te enseñe cómo atrapar el AHORA.

Necesitamos repetir esas ideas verdaderas una y otra vez, especialmente en la actualidad, porque existen muchas fuerzas externas compitiendo por nuestra atención. Te quieren vender algo, ya sea un artículo inútil el cual ellos afirman te dará felicidad o incluso un ideal que suena bonito y que te hará sentir que estás contribuyendo al progreso humano. No pierdas el enfoque. Y si lo haces, debes saber cómo conectarte nuevamente a la realidad para que puedas recuperar la claridad.

Rabino, ¿está usted diciendo que todo en los medios de comunicación es malo?

No es un asunto de bien o mal. Es un asunto de recobrar nuestra mente, nuestra alma. Y por favor, no tomen lo que estoy diciendo como un reproche. Sólo estoy transmitiendo información. Harán con ella lo que ustedes quieran.

¿Por qué no pensamos? La respuesta es muy sencilla. ¡No poseemos nuestra mente! Nuestra mente está controlada por los medios. La mentalidad gentil se ha infiltrado y ha tomado control sobre nuestra conciencia. Nuestra política, nuestra tzedaká, nuestra tefilá, nuestro Shabat, hasta nuestra Torá, todo es enfocado a través de los lentes de ojos no judíos. Eso es lo que significa estar controlado por los medios. Cuando estás controlado por los medios, tú no existes realmente. Estás poseído por otro.

Y da la impresión que nosotros no tenemos el poder para romper nuestra adicción a los medios. No podemos sentarnos por un minuto en nuestro auto sin prender el radio. Hasta tenemos radios especiales que podemos encender mientras nos bañamos. Nuestro más temible enemigo es uno mismo. Estamos aterrorizados de pasar unos cuantos minutos solos. Alguien siempre nos debe estar hablando.

Estamos tan atrapados con nuestras obligaciones, que ¿cuándo tenemos tiempo para estar solos y construir una relación con Hashem? Sí, nuestras obligaciones son reales, vitales y necesarias; y las debemos atender. Pero, ¿qué hacemos cuando tenemos un poco de tiempo libre? ¿Qué hacemos cuando estamos esperando el autobús o el tren? Tomamos un periódico para leer. Tenemos que saber qué está pasando en el mundo El mundo se va a desplomar si no sabemos las últimas noticias.

Nosotros no poseemos nuestra mente.

Yo tenía este problema hace algunos años. Nunca tuve radio en la casa. Nunca leí periódicos laicos. Pero, cada vez que manejaba hacia algún lugar, rápidamente prendía el radio y escuchaba las noticias, ‘WINS, todas las noticias, todo el tiempo’. Las noticias y sólo las noticias. Y, como cualquier persona normal, tenía que oírlas 30 veces al día… junto con todos los informes del tiempo y del tráfico.

Me daba cuenta que estaba mal, pero no tenía el poder de hacer algo al respecto. Después de todo, me decía a mí mismo, estoy viviendo en una sociedad. Debo ser una persona normal.

Un día, ofrecí llevar a un gran erudito de Torá en mi auto. Prendí el motor… y el radio sonó a todo volumen. Estaba muy avergonzado. Me dije a mí mismo. ‘Eres un hipócrita. En frente de personas de carne y hueso te avergüenzas; pero en frente de Hashem ¿no te avergüenzas?’

Continué así y entonces un día ocurrió una tragedia familiar. Una cuñada murió muy joven, dejando cuatro huérfanos pequeños. El funeral fue muy tarde en la noche. A la siguiente mañana, manejé a la ciudad como siempre, y al estar esperando la luz verde del semáforo mientras escuchaba la voz monótona e incesante del radio del locutor, me sonaba como el croar de una rana. De repente, me avergoncé y me enojé conmigo. ¿Qué clase de persona cruel eres? Asististe al sepelio de tu cuñada anoche y en no menos de 24 horas ya regresaste a tu rutina anterior, escapando de ti mismo. Tienes miedo de pensar acerca de ello.

Me dije, ‘si uno puede estudiar Torá o dar caridad en nombre de un difunto, entonces uno puede apagar el radio en su mérito’. Y así lo apagué. Y 23 años más tarde sigue apagado.

Sin embargo, algo inesperado me pasó tres o cuatro semanas después de haber apagado el radio definitivamente. Además de quitar el radio del automóvil, nada de mi rutina cambió, excepto que percibí una claridad y profundidad en mi perspectiva que antes carecía. Entonces me di cuenta. Me había desprendido de los medios. Había tenido esta neblina mental y ahora se había despejado. Podía ver las cosas como si las estuviera viendo por primera vez con ojos frescos, con mi propia mente. Una persona se queja, ‘todo está polvoriento’. Entonces alguien le señala que no es el mundo el que está polvoriento, sino sus lentes. Me di cuenta que éste era yo. Mi Torá, mi política, todo lo había estado viendo a través del polvo de los medios no judíos.

Y pienso que éste es el problema que todos sufrimos en la actualidad. A pesar de nuestra gran inversión en causas judías y educación de Torá, algo está entorpeciendo nuestros esfuerzos. ¡Tenemos un punto de vista goy! Y ni siquiera nos damos cuenta que es goy.

Evelyn

Con frecuencia cuento la historia de un conocido, un hombre que al principio no estaba muy comprometido con la observancia de mitzvot. Sin embargo, poco a poco, se empezó a comprometer más. Empezó a asistir diariamente a clases de Torá. Su esposa se cubrió el pelo. Yo le ayudé a dar esos pasos, pero por más que trataba, había algo en lo que no lo podía convencer. No podía conseguir que se deshiciera de su televisión.

Escuche’, él me dijo, ‘esto es algo a lo que no puedo renunciar. Es algo a lo que mi esposa y yo somos adictos. Vemos una hora en la noche. Eso es todo. Es un programa de comedia y nos reímos un poco. No puedo renunciar a la televisión’.

Este hombre tenía una empleada no judía, llamada Evelyn, a la que necesitaba para dirigir su negocio. Sin embargo, no la aguantaba. Era superficial, no refinada y grosera. Difícilmente yo podía tener una conversación con él, en la cual no mencionara algún incidente desconcertante de Evelyn.

Un día le dije. ‘Sabes, anoche, mientras tú y tu esposa estaban viendo el programa cómico y riendo, Evelyn y su novio estaban viendo el mismo programa. Tú estabas riendo en tu sala y Evelyn estaba riendo en la suya’.

Su cara se puso roja. Unas semanas más tarde me dijo, ‘Estoy muy enojado con usted. Me ha acabado’.

¿De qué estás hablando?, le pregunté.

¿Recuerda esa ocasión en que me señaló que Evelyn estaba riendo con el mismo programa que mi esposa y yo estabamos viendo? Bien, desde entonces, cada vez que prendo la televisión, digo, ‘¡Oh!, Evelyn lo está viendo también’.

Cada vez que tomas esa revista, ese periódico o ves ese programa de opiniones, alguna Evelyn está también sintonizando contigo. ¿Para eso han sido miles de años de sacrificio judío? ¿Un programa no judío de opiniones? ¿Por qué no tenemos el juicio para separarnos de algo diseñado para ocupar la mente de una Evelyn?

La respuesta es que estamos totalmente manipulados por gentiles. Pensamos como gentiles. Vemos el mundo como gentiles. Nuestra política es gentil. Hasta nuestra Torá es vista a través de ojos gentiles. Ni la Torá, ni la caridad, ni ningún esfuerzo servirá si permanecemos sintonizados con la frecuencia de una Evelyn.

Y no te estoy enseñando Jasidut o predicando piedad. Es el fundamento básico de ser judío. Vedibartá bam beshibteja bebeteja, ubelejteja baderej, ‘Y hablarás de ellas al sentarte en tu casa y al viajar en el camino’. Vedibartá bam, Jazal dice, y no devarim betelim. Tenemos que adherirnos constantemente a palabras de Torá y evitar todos las devarim betelim, asuntos vanos. Cuando tengas un tiempo solo, en el auto, en la casa o donde sea, libérate de Evelyn.

Éste es el Holocausto Americano. Un holocausto no es sólo cuando el veneno se deja caer en una cámara de gas llena de personas. El Holocausto Americano continúa ahora mismo. No obstante, en este holocausto nosotros somos los que poseemos los crematorios. Somos los que tomamos cámaras de gas portátiles y las traemos a nuestras casas. Nosotros somos los que estamos envenenando nuestras almas.

La gente dice: ‘Tiene razón. Y es por eso que no dejo que mis hijos la vean’. Pero yo les digo, ‘¿Qué hay contigo? ¿No eres también un niño? ¿No somos todos hijos de Hashem?’

El Gran Debate

Cada uno de nosotros, sin excepción, tiene un alma pura. Cada uno de nosotros tiene belleza y grandeza: el libre albedrío absoluto de atrevernos a ser cualquier cosa que pensemos que podemos ser. Pero primero tenemos que poseer nuestra mente. Debemos tener claridad.

Desconectarnos de nuestra adicción al culto de los ídolos modernos, requiere gran sacrificio, pero la buena noticia es que eso es todo lo que tenemos que hacer para reivindicar nuestra grandeza. No tenemos necesariamente que crear algo positivo. Únicamente tenemos que desistir de lo negativo.

Ésta era la cuestión subyacente de un debate talmúdico.20

Rabba, Ula, (y en otro lugar Rabí Yojanán) (Tres grandes sabios) dijeron, yasi v’lo ajimena, ‘Dejen que llegue (el Meshíaj), pero yo no quiero verlo. (Es decir, no quiero vivir en ese tiempo).

El Maharal explica de sus palabras. ‘No importa qué tan excelsos podamos ser, no podemos garantizar que estaremos a la altura de la prueba de la llegada del Meshíaj. Incluso no podemos estar seguros que vamos a tener el mérito de sobrevivir los desafíos de su llegada’. Sin embargo, una opinión contraria fue registrada:

Rab Yosef dijo: yasi v’ajimena, ‘dejen que llegue, y yo lo voy a ver. Y, más aún, ¡déjenme ser digno de sentarme bajo la sombra de los desechos de su burro!’

¿Cuál es la verdadera discusión subyacente entre los primeros tres Sabios y Rab Yosef?

Existen dos formas de servir a D os, basados en un versículo de Salmos, Sur merá vaasé tov, ‘aléjate del mal, y haz el bien’.21 La primera parte implica simple abstención, manténte alejado de cualquier cosa que sea mala; especialízate en distanciarte del mal. La segunda parte te incita a hacer ‘el bien’, a trabajar en lo positivo, a ejecutar actos de bondad. La pregunta es: ¿alejarse del mal es un medio de hacer el bien? O es lo contrario: ¿hacer el bien es un medio para alejarse del mal? ¿El objetivo es hacer el bien o alejarse del mal?

En esto se centra la discusión de los sabios. Los primeros tres sabios, que tenían miedo de vivir en los tiempos del Meshíaj, decían que una persona se vuelve completa, únicamente concentrándose en el bien. Entendían que las personas en el tiempo previo a la llegada del Meshíaj serían probadas como nunca antes teniendo que vivir inmersos en el mal. Espiritualmente se volverían como esqueletos secos careciendo aun de nervios y venas.

Por lo tanto, ellos concluyeron que no podían garantizar estar a la altura de la prueba. Ya que la prueba final era hacer el bien, ¿cómo podían garantizar que serían capaces de alcanzar el nivel de bien necesario para relacionarse con el Meshíaj en tiempos en los que el mal sería tan dominante? Por lo tanto decían, ‘Dejen que llegue, pero no queremos estar ahí’. No podemos tomar la responsabilidad de decir que vamos a crear la bondad necesaria para superar la brecha entre nosotros y el Meshíaj.

Rav Yosef, por el otro lado, decía que traer el Meshíaj no dependía de cuánto bien haya creado uno para sí mismo, sino más bien, en cuánto uno se ha alejado del mal. Él razonaba que, de cualquier forma, solamente D os podía conferirle a uno el bien fundamental. El Meshíaj va a servir como un conducto de la bondad y la santidad fundamentales. Sin embargo, a fin de ser merecedor de esta bondad fundamental, todo lo que uno tiene que hacer es alejarse del mal.

Por lo tanto, Rav Yosef decía, ‘Dejen que llegue, y lo voy a ver’, porque si el mérito de traer al Meshíaj depende de no ser malo, entonces esto puede lograrse aun bajo las peores condiciones. De hecho, mientras más esté uno rodeado del mal, mayores oportunidades tiene de no participar de él. Consecuentemente, el mérito es mayor.

A la Sombra de los Desechos del Burro

¿A qué se refería Rabí Yosef cuando decía que vivir en la era premesíanica era como sentarse debajo de la sombra de los desechos del burro del Meshíaj’?

El profeta dice que el Meshíaj va a venir como un ani rojev al jamor, ‘un hombre pobre montado sobre un burro’.22 En realidad, existen dos palabras en hebreo para designar una persona pobre: ani y ebyon. Ambas personas pobres no tienen nada, pero el último desea lo que no tiene. El primero, el ani, no tiene y no añora.

El Meshíaj es descrito como un ‘ani montado sobre un burro’. Él va a ser totalmente pobre en cosas mundanas y materiales, y no las va a necesitar. Él estará montado sobre el burro. Jamor, ‘burro’ en hebreo, también significa físico, material (la misma raíz de palabra). Si una persona fracasa en montar o controlar el jamor, entonces a ella la controlan. Quiere cosas materiales. Las necesita. Sin embargo, el Meshíaj será un ani; no las va a necesitar; se va a montar sobre todas ellas y tendrá sus deseos materiales bajo control.

¿Qué quiere decir sentarse bajo la ‘sombra de los desechos’ de su burro?

Antes del advenimiento del Meshíaj, el judío no va a montar encima del jamor– burro-materialismo como lo ha hecho durante los previos 2,000 años de exilio. Va a estar sentado debajo de él. Va a estar manejado por él. Y no sólo no va estar por debajo del burro, sino debajo ‘de la sombra de los desechos’ del burro. El desecho del burro, es parte del alimento que aun el burro rechaza. En otras palabras, los judíos estarán involucrados con el desecho de la sociedad no judía.

Desafortunadamente, vemos qué tan cierto es esto. Mira a tu alrededor. Lo que es aceptable para el gentil actualmente no hubiera sido aceptado hace sólo un par de décadas. Hasta los elementos más bajos de la generación previa hubieran estado conmocionados por el despliegue de permiso, inmoralidad, espectáculos, desvergüenza, arrogancia, etc. Sin embargo, en la actualidad, a tales personas se les llama ‘progresistas’.

A donde quiera que vamos, a donde quiera que nos paremos, estamos debajo de los desechos. De los anuncios de neón del Times Square a los televisores, los cines y puestos de periódicos, toda la inmundicia y los desechos de todo el mundo están cómodamente disponibles, aun en la intimidad de nuestro hogar. A donde quiera que vamos, estamos bajo la sombra de los desechos del burro.

Rav Yosef dijo en efecto, ‘Si D os trae una situación en la que te encuentres a ti mismo viviendo debajo de la sombra de los desechos del burro, y te ves afectado por ello, entonces todo lo que vas hacer es abstenerte y no participar en ella, entonces vas a merecer el Meshíaj’.

La implicación profunda de las afirmaciones de Rav Yosef es que cada persona tiene una bondad natural innata. Esta bondad resplandece como una luz eterna. Todo lo que se necesita es descubrirla. Sin embargo, el bombardeo de los medios, ya sea de los eventos deportivos vacíos, la promiscuidad desvergonzada, la ideología destructiva o simple insensatez, amontona pilas y pilas de hollín sobre esa brillante luz interna.

Una persona siente una chispa de santidad, una experiencia inspiradora, anhela momentáneamente algo más, pero llega a su casa y se conecta a las idolatrías de la sociedad. Es como un paciente en coma que abre los ojos, se desconecta de los tubos y alambres, camina, experimenta un momentáneo anhelo de vida, y luego regresa a la cama, se conecta nuevamente a todas las válvulas que lo ‘mantienen con vida’ y se vuelve a dormir.

La mente es el órgano más preciado. Necesita ejercicio. Prende la televisión y apaga la mente. Después de un momento, la irreflexión se vuelve una forma de vida. No pienses… por lo menos, no mucho. Ciertamente no lo suficiente para tener que cambiar. Conéctate de nuevo. Prende la comedia o el drama. Prende las noticias. Es importante oír el informe del tiempo otra vez. Relájate. No trabajes demasiado. Sólo se vive una vez. ¿Quieres disfrutar la vida? Toma Coca Cola.

Cada vez que te conectas, tu mente se atrofia. La luz brillante dentro de ti se cubre más y más de desechos inmundos.

El Botón

Un día se canceló un vuelo que yo debía tomar. Como compensación, la aerolínea hospedó a los pasajeros en un hotel de lujo para pasar la noche. El hotel ostentaba ‘TV con control remoto con todos los canales de cable en todos los cuartos’. Mientras estaba sentado solo en el bien acolchado sofá de mi cuarto, saqué mi Guemará miniatura y me preparé para mi estudio diario de Torá. No obstante, antes que me diera cuenta, me quedé dormido.

Cuando me levanté varias horas después, me sentí desilusionado y avergonzado porque sabía que mis padres y abuelos hubieran tenido la fuerza para estudiar la mayor parte de la noche. Me desesperé por un momento. Contemplé el anuncio arriba en la pared, ‘TV con control remoto con todos los canales de cable en todos los cuartos’. De pronto, recordé las palabras de Rav Yosef, ‘Dejen que llegue, y déjenme ser digno de sentarme debajo de la sombra de los desechos de su burro’. Y entonces me di cuenta: ¡aquí estoy yo sentado debajo de la sombra de los desechos del burro, debajo de lo desechado por la sociedad no judía!

De mis ancestros, Hashem obtuvo una sólida página de estudio cada día y cada noche. Nosotros obviamente somos una generación más débil. Sin embargo, hay una cosa que poseemos que ellos no tuvieron. Tenemos la ‘TV con control remoto con todos los canales de cable’ solamente a un botón de distancia. Y ésta es nuestra grandeza potencial, porque a pesar de que no estaba a la altura de desempeñar el bien de estudiar esa noche, fui capaz de alejarme del mal aun cuando sólo fuera no dar el golpecito de un botón. Mis antecesores nunca tuvieron este reto. Le pudieron haber dado a Hashem una página de Guemará pero nunca Le dieron el botón.

Piensa Acerca de Esto

Mi recomendación es que pruebes durante 40 días, una abstención voluntaria de las influencias de los medios. Aléjate de ellos, apágalos, arrójalos fuera, cierra tus ojos a ellos, etc. Después de todo, ¿no te lo mereces?

Trata por 40 días. Aclara tu mente. Mantenla absolutamente clara. Te garantizo que tu belleza interior empezará a resplandecer de algún lugar muy dentro de ti. Lo más probable sea que pienses más claramente que nunca.

Sí, pensando.

Al final de los 40 días, cuando hayas experimentado la claridad de estar totalmente desconectado por un rato, reconsidera tus opciones, si quieres. Pero por lo menos, trátalo. Vas a descubrir tu propia santidad, tu propia grandeza. Y verás lo que significa estar en posesión nuevamente de la belleza interna especial que reside en cada judío. La grandeza ya ha sido plantada dentro de cada uno de nosotros. Jayé olam natá betojenu, ‘la vida eterna fue plantada dentro de nosotros’. Remueve lo negativo y lo positivo automáticamente empezará a brillar.

Se está haciendo tarde y si algunos de nosotros no descansamos bien, temo que no seremos capaces de funcionar apropiadamente mañana. Por lo tanto, gracias y les deseo buenas noches.

 

POR EL RAV. AZRIEL TAUBER

AUTOESTIMA Capitulo 2.

CAPÍTULO 2

PERSPECTIVAS

Las hermanas Levine llegaron intencionalmente al hotel unas horas antes de la hora fijada para la primera clase. Desde el momento en que Gail le informó a su hermana mayor Elaine, que planeaba extender su estancia en Israel y tomar estudios de tiempo completo en un seminario para mujeres judías recién observantes, fue como si una cuña se hubiera metido entre ellas. Extrovertida y segura de sí misma, Elaine nunca entendió completamente a su tranquila y más tímida hermana. Pero ahora que su hermana menor se había vuelto ortodoxa — y tenía que estarse recordando a sí misma no usar esa etiqueta enfrente de ella— temía que la grieta entre ellas se ensanchara hasta que no quedara nada de su relación.

Mientras paseaban y platicaban por los alrededores del hotel, lo primero que notó Elaine acerca de su hermana menor fue una confianza interna que nunca antes había reflejado. No era una confianza arrogante — Elaine estaba convencida que Gail era incapaz de ser arrogante — sino una serena seguridad en sí misma. Estaba feliz y triste por este pensamiento. Feliz porque su hermana había encontrado algo, pero triste porque ese ‘algo’ era un ‘algo’ con el que ella sentía, nunca se iba a poder relacionar.

Gail —Elaine remarcó—, estoy feliz de que hayas encontrado tanto significado en tu nuevo estilo de vida, pero confío que no esperes que yo cambie por ti. He venido acá ante todo para compartir momentos muy necesarios con mi hermana, y no para oír a un hombre exponer las maravillas de la sociedad patriarcal.

Ahí estás otra vez —Gail replicó—. ¿Por qué cada palabra tuya debe contener una insinuación negativa acerca de mis creencias?

¿A qué te refieres?

—‘Patriarcal’. Tú sabes al igual que yo, que las feministas lo usan en un sentido despectivo. ¿Cómo puede ser que luches por la igualdad y la eliminación de prejuicios, pero cuando se trata del judaísmo, el sistema de creencia de tu propio pueblo, no dudas en usar adjetivos que indican desprecio y tonos con aire de superioridad?

Escucha hermanita, me has tenido caminando sobre cáscaras de huevo desde nuestra última conversación. Tengo miedo de expresarme. Si quieres que tenga un buen fin de semana, debo ser yo misma. No puedo tener miedo de decir lo que pienso.

A mí no me importa si dices lo que piensas. Todo lo que te pido es que estés un poco más consciente acerca de ciertos términos que expresan insensibilidad hacia la gente y a las cosas con las que yo me he identificado.

Eso es justo. Si digo algo ofensivo, quiero que me lo digas. Pero, al mismo tiempo, debo decir lo que pienso. No quiero tener que preocuparme de desenmascarar un sistema de creencia por lo que es.

¿Tienes miedo que puedas cimbrar las raíces de mis creencias?

Francamente sí.

Bien, he realizado un profundo examen de conciencia y me siento confiada acerca de las cosas que sé. Eso no quiere decir que sé todo, pero si hay algo que no conozco, estoy segura que hay maestros que serán capaces de darme buenas respuestas. Así que no te preocupes por mí.

Si ésa es la forma en que te sientes, entonces contéstame esto: ¿cómo puede una mujer inteligente como tú involucrarse en una religión dominada por los hombres? Y nota que no usé la palabra patriarcal.

Gracias por tu sensibilidad. Contestando a tu pregunta, Elaine, no te has dado cuenta qué tan central y elevado es el papel que la mujer judía desempeña en los círculos de Torá. De hecho, supera por mucho, cualquier cosa que el mundo secular pueda ofrecer.1

¿Cómo puedes decir eso?

El mundo secular ve únicamente las cosas en términos económicos o de poder político. Si una mujer no gana salarios iguales o no maneja el mismo poder político que un hombre, se considera oprimida. Pero la opresión no es resultado primario de fuerzas externas como el dinero o el poder del voto. Existen muchas mujeres prósperas e independientes que están infelices consigo mismas, debido a algún sometimiento interno o debido a que sienten que el reconocimiento externo que la sociedad les da es poco más que superficial. Y, por el otro lado, hay muchas mujeres en hogares observantes de la Torá, que pasan la mayor parte de su día criando niños y pendientes de sus casas, que están felices y realizadas porque tienen una autoestima genuina y porque son apreciadas genuinamente por sus familias, su comunidad y su pueblo.

Y también hay muchas amas de casa infelices.

Pero finalmente, la felicidad no depende de lo económico o de lo político. Sé que esto probablemente te sonará ingenuo, pero existe una manera espiritual de ver las cosas que es totalmente ajena a la manera en que fuimos educadas. En el enfoque de la Torá, cada ser humano es un individuo que juega un papel único en el Plan Divino de la creación, ya sea pobre o rico, hombre o mujer, intelectual o simple. No sé si puedo transmitirte rápidamente el entendimiento que he adquirido el último par de años, pero el papel de la mujer no es inferior al del hombre. Sólo es diferente. Cuando superas ciertas apariencias que el mundo secular afirma que son inferiores, el papel de la mujer judía es mucho más de lo que el mundo secular puede ofrecer.

No puedo entender cómo puedes decir eso. Sin embargo, la verdad es que algunas de mis amigas y colegas están buscando alternativas espirituales. Parece ser una tendencia prometedora. Si tú crees que debajo de la superficie existe finalmente una igualdad, quisiera aceptar que eres sincera. Más aún, voy a admitir otra cosa, si crees que yo no estoy consciente que existen feministas rencorosas, ilusas e incluso antisemitas, estás equivocada. Pero déjame cambiar de tema y preguntarte otra cosa.

Precisamente en ese momento, por el otro lado, se acercaba un hombre con la cabeza gacha, parecía absorto en sus pensamientos.

Éste es el rabino que dará las clases principales —le murmuró Gail a Elaine—. Éste es el momento perfecto para presentarnos, Si tienes una pregunta realmente difícil, es el momento de hacerla. Y no te detengas. Sé tú misma, sólo recuerda ser comprensiva.

Elaine realmente no sentía gran necesidad de preguntarle algo al rabino, pero si iba a preguntar algo, inmediatamente se dijo que iba a ser ‘ella misma’. Sin embargo, Gail empezó a hablar primero.

Rabino, mi nombre es Gail. ¿Recuerda que hablé con usted hace algunas semanas en Israel?

Sí, y ésta debe ser tu hermana de la cual me hablaste. Gusto en conocerte.

Igualmente, —dijo Elaine.

Rabino, —dijo Gail—, mi hermana tiene muchas preguntas.

Entonces ha venido al seminario correcto.

Vamos Elaine, pregúntale al rabino tus dudas.

Rabino, —respondió Elaine—, mi hermana está un poco ansiosa por mí. Realmente estoy aquí para visitarla, no por mi propio interés. Mis preguntas realmente no son teológicas, sino acerca de su bienestar. Y para ser honesta, estoy un poco preocupada por ella. Estoy preocupada por el estilo de vida en el que se ha estado involucrando.

¿Qué te preocupa exactamente?

Fuimos educadas en un hogar muy liberal, donde el intelecto y la independencia eran estimulados. De hecho, cuando crecí y me empecé a desarrollar intelectualmente, llegué a cuestionar algunos de los valores de mis padres, que a pesar de que eran lo que ellos llamaban liberales, para mí eran muy tradicionales. En todo caso, ahora mi hermana se ha ido aparentemente al otro lado. Se ha vuelto muy tradicional en su perspectiva. Mucho más de lo que yo me podía haber imaginado. Y eso me preocupa. Usted verá, intelectualmente, no podría estar más en desacuerdo con los orto…, quiero decir con el judaísmo tradicional. Soy una pensadora independiente. Y aun poniendo a un lado el tema del papel de la mujer en el judaísmo, no puedo entender cómo algunos de los valores morales del judaísmo existen todavía. Éste es un mundo moderno. No estamos viviendo en la Edad Media.

¿Puedes ser más específica?

Tome la institución del matrimonio por ejemplo. ¿Qué derecho tiene su Torá para prohibir ciertas relaciones matrimoniales? Si dos personas tienen placer una con la otra, ¿qué puede tener de malo?

La respuesta más directa, con la que comprendo puedas tener dificultades, es que D–os lo prohibe. Por supuesto, uno primero tiene que estar de acuerdo conque existe un D–os y que la Torá es la fuente de Su voluntad para nosotros. Una vez que estamos de acuerdo en esto, sin embargo, la primera pregunta no es qué es lo que mi mente racional piensa que es bueno o malo, sino qué es lo que la Torá dice.2

Entonces, si uno no acepta la primera premisa, es decir, que existe un D–os, no hay nada de malo en ello, —argumentó Elaine.

El que uno no crea en D–os, no Lo hace desaparecer súbitamente, —respondió el rabino—. La existencia de D–os es una verdad objetiva, independientemente de las creencias subjetivas de la persona.

Eso es lo que usted dice. Yo digo de otra manera. Usted tiene que aceptar que mi manera de ver las cosas es tan legítima como la suya.

El que yo lo acepte o no es irrelevante. No hace que la existencia de D–os sea menos real y, si Él prohibe ciertas cosas, entonces el hacer esas cosas es malo, no importando lo que tú o yo pensemos.

Yo lo veo en esta forma, —dijo Elaine—, una persona puede tener dos deseos: hacer lo correcto y ocuparse en cierta actividad. Si la actividad deseada no se opone con el deseo más dominante de hacer lo correcto, entonces, realizas la actividad; si se opone, entonces no la realizas. Pero, si no puedes comprender por qué la actividad deseada está mal, igual la vas hacer. Yo no deseo hacer mal. Si yo no considero mala la actividad con la que me deseo ocupar, la voy hacer. Para poder considerarla mala, sin embargo, debo saber por qué, entender por qué, reconocer por qué. Sólo entonces seré capaz de abstenerme.

Pensando así, estás convirtiendo a tu mente en el árbitro final del bien y el mal.

¿Qué hay de malo con eso? Si no puedo confiar en mi mente, ¿en qué puedo confiar?

Tu mente es sólo una herramienta de tu voluntad. Si profundamente dentro de ti deseas algo, tu mente te va a apoyar no importando qué tan equivocada estés. El ejemplo clásico son los nazis. Su odio contra los judíos estaba tan arraigado en la psique de los alemanes europeos, que era una segunda naturaleza. Todo lo que Hitler hizo fue dar apoyo intelectual a la gente para expresar su voluntad. Es por eso, que si tú le hubieras preguntado a un nazi que si su trato a los judíos era inmoral, te hubiera contestado directamente a la cara, ‘No’. Su intelecto habría apoyado su voluntad. Los judíos eran alimañas. Eran parásitos. Tenían un plan para controlar el mundo. Él y Hitler le estaban haciendo un gran servicio a la humanidad matando judíos y estableciendo a la raza aria como los dueños del mundo.

Usted no puede usar a los nazis como un ejemplo de la debilidad del intelecto.

Al contrario. En general, el pueblo alemán era considerado como uno de los pueblos más avanzados intelectualmente en la historia del mundo, poseyendo las más renombradas universidades. Y ¿tú sabías que más de un tercio de los comandantes de los campos de concentración tenías doctorados de universidades? El punto es que si una persona – cualquier persona – quiere involucrarse en un asesinato o una relación prohibida, esta persona tenderá a desarrollar una filosofía para acomodar sus deseos, no importando qué tan dotada esté. La mente racional es una herramienta de la voluntad. Es como una marioneta de las pasiones humanas para discernir la verdad. Por lo tanto no se puede depender sólo de ella para juzgar entre el bien y el mal.

Pero la religión judía no puede ser verdad. Ha sido usada por los hombres para oprimir a las mujeres.

Eso no es verdad.

Sí lo es. No puede negar que en un típico shtetl europeo, se esperaba que las mujeres se quedaran en su casa, trabajaran extremadamente duro y permanecieran ignorantes. Si esto no es opresión, entonces no sé lo que es.

Primero, si las mujeres estaban oprimidas, era porque los judíos estaban oprimidos. Los hombres tenían que resistir la opresión de la pobreza y la persecución, no menos que las mujeres. Dentro del hogar judío promedio, no obstante, había respeto, dignidad y honor para todos, especialmente para la mujer. Cuando Shabat llegaba, aun la casa más pobre se transformaba en un palacio de tranquilidad; la mujer, nos enseña la Torá, es el epítome de Shabat. Ella es la eshet jayil, ‘mujer valiosa’, la Reina de Shabat, que irradia tranquilidad y fuerza interior. El Talmud nos dice que por el mérito de las mujeres justas, el pueblo judío fue salvado de Egipto.3 En forma similar, se nos enseña que en el futuro vamos a merecer la redención debido a las mujeres justas. El pueblo judío ha resistido los últimos 2,000 años en el exilio explícitamente por las mujeres quienes fortalecieron el hogar judío, y todo erudito judío sabe esto.

¿Cómo es que las mujeres judías eran ignorantes?

Ése es un mito creado por los librepensadores. Las mujeres judías tenían que ser educadas en todos los detalles de la ley de la Torá que eran relevantes para ellas si iban a dirigir una casa completamente observante. Y esto es un conjunto extremadamente vasto de leyes y detalles. Si las mujeres judías de la actualidad tan solo supieran una fracción de la información que nuestras tatarabuelas sabían, no estaríamos en este terrible callejón en el que estamos. Y aún más allá de las innumerables y minuciosas leyes que debían saber, esas mujeres judías poseían un temor a D–os tan profundo que impregnaba su hogar. No es una exageración decir que la mujer judía ha sido el verdadero cimiento para las grandes figuras de Torá a través de los tiempos.

Ése es el problema. ¿Por qué necesitamos temer a D–os? Tenemos ciencia. Tenemos tecnología. Tenemos conocimiento. ¿Para qué necesito a D–os si tengo mi propia mente?

Ésa es la intolerancia del punto de vista secular; no ganaron nada arrojando a D–os. Todo lo que hicieron fue hacer de la mente humana su dios. Una y otra vez, las ideologías fabricadas por el hombre no han producido nada más que sistemas que oprimen a otros. Nadie puede negar el hecho que algo define la realidad por ellos. Mientras que los judíos observantes de la Torá confían en el D–os de la Torá, el Creador de la ‘realidad’, que es benévolo, omnisciente y verdadero pastor de Su pueblo, un librepensador pone su confianza en la mente humana, este instrumento siempre moldeable que puede ser manipulado muy ingeniosamente y de manera relativamente fácil.

Pero de acuerdo a lo que usted está diciendo, —respondió Elaine—, una persona nunca debería pensar. La mente es inútil.

D–os no quiera. La mente es una maravillosa y vital herramienta.

Pero usted dijo que es algo en lo que no se puede confiar.

Sí, cuando se mantiene sola sin ninguna guía divina, o cuando una persona es esclava de sus deseos materiales o egoístas, de su propia voluntad. Sin embargo, cuando la persona lucha contra sus deseos egoístas para buscar apegarse a la Voluntad Divina, entonces la mente se vuelve un instrumento vital para discernir la verdad y aplicarla a circunstancias particulares de la vida.

Todo lo que estoy diciendo es que la mente por sí sola es limitada, y la historia ha comprobado una y otra vez qué tan imperfecta es. Por lo tanto, probablemente lo más racional que una persona puede buscar es la Voluntad Divina y afinar su mente para estar en armonía con ella.

No puedo aceptar lo que usted está diciendo. Yo tengo que hacer las cosas si les encuentro sentido. Y solamente me voy abstener de hacer cosas que no tienen sentido para mí. Es retrógrado pensar en atenerse al argumento de la Voluntad Divina.

No es retrógrado. Es la idea más progresista. Atenerse a la mente humana es la forma de la moralidad pre-Sinaí. Antes de la revelación en el Monte Sinaí, la moralidad se definía con la razón humana; eran llamados los siete mandamientos de Noaj. Cuando D–os dio la Torá en el Monte Sinaí, los siete mandamientos de Noaj se volvieron anticuados.

¿Qué son los siete mandamientos de Noaj?

Son siete leyes que apelan a la mente racional, tales como no robar, no asesinar, no ser un adúltero, etc. Desde el tiempo de Noaj y, continuando hasta la actualidad, los no judíos son responsables de cuidar los siete mandamientos universales porque son dictados por la lógica. Sin embargo, por ejemplo, esto es lo que hace la observancia de ‘no robar’ para los judíos diferente a la de los no judíos.

¿El mandamiento judío de no robar es diferente al de los no judíos?

Sí. Pregúntale a un justo gentil por qué no debe robar y él te va a decir que si no hubiera respeto por la propiedad de otros, no habría ley ni orden. La sociedad se destruiría. Por lo tanto, la sociedad debe tener leyes para disuadir el robo y castigar a aquéllos que roban. En otras palabras, la prohibición en contra del robo, como de todos los otros siete mandamientos, tienen una filosofía. Y la filosofía dicta la ley.

Cualquier religión basada en los siete mandamientos de Noaj, es una religión válida, —continuó el rabino—. Y más gentiles deberían ser seguidores fervientes de tales religiones. Sin embargo, cuando una ley es ley porque se adapta al entendimiento humano, está, por definición, limitada al entendimiento humano. Un judío, por el otro lado, es parte del pueblo que estuvo parado al pie del Monte Sinaí donde D–os reveló el bien y el mal, lo moral y lo inmoral; esto está finalmente más allá de la razón humana. Para un judío del Sinaí, la ley dicta la filosofía. Y ya que es una ley divina, las razones filosóficas subyacentes deben ser las razones filosóficas fundamentales. Por otro lado, ya que la ley de la Torá es divina, esas razones no son necesariamente comprensibles a la limitada mente humana.

Por lo tanto, un judío no roba porque D–os le ordenó no robar, no porque tenga sentido el tener leyes en contra del robo. Si por alguna razón, de su mente surge un racional que le permita robar, aun así, no debe robar porque la Torá le dijo que no.4 Por ejemplo, si un judío toma dinero de otro y aunque tenga la intención de regresarlo inmediatamente, está, no obstante, transgrediendo el mandamiento de no robar. O digamos que un pobre toma diez dólares de un millonario. Es un ladrón. Él debe tener fe en que D–os sabe que él necesita dinero y que si tiene derecho a ese dinero, lo va obtener por una vía legítima.

Pero ¿el millonario no lo necesita? —preguntó Elaine.

Eso no importa. La persona no sólo tiene una obligación social de no robar, tiene obligación consigo misma y con D os. D–os va a emparejar las cosas al final. El judío se debe apegar a la Voluntad Divina, porque es Divina, no porque le parece que tiene sentido la mayor parte del tiempo. Y ésta es una forma de moralidad más elevada que confiar en valores morales creados y definidos por la mente humana.

Y ¿qué si la Voluntad Divina es irracional?

Si verdaderamente es divina, no es irracional. Te puede parecer, a veces, estar más allá de la perspectiva racional humana, pero esto no la hace irracional. Las razones de D–os son supra–racionales, no racionales. Y es por esto, que creemos que seguir la Torá porque es la voluntad de D–os es más elevado que seguirla porque se adapta a lo que uno piensa que es correcto y bueno.

Simplemente me es muy difícil aceptarlo.

Me doy cuenta que para ti debe ser muy difícil aceptar este punto y respeto tu derecho a ser escéptica. Espero que seas una buscadora de la verdad. Tienes un fin de semana entero para explorar los temas con mayor profundidad. Mi sugerencia es que suspendas temporalmente tu escepticismo a fin de que puedas ver otra perspectiva bajo una nueva luz. Te podría sorprender cuánto sentido tiene.

Rabino, —dijo Elaine con una seriedad no revelada previamente—, no estoy aquí para ver la luz. Y no estoy aquí para tener una mente abierta acerca de la religión. Estoy aquí porque estoy preocupada por mi hermana menor. Y ésta es la única razón por la que estoy aquí. Quizá ha encontrado algo que ella cree la hace feliz, pero en esencia, yo sé que está huyendo de sí misma.

¡Elaine! —dijo Gail impactada.

Gail, déjame decir mi opinión. Tú sabes que me es muy importante expresar mis pensamientos. Gail, existe un nuevo mundo de oportunidades para las mujeres. Está lejos de ser perfecto, pero ¿por qué querría una mujer en esta época enclaustrarse a sí misma en una religión patriarcal y opresiva?

Elaine, déjame decirte algo. Estás muy equivocada acerca de esto. Primero, la Torá no me prohibe, si yo lo escojo así, perseguir las oportunidades de una carrera que tú crees es tan importante. Segundo, yo no estoy huyendo de mí misma. En mi búsqueda encontré algo que tú, nuestros padres y sus amigos, y nuestros compañeros dimos por sentado. Quizá, tú y ellos son los que están huyendo de sí mismos, sumergiéndose en carreras o filosofías seculares que no pueden llegar al descubrimiento de uno mismo, a la verdad y la realización que acompaña a la Torá.

Pero la religión es el opio de las masas, Gail.

En la actualidad, el humanismo, el laicismo, el materialismo y otros similares son el opio de las masas.

Dices eso solamente porque la religión es una forma fácil y conveniente de sentirse seguro en un mundo inseguro.

Y tú lo dices solamente porque el laicisismo, o lo que sea que tú representas, es una forma fácil y conveniente de deshacerse de la responsabilidad de ser el pueblo elegido, de vivir la Torá.

Si puedo intervenir, —dijo el rabino—, yo creo que las dos tienen buenos puntos: Gail desde su perspectiva e Elaine desde la suya. Admito que estoy de tu lado en este argumento, —dijo el rabino dirigiéndose a Gail—, pero no puedes esperar que tu hermana mayor piense de otra manera en este momento. Ella no ha experimentado lo que tú. Y —dijo dirigiéndose a Elaine—, si realmente tienes en mente el mejor interés por tu hermana, trata de entender su perspectiva, en lugar de criticarla y esperando que la deseche de la noche a la mañana.

Pero yo me siento responsable hacia ella y creo que se ha involucrado con la gente equivocada, —dijo Elaine—. Está huyendo de sí misma,

Y ¿qué yo es ése? —preguntó el rabino.

El yo de la mujer moderna que puede pensar independientemente,

¿Qué hay acerca de su yo judío? ¿Está huyendo de él?

Quizá no, pero yo no pienso que sea importante.

Entonces, qué hay acerca de su yo humano, el yo que es único en cada ser humano, sea éste hombre o mujer, judío o no judío, —preguntó el rabino—. ¿Está huyendo de él?

Supongo que depende de cómo usted defina ese yo.

Estarás de acuerdo entonces, que el único aspecto de ser humano, es el conocimiento de que uno existe, de que uno tiene la capacidad de cuestionarse ¿para qué existo? Después de todo, una mesa no sabe para qué existe. Un animal no conoce para qué existe. Nada más el ser humano se hace la pregunta: ¿para qué existo?

No voy a estar en desacuerdo con usted, —dijo Elaine—, pero es por eso que tenemos la ciencia, que nos ha dado acceso para conocernos a nosotros mismos y de conocer nuestro lugar en el universo como nunca antes. Ha habido una explosión de conocimiento en el último siglo. Deje que Gail se convierta en científica si quiere descubrir los secretos del universo.

Entiendo tu punto, —respondió el rabino—. La luna, las estrellas, los lugares más alejados del espacio; el cuerpo, los órganos, los microorganismos; la humanidad, como un todo, ha explorado el espacio exterior y el espacio interior hasta el punto que ha acumulado una increíble cantidad de conocimientos sobre virtualmente todo. Sin embargo, yo sostengo que un tema permanece muy desconocido, poco investigado. De hecho, este tema no es solamente el menos conocido, sino el que menos se desea conocer. La naturaleza humana incluso rechaza el pensamiento de investigarlo.

¿Qué? ¿La religión?

No. El propio yo de la persona. La actividad más dolorosa para una persona es girar todos los grandes microscopios y telescopios hacia el interior de sí mismo para examinar quién es y para qué existe. Ésta es la ruina hasta de los idealistas en la actualidad. Políticos, humanitarios, ecologistas, aun la gente que pelea por los derechos de los animales y que ponen en sus automóviles, ‘Yo freno por los animales’, cuida y se preocupa por todo en el mundo, pero cuando llega a ese pequeño ‘yo’, todo se ignora. Deliberadamente se comprometen en cuanta buena causa haya alguna vez sido inventada, sólo para acallar su conciencia que sabe que deberían estar usando ese esfuerzo para conocerse a sí mismos, para descubrir quiénes son y de cómo deberían estar realizando el ‘porqué’ del universo.

Es por esto que tu hermana no está huyendo de sí misma, —concluyó el rabino—. Ella ha mostrado independencia de espíritu para elevarse sobre las tendencias populares, intelectuales o idealistas de su generación, que a pesar de su brillo y deslumbrante cantidad, no abordan satisfactoriamente la cuestión más esencial: ¿para qué estamos aquí? No obstante, tu hermana ha ido directamente al corazón del asunto. Fue capaz de mirar más allá de un aspecto que pudo haberla desilusionado cuando era menor, porque ella quiere la verdad. Ella quiere saber: ¿por qué? La mayoría de las personas pueden estar huyendo de sí mismas, pero tu hermana no lo está haciendo.

Seguro, —replicó Elaine—, la gente huye de sí misma. Pero ¿quién dice que usted tiene las respuestas? ¿Quién dice que hay una respuesta? ¿Qué si no existe respuesta del porqué estamos acá?

Ésas son preguntas legítimas. Si son sinceras y tú eres una persona honesta, tengo confianza en que encontrarás las respuestas a ellas un día.

No en la religión. No en el judaísmo ultraortodoxo.

¿Cómo puedes estar tan segura? ¿Alguna vez investigaste la Torá como tu hermana lo hizo?

No, yo no veo qué pueda ganar con eso.

Pero puede ser que tu verdadero yo se encuentre detrás de esa puerta que tú has cerrado, arrojado la llave, y concluido que está vacía sin nunca haberla abierto. Recuerda, no importa qué tan inteligente sea una persona, existe una tendencia a escapar de uno mismo, de escapar de lo que está más cerca al corazón.

Conozco lo suficiente para saber que no puede ser verdad.

¿Alguna vez estudiaste de fuentes primarias, de personas que siguen la Torá? Y no estoy hablando de lo que escuchaste de extraños, leíste en el New York Times, o estudiaste en una clase de religiones del mundo. Estoy hablando acerca de ti, de ti misma. ¿Alguna vez trataste de vivir entre judíos observantes de la Torá y sinceramente trataste de aprender sus costumbres? ¿Alguna vez trataste de hacerlo por dos años? ¿Dos meses? ¿Dos semanas? ¿Alguna vez hablaste francamente con un judío realmente conocedor de la Torá?

No puedo decir que lo haya hecho, pero no es importante para mí. No es realmente parte del yo con el que me identifico.

Pero tú eres judía ¿no es así?

Sí.

¿No crees que merece consideración junto con el hecho de que eres una mujer, una estadounidense, un ser humano nacido en el siglo veinte? ¿No crees que por lo menos merece que tú tengas tu mente algo abierta en relación a ello?

No. Pienso que no soy capaz de tener una mente abierta acerca de ello.

Acepto tu honestidad. Y la respeto. Pero, ¿al menos puedes entender por qué tu hermana piensa que merece consideración y tiempo? —el rabino hizo una pausa y luego agregó—. Por la razón que hayas decidido venir a visitarla este fin de semana, ya estás acá. Trata de aprovechar la situación. Si no puedes tener una mente abierta por tu propio bien, por lo menos sé lo suficientemente abierta para ser capaz de obtener un mayor entendimiento acerca de lo que tu hermana es.

Déjela ser abierta acerca de mi punto de vista.

Ella lo era. Crecieron juntas en la misma casa; fueron a la misma escuela, leyeron los mismos libros, vieron los mismos programas de televisión. Ella ya pudo ver el mundo de alguna manera como tú lo ves. Ahora tienes una oportunidad por primera vez de empezar a ver el mundo como ella ha llegado a verlo.

No estoy aquí para decirte qué hacer, —concluyó el rabino—. Sin embargo, tienes un fin de semana entero con tu hermana que ha hecho grandes cambios en estos dos últimos años. Tú no puedes llegar a entenderla si no te pones tú misma, por lo menos un poco, en su lugar. Y este fin de semana es un enfrentamiento con lo que ella ha estado haciendo por más de dos años. Ella no te va abandonar a ti ni a tu familia. Tendrás todo el tiempo que necesites para platicar con ella. Ahora tienes la oportunidad única de aprender acerca de algo que es muy importante para ella. Por lo tanto, si no por otra razón, espero que te quedes.

De cualquier forma, tengo que disculparme, —dijo el rabino—, porque todavía tengo mucho que preparar. Estaré más que complacido de continuar esta conversación después que el seminario haya empezado. Mientras tanto, disfruten su tiempo juntas.

 

Por el RAV. AZRIEL TAUBER.

Autoestima

Autoestima
Por Rav Azriel Tauber

CAPÍTULO 1

APERTURA

Las personas están deprimidas. Están sucumbiendo. La economía es un caos. A nadie le importa, corrupción, ambición, e indiferencia, o bien, todos somos impotentes para poder lograr un cambio. ¿Y tú quieres hacerme creer que un rabino ultraortodoxo tiene todas las respuestas?

Bueno, si no todas las respuestas, por lo menos algunas de ellas.

Escucha, tú eres mi hermana. Crecimos juntas. Y estoy contenta que pienses que encontraste algo. Pero no es para mí.

Eso es lo que honestamente sientes, ¿qué yo encontré algo?

¿Honestamente? No. Honestamente pienso que has actuado precipitadamente. Éste es el siglo veinte. Casi el veintiuno. ¿Por qué retrocedes a la Edad Media?

¿Realmente piensas que hemos progresado tanto? ¿Realmente la gente está mejor ahora que antes?

Sí. Tenemos derechos básicos. No te tienes que preocupar que si el rey se levanta con el pie izquierdo te va arrojar al calabozo. Sé que las cosas no son perfectas, pero ciertamente han mejorado.

Pero la gente aún es infeliz.

No voy a negar eso.

¿Tú eres infeliz?

Tampoco voy a negar eso.

Pero de acuerdo a los valores de la sociedad, tú deberías ser la persona más feliz. Eres sofisticada, liberada, inteligente, educada, con buena carrera y no careces de cosas materiales. Y aún así, no eres feliz.

Sé qué más vas a decir. Como no soy feliz, por lo tanto, tengo que encontrar a D–os y volverme una judía ultraortodoxa.

No te voy a decir lo que tienes que hacer, pero te voy a decir que tus percepciones al respecto, están equivocadas.

¿Por qué?

Para empezar, no hay tal cosa como un judío ortodoxo y menos un judío ultraortodoxo.

¿A qué te refieres? Si no hay algo así, ¿cómo te llamas a ti misma?

Me llamo una judía que está haciendo su mejor esfuerzo por cuidar la Torá. Si debes usar una etiqueta, soy una judía que sigue la Torá. La palabra ‘ortodoxo’ fue usada por primera vez en el siglo XIX por los judíos que querían pasar por progresistas. Así que etiquetaron a aquéllos que permanecieron fieles a la Torá como ‘ortodoxos’. En la actualidad, los ideales de aquellos judíos autoproclamados ‘progresivos’ parecen arcaicos y obsoletos. No obstante, la etiqueta que pusieron a los judíos que eran leales a la Torá permaneció. ‘Ortodoxo’ denota a alguien estricto, de mente estrecha y puritano. El término ultraortodoxo es claramente prejuicioso en la forma en que la mayoría de la gente lo usa. Si yo fuera negra, ¿te sentirías tan libre para clasificarme con una etiqueta que insinúa algo negativo?

No me había dado cuenta que era insultante para ti. Lo siento.

Es insultante para mí porque sé que no es verdad. He conocido a tantos judíos ‘ultraortodoxos’ brillantes, bien educados, bondadosos, que escuchar a alguien englobar a todos los judíos de Torá en una clasificación que insinúa estrechez mental, me duele. Y me duele porque sé que las víctimas reales de este prejuicio son los judíos seculares que sólo tienen un entendimiento superficial. Etiquetas como ésa, hacen que los obstáculos para la unión de nuestro pueblo sean mayores. Créeme, no tienes idea de lo que estas personas son. Te han inculcado —abierta o discretamente— con distorsiones, verdades a medias y mentiras absolutas acerca de sus creencias y prácticas.

Nuevamente te pido disculpas si te he insultado a ti o a ellos.

No te sientas apenada. Sólo ven conmigo este fin de semana al seminario. Mientras tengas la mente un poco abierta, será muy informativo.

¿Va a haber otros como yo?

Definitivamente. Y yo voy a estar ahí. Podemos platicar en el tiempo libre.

¿Cuánto días dura?

Empieza el jueves en la noche y termina el domingo.

Si no fueras mi hermana menor, no lo pensaría ni siquiera dos veces. Pero dame un día o dos y te contesto.

Ó Ó Ó

No soy una persona espiritual. Si quieres saber la verdad, todo lo que pienso es en cómo hacer dinero.

Pero hay más en la vida que el dinero.

Sí, pero si tú hubieras sido criado como yo, viendo a tus padres luchando toda su vida para todavía tener que pedir prestado del sueldo del siguiente mes, actuarías en la misma forma. Todas estas cosas de la religión son bonitas, pero la realidad es el dinero.

Eres tan típico.

Sí, lo soy. ¿Qué opinas de más de un millón de israelíes como yo que viven fuera de Israel?

¿Qué hay acerca del idealismo?

Si yo tuviera un millón de dólares, podría darme el lujo de ser un idealista. No soy del tipo de los que necesitan mil millones de dólares. Si yo hiciera mi millón, regresaría. Soy un creyente. Y es por eso que no necesito este seminario. ¿Qué me dirá el rabino? ¿Que existe un D–os? Eso yo ya lo sé. Si te contara tan solo algunos de los milagros que vi cuando combatí en contra de los árabes, no me lo creerías. No necesito que nadie me convenza de que existe un D–os.

Sé que eres un creyente, pero ¿cuánto sabes?

¿Saber?

Sí, tú crees, pero realmente ¿cuánto sabes acerca de tu religión?

Israel no es como Estados Unidos. Aun los no religiosos en Israel estudian la historia y las costumbres judías. Es como una segunda naturaleza en nosotros.

Ése es el problema. En el mejor de los casos es una segunda naturaleza. Nunca fue abordado con convicción, así que nunca fue entendido más que superficialmente,

Créeme, entiendo más cosas que la mayoría de la gente.

Sé que has experimentado mucho, pero ¿alguna vez realmente te sentaste, estudiaste y te enfrentaste con tu religión? ¿Alguna vez trataste de obtener un entendimiento más profundo por tu cuenta?

Ya te lo dije, no soy una persona espiritual.

En otras palabras, tú no quieres pensar.

Yo ya pienso mucho. Hasta los rabinos dicen: Yosif daat, yosif majov, ‘aumentas en conocimiento, aumentas en dolor’.

Quizá no estás pensando correctamente.

Escucha amigo, si yo me la pasara pensando desde hoy hasta que tuviera 120 años, no me ayudaría a hacer dinero. Y sin dinero, una persona no puede vivir. Hasta los rabinos necesitan dinero.

No estoy diciendo que dejes de trabajar. Todo lo que estoy sugiriendo es que renuncies a un fin de semana, sólo uno. Te puede dar más de lo que piensas.

¿Para qué lo necesito?

¿Para qué lo necesito? Todos los israelíes tienen la misma expresión. ¿Es qué acaso todo gira alrededor de ti y de tus necesidades?

¿Por qué más lo haría? ¿Por ti?

No lo hagas por mí. Hazlo por ti.

Pero yo no lo necesito.

Entonces hazlo por el D–os en el que dices creer. Él te hizo un judío. Un judío no puede lograr realmente lo que es, si es un ignorante. Tienes buenas excusas, como la de que no eres espiritual, pero en el fondo sí debes serlo. Todos debemos serlo. De lo contrario, D–os no nos hubiera dado almas. Aquí tienes el número telefónico de la organización que está dirigiendo el seminario y la dirección donde se va a efectuar. Si quieres permanecer como un judío ignorante, ésa es tu opción. Pero este seminario es la oportunidad para profundizar en ti mismo, en tu yo judío. Tal vez te des cuenta que no gira alrededor de lo que crees que necesitas en el momento.

Ó Ó Ó

¿Qué pasa contigo? Ya fue suficientemente malo perder el negocio. Pero me digo a mí misma, por lo menos todavía tenemos nuestro matrimonio. Después empezaste a volverte muy solitario y hasta insultante. Aún así, racionalicé y dije, por lo menos tenemos nuestra familia. Y ahora no puedes ni hablar con los niños sin ser crítico. ¿Qué te ha pasado? Y no me interesa si me gritas o me reprendes. Ya estoy harta de esto. Pero ¿qué te pasa? ¿Cómo te puedes mirar al espejo?… Bien, dame la espalda… Espera, ¿a dónde vas? ¿A dónde vas?

No lo sé.

¿A qué te refieres?

Simplemente no lo sé. Pero tengo que marcharme lejos.

No te vayas.

¿Para qué me quedo? Dime que además de ser un pésimo proveedor también soy un pésimo esposo y padre. Y tú, ¿quieres saber algo? Estás en lo cierto. Tú estás absolutamente en lo cierto. Lo sé mejor que tú.

Pero ¿a dónde vas a ir? ¿Vas a regresar?

No lo sé.

Espera, no te vayas. Podemos resolver esto.

No como está. No como yo estoy.

Pero ¿a dónde vas a ir?

A cualquier parte.

Por lo menos dime a dónde vas.

Ya te lo dije: no lo sé.

No te vayas así. Por lo menos habla con uno de tus rabinos o amigos.

No hay nada que decir.

Eso no es verdad.

Entonces tú dime: ¿qué es lo que hay que decir?

Hay mucho que decir.

¿Cómo qué?

No lo sé. Pero no puede ser que Hashem no le dé opciones a la persona, Siempre hay algo que hacer.

Si lo hay, yo no sé qué es. Me voy.

Escúchame, no te vayas… ¡Espera! Toma este número telefónico. Mi amiga me dijo que su rabino va a estar en este número durante todo el fin de semana dando un seminario. Se le conoce por ayudar a la gente. Puede ser que te dé algún buen consejo.

Ó Ó Ó

Pero ¿no es un seminario para principiantes?

No solamente. Además, estos seminarios son realmente para todos. Es sólo que diferentes personas los experimentan en diferentes niveles.

Pero me voy a sentir tan incómoda.

¿Por qué lo dices? Te puede dar la elevación que necesitas.

Pero yo no quiero ir. Y es definitivo.

Es por …

Sí, ésa es la razón,

Pero cariño, no puedes paralizarte solamente porque otros tienen hijos.

¿Para qué debo torturarme más de lo que ya estoy?

¿Qué hay de ir por mi bien? Yo lo necesito.

Entonces ve tú.

Pero debemos hacer las cosas como una pareja. ¿Qué bien me hace a mí si yo me siento mejor pero tú todavía estás herida? Como sea que tú te sientas me afecta enormemente. Por favor, vamos por mí.

¡No! ¿No puedes entender? ¿No logro llegar a ti? No puedo soportar estar cerca de parejas con hijos… Ves, me hiciste decir algo de lo que ya estoy arrepentida. ¿Pero qué puedo hacer? Es la forma en que me siento. Siento puñaladas de dolor cuando otras personas tienen simjá. Me corroe. Nadie sabe lo mucho que me daña. ¡Nadie!

No puedes seguir viviendo así. No podemos seguir viviendo así. Quizá este seminario nos ayude.

¿Nos ayudará a tener hijos? ¿Voy a quedar repentinamente embarazada?

Vamos, tú sabes que ésa no es la razón para asistir.

¿Cuál es entonces la razón? ¿Para calmarme? ¿Para hacerme sentir bien cuando realmente me siento pésimo?

Quizá obtengas un entendimiento que te coloque las cosas en otra perspectiva,

Bien. ¿Y después qué? ¿Seré feliz?

Tal vez.

No quiero estar feliz si no tengo hijos. ¿Por qué otras personas tienen derecho a esa experiencia y yo no? No quiero que me tranquilicen.

No estoy diciendo que vayas para que te tranquilicen.

Entonces ¿para qué me estás diciendo que vaya?

Por nosotros. ¿No piensas que yo también quiero un hijo tanto como tú? Yo también siento punzadas cuando veo padres con sus hijos.

Es diferente para un hombre.

Tal vez, pero también me siento muy herido. Necesito obtener cierta perspectiva. Necesito sentirme mejor acerca de nuestra situación. No quiero ir solo. Quiero que estés a mi lado.

Si tan solo supiera que nos va a ayudar…

Querida, sé lo mal que te sientes. Créeme que lo sé. ¿Y no crees que Hashem también lo sabe? Yo no sé por qué tenemos que sufrir de esta forma, pero debe haber una razón. Vamos con mente abierta. Tal vez escuchemos algo que nos ayude. Tal vez estamos sufriendo así solamente para que vayamos este fin de semana.

Eso suena descabellado.

No lo sé. Tal vez es así o tal vez no. Yo sólo tengo una buena corazonada acerca de esto. Te he estado diciendo desde hace mucho tiempo que debemos tomar el control de nuestra vida emocional. Ésta puede ser justamente la oportunidad para ayudarnos a empezar. Probablemente obtengamos más de lo que perdamos. ¿Qué dices?

No es una decisión fácil para mí.

Para mí tampoco.

Si es tan importante para ti, déjame consultarlo con la almohada. Veré si me siento diferente por la mañana.

Gracias. Eso es todo lo que pido.

Por Rav Azriel Tauber


UN MANUAL PARA LOS CINCO PLANOS DE EXISTENCIA

El uso de TOC (Teoría de restricciones) en las emociones parte IV

Por Ramón Ruiz Quezada

     En anteriores ocasiones hablamos de la metodología TOC y su uso en nuestro mundo emocional. Hoy descubriremos los pasos de la metodología en forma simple y para esto usaremos un caso.

     Antes de comenzar, listaremos los pasos de esta metodología tal como el Dr. Ely. M. Goldratt los define:


·       IDENTIFICAR la restricción del sistema.

       (Es decir, Identificar lo que emocionalmente nos impide que ACCIONEMOS diferente)

·       Decidir como EXPLOTAR la restricción del sistema.

       (Significa, Decidir, como manejar y cambiar  las emociones que nos limitan)

·       SUBORDINAR el sistema a la decisión anterior.

        (Significa, crear un plan de vida, que mejore nuestro mundo emocional y nuestra forma de accionar  cotidianamente)

·       ELEVAR la restricción del sistema.

        (Significa, crear un plan que evite regresar al estado anterior y se anticipe a  probables  recaidas)

·       No permitir que la INERCIA se vuelva restricción.

        (Significa, Evitar siempre regresar al estado anterior que nos dañaba)


        El sistema que estamos estudiando es nuestro mundo emocional. El mundo de las emociones (Ietzirá)[i]. Recordemos que éste es uno de los cinco planos de existencia que poseemos (plano físico, social, emocional, mental y espiritual).

        Para identificar “la restricción de nuestro mundo emocional” debemos comenzar explicandolo en la forma más simple. A ésto se le llama la descripción de la realidad actual de “éste mundo emocional”.

         Aquí tendríamos que describir nuestro mundo emocional. Ejemplificaremos ésto con un caso. Así que regresaremos al caso número dos que mencionamos en ésta “serie del mundo emocional y TOC”.

 

Paso 1,  IDENTIFICAR LA RESTRICCIÓN DEL SISTEMA.

        De lo que se trata es de hacer una descripción exacta de la vida de la persona a través de “herramientas que nos permitan ser lo más objetivos y concretos”. TOC hace uso de  “las relaciones de causa – efecto (silogismos)” que explican y demuestran en forma exacta el caso estudiado. Es decir une relaciones de causa efecto que van describiendo la realidad emocional actual de la persona. Con esto podemos definir un enunciado simple que muestra en forma sencilla que es lo que ocurre en la vida de la persona. Lo que surge  de la metodología cientifica es un enunciado como el que se cita a continuación:


        Ejemplo:

    La mujer 2, es una joven profesionista. Es exigente en su trabajo y en sus relaciones por lo que siempre esta a la defensiva como si alguien o algo estuviese intrigando hacia ella. Pareciera que es una reformadora de los demás. Incluso de su pareja a la cual ha elegido abandonar ya que sus expectativas las ha puesto delante de sus metas personales y profesionales. No confía mucho en que su pareja le haga feliz. Bueno, tampoco confió de sus anteriores parejas. A veces piensa si sería mejor tener “amigos” que le den “seguridad”. Para ella y para su familia por supuesto. Aún así le gustaría saber como dejar de tener esas emociones  de desconfianza y encontrar a “alguien” que la haga sentir segura ó por lo menos tener una forma de vida “diferente”. Desconfía de las invitaciones para participar en asociaciones de beneficencia.


    Esta "REALIDAD ACTUAL" se puede describir con un mapa relaciones de causa efecto. Es decir, una lista que muestra lo que le ocurre a la persona, indicando que emociones iniciales causan un posterior efecto emocional. Así se hacen evidentes los “efectos indeseables” en el mundo emocional de la persona. Es decir, aquello que la persona siente que "ocurre", no sabe porque ocurre, y sin embargo le cuesta mucho trabajo modificarlo. Con esto logramos listar  "efectos ideseables". Y tener una tabla como la que muestro a continuación ( ver, Tabla I). Los efectos indeseables encontrados deberán ser clasificados en “dos categorías”. Más aún, deberán estar listados en orden causal. Así listaremos inicialmente el que origina a los posteriores “efectos indeseables”. (Vea la secuencia Ei1, Ei2, Ei3…. de la tabla I). De esta forma, la lista generá dos ideas básicas que describen "las dos necesidades o carencias emocionales de la realidad actual de la persona".

Esto se muestra como sigue:

Tabla I (Efectos Indeseables MUJER 2)

Clasificación de Emociones relacionadas  a una idea “B” (efectos indeseables)


Clasificación de Emociones relacionadas  a una idea “C” (efectos indeseables)

 

Actitud  fugaz en  las relaciones amorosas (Ei5)

Algunas veces hay cambios de humor inesperados, ansia por escapar del hogar o de lo establecido (Ei6)

 El amor de pareja se deja en desconsideración en relación a los propósitos y acciones elegidas (Ei4)

Algunas veces hay sospechas de los demás y actitud defensiva con la consecuente depresión y ansiedad (Ei5)

Exigencias elevadas en el matrimonio, en asociaciones y en el trabajo en forma desconsiderada (Ei3)

Algunas veces
hay falta de lógica,
Ideas precipitadas que cambian con facilidad. (Ei4)

Algunas veces  quiere transformar el entorno a sus ideas a través de cualquier medio honorable o no honorable (Ei2)

Algunas veces hay Fobias del inconsciente y ansiedad con algún complejo de inferioridad que busca ser mártir para suplir carencias (Ei3)


Algunas veces hay personalidad agresiva queriendo transformar a los demás en ves de transformarse a si misma (Ei1)

 

Algunas veces hay Emociones  o fijaciones del pasado que ocasionan depresiones con  preocupación inconsciente (Ei2)

 Algunas veces conserva recuerdos inconscientes del pasado que le generan malentendidos y nerviosismo (Ei1)

 

Algunas veces hay personalidad agresiva queriendo transformar a los demás en ves de transformase a si misma (Ei1)

 

Algunas veces conserva recuerdos inconscientes del pasado que le generan malentendidos y nerviosismo (Ei1)

RESTRICCIÓN O CARENCIA EN SU MUNDO EMOCIONAL , LO QUE NO POSEE Y NECESITA CONOCER :

ENTENDER DE DONDE SURGE

 UN ENTORNO FAVORABLE

ESTRICCIÓN O CARENCIA EN SU MUNDO EMOCIONAL , LO QUE NO POSEE Y NECESITA CONOCER :

ENTENDER DE DONDE SURGEN LAS  ASOCIACIONES FAVORABLES

 

Paso 2, DECIDIR COMO EXPLOTAR LA RESTRICCIÓN DEL SISTEMA.

        Bien, hasta aquí construimos la lista de los "efectos indeseables" del mundo emocional en la persona. Es decir, lo que explica el mundo emocional de la persona. En otras palabras se le llama efectos de la restricción del mundo emocional. En éste caso, pertenecen a la mujer No 2 de nuestros tres casos presentados al inicio de esta serie de TOC y el mundo emocional.

    Ahora debemos de “idear” la forma de usar esta información para generar una solución. A esto se le llama “Explotar la restricción del sistema”.

    El primer paso es ordenar la información en un enunciado breve. Esto es util para construir lo que se llama "nube generica" esta explica la causa única al problema del mundo emocional de la persona. Lo representaremos gráficamente como se muestra en la tabla II

    El enunciado es como sigue:

        La mujer dos DESEA el entorno y las asociaciones personales favorables para ella. Al tratar de poseer un entorno favorable opta por mostrarse inadaptable. Mientras que para poseer relaciones personales favorables Se muestra adaptable. Y como podemos ver estas dos posturas o estrategias (ADAPTABLE VS INADAPTABLE) de la mujer 2 son inversas ó están en conflicto.

        Gráficamente se muestra como sigue:

      (Tabla II, Nube genérica)

 


 A = B + C – ( D+D’ ) = SOLUCION

        Como podemos ver, ésto es el diagrama matematico de un conflicto de las emociones o el mundo de Ietzirá de la mujer dos. cabe destacar que el conflicto existe porque hay una, DOS O VARIAS suposiciónes falsas (S1 Y S2 en la tabla II), fundamentando una de las dos posturas (Ser inadaptable o mostrarse adaptable). Esa es la causa de la existencia de este conflicto del mundo emocional. Asi es que siempre que existe un dilema mental, es indicación clara de que existen suposiciones falsas fundamentano alguna de nuestras opciones.

        La solución y la respuesta a ¿Cómo explotar la restricción del sistema emocional? Surge a partir de tres vías. Tal como lo explicamos en las sección III de esta serie TOC en el mundo emocional.

        De acuerdo a la Teoría de restricciones, el conflicto mental que tiene repercusiones en el plano emocional existe porque hay suposiciones falsas fundamentando cada una de las posturas que elije la persona.

          La solución se encuentra: CORRIEGIENDO CADA UNA DE LAS SUPOSICIONES FALSAS QUE FUNDAMENTAN LAS POSTURAS ELEJIDAS POR LA PERSONA

 

     Para hacer esto ejemplificaremos con nuestro caso (mujer 2). Asi que la corrección a las suposiciones falsas de la mujer dos es como sigue:

    La primer parte de la solución se encuentra con el siguiente enunciado: Si para tener Asociaciones favorables Tú dices que debes de ser adaptable. Responde ¿Por qué? Y la mujer 2 seguramente dirá argumentos concretos pero FALSOS.

    Ejemplo: Yo creo que para tener Asociaciones favorables debo ser adaptable porque el mundo es peligroso. ESTO POR SUPUESTO ES FALSO. NO ES VALIDO PONER LA CAUSA DEL PROBLEMA FUERA DE LA MUJER 2. LO CORRECTO SERÍA DECIR QUE LA MUJER DOS NO SABE COMO TENER ASOCIACIONES FAVORABLES. DE ESTA FORMA SE MUESTRA ADAPTABLE Y SE ASOCIA CON TODO MUNDO SIN PENSAR SI ES FAVORABLE PARA SUS CINCO PLANOS DE EXISTENCIA O NO. LA ACTITUD DE LA MUJER 2 NO FUNCIONA PARA SELECCIONAR Y PRESERVAR ASOCIACIONES FAVORABLES ¿Puedes corregir éste argumente de la mujer 2? Seguramente si. Hay muchos temas en el sitio fulvida.com y serjudio.com que nos explican como seleccionar y preservar asociaciones favorables, trascendentes. No se trata de listar ésto último sino más bien de mostrar como funciona ésta estrategia para manejar los dilemas profundos de nuestra mente y que nos ocasionan conflictos emocionales y una distorsión posterior en nuestros planos de existencia.

La segunda parte de la solución se encuentra con el siguiente enunciado. Seguramente ya intuyes cual es; Dice así: Si para tener un entorno favorable TÚ dices que debes mostrarte inadaptable. Responde ¿Por qué? Y la mujer 2 seguramente dirá argumentos concretos pero FALSOS.

    Ejemplo: Yo creo que para tener un entorno favorable debo de ser inadaptable porque solo cambiando a quién me rodea consigo un entorno seguro.

     ¿Sabes como corregir esta suposición falsa? Recuerda que las soluciones deben de provenir desde las enseñanzas sabias, objetivas, verdaderas. Una forma de resolverlo es Revisando los documentos de serjudio.com y de fulvida.com e identificar cuál es la solución a ésta suposición falsa. Otra es preguntarle al Lic. Yehuda. Hay muchas más, pero elije la que desees y  que mejor corrija ésta suposición falsa.

 

La tercer parte de la solución es más compleja y resuelve de una sola vez todo el dilema mental. Se encuentra pronunciando la respuesta para el siguiente enunciado: ¿Por qué  vives entre ser adaptable e inadaptable? La respuesta más indicada deberá responder a: ¿Cómo hago para poseer el entorno y las asociaciones favorables? El enunciado de la grafica definido con la letra “A”.

    Así ya estamos en posibilidad de generar la solución a la dinámica emocional de la mujer dos.

    De esta forma logramos obtener TRES correcciones al plano MENTAL de la mujer 2 y entonces podemos buscar Un programa de acción cotidiana para “Eliminar de su vida lo que la daña mientras equilibra sus demás planos de existencia

 

    Cabe destacar que a través de Teoría de restricciónes localizamos la raíz, el conflicto al final de la mente de la persona. La causa de sus posteriores dilemas mentales. Es ir a lo mas profundo e identificar no un dilema mental aislado. Mas bien la causa de todos los dilemas mentales pensados por la persona y que solo son efecto de un primer dilema mental. Así, TOC resulta muy eficaz a la hora de mostrar a la persona una corrección a su plano mental lo cual genera un instantaneo reparo al  plano emocional. La solución derivada de esto, se implementa con ACCIONES en el plano físico. Son acciones concretas que situan a la persona en una nueva existencia que SANA practicamente sus demás planos. Pero lo más importante es que la corrección al problema raíz, es decir la corrección a las suposiciones falsas se hace desde premisas valiosas. Estas provienen desde los fundamenteos espirituales de la Torá.

    Así tenemos que TOC actua en los cinco planos de existencia. Ingresa al plano mental identificando "la tendecia hacia lo negativo". Corrige el plano emocional  al  mostrar  correción a los pensamientos falsos que surgieron de nuestra mente. Genera una nueva existencia en la persona al implemental ACCIONES surgidas de la corrección al plano mental. Y finalmente nos revela que la corrección al plano mental surge desde premisas que estan sostenidas en la Torá y alimentan nuestro plano espiritual.


Paso 3,  SUBORDINAR EL SISTEMA A LA DECISIÓN ANTERIOR.

     Este paso es muy delicado. Ya que implica que la solución elegida debe de contemplar todos los “pre-requisitos” (todos los detalles) para que la persona acepte facilmente ACTUAR en forma diferente. En otra palabras existira una subordinación del mundo emocional de la persona a la correción realizada en el plano mental.

    Algo importante es lograr que la persona acepte ACTUAR sin resistencia. No se debe imponer la solución derivada, sino más bien otorgar un nuevo estilo de vida más sano y sencillo para IMPLEMENTAR por la persona. Un programa de acción cotidiana para “Eliminar de su vida lo que la daña mientras equilibra sus demás planos de existencia. Una nueva forma de actuar en lo cotidiano y que satisfaga las dos necesidades encontradas a la vez que anula las estrategias de “adaptable o inadaptable” en la mujer 2. Si ésta  regresa al mismo patrón es un indicio claro de que la solución propuesta NO es la correcta. De que el estilo de vida elegido NO resolvió la “NUBE GENERICA”. Por lo que NO habrá una subordinación de su plano emocional a la decisión que surgió de la solución al conflicto.

Paso 4,  ELEVAR LA RESTRICCIÓN DEL SISTEMA.

        Indica evitar la INMOVILIDAD, es decir. Una vez implementada la solución la persona se sentirá mejor.  Y deberá mantener este proceso. Esto eventualmente la llevara a ir cambiando su estilo de vida. Lo cual resultará en un enfrentamiento a situaciones que podrían hacer que se ocasionara un regreso al estado inicial. Hay que adelantarse a nuevas restricciones que en realidad son viejos patrones de conducta.

        Así logramos:

Paso 5,  NO PERMITIR QUE LA INERCIA SE VUELVA RESTRICCION.

        Cuando ya se conoce el mundo emocional, se maneja, y se sabe como eliminarlo. es importante consierar que puede existir cierta INERCIA a patrones viejos de conducta. Hay que PARAR EN LO QUE DAÑABA. Detenernos para ACCIONAR SOLAMENTE con la solución derivada de “la nube genérica”. De no hacerlo, la INERCIA debida a los hábitos, vicios, estilos de vida, costumbres derivadas de la “íntima decisión cotidiana” provocará que exista mucha dificultad en implementar un nuevo estilo de vida.

        Aun si se implemento la solución exitosamente puede existir una “tendencia natural en nosotros” hacia lo que nos perjudico inicialmente. Es decir una INERCIA. Lo cual es importante considerar para de esta forma IDEAR una mejor solución. Así, MEJORAR nuestra ESTRATEGIA y lograr VENCER LA INERCIA QUE NOS REGRESARÍA AL ESTADO ANTERIOR.

En suma los cinco pasos para esto son:


·          IDENTIFICAR la restricción del sistema. (Es decir, Identificar lo que emocionalmente nos impide que tengamos una vida diferente)

·          Decidir como EXPLOTAR la restricción del sistema.(Decidir, como manejar y eliminar  lo que emocionalmente nos limita)

·          SUBORDINAR el sistema a la decisión anterior.(Crear un plan de ACCION que mejore nuestra existencia)

·          ELEVAR la restricción del sistema.(Crear un plan que evite regresar al estado anterior y se anticipe a  probables  recaidas)

·          No permitir que la INERCIA se vuelva restricción. (Crear en el plan elegido lo que "Evitará" regresar al estado anterior que nos dañaba)


    Teoría de restricciones no solo se usa en el plano emocional. De hecho éste es uno de los escazos documentos que hacen énfasis al plano emocional de la persona. El caso fue diseñado por un servidor. La mayoría de sus aplicaciones son dirigidas al mundo de los negocios. En producción, mercadotecnia, ventas, finanzas, proyectos, etc. En este caso hacemos referencia al plano emocional.


        Si estás interesado en aprender más de TOC para tu empresa o negocio puedes contactarme.  O si quieres que trabajemos juntos en la construcción de una solución para tu mundo emocional escríbeme a noajidasmexico@hotmail.com
 

 Ramón Ruiz Quezada

Ingeniero Industrial

Posgrado en Administración de Negocios por La Trobe University, M. Australia.


 

Documentos relacionados:

http://fulvida.com/identidad/breve-estudio-del-plano-emocional-a-traves-de-toc-teoria-de-restricciones

http://fulvida.com/identidad/breve-estudio-del-plano-emocional-y-participacion-noajida

http://fulvida.com/identidad/breve-estudio-del-plano-emocional-y-participacion-noajida-2

http://es.wikipedia.org/wiki/Silogismo

Documentos relacionados a TOC:

http://en.wikipedia.org/wiki/Eliyahu_M._Goldratt  

http://en.wikipedia.org/wiki/Theory_of_constraints

http://www.tocico.org/i4a/pages/index.cfm?pageid=1

http://en.wikipedia.org/wiki/The_Goal_%28novel%29


Busqueda de libros sobre Thinking Process "La herramienta del pensamiento"

http://en.wikipedia.org/w/index.php?title=Special%3ABooksources&isbn=1574441019


[i] El mundo de Ietzirá, ó Yetzirah. El mundo de la formación, corresponde al plano de las emociones concientes e inconsciente. Un texto relacionado es : Yehuda Ribco, CTerapia “Las dimensiones del crecimiento” 2002, http://serjudio.com/cterapia/cab6.htm

Resp. 110 – Compromiso y crecimiento

Moré Yehuda, tenga usted buen tarde,

Se que anda muy ocupado, asi que tratre de ser conciso.

En un mail pasado le comente acerca de una relacion que tengo con una amiga, ella es separada hace ya casi dos años (no se ha concretado el divorcio legal), vive con su hijo, y somos muy amigos, muy cercanos, alguna vez tuvimos un encuentro sexual breve, pero yo me aparte para alejarme del error (fue solo una ocasion).

Yo la considero una buena mujer, buena madre, y me atrae bastante (tiene
39 años, y yo 30).

Leyendo los siete colores del arcoiris, habla que la normatividad para los
no-judios, es que no se requiere de ningun documento para que ella este
divorciada. Ademas de que no tiene contacto sexual con su marido hace
tiempo, y que ella fue la que decidio divorciar al marido. Lo que la hace
una mujer libre.

Y , por mi parte, encuentro que quiero un hijo, (varios), y pensando en que
ella seria la madre de uno de ellos, estaria escogiendo una buena madre y
mujer. Ademas de que la relacion entre nosotros dos es de respeto y de
entendimiento.

De yo tener un contacto con ella, no usaria un metodo anticonceptivo de
barrera, y estaria dispuesto a asumir la responsabilidad de un hijo.

Pero tambien, creo que quiero mas hijos, y que quiza ella no los pueda tener
conmigo, asi que en algun momento pensaria en tener otra esposa para tener mas, todo dentro de la confianza y sin acudir al engaño

Y la edad es para mi algo de tabu, pero no por verguenza, sino por el tiempo
de fertilidad, de ella que no esta muy lejos de terminar.

More, por favor, digame, ¿estoy en un error, al querer estar con ella
intimamente, contando con todo lo anterior?

A ella le encanta la idea de tener un hijo conmigo. Y yo estoy dispuesto a
tenerlo, ser el padre, con todo lo que implica.

More, gracias una vez mas por la luz.

Un Abrazo,

Pablo M.
Guatemala

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Falsedades probadas, cristianismo y prensa

Les transcribo este texto interesante obtenido de www.luzmasluz.org, pagina de ciencia, el fin es para que nos demos cuenta de lo aconteciente en nuestra sociedad y que medidas podemos tomar ante las tendencias y las malas practicas.

Falsedades probadas, cristianismo y prensa
 
Ustedes saben que tanto la prensa comercial escrita y la no escrita, sobre todo la televisiva dentro de ésta última, que en nuestro país está enteramente controlada por la conocida como la “mafia blanca”, el Opus Dei, secta dentro del cristianismo católico que a su vez controla y maneja la llamada Santa Sede del Vaticano actual; como esta misma iglesia cristiana católica y las demás sectas cristianas agrupadas en la denominación de evangélicos o protestantes, han pretendido configurar un mito de erigirse y ofertarse como partidarios y ejemplos incuestionables de la decencia, la honestidad, la honradez y de promotores de la más idónea moral. Sin embargo, cada vez que son confrontadas sus acciones, no importa la actividad de que se trate, con estos valores mencionados, resulta que en casi la totalidad de los casos, por no decir en todos, no son capaces de exhibir en sus actitudes y acciones estos mismos valores de los que presumen y  hasta se autoerigen en sus sensores. ¿Y cómo es posible que esto suceda así?
Aunque sabemos la respuesta a esta interrogante, porque sabemos las causas directas de tanta deshonestidad e ignominia de quienes en cualquier rincón del mundo que se encuentren, cristianismo y prensa mercenaria, son capaces siempre de no respetar la objetividad de los hechos, a quienes la protagonizan, en fin en no respetar la objetividad de la historia, manipulando la realidad para ocultar la verdad y seguir así haciendo de las suyas cada vez en mayor escala. ¿Cómo es posible que sean tan caras duras y sigan atreviéndose a presentarse ante la opinión pública como partidarios de la decencia, la honestidad, la honradez y promotores de la moral, así como proclamarse jueces supremos de la sociedad, sensores cuyas palabras son irrevocables y no pueden ser contradichas?
Ahora mismo, por ejemplo, en el mundo e incluso en nuestro país se está suscitando un vigoroso auge en la lucha de la humanidad en contra de ese virus que se conoce como cristianismo, que como un virus desconfigura, como lo hacen los virus en las computadoras o dentro del organismo humano, por ejemplo, todo programa o sistema que pretenda alcanzar el propósito de que el hombre sea dueño de su propio destino; sin embargo, lo que está sucediendo en el mundo en contra de la superchería en general, la intolerancia religiosa, la opresión y la explotación y a favor de la ciencia, la prensa mercenaria de nuestro país, tan moralista y honesta de que se las da, y la iglesia cristiana católica que tan decente y honrada dice que es, están descaradamente ocultando toda la información al respecto. Escuchen para que se den cuenta del alcance de esta ignominia.
En el canal 4 británico, es decir de Inglaterra, se inició a mediados de enero, entre los días 10 y 12 de este año 2006, una miniserie dirigida por el científico Richard Dawkins, presentada en dos capítulos, titulada con la interrogante: "¿Raíz de todos los males?", en la que se ridiculiza la fe y se califica la enseñanza religiosa de "abuso infantil". La primera parte, titulada "La desilusión de Dios", arremete con especial virulencia contra el catolicismo. En la segunda parte, titulada "El virus de la fe", Dawkins califica la enseñanza religiosa en los colegios de "abuso infantil" porque se adoctrina  a "niños inocentes con falsedades probadas". Por ello, defiende que "ha llegado la hora de cuestionarse acerca del abuso a la infancia inocente con ideas supersticiosas sobre el fuego del infierno y la condenación.” Y se pregunta: “¿No es estúpido que etiquetemos automáticamente a un niño pequeño con la religión de sus padres?", afirma el científico.
El 20 de diciembre del año pasado, 2005, ocultada también hasta el día de hoy por la prensa nuestra, el periódico “El País” de España publicó la información en donde se daba cuenta de la sentencia dada por un juez federal norteamericano, quien había decidido prohibir la enseñanza de la teoría del diseño inteligente en el pueblo de Dover, Pennsilvania, la que se impartía desde el 2004, a instancia de 11 padres de familia que habían denunciado este crimen anticientífico, y habían calificado también de abuso contra la niñez norteamericana el imponerle a los niños especulaciones e inventos supersticiosos y falsos y demostrados como tales, insistimos nosotros, así como que era violatorio de la constitución norteamericana que reivindica el Estado laico proclamando separación absoluta entre Estado y religión, convirtiéndose estos padres gracias a la sentencia del juez John E. Jones III, en los ganadores de la mayor batalla legal sobre la enseñanza de la evolución desde 1925, cuando la condena a un profesor por enseñar que el hombre procedía de un tronco común con el mono, se convirtió en una gran victoria en contra del oscurantismo fundamentalista cristiano norteamericano.
Pero ya antes, en el año 2000, como también hemos mencionado a ustedes, en términos parecidos se había manifestado  La Sociedad Astronómica Americana, que es el ente principal de los astrónomos profesionales en los Estados Unidos, que incluye hombres y mujeres de una amplia variedad de trasfondos étnicos, culturales e incluso religiosos, en documento que emitió como una declaración pública en la que fijaba su posición al lado de la ciencia de la evolución y oponiéndose al disparate creacionista del diseño inteligente, y entre otras cosas también calificó esta imposición a los niños de la interpretación religiosa sobre el origen de la vida, que es anticientífica, de coartación a los niños norteamericanos de parte de su patrimonio intelectual y que ellos podrían estar así en desventaja competitiva en un mundo donde la educación científica y tecnológica se está volviendo más y más importante, tanto económica como culturalmente.
Pero apenas, no bien había pasado un mes y medio de la sentencia de Dover, salió publicado, en el periódico el Tiempo de Italia, que el 27 de enero de este año 2006 sería ventilada en audiencia judicial la acusación presentada por Luigi Cascioli, un agrónomo jubilado y ateo de 72 años, contra el padre Righi por dos delitos incluidos en el código penal italiano: abuso de la creencia popular y sustitución de persona.
Ha dicho Cascioli  que "La Iglesia es culpable de abusar de la creencia popular y aprovecha su prestigio para inventar cosas y hacerlas pasar por hechos reales". Este caso habría pasado a un tribunal para ser juzgado, después que un juez de apelación en la localidad de Viterbo ordenara al sacerdote Enrico Righi comparecer para probar la existencia histórica de Jesucristo.
Cascioli es el primer hombre en Italia que plantea un juicio de esta naturaleza contra la Iglesia. "Jesús jamás existió. Dice Luigi Cascioli, quien es autor, además, de un libro titulado: “La fábula de Cristo”. El sometimiento al cura se produjo cuando el padre Righi contradijo a Cascioli en una publicación de su parroquia dando como real lo que plantea la fábula sobre el nacimiento y los padres del ser sincrético llamado Jesucristo, y por ello Cascioli decidió presentar una demanda ante la justicia, que un magistrado rechazó inicialmente,  pero que otro al que el italiano apeló en un tribunal superior decidió que el caso era admisible, por lo que el cura tendría que demostrar frente al tribunal lo que afirma o, de lo contrario, será culpable de violar lo que la constitución italiana castiga como abuso de la creencia popular e inventarse cosas y aprovechar el prestigio para hacerlas pasar como hechos reales.
En Bélgica, país también perteneciente a la Unión Europea, liberales han presentado un proyecto de ley que estipulan penas de hasta dos años de cárcel para aquéllos que "abusen de la credibilidad con el fin de persuadir de la existencia de hechos falsos, un poder imaginario o la historicidad de acontecimientos que nunca sucedieron", según se reseña en la publicación de Internet Análisis Digital. Estos ataques se suman a los de un grupo de expertos de la Unión Europea que en un informe proponen limitar el derecho a la "objeción religiosa de conciencia" en materia de aborto, eutanasia, matrimonio o venta de anticonceptivos.
Y mientras en Inglaterra se acusa a la enseñanza religiosa de "abuso infantil", en Estados Unidos se prohíbe el impartir los disparates creacionistas como el del “diseño inteligente” en las clases de ciencia de las escuelas públicas y en Italia se somete a un sacerdote por "abuso de la credibilidad popular" y se le exige demostrar la existencia de Jesucristo, mientras en Bélgica se debate una ley para encarcelar a quienes afirmen la existencia de "un poder imaginario o acontecimientos inexistentes", y expertos de la Unión Europea proponen limitar el llamado derecho a la "objeción religiosa de conciencia", aquí también, aquí en República Dominicana, está ocurriendo algo muy parecido a lo que acontece en la Unión Europea y los Estados Unidos, y que ha sido también ocultado por la prensa ésta del patio: en una pequeña población de provincia también se ha iniciado el movimiento. En Los Llanos, municipio de la provincia de San Pedro de Macorís, dominicanos residentes del Batey “Gotie” de esa localidad, en un hecho sin precedentes, han demandado a un cardenal y a dos curas extranjeros, por cometer “imprudencia, e inobservancia de las leyes dominicanas” por parte del Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, el Obispo Francisco Osoria Acosta y el cura Christopher Hartley que, en una infundada y temeraria querella, de fecha 11 de octubre del año 2005, falsearon los hechos acontecidos con el fin de éstos despojar a los dominicanos de sus derechos en su propio territorio para traspasárselos a haitianos, como parte de los planes de la iglesia cristiana católica vaticanista en el país de crear un enclave haitiano a lo Kosovo.
La importancia de este hecho radica en que en la República Dominicana, en particular, estas acciones desplegadas por los miembros de la Iglesia Católica tienen como base el ilegal, ilegítimo e inconstitucional Concordato, firmado en el año 1954 por el dictador Rafael Leonidas Trujillo Molina con el Papa de Hitler, Pío XII, y que fuera reforzado más adelante con el Vicariato Castrense (1958), para quitarle toda la naturaleza acorde con la defensa de la soberanía nacional que se les atribuye a las FF.AA., y con el contrato llamado Patronato Nacional San Rafael (1958) para definitivamente colocar en manos de la Iglesia Católica en general y de La Obra, el Opus Dei en particular, no sólo todo el sistema educativo nacional, sino la administración de hospitales, escuelas laborales, hogares de niños, asilos de ancianos, etc., con lo que prácticamente enajenan nuestra nación, colocándola en manos extranjeras, cuando es el pueblo dominicano, que es de quien emanan todos los poderes, tal y cual establece el Art. 2 de la Constitución de la República, desde antes del año 1844 ha desplegado luchas históricas para conquistar su nación y definir su país, para preservar su soberanía, su autodeterminación y su territorio, y en ese sentido está dispuesto a luchar contra todo aquél, llámese curas o potencias extranjeras, que quiera subyugarlo, enajenar su territorio y entregárselo a extranjeros.
 Y hasta en España, donde el reloj de la historia siempre anda retrasado, no obstante también se deja sentir ese incontenible movimiento humano a favor de la ciencia y en contra del cristianismo y sus diferentes sectas. Y así, encontramos publicado en Tribuna, publicación de Internet, sacado por nosotros en enero 23 de este año 2006, y extraído a su vez, del Diario de León, de España, calzado con la firma de Enríquez Javier Díaz Gutiérrez, la información que da cuenta de Una Propuesta para enseñar ciencia durante las misas, una «situación hipotética» que, obviamente, es una respuesta irónica de un grupo del profesorado ante la posición de la Iglesia Católica de ese país de imponerles a los españoles la asignatura de religión en la enseñanza oficial, que es por la que pasa y ha pasado la inmensa mayoría de los niños y niñas de ese país a lo largo de muchos años.
Y toda esta información, que no deja de estar manipulada por esa prensa que la reseña, y que responde de manera mercenaria a intereses muy particulares como los de los consorcios monopolistas imperiocapitalistas que la sostienen, por lo que la objetividad y honestidad ante los hechos no son su norte, y por eso se hace cómplice de todas las infamias abusando de la credibilidad popular y abusando de su prestigio para inventar cosas y hacerlas pasar como reales, como sería el caso de promover las falacias religiosas y cristianas en particular, en nuestro país la prensa llega al colmo de la desinformación, dedicándose a la tarea de sencillamente ocultarla, en una conspiración de silencio sin ejemplo.

¿Hacia donde llevamos el mundo?

Detengámonos un momento, cerremos nuestros ojos y soñemos; imaginemos el mundo que podrí­­amos llegar a tener si nuestras eternas leyes noajidas llegaran a predominar en nuestro planeta, si la Torá fuera la fuerza que guí­­a cada hogar, si las escuelas colegios y universidades guiaran sus enseñanzas bajo la luz moral de nuestras leyes y si los gobiernos infundieran los valores noajidas en todos y cada uno de sus proyectos dirigidos hacia la sociedad y hacia las relaciones con otros paí­­ses.

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Breve estudio del plano emocional y participación noajida.

El uso de  TOC (Teoría de restricciones) en las emociones. Parte II

 

 

Bien, comencemos con la descripción del mundo emocional de nuestros tres personajes reales. Estos personajes aceptaron participar en el estudio. Por respeto a las voluntarias, no publicaremos sus nombres y usaremos seudónimos.

 

                Al profundizar en las realidades de cada una de las personas mostraremos en enunciados breves lo que llamaremos “efectos indeseables”. Estos, describen lo que le sucede emocionalmente a la persona. Después clasificaremos estos “efectos indeseables” en dos categorías para finalmente llegar a construir lo que será la descripción de la causa por la cual existe un bloqueo en el mundo emocional el cual no le permite actuar en el plano físico o llevar a la realidad los propósitos ideados.

 

Primero tenemos que definir un concepto, el concepto de “Efectos indeseables”. Estos son eventos que ahí están y no sabemos ni como llegaron a nosotros pero ya nos causaron un malestar.

 

En este caso, son emociones de la persona y que tienen un efecto en su entorno. “Algunas veces ocurren, no sabe porque y se le dificulta mucho modificar o eliminar este proceso emocional, además de que entra en depresión debido a los efectos posteriores.”

 

Bien, ahora hagamos una descripción del caso. Haremos referencia a la vida cotidiana de tres mujeres. Estas mujeres abandonaron la idolatría pero sienten "efectos indeseables" en sus vidas cotidianas.

 

La mujer 1, es una joven profesionista, frecuentemente se queja de no tener tiempo entre su profesión y su hogar. Acepta que algunas veces ha tenido que involucrarse en relaciones con personas para “ascender” profesionalmente. Aún así, siente que sus metas son alcanzables pero pareciera no tener los recursos para lograr esto. Continuamente esta en competencia con su novio actual. Bueno, siempre ha estado en competencia con sus novios. Le gustaría hacer algo para cambiar estos altibajos emocionales y lograr “algo” en la vida sin sacrificar el hogar o sin ser tan esclava de su profesión abandonando siempre a sus seres queridos. No tiene tiempo para participar en actividades comunitarias o sociales y de apoyo.

 

La mujer 2, es una joven profesionista. Es exigente en su trabajo y en sus relaciones por lo que siempre esta a la defensiva como si alguien o algo estuviese intrigando hacia ella. Pareciera que es una reformadora de los demás. Incluso de su pareja a la cual ha elegido abandonar ya que sus expectativas las ha puesto delante de sus metas personales y profesionales. No confía mucho en que su pareja le haga feliz. Bueno, tampoco confió de sus anteriores parejas. A veces piensa si sería mejor tener “amigos” que le den “seguridad”. Para ella y para su familia por supuesto. Aún así le gustaría saber como dejar de tener esas emociones  de desconfianza y encontrar a “alguien” que la haga sentir segura ó por lo menos tener una forma de vida “diferente”. Desconfía de las invitaciones para participar en asociaciones de beneficencia.

 

La mujer 3, es una artista. Generalmente se pregunta porque nadie comprende sus expresiones de “arte”. Sin embargo eso lo olvida pronto y ya que no mantiene ninguna de las imposiciones que el entorno le ofrece. Incluso con su novio, bueno sus novios, bueno como ella lo define, su libertad de expresión artística. Sin embargo nota que abusan de ella, cae en depresiones y de repente, ella, quisiera saber como hacer para disfrutar de su vida de una manera diferente. No encuentra nada artístico en las Sheva Mitzvot benei Noah. 

               

                Estas personas son reales, tan reales como tu y como yo. La pregunta es, ¿Podrán cumplir las sheva Mitzvot Benei Noah? ¿Por qué?, ¿Se las deberemos de imponer?, ¿La mujer uno tendrá tiempo para participar en Fulvida?, ¿La mujer tres podrá vivir cerca del primer mandamiento noajída? ¿Cómo hacer para desbloquear emocionalmente a estas mujeres y otorgarles una vida dentro de los siete principios de Noe? Recuerda que hay un proceso emocional en ellas y no lo han podido cambiar. ¿Podrías tu amigo noajída sugerir alguna cura desde el Tanaj? ¿Desde los siete?

 

 

Bien, Hagamos referencia a lo que nos dicta la Teoría de Restricciones y su uso dentro del mundo emocional de las personas:

 

·         Primero mostraremos una tabla en donde listamos los “efectos indeseables” clasificados y relacionados de cada una de las mujeres.

·         Después de ésto veamos que encontramos.

 

 

 

 

 

MUJER 1

 

Mujer  2

 

MUJER 3

 

 

“ASI OCURRE Y NO SABE PORQUE OCURRE PERO LE ES MUY DIFICIL MODIFICARLO O ELIMINAR ESTE COMPORTAMIENTO EMOCIONAL “

 

 

EMOCIONES RELACIONADAS  A UNA IDEA “B”

MUJER1  

 

EMOCIONES RELACIONADAS A UNA IDEA “C”

MUJER 1

 

Emociones  Relacionadas  a una idea “B”

Mujer 2

 

Emociones relacionadas a una idea “C”

Mujer 2

 

EMOCIONES RELACIONADAS  A UNA IDEA “B”

MUJER 3

 

EMOCIONES RELACIONADAS A UNA IDEA “C”

MUJER 3

 

NO SEPARA EL HOGAR DEL TRABAJO Y ENFRENTA

CONFLICTOS EN  AMBOS  

 

 

 

ALGUNAS VECES

 SE ASOCIA

 AMOROSA  O PROFESIONALMENTE

PARA SUPLIR SENTIMIENTOS DE INFERIORIDAD

 

 

Algunas veces  quiere transformar el entorno a sus ideas a través de cualquier medio honorable o no honorable

 

Algunas veces

hay falta de lógica,

Ideas precipitadas que cambian con facilidad.

 

 

Algunas veces hay expresiones artísticas contrarias a los modelos sociales que son incomprendidas.

 

Algunas veces la indisciplina ó deseo de libertad sin imposiciones ocasionan sucesos irracionales con las personas que le rodean

 

ALGUNAS VECES

ES DESORGANIZADA O IRRESPONSABLE SIN DARSE CUENTA

 

 

 

FRECUENTEMENTE EL SENTIMIENTO DE NO SER AMADA OCASIONA SUMERGIRSE EN LAS RESPONSABILIDADES PROFESIONALES

 

 

El amor de pareja se deja en desconsideración en relación a los propósitos y acciones elegidas

 

 

Algunas veces hay recuerdos inconscientes del pasado que le generan malentendidos y nerviosismo

 

Algunas veces la gran creatividad e impulso artístico ocasionan un temperamento emocional que busca placeres sensuales

 

Algunas veces la desmedida generosidad y rechazo a quién establezca limitaciones a este impulso ocasiona

Pereza y abuso por parte de los demás

 

 

 

 

ALGUNAS VECES EL IMPULSO COMPETITIVO OCASIONA AGRESIVIDAD EN LAS RELACIONES AMOROSAS Y CON EN EL ENTORNO

 

 

Exigencias elevadas en el matrimonio, en asociaciones y en el trabajo en forma desconsiderada

 

Algunas veces hay Emociones  o fijaciones del pasado que ocasionan depresiones con  preocupación inconsciente

 

 

 

 

Algunas veces

 hay intensa percepción emocional

que preserva memorias y ocasionan malestar

 

 

 

 

ALGUNAS VECES LA INTENSIDAD EMOCIONAL LE SUMERGE PROFUNDAMENTE EN LO EXPERIMENTADO

 

 

Algunas veces hay personalidad agresiva queriendo transformar a los demás en ves de transfórmate a ti misma

 

Algunas veces hay sospechas de los demás y actitud defensiva con la consecuente depresión y ansiedad

 

 

 

 

 

 

INTENSIDAD EMOCIONAL HACIA LO QUE DESEA EMPRENDER LA SITUA FRENTE A FALTA DE RECURSOS PARA LOGRAR SUS PROPOSITOS

 

 

 

Algunas veces hay Fobias del inconsciente y ansiedad con algún complejo de inferioridad que busca ser mártir para suplir carencias

 

 

 

 

 

 

ALGUNAS VECES

EL

IMPULSO POR CAMBIAR

COSAS

OCASIONA  INVOLUCRARSE  EN

EXPERIENCIAS RIESGOSAS

 

 

 

Algunas veces hay cambios de humor inesperados, ansia por escapar del hogar o de lo establecido

 

 

 

 

 

ALGUNAS VECES

EL IMPULSO POR TRANSFORMAR  LAS IDEAS DE LOS DEMÁS OCASIONA SER RIGIDA CON LOS DEMÁS

 

 

 

 

Actitud  fugaz en relación las relaciones amorosas

 

 

 

 NECESIDADES EMOCIONALES PARA LA MUJER 1

 

 NECESIDADES EMOCIONALES PARA LA MUJER 2

 

 NECESIDADES EMOCIONALES PARA LA MUJER 3

 

SU NECESIDAD EMOCIONAL "B"  ES CONOCER COMO:
 
COMBINAR
METAS
DE AMOR PERSONALES

CON EL AMOR POR LA PROFESION

 

SU NECESIDAD EMOCIONAL "C" ES CONOCER:

 

 

LA FUENTE DEL VERDADERO

RECONOCIMIENTO

O VALOR PERSONAL

 

 

SU NECESIDAD EMOCIONAL "B" ES CONOCER :

SABER ELEGIR
PAREJA
CONFIABLE, PARA CRECER
ANTE LOS RETOS DE LA VIDA

 

SU NECESIDAD EMOCIONAL "C" ES CONOCER:
SABER COMO  ELEGIR
 ENTORNO SEGURO PARA SU DESARROLLO

 

SU NECESIDAD EMOCIONAL "B" ES CONOCER :

 

LA FORMA
CORRECTA
DE EXPRESAR  Y HACER ENTENDER SU CREATIVIDAD ARTISTICA

 

NECESIDAD EMOCIONAL "C" ES CONOCER:

 

COMO CONVIVIR Y
RESPETAR AL OTRO

EL COMPARTIR SIN AISLARSE DEL ENTORNO

 

Bien, Encontramos para cada una de las mujeres DOS necesidades de sus respectivos mundos emocionales. Son elementos que NO están en ellas. Carencias emocionales o debilidad en el mundo emocional.  ESA ES LA RAZÓN por lo cual están con bloqueos emocionales y el tren de vida descrito.

¿Crees tú que estas son las necesidades de estas tres mujeres?

Las puedes corregir si consideras que no son lo que necesitan. De hecho se deben corregir y en "comentarios" puedes suguerir que necesidades requiere cada mujer

 

 

Hasta aquí la pregunta es:

 

                ¿Cómo propondrías?

 

1.       Un enunciado para cada una de ellas desde el Tanaj y que logrará corregir mentalmente lo que ocasiona la ausencia de éstas necesidades encontradas.

2.       Un programa de acción cotidiana para “Eliminar de su vida lo que las daña mientras equilibran sus planos de existencia”

3.       ¿Podrías hacer una lista de tus efectos indeseables indicando que es lo que te impide lograr resultados de tus mayores sueños?

 

 

·         La siguiente semana publicaré la parte III y mostraré un esquema que define la causa del problema emocional de cada una de las mujeres.

·         A la vez mostraré como corregir o eliminar ésta causa.

·         En la parte IV haremos un esquema preciso de los pasos de la metodología usada y aprenderemos a utilizarla.

·         Finalmente te invitaremos a que lo hagas con tu propio mundo emocional para ver que encuentras y como sugieres corregirlo.

 

MISIONEROS: PAULISTAS por la lí­nea de ESAU

            En la vida existen muchas cosas que maravillan al mundo, en primera instancia por su ocurrencia solapada u escondida, hipocresía teatral, cosas que hacen posible que se manifieste de forma teatral la real personalidad de personas que de una manera concurrente y apegada a su estilo, buscan satisfacer sus intereses personales.

 

He dado por llamar a estas “ACTORES DEL PROTAGONISMO ESCENICO” dignos de un oscar de la academia por su actuación en los diferentes niveles o áreas de la vida, actores que en su mayor parte de existencia, han encontrando la forma de cegar a sus interlocutores, manifestando una participación escénica, pero no protagónica, llevando sobre si los laureles de otros que de manera silente o apabullados por la autoridad,  realizan un trabajo protagónico, como diríamos en mi tierra, …ganando indulgencias con escapulario ajeno…”

 

En un abrir y cerrar de ojos nos encontraremos sumergidos en la historia de Esau y Jacob, comparando especialmente a Esau con Saulo de Tarso, encontrando similitudes que llaman poderosamente la atención, puntos de coincidencia producto de la manifestación del hombre verdadero que había en cada uno de estos personajes de la historia bíblica y de la historia neotestamentaria.

 

Cuando hacemos un análisis a partir del escenario bíblico nos encontramos con un Esau que vendió su primogenitura por un plato de lentejas, cosa de conocimiento si se quiere general, un hombre que tuvo en poco el despreciar la providencia que le daría su padre Isaac producto de la herencia de la primogenitura, herencia que vendió a su hermano Jacob a quien muchos tildaron de ladrón, de perverso y de engañador, pero que en un estudio a conciencia de lo escrito sobre la negociación entre Esau y Jacob  encontramos que no hubo engaño en la compra de la primogenitura por parte de Jacob, entonces Esau era el engañador pues era quien reclamaba la bendición de Isaac a su primogenitura, una bendición que venia unida a la  primogenitura que  había vendido.

 

            Con todo esto, en esta breve introducción, podemos comparar la vida y lealtad a sus principios de los descendientes de Esau con Pablo y los misioneros actuales. Encontramos a un Esau que mostraba su rudeza y brutalidad, por no decir falta de inteligencia y sabiduría, hombre que a simple vista parecía bueno pero que manifestaba el engaño y la maldad haciéndose pasar por santo, que engañaba al papá pero nunca pudo engañar a su mamá, cosa que muchos desconocen por falta del complemento de la Torá Oral que explica el versículo "…era Esav [Esau] hombre experto en caza…" (Bereshit / Génesis 25:27), que no sólo cazaba animales en el campo sino cazaba personas con sus palabras y tenía convencido al padre de que él era un santo. De que sus acciones eran puras y acordes a la ley, cuando en realidad todo eso era una máscara de palabras complicadas, que venían a ocultar la verdad: la maldad e hipocresía que anidaba en su corazón y se manifestaba en sus acciones ocultas.

 

Cosas estas comunes en nuestros días, cuando vemos grupos misioneros y no solo misioneros, también políticos cuyas estrategias manifiestan los principios y valores retorcidos de la vida de Esau, quien se apreciaba de hacer las cosas bien, pero que lamentablemente, estaba escudándose en una posición viciada y corrompida, en la búsqueda de ganarse el corazón de sus jerarcas y porque no las arcas financieras que se abrían  frente a sus vidas.

Veamos a largo trazo algunas de las estrategias de Esau, y vayamos haciendo memoria de lo que plantean los misioneros seguidores de la “doctrina paulista”, ojo cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia.

 

Primero: Dice la Palabra de Dios que "…era Esav [Esau] hombre experto en caza" (Bereshit / Génesis 25:27), pero analizando un poco estas palabras podemos decir que también era un experto en la caza de las mentes de los hombres que estaban a su alrededor, ejemplo su padre el cual conocía solo lo que Esau le manifestaba, pues su corazón estaba con los hombres del mundo, una cosa era en la casa de habitación y otra muy diferente era el hombre del mundo, aunque en el fondo era lo mismo “cazador”; por ello se “casó” o se “unió” con dos jóvenes Heteas (Judit y Basemat) y luego solo por contrariar a su padre Isaac, se casó con una mujer de Canaan (Mahalat),  como esperando que Dios obrara en él por casarse con una descendiente de Abraham por el lado de Ismael, mostró así  las hilachas, el desgaste moral  y porque no espiritual en su vida., al contaminarse, mezclarse, integrarse, al mundo que lo rodeaba olvidándose de los preceptos divinos inculcados por sus padres.

 

En todo esto encontramos a Pablo, un hombre que como muchos plantea un protagonismo escénico, en base a engaños y falsedades, estrategia muy usada por su predecesor Esau. Se decía judío nacido en Tarso de Cilicia, “…instruido…, estrictamente conforme a la ley de nuestros padres, celoso de Dios…” Hechos 22:3,  mas luego de manera contradictoria estrictamente manifestando su posición de engañador dice en I Corintios 9:20  “… me he hecho a los judíos como judío, a los que están sujetos a la Ley (aunque yo no este sujeto a la Ley) como sujeto a la Ley…”;  como es que está instruido en la Ley de sus padres y luego dice de sí mismo que se ha hecho pasar como judío a los judíos; ¿Era o no era judío? O acaso ¿Era uno de aquellos que se decía ser judío y no lo era? Otra observación lateral que se observa es que se decía era judío conforme a la Ley de nuestros padres, pero  el no se sujetaba a la Ley  pues decía de sí mismo que se presentaba como sujeto a la Ley ante quienes efectivamente estaban sujetos a la Ley, entonces, era un engañador, un fraude.

 

Un protagonismo escénico que lo llevó a integrarse al mundo que lo rodeaba, no sólo a integrarse sino a contaminarse con las costumbres paganas de ese tiempo, se hizo idólatra cambiando al Dios de sus padres por un hombre al cual seguir, se mezcló con su mundo y ya no tenía una identidad propia. ¡Qué triste resultado de ver una mente enferma que ha perdido la memoria y a olvidado las enseñanzas paternas! Podríamos decir que sufrió de alguna enfermedad neurológica en su defensa (lo que explicaría que oyera voces, viera luces, se desmayara, etc.), pero… no tiene excusa…. Lo hizo a sabiendas de lo que estaba haciendo, con pleno conocimiento de sus mentiras, de su maldad, de sus disfraces que usaba para estafar y engañar y perjudicar al mundo con sus infernales enseñanzas.

 

            Entonces encontramos a una sarta de engañadores, misioneros de Jesús, que aprendieron su estrategia,  de Pablo, que fue el primero en decir que hay que hacerse pasar por lo que no se es, para lograr los objetivos religiosos, paganos, de engañar al mundo, para conseguir la “victoria” de desparramar a su Jesús por el mundo… ¿crees que esto es estar “…conforme a las enseñanzas de nuestros padres…”?

 

            Segundo: Cuando decimos se “casó” es porque literalmente contrajo nupcias con dos jóvenes heteas, unión que trajo amargura y dolor a sus padres (Isaac y Rebeca). Con esta unión Esau manifestó su rebeldía, primeramente a los principios elementales de su familia dados por  Dios  y en segundo lugar a los principios enseñados por sus padres.

 

            Esta unión aparte de demostrar su rebeldía manifestó su integración a los paradigmas establecidos por estas sociedades paganas, patrones sociales que desvirtuaban la obediencia al Dios uno y único y lo mezclaba con sociedades idólatras que lo alejaban de su familia y de la bendición de Dios.

 

            Si a estas alturas comparamos la vida de Pablo con la de Esau, encontraríamos ciertamente un gran parecido. Saulo como se le conocía, se aparto de los principios  fundamentales, preceptos dados por Dios, y se sumergió en las conductas y creencias de los paganos. Se apartó de la verdadera enseñanza de sus padres, para seguir las enseñanzas de los hombres, se dejó deslumbrar por lo que estaba de moda y “vendía” bien.

 

            Se dejó llevar de la moda, ese modismo mató el recuerdo de las POCAS enseñanzas que había recibido de sus mayores, y trajo consigo una nueva interpretación paganizada de las Escrituras, tergiversando las enseñanzas de Israel por nuevas ideas, totalmente ajenas a Dios y a la Verdad. Entonces, se observa la no aceptación de los mandamientos dados por Dios, la rebeldía manifestada claramente en desacatar los preceptos divinos, por obedecer los mandamientos de los hombres. Era entonces un matrimonio intelectual con las corrientes doctrinarias paganas, una unión totalmente desaprobada por Dios.

 

            Desobediencia esta que manifiesta el querer protagonizar su propia destrucción, producto o consecuencia de la desobediencia a Dios  y a sus padres. Así mismo quiso escribir con una aparente santidad, manifestando un falso cumplimiento cabal de la Ley pero sin sujetarse a ella, una máscara de santidad ante el pueblo al cual se presentaba o se mostraba con un camuflaje judío bajo el cual se escondía la verdadera identidad social, la Idolatría pagana, pues no era obediente a los preceptos de Dios.

 

            Ciertamente Saulo era un hombre con máscara de santidad,  máscara que buscaba su propio beneficio, al obtener una posición preponderante en medio de la sociedad pagana en la cual se desenvolvía y en medio de la cual se iba integrando al ser maestro o intérprete de una nueva visión de las religiones romanas existentes pero que deseaban hacer ver como cumplimiento de la Palabra de Dios.

 

            Saulo siempre se presento como judío, entraba a la sinagoga en día de reposo, tomó posición y mezcló enseñanzas con falsas doctrinas y engañó a muchos con palabras lisonjeras, manifestación de la elocuencia en el hablar, para poder engañar a los indoctos, a los faltos de conocimiento, a quienes adoctrinó para creer aun sin ver si era cierto o no, lo que comúnmente llamamos “fe ciega” encegueciendo con artimañas y artilugios de error a aquellos que sin conocimiento, se dejaron llevar como nubes por el viento.

 

            Tercero: Esau manifiesta su desorden moral buscando la compensación, había vendido la primogenitura, más él  todavía quería la bendición de su padre Isaac, bendicion que es la herencia material, el beneficio financiero, ese era supuestamente el propósito de buscar Esau la bendicion de parte de Isaac, era entonces la transmisión de la herencia o propiedad familiar, y porque no decirlo las aspiraciones y las promesas espirituales del padre al hijo mayor a su primogénito.

 

            En otras palabras el momento culminante de la transmisión del legado material y espiritual de una generación a otra, cosa que desestimó Esau cuando vendió la primogenitura y ahora anhelaba retomar, robando el derecho a primogenitura que había vendido a su hermano Jacob. Acá vemos pues a un hombre sin escrúpulos que decididamente buscaba su propio beneficio. (Algunos presentan el engaño de Jacob a Isaac para obtener la herencia como un acto egoísta de su parte, cosa totalmente errónea pues la primogenitura era por derecho suya. El egoísta en todo caso era Esau quien quiso robar la herencia de la primogenitura que había vendido voluntariamente).

 

            Cuando comparamos a Saulo con Esau, vemos un hombre egocéntrico, sin principios que veía el aparecimiento de una nueva forma religiosa donde el podía tomar una posición de privilegio, estaba pues en el momento de la oportunidad y qué mejor situación como para hacer lo que hizo Esau, buscar una compensación, dentro de los judíos solo era un supuesto zelote, un perseguidor de sectas falsas, pero si lograba entrar como así hizo, en medio de los paganos, pues así como no le costaba hacerse “…a los judíos como judío…” mucho menos le costaría hacerse pasar por pagano a  los paganos o gentil a los gentiles.

 

            Vemos pues una sarta de mentiras unidas en un mar de cruentas rebeldías hacia el Señor nuestro Dios, Hombres que siempre fueron presentados por los mercaderes de la vida como personas santas y honestas buscando vender un producto nuevo para el beneplácito de sus plataformas financieras, personas que no eran mas que artistas dignos de un Óscar de la Academia, hipócritas que  disfrazados de seguidores y cumplidores de la Torá, engañaron y vilipendiaron el mensaje santo de la Torá, hombres que pervirtieron los mandamientos de Dios, apartaron sus oídos de la bendita Palabra, hombres que dejaron la Luz de la Tora y se perdieron en las sombras de la confusión. Artistas que se presentaron como santos y no eran más que santurrones con caras lavadas por la incesante búsqueda de una plataforma financiera que supliera sus necesidades.

 

            ¿Son esos los pastores o supuestos rabinos “mesiánicos” que todavía permites que te manipulen y estafen?

 

Texto escrito con la colaboración y enseñanzas del Moré Yehuda Ribco

Shavuot y noájidas

¡Shalom!

En la festividad de Shavuot recordamos la Revelación del Eterno al Pueblo de Israel, en el monte Sinaí a los 50 días de haber salido de Egipto. En aquel 6 de Siván del 2448 (año de la Creación; 1312 AEC), en un imborrable evento el Eterno entregó a la nación judía la Torá:

  • Los tres primeros tomos del Pentateuco (Torá Escrita), que serían completados al final de la travesía de 40 años por el desierto.

  • La Torá Oral, que es la inseparable compañera de la Torá Escrita, pues alumbra los pasajes poco claros, explaya las normas de conducta, dota de dinamismo a la letra inmodificable de la Torá.

  • Las Tablas de la Alianza las cuales llevaban grabadas el Decálogo (erróneamente conocido como «Diez Mandamientos»).

Desde un punto de vista literal así como metafórico el día de Shavuot es considerado como el de las nupcias de Dios con Israel, siendo la Torá el contrato nupcial inquebrantable entre ambos1. La novia, Israel, aceptó la propuesta matrimonial y desde entonces (y por siempre) los cónyuges se mantienen enlazados (a pesar de las desavenencias que puedan surgir del contacto cotidiano).

El profeta Isaías es muy explícito al respecto:

«Porque tu marido es tu Hacedor; el Eterno de los Ejércitos es su nombre. Tu Redentor, el Santo de Israel, será llamado Elokim de toda la tierra.» (Ieshaiá / Isaías 54:5)2

El profeta Ezequiel incluso es más detallado:

«Pasé junto a ti y te miré, y he aquí que estabas en tu tiempo de amar. Entonces extendí sobre ti Mis alas y cubrí tu desnudez. Te hice juramento y entré en pacto contigo; y fuiste mía, dice el Señor Elokim.» (Iejezkel / Ezequiel 16:8)

Matrimonio perpetuo, sin divorcios ni «nuevos pactos», que se fortalecerá en la Era Mesiánica:

«Te desposaré conMigo para siempre; te desposaré conMigo en justicia y derecho, en lealtad y compasión. Yo te desposaré conMigo en fidelidad, y conocerás al Eterno.» (Hoshea / Oseas 2:21-22)

Al aprender acerca de este aspecto «conyugal» en la relación entre Dios (el Novio) y el Pueblo judío (la Novia), no es de extrañar que la Torá no estableciera una semana de festejos, como en las otras fiestas de peregrinación (Pesaj y Sucot), sino tan solo un día3 de íntimo regocijo. No hay actos solemnes que efectuar, a diferencia de como se ofrendaba antaño públicamente el sacrificio de Pesaj en la fiesta que lleva su nombre; ni aparatosas chozas que habitar, tal como se sigue haciendo para Sucot. Es un día de dicha y pausa para el espíritu, sin ostentaciones públicas. A lo sumo, en épocas del Templo, cada granjero llevaba las primicias de sus frutos en modestos canastos de mimbre4, tal como la pareja de novios se debe presentar en toda su pureza en el día de sus esponsales, para ofrecerse mutuamente sus «primicias».

Así planteadas las cosas, ¿qué pueden hacer los noájidas en Shavuot? No es una celebración que les corresponda por derecho, puesto que la Torá ha sido dada a Israel, y como vemos es una celebración íntima, «de la pareja» en su aniversario de bodas.

Por tanto, al igual que con la mayoría de las festividades y tiempos consagrados, los noájidas NO DEBEN apropiarse de esta festividad, ni celebrarla a la manera en que los judíos lo hacen.

Sin embargo, tienen abierta la puerta para marcarlo como un «día especial» en su calendario anual, puesto que:

  • se regocijan por la alegría de sus hermanos judíos;

  • la Revelación de Dios en Sinaí y la entrega de la Torá al pueblo judíos sirve como punto de referencia para aceptar la guía de los maestros judíos apegados a la Tradición5; y

  • junto con la entrega de la Torá a Israel, el Eterno reconfirmó como válido y perenne el Pacto que había establecido con las otras naciones de la tierra, es decir, con los noájidas. Por tanto, en Shavuot los noájidas NO celebran la entrega de SUS leyes, pero sí la confirmación de su pacto noájico con Dios6.

¿Cómo pueden hacer de este día uno «especial», sin inventar una nueva religión, cosa que está severamente prohibido por Dios?

Te daré algunas ideas, que quizás tú puedas adoptar y compartir con tus allegados y comunidad noájica:

  • Cena festiva con familia y amigos. Que el motivo de la misma sea la alegría de reconocer que el Creador no ha dejado el mundo librado al azar, sino que constantemente vela por nosotros, y por esto ha establecido buenas leyes que debemos cumplir.

  • Reunión especial de estudios de las partes permitidas de Torá para noájidas. Dedica con esmero tiempo para el estudio de los mandamientos que debes cumplir como noájidas, de modo tal de hacer del estudio algo más que un momento de reflexión «filosófica».

  • Relee el relato de la Revelación en Sinaí, Shemot / Éxodo del capítulo 18 al 20, y guíate con enseñanzas de maestros verdaderamente judíos, para aprender sin caer en error.

  • Por supuesto, hazte un momento para orar al Eterno, y entre las líneas de tu conversación con Él agradéceLe por Su bondad de haber entregado la Torá a Israel y el camino noájida para ti.

  • Por supuesto, ayuda a tu prójimo judío a que celebre esta festividad tal como él debe hacerlo. Si el judío es tu empleado, dale franco este día y proponle que se conecte con alguna comunidad judía para aprender (si no sabe) lo que debe hacer. Si el judío es tu vecino, salúdalo por la festividad de Shavuot, y pregúntale si le puedes ayudar en alguna cosa. Si tu vecino es judío y poco conocedor de sus tradiciones, pídele que visite serjudio.com, o cualquier otro sitio kosher de judaísmo, ANTES de Shavuot. En fin, sé creativo para darle una mano a tu hermano judío.

  • Dona dinero para obras de beneficencia, centros de estudio de judaísmo, fundaciones que promueven el noajismo. Recuerda que el corazón generoso es especialmente cuidado por el Padre. Y ten presente que de la manera como compartes de lo que has recibido como bendición, es como del Cielo comparten contigo bendiciones.

Un gran abrazo a todos mis hermanos, noájidas y judíos, que a pesar de las dificultades aman intensamente a Dios y desean servirLo y por tanto aman a su prójimo y le ayudan.

Y un afectuoso saludo a ti, hermana/o y amiga/o, que todavía estás bajo el liderazgo equivocado pero que sabes que pronto te liberarás y nos acompañarás en el Camino del Bien y de Luz.

Shalom y bendiciones, cuídate y goza de lo permitido

Moré Yehuda Ribco


«La persona generosa será prosperada, y el que sacia a otros también será saciado.» (Mishlei / Proverbios 11:25) Haga clic aquí para saber cómo colaborar con nosotros… GRACIAS!

Notas:

1- Así lo ve el Midrash, la Torá Oral que Dios reveló a Moshé, y que llegó hasta nuestros días a través de la transmisión oral. y la obra de los Sabios de Israel. El Midrash nos enseña incluso que muchos de los elementos de la boda judía son tomados del encuentro que se produjo en el monte Sinaí hace tantos cientos de años. El palio nupcial en recuerdo del monte que estaba por encima del Pueblo; las velas, en recuerdo a los relámpagos que surcaban el cielo; la quebradura de un vaso, como las Tablas de la Alianza rotas al final de la ceremonia nupcial; entre otros elementos (ver TB Brajot 47a; Pirkei deRabbí Eliezer 41 y 45; Jatam Sofer en Iturei Torá; al Tashbetz Katán 464 y 465; Rashi a Shemot 19:17).

Es de hacer notar que en muchas comunidades sefarditas antes de la lectura de la Torá, con el heijal abierto, se lee una ketubá -contrato nupcial- preparado por el R. Iosef Najara, que celebra el matrimonio entre el Eterno e Israel.

2- En las Escrituras, diez ocasiones se menciona el matrimonio de Dios con Israel. Es en consonancia con esta identidad «femenina» de Israel en esta festividad que no hay héroes en Shavuot, ni personajes masculinos a recordar; sino una mujer, Rut la moabita, que habiendo nacido gentil decidió con intensa voluntad convertirse al judaísmo legalmente. Además, Rut es recordada también por el matrimonio que contrajo luego de su conversión; unión que a la postre traería al mundo la semilla de la redención final, pues de sus descendencia nació el rey David y de allí vendrá el futuro monarca de Israel: el Mashiaj.

3- Por cuestiones históricas que no vienen al caso explicar ahora, en la diáspora se celebra Shavuot durante dos días consecutivos, el 6 y 7 de Siván.

4- Ver Devarim / Deuteronomio 26:1-16.

5- «Entonces Moshé [Moisés] subió para encontrarse con Elokim, y el Eterno lo llamó desde el monte, diciendo: -Así dirás a la casa de Iaacov [Jacob] y anunciarás a los Hijos de Israel: Vosotros habéis visto lo que he hecho a los egipcios, y cómo os he levantado a vosotros sobre alas de águilas y os he traído a Mí. Ahora pues, si de veras escucháis Mi voz y guardáis Mi pacto, seréis para Mí un pueblo especial entre todos los pueblos. Porque Mía es toda la tierra, y vosotros Me seréis un reino de sacerdotes y una nación santa.’ Éstas son las palabras que dirás a los Hijos de Israel.» (Shemot / Éxodo 19:3-6)

El ser un pueblo de sacerdotes, significa estar encargados de hacer llegar las cosas del Eterno a los que nos son parte del pueblo de sacerdotes, es decir, a los gentiles.

6- «Moshé, nuestro maestro, entregó la Torá exclusivamente a Israel, por orden del Eterno… al gentil que no se quiere convertir al judaísmo no se lo obliga a aceptar los mandamientos de la Torá ni a estudiarla; no obstante, Moshé reconfirmó por orden del Eterno que los gentiles deben adoptar para sí los preceptos que Dios le había ordenado a Noaj y sus descendientes… el gentil debe cumplir con los preceptos para las naciones porque es lo que ha ordenado Dios en Su Torá y lo ha declarado por intermedio de Moshé…» (Maimónides, Hiljot Melajim 8:10, 11)

Texto originalmente publicado en serjudio.com